i
II
iliilll;
= ífibros -^^nticjuoñ =
VtItTi 10 ÍSorCflonn:Tcl".'ri7l)M']
PUT^CIIASED rOR TIIE
L/\/\'M!^I.M Oí IXmOSTO L/BRARY
PHOM THE
CANADÁ COC/iVCÍL SPECIAL GRANT
I OR
MEDIEVAL STUOIES
MISCELÁNEA HISTÓRICA CATALANA
F. Carreras y Candi
>
MISCELÁNEA HISTÓRICA
CATALANA
SERIE I
BARCELONA
IMPRENTA DE LA CASA PROVINCIAL DE CARIDAD
r^alle de Monteaiegre. uúm. 6
1905
. J'lM'M ^ ^ :^'' .^. -^'^ ^'' '^ P; ^,' ^'. ^ ^^^ ■'^:' '^^ "^ :^'^S^S^-ftr S
LA INSTITUCIÓN PEL CASTLÁ
EN CATALUÑA
"MseJ^
El régimen feudal con que se organizó, en la Edad Media, política
y administrativamente el Principado de Cataluña, desde que tuvo ge-
nuino modo de ser, formaba una cadena de protección y mutua ayuda,
que, comenzando en el Soberano, acababa en el último remensa.
Él castillo ó fortaleza, lo entregaba el Monarca cá un caudillo, quien,
por tal concepto tenía que prestarle homenaje, y quedaba sujeto á su
autoridad.
Pero como un mismo individuo tuvo simultáneamente distintos
castillos, surgió la necesidad de encomendar su dirección, custodia y
gobierno, á otras personas sujetas á su potestad y que le representa-
ran durante su ausencia. De aquí la institución del castlá, catlá ó car-
ia, que en Castilla se llama castellano, en Bigorre castelaas y en Fran-
cia chatelain, quien á su vez prestaba homenaje de fidelidad y obecUen-
cia al señor. También se designa á los castlanes con los nombres de
feudatarios ó vasallos.
Durante los siglos xi y xii hallamos igualmente aplicado á estos
feudatarios el nombre de militares (militihus), fórmula genérica que
demuestra el carácter guerrero délos gobernantes de castillos. En 1134,
donó, el Conde de Barcelona, á la milicia del Temple, el castillo de
Barbera, «in nostra marchia contra sarracenos, cum müitibus qui ip-
sum Kastrum pro me habent» (1).
La aparición del castlá es casi simultánea á la reconquista de este
territorio hispano. Si durante el siglo ix se escapa por completo á nues-
tra investigación, encontramos la huella de su existencia en el apelli-
(1) Colección de documetitos del archivo general de la Corona de Aragótt, t. IV, p. 18.
1901
2 F. CARRERAS Y CANDI
do Castellanus, que llevaba un abad de Arles en 876 (1). Menciónase
la caslania en el rescripto de Carlos el Simple en favor de la iglesia de
Gerona, dado en 922, al confirmar la posesión, entre otros alodios y
propiedades, de la villa «sancta Marie que dicitur Fontanedos cum cas-
lania» i2\
La voluntad del señor en el nombramiento de castellanos no tenía
cortapisas por la ley ni por la costumbre. En el siglo xi se ve, en oca-
siones, que los Condes Soberanos solían asegurarse de la fidelidad de
los casüanes, comprometiendo al señor á cuidar de exigirla debida-
mente, al confiarles la fortaleza. En 1066, el vizconde de Pallars Ger-
bcrt aseguraba á Ramón, conde de Pallars, que si fallecía Bernat Ba-
rón, castlá de Tcnriu, la persona á quien encomendase, Gerbert, la
castlania, la regirá con la obligación en que estaba dicho Barón («Et
si de bernad barón minus venerit ipso castlan á cui gerbert o .dará si
estie in ipsa pennora quo modo bernard barón faccie») (Registro 1, fo-
lio 43.) En la prestación de fidelidad y homenaje del castillo de San
Esteve de Castell-follit, recibido por Guifré, conde de Cerdafia, (sin fe-
cha), de Isarn, señor de aquél, consta el compromiso de no poner caste-
llano ó castellana, sin previamente exigirles juramento de fidelidad al
Conde con las manos puestas sobre el altar sacrosanto: («Ego in supras-
criptum castellum castellanum uel castellanos castellana uel castella-
nas ne metrci nc naurei che iurar no lur fa^a manibus super altare sa-
cratum illorum uidente et audiente si recebre o volen ante quam in
suprascriptum castellum los meta che fidels len sia sine fraude etmalo
ingenio et sine illorum decepcione et che nolli uetet in suprascriptum
castellum nec in ipsa omnes fortitudines uel condirecciones que ibi
sunt aut erunt introitum et suam stacionem et suum exitum nec ad
i líos suprascriptos nec ad illorum omnes homines qui ibi cum eis ue-
neriiit dum cum eis inquesiorunt»), (Registro 1, folio 68.)
Podía darse el caso de que el Monarca, al entregar el castillo en
feudo A un caballero, le interesara, por circunstancias especiales, que
{'\ mismo ó sus hijos lo custodiasen personalmente. Entonces se estipu-
laba expresamente tal circunstancia, según hizo Ramón Berenguer IV
al entrogar el castillo de Castellet á Bernat Ug, disponiendo no lo en-
comendaría á otra persona, sino fuese á alguno de sus hijos (3).
El existía venía á. ser un encargado ó lugarteniente del señor en
el castillo. También el baile era representante del señor.- Uno y otro
cargo, que, andando los tiempos, tuvieron ocasión de definirse y dife-
rmciarso, en los siglos xi y xii aparecen confusos por la similitud de
atribuciones. Brutails lo hace observar al exponer cuan difícil resulta,
(1) Murca IlispáDica, apéndice, rloc. xxxv.
(2) Ibidem, doc. LXix.
(8) Colección de dociimentoi inéditos del archivo general de la Corona de Aragón, t. IV,
p4g. i»6.
LA IXSTITUCIÓX DEL CASTLÁ FX CATALUÑA 3
en algunos casos, distinguir las líneas divisorias entre feudo y castc-
llanía, entre feudo y veguería y entre feudo y bailía, así como entre
castellanía y feudo militar (1). Los ejemplos que aduce Brutails y
nuestras propias observaciones nos permiten señalar el siglo xiv como
la época en que cada cargo tuvo determinada su esfera de acción.
La confusión entre bailía y castellanía en Cataluña, es perenne,
durante los siglos xi y xii, debido á que hajulia, como hace observar
Balari y Jovany (2) significaba administración de bienes, aplicándose
igualmente á la de los castillos (3), la que entraba de lleno en las facul-
tades ó atribuciones de sus castellanos. Pocos ejemplos pueden darse
de ser, los derechos de un baile, más sinónimos á los del castellano, que
el que presenta Arnau de Torre, en su controversia con el Obispo de
Elna, sobre el ejercicio de la bailía de Elna. Los emolumentos que se
disputaban y se convinieron en 1134, venían á ser percepciones feu-
dales (4).
Hace observar Balari, que estos derechos del baile se llamaron tam-
bién, en el siglo xii, redecimos ó hajulivos, y consistían en la cuarta
parte de la décima que cobraba el señor. En la propia época fué usual
en Cataluña el verbo ballescar, como sinónimo de ejercer de baile, se-
gún lo hallamos en el convenio entre Eamón y Valencia, condes de
Pallars, con Bertrán, acerca los castillos de Miramar y Castell-vetre,
en el afio 1071 (5).
Tampoco es siempre posible discernir, en los documentos de los si-
glos XI y XII, si se hace entrega de la señoría de un castillo ó sólo de
su castellanía ó capitanía, siendo fácil en este punto que dos autores
interpreten de distinta manera un mismo documento. La donación he-
cha, en 1192, del castillo de Mont-ral, situado en el Puig-Baledós, á
Pons de Lillet, que Alart supone como refiriéndose á su castellanía ó
capitanía (6), es nuestra creencia que lo era de la señoría.
(1) Etude sur la condition dea populations rurales du Roussillon au Moyen age, Paría, 1891,
pág. 221.
(2) Orígenes históricos de Cataluña, pág. 520.
(3) Año 1078 «Heo est conueniencia que feoifc remon arnall et remon mir qne dona-
uemnt ad Eemniido comité in ipso castro de illo castelleto intrare et exire et guerre-
gare et quam güera et pace que faciat de ipso castro contra totos homines uel feminas
et quod siat ipso castro vel suis terminis in bajulia de illo comité reimundo.» (Regis-
tro 1, f. 40.)
En otro convenio sin fecha, entre los condes de Pallars Eamón y Valencia y Girbert
Bertrán sobre el castillo de Eramont ^hOy Aramunt) se dice: «Et conuenit reimundus
comes ad Girbertus bertran et ad mater eius que fiat suo sénior directo et teneat illos
in baiolia cnm ipso castro de eramon.> (K. 1, f. 48.)
(4) Alart, PriviUges el titres, etc , pág. 38.
(5) «Sicut mittet iamdicto bertran in baglia ad iam suprascripto Remon et ad iam-
dicta ualenza uel ad filios suos et ad sua posterita per íide sine enganno contra cune-
tos homines uel feminas. Et quo modo predicto Remon et iamdicta ualenza uel filios
suos et sua posterita baglescant ista honore iamdicta per fide sine enganno contra cune-
tos homines uel feminas.» CR li f- 38.)
(6) Priviléges et titres municipaux de Roussillon et de Cerdagne, Perpiñán, 1878, pág. 74.
4 F. CARRERAS Y CANDI
La causa primordial de ello fué, que durante el siglo xi no había
fijeza de términos, la cual empieza á vislumbrarse á fines del siglo xii,
para quedar establecida durante el siglo xiii. Sólo interesaba dejar
deslindado el carácter de subordinación de los que tenían el cuidado
inmediato de los castillos. Los señoríos y sus subdivisiones con dere-
chos más ó menos determinados según los casos, vino más tarde.
Ejemplo comprobatorio de la diversidad de castellanos, de sus rela-
ciones con el señor y de la forma como aseguraban su cooperación per-
sonal al entrar á regir un feudo, tenemos en los establecimientos he-
chos en el castillo de Estopafiá ó Estopiñán, al ser conquistado de los
sarracenos y repoblado su término (1). Gobernaba el condado de Bar-
celona Ramón Berenguer I, quien, ensanchando sus conquistas por la
frontera del río Noguera Eibagorzana se apoderó de Purroy (Puy-roy,
inieyo-royo ó podio rúbeo, pero no Puig-roig, como traduce equivocada-
mente Antonio de BofaruU (2) y quizás algunos otros historiadores) y
territorios vecinos, con anterioridad al año 1058, ayudado por el Conde
de Urgell. De momento los castillos conquistados fueron de ambos
condes, repartiéndose sus derechos, pero fué tan efímera esta división,
según refiere Antonio de Bofarull, que, en el año 1063, por lo que se
relaciona á Purroy y á Estopiñán, eran pertenencia exclusiva del Con-
de de Barcelona.
En la expedición que Ramón Berenguer I realizó á esta parte de la
Ribíigorza, al conciuistarla, seguía á la hueste su esposa Almodis. El
in'opio Conde, á III de las kalendas de Febrero del año 1063, al donar
á ésta los castillos de Estopiñán, Purroy y Cañellas (los dos primeros
en territorio que hoy se llama aragonés y el último en el catalán), ma-
nifestó hal)erle pcrvenido «per adquisione quam tecuní predicta comi-
tissa fcci largiente diuina clemencia ex j^artibus yspaniarum.» Aque-
llos lugares eran, en 1063, frontera de moros, marca de España según
lenguaje de la época.
Constituida, Almodis, en señora del castillo de Estopiñán, tuvo ne-
cesidad de encargarlo á otra persona. Esta fué, en primer término, un
caballero llamado Girbert Miró, como lo explica la escritura de reco-
nociníiento del vasallaje firmado por Girbert, dando cuenta de las
condiciones bajólas cuales Ramón Berenguer y Almodis le encomen-
daban (comendant) aquel castillo, en las nonas de Febrero del año
10G4. El dncumonto no precisa que los condes se retengan el dominio:
cllu s.í deduce del contexto, no sólo por los derechos transferidos á la
iglesia del término de Estopiñán, de cuyo prpsbiteriado se reservan el
Existo nna copia de este interesante docnmento, además del original de que se sirvió
Alart,, en ol HfRistro 1, folio 6!) del Archivo de la Corona de Aragón.
(1 V. HHo ol HegÍBtro 1, lolios 15 y i:tí del Archivo general de la Corona de Aragón.
TudoH los reKÍstros que se citan si no se hace constar lo contrario, pertenecen al
propio archivo.
(2) lütloria critira de CalatuDa, t. II, j Ag. 324.
LA. INSTITUCIÓN' DEL CASTLÁ EN CATALUÑA 5
dominio, sí que también por la explícita manifestación de Girbert, de-
clarándose hombre sólido de aquellos («propter lioc sit solidns illorum
sicut homo debet ese de suo mcliori seniore.») La autorización para
poner otros castellanos según le convenga, con anuencia del señor,
fué atribución peculiar á la castlania y á la señoría.
Señálanse los emolumentos de Girbert, asignándole, en feudo de
los condes, la mitad de los diezmos, de las parias ó tributos y del tol-
neo ó teloneo ó derecho de fronteras ó aduanas, deducida una quinta
parte para la iglesia.
De las prescripciones impuestas á los castellanos de Estopiñán, que
insertamos por nota (1), sólo nos fijaremos en las más sobresalientes.
No se determina qué número de castellanos podrá poner en el término;
11) «Et ut mittat castellftnum aut castellanos in iam dicto castro per totas vices
quos ibi miserit eos ad consilium et voluntatem eorum. Et castellaniis aut castellani
quos iam dictus Girbertus miserlb in predicto castro teneat ibi assidue et óptimos ca-
ballarios cum obtimis caballis et alsbergis et elmis per prediotum mobie quod iam
dictus Girbertus aprehendit per unum quemque annum de predictis comité et Comi-
tissa excepto iamdioto Girberto et sua mesnada. Et conuenit predictns Girbertus ad
iam dictos comitem et comitissum ut ipse castellanus aut castellani siue castellane
qui tenuermt ipsum castellum per iam dictum Girbertum sint homines de iamdictis
comité et comitissa et faciant eis fidelitatem et noluntatem eorum et ut donent eis
potestatem de predicto castro sine illorum engan per quantas uices iamdicti Comes
et comitissa aut unus ex illis requisierit potestatem ad eos de predicto castro per se
ipsos aut par nuncium uel nuncios eorum. ítem conuenit predietus Girbertus ad iam
dictos Comitem et comitissam ut per supra dictum feuum quod modo donant ei te-
neat et habeat cotidie tantos obtimos caballarios in predicto castro bene armatos et
incaualgatos quantos predicti comes et comitissa estimauerunt quod ipse potuerit ibi
assidue tenere et habere. Et secundum quot predictum feuum se meliorauerlt per
síngalos annos ad opus iamdicti Girberti et de suis iam dictus Girbertus ita acrescat
numerum de caballariis qui stent assidue in predicto castro iuxta extimationem et
laudamentum iamdicti Comitis et comitisse Et iamdictus Girbertus conuenit ad pre-
dictos Comitem et comitissam ut ipse et omnes sui casteilani ciim predictis caballa-
riis faciant ad eos aut ad unum ex ipsis hostes et caualgadas et curtes et plácitos
per omnes uices quas comes et comitissa mandauerit faceré eis. Et predietus Girber-
tus faciat guerram cum suis castellanis et cum predictis caballariis ad omnes bomi-
nes quibns Comes aut comitissa mandauerint faceré ei et teneant pacem ad eos homi-
nes quibus ipsi uoluerint. Ec dum comes aut comitissa fecerint aut habuerint gue-
rram de yspania iam dictas Girbertus stet in predicto castro cum sua mesnada. ítem
conuenit predietus Girbertns ad iam dictos comitem et comitissam ut ab hodierno
die et deincebs non faciant uUum seniorem sine noluntate et consilio eorum. Et desfi-
det ipsos quos modo habot si ipsi uoluerint postea non retineat eos sine uoluntate
eorum. Et si non tenet et non attendet iam dictus Girbertus ad predictos comitem et
comitissam totas suprascriptas connenientias sine illorum engan et non facit ad eos
directum infra XL dies quod ipsi mandauerint ad eumper se ipsos aut per suos nun-
cios nisi quantum absoluerint ad eum per gratum sine foroa coram tribus aut quatuor
bonis hominibns qui faciant ipsum absoluimentum cum eis iam dictum castrum cum
predictis ómnibus reurrtatar in potestatem predicti Comitis et comitisse ad facien-
dum quod uoluerint sine ira et marrimento de iamdicto Girberto et de suis. Et iam
dicti Comes et comitissa donant ad predictum Girbertum ipsum mansum de armadre et
ipsam de pedre belid et ipsum de enneg al castel et medieta*,em de decimam qnam iam
dicti comes et comitissa ibi habent retentam et medietatem de pariis quam modo ha-
bent ibi habent retentiim. Et iam dicti comes et comitissa donant ad iamdictum Gir-
bertum istos supradictos III mansos et predictam medietatem de decima et de paria
et detolneoet quartam partem de sale ut iamdictus Girbertus teneat hoc totum ad-
domininm. Si non Reuertantur predicta omnia in potestate iam dicti Comitis et comi-
5 F. CARRERAS Y CANDI
siempre que á ellos alude, se habla en plural; no se menciona para
nada al sots-castlá, quien en realidad venía á ser un segundo, tercero
ó cuarto castellano; y uno de los apartados indica la posibilidad de que
hubiera mujeres al frente de los castillos al decir «castellanus aut cas-
tellani siue castellane.» CasteUanas existieron en nuestro Principado,
como Erraessen de 9a Guardia, que, en 1201, regia el castillo de
Albí i;i). Empero estas mujeres eran, las más de las veces, meramente
titulares del cargo.
Como obligación defensiva notaremos la que se impuso Girbert, de
guaiTiecer su castillo, con tantos caballeros bien armados y con los ca-
ballos y arreos, cuantos Ramón Berenguer y Almodis estimasen que
podía tener, según el crecimiento que cada año experimentase aquel
término. Cuyos caballeros, con los castellanos y Girbert, debían seguir
á los Condes de Barcelona en siis huestes y cavalcadas, cuando fuesen
requeridos á ello, exceptuando el caso de que se hiciera guerra con Es-
paña, esto es, con los sarracenos. Entonces Girbert debía permanecer
en Estopiñán con su mesnada, á fin de subvenir al peligro en que es-
taría dicha plaza fronteriza.
Seguidamente de la anterior escritura, trae el códice (feudorum
forme maioris), los homenajes por los castellanos, prestados á Ramón
Berenguer y á Almodis, cabe suponer en aquella misma ocasión. En el
primero de ellos, Berenguer Isarn se compromete á entregarles la po-
testad del castillo, tantas veces cuantas sea requerido á ello y después
de la muerte de aquéllos, á darla al hijo á quien le fuera legado Esto-
piñán (2). El otro castlá, Arnal Barón, que seguiría en orden de feudo,
al anterior, se compromete en iguales términos, pero con la fórmula
condicional, de si llegara á poseer el castillo (3). Un tercer caballero
tisse sino marrimento de predicto Girberto. Girbert miro. Haotum est hoc nonas fe-
broarii Anno IIII regni philippi Regís.»
(I, «Quod ego ermesen de zagardia castellana && zalbi qui condam fai uxor ferrarii
de litndarB per me et per omnesmeos dif finio domino deo et monasterio popnleti in mann
et posse P. de concabela einsdem monasterii abbatis» un alodio situado <ex alia partí
riui de seth in termino rfe serboles » Aprueba la donación el marido de la donadora,
en esta forma: <P. inanrel mariti ermessen >
Cartulario de l'oblet, folio 6ü, doc. núm. 319. (Arehivo Histórico Nacional de Madrid )
(2) JUKAUKNTO DK FIDKLIDAD Y HOMENAJE DEL PRIMER CASTLÁ DE ESTOPlÑÁN, Á LOS
CONDES UK Bauckluna, Ramón y Almodís.— «Ivro ego berenguer ysarn.uobis domno
Uuimando comiti et domne Almodí comitisse ut ab hac hora et deincebs fídelis ero
uobis (le uestra aita et de ómnibus monbris que se tenent in corporibus uestris et de
toto illo honore quem hodie babetis et in antea adquisieritia deo dante sine fraude et
malo ingenio et uUa uestra deceptione. Et dedero uo"^is potestatem de ipso castro Sto-
panian sino engan per quantas uices U09 ambo aut unus ex uobia requisieritis ipsam
poteatatem mihi per uos ipaos u.it per uestros nuncios. Et post mortem uestram ai
uiuuH fuero et teneo iam dictuní > ustrum simili rrodo dedero potestatem i)li neatro
filio quem uos ambo aut unas ex uobis dimiserítia predictum castrum testamento uel
uerbia per deum et hec sancta.»
(8) .ItrHAMKNTO DK FIDELIDAD Y HOMENAJE DEL SEGDNDO CASTLA DE ESTOPIÑÁN Á Ba-
iiuN Bkkemilkk V A Almodis.— «Ivro ego Arnall barón uobis domno Raimundo comiti
et domne Almodi comitisse ut ab bao hora et deincebs fidelis ero uobis de uestra uíta
LA INSTITUCIÓN DEL CASTLÁ EN CATALUÑA 7
llamado Ugo Arnal, manifiesta, después del anterior, que les entrega-
rá el castillo de Estopiñán cuantas veces se lo pidan, «et post mortem
vestram si uiuus fuero et teneo iam dictum castruui siinili modo dedero
potestatem lili vcstro filio.»
Con posterioridad á la donación de Girbert Miró, en las nonas de
Agosto del año 1067, Ramón Berenguer y Almodis dan, (donatores
sumus) á ]\Iir Isarn y á su esposa Girberga, una cuadra ó territorio
sito en la orilla del Noguera Ribagorzana, dentro del término de Es-
topiñán, llamado 7a roca de Miravet, de cuyo acto tampoco puede esta-
blecerse en absoluto si se trata de su castellanía ó de su señoría. De
Mirabet se retenían la mitad del diezmo para el castillo de Estopiñán,
obligando á Mir Tsarn á construir una torre en la roca, sin poderla ven-
der á otra persona que al Conde de Barcelona y á no reconocer otro
señor que á él (1).
Aquí será del caso consignar haber observado, que la mayoría
de las escrituras de los siglos xii y xiii, en las que el Soberano entrega
la señoría de un castillo, suelen usar de la palabra dono y los docu-
mentos en los que sólo encomendaba su castellanía, empleaban la de
comendo. En el año 1139, Ramón Berenguer IV entregaba, á Reverter,
heredero de la familia vizcondal de Barcelona, este vizcondado, di-
ciendo dono tibi... vicecomitatiim Barchi)ione, la plenitud de cuyo se-
ñorío, siempre les había pertenecido. En la propia escritura y bajo la
fórmula de comendo iterum tibí, le confiaba «castrum de Apiera» «cas-
trum quod dicitur Castel Oduli» y «castrum quod dicitur Cabrera,» que
es donde actualmente se halla la población de Abrera (2j. Si bien, de
los dos anteriores castillos, no aparece taxativamente marcado que el
Soberano entregara la castlania, en cambio sí lo resulta del tercero,
en donde la voluntad del conde de Barcelona halló algunas cortapisas.
et de ómnibus membris que se tenent in corporibus uestris et de toto illo honore quem
hodie habetis et in antea adquisieritis deo dante sine fraude et malo ingenio et ulla
uestra deceptione. Et si babeo potestatem de ipso castro Stopaniam dedero eam uobis
sine engan per quantas uioes nos ambo aut nnus ex uobis requisieritis ipsam potesta-
tem mihi per nos ipsos aut per uestros nuncios et fideliter misero ipsum auer quod co-
mandaueritis michi per ipsum edificium de predicto castro Stopaniam me sciente in
ipsa operd. Et post mortem uestram si uiuus fuero et babeo potestatem de predicto
castro dedero ipsam potestatem illí uestro filio quem nos nmbo aut unus ex uobis di-
miseritis predictum castrum testamento uel uerbis: per deum et hec sancta >
dj «Quantum iste affrontaciones inoludunt et isti termini ambiunt damus uobis ad
uestrum proprium alodium cum medietate de ipsa decima que inde exierit. Aliam
namque medietatem ipsius decime retinemus ad castrum de Stopanian. Et supradiota
omnia damns uobis sub deliberaoione taliter nt in prephata rupe turrem bedificetis
aut de petra et calce aut de petra et gipseo et non possitis hoc uendere nec ullo modo
alienare nec nos nec posteritas uestra nisi ad nos et ad posteritatem nostram Senio-
rem et alinm non possitis faceré nisi nos et posteritatem nostram n c uos nec posteri-
tas uestra. Et possimus inde semper faceré guerram et pacem contra cunctos homines
et feminas. Et sio de nostro iure tradimus hoc totum in uestrum dominium ad fa3ien-
dum q'aod uolueritis.»
(2) Colección de documentoa inéditos del Archivo general de li Corona de Aragón, t. IV,
pág. 67.
8 F. CARRERAS Y CANDI
que vale La pena de referir, pues evidencian la actitud en que solieron
colocarse á veces los castellanos.
Al encargar, el Conde, á Reverter, el castillo de Cabrera, le en-
tregaba todos sus feudos y se comprometía á echar del mismo á sus
castlanes Miró Guillem y Gaillem de Montbuy, siempre que Reverter
se lo exigiera Dado caso de que éste no hiciese incapié en la salida de
aquel castillo de MinJ Guillem, Ramón Berenguer IV prometía resar-
cirle su perjuicio con otras posesiones en Tarrasa ó donde prefiriere, á
juicio de Ramón Folch, (seguramente el vizconde de Cardona) y de los
dos compromisarios de Reverter, Robert y Berenguer Ramón, veguer
La prestación del homenaje feudal, sogún dibujo de fines dol siglo xii (Eegistro 1)
díí Barcelona. Este párrafo demuestra, que^, con esta escritura venían
á arreglarse diferencias ó desavenencias entre el conde y el vizconde
de Barcelona.
Ni Reverter se avino en no colu'ar el castillo de Cabrera ni su de-
tentnr Miró Guillem en abandonarlo. Después del convenio, Reverter,
que casi siempre residía en tierra de moros, según él manifestaba en
algunos documentos y cuya educación en dicho país resulta evidente
poruña desús Hrmas escril)icndo Berengarms Revertarius, en carac-
teres árabes 1 . envió A su fiel lugarteniente Robert, al Conde, con
;l) Véase el cartulario de Siint Cu-atdel Valles, doc. núm.656.
LA INSTITUCIÓN DKL CASTLÁ EN CATALUÑA 9
una interesante carta sin fecha, escrita en latín, catalán y castellano
ó italiano (1). Pide al Soberano que quite el honor de Granera de ma-
nos de Berenguer y lo entregue h Robert, en quien desea ver concen-
trarse el mayor poder, por cuanto «se Roberto manda mea honore ego
mando et se Roberto non mandat hoc quod scripsimus ego non mando.»
Más adelante, suplica al Conde, como á señor suyo de Cabrera (rogo
vos domino meo de Cabrera) que libre este feudo de manos de Miró
Guillem y lo entregue al propio Robert.
El eximio arabista Codera, estudiando las causas que determinaron
el descontento de los moros españoles con respecto á sus caudillos afri-
canos, señala la predilección que Alí y luego su hijo Texufin, mos-
traron por los cristianos incorporados en los ejércitos de Fez, á las
órdenes del cristiano Reverter (2). La fecha á que se refiere esta cita,
sacada de los historiadores árabes, es la de 1144 poco más ó menos,
época en que vivía el vizconde de Barcelona Reverter, de quien tantas
muestras tenemos de sus continuas relaciones con los árabes.
No tardó en morir Reverter y en pasar á su sobrino, Guillem de
Guardia, el vizcondado de Barcelona, sin que, en el año 1146, Miró
Guillem hubiese desamparado el feudo de Cabrera (3) . Por cuya razón
el de Guardia hubo de convenir con Ramón Berenguer IV, que si éste
lograba poner en paz del obstinado Miró Guillem, el castillo de Cabre-
ra, poseería una tercera parte de su dominio, siendo las dos restantes
del Vizconde. Pero que si el Conde no lo obtenía y quien debiera rea-
lizarlo fuese Guillem de Guardia, le correspondería íntegro todo el
dominio. Sentimos no poder seguir hasta el fin tan pertinaz contro-
versia por no llegar á más la documentación examinada.
Interesante resulta, en este período histórico, la creación del cas-
tellano ó castlá de Lleyda, por aparecer la prístina forma en que eran
establecidos tales cargos, con sus obligaciones y emolumentos (4). En
el año 1148 se firmó un convenio entre Ramón Berenguer IV, conde de
Barcelona, y Ermengol, conde de Urgell, recibiendo éste de aquél la
tercera parte de Lleyda con todos sus términos, esto es, del término
de Jabud al de Corbins. De las otras dos terceras partes, el conde de
Barcelona concedía á los templarios, un quinto libre de toda pretensión
señorial del de Urgell^ á quien indemnizaba de cualquier perjuicio que
ello le irrogase, con la castlanía de Azcó (facit emendam comiti urge-
llensi ipsum castrum de Azcho tali modo ut comes barchinonensis co-
mendat comiti Urgellensi ipsum castlanum). Entendemos que en Azcó
le colocaría como primer castellano, pues luego, en aclaración del con-
(1) Colección de documentos, etc., t. IV, pág. 'd'ia.
(2) Decadencia y desaparición de los Almorávides en España, por Francisco Codera
(Zaragoza, 1899), página 30 '
(3) Colección de documentos, etc., t. IV, pág. 111.
(á) Ibidem, t. IV, págs. 128 y 329,
JO F. CARRERAS Y CANDI
cepto, expresaba, que, en las huestes y cavalcadas en que concurriese
el conde de Urgell con el de Barcelona, el castlá de Azcó, seguiría la
hueste del primero; lo cual no debieran establecer, por ser cosa co-
rriente, si se tratase de la señoría.
Sigue diciéndose en dicho convenio, que, lo restante de las dos ter-
ceras partes de los ingresos que quedaban para el conde de Barcelona,
serviría para colar al castlá que pondrá en Lleyda, con señorío en toda
la ciudad y término. Este último, debía ser sólido ó dependiente del
conde de ürgell, y si quedaba vacante el cargo, Ermengol podía nom -
brar á quien quisiera para desempeñarlo.
Los derechos que se adjudicaban al castellano de Lleyda, como se
ve, procedían de una desmembración de los emolumentos señoriales y
no eran propios ó peculiares del cargo. Así sucedía al establecerse
todos ellos, por conceptuarse no pertenecerles más derechos que los
que el señor les delegara. Por consiguiente, quedaba al arbitrio de
este mermárselos ó quitárselos en la forma que mejor le pluguiere.
y como muchas veces se concedían por durante la vida del agraciado,
algunos autores, y con ellos el de la historia general del Languedoc (1),
ateniéndose á lo que se observa en los siglos anteriores al xiii, han
afirmado, ser, en esta región, las castlanías, cargos vitalicios.
Por Baldo de Perusio, cabe prever la poca duración que tendría
este cargo en algunos países feudales, siendo, quizás, su carácter he-
reditario, una especialidad de la sociedad catalana. Dice Baldo, en su
tratado Super feudis (2), que, preguntado, el Emperador, acerca la
duración del feudo llamado castlanía y guardia ó merced, respondió
ser sólo de un año, transcurrido el cual podía revocarse, si no se había
pactado por mayor tiempo.
Numerosos ejemplos demuestran, que, la voluntad del señor, en el
nombramiento ó separación de su representante el castellano ó castlá,
al parecer no tuvo cortapisas en Cataluña, cuando menos hasta el si-
glo XII inclusive. En el año 1152, Ramón Berenguer IV donóla villa de
Moya al monasterio de Santa María del Estany, estableciendo que los
castellanos de Clerá no ejercerían derecho alguno dentro las puertas
de la villa (3). El propio conde de Barcelona, en 1151, se comprometía
á no colocar ningún otro, intermediario entre él y Pere de Ma9aean^
en el castillo de Gallifa (4) En el Conflent, el castillo de Cornelia re-
vertía á Ramón Berenguer IV, por morir exorcli su feudatario Bernat
Joan (5V, antes que concederlo áGuillem de Cornelia, quien manifestaba
asistirle derecho á ello, prefirió, el Soberano, encomendarlo á Galce-
(1) Hiitoire genérale de Languedoc, Touloase, 1879, t. Vil, pág. 200.
(2) Lión, 1038, f. 9.
(3) Colecciún de doaimentos, etc., t. IV, pág. 206.
(4) Ibidem, t. IV, pág. 186.
(6) Ibidem, t. IV, pág. 344
LA INSTITUCIÓN DEL CASTLÁ EX CATALUÑA 11
rán de Sales (1 ). Cornelia traspasó su derecho á Ramón de Vilademuls,
persona muy apreciada del Conde de Barcelona (2), por lo que éste,
prescindiendo de Sales, le dio aquel castillo, no sin que se suscitaran
graves antagonismos, entre el primeramente nombrado y el segundo.
Aun cuando el castlá no debía dejar la guarda de un castillo, co-
munmente la abandonaba, ya siguiendo al señor en sus cavalcadas y
huestes, ya desempeñando comisiones de confianza, ya obteniendo la
dirección de más de un castillo. Como al uso se siguió el abuso, hubo
necesidad de encauzar el nuevo estado de cosas^ así que pasó á formar
parte de las costumbres del Principado.
Por esto se creó el lugarteniente del castlá, llamado segundo castlá
ó tercero, ó cuarto, y generalmente sots-castlá. Cuando en un castillo
hubo más de un castlá, se llamó al que directamente lo había recibido
del señor, castlá major.
Como el nombramiento de un sots-castlá podía llevar perturbación
en su guarda ó dirección interna, primero la costumbre y luego la ley,
dieron garantías al señor, á fin de que no resultase perjudicado por
tal causa. El usaje Castlani establecía que ningún castlá podía con-
fiar la custodia del castillo á sots-castlá, sin licencia del señor. La ne-
cesidad del usaje se evidencia por las muchas ocasiones en que se liizo
lo contrario en perjuicio del señor (3).
En el caso de venda de un castillo, alguna vez se consignaba que
con él eran enajenados los castlanes, á semejanza de lo que se hacía
con los hombres propios y afocats (4). Mas no debe entenderse hubiera
similitud entre una y otra clase de enajenación, ya que el castlá podía
(1; Galcerán de Sales, hijo de Ermesendis, en 1140, había prestado juramento de
fidelidad al Conde de Barcelona por el castillo de Bibas y por las fortalezas existentes
en su valle, prometiendo que él ó sus castlanes darían la postat al Conde, cuando se la
pida. (Ibidem, t. IV, p. 77.)
(2) Por el aprecio de sus soberanos, fué tomando incremento la importancia y vali-
miento de Ramón de Vilademuls, quien llegó á ser la más influyente persona deRosse-
lló durante el reinado de Alfonso I, como que en 1187 usaba del titulo y cargo de virrey
(vicem domini regis gerens.) Falleció en 1199, casando su hija y heredera, con Huch,
conde de Ampurias. (Véase Alart, obra citada, págs. 50 y 51.)
^3^ Uno de los motivos de queja que manifestó el Abat de San Cugat del Valles con-
tra su feudatario Ramón Pere de Bañeres, en el siglo xii, era haber colocado castla-
nes en el castillo de Calders, con evidente perjuicio suyo. (^Documentos inéditos, ata,,
tomo IV, pág. 285.)
(4) La compra que hizo, en 1405, la orden de San Juan de Jerusalén de los lugares
de Palau de Anglesola y de Cidamont, invirtiendo parte del dinero que les había pro-
ducido la venda de San Celoni á la casa de Cabrera, empieza así:
• En nom de deu sie amen: sobre la venda fahedora per lo molt honorable mioer
pere vacalm doctor en leys ciutada de barohinona ais molt reuerents senyors frare
galter leerás del orde del spital de sent Johan de Jherusalem prior de la sgleja de ro-
dea doctor en decrtts e frare P. dez pomer del dit orde prior de Cathalunya Comprants
a obs del dit orde e per al dit priorat de Cathalunya deis locha del palaa dangleola e
de Cidamont ab Caslaniea e feus e ab caslans e dones e ab homens e fembres censes del-
mes rendes qnisties drets emoluments de aquells lochs> etc.
7 Armari de Eapluga Calva, saco H, núm. 51, Arch. del Priorato de Cataluña de San
Juan de Jerusalén.
12 F. CARRERAS Y CANDI
dejar libremente su feudo, y esto no estaba al arbitrio del hombre pro-
pio. Lo engorroso qae resultaba, por otros conceptos, la coexistencia
de varios castlanes en un mismo castillo, facilitaba la solución cuando
el feudo era abandonado, pues, en seguida el segundo castlá ocupaba
el lugar del primero, el tercero el lugar del segundo, y así sucesiva-
mente, como manifiesta el canónigo Pere Albert.
Ejemplo de abandono del feudo, presenta en 1281, Bernat G-uillém
de Entenza. Este caballero cesó de servir los castillos de Falcet y de
Viacarap que tenía por el rey de Aragón. Transcurrido el lapso de
tiempo de un ano y un día, el Soberano ordenó al Sobrejuntero de Ri-
bagorza y Pallars, pusiera en posesión de aquel feudo al segundo va-
sallo, si deseaba servirlo y si no, que lo ofreciera al tercer vasallo y
así sucesivamente, de mayor á menor, según la costumbre de Barce-
lona (1), hasta que fuese servido.
En convocatorias reales á los feudatarios para que concurran á la
hueste, observamos, durante la segunda mitad del siglo xiii, que pobla-
ciones importantes de Cataluña, feudo directo de la corona, tenían á
un mismo tiempo distintos castlanes, inmediatamente dependientes del
[Monarca, quizás tantos como castillos ó fortalezas se contaban en su
término ó murallas. De estas villas, podemos citar á Vilaf ranea, Cer-
vera y Vilallonga, en 1285 (2). Se mencionan los castlanes de Mauresa
en 1284, con motivo de cierta cuestión de competencia suscitada entre
la cort ó tribunal de los castlanes y la del baile, que hubo de resolver
Pedro II (3).
La multiplicidad de castlanes ó feudatarios daba lugar á no pocas
controversias, como puede colegirse del sin fin de ejemplos aducidos
por el jurisconsulto vicense Jaime Callig, al comentar el usaje castlani.
Nos viene á mano sacar á colación el que tuvo lugar en el año de 1402,
originado por Juan de Togores, castlá major del castillo deEahona en
(1) «Dilecto 8U0 Raymando de Molina supermntario Rípacurcie et de paylas saln-
tem et dilectionem. Cum nobilis bernardi Guillelmi de enten(;a qui per nobis tenet ad
feudnm castra de viacamp et de lalret cessauerit per annnm et diem sernire nobis
dictum feudam nt tenebatur et inde ex parte nostra monitus fuerit ac reqnidtus Man-
damna ucbis qnatenns si iUe qui est secundus nassalus alterius dictorutn locoruha unlt
proseqnl feudum snum et seruire ac esmendare nobid illud quod fallitum est inde uel
nobis loco nostri eidem secundo vassallo desemparetis feudum predictum. Si vero ídem
secundus vassallus noluerit prosequi dictum feudum ut dictum est restituatís dictum
feudnm tercio vassallo et sic de vnoquoque vassallo maiori ad minorem prout hoc fa-
ciendum fuerit, juxta modum et condicionem predictam ac consuetudinem barcbino-
n<i. Datum valencia II nonas Marcii anno domini M°CC°LXXX° primo.— R." scorna.»
Registro 44, folio 211.
(2) Registro 43, folio 107.
(8; «BhJhIo Minorise vel eius locum tenenti. Intelleximus quod ¡n preiudicium nos-
trnm Cnstlani Minorise sen Curiam per eis tenentes nolunt admitiere appellationes
qnoil flnnt «le Curia ad bajulam in quo si ita est derogant nobis. Quare mandamns uo-
bU quatonns moneatis Castlanes prediotoa seu Curiam tenentes quod dictas appella-
riones admitant ut fieri debet. Alias ipsos prout de jure fuerit apellatis. Datum ut
•upra.' ilJb4, II kalendas Decembris.) (Registro 43, folio 79.)
LA IXSTiTUCIÓX D.-L CASTLÁ EN CATALUÑA 13
Sabadell, quien poseyéndolo en feudo del señor, tenía debajo suyo á
otros tres castlanes. Uno de estos, Ramón Sentmenat de Campcentelles
á su vez tenía como feudatario al propio Togores, por razón del diezmo
de San Feliu de Sabadell, observando el narrador de esta incongruen-
cia: eii acó es fet tort al Senyor del dit Castell e vita com lo dit Johan
2'ogores no pot esser Senyor e vas salí per una viatexa cosa (1). Casos
como este debieron ocurrir á menudo, ya que fueron previstos en la
compilación de costumbres de Cataluña, de Pere Albert (2).
Pero aún más que entre castellanos, donde menudeaban tales con-
flictos era entre éstos y sus señores. Ya de antiguo se dan casos en los
que el soberano, al entregar un feudo, procuraba prevenirlos, estipu-
lando que el castlá reconocería sin oposición al señor que luego pusiere
en el castillo. No de otro modo en el año 1080, sucedió en Talarn. Los
condes de Pallars tenían este castillo y el barranco (bale) de Sots-
terres, encomendado á varios guardianes ó feudatarios. Al aceptar Gi-
laman Ug, en la fecha arriba citada, uno de estos feudos, se compro-
metía á reconocer por señor del castillo á la persona que el Conde le
mandase («et faciat per ipso castro scniorem qualem Reimundus comes
ad illum mandauerit») (3),
En el siglo xiii se desarrolla una especialidad de tales conflictos de
aspecto puramente social, que dio no poco juego. Convertidas, las cast-
lanias, en hereditarias y radicando casi siempre en personas del esta-
mento militar, el orgullo de clase los originó, haciéndolos aparecer
con una violencia y tenacidad tales, que no paró hasta infiltrarlos en
la jurisprudencia.
Su causa radicaba en el encumbramiento de los villanos, esto es, de
los vecinos de villas y lugares, que no se dedicaban á la milicia y á
quienes su bienestar material permitía adquirir, por compra, castillos
y feudos. Como no eran caballeros, al convertirse en señores de cas-
tillos, tuvieron, en calidad de feudatarios, bajo su potestad, k castlanes
pertenecientes muchas veces al estamento militar. En semejante caso,
éstos ya consentían en prestar el debido juramento de fidelidad al nuevo
señor, mas rehusaban rendirle homenaje, por ser de menor categoría
social: se viinvaven de senyor.
Los ciudadanos de Barcelona protestaron de semejante actitud,
suponiendo lesionaba sus privilegios. El castillo de Burriach, en 1352,
al adquirirlo el escribano real Pedro des Bosch, tenía por castlá á
Guillem de Argentona, caballero y auditor de la curia real, quien ne-
góse á la prestación del homenaje á Bosch, insiguiendo aquellas prác-
ticas feudales. Mas éste, como ciudadano de Barcelona, adujo el argu-
(1) Manual de novells ardits vulgarment apellat Dietari del antich Consell Barceloni, v. I,
pág. 99. (Barcelona, 1892.)
(2) Constituciona de Cath'ilunya, libro IV, pág 368, apartado XXXX,
(3) Kegistro 1, folio 32.
14 F. CARRERAS Y CANDI
mentó de que era igual eu derechos y preeminencias á los caballeros
de Cataluña. Examinada la controversia por peritos en derecho, fué
su resolución favorable á la aseveración de Pedro des Bosch, decla-
rándose no haber lugar á la pretensión del castlá de Burriach (1).
Esta clase de contiendas obligó á las Cortes de Barcelona del
año 1311, á decretar, que si señoría de castillo ó de lugar que acostum-
brara ser de caballero, pasase por compra ó sucesión, á ciudadano ó á
hombre de villa, las diferencias que entre ellos se suscitaran, debían
juzgarse por jueces y en la misma forma que antes eran juzgadas con
el caballero cuyo lugar ocupaba el ciudadano ó villano (2).
Ya entrado el siglo xiii, fué usual en Cataluña perpetuarse el de-
recho del castlá á una parte de los emolumentos ó tributos señoriales.
En 1358, el castlá del castillo de Burriach recibía de los terratenientes,
haces de paja (feys sive mantés de paylla) almuts de cebada, huevos,
cafios (?) y otros derechos semejantes. Esto constituía lo que se llamó
censo de castlanias, suprimidos en cierto modo por la famosa sentencia
de Guadalupe en 1486. Decimos en cierto modo, porque se eximió á
los labradores de pagarlos, salvo aquellos casos en que los castlanes
estuviesen en posesión de recibirlos. Y como estos casos eran nume-
rosos, la prestación "feudal subsistió en la Edad Moderna, como lo
mostraremos con el ejemplo que nos suministra el castillo de Qa Nove-
11a, en el antiguo condado de ürgell.
Los derechos de los castlanes á estos emolumentos del término del
castillo, hemos visto eran hijos del pacto ó voluntad del señor. Este se
desprendía de una parte de los tributos de su pertenencia, para ceder-
los á su lugarteniente. Existe un contrato del año 1220, entre Bernat
de Anglerola y su mujer Ferrera, con Bernat de Golmers, por el cual
los primeros conceden á éste perpetuamente, y con derecho á legarlo
á sus sucesores, la castlanía de (^a Novella, conviniéndose que, de los
emolumentos del castillo y villa antedichos, tres cuartas partes perte-
necerían á los Anglerolas y una cuarta parte á Golmers ó á sus su-
cesores (3).
Como la sentencia de Guadalupe no lesionaba derechos adquiridos,
la castlania de Qa Novella prosiguió percibiendo los suyos con mucha
posterioridad al siglo xv. Por derecho hereditario, halláronse ser, pro-
indiviso, castlanes de Ca Novella en 1645, Juan de Olzinelles, señor de
Mollcrusa, y Ramón de Pocorull, señor de Fonolleres, habiendo pasado
cl señorío del castillo al Prior de la orden de San Juan de Jerusalem.
Al señor y á los castlanes les hallamos entonces enredados en largo y
(1) Véasela monografía del autor Lo castell de Sant Vicents ó de Burriach en publi-
oacián.
(2) rontUlueiont y altreñ dret» de Catalunya, vol. I, p&g. '-^bl.
(3) 12 Armari Catas Antiguas, saco O, doc. núm. 53, Arch. del Priorato de San Juan
d* JeruBalón en Cataluña.
LA INSTITUCIÓN DEL CASTLÁ EN CATALUÑA 15
costoso litigio, por no querer acceder, el Prior, ala pretensión de éstos
á la sexta parte del diezmo de los granos (1).
Los derechos peculiares de los castellanos, al comenzarse A estable-
cer fijamente en el siglo xiii, señalaron una diferencia en el xiv, en-
tre castlanias con intervención en los repartos de las prestaciones se-
ñoriales del término, y castlanias con sueldo ó emolumento fijo y
atribuciones limitadas á un orden meramente militar, á las que se llamó
capitanías. Ejemplo de estos últimos cargos ocurre en el reinado de
Pere II del Punyalet, al confiar el castillo de Cónfrides, en Valencia, á
Arnau de Mataró. Este caballero venía obligado á tenerlo provisto de
hombres y vituallas suficientes para su custodia, asignándole el Rey
mil sueldos de reales, que cada año el baile de Cónfrides le entregaba
el día 15 de Agosto. Y para que no haya lugar á dudas acerca la na-
turaleza del cargo, por dos veces se hace constar en su credencial,
que lo poseerá mientras así pluguiere al Soberano (¿).
La distinción entre capitanía y castlania, viene á establecerse
también en el siglo xiv entre castellania y castlania, dos palabras sinó-
nimas, hasta entonces tomadas como expresivas de una misma idea.
Esta diferencia la presentan los comentaristas de los Usatges, siendo
el primero en exponerla Jaume de Vallseca, que vivió á mediados del
siglo XIV.
Balari y Jovany, ocupándose de la primordial importancia del
castlá en nuestro Principado en los prístinos siglos de la Reconquista,
explica cómo debióse á tal institución la denominación de tierra de
castlanes ó de catalanes (3) que siempre más ha llevado. Sus concien-
zudas investigaciones en las escrituras de los archivos de Cataluña,
nada le indican acerca la existencia de la distinción con el castellano,
(1) LoB castlanes mantenían su derecho á poseer «qniscnnany la sisena part de tots
los grans dessimals ques callen en lo termo del lloch de la Novella de ahont ella Bon
earlans per indiais y axi mateix en tornarlos en la possessio mes que prescrita y anti-
quissima que teñen dits Senyors de Olsinellea y PocoruU y han tingut sos pares y pre-
decessors de rebrer dita sisena part de dits grans dessimals en dit terme de la Novella
y en aquella com a Carlans que son de dit lloch mantenirlos de la qual possessio de
rebrer dita sisena part de dits fruytsdessimals ex obrupto y sens ministerini coneguda
de dret et alias foren expoleats per lo molt Iltre. Fr. D. Rafel Xammar les hores
Prior de Catalunya.»
X2 Armari Casas Antiguas, saco O, doo núm. 300, Aroh. del Priorato de San Juan de
Jernsalén en Cataluña.
(¿) «Nos P. etc. tradimus et comandamus uobis Arnaldo de Matarone Castrum nos-
trum de Cónfrides Ita quod ipsum Castrum teneatis et cnstodiatis fideliter atque bene
et ponatis ibidem tot homines qui sufñciant ad custodiam eiusdem Castri et arma
etiam et victualia et alia apparamenta neccesaria custodie suppradicte. Volentes quod
dum nobis placuerit recipiatis per custodia dlcti Castri mille solidos Regalis quos uo-
bis assignamus in redditibna dicti loci. Mandantes baiulo de Cónfrides quicumque
fuerit quod dictos Mille solidos nobis soluat annuatim in festo sánete Marie Angustí
dum meamut dictum est placuerit voluntati. Datum valencie idus fftsbruarii. — E.. es-
coma.»
(3) Orígenes históricos de Cataluña, Barcelona, 1899, pág. 29.
t6 F. CARRERAS Y CANDI
en hxs síítIos anteriores al xiii, que, en nuestros breves estudios de la
documentación semieval, tampoco hemos sabido apreciar.
Expone Vallseca, que teníamos el castellano y el castlá, á quien
apellida clastlá. Era este último, el custodio del castillo, al cual no
competía derecho alguno en su término; y el castellano, este mismo
custodio ejerciendo derechos propios en el término (1).
Pocos años después de Vallseca, otro notable jurisconsulto barce-
lonés, Jaurae de IMarquilles, manifestaba, en pleno siglo xv, ser de la
misma opinión que su anterior. Mas si Marquillcs decía seguir á Vall-
seca, en el texto sustentó opinión bien distinta. Le seguía al aceptar la
diferencia entre castlá y castellano, pero no en la calificación de uno y
otro. El primero supuso ser el que tenía derechos en el castillo, y cas-
tellano el que no los poseía. Por consiguiente, invertíalos términos de
Vallseca (2).
De todos modos, dichos autores dejaban establecida una distinción
que antes no existió. Raciocinando sobre las causas que la motivaron,
cabe suponer si sería uno de tantos efectos de la influencia de Castilla,
que en aquel período comenzaba á sentirse en Cataluña. Nuestra com-
piii'ada institución feudal, con sus múltiples enfeudaciones, dominios
y tributos, ora radicando en las personas^ ora en los bienes, ora en
las jurisdicciones, presentaba al castlá con derechos propios en los
productos y frutos del término y con atribuciones administrativas en
los vasallos, de que carecía el castellano ó alcaide de castillo en el
vecino reino, cargo de índole puramente militar (3).
(1) «Nota qnod nos habemus Castellanum et Clastlanum qnoniaiu Clastlanus est
castos castri et qni nuUam ius habet in castro. Sed Castellanas Labet ias íq castro, \t
hoc vsa.» {Atitiqviores harchinonensium leges, qvas vvlgvs vsalicos appellat ciim comentariis
Supremoriim lurisconsiilloritm Jaeobi a monte Judaico, Guillei'mi a Vallesicca et Jacobi Cali-
cii, (Barcelona, 1514) folio 8i;.
(2; «Nota II: secumdam Ja. de vallesica quod nos habemus caBtlannm et caste-
Uanam quoniam castellana.s est castos cattri et qui nuUum ius habet in castro sed
castlanas habet ius in castro.» (''omentaria Jacobi de Marqtiilles super vsaticis barchinone,
(Barcelona, 1.505) folio 101).
(3) Dará idea exacta de que fueron estos alcaides en el antiguo reino de Castilla, lo
que se lee en un interesante manuscrito del siglo xiy de la biblioteca del real monas-
terio do San Lorenzo del Escorial (III Y i, folio 100).
«Ley VI: quales donen esser alcaydes de los castiellos que es lo qae deuen fazer por
8U8 cuerpos por guarda dellos.
• Cjnnt castiello de senyor segunt fuero antiguo de Espanya es cosa en qne yaze
mnyt grant periglo e pues que ha de hoyr el que touiere sil perdiere por su cnlpa en
traycion qnes puescha 'prouescha) como en egual de la muerte del senyor miso deuen
todos lo., que los touieren seer apercebidos en guardarlos de manera que no cayan en
ella E por esta guarda seer fecha uomplidamientre deuen seer catadas V cosas. La
primera quo sean los alcaydes átales como quiere por aguarda del castiello. La segona
que fagan ellos mismos lo que denen en guarda dellos. La ter?a quey tengua compli-
mento -lo hombres: la quarta de uianda, La quinta darmas e de cada una destas que-
remos mostrar como se deuo fasor. E por ende diximos que todo alcayt que touiere
castiello de senyor deas seer de buen lugar de padre e de madre e si lo fuero siempre
hanra nergon<. a do fiizer del castiello cosa quel este mal ni por que seia desondrado ni
los que dell clostindieren. Otro si deuen seer leal por que toda uia sepa guardar quel
LA INSTITUCIÓN DEL CASTLÁ EX CATALUÑA 17
Qaedaba planteada, la distinción entre ambos custodios de castillos
y en tales términos, que necesariamente había de producir confusión
en los tiempos posteriores Seo;ún nuestro parecer, Marquilles llamaría
il propósito castlá al que tenía derecho en el término del castillo, por
avenirse así la palabra genuinamente catalana, con el modo de ser
peculiar de nuestro territorio. Como la distinción no era casuística,
sino racional y conforme á dos diferentes estados de guardianes de un
castillo, nada se oponía á que fuese admitida y por consiguiente se in-
flltró en los escritos de los jurisconsultos.
No obstante, en los años que podemos llamar coetáneos de Vallseca
y de Marquilles, se legisló, en las Cortes de Monzón, acerca de esta
materia, sin constatar la antedicha diferencia. Corría el año 1422,
cuando las referidas Cortes estatuyeron que no pudieran conferirse á
los nacidos fuera del territorio catalán, los cargos de «castellanía ó
guarda de las f oreas e castells» (1). El sentido estricto de su redacción
ya dice ser una misma cosa la castellanía y la guarda de un castillo,
en conformidad al criterio de Marquilles. Pero la omisión de la castla-
nia; el no expresarse si tal prohibición se entendería solamente para la
guarda ó castellanía; el dictarse el capítulo ele Cortes, poco tiempo
después de la publicación de la obra de Vallseca, cuando aún no ha-
bía salido la de Marquilles y por consiguiente, cuando los tratadistas
dejaban sentado ser diferente la castellanía de la guarda; el equiparar
fovcas con castillos: son consideraciones todas que nos han inducido á
creer que la distinción, entonces, no se tuvo en cuenta.
Andrés Bosch, á principios del siglo xvii, se hace eco de la opinión
de Vallseca, y no advi -ite que Marquilles la contrariara. Además re-
Rey nil regno no seyan tleseretados del castieUo que touiren E aUi ha mester que sea
estoreado perqué no puede desemparar a los periglos quo al castieUo auinieren. E sa-
bidor qiii quiere que seya porque sepa fa^er e guisar Jas cosas que aquí ouiere a guar-
dar e a'defendiiiiento del castieUo. Otrosí no deue seer mucho escaseo porque haian
sabor los hombr^ s de fincar de meyor mentre con ell car asín como seria mal de seer
mucho desguisado de guardar las «osas que fuesspu menester por aguarda del castieUo
otrosí le serie mal de no saber partir com los hombres lo que ouiessen quando menester
los fues. E no deue seer muyt pobre porque no haia cobdicia de quererer (querer) ri-
queza daquello que diere por alaratineacia del CastieUo. E demás de todo esto deue
seer muyt aguaoso en guardar bien el castieUo que touiere e no se deue partir dell en
tiempo de periilo E si atanyeíje que ge lo corcassen o lo c imbatiessen deue lo empa-
rar fasta la muerte e por veher turmentar la muger o los figos o otros hombres quales
quiere que amasse ne por seer en presen o turmeatado o í'erilo de muerte o asi mena-
cado de matar ni por otra raz >n que se po(lies»e seer de mal o de bien quel feciesse o
le promitesse de tazer non deue dar el castieUo ni mandar que den que si lo feciesse
cayria por ende en pena de traycion corno quien trayere castiello de su senyor »
(1) Constitucions y altres drets de Catalunya, Barcelona, 1588, v. I, pAg. 163.
Semejante prohibición no era nueva en los estados pirenaicos, pues desde 1393 es-
taba vigente en el vizcondado de Bearn, donde se excluyó á los forasteros de los car-
gos de oficiales de justicia, castellanos y oficiales de la cancillería y de la casa del viz-
conde. {Les étais de Béarn depuis leurs origines jusqu'au commenccment du xvi siécle, par
León Cadier, (Parla, 1888, p&g. 360.)
1901 ti
18 F. CARRERAS Y CANDI
chaza que algunos autores llamen caballerías á las castlanias (1), adu-
ciendo razones que no son las más sólidas para ello No cabe confun-
dir á la caballería, orden militar, como hace Bosch^ con el derecho
feudal de una caballería, al que debe suponerse aludirían los autores
que, con poco fundamento, lo creyeron análogo á la castellanía. Con
el nombre de caballería se designó la obligación feudal de seguir al
señor en las campañas, con un caballo y jinete armat y alforrat.
A ella estaban afectos no pocos feudos, así de castellanías, como de
concesiones jurisdiccionales ó territoriales. En muchos documentos
del siglo XIII suele leerse que tal persona debía contribuir á la hueste
con media caballería, en cuyo caso, reunidos dos feudatarios sujetos
á idéntica prestación, entre ambos, pagaban un caballero con su co-
rrespondiente equipo de armas y caballo.
Más lamentable equivocación es la consignada por el autor de la
historia del derecho en los Pirineos (condado de Bigorre), quien acep-
tando una errónea opinión francesa, sienta que la castlania es el de-
recho de asilo '2).
Bosch, al seguir á Vallseca, hace afianzar su opinión, como se ve
en un interesante escrito jurídico del año 1729, referente al lugar y
término de Solivella (3).
(1) «SeruÍHnse tambe los Comtes de alttes persones per alguns actes particulars, y
de uUs passaren ais dt mes Magnats y Barons restats liris avay ab titols de Castlans
y Castellans entre los quals \d ha differencia los Castlans son los qui teñen la guarda
del Castell sens teniri en ell ningún dret lo Castella es lo qui te la guarda y dret y aixi
deis sabcastlans y subcastellans com a tinents com llargament declaran totslus prac-
tichsenlo vs&t, Ca»tlani Comment- deis vsat. f. 83< y apres Soccarrats en lo coment de les
consueiuts de Pere Albert (C : si castlamis ca, ef sí non est) deis quals apar que estos titols
tambe eren feudals, de manera que les Castellanies ó castlanies son aquelles enfeuda-
das per altre sonyor tenint per ells feus, com se ven en les enfeudacions de decimes y
altres ilrets; k estas ( astellanies molts Escriptors anomenan Caualleries y los Castlans
Cuuallers y verament son altra estat de persones encara que lo servey de ells era per
la guerra com esta dit. per quant aquells que trobam avuy gosan ditas Castlanies ó
Carlanies per elles sois no gosan priuilegis militara, sino sois los feudals del honor te-
nen; íl esta resolució me obliga lo que escriu Socarrats (En lo c. si Castellnns nti. 4) que lo
titol y nom de Carla ó Castlá es de vasallatge y que dir Castla ó vassall tot es una cosa,
prenent sois nqueix especial nom per raho del seruey.>
Andreu B' scti, Titols de honor de Cathalunya, Rosselló y Cerdanya, lib. II, § 7.
(2; «Qaelques chúteaux avaient le droit d'dsile. Fierre de Boylossio reconnut ce
ilroit au chi'iteau de Corueilhan, en présence de Gaillard de Salis. C'est ce qui resulte
d'un acte de 1819, du mardi, veille de l'Assomption, dans le cháteau de Riscles: fíecog-
novit se (enere caslaniam quam luibet in castro de Cornelhano *;. Caslania, d'aprés Grave-
rol !** , doit se traduire par droit de refuge: Le sauvement casla7tia ou gualanie, est un droit
pour le refuge au chú'eau des seinneurs.*
Ihsloire du droit duna les l'yréíUes (Comté de Bigorre), par M. G. B. de Lagréze (Pa-
rí», 14tt7i, pAg. 27'.l.
(!Ji Demostración jurídica con que el fiscal patrimonial de sv magostad persvade se
dove revnir o incorporar b. la Real Corona la Yvrisdiccion Civil y Criminal mero y
laixto imperio del Lugar y Término de Solivella. (Barcelona, 1729;, pág. 2o.
(•) Gíanaj/e», t. III, p. 142.
(♦•) Les ArritB notables recueiilis par B. de la Roche-Flavin, avec les Observations de
Fr. Gravorol; Toulouse, 1682, in folio.
LA INSTITUCIÓN DEL CASTLÁ EN CATALUÑA 19
En 1839, el diccionario catalán de Labernia interpreta erróneamen-
te las voces castellá, castellania y castlá. Mientras afirma ser, el caria,
cierto señor con jurisdicción y derechos propios en un territorio, supo-
ne iguales las voces castellá y castlá, significando gobernador de al-
gún castillo, y ser, la castellania, un territorio ó jurisdicción indepen-
diente, con leyes particulares y régimen especial (1).
Quedando bien sentada la disparidad y confusión en el significado
de castellano y castlá y nuestra opinión, conforme á la de Marquilles,
examinaremos alguna de las relaciones entre el señor y el feudatario,
en las cuales no hallamos estos motivos de controversia.
La compilación de costumbres de Cataluña, hecha por el canónigo
de Barcelona Pere Albert, refiere, con profusión de detalles, la mane-
ra como debía ser entregado un castillo, al señor, por el castlá ó feu-
datario, á cuyo acto en nuestro lenguaje medioeval se llamaba donar
la postat de castell.
Cuando tal sucedía, el castlá ó vasallo sacaba del castillo todos los
bienes muebles de su propiedad y lo entregaba sin oposición. Ya den-
tro la fortaleza, el señor ó su representante, hacía subir en la cima de
la torre, á dos ó más de sus hombres, quienes clamaban con grandes
voces el nombre del señor. Entonces el castlá ó vasallo salía, no ya
del castillo, sino de su término ó villas del mismo, á no ser que entra-
ra en alodio propio suyo, si es que lo hubiese dentro de aquella cir-
cunscripción. De lo contrario, mientras permaneciere en el término, no
se entendía haber entregado la postat plena, siendo calificado de hau-
sador ó traidor.
Muchos lugares de Cataluña, en el siglo xiii, tenían derruidos sus
castillos. En tal caso, el ceremonial se ejecutaba en una ó más paye-
sías del término, en las que, los hombres enviados por el señor, invo-
caban su nombre, mientras fijaban un palo, lanza ó cosa análoga,
como símbolo de tomar la postat.
Después de hecha franca y leal entrega de un castillo al señor,
era costumbre de Cataluña, que éste, sólo estaba autorizado á retenerlo
diez días en su poder, debiendo restituirlo luego al feudatario. Empe-
ro cita algunos casos Pere Albert, en los cuales^ por excepción, podía
el señor ocupar por más tiempo Ib. postat del castillo, como v. g. en
tiempo de guerra; si el castlá hiciese oposición al señor en el cumpli-
miento de alguno de sus deberes ó en entregarle la postat; si le aban-
donó vivo en la batalla con sus enemigos; si le desafió ó le desamparó
el feudo, etc.
Es interesante, para apreciar hasta dónde llegaban los derechos de
los castlanes en los términos de los castillos al comenzar la Edad Mo-
derna, conocer la respuesta que hizo^ en 1506, el castlá deBiure (ve-
(1) Dtecionari catalá-castellá-llati- francés italid, per una societat de eatalans. (Barce-
lona, 1889).
20 F. CARRERAS Y CANDI
guería de Montblanch) á, la inquisición de Fray Bernat Guerau de Re-
quesens, prior en Cataluña de la orden de San Juan de Jerusalén.
Decía el castlá, pertenecerle las prestaciones y derechos siguientes:
«ítem i)er raho de dita castlauia tinch y so en possessio de tot lo
ciuil e tinch aci y exercesch tota jurisdiccio ciuil cort e mon batlle en
nom del qual se fan totes letres e tot lo exercici de la justicia ciuil e
quiscun pages del present loch me fa tres jornals de joua, co es hu de
tirada altre de batuda ab vna muía solament y altre de sembrada ab
dues mules. E jo f asios la despesa a ells y a les besties.
»Item tinch la fadiga de les terres ques venen y puch fer la gra-
cia que vull del tere del preu pertanyent per raho de venda a senyor
del qual tere que reuena se reeb jon he una part y ló senyor laltra.
»Item mes reeb com a castla la mitat de la decima de tots splets e
pertenese a mitges entre mi e lo senyor» (1).
Se lee en Marquilles (2), que el castlá era responsable ante el señor
de las averías sufiidas en el castillo. Y si este se hubiese derruido por
negligencia del castlá, á él correspondía la reconstrucción, pues que
un feudo se concede siempre para mejorar, no para disminuir, la cosa
enfeudada. Si el castláwo tuviere ninguna culpa en su destrucción, de-
bía ser ayudado de los hombres del término, al reedificarlo.
El castlá á la muerte del señor del castillo y hasta la declaración
de heredero, quedaba como única autoridad en el término, é igual
acontecía con el sots-castlá al fallecimiento del castlá. En algunos tes-
tamentos de señores de castillos aparecen cláusulas dispositivas dirigi-
das á los castlanes. El testamento de Mir Geribert puede ser ejemplo
de ello.
Este caballero, que vivía en la primera mitad del siglo xi, era per-
sonaje de notoria importancia, no sólo por correr en sus venas sangre
de los condes de Barcelona, si que también por su carácter turbulen-
to, que, ora le llevó á combatir á los catalanes bajo los estandartes
agarenos, ora á luchar contra los árabes del reino de Tortosa, en una
de cuyas empresas murió con toda su hueste, en 1060. Reconciliado
poco antes de su fallecimiento, con el Conde de Barcelona, se hallaba
señor de los castillos de Sant Marti, Cetina, Subirats, Ca Vid, Olérdu-
la, ICrapruná, Ribert y Port de Montjuich, Dispuso al morir que su
hijii Dcniat ({uedara en cierta dependencia ó feudo de su hermano
Arnau, y á fin de que su voluntad no fuese contradicha, se dirigía á
los rastlancs mandándoles que no entregaran las postáis de los casti-
llos legados á Bernat, hasta que éste, un el término de treinta días,
jurara que, al morir Arnau, le heredaría en dichos bienes (3).
(1) liiveisorum í al 89 fpapeles sueltos ) Archivo del Priorato de San Juan de Jeru-
■alón en Cataluña.
(2) Comentaría Jacohi de Marquilles stiper vsaticis barchinone. folio 103.
(8) «Kt mnndauit ad suos castellanos qui tenebant predictam suam honorem ut non
dedl»Bent potestatem predicto filio sao bernardo usque qno bernardus filius suus ha-
La INStlTUCiÓN DEL CASÍLÁ EX CATALUÑA 2l
Con lo que antecedo no pretendemos haber expuesto más que una
pequeña parte de cuanto pudiera aducirse acerca la institución del
castld, á fin de dar idea más ó menos aproxima,da de lo que venia á
ser en el rt\iíimen feudal catalán, echando mano de algunas breves
anotaciones, que pueden ampliarse con la rebusca y estudio de muchos
otros textos similares.
baisset sacramentum factura arnaUo fratri suo ut habuisset predictos castres arnaUns
predicti post mortem bersardi fralri sui. Et si ber. ardus filius suus se abstraxisset et
nolaisset faceré predictum sacramentum arnaUo fratri suo sine uUa dubitatione et
hoc babeat factum infra XXX diea. (Lib. Antiqu. Eccl. Ca'hed. vol. IV, foL 162, doc.
núm. 379).
■^' 'jsl "í^--^-^-!^ 'sí -¡s^; 'sí JsJ ^. ^ "(b',. '(s'„ '.el p^ -éT. ^. ^, ^ ^. '^ ■.®,. Üsí"
BELLESGUART
REAL SITIO DE MARTlN I
En las inmediaciones de Sarria y en despejada vertiente de los
montes de CoU-cerola, había, en el siglo xiv, antigua casa de campo,
fertilizada por abundante caudal de agua, destinada á convertirse, por
azares de la suerte, en palacio de los reyes de Aragón.
Este edificio, explica Madoz (1), que perteneció á los antiguos
condes de Barcelona, Según Fiter, fué construido por Alfonso I en el
siglo XII y restaurado en el xiv (2).
Sentimos que ninguno de estos autores indiquen la procedencia de
sus citas, á fin de comprobarlas, pues, á pesar de haber tenido ocasión
de examinar muchos documentos de los archivos de Barcelona, no en-
contramos dato alguno de la existencia de Bellesguart con anteriori-
dad al siglo XV. Lástima que no se haya conservado la monografía
que uno de los últimos propietarios de dicha finca, el académico Fla-
qaer y Fraisse, tenía preparada, según manifiesta Rubio y Ors (3),
pues podríamos consignar otra opinión más acerca de su origen.
Martín I el Humano, ya fuese efecto de su carácter, ya de su natu-
raleza obesa y enfermiza, no solía estar en gran movimiento, resi-
diendo largos períodos de tiempo en un mismo sitio. El verano de
1404, desde fines de Agosto, lo pasó en Valldaura, casa de recreo sita
al otro lado de las montañas que cierran el llano de Barcelona, de
donde regresó á esta capital en el mes de Noviembre. El verano de
(1) Diccionario geogrdflco-estadistiro-kistórico de Espaüa y sus posesiones de T^ltramar,
por Pascual Madoz, (Madrid 1847), tomo VIII, pág. 390.
(2) Anuari de la Assoctació d' Excursions catalana, any primer 1881, (Barcelona 1882),
pág. 212.
(3) Discursos leídos ante la R, Academia de Buenas Letras de Barcelona en la recepción
pública del Rdo, P. Eduardo Llanas, escolapio, (Barcelona 1891), pág. 45.
24 í". CAKRÉRAS y CANDÍ
1405 tamhién estuvo en Valldaura, pero no el de 1406. Negocios de
frobicnio le obligaron á marchar á Valencia, donde permaneció aquel
estío, así como todo el del siguiente año 1407, que prosiguió en dicho
reino de cuya capital regresó á Barcelona. De esta ciudad no se movió
en los meses de calor del 1408 Sin embargo, cierta correspondencia
suya fechada en 20 de Septiembre, manifiesta que aquel día y quizás
alo-uno de los inmediato anteriores, estuvo en la torre que poseía el cé
lebre barcelonés Joan Fiveller en Sarria y de cual torre dijimos algo en
otra ocasión (1). Concluía esta correspondencia con el Dada en la
Torre de Joan fiueller (2); y el mismo día 20, Martín firmaba otras car-
tas en Barce ona.
Suponemos que con posterioridad á este verano de 1408, adquiriría
el rev de Aragón, la finca de Bellesguart, nombre con que la bautizó el
monarca, en sustitución del primitivo que desconocemos. Que Martín I
le dio este nombre, él mismo lo refiere al escribir á su procurador en
Mallorca el 15 de Diciembre de 1408: Segons per altre letra vos hauem
escrit nos Tiaiiem comprat aci en lo terretori de Barchinona una forre á
la qiial hauem mes nom bell esguard. Realmente era bella la vista pano-
rámica, (que no otra cosa significa esguart) que desde aquel elevado si-
tio se descubría sobre el llano que atraviesan el Besos y el Llobregat.
Siempre ha sido usual designar lugares semejantes con tales nombres,
nacidos las más de las veces del acaso, según los numerosos ejemplos
que presenta la orografía de todos los países. Un caso completamente
análogo al de Bellesguart, esto es, que por un magnate se diese el
nombre de bello á cierto territorio, ocurrió en 1225, en otra porción de
Cataluña. Ñuño Sánchez, señor del Rosselló y Cerdaña, tratando de
[»oblar una tierra yerma y desierta, en su frontera de ürgell, región
llamada Baridá, también á causa de su excelente posición, le puso por
nombre Bell-ver (bdlo videre) (3).
Martín I manifiesta su reciente adquisición de la finca llamada Bell-
esguart, cu la carta que el 1.° de Enero de 1409, dirigía al baile
general de Aragón pidiéndole algunas variedades de árboles para la
Torre que hauem nouellament comprada aci en lo terretori de Barchi-
}i(>na.
Ambos documentos nos convencen de que á fines del año 1408 ad-
quirió esta finca cercana á Barcelona, con el propósito de pasar en
ella hi mayor parte del año, por convenirle así á su salud, según pro-
lija eiinfesión (4).
Para estancia real, ni el edificio reunía condiciones, ni la huerta
contigua contenía buenos frutales, según convenía á un monarca. Por
il) Sotas hiBtóricns de SarrUi, vol. I, p&g. 2^52, (Barcelona 1901,.
(2) Registro 2.'6l, folio 100, (Arch.Ar.).
(3) l'rivtlégea et tilres municipatix de Roussillon et de Cerdagne, por Alart, (Perpiíián 1878;,
|)&g. V¿2.
(4) Véase la carta que luego copiamos.
eELLESGUART, REAL SITIO DE MARtlN I 25
consiguiente, vemos ser el j)rimei' cuidado de D. Martín subsanar am-
bos inconvenientes Hallándose ya en la estación propicia para las
plantaciones, trata de procurarse un esclavo experto é inteligente, ca-
paz de dirigir y cultivar acertadamente los frutales que deseaba ad-
quirir, prefiriéndolo casado, y envía á buscarlo á Mallorca, en fecha
de 15 de Diciembre de 1408. Y el 1." de Enero de 1409. escribe al baile
general de Aragón para que al mismo objeto de arreglar su huerta
de Bellesguart, le remita empelts de les peres de ventó y empelts de les
macanes de Taracona de totes na^ures, encargándole la mayor dili-
gencia, pues estaba á punto de terminar la época propicia para los in-
gertos.
Mientras solicitaba de Zaragoza buenos perales y manzanos, pedía
á Caspe cepas de rahns de salvar. Instando al Comendador de dielia
ciudad el envío de sarmientos barbados aptos para trasplantar.
Era costumbre general en los siglos xiv y xv, arreglar los jardines
de los soberanos con árboles frutales de la mejor calidad, en vez de
buscarlos de frondoso ramaje, como se practica en nuestros tiempos.
Se sabe del palacio real de Barcelona, que su jardín sólo contenía ce-
pas y árboles frutales (1).
Continuamos íntegras las tres interesantes cartas antes referidas.
(Registro 2252, folio 3 la primera, y folio 12 las otras dos, del Archivo
general de la Corona de Aragón).
Lo Rey.
Procurador Heyal. Segons per altre letra vos haueni escrit nos
hauem comprat a9i en lo terretori de Barchinona vna Torre a la qual
hauem mes nom bell esguard hon la maior partida del any entenem
habitar e 390 per sanitat plaer deport de nostra persona. E com nos
haiam mester en la dita Torra I bon Esclau qui fos apte axi de plan-^
tar arbres com de empeltar e conrear aquells e de totes altres coses'^
necessaries a cultiuar e endre9ar vergers orts o jardins E haiam entes
que aquí na de bons Manam uos que encontinent vista la present vos
informots diligentment si tal sclau porets trobar e posat cars que lo
senyor de qui sera no volgues aquell vendré Manam vos quel fa9ats
estimar 90 que valdrá e pagats ho tantost. Et si per uentura lo dit
sclau hauia muUer ja ho amariem mes per 90 que puxen estar abduy
pus asseguradament en la dita Torra. Pero es necessari que al pus
prest que fer se puxa lo dit sclau nos trametats car lo temps en lo qual
los arbres se deuen plantar es fort prop e seria mester que ja hic fos.
Sobre a9o tranietem aqui a vos en Gabriel garcez portador de la pre-
sent lo qual ha carrech nostre de teñir vosen aprop diligentment en
manera que breument haiam del dit sclau bon recapta Dada en Bar-
(1) Colección de documentos inéditos del Archivo general de la Corona de Aragón, t. VI,
p&g. 345.
26 F. CARRERAS Y CANDI
chinona sots nostre segell secret ú XV dies de deenibre del any
MCCCCVIIL— Rex Martinus.
E trainetets nos com pus prestament porets cera vermella per asse-
gellar. E hagen hi per a hivern e estiu qnar ja hauem despesa tota
aquella quens hauiets tramesa.
Dominus Rex mandauit mihi Bernardo medici.
Dirigitur procuratori Regio ]\Iajorice.
Lo Rey.
Batlc general. Com nos vullam fer plantar e empeltar diuerses na-
tures de arbres en la Torra que hauem nouellament comprada aci en
lo terretori de barchinona, E entre los altres desijem hauer deis em-
pelts de les peres de uento Manam vos que decontinent deis dits eni-
pelts nos trametats de totes natures e en cada maQ fets hi I albara en
manera que hom conegue de qual natura sera. E digats de partnostra
an Johan de tudela quens trameta empelts de les macanes de Tara-
9ona de totes natures e quey faca axi mateix albarans en cada mac E
a90 no dilatets car ja duymes serem en lo temps que les dites coses se
deuen empeltar. Dada en barchinona sots nostre segell secret lo primer
dia de Janer del any MCCCCVIIII —Rex Martinus.
Dirigitur baiulo generali Aragonis,
Dominus Rex misit eam signatam: expeditur B' rnardus medici.
Lo Rey.
Comanador. Com nos vullam fer plantar e empeltar diuerses natu-
res de arbres en vna Torra que hauem nouellament comprada agi en
lo territori de Barchinona. E entre les altres coses desijem hauer de
les parres que son aqui de rahims de sainar. Pregam vos que si per
uentura en lo uostro ort o possesio ha qualque verga que sie venada e
bona per tresplantar que aquella decontinent nos trametats. E si per
uentura uos non hauets veiats sins en porets hauer de qualque perso-
na en manera quen haiam bon recapta. Si verga ab ses rayls no po-
dets trobar que sie bona per transplentar trametet nos aldemenys de
les vcrgues o sarmens de les dites parres. E en a^o no haia falla quar
plaer nosen farets. Dada en barchinona sots nostre segell secret lo pri-
mer día de Janer del any MCCCCVIIIL— Rex Martinus.
Dirigitur Comcndatori de Casp.
Habían transcurrido más de quince días desde que el rey arbi-
traba (le Matcu de Hoscos su procurador en Mallorca, el esclavo agri-
cultor para Bellesguart, cuando hubo de escribirle para otros asuntos,
en 6 de Enero de 1409, añadiéndole en postdata el siguiente recorda-
torio:
«Lo Catiu ab sa muller de que altres vegades vos hauem scrit
BELLESGUART, REAL SITIO DE MARTIN I 27
quens traraetats per a la nostra casa de Bellesguard vos manam quens
traraetats com prestaraent porets quar fort lo hauem necessari. E tra-
metets nos ab temps la cera e brandons que hauem ops a la fest
de sancta María de Ffebrer en que nous podets de huymes massa
cuytar.»
No contento con esto, y vista la negligencia en cumplir el encargo,
Martín I aprovechó la ocasión de dirigirse al mallorquín Gregorio Bur-
gués, para encomendarle recordara al Procurador su deseo de poseer
el cautivo que le había ya pedido. Decía así la postdata de la carta
que en el propio 6 de Enero de 1409, le escribía (1):
«Molt vos grahim los ierres de la xemenea quens hauets trameses.
Pregants vos que tengats aprop lo nostre procurador reyal quens trá-
mete lo Catiu ab sa niuller de que ja li hauem scrit altre vegada.»
Si hemos de juzgar por la conducta del procurador de Mallorca en
este asunto, de la que seguiría en todos los demás, nuestra opinión ha
de ser poco favorable á su diligencia, pues parece evidente, que el
empleado palatino se atrevía á abusar de la proverbial bondad del
rey Martín.
En tanto era así, que transcurrieron los meses de Enero y Febrero
sin que remitiese el esclavo agricultor que deseaba para Bellesguart;
y cuando en Marzo recibió alguna queja del Monarca, contestó evasi-
vamente alegando, que, por no recibir, con posterioridad, nuevas ór-
denes suyas, suponía habría mudado de parecer, y por esto no atendió
al cumplimiento del encargo.
Entonces Martín I, en 23 de Marzo de 1409, reprendiéndole por su
negligencia, mostróse maravillado de ello, ya que no debía escribirle
dos ó más veces sobre un mismo asunto, sino á la primera verlo cum-
plimentado y mandándole comprar inmediatamente el esclavo y remi-
tírselo en el primer buque que se hiciere á la vela.
Continuamos la carta de que es cuestión (2),
Lo Rey.
Procurador reyal: vostra letra hauem rebuda en la qual entre les
altres coses nos hauets fet saber quel catiu queus hauiem manat quens
trametessets per la nostra casa de Bellsguard hauiets fet ben regone-
xer e portat acert preu pero que per tal com despuys nous en hauiem
escrit pensant que ho haguessem gitat a oblit nous sots curat de com-
prar e trametrel nos: de que som forts mereuellats quar á nos nons
qual scriure dues ne moltes vegades de vna cosa quar a la primera ho
deuets fer. Perqueus manam expressament que encontinent comprets
lo dit catiu el nos trametats ab la primera fusta que vinga tota dilacio
apart posada. Dada en Barchinona sots nostre segell secret a XXIII dies
(1) Registro 2252, folio 19 (Arch. Ar.).
(2) Eegistro 2252, folio 59 (Aroh. Ar.).
28 F. CARRERAS Y CANDÍ
de Mar9 en lany de la natiuitat de nostre senyor Mil CCCCVllII.— ReX
Martinus.
Diriííitur an Matheu de hoscos procurador Reyal de Mallorques.
Dominus Rex mandauit mlhl Bernardo medid.
Entretanto adelantaban las obras de construcción del real sitio de
Bellesguart, sin que otras no menos importantes, simultáneamente
realizadas en su palacio de Barcelona, ni la escasez de dinero en que
se encontraba, fuesen motivo suficiente para menguar la actividad
que á todas ellas imprimía Martín I. Dirigía los trabajos Jaime Sala^ á
quien vemos merecer el dictado de obrer maior, en 4 de Mayo de
1400, cuando encargaba á Leonart de Sors le entregara doscientos
florines, en la siguiente carta (1):
Lo Rey.
En Leonard: Coni nos haiam fort necessaris CC ñorins dor per a les
obres del nostre palau et de la casa de bellesguard sens los quals en
les dites obres nos pot a present procehir Pregam vos axi affectuosa-
ment com podem et manam que si jamay nos entenets en res seruir e
complaure donets encontinent an Jacme sala obrer maior de les nos-
tres obres o a qui ell volra los dits CC florins dor de qualseuol mone-
des que sien en vostres mans o peruenguen en lesdeuenidor per rabo
de qualseuol comissions o fets nostres que tengats. E que si cas era
que a present non tengats de nostres quals hi bestregats deis vostres
quar despuys los cobrareis deis affers que fariets. E en ago per res no
metats dilacio o excusado alcuna quar gran deseruey nosen fariets.
Dada en Barchinona sots nostre segell secret á IlII dies de Marg del
Any Mil CCCC Nou.— Rex Martinus.
Dirigitur an Leonard de sos.
Dominus Rex mandauit miclii Bernardo medid.
Leonart de Sors, en vez de entregar aquella suma de tanta necesi-
dad para proseguir las empezadas construcciones, siguió una actitud
semejante á la del procurador de Mallorca: dio al Rey la callada por
respuesta. Transcurridos catorce días y sin ánimo de dilatar los pagos,
Martín I renueva la orden á Sors, en términos más conminativos, esto
es, disponiendo entregar en el acto los doscientos ñorines al emisario
l»ort;i(l(ir de la real orden (2).
1.U Rt;y.
En Leonard: Laltre día vos tramesem una letra ab queus prega-
\i< in e manauem que com nos haguessem fort necessaris CC florins dor
(1) Begistro 2252, folio 49.
(2) Registro Í2262, folio 56.
BELLESGUART, REAL SITIO DE MARTJN I 29
per a les obres de nostrc palau e de nostra casa de Bellesguard los nos
trametessets de qualseuol monedes que fossen en vostres mans o per-
uenguessen en lesdeuenidor per raho de qualseuol comisslons o fets
nostres que tenguessets E que si non toniets de nostros quels ne bes-
traguessets e quels cobrassets despuys deis fets que fariets. E de vos
no liauein hauts los dits CC florins dor ne resposta. Perqué mereue-
llantsnoson molt pregam vos eus niananí quels dits CC ñorins dor nos
trametats encontinent per lo portador de la present lo qual vos trame-
tem tansolament per aquesta raho ens trametats a dir sins en caira
'fer compte. Dada en Barchinona sots nostre segell secret a XVIII dies
de Marc del any MCCCCVIIII— Rex Martinu^.
Dirigitur an leonard de sos.
Durante el invierno de 1409 ó sea mientras se construía la regia
estancia deBellesguart, no dejó de frecuentarla Martín I. Lo comprue-
ba su carta del 3 de Febrero, en la que mencionaba á Eanión de Mur
lo raemoriíd qui fo concordat en la torra nostra de bellesguart presents
mossen P. tor relies e lo IWesorer (1).
El verano y otoño de 1409, lo pasó en Bellesguart, yendo á menudo
á la Capital La fecha del paso de la corte á dicha casa de campo, debe
fijarse á fines del mes de Junio, según es de ver de la carta que, en
13 del propio mes y año escribía al Abat de Santas Creus, á fin de que
le enviara un monje para el servicio de su capilla, mayormente ahora
que se trasladaba á Bellesguart (2).
Lo Rey.
Honrat abat: laltre dia passa en Sardenya, per seruir á nostre
molt car primogenit lo Rey de Sicilia, frare johan steue del vostre orde
lo qual era segon reebut en nostre Capel la. E ara per absencia sua
noyc ha sino frare Domingo Vinader lo qual continuament ha estar en
nostre seruey. E no pot tant be entendre en guardar la dita nostra
Capella coni farien dos qui ordinariament hi deuen esser presents.
E maiorment ara com deuen anar a la casa de bellsguard en que sera
mester que sia pus diligentment entes en la Custodia de la dita Capella.
Perqueus pregam quens trametats encontinent lo monge quens sots
tengut trametre per seruey de la Capella dessus dita. E no hi metats
dilacio alcuna. Dada en barchinona sots nostre segell secret a XIII
dies de juny del any MCCCCVIIII —Rex Martinus.
Dirigitur al Abat de sanctes creus.
No se crea que, residiendo el Soberano en Bellesguart, las obras se
hubieran terminado. Durante el verano de 1409 se trabajó continua-
(li Registro 2252, folio 36.
(2) Registro SS52, folio 86.
30 F. CARRERAS Y CANDI
mente, y para imprimirles mayor actividad, envió á buscar quince ó
veinte sardos á Pere TorrelJas (1).
Lo Rey darago
Mossen Pere: Com nos haiam mester per a les obres de la nostra
Casa de Bellesguard vns XV o XX Sards ab vna Sarda que sapia
pastar de edat de XXXV en XL anys Manam vos que si vos nauets de
vostres los dits Sards e Sarda nos trametats decontinent per les pri-
mores bonos fustes que vinguen aci. E si per ventura vos non hauets
tenits manera e fets ab nostre niolt car flU lo Rey quens en trameta
bon recapta cosa sera en que trobarem gran plaét*. Dada en la nostra
casa de bellesguard sots nostre segell secret a III dies dagost del Any
de la natiuitat de nostre senyor Mil CCCU VIIII.— Rex Martinus.
Dirigitur a mossen P. torrellas.
Mucha afición mostraba ei Rey por los habitantes de Cerdeña, ya
que en su casa de Valldaura tenía esclavos de la misma procedencia.
Es prueba de ello el pregón dado en estos mismos días, á fin de captu-
rar á tres esclavos .sardos que se le habían escapado de allí.
Torrellas, cuando recibió la transcrita carta del Rey, formaba
parte de la ai-mada aragonesa de Cerdeña, donde estaba el hijo de
Martín I. A la sazón los rebeldes habían recibido importantes refuer-
zos que les trajo el Vizconde de Narbona, haciéndose la lucha más
empeñada que nunca. Es de suponer que, del teatro mismo de la
guerra, quince ó veinte prisioneros pasaron á formar parte de la baja
servidumbre de Bellesguart.
Antes de proseguir esta breve reseña de Bellesguart, llamamos la
atención de los literatos acerca la correspondencia que reproducimos,
pues se trata de un modelo de literatura catalana. Entonces tenía
Martín I, como secretario, al docto literato Bernat Metge, de quien se
lian ocupado Milá y Fontanals, J. M. Guardia, José Coroleu y última-
mente Antonio Bulbena bajo el modesto nombre de V Editor, al repro-
ducir en un solo volumen, dos de sus obras en prosa. {Lo sompni den
licvnat Metge. Ab gran diligencia revist e ordenat. Afegida no vament la
liiütoria de Valter e de la pacient Griselda per lo niateix Bernat Metge
arromangada. Barcelona: estampa de Francisco Altes, M. DCCC. XCI.)
Da la casualidad que toda la correspondencia de Bellesguart fué
redactada por tan celebrado autor, como lo demuestra su firma estam-
pM(l;i al pie de algunas de las cartas y la particularidad de formar
parle del registro de su cargo las que no la llevan.
L'na circunstancia que creemos ha escapado á sus biógrafos, hare-
mos nnt.ir vu 1,1 presente ocasión. El secretario de Juan II y de
Martín I, el jitildado estilista, buen latinista y esclarecido poeta,
(1) Registro 2252, folio lOB.
BELLESGUART, REAL SITIO DE MARTIN I 31
poseiú tan mal la lengua castellana, que cuando el Soberano le man-
daba escribir en este idioma, producía unas epístolas tan desgracia-
das, que desdecirían de la posición que ocupaba, si, hasta entonces,
tales ejemplos no hubieren sido sobrado frecuentes (1).
Fiter é Inglés explica con referencia al real sitio de Bellesguart,
que en el año 1409, huyendo de la peste que se cebaba en Perpiñá, el
papa Benedicto XIII residió allí corta temporada con el Rey (2).
Cabe suponer, que, la mayor parto de las alegrías y sinsabores,
que, durante el año 1409 experimentó JMartín I, que no fueron pocos,
ios tuviera en Bellesguart. De una de las primeras, esto es, de la vic-
toria que su hijo tuvo en Cerdeña sobre San Luri, hizo gráfica pintura
el secretario Bernat Metge, dando interesantes detalles de como el Rey,
asomado en la ventana de su habitación de Bellesguart, vio llegar de
Levante la galera portadora de la nueva del suceso, con otros por-
menores, según se verá, por el apartado de su carta á Pere Torrellas,
fecha á 22 de Julio de 1409, que reproducimos (3):
«Papiats que digmenge a XIIII del present mes estants en la casa
de Bellesguard e desijants molt saber novelles de nostre molt car pri-
mogenit lo rey de Sicilia e de la sua host veem de la finestra de la
nostra cambra venir una galea de les parts de levant que arriba en la
pía ja de Barchinona e a cap de un poch fo ab nos en G. Pujada quins
dix que la dita galea venia de Sardenya e que portava bona nova pero
que ell encara no la sabia: e apres fort poch estants nos en la dita
finestra veem venir mossen Jacme Roure et en Johan Barthomeu
ab III haráuts fort corrents e abans que fossen dos trets de ballesta
prop de la dita casa de Bellesguard comengaren tots a cridar a altes
veus e vengueren cridant victoria victoria Avago et Sanct Jordi.
E pujants alt en la dita casa faerennos reverencia ens donaren les
(1) Como modelo de semejante género epistolar reproducimos la carta siguiente
que nos viene á mano (Registro 2252, folio 12).
El Rey.
Bayle general. Como nos por vs de nuestra persona hayamos feyto a<;i comprar
certa pelliceria de Nichulau cosco mercadero de Barchinona Rogamos vos assin
affectuosament como podemos que si de res nos cohdiciades seruir que de los dinerio»
de nuestra cort que eon en<;a vos pagaedes Inep-o dozientos e doze florines doro daragon
a que munta lo precio de la dita pelliceria al fiel nuestro Jacme cosco por el dito Ni-
cholau. E en la paga que lin faredes recobráis de aquell la present com apoca. Car
nos mandamos al Maestro racional de la nuestra cort e a qualquiere otro de vos boidor
comptbS que vos posant en data la dita quantia e restituent la present com lapoca
sobredit.H aquellos no obstant que execute de nuestro Tresorero no hi sea entreuenida
reeba en vuestro contó toda diñcultat remouida. Certificando vos que desto nos faredes
special plañir et seruicio el qual vos agradesceremos muyto Dada en barchinona
dins nuestro bicUo secreto lo primero dia de Janero del anyo MCCCC VIIII.— Rex Mar-
tinus.
Dirigitur baiul 7enerali Regni Aragonis.
Dpminus Rex misa.t eam signatam: expeditur Bernardus medioi.
(2) Anuari de la As^onaciú d' excursiot^s catalana, any I, página 212.
(3) Colección de documentos inéditos del Archivo general de la Corona de Aragón, vol. I,
página 116.
32 F. CARRERAS Y CANDI
letres que ijortaven del dit nostre iiiolt cart primogenit e de vos e deis
altres ens recitaren largament lo fet de la batalla e de la victoria que
sen era seguida e de la preso de Sanct Luri les quals havia XV joros
que eren estades fetes e encare res non sabieni de que haguem inexti-
mable plaer e singular consolacio e per sobres de goig prenguennios a
plorar.»
p:sta ventana de Bellesguart, hay que creerla fuese muy predilecta
del Rey de Aragón. Otro documento presenta á Martín I tratando en
ella negocios particulares con sus servidores, durante el invierno
de UOÍ), cuando aun no habitaba su casa de campo. Así, decía el Rey,
en 1-2 de Marzo del antedicho año, que, hallándose en la ventana de
Bellesguart dispuso en qué forma debían ser pagados ciertos cortinajes
que mando traer de Flandes (1).
A fines de aquel verano, ó sea á 17 de Septiembre de 1409, tuvo
lugar en la capilla del real sitio de Bellesguart, el matrimonio del Rey
con Margarita, hija del Conde de Prades y de Juana de Cabrera No
hubo grandes regocijos, pues el reciente fallecimiento del príncipe
heredero los impedía. ¡Vlás aún: Martín I, en la carta que el 16 de
Septiembre escribía á muchas entidades de sus reinos notificando tal
enlace, lo hacía indicando seguir en ello una razón de estado: haiiem
per necessitat de fots nostres Regnes e ierres elegida per la gracia de
deu' en muller riostra e Reyna vostra la egregia dona Margarita de
Prades la qual dema deus ajudant hañem deliberat esposar e ab ella
solemaitzar nostra henauenturat matrimoni en fag de sancta mare
ecclesia (2).
Bien concurrida se halló la ilustre vivienda en el primer año de su
construcción, ya que el casamiento del Soberano, la estancia del Pon-
tífice y la continua residencia que de ella hizo Martín I, había de aca-
rrear animación y vida en aquel hasta entonces solitario rincón de los
montes de Cerola.
Pronto h extinguirse la vida del Soberano catalán, no quiso la Pro-
videncia que, en una mansión construida con tanto gozo, cerrase sus
ojos á la luz del mundo.
(IJ Lo Rey.
Mossen Ramón: Vostra letra hauem reebuda per la qual nos fets saber que per raho
de les HSKÍgnacions per nos fetes sobre lo fet do la marcha vos no hauuts de que pagar
aquella «los milia noucents XVLII florins Vil sous VII drs. barchino. esos los quals vos
hauein manat quo pagassets an Jacme cosco per los cortines et altres robes quen Do-
mingo sandio ha fetes venir de F'flandres a vs e ohs nostre E mereuellam nos molt de
si;i> quüHH fot» saber Car vos stant aoi nos aci com sabets faem a nostre comptador
curta BHsignacio sobre les nostres rendes et les demandes que deuiets fer e exceptam
ne la dita marcha a fi que sen pagassen les dites cortines et robes £ af» si heus recorda
rriidyiiiem sfmit eti tu /nieslra dt lu tiunlra casa de HeU<-xg\nird E vos ladoncbs nos respongues
que per moltes assignacions que nos faessem vltra les dessus dites no pagariets res tro
H tant que los dites coses per nos uos present assignades baguesseu compliment (Re-
gistro 2¿52, foli.i 51).
(a) ReKÍütro, 'J251, fol 1S5.
BELLESGUART, REAL SITIO DE MARTIN I 33
Después de residir el invierno y parte de la primavera de 1410 en
Bellesguart, A mediados de Mayo pasó el Rey á Valldoncella, en cuyo
monasterio, según es sabido, murió á los pocos días, sumiendo á sus
reinos en intrincado debate de sucesión.
Con el fallecimiento de su fundador, acabó el apogeo de la real casa
de campo, hacia la cual sus sucesores en la corona no demostraron ya
predilección alguna. Sin embargo, no fué abandonada del todo por las
reales personas, aun cuando hubiese pasado su preponderancia. Así
vemos á la reina Violant ó Yolant de Bar, viuda de Juan II, morar
en Bellesguart los últimos días de su vida, según expresa el dietario
municipal de la ciudad de Barcelona en jornada de 3 de Julio de 1431,
al continuar:
«Dimarts III. — Aquest jorn en la nit precedent dues hores apres
mige nit passa de aquesta vida la Senyora Reyna dona Yoland dins la
casa o torra de Bellesguard del territori de Barchinona.»
Efímero papel jugó la casa real de Bellesguart en lo restante del
siglo XV. Tan poco importante fué, que escapa á toda investigación.
Cabe empero suponer que seguiría formando parte del patrimonio
real, hasta los primeros tiempos de la Edad Moderna.
En el siglo xvi pasó á la categoría de torre de recreo más ó menos
explotable. En tanta manera, que del año 1588 es un proyecto de tras-
ladar á Barcelona el agua de la mina de Bellesguart. La forma como se
trató de ello en el consejo ordinario de la Ciudad, jornada de 4 de
Marzo de 1588, aparece en el acuerdo inserto en el libro de las deli-
beraciones de los consejos, que reproducimos fielmente copiado de su
original (1):
«E quant al pensanient tingut per dits magnifichs Consellers que
per la falta que la present ciutat te de aygua de font per venir ne poca
per les canonades y fonts de la present ciutat haurien pensat si se
compraría la casa de Bellesguart en la qual ha vna rahonable font en-
tenent majorment que al present se porie hauer ab comoditat o tambe
si se procurarla de hauer ne de altre part: Lo dit Consell feu deslibera-
tio y conclusio que dites coses sien proposades en lo concell de cent
jurats quin fara la desliberatio que ben vist li sera.»
La real morada no iría á figurar entre las pertenencias de la egre-
gia ciudad de Barcelona, á juzgar por el hecho de que no vuelven á
tratar de ella las actas de sus consejos y verla en adelante en manos
de particulares.
Recuerda hoy aun la situación de la antigua marsión real de Be-
llesguart, unos pobrísimos restos sitos detrás de la iglesia de Nuestra
Señora de la Bonanova, en el distrito de San Gervasio de Casólas.
(1) DeUiberacions del Concell 4588, folio 68 (Archivo municipai de Barcelona).
1901 3
3^ F. CARRERAS Y CANDI
Consisten ellos, en dos torres arruinadas, por entre las cuales pasa el
camino de subir al cementerio de San Gervasio, y un fragmento de
muro almenado.
Aparte de lo que antecede, todo es moderno en la actual casa,
que ocupando el antiguo solar del real sitio de Martín I, todavía con-
serva el nombre con que la bautizó el monarca aragonés sirviendo para
fines humanitarios.
Numismática sarpa
DEL SIÜLE XIV
■*==^g)(^^^'
Ceea de Viladiglesies
Al Sig. Vincenzo Dessí, á Sasser (Cerdenya).
Conegut vostre nom com á hu deis prominents numismátichs sarts y
conegudes vostres publicacions á propósit de les ceques d' Alguer,
Sasser, Bosa, etc ; davant lo projecte que abrigan de donar á Ilum una
obra sobre la numismática de la illa de Sardenya, he suposat vos in-
teressará conexer alguns documents deis que 's recondexen en lo valiós
arxiu general de Barcelona, puix vos esclarirán estraordinariament,
los batiments de moneda portats á efecte en la ceca de Viladiglesies, y
d' una manera especial les costums de les persones qui en ella hi in-
terveníen.
Com vos no ignoran, lo castell de Viladiglesies, en lo mes de Fe-
brer del any 1324, vingué á poder del Rey d' Aragó, després de be
defensarse los nissarts qui lo custodiaven. L' exercit sart-aragonés,
avants de prosseguir sa ruta vers lo castell de Caller, sots lo coman-
dament del fill primogénit del rey Jaume II, dexá una forta guarnició
á Viladiglesies, hont hi resta també la infanta Teresa, qui havía vol-
gut acompanyar á son marit en aytal campanya.
No tardaría en funcionar á Viladiglesies, la ceca especial hont s'
encunyaren monedes á nom del Rey d' Aragó. Que dita ceca tre valla-
va en r any 1331, ho proven los privilegis de que tením de tractar en
primer terme .
Segurament convindreu ab ma opinió, de constituhir, dits privile-
gis, un interessant document mitjaeval. La organisació donada ais
moneders y obrers, resulta tant ó mes ampliada, en sentit descentrali-
gador, de la que tingueren en la matexa época la major part deis gre.
mis de la ciutat de Barcelona. Jamay hauriem pogut creure, que, á
35 F. CARRERAS Y CAXDI
una ceca de població de la poca importancia que tenia la predita vila
sarda, se 11 poguessen concedir aytals preeminencies y exencións. Jo
crech'que en elles s' hi entreven la mira política del Monarca aragonés
de guanyarse simpatíes en lo non reyalme per mija de Ilibertats, que
agrahiríen les persones qui d' elles n' eren obgecte. Es cert que diu lo
Rey en sos privilegis, esser la cansa que lo movía á publicarlos, son
desitj de que regnás la major confraternitat entre lo Mestre de la ceca
y los seus subordináis,
Primerament fou disposat, que, no pogués entrar en aquella casa
de moneda, ningú quí no fós íill ó net d' algún deis seus trevalladors.
Ab lo qual sembla degués quedar vinculat, lo trevall de la ceca de Vi-
ladiglesies, en los successors deis qui n' eren obrers en 1331. Al esta-
blirse, empero, que lo Mestre no hi podía donar cabuda á hom qui no
fós vassall del Rey d' Aragó y vehí de la vila, s' exceptúa va lo cas de
que hi consentissen tots los altres obrers.
Los raoneders de Viladiglesies teníen assegurada la sua subsisten-
cia per sempre mes, creantse una bustia, bossa ó tresorería, hont s' hi
ingressaven quantitats procehidores de molts conceptes diferents, les
quals veureu puntualisades en lo document. Y axis, si s' imposibilita-
ven peí trevall, fós per malaltía^ per senectut ó vellesa, ó per altre
concepte, cobraven lo salari de sempre.
Les questions y baralles entre los de la ceca, eren severament cas-
tigades ab suspensió temporal del trevall, pena pecuniaria y esmena
de la injuria, segóns acordasen los demés compauys. Axis se diu que
aquell qui deya á altre páranles injurioses, ó li pegava ab la má, de-
xaría de trevallar per deu díes, entregant cinch sous per la bustia; si
agafantlo pels cabells lo tiras per terre, quedava excluhit vint dies del
trevall y pagava deu sous per la bustia; si li pegava ab lo peu ó puny
era lo cástich de deu dies de no trevallar y vint sous de ban; si ab ga-
vinet li feya sanch, quaranta dies de no trevallar y vint sous de ban;
si lo matava^ devía esser prés y entregat al Rey, á quina cort n' era
reservada la deguda justicia.
M' ha aparegut interessant aquella ordinació, hont, lo Sobirá auto-
risa ais obrers per declararse en vaga y fer justicia al Mestre de la
ceca, en cas de que aquest, obrant injustament, no atenía á la caució
ó seguretat que se li dona va.
La idea de confraternitat se fá manifesta al particulárisar lo faedor
en lo dia de la mort d' algún obrer. Tots sos companyons devíen ple-
gar los trevalls en senyal de dol, axis com rellevarse en la vetlla del
scu cors y enterrarlo decentment, multant ais qui no hi acudissen á la
Vftlla y sepultura.
Los dclictes de falsificador y d' amancebament ab la muller d' altre
oljrcr de la ceca, eren punits excluint, ais qui los cometíen, de la so-
eietat y trevall.
Tanl enllá arrivá lo Rey en honoriflcar ais qui eren obgecte d'
NUMISMÁTICA SARDA DHL SIGLE XIV 37
aquest privilegi, que, los eximí de les jurisdiccions locáis, erigint álm
d' ells en álcaldi qui devía administrarlos justicia. No deu confondres
aquest carrech especial ab lo d' alcayt del castell, lo qual existí sem-
blantment á Viladiglesies. No s' en parla gayre deis álcaldis de la
ceca en aquestos privilegis, puix foren obgecte d' una concessió es-
pecial, donada separadament per lo Sobirá, en la matexa data. Tota
vegada que no vos reproduiré textualment eix petit document, vos
explicaré miés per menut lo que contenía.
En la predita jornada de les Kalendes de Juliol de 1331, lo rey
Anfós autorisava ais obrers de la ceca de Viladiglesies pera aplegarse
en capítol dintre de la casa de la moneda, á fí d' elegir á hu deis mo-
neders y á hu deis obrers en álcaldis. Los elets devien, tot seguit, jurar
en mans del Capitá de la Viladiglesies, que donaríen lleyal compli-
ment de justicia á qualsevuUes controversies ó querelles civils que 's
moguessen entre ells, podent imposar punicions civils ais delinquints.
Si per crim de falsificació ó altre consemblant, algún d' ells meres-
qués lo derrer suplici ó la mutilació d' algún membre, lo Rey vol sía
tramesa á la sua Cort, la causa y sentencia (1).
Sobre lo funcionament de la ceca aragonesa de Viladiglesies en 1'
any 1352, lo document que ab lo nombre II vos he continuat, vos ho
donará á entendre prou clarament. .
Los privilegis deis obrers de la ceca de que es questió, foren per-
duts y disipats en hu deis contratemps que les armes aragoneses su-
friren á Cerdenya, durant lo regnat de Pere lo Cerimoniós. Lo 13 d'
Agost de 1355, trovantse, aquest Monarca, en lo castell de Caller, res-
taura y confirma en totes ses parts, los privilegis y decrets de son pare
lo rey n' Anfós, en favor de la ceca de Viladiglesies (2). Y com si axó
fós poch, lo Sobirá posa ais obrers y moneders, sots sa especial pro-
tecció y salvaguardia, eximintlos d' host y cavalcada, axis com de
tota contribució y servey comunal ó municipal (3), etc. Axó los auto-
risava á posar lo penó reyal damunt del ediflci en manifestació d'
aquesta salvaguardia.
Altre reforma hagué á fer lo rey En Pere á Viladiglesies, en 1355,
pertocant al valor de la moneda. Disposá, que, per una marca sardes-
ca de plata se donasen en avant, cent cinch sous menuts, en lloch deis
cent dos sous menuts Alfonsins, que flns llavors s' havíen acostumat do-
nar, com veureu ab la ordre, que, signada ab lo nombre III, está aquí
íntegrament copiada.
Avants de posar punt final á les presents aclaracions históriques
sobre la ceca de Viladiglesies, vos faré conexer de passada, un estat
(1) Registre 1060, foli 96.
(2) Axis resulta del document qne publioám ab lo nombre I.
(3j Non teneantnr faceré bostem vel canalcatam vel daré ant mittere in aliqua
qnestia vel sernitio aut vsaticbo ant in aliqna exacoione vel demanda vel conmnnita-
te regali vel vicinali qnod dici vel nominari possit. (Registre 1030, foli 97).
38 F- CARRERAS Y CANDI
del any 1358, que serveix per judicar del grau d' importancia, que, en
r ordre interior d' aquella població, hi tenía lo Mestre de la moneda.
Tractant d'avituallar degudament al castell de Viladiglesies, lo Rey
d' Aragó, desde Barcelona, en data de 26 de Marc de 1358, ordonava
á tots los seus oficiáis locáis, hi contribuissen anyalment, en la forma
que en la provisió era establerta Examinant la ordinació reyal, s' ob-
serva, cora lo ^[estre de la ceca hi tributava ab una quantitat de blat
igual á la que era imposada ais castlans, alcayts, capitá y camar-
lench (1).
Y no haventhi materia per passar mes avant. vos prega honorable
Sr. Dessí, vullau treuren major proflt de lo que ha aplegat sobre la
ceca de Viladiglesies, del que n' ha tret quí es vostre servidor
Feancesch Carreras y Candi.
DOCUMENT NOMBRE I
(Registre 1030 foli 92j
Nos Petrus etc. Attendentes pro parte Magistri Monetariorum et
operariorum monete alfonsi que cuditur et in futurum cudetur in villa
Ecclesie insule Sardinie ac presidentum in ea deseruientium in eadem
quandam Cartam nostrara que suscitatis rebellionis preterite témpora
in Sardinia Ínsula potissime in dicta villa quod per rebelles nostros
diruta extitit et destruta ainissa fuit et post modum absque sigillo re-
(l) Ordinamus qnod annis singalis infrascripte persone teneantnr et babeant po-
neré seu inmittere in Castro dicte ville per ipsius furnimento quantitates tritici in-
feriiis declaratas videlicet vnas quisque duoram Castellanorum seu Alcaydcrum
ipsius Castri Triginta starella tritici ultra illud quo indigebunt per eorum proprio
furnimento. ítem Capitaneus dicte viUe alia Triginta ítem Assessor dicti capitanei
alia Triginta. ítem Magister múñete dicte ville alia Triginta ítem Camarlengus ip-
sius ville alia Trigiata. ítem scriptor secce seu monetarie dicte ville Quindecim sta-
rella. ítem scriptor prefati Camarlengi alii Quindecim. ítem actor manumissorie
SerenisBtmi principia domini Alfonsi diue recordationis Regia Aragonis genitoris nos-
tri \iginti starella. ítem vicarius ville Messargie decem. ítem vicarias de Domus
noues Decem ítem consiliarii dicte ville ecclesiarum videlicet quolibet anno dum
admitetur in consiliarium decem starella que dentur Ínter omnes dictes consiliarios
Quinquaginta starella ítem scriptor dictorum consiliariorum Decem. ítem dicti
Consiliarii ponant quolibet anno in dicto furnimento ex denariis imposicionum co-
munium que levantur in dicta villa Ducenta starella frumenti. ítem dictus Camar-
lengus debeat et teneatur ex denariis curie furnire quolibet anno supradictum Castrnm
de acet.t lignis armia carnibus salsis operibus et alus rebus necessariis dicto Castro
ordinamus insuper quod dictum Irumentum ponatur intus Castrum predictum pro
magatzemo Anno quolibet in mense Augusti predicti excepto furnimento ponendo
per consiliarios qnod ooni uolumus die qua in consiliarios eligontur Quod quam super
furnimento ipso provideatur per hunc modum videlicet quod dum vetus frumentum
extriibetur quod consiliarii possint ordinare quod pastrices non audeant panes pras-
Bore ad vendendum nisi ex dicto veteri frumento quod ex predicto magatzemo steterit
donoo venditum fuerit totaliter et complete et etiam ipsi consiliarii possint ipsum
frumentum vetus Ínter habitatores dicti Castri dividere et alias ordinationes faceré
(Registre 10;^<2, foli b5).
NUMISMÁTICA SARDA DEL SIGLE XIV 39
perta nobis fuisse exhibitam cuius tenor talis est. «Nos Petrus dei
gratia Rex Aragonis Valencie Sardinie et Coráice comesque barchino-
ne: viso quodam priuilcgio per Sereníssinmm dominum Alfonsum alte
recordationis Regem Aragonis patrem nostrum concesso Magistro pre-
sidentibus operariis monetariis et alus deseruientibus in moneta que
cuditur et cudetur in villa Ecclesie ínsule Sardinie tenoris sequentis;
Nouerint uniuersi Quod Nos Alfonsus dei gratia Rex Aragonis Valen-
cie Sardinie et Corsice Comesque Barchinone interna consideratione
pensantes quantum expedit nostro culmini Regio ac toti rei publice
quod monetarii et operarii monete alfonsi que cuditur et in futurum
cudetur in villa Eclesie ínsule Sardinie ac Magister et alii presidentes
eidem et deseruientes in ea sub felici regimine ac statu conseruent
tranquillo iit ipsis rautuis et fraternis affectibus conuersantibus ex eo
moneta ipsa quietius et legalius cudi possit propterea huius scripti
nostri serie in f auorem dicte monete ad predictorum Magistri presiden-
tium operariorum et monetariorum et aliorum deseruientium in dicta
moneta humilis supplicacionis instancia in consilio nostro solerti et
matura deliberatione prehabita pro bono statu monete ipsius sequentia
prouidenda statuenda ac etiam concedenda. In primis igitur concedí-
mus et statuimus et ordinamus quod predicti nunc et in futurum
dictam monetam cudentes non recolligant seu recipiant in eorum con-
sorcio aliquem operarium uel monetarium nisi fuerit filio uel nepos
operarii seu monetarii aut ñlius filie operarii seu monetarii ... ipsa die
qua fuerit receptus in operarium uel monetarium faciat alus operariis
et monetariis conuiuium plene et obtime.— Ítem quod una quaque die
qua operari fuerint ipsi monetarii et operari mitant in una bustia dúos
denarios Alfonsi minutos de unaquaque f órnate de illo contrapes.—
ítem quo iidem monetarii et operarii mittant siue ponant in eadem
bustia in unaquaque ebdomoda singulos denarios minutos. — ítem
quod non accipiant plus argentum in una fornate quam in alia et si in
aliqua de fornatibus acceperit aliquis plus argentum quam in alia per
Sex dies operari non posit immo det et soluat pro pena Quinqué soli-
dos qui ponantur in bustia supradicta —ítem quod operarii et mone-
tarii non accipiant compotum vnus plus qupm alius. Et si forte magis-
ter fuerit cohactus instanti necessitate omnes operarii et monetarii
operentur vnusquisque secundum posse suum. Et si forte aliquis de
operariis furatus fuerit contrapes uel cum eo fugerit a Magistro mone-
te ex tune non recipiatur in unitate vel societate eorum. Et si aliquis
de monetariis fugerit a Magistro cum compoto sic delude a societate
et unitate ejectus penitus et exclusus. -ítem si aliquis uel aliqui de
eisdem operariis ac monetariis fuerint iníirmitate detenti ita quod
non possint operari omnes operarii et monetarii donent singulis ebdo-
modis monetarii monetariis et operarii operariis infirmis inter omnes
videlicet tantum quantum quilibet ex eis lucratus fuerit. Et si forte
aliquis de operariis uel monetariis aut recogtpribus furatus fuerit in
40 F. CARRERAS Y CANDI
nioneta unde possit probari ex illa ora in antea non habeat societatem
vel vnitatem cum alus et in quacumque moneta cognitus fuerit in illa
lucrum habere non possit.- ítem quod si aliquis de operariis vel mo-
netariis inuentus fuerit falsator capiatur ab alus si fleri potest et tra-
datur Magistro. Et si aliquis alienígena operarius uel monetarius ve-
nerit inter eos et probatus fuerit falsator in societate vel unitate eorum
minime admittatur.— ítem si aliquis de monetariis uel operariis rixam
habuerit cum aliquo raanu eum percusserit uel ei aliqua verba injuriosa
dixerit cesset operari per Decem dies quibus elapsis soluat pro pena
Quinqué solidus qui ponantur in bustia memorata et faciat super hoc
illud quod alus visum fuerit faciendum. Et si aliquem de monetariis uel
operariis alium iratum manu per capillos acceperit et eum interra eie-
cerit cesset operari per viginti dies quibus elapsis donet et soluat pro
pena Decem solidos qui ponantur in bustia antedicta et faciat super
hoc quod alus super hiis visum fuerit faciendum. Et si aliquis de ipsis
operariis uel monetariis aliquem eorum cultello uel alus armis percusse •
rit et ex illa percusione sanguis exierit cesset operari per Quadraginta
dies quibus elapsis soluat pro pena viginti solidos qui ponantur in dicta
bustia. Et si forte ille uulneratus ex ipso uulnere obierit ille qui eum
uulnerauerit ab alus si possibile fuerit capiatur et nostro judicio reserue-
tur. — ítem si forte magister propter sui iracundiam alicui de operariis
argentum prohibere uoluerit uel compotum alicui de monetariis et lili
operarii uel monetarii fidejussionem sibi daré uoluerit et Magister acci-
pere noluerit onines alii operarii uel monetarii cessent ab omni opere
monete quousque magister justam causam reddiderit ob quam prohi-
be! argentum operario uel compotum monetario et postea ille operarius
uel monetarius faciant Magistro justicie complementum secundum
quod alus visum fuerit faciendum. Et si forte uoluerit eis Reddere in
qualibet ebdomoda in die dominica lo obratge e el bragatge secundum
quod in moneta nostra et predecessorum nostrorum dari consueuit om-
nes operarii et monetari cessent ab omni opere monete quousque ma-
gister eis iieddiderit lo obratge predictum. Et ipsa etiam die qua illud
obratge receperint cessent ab omni opere monete. — ítem quod si ali-
quis operariorum et monetariorum causa paupertatis uel longe infir-
mitatis aut senectutis non habuerit vnde possit sibi prouidere in vic-
tualibus omnes alii operarii et monetarii donent ei de peccunia que
fuerit in bustia supradicta vnde possit sibi in suis necessañis prouidere.
—Ítem quod si aliquis illorum sumptus fuerit ab humanis omnes alii
operarii et monetarii honorificent corpus eius et illud faciant cum de-
ccnti soleinpnitate sepeliri et operari cessent quousque sepultum sit.
Et qui ad vigiliam non fuerit det pro pena Duodecim donarlos. Et qui
ad sepulcrum non venerit vnam libram cere donet pro pena. Et qui ad
capitulum non venerit soluat pro pena duodecim denaiios.— ítem si
aliquis illorum vxorem alterius tenuerit et monitus a suis maioribus
ipsam dimitiere noluerit non sit iu unitate uel societate aliorum quous-
NUMISMÁTICA SARDA DEL SIGLE XTV 41
que ab ea fuerit penitu? separatas. Et si aliquis eorum ad vxorem al-
terius iuerit et monitus a suis maioribus recedere noluerit ab vnitate
et socictate aliorum eiciatur et expellatur quousquc ab illo recesserit
crimen.— ítem si aliquis operarius uel monetarius gladium contra suum
socium traxerit soluat pro pena Sexaginta solidos et per Quadraginta
dies cesset operari. Siquis uero operariorum aut monetariorum pede
vel pugno suum socium percuserit soluat pro pena viginti solidos et per
Decem dies cesset operari.— ítem si aliquis recogtorura monetarium uel
operarium manubrio petra pugno gladio aut alus armis percusserit
nunc quam maneat inter ipsos et si fleri poterit capiatur et illa captione
teneatur tamdiu quousque Centu.m solidos pro pena soluerit tamen si
ille percussus ex illa percusione mortuus fuerit ille recogtor si fieri po-
terit capiatur et eius punitio nostro judicio reseruetur. Si uero aliquis
recogtor operarium uel monetarium desmentitus fuerit donet pro pena
Decem solidos. — ítem si aliquis operariorum operante moneta de suo
loco contra suum socium surrexerit tenendo baculum uel cultellum uel
maylet uel mortale uerbum sibi dixerit soluat pro pena Decem solidos
et per Decem dies cesset operari. Si quis autem operariorum uel mone-
tariorum alcalde fuerit inobediens aut eum inhonoraberit aut pignus
defenderit donet pro pena Decem solidos et per Decem dies cesset
operari. — ítem quod aliquis Magister monete non recoUigat ali-
quem operarium uel monetarium qui non sit de dominatione nostra
habitator et vicinus nisi fuerit de uoluntate et licencia dictorum
operariorum et monetariorum dum tamen ipsi sufficiant ad operan-
dum et monetandum ipsam monetam sine dampno nostro et suc-
cessorum nostrorum ad cognicionem Magistri et custodum monete.
•—ítem quod operarii et monetarii et alii officiales et seruientes monete
respondeant et faciant justicie complementum sub examine nostro et
succesorum nostrorum et Magistri ac custodiorum monete cuilibet de
eis querimoniam proponenti et non sub examine cuiuslibet alterius te-
nentis locum nostrum dum tamen opus dicte monete durauerit —ítem
quod Magister operarii et monetarii possint constituere alcaldes qui
predicta omnia et singula teneri et obseruari faciant inter dictos opera-
rios et monetarios et custodiant et obseruent et custodiri faciant et ob-
seruari ea que ad legalitatem monete et ad vtilitatem et fidelitatem
nostram viderint faciendam. — ítem quod si dicti monetarii et operarii
aut alii officiales durante moneta incurrerint banna siue penas imposi-
tas super armis non portandas aut alia quecumque banna uel penas et
vicarius seu alii officiales nostri arma ipsa eis abstulerint quod illa tra-
dere habeat alcaldis dicte monete et banna armorum et alia non per
ipsum vicarium aut alios officiales nostros set per ipsos alcaldes ex-
higantur et quod inde euenerit ponatur in bustia antedicta. — ítem quod
de predictis penis et "bannis et de quolibet ipsorum habeat Magister
monete tertiam partem et Alcaldi tertiam partem et capitulum aliam
tertiam partem. Mandamus igitur Gubernatori generali insule supra-
42 F. CARRERAS Y CANDI
dicte ac Capitano dicte ville ceterlsque officialibus nostris presentibus
et futuris quod predicta orania firma habeant et obscruent et faciant
inuiolabiliter obseruari et non contraueniant nec aliquem contrauenire
pennittant aliqua racione In quorum omnium testimonium et robur
perpetué firmitatis presenti Carte nostre sigillum raagestatis nostre
appcndicium jussimus apponeudum Datum barchinone kalendas julii
Anno domini Miliesimo Trecentesimo tricésimo primo. Signum -\- Al-
fonsi dei gratia Regis Aragonis Valencie Sardinie et Corsice ac Comitis
Barchinone Testes sunt inclitus infans Petrus dicti domini Regis frater
Rippacurcie et Impuriarum Comes. Arnaldus rogerii de pallars. Petrus
de excrica. Otho de montechatcno. Berengarius carrocii. Sig -\- num
Guillclmi de pulchro uicino scriptoris dicti domini Regis qui de man-
dato ejusdem hec scribi fecit et clausit cum literis rasis et emendatis
in linea prima ubi dicitur... et in eadem vbi dicitur monetc Alfonsi. Et
nobis pro parte dictorum ]\Iagistri presidentum opcrariorum et moneta-
riorum humiliter supplicatum fuerit ut priuilegium predictum et omnia
in ipso contenta dignaremur de nostra sólita clemencia confirmare. Nos
vero dicta supplicacione admissa ad bonum statum predictorum proui-
dere volentes ut moneta ipsa quitius et legalius cudi possit cum presenti
Carta nostra dictum priuilegium et omnia et singula in eo posita et con-
tenta laudamus approbamus ratifficamus ac etiam confirmamus prout
superius sunt. Mandantes Gubernatori generali insule supradicte ac
Capitaneo dicte ville' ceterisque officialibus nostris presentibus et futu-
ris quod predicta omnia firmam habeant et obseruent et faciant inuio-
labiliter obseruari et non contraueniant nec aliquem contrauenire
permittant aliqua ratione. In cuius rei testimonium presente Carte
nostre sigillum appendentum jussimus apponendum. Datum Barchi-
none IX*' Kalendas Julii Anno domini Miliesimo Trecentesimo Tricé-
simo nono. Exa. P.^ Signum -\- Petri dei gratia Regis Aragonis Valen-
cie Sardinie et Corsice Comitisque barchinone. Testes sunt inclitus
infans Rairaundus berengarii Comes Montanearum de Prades inclitus
infans Jacobus Comes vrgelli et vicecomes Agerensis ffrater iferrarius
Barchinone Episcopus Otho de montechatcno Petrus galcerandi de
Pinosio. Sig -|- num Bartholomee de podio scriptoris dicti domini Re-
gis (jui de mandato eiusdem hec scribi fecit et clausit cura literis rasis
et emendatis in linea VI ubi dicitur iidem monetarii et operarii, etc.
Prospicientes insuper pro parte predictorum nobis humiliter supplica-
tum fuisse ut in presentera Cartara confirraare et graciam in ea con-
tenta sub infrasci'ipta forma augere de sólita clemencia dignaremur.
Idcirco dicte supplicacione annuentes benigne dictara Cartara et in eo
contentara huius serie confirraaraus per hanc eandem premissam
gradara araplinntes et superius dictis de speciali gracia concedentes
quod dicti Mogistri nionetarii operarii et alii presidentes eidera de-
seruientes in ea continué gaudeant et gaudere possint oranibus graciis
sui>crius'expressatis siue dicta raoneta continué aut per interualla
NUMISMÁTICA SARDA DEL SIGLK XIV 43
cudatur et cudendo et non cudendo ipsam ac si ipsa moneta continué
cuderetur Quibusuis excepcionibus seu verbis derogatomis expressatis
superius quod ampliacioni huiusraodi gracic sub quacumque uerborum
fama conceptis iubantur quomodolibet contrahire in aliquo non obs-
tantibiis dum tamen monete cudicio non cesset ciilpam aut neclio:en-
ciam eorumdera. ]\[andantes Gubernatoribus et vicariis insule Sardinie
et Capitaneo dicte viUe aliique officialibus nostris presentibus et futu-
ris quod dictain Cartam et ipsius confirmacionem et ampliacionem
hanc gracie memórate teneant perpetuo flrmiter et obseruent et contra
ipsas uel ipsarum aliquam non ueniant uel aliquem contrauenire per-
mitant aliqua racione uel causa. In cuius rei testimonium presenten!
fieri jussimus nostre magestatis sigillo munitam. Datum in Castro
Callari XIII die Augusti Anno a Natiuitate domini M^CCC Quinqua-
gesimo Quinto — Scripsit G.
Signum -f- Petri dei gratia Regis Aragonis, etc.
Testes sunt: Petrus dominus de exerica. Bernardus de Capraria. 01-
fus de proxida. Bernardus vicecomes Caprarie. Petrus ma9a deli9ana.
Ffuit clausum per Matheum adriani prothonotarii sigilla tenentem
domini regis prefati.
DOCUMENT NOMBRE II
(Eegistre 1020, foli, 69 v.)
De Nos en Pere etc. Ais faels seus los Camarlenchs de viladeigleyes
el Maestre de la moneda quis bat en la dita vila el actor de la Mar-
messoria del senyor Rey Nanfos de bona memoria pare nostre Salut e
gracia Ja per altre letra nostra vos hauem manat que tingats se-
questrada en vostre poder tota la moneda qui en vostre poder es e
será per rahó deis dits oficis e daquella no responsessets a la dita Mar-
messoria ne a persona alguna tro de nos haguessets altre manament
segons que en la dita letra pus largaraent era contengut on com nos
haiam nouellament entes per lo Gouernador nostre de Sardenya e per
los prohomens de la ciutat de Sasser qui dagons han largament escrit
e trameses lurs missatges quel Regne nostre de Sardenya esta en gran
perill Supplicantsnos que al defeniment e guarda daquell dejam pro-
uehir per 90 Nos per be del dit Regne e saluament de la cosa pública
e si aquesta prouisio nos feya veu hom clarament quel Regne seria en
perdiment majorment com les Rendes que nos hauem en aquexa Isla no
basten a les messions necesaries a def ensio del Regne daraunt dit E nos
per la guerra deis janoveses e altres moltes despeses quens conue a fer
tocants la honor de la nostra corona Reyal, moneda aqui trametre no
puyam hauem prouehit quens prenam quant al present any totes les
Rendes de viladesgleyes e deis altres lochs assignats a la dita Marmes-
soria leuats empero salaris deis officials e messions per que a uos e a
cascun de uos deym e manam que de totes les rendes drets e esdeue-
44 F. CARRERAS Y CANDI
niments qui en vostre poder son e serán per los oficis danmnt dits
abatnts los dits salaris e messions responats al amministrador general
de les rendes e drets nostrcs de la Isla damunt dita present e qui per
temps sera no contrastants alguns manaments en contrari fets com nos
aquells per la dita raho justa e necesaria sospenem al present e per sos-
peses volem e niananí esser hauts, per tot lo temps dessus escrit. En
altre manera certificam uos que nos per altre letra nostra hauem manat
al gouernador nostre queus en dege forcar e destreyer fortsment et
destreta. Aquesta empero prouisio e suspensio nostra volem que dur
per I any complit. Scrita en barchelona a XV de febrer del any de la
Natiuitat de nostre senyor MCCCLII— visa Ro.
Tenens locum vicecancellarii misit eas signatas et expediendas.
DOCUMENT NOMBRE III
(Registre 1030, foli 97)
Nos Petrus, etc. Circa reparacionem ville Ecclesie de Sigerro quod
in rebellione que hiis temporibus in Sardinie Ínsula inualuit diruta ut
conuenit Intendentes presentís tenore ut Manumissor altissimi testa-
menti Serenissimi ac Magnifici principis domiui Alfonsi recordacionis
eximie genitoris nostri statuimus seu etiam ordinamus quod pro
vnaquaque marcha sardescha argenti que per Guelchs dicte ville seu
quouis alios uendetur in secha monete ville eiusdem per magistrum dic-
te monete aut per Camarlengum ville ipsius Centum quinqué solidos Al-
fonsi rainuti a modo tribuantur non obstante quod marcha argenti pro
minori precio scilicet Centum Duorum solidorum alfonsi minutorum
habere consueuerit temporibus retrolapsis. Mandantes cum hac eadem
Raymundo dolores dicte monete Magistro necnon ffrancisco geraldi
dicte ville camarlenguo et alus Magistro et Camarlenguo qui pro tem-
pere fuerint quod hanc nostram ordinationem obseruent et contra
ipsam non ueniant aliqua ratione Mandamus eciam Magistro racional!
Curie nostre uel cuicunque alii a dictis Magistro et Camarlenguo com-
potum audituro quod preter hanc ordinacionem eosdem aliquatenus
non molestet quinimo quamuis quantitates exsoluerint pro argento ad
racionem pretactam Centum quinqué solidorum dicte monete pro
(lualibct marcha in eorum compoto recipiat ipsis sibí exhibentibus
apochas in ([uibus de presentí fiat mencio specialis. In cuius rei testi-
monium hanc Cartam nostram ficri jussimus nostro pendenti sigillo
munitam. Datum in Castro Callari prima die junii Anuo a Natiuitate
domini Millesimo Trecentesimo Quinquagesimo Quinto. — Scripsit G.
Dominus Rex mandauit Matheo Ádriani.
Vidit cam do. R. Matheus prothonotarius.
ii^'^<^',vx'xx avr XX í>"' X >^yr«%-^F^i<y' ^V- >^y- >".x x.x .V;v; x.x,xy, xv^-vy, x.x.xy, x;x x'.x ^^
«< X'X x°x x>" xx X*x x^X; x^j^X¿x >'.'.v xV y¿x x'x x'x x°x 'x'x íCx xx x'xj/.'x •/-.>" x'x x'x
PALOMAS Y PALOMARES
EN CATALUÑA
DURANTE LA EDAD MEDIA
PALOMA Y COLOM EN LA LENGUA CATALANA
Tuvo la lengua latina las dos voces palumhus y palumba, designa-
tivas del pichón y de la paloma torcaces, y la de columba aplicada á
la paloma ordinaria. Varrón al hablar de las palomas y de las varias
clases de sus palomares no olvida consignar aquella distinción di-
ciendo que la palumba es mayor y anida en los árboles y setos, y que
la columba es menor y más mansa (1). De ahí que Linneo, observador
de la tradición latina, bautizase científicamente á la torcaz columba
palicmbus.
Los idiomas neo-latinos unas veces se han asimilado la palabra
pialumba, como las lenguas castellana y portuguesa, y otras la forma
columba, como la francesa é italiana. La región intermedia, esto es, el
Mediodía de Francia, emplea, además de la generalizada de colombe,
la de palornbes ó palownios equivalente á la francesa de biséis.
Ofrece la lengua catalana, en estas palabras, una nueva prueba de
ser fiel guardadora de la tradición latina, pues conservó desde un prin-
(1) Varro, Hb. 3, cap. 1: tduo facit oolambarum genera, qujs in peristerotrophio esse
solent: unuin agreste, et ut alii dicunt saxatile, quod habetur ia turribus ac culminibus
viUffl. a quo appellatte columbas, qu£e 25ropter titnorem naturalem summa ioca in teo-
tis captant: alterum. colutnbarum genus clementins, qnod cibo domestico intra limina
pascitur. Columbas agrestes a colore Liviae dicuntur, quasi lívidae; domesticse vero,
Cellares Ex colnmbo agresti, et co'umba domestica, vel econtrario, nascitur genus
tertium columbarum: a nostris miscellaj dicuntur, ob duorum generam commistionem.
Columbos esse in tu^ela Veneris ideo fictum pntant, quia í'cetui semper icdulgent.
Distinguuntur autem columbae a palumbis, quod hi feri, et majores siat, et in arbori-
buB aut sepibus nidificent: oolumbaa minores, et mansnetiores, ut quse cibo domestico
intra limina pa; cantur. (Ambrossii Calepini dictionnariinn,... . editio novissima Xunc a
R. P. Laurentio C'lnffletio Soc. Jesu, Presbijt-ro aliisque Philologis revisa (pág. 345) Lug-
duni 1681.)
46 F. CARRERAS Y CANDI
cipio las dos fórmulas de j^ aloma y colom. No entra mucho, la primera,
en el repertorio del catalán moderno, motivo por el cual nos entreten-
dremos algo en darla á conocer más al detalle.
Abriendo los diccionarios catalanes existentes y empezando nuestra
consulta por el más antiguo ó sea por el que compuso Pedro Torra en
el siglo XVII (2) encontramos paJomí como sinónimo decolomí ó pichón.
El diccionario vulgarmente llamado de Labernia {3) da á la voz
paloma idéntico significado que la lengua castellana. Añade como lo-
cuciones formadas con esta palabra las de blanch com una iKiloma y
fins las palomas teñen f el. No advierte sea esta voz anticuada y en
cambio lo hace notar más adelante al repetir la acepción que Torra da
á palomí.
También los diccionarios de Ferrer (4) y de Saura (5), aplican á la
voz paloma idéntico sentido que la de colom. La última edición de
Labernia, añade á las voces paloyna y palomi el adjetivo palomar
aplicándolo á cierto hilo (6). Pero todo ello es poco, según vamos á
demostrar.
Respecto á las palabras paloma y palomí, comprobará su remota
existencia, el castillo Palomi sito en los lindes del castillo de Llers
(castrum Lacesse) de que habla la donación hecha en 954, por la con-
desa Elo hija de Oliva, al cenobio de San Juan del valle de liipoll (de
circi in serra de Tenep et de castell palumbi) (7), de cuyo castillo hace
mención, en 10-'5, la dotación del obispo Oliva á la iglesia de Llaers,
ya que formaba parte de ella el castillo Palomí (8).
Y como la mayoría de nuestros nombres geográficos se hallan es -
tereotipados en los apellidos, en el año 1484 aparece un albeitar de
Barcelona, á quien el notario latiniza llamándole Ludovicus palo •
mino (9).
Pasando, pues, á ampliar las demás palabras que la lengua catala-
na tomó de la latina palumba, nos ocuparemos primordialmente de la
voz palomar, por haber tenido entre nosotros tres acepciones distintas.
Usóse como verbo, á fin de dar á entender la acción de cazar palomas
torcaces con redes y otros aparejos, que se solían poner en los bosques,
según veremos más adelante. Como adjetivo derivado de dicho verbo
(2) Dictionarium sev thesavrvs catalano-latinus verhorum ac phrasium authore Petra Torra
(Barcinone Ec Offlcina Ti/pographica Raphaelis Figueró).
(3) Diccionari catalá-castellá-llati-francés-italiá, per una sociefat de catalán» (Barce-
lona 1839).
(.4; Diccionario catalán-castellano con una colección de 1670 refranes, per el P 3T, Fray
Maf/iii Ferrer de la orden de la Merced. (2." edición, Barcelona, lb5á.)
(5) Novísimo diccionario manual de las lenguas catalana y castellana, por Santiago
Ángel Saura (Barcelona, 1866.)
1,6) Diccionari de la llengua catalana ab la correspondencia castellana, (Barcelona, Es-
pasa y C.";, vol. II, pAg. 3¿1.
(7) Doo 43 de Snnyer (Arch. Corona de Aragón.)
(h) Doo. 61 de Berenguer Ramón I (Arch. Corona de Aragón )
(9, Manual de I47ti-14HH, folio 77 (Ar. Hospital Santa Ciuz de Barcelona )
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN L'^ EDAD MEDL\ 47
y aplicado á algún objeto necesario para efectuar dicha caza. Como
nombre sustantivo común, equivalente al análogo de la lengua caste-
llana, para expresar el edificio ó lugar donde anidan estas aves, si bien
hoy día se conoce casi exclusivamente con los nombres de colomer y
colomar.
Algunos ejemplos prácticos demostríirán la existencia del verbo
palomar. Prohibió el baile de Viladrau, en 1435 (10) á las personas fo-
rasteras el palomar y tirar con ballesta á las palomas torcaces (no gos
palomar ni tirar ab balesfa ais tudons). En la misma villa y año 1522,
concedióse permiso á cierto sugeto para palomar ó hacer palomar {que
vos pugau palomar ó fer palomar) (11). Otro permiso otorgóse en la
propia población de las Guillerías en el año 1548, dando como sinóni-
mos los verbos tudonar y palomar {et vos in e.a possitis todonare siue
palomar ad vestrum libitum) (12). Finalmente, en 1624, en el arrenda-
miento ó entrega en prenda que del bosque del castillo de Sant Hilari
(^a-calm, hizo su propietario, por término de cuatro años, reservóse el
derecho de cazar y palomar (que tots ensemps pugam cassar y pa-
lomar) (13).
Para cazar palomas torcaces en el bosque por medio de ingeniosos
procedimientos, eran necesarios aparejos para aprisionarlas. De ahí la
existencia de ciertas redes hechas exprofeso, conocidas en Cataluña
con el gráfico nombre de filats de palomar, esto es, redes que sirven
para palomar. Habla de ellas, en el año 1522^, la venda, por diez años,
de una propiedad de San Hilari ^a calm, para cazar palomas torcaces,
por el precio de cuatro redes de las destinadas á esta caza (per preu
de cotra filiáis de palomar) (14).
Fué costumbre en Cataluña durante la Edad Media, designar los
hilos fuertes y hasta las cuerdas con el nombre genérico de fil, aña-
diéndole el del uso para que iba destinado. Del 1401 es la denomina-
ción de fil de ballestes á las cuerdas de que se utilizaban las ballestas
(15); en 1469 se menciona al fil de cosir sarries y al fil de guarnir gar-
bells {16), etc. De ahí, pues, el fil de palomar, nombre que aún hoy día
se da en Barcelona al bramante, y que no es otra cosa que hilo que
servía para palomar ó capturar palomas. Se cita el fil de palomar, en
un documento del año 1414 existente en el archivo de Pollensa (17).
Por corrupción algún diccionario catalán (18) copia del vulgo su fór-
(10) Véase más adelante Disposiciones sobre palomas en un villorrio catalán.
(11) Doc. núm xxr del Apéndice.
(12) Doc núm. xxv del Apéndice.
13) Doo. núm xxix del Apéndice
(14) Doc. núm. xxii del Apéndice.
(15) Comptet del consolat ó Llotja de Mar, 1401-H07, fol. 107.
(16) Registro 3384, fol. 43 (Arch. Aragón.)
(17) Revista catalana, año í, cuaderno I, pág. 38. (Enero de 18-9.)
(18) Diccionari del a lengua catalana ab la correspondencia castellana, per D. Pere lia-
bernia.
J8 F. CARRERAS Y CANDI
muía defectuosa de fil cV enpalomar. Le sucede á esta palabra lo que á
muchos plurales femeninos, que el vulgo no ha sabido discernir donde
concluye el artículo y empieza el nombre sustantivo, como v. gr. en
les tenalles, les tisores, les cuhertes, les tovalles, les corretges, etc., que
dice les estenalles, les estisores, les escubertes, les estovalles, les esco-
rretges, etc. No pretendemos que este abarraganamiento del idioma sea
obra de nuestros tiempos. Es en demasía sabido, que procede de los
siglos XV y XVI. Y por lo que á nuestra palabra compete^ ya en 1513
un escribano de la Seu de Urgell la denominaba fil enpalomar (19),
mientras que otro de la Pobla de Segur, en el mismo siglo xvi, llama-
ba escolomines á las colomines (19 bis).
Acerca la acepción del epíteto ó calificativo palomar, también
existente en el idioma castellano para indicar el hilo fuerte (20), con-
cluiremos que, en la catalana, no sólo se aplica á las redes que sirven
para cazar palomas en el bosque, sino al hilo ó bramante, más delgado
y retorcido que el ordinario y que se utiliza para la confección de las
anteriores redes y otros usos.
Fáltanos tratar áe palomar como nombre substantivo común y como
nombre substantivo propio ó apellido. El nombre palomar aplicado ya
en 992 (21) y 1074 (22) á un término del territorio de Barcelona junto á
la iglesia de Sant Andreu, fué debido, quizás, á un notable y grande
palomar existente en la parte superior de la parroquia, ó sea hacia la
Vila-piscina. De él nos ocuparemos detalladamente al tratar de la
existencia de palomares rurales en el llano de Barcelona, pues ofreció
la particularidad de pertenecer á distintos propietarios por indiviso.
El estar en vigor el nombre substantivo común p>alomar, durante
la Edad Media, como designativo de la construcción para guardar pa-
lomas, lo manifiestan asimismo los notarios en la redacción de contra-
tos. General era traducirlo al latin por columbario m y en ocasiones,
barbarizándolo, por colomerium (23) ó colummario (24), Más no implica
(19) A 1B13.— Proceso contra el ^osíe del mas de Eróles, jurisdicción de la Seu de Ur-
Rell, por robo de cierto perro. Allí se lee: «vehe que lo dib pheliu feu pendre lo dit ca
al dit home mateix e loy feu ligar ab vna cordeta petita o fil enpalomar » Legajos de
procebOB del aroh capitular de la Seu de Urgell).
(19 bis: Manual del siglo xvi del arch. parroquial de la Pobla de Segur, folio 54.
(20/ Nuevo diccionario de la lengua castellana (París, 1873) pág &15
(21) In comitato barchi/ionense iii lociim quem dicunt palomar itel propeipsum locum qxtem
dicunt ad ipsas cigas. (Cart 8 Cugat, íol 307, doc, 931)
(22) J5n el testamento de Guilia Arberta se lee alodiinii qiiod Jiabehat in palumbario in
parrocliia saticti nndree apoKtoli (Cart. S Cugat, fol. 305, doc. 926)
(23) En 1:^69, entre Ihb propiedades del deshabitado manso Agüera, sito en Mataró,
hacia Cicera, se contaba «alia fexia terre que est subtus co?OH!C/7'«»i que comiunt dúo
jomulia, quam teneo pro qu..dam lampade (C'apbreu de Mataró, Clase 2.", B. f 2. suple-
mento final, folio 16, arch. Bailla del Real Patrimonio en Harcelona.)
A. 12.S5: fin parrocliia sancti vincentii de medalla in loco nominato colomerio.f ;Cua-
dernos sueltos del Manual II del arch. de la Curia Fumada de Vich.)
i,24i A 822: donaci<'in del presbítero Cixilani á la Canónica de la Seu de Urgell,
«de I Bolario et I orreo et I colummario et I pecia de térra et I uinea In pago orgellitano
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 49
sean numerosos los casos en que viene latinizado palomario y palum-
bario. En el término de Llers ó Llaers, se les llama palomario en do-
c amentos de distintas fechas, como son uno, del 821 (25) y otro del
957 (26). Usaron también de igual ortografía, los notarios que autori-
zaron las escrituras de una donación á Sant Pere de JMontgrony, del
828 (27) y de otra al Cabildo de la Seu de Urgell, del 1016 (28).
La fórmula latinizada palumbario, se halla, entre otros documen-
tos, en una venta de Sarria, del 956 (29), en otra de Trayá, del 1026 (30)
en una tercera de Martorelles del 1121 (31), etc.
Como nombre personal, aparece el de Palomar en 1057 (32) barba-
rizado por el escribano por pulumd. Luego hállase citado á Eamón
Palomar en 1144 (33) quien fué de los caballeros catalanes, que en 1157,
dispusieron que su cuerpo fuese entregado A la orden hospitalaria de
San Juan de Jerusalem, después de muerto (34). Es cierto que, en los
siglos XI y XII, los apellidos no habían tomado aún fijeza y consisten-
cia en Cataluña. Más en el siglo xiii en que empiezan á tomarla y en
el XV en que ya la hubieron adquirido, seguimos encontrándolo en uso.
in apendioio de nssianne in loonm vocitatum ningola> (Dotaliarium, vol. I, doo. núme-
ro 435, aroh. Capitular de la Sen de Urgell.)
(25) «In ibidem villa (<in oomitatu Ansona in término de castro Lazesse vel in ejua
Tilla») alia casa onm curte et orto et paloviario* (Doc. núm 32 de Sunyer, Arch. Corona
de Aragón.)
(26) Donación de Elderico al monasterio de San Juan del valle de Bipoll del alodio
•in villa que diount Lazesse» del que formaba parte «mansns que tenet galito cum
casa* et curte et palomario et orto et arbores et térras » (Doo. núm. 48 de Sunyer»
arcb. Aragón.)
(27) Donación á, Sant Pere «in Mogronio» de una tierra á Castellar de Nuch «in villa
Cnrnudellas» que lindaba «in ipso Uxo de Palomario» (Doo. núm. 40 de Sunyer, Ar-
cbivo Aragón.)
(28) Hicieron la donación Ermemir y su esposa Mirabile diciendo: «Et est iste alau-
des in comitato orgello In villa heras in apendicio sancti aciscli. Et est iste alaudes
casas casalibus ourtinas orreo palomario era ortis ortalibus térras cultas uel inoultas
uineas uinealibus pratis pascáis arboribus pomií'eris uel impomiferis molinis molina-
ribus» (Dotaliarium, vol. I, doo. núm. 328, arch capitular de la Seu de Urgell.)
(29) «Casas et curtes et térras et ortis et arboribus et medietatem in ipso palumbario
sqnis et capud aquis. Quod babeo in comitata barchinonense in terminio de sirriano».
(Lib. Ant. Ecl. Cath. vol. II fol. 17 doc. núm, 47, arch. Catedral de Barcelona).
(30) « Vindimus tibi casas cum solos et superpositos et parietes et curtes et solarlos et
foueas et imluvibario et casalicis et térras et uineas cum arboribus ettrilas ermum et
cultum prono et plano siluis et garricis petra et ligoa in aquis aquarum uia ductibas
et reductibus nostrum propiium quod abemus in comitato barchinonense in marati-
ma in terminio de triduano». (Lib. Ant. Ecl. Cath. rol. II fol. 173, doo. núm. 5C8, aroh.
Catedral de Barcelona).
(31) «In parrochia sánete Marie de martoreies et in parrochia sancti saturnini Pa-
laoii almanle. Sunt autem hec alodia mansos separatim pósitos cum terris et uineis
oultls et heremis et palumbariii boscis atque garricis pronum et planum pratis et
pascuis, aquis et molendinis». (Lib. Ant. Ecl. Cath. vol. III, fol. 1, doc. núm. 1, ibidem)
(32) Invinea dereimunmir et de guadal ptduma {Lib. Ant. Ecl. Cath. vol. IV, fol. 47^
doo. 138 ibidem.)
(33) Cart. S. Cugat, doo. 251.
(,H4) Arm. 12 Casa» Antiguas Sach O, doc. 228 (aroh. Prior. S. Juan de Jerusalem en
Cataluña).
1902 *
50 F. CARRERAS Y CANDI
En 1201 aparece Joannes Pahimbari que no es sino Joan Palomar (35)
y en 1431, fué Gahriel palomar, curador dais filis del dit hernaf de ga-
llacli (3Gj á quien en 1439 otro documento presenta como jurisconsulto,
al denominarle Micer Gabriel Palomar (37).
Xo cabe confundir en los documentos el uso que hacen á veces de
la palabra imliunare, que podría parecer i^vaCí k palomare, mayor-
mente cuando se llega á escribir en romance ^:'i¿Zt¿wia por palomar (38),
La hemos visto empleada en el año 1149, dándole el sentido áeplumicol
ó plumones. Así se lee en el testamento de Bernat Berenguer I super-
lectum de ]julumare factum (39).
Palomee. — Creemos ser, esta palabra, una variedad poco usada de
la anterior. En cuyo caso resultará analogía con las voces colomar
y colomer, cuyo sentido es idéntico. En Sant Pere de Torelló, existía,
en 1252, el ms^xí^o p alome r en el lugar llamado Palomer (39). En nues-
tros tiempos hay en Vallgorguina can Palomer.
Palomir. — Se usó en Cardedeu, simultáneamente á Palomer y Pa-
lomar. Hubo^ en los alrededores de esta villa durante el siglo xi, dis-
tintos palomares, según se verá más adelante al reseñar los que
existían en las regiones de Cataluña. En el siglo xii, escrituras de los
años 1160 y 1165, hablan del lugar llamado Palomer (loco nominato
palomer) cuyo lugar pudiera dar nombre al viás Palomir, mencionado
en el año 1312, ó más Palomar en 1495 (40). Palomir, palomer y palo-
mar, cabe suponer tendrán un mismo significado.
Palom y Palomas— Ambos nombres existen como peculiares á
casas de labranza de nuestro Principado, según aparece en el Xo
menclator de la provincia de Barcelona, publicado por los años de
1 860. Que haya en Cataluña can Paloma (41), como hay can Gat (42)
etcétera, es natural. También lo es, que existan masías que lleven el pro-
pio nombre en plural, como las que subsisten en los términos de Odena,
Kubió, Santa Margarida de Montbuy, Pierola y sierras de Bertí (43),
conocidas por can Palomas. Más la presencia del nombre Palom, mas-
culin izando una voz que en latín y en catalán siempre ha aparecido
femenina^ nos resulta de mayor interés. En Barcelona, es citado como
apellido en el año 1343, en Jaume Palóm (44) y aún hoy día subsiste.
(35) Cartulario de los templarios.de Tortosa, doc núm. 161.
(3<i) Cuaderno de papel contenido en el libro titulado Apoques de 'Bernat de Gallach
(arob. Bailia Real Patrim. de Barcelona )
(37; Registro 3135, fol. 115 y 130 arch, Aragón.)
(3S) Anliq. Krl. Cathed. vol. IV, fol. 89, doc. 228 (arch. Cat. de Barcelona).
(39) A. 1232 (VIH Kal. Marcii) bi parrorliia Sanrti Petri de torelione in loco nom/nafo.
II ¡nid ¡inlouier en los lindes de cuya propiedad rural se lee i« honori mansi depalomer (.M&-
nnal I, 12;JÜ 1233, arch. Curia Fumada de Vich.)
(40; Datos facilitados por el infatigable investigador de Cardedeu D. Tomás Balvej .
(41) De este nombre hay una masía en Artos y otra en Esparraguera.
(la) En Viladrau existe desde muy antiguo esta masía.
(43) Jliiilleli il,l Centre Kr<uirsir>„¡sta de Calahinya año VII (1897) pag. 145.
(44) nrlIiheraciciK del coiicell i:!4:í fine:,- i.-iil ¡arch. Municipal de Barcelona)
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EX LA EDAD MEDLX 51
en Canet de Mar, donde el antediclio Xomenclator , sitúa h can P<t¡üm
de la Montanya.
Palomador.— En la pi-inioi-a mitad del siglo xvi se usó de esta pala-
bra en S. llilari (,'a-cahn. Era el palomador el hombre que se dedicaba
á la caza de palomas por medio de redes, esto es, con palomeras. En la
venta A carta de gracia de las palomeras del mas Casal del 7 de Marzo de
1543 (45) se le permite cortar árboles y arreglarlos según uso y costum-
bre de 'buQ.w palomador (segons lius y costum de bon palomador) ,
LAS PAL0:\1ERAS
Acabamos de anotar algunas indicaciones acerca de las palomeras,
y bien merece tratarse algo por extenso este tema, atendido el olvido
en que están. Hoy, apenas si se sabe de ellas ser el nombre de tal ó
cual collado ó montaña.
La más antigua documentación catalana las menciona ya, cabien-
do suponer fundadamente sean un legado de la Edad Antigua. Así,
apenas se inicia el siglo ix, ó sea en el año 819, hay un texto, de que
luego nos ocuparemos, que las cita como cosa sobradamente conocida y
usual. Deben pues figurar á la cabeza de las más remotas palabras
catalanas de uso comprobado.
De entre las múltiples escrituras que demuestran la existencia de
las palomeras, de momento nos fijaremos tan sólo en tres de la época
Condal, que nos han de servir para sentar deducciones. En el año
922, se consignan las palomeras que confinaban con :Murriano (4G). De
modo que las palomeras debían ser algo semejante á torrente, bosque,
ladera, etc., cuando permiten citarse como límite indicativo del área
de una propiedad.
Este algo tangible se manifiesta todavía con mayor evidencia, en
el convenio hecho en 1016, entre el Prelado de Urgell y el Vizconde
Bardina, donando, el obispo San Ermengol á este último, la parro-
quia de San Jaume de Frontanyá con sus diezmos y primicias, de cu-
yo lugar se reservaba empero la palomera y [n, palomerola allí existen-
tes (47). Finalmente, en el año 974 una escritura revela haber en las
inmediaciones de cierto castillo, no sólo rocas y bosques, si que tam-
bién ^jaíomeras situadas entre selvas (48).
(45) Doc. núm. xxiv del Apéndice.
(16) «Ipsas palumbarias qui adjacent in Murriano». Marca Hispánica, doc. 69 del
apéndice.
(47) cEgo Ermengaudas episcopus dono ipsa parrochia de sancto Jacóbo cum de'
cimis et primiciis ad iam dicto Bardina uice comité exceptas jKilnmera et pitloiin'roln
propter magnam amiciciam quod habeam de uobis». Pergaminos sueltos de la Catedrí 1
de Urgell: cajón de escrituras carlovingias.
(48) «Et cum ipso castellare et cum ipso fictorio et reliquas rochas et rupes q\u- in
52 F. CARRERAS Y CAXDI
Esta última cita demuestra que debieran servir para algún fin uti-
litario que solo en los bosques se hallaba. Exceptuando la caza, poca
cosa más podía irse á buscar, á la sazón entre las selvas. Pero no cabe
suponer fuese una caza m3nospreciada, cuando el obispo Ermengol se
excusó de entregarla al vizconde Bardina.
Si deseamos precisar que fueron las palomeras, necesariamente de-
bemos apartarnos de tan lejanos siglos, en los que, la deficiencia de la
documentación, sólo permite apuntar vaguedades é ideas poco concre-
tas. Dando, pues, un salto de algunos centenares de años, nos pondre-
mos en presencia de contratos sobre palomeras, que han de arrojar
bast:mte luz acerca las mismas. Los hemos hallado en archivos pa-
rroquiales de las Guillerías, mostrándonos, que, aún en los siglos xv,
XVI y XVII, constituían una fuente de riqueza forestal, hoy día del todo
perdida en Cataluña. Reseñaremos sucintamente estos documentos, de
mucho interés por su rareza.
Los cuatro contratos más antiguos, pertenecientes al siglo xv, tra-
tan de la instalación ó arreglo de palomeras en los alrededores de Sant
Hilari Cacalm (49). En 1457 vendióse un bosque en lo Calaris de Sant
Mateu de Joanet, á fin de que el comprador pudiera construir jjaZome- .
ras al objeto de capturar palomas ó todons autorizándole para instalar
layador allí donde le pluguiere, dentro la propiedad del vendedor,
prohibiéndole empero velar ó colocar velas que ahuyentasen de otros
sitios á las torcaces (50).
Este sólo documento ya nos dice el uso á que estaban dedicadas las
palomeras: bosques previamentcs preparados para capturar palomas
torcaces. Los demás contribuirán á fijar las ideas, dándonos asimismo
muestra de su desarrollo. En 1460, el Párroco dé Sant Hilari, deseando
construir «palomeras per capiendum palumbos» en el Puig Iloiirós,
obtiene, de los dos propietarios del terreno que aquellas abarcaban, la
necesaria autorización.
Pocos años después, ó sea en 1464, estipulándose el cultivo de cier-
to bosque del plá Soliba en Sant ^Mateu de Joanet, se di^ facultad al
cultivador del terreno para construir palomeras en medio de dicha
artiga, pero sólo por durante su vida, obligándole á entregar un par
de torcaces, por cada quince pares que capturare en tal sitio. Casi si-
multáneamente, ó se^. en 1466, contratábase la formación de otras pa-
■ lomeras ea Sant Hilari, al sol de la plana, dejits font cubería, con fa-
cultad, por parte del concesionario, de construir los portillos que ne-
cesitara, cortar ó plantar árboles y hacer cuanto estimase conveniente
circuitu eorum sunt et ipsas ¿<í(low?*ar?as cnm ipsas silvas que sunt ex arobabua par-
tibua». Marca Hiep. doc. 116 del Apéndice.
(49) Documentos números xvi, xvii, xix, y xx del Apéndice.
(50) «Ibi faceré palomeras ad recipiendum palumbos siue todons» «quod non positis
Talare neo poneré velas, vnns contra alius, ad dispergendam diotos palumbos »
)'ALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 53
para el arreglo de dichas palomeras. Se reserva, el propietario del te-
rreno, la fadiga en las palomas que quisiese vender.
Un carácter especial presenta la venta, que, en 1522 hizo, el pro-
pietario del coJl de más Gaya, en Sant Hilari, de dicho collado para
construir en él unas palomeras, con todo lo indispensable á las mismas
esto es, haudí- cellar y layar arbres. La venta era sólo por diez años y
su precio cuatro redes de las que se utilizaban para la captura de las
torcaces (51).
Sin apartarnos, por ahora, de Sant Hilari Cla-calm, mencionaremos
cierto préstamo hecho en el mismo año 1522, siendo objeto del mismo
las palomeras de la sierra de MataviaJa ó de la Cominal. El término
era de medio año y la cantidad de siete libras; más á pesar de tan poca
importancia, se autorizó al prestamista para cortar encinas y demás
bosque que bien le pareciere (52).
En dos ventas á carta de gracia, de los años 1543 y 1548 (53), son
mencionadas otras palomeras existentes en Sant Hilari, en cuyo lugar
se hecha de ver no dejaban en paz á las torcaces en sitio alguno de tan
agrestes montañas. La del 1543, era de una porción de terreno en la
cordillera del collado de Lenanyes, con sus correspondientes palome-
ras y con autorización para construir otras nuevas, matutinas y ves-
pertinas (matinaJs y resprals). Evidencia este permiso, que, bien estu-
diados los instintos de las torcaces, construirían de diferente forma las
palomeras con las que trataban de capturarlas por las mañanas, de
las que debían servir para lo mismo al anochecer. La segunda venta á
carta de gracia del año 1548, era de una pieza de tierra en las palo-
meras d' en Busquets con facultad de todonare sive palomar, á su ar-
bitrio, cortando bosque grande ó pequeño.
Nada digno de especial mención ofrece la enajenación de las palo-
meras sitas en el lugar llamado de Resten, en 1596 (54). En cambio nos
fijaremos un momento en la venta hecha, ya entrado el siglo xvii
(año 1605) de un bosque situado en medio de las Barholadas, en lo
serrat del banyador, que pertenecía al mas Boscli de Sant Pere d'Osor.
A pesar de tratarse de un contrato de compra-venta, se autoriza taxa-
tivamente al nuevo propietario, Antonio Soler de la parroquia de Santa
María de Mansolí, para construir palomeras, con bayador, velas, etc.,
cual si ello no fuese inherente al derecho de propiedad que se trans-
mitía.
Y aquí de paso^ observaremos, que, en aquel entonces estaba gene-
ralizada la costumbre de hacer retenciones especiales en los contratos
de compra-venta que tenían lugar en Sant Hilari C^a-calm. En el volu-
(61) Ajjóndice, document-o nútn. xxii.
(62) Apéndice, documento núm. xxr.
(63) Apéndice, documentos núm. xxiv y Xxv
(Bá) Apéndice, documento núm, xxvii.
54 F. CARRERAS Y CANDI
inen del siglo xvií donde se baila el de que nos ocupa, las ventas ab-
solutas, sin retención alguna, no son las más frecuentes. Así solía re-
tenerse el vendedor, ya la corta de castaños, ya la facultad de apa-
centar tantos ó cuantos bueyes, cabras ó puercos, etc., sucediendo lo
propio en la venta hecha á Soler, al consignarse no poder cortar
ciertos árboles, ni sembrar en parte del monte, sin licencia del ven-
dedor Bosch (55).
Después de lo precedentemente dicho, es muy natural hubiere en
Sant llilari, durante los siglos xvi y xvii, distintas partidas rurales
que tomaban nombre de estos ingenios de caza, conociendo el plá de
las Palomeras (56) y las palomeras del Triador (57).
Si en aquellas parroquias de las Guillerías se habían generalizado
tanto las palomeras, no cabe suponer que su empleo fuese exclusivo
de Sant Hilari, Joanet y Mansolí, sino que los vecinos de otras parro-
quias de la región también se utilizarían de ellas. Y en efecto, fué así,
habiéndonoslo comprobado los archivos de Viladrau y de Espinalbes
(58). En Viladrau, dos escrituras de los años 1558 y 1559 mencionan las
p(domeras del más Non y una del 1552 trata del arrendamiento de las
palomeras del más Marcús sitas en el lugar llamado sobre Palayna,
juntamente con el bayer (será el bayador) y todo cuanto á aquellas
fuese necesario (59).
En la parroquia de Espinalbes hubo el loco vocato Palomeres, en
1523; en 1584 se citan las del más Pagés y en 1585 y 1590 las palome-
ras déla balma. En un arrendamiento á parcería del más Pagés,
hecho en 7 de Octubre de 1584, el propietario se resérvala explotación
de las palomeras y castaños (reservantse empero los dits masjuans las
jialomeras y las castanyas). En 23 de Octubre de 1562, Melchor Morera
(a) Masjuan arrendó á us y costum de bon laurador, las tierras del coll
de liarell, obligándose el arrendador, á no cortar las retamas que per-
judicasen á sus palomeras (60).
No hay duda de que en otros ignorados archivos especiales de Cata-
luña^ se hallan contratos sobre palomeras, de tanto ó mayor interés que
los reseñados, y que, la incuria de nuestros investigadores, han dejado
hasta ahora en el olvido, á pesar de su importancia para el conoci-
óos) Apf^ndlce, documento núm. XXVIII.
(oO; A. 1557 (13 do Ftibreroj: «un tros de bosch groa e manut ea la dita parrochia en
lo loe unomenat al pía de les palomares » (JAuiííaí de i.^J7-íó(;5, Arch. de Sant Hilari
Ca calm).
(67) A. 1604. Una pieza de tierra al coíí dd Pomn/- «afrontt nt a mixdie ab la resclosa
y puyant per lo comellur fias a las polomeraa del triador.» (Jlaiiidil i:,-,:, á KUl, Arch. de
Sant Hilari'.
;0y> El verdadero Eombre de este pueblo es /,'sp;/¡(iií)cj>, cambiado en la época mo
deroa en I's¡>ineUnia.
(69) Apéndice, documento nám. xxvi.
(60) «No pot taliar ningún albre que porte fruit ni puot dit mataro taliar ginista-
das qne porten dany a las palomeyras de dit col da rauol.. (Arch. parroquial de Espi-
ualbas .
PALOMAS Y PALOMAREiS EN CATALUÑA EJí LA EDAD MEDIA 55
miento de nuestras costumbres rurales. Véase pues, en región muy
apartada de la que nos acaba de ocupar, esto es, en las propias ver-
tientes del Pirineo, el arrendamiento hecho, en 1522, por Berenguer
de Oms, señor de la baronía de los castillos de Finestres y de Santa
Pau, á Narcís Llorens, de las palomeras del coll d' en Pont, en el lugar
de Finestres, estableciéndolas á uso y servitud de cazar torcaces y
otras aves, facultándole para construir puertos y portillos, baijadors,
velas, creberiis y todo lo á ellas necesario (61). Llorens se obligaba á
entregarle seis pares de capones, anualmente.
La extensión que tomaron las palomeras en Cataluña, puede indi-
carse por los muchos lugares que conservan su nombre. En las mon-
tañas que circundan la parte oriental del llano de Vich, existen
algunas cañadas conocidas por Palomeras, como v. g., la de entre Vila-
torta y Osormort, la de Espinalbes, la de Viladrau y la de entre
Tavertet y Rupit. Otra existe en el camino de herradura de Olot á
Amer, entre Santa Pau y Finestres, y otra en el camino de Campde-
vanol á Berga, cerca de Gombreny. En las vertientes pirenaicas de
Gerona hay la sierra de las Palomeras: en Baguda, Santa Bárbara y
Sant Boy de Llusanés, casas do labranza conocidas por can Palome-
ros, etc., etc.
Más no se crea fuese sólo en países montuosos: también en las costas
catalanas hay comprobantes de su empico y utilización: en 1067 las
hubo en Alella, no lejos del mar (62); en Llavaneras, en 1172 (63); en
Orrius, en 1496 (64); el más Palomeras en Malgrat; una de las islas
Medas lleva este nombre, así como otra de las Baleares.
De ahí la existencia del apellido Palomeres, que usaban, en 1439
un platero de Barcelona (65) y en 1503 un vecino de Pineda (66).
Para concluir de expresar la importancia de los rendimentos de
las palomeras, hay que tener en cuenta la costumbre de las torcaces
ya descrita por los naturalistas, acerca de su emigración periódica.
En breves y precisos términos lo refiere una reciente obra compila-
tiva (67).
«En nuestros países meridionales y principalmente á lo largo de las
costas del Mediterráneo se puede observar anualmente el paso de nu-
merosas torcaces y zuritas que á la llegada de la primavera atraviesan
de Norte á Sud haciendo el viaje inverso á la vuelta en el otoño. El
(61) Apéndice, documento núm. xxii.
(62) «De meridie in palumeres seu in nndas maris.» (Lib. Ant. Ecl. Catli. vol. II, fol.
163, doc. núm. 441, arch. Catedral Barcelona).
(63) Aryentona Jiistúrica, pág. 66, nota 2.*
(6ái <Parrochie sancti andree de orrius, scilicet tres ipsarum in loco nomioato
palomeres.» (Aroh. particular de casa Prats de Orrius).
(65) Barthomeu Palomeres: Eegistro 3135, fol. 117, arch. Aragón.
(66) «Heredium Nioolay palomer es quondam ille demanolla dicte parrochip de
pineda.» (Manual 1463-1515, foL 152. arch. Hospital de Santa Cruz de Barcelona).
(67) Diccionario enciclopédico hisp ano-a niericano, vol. 14, pág 691,
56 F. CARRERAS Y CANDI
paso que ocurre en el mes de marzo no dura más de quince á veinte
días; pero el de otoño, que comienza á fines de septiembre, se prolonga
con frecuencia hasta mediados de noviembre.
Las zuritas pasan por bandadas de 10, 20, 30. 40 y á veces más de
50 individuos; las torcaces forman una sola bandada y viajan juntas.
El paso de aquéllas comienza á la salida del sol; hacia el mediodía
disminuye su ligereza y se estacionan en los campos en busca de ali-
mento ó en los árboles para descansar; luego continúan su marcha
hasta que se pone el sol.»
Buffon observa también, ser general la costumbre de capturarlas
con redes en los lugares de su paso «especialmente en las comarcas in-
mediatas al Pirineo» (68).
Si tan poco, ó nada, de las palomeras nos escriben los autores de
nuestras vertientes pirenaicas, veamos si los de las regiones francesas
son más diligentes. Uno de ellos, el erudito y activo archivero de To-
losa Mr. Pasquier, manifiesta, que, no debe extrañarnos de que en todas
épocas, los propietarios de la montaña, hayan tratado sacar provecho
de este género de caza, teniendo en cuenta sus fructuosos resultados.
De ahí que los Señores no desperdiciaran la ocasión de considerar á
los collados como un dominio susceptible de producir regulares rédi-
tos. Refiere, además, que el Sr. de Argein. en Bellonge (ValUs-Jonga),
estableció perpetuamente, en el año 1726, la.^ pendieres instaladas en
los desfiladeros de las montañas de su pertenencia, á censo anual de
130 pares de torcaces, que se debían entregar en el mismo castillo de
Argein (69).
Dos autores franceses y uno inglés nos dan descripciones exactas
de las palomeras. El primero de aquellos autores pertenece al siglo
xviii y su relación la tradujo al castellano, en 1788, Joseph Mallent,
en los siguientes términos (70):
«Se ata una red muy grande á unas perchas ó estacas las más lar-
gas que puedan hallarse: se clavan estas en tierra para que se tengan
derechas y se pone la red de tal modo, que afloxando una cuerda,
inmediatamente se baxe. Estando así, se sienta un cazador frente de
la red á distancia proporcionada, y se oculta baxo de algunas ramas:
otro cazador, escondido también en la¡ parte opuesta, tiene la punta ó
extremidad de la cuerda, que levanta la red, y luego que pasan las
(6b) Obras Cumpletnn de Uuffon, aumentadas... por Cuvier. Tradiicidag al castellano por
I'. A. B. a L , tomo V, página 60 (Barcelona 1834).
(6b) Esta noticia procede del archivo departamental del Ariége (Francia) á igual
qoedoB sentencias de los años 1741 y 1785 (ó 1787), por las que, confirmó, la senescalía
de Pamie rs, estn r en pie la obligación de satisfacer dicho tribato al Señor de Argein .
Publicáronse en el Hidletin j,éríodique déla société Aricgeoise des sciencies, lettres ef arts
ívol. 111, pág. 383, año 1890) con el título de üedeyajice* en Msets dans le Couserans au-
X Vlllt sidcU.
(70) Kncuclopedia metódica.— lítttorin natural de laa aves traducida del francés al caste-
llano, por n. .Joseph Mallent, tomo II, pág. 206 (Madrid 1788).
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDL\ 57
palomas se arrojan al suelo, y van á dar sobre la red que el segundo
cazador afloxa inmediatamente: y de esta suerte se cogen en un día, y
en el tiempo de la pasa, centenares áo, palomas torcaces, según dice el
autor del Dicción. Econ. tom. III pág. 33.»
La segunda de estas relaciones, pertenece al autor Marolles, quien,
en el siglo xix, nos daba los datos que continuamos (71):
«En la Navarra francesa, en el Bearn, el Bigorre y otros lugares
próximos á los Pirineos se apresa con redes, desde tiempo inmemorial,
una cantidad inmensa de zuritas y de palomas torcaces. Se elige entre
dos cadenas de montañas una garganta ancha en su abertura y que
vaya después estrechándose: á su extremo ha do haber una superficie
plana de unos cien pasos cuadrados, que se llama en el país la fronte.
La parte estrecha de la garganta se cierra por completo con redes,
cuyo número varía según su mayor ó menor extensión. Estas redes,
que miden cada una de ocho á nueve metros de ancho por 18 de alto,
se hizan por medio de poleas á árboles que no tienen menos de 25 á 30
metros de elevación. Se disimulan estas redes por delante con una se -
gunda fila de árboles desprovistos de ramas por su parte baja para
dar paso á las aves. Casi á unos 30 metros delante de las redes hay un
aparato llamado trej^e, que consiste en tres troncos de árboles planta-
dos en triángulo, á seis pasos unos de otros y juntos, y sujetos arriba
por una cadena de hierro. En sus copas se construye una choza, ocu
pada por uno de los cazadores, que ha de ser de los más inteligentes.
A los dos costados de la garganta, y á lo largo de la cresta de las
montañas, se preparan también de trecho en trecho, otras chozas aná-
logas á la anterior, ya sobre los árboles, ó ya en eminencias naturales,
y en cada una de estas chozas se alberga un cazador. Cuando una
bandada de palomas, empeñada en la garganta, intenta salvar la
cresta, el cazador que está más inmediato les dispara un matón, especie
de paleta pintada de blanco y llena de pluma?, que imita grosera-
mente á un ave de rapiña. Las palomas, asustadas, retrogradan y
rozan á veces la tierra. Se les mantiene así sucesivamente de un caza-
dor á otro en la dirección de las redes. En el momento en que pasan
de la trepe, el cazador apostado allí les dispara á su vez, siempre
después de pasar y no antes, otro espantajo emplumado. Las palomas,
aterradas, se arrojan unas contra otras, se suelta el resorte y pájaros
y redes caen confundidas en tierra.»
«Los lugares destinados á estas cacerías son muy numerosos en los
Pirineos. Los hay en todos los lugares á propósito para levantar estos
aparatos, que datan, según se dice, del siglo xiii. Muchos de estos
(71) La Ilustración Venatoria (Madrid 15 de Septiembre de 1885), traduciéndolo de Le
Journal dea Chasseurs de París.
58 F. CARRERAS Y CA\DI
emplazamientos ocupan hasta 24 cazadores. El mismo M. de Marolles
menciona muchas de estas palomeras, como se llaman, describe sus
posiciones, indica el nombre de sus propietarios y los productos que
rinden. Las hay que, según asegura, apresan durante el año hasta 5,000
palomas torcaces y aun más de 8,000 zuritas; no hay año, añade el au-
tor, si es bueno el día de paso, en que no se apresan 1,000 palomas,
habiéndose cogido en un sólo día hasta 2,200, en Pied-Jan, eu el
Cousserant, »
También el capitán Maine Keid, en una de sus novelas de caza,
relata la costumbre de capturar, con redes, á las palomas, en los co-
llados pirenaicos, tal como la vio en Bagnéres (72). Su descripción es
muy parecida á la antedicha de ]\Iarolles.
No hemos de detenernos ahora en la descripción de otros ingenios
empleados por los campesinos para la captura de tales aves, con me-
nos resultado, pero también de mayor sencillez, que las palomeras (7o).
Más sí daremos una breve ojeada á la lengua y costumbres del reino
de Castilla.
Es antigua, en la lengua castellana, la noz palomería para designar
la caza de las palomas (74), é igual sucederá con el verbo palomear, in-
dicativo de andar á caza de palomas. Palomeros eran, en lenguaje
vulgar del siglo xvii, los cazadores de palomas (75). Que allí también
se cazaron con redes, por los montes, y quizás con las ingeniosas pa-
lomeras, lo da á entender, en 1386, López de Ayala, en sus narracio-
nes de El libro de las aves de caca. Nos refiere, como en Plasencia, los
rederos capturaron por medio de redes, ciertas palomas salidas aquel
mismo día de lejanas tierras, según lo atestiguaban los alimentos de
(7S) Loa cazadores de osos.— BiJdioteca económica de instrucción y recreo. (Madrid
188b) pagínalos.
(¡6) Es curioso por bu simplicidad el que traduce el Diccionario enciclopédico-hispano-
americano ^vol. 14, pág. 695) tomándolo de un autor alemán.
•En los campos situados hacia el punto por donde pasan las aves, ó en otros tér-
minos del lado del Poniente en la primavera y del Oriente en el otoño, cuenta Brehm
que se colocan, unos cerca de otros, 12 ó 15 cucuruchos de papel gris, del tinte que más
se parezca al color de la paloma; se fijan en tierra, introduciendo ea cada uno una pie-
dra pura impedir que se los lleve el viento, figurando perfectamente, aun mirados de
cerca, una bandada de torcaces posadas. Al pasar las zuritas divisan aquellos objetos,
y apartándose de su camino llegan á elloi para mezclarse con las supuestas aves; aun
cuando reconozcan su errur acostumbran siem^tre á posarse junto á lo» cucurucho-',
y feble es el momento que aprovecha el cazador de espera para disparar. Como éste so
em]>lfean mil medios para cazarlas. >
(,T4) Tesoro de la lengua castellana ó española, por Sebastián de Cobarruviaí Orozco,
(Madrid, i6ll).
(76; SuArez de Figueroa, á propósito de la caza de montería, dice; «Suele llevar el
dutño de la montería, tiendas suficientes para formar vn pueblo, capellán que diga
Missa, tableros de tablas y axedrez, naypes y hombres de buena conversación. Hállase
BU desj.ensa más bien proueída que si estuviera en ia Corte: supuesto parten al alba
por vna parto loa cav^adcires de a^or, de podenco y palomeros pura perdices ij ¡ndo mas
por otra el de galgos para liebres: y por otra el de perros y hurón para conejos » l'laza
unirersul de todas ciencias y artes, ¡larte traducida de Toscano y parte compuesta por e. doc
tor Cltristocal Sudrez de J'i'jueroa, lol. 234 (Madrid, 16l5).
P.A LOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 59
SU buche (76). Y más adelante, aludiendo á la época en que se toman
las torcaces cuando van de pas'o; explica que en Castilla se toman
también los azores que van en pos de las bandadas de aquellas
aves {ID.
Finalmente, la palabra palomera aparece en la orografía de dicho
Reino: así se llama, un arroyo de Málaga, una aldea de Albacete, un
puerto y montañas de Santander, etc.
Esto basta para dejar sentada la paridad que, en el uso de tal pa-
labra, existió entre las dos lenguas neo-latinas, catalana y castellana
y quizás entre las costumbres de ambos pueblos, en la Edad Media, con
respecto á dicho género de caza.
Palomera.— En singular empleóse también de muy antiguo en Cata-
luña, con idéntico sentido que en plural. En 819 ya viene citada en
el primer documento de la Marca Hispánica, asimismo en 1016 (78) y en
1170, en el Condado deCerdaña (7t)). En Cantalupos (Ribagorza) existe
la Palomera (80)*, asimismo en Lleyda tuvo este nombre, en 1148, la
casa y fortaleza áaX puig Gardeny donada por el Conde de Barcelona
á Sant Pere de Vich (81) y cierta llanura de sus cercanías, según cita
del 1168 (82) á la que aludirá seguramente, en 1193, el testamento de
Berenguera de Puigvert, la cual poseía bienes en Lleyda (83). También
se sabe de Ja Palomera, lugar de los alrededores de Tortosa, en 1194 (84)
que ya llevaría este nombre al ser conquistado de los sarracenos (85)*
(76) «Et yo oue vn falcon nebly, que era muy buen altanero, et llamábanlo poca
ropa, et fué tomado en plazenv-ia, et dixome el rredero que lo tomara, que le cayera
eu la rred con vnas palomas torcazas en pos que él venia, et dizia que las palomas tra-
yan el papo lleno de fruta de Ih, faya qu") llaman ho, et aquella mañana la auian co
mido, et non fallamos qae ouiere faya fasta villafranca de montes doca, que habia bien
setenta leguas de aily.» Cap. XLV.
(77) «Otrosi, acores toman brauos en el tiempo que se toman las torcazas et vienen
con aqurl paso, etdestos los mas et los mejores se toman en castilla en vna villa fron-
tera de nauarra que llaman santa cruz de canpe(;'(), et son de otra pinta que los que
agora deximos, (los españoles), et son grandes asaz et x'^i^^scen en el plumaje á los
a<?ores de noruega. > (Cap XLI)
(78) Véase la nota anterior, nüm 47.
(79) Donación de la sierra de la Palomera, hecba al Temple por Galcerán de Pinos.
<Ista donatione de istis montibus est in comitatu de cerdania. Affrontad jiredictis
moatibus de orientis in coUum baloebres. De meridie usque ad terminum depegera.
De occiduo in terminum de fragmir et terminum de espada. De circii de grndn do palo-
mera amunt usque ad terminnm do pegera Et de parte de salces uenit terminum us-
que ad zacentiuia et quo modo secra d«^>(tío;)ie/-(í uadit et tornat usque ad coUum de
pegera » (Cartulario de la orden del Temple, fol. 106, doc 256).
(80) Butlleti de la Associació d'Eccursioiis Catalana, (a III, pág. 18)
(81) Llibre del Dr. Joseph Rocafort. Pbre.,iol 144. Forma parte de los volúmenes del
Sacrw Antiquitatis Cathalonia Moniimenta. M. S. del P. Jaime Pasqual.
(82) In ¿2)sa ¡llana de la palomera. (Cartulario de Poblet, fol. !j2, doc. 461)
(83) «ítem laxo aineam illam que fuit de sorore mea 'S.im.essem a d ¡lalomera ut
Kaimundus maacharel ex illa uinea babeat cum tercio quod slbi dedi in alia carta
medietatem.» ('SS ^/-maí-í rfe Tcstaments sack A, doc 52, Arcb. Prioral de S. Juan de
Jerusalem en Cataluña).
(84) Episcopoloijio de Tortosa, por el Dr. Kamón O. Callaghan, pág. 66.
(,85) En la donación becba por Arnau de Torroja al Temple de la beredad quo el
60 F. CARRERAS Y CANDI
En el castillo ca Vid (Panadés), en 1034, existía el «iffs Palomera (86);
en Sant Pere de Osor, el coll de la Palomera, en 1443 (87)-, en Aranyo-
net subsiste aún la masía de la Palomera, etc., etc.
Palomerola.— Diminutivo de palomera y usada en Cataluña de
tan antiguo como esta voz^ pues el ya citado documento de la Marca
Jlispánica del 819 menciona á ambas conjuntamente, asi como la do-
nación de San Ermengol del 1016 de que también nos hemos ocupado.
Ambos documentos hacen alusión al Condado de Berga, en donde hubo
ademís el castillo de Palomerola, cuyas ruinas pueden aun visitarse
cerca de Alpens (Llusanés). Es evidente que \Si palomerola, no era la
palomera, pero si estaba destinada á igual uso, en más reducidas pro-
porciones. La distinción entre palomera y palomerola, pudiera ser si-
nónima á la que se hizo, en 1543, entre palomeras matutinas y ves-
pertinas (88).
Es ocioso observar, que, de palomerola, se ha formado el apellido
catalán Palmer da.
Palmeeols.— ¿Será otro derivado de palomera? Una sola cita, per-
teneciente al año 977_, podemos continuar de esta palabra, con relación
á un castillo de Palmerols, situado en el territorio Etense (89).
Palomas, palomeeas y palomees en maeineeía.— Hay que tener
cuidado en no confundir con las anteriores, estas voces, empleadas en
nuestra náutica de la Edad Media, cual si se tratara de traducir el
romano columbarium (90). En el inventario de una gran nave hecho en
el puerto de Barcelona, en 1331, reproducido por Capmany, cítanse á
p)alomas j palomeras (91). Ya anteriormente, una disposición del 1284,
habla de las palomeras como aparejo de nave, al autorizar su expor-
tación de Valencia á las Baleares (92). Uno de los diccionarios catala-
Cuiidu Rainóu Boronguer le habia entregado al tomar Tortosa, perteneciente al sa-
rraceno Ali Abengalbon, se lee en los lindes de una viña: «Et de alia parte illa zequia
que currit ad illa palo mera. > (Cartulario del Temple de Tortosa, fol. 66, doc. 1B8,.
1,86) Armario 17, doc. 505, Aroh. del Qran Priorato de S. Juan de Jerusalón en Ca-
taluña.
(87) Aroh. parroquial de Sant Pere de Osor.
(68) Apéndice, documento nüm. xxiv.
(89) «In territorio etense sub castro palmerols in valle malegica.» Documento en po«
der del Sr. Fina, do Barcelona, á fines del siglo iix.
(90) CoÍM(/i&«/'ii(m era el agujero por donde entraba el remo en el agua. Kueco Bal-
buena ó diccionario lati/to-esj)a¡\ol, por D. Vicente Salva (París 1868).
1,91) «ítem entena fornida ab trossa e ab palomes e ab bigota » <Item los dita timons
abaronats de nou barous casoun e ab ^yalomas cascun.» «ítem yna, palomera derba en
mola. ítem vnaiui2omc/°(i desplegada derba.» Memorias históricas sobre la marina, etc.
(Madrid 1779) vol. II, p&g 408, doc. CCLXXX.
v92) "Vniuersis officialibus nostris regni valencie. Noueritis nos ad instanciam et
requisicionem fideliam ciuium nostrorum ciuitatis valencie concessisse quod quodli-
bet generaliter possint extrahere de dicta ciuitate et regno valencie et portare vbi-
camque voluerint per dominacionem nostram et in térra eciam illustris regis Maiori-
carum fratris nostre restz ¡mlomeres et esclops et quamlibet aliam exarciam derba.
Quaro mandamus uobls quatenus super extrahendis predictis de valencie et regno et
portandis ut dictum est nuHum eis impedimentum uel contrarium íaciatis nec fieri
permitatis. Datum ut supra.» (Registro 48, fol. 82 Aroh. Corona de Aragón.)
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÍÑÍA EN LA EDAD MEDIA 61
nes, las cita como frase náutica anticuada, diciendo, que, «estar la ñau
ab las palomeras llargas», equivale á «estar la nave con las velas en-
juncadas» (93) y otro de los propios diccionarios, afirma emplearse aún
la voz palomaduras par-a designar las costuras de las velas (04).
En el siglo xiv eran, los palomers, gente de á bordo, según el sen-
tido que les da Ducange^ tomándolo del célebre Muntaner, al referir
en el capítulo 277 de su Historia «Et yo ab un bon cavall que tenía
ni ter9 de cavallers arraats ab llorigues e perpunts, contraste ais palo-
mers, de pendre térra». Asimismo en las cuentas de la galera armada
en 1401 por el Consulado ó Llotja de Mar de Barcelona, para percibir el
derecho llamado del pariatje, se dice poner en ella á doñ palomers ocu-
pando el lugar de dos remeros (95).
El pez que en castellano se llama paZomo, se denomina en co talán
paJomida, usándose ya este nombre en 1349 (9G),
COLOMERS Y TUDONE'RS
Entraba de lleno en las costumbres de la Edad Media la reproduc-
ción, fomento y cría de cualquier clase de animales, que no exigiesen
grandes desvelos para ser objeto de especulación y lucro. Como las pa-
lomas se encontraban en este caso, aquellas generaciones mostraron
hacia ella especial solicitud, pues que además, era uno de los artículos
de mayor consumo en los mercados. Procurábase su reproducción,
tanto en las villas ó ciudades, como en las casas de campo ó payesías
erigiendo á menudo sus palomares en las cumbres de las montañas y
despoblados.
Construir palomares en el interior de los centros de población, no
ofrecía la menor dificultad y como cosa corriente, era dejada al arbitrio
de cada cual su erección. De ellos no existe ley alguna coercitiva y sí
leyes protectoras, de las que nos ocuparemos luego. Solía llamárseles
coloviers.
Semejante cría distaba mucho de constituir un gran negocio, ya
que el particular debía comprar lo necesario para el sustento de sus
aves, de modo que fué relativamente poco explotada en esta forma. Lo
contrario sucedía con los colomers de las payesías, en donde las palO'
mas, la mayoría de las veces, podían atender por sí solas á su alimen-
(93; Diccionari de la llengua catalana ab la correspondencia castellana, voL II, pág. 321
(Barcelona.— Espasa y Compañía.)
(94) Diccionari catnlá-cnstelld-llati-francós-italiá per ana societat de cafalans, voL II
(Barcelona 1839)
(95) «ítem per aventatge de dos palomers qui Bon en compte deis remers simples 1
flori per mes per casen VI florins. . III Iliares VI sois» (Comptes del Consolat ó Llotja
de Mar 14C1-1407, folio .59)
(96) Bandos de los años 1349 al 1356, fol. 5. Arch Municipal de Barcelona.
62
F. CARRERAS Y CANDI
tación. Para evitar perjuicios á los predios vecinos, era construido, el
colomer, en la misma casa, acostumbrando situarlo en su parte más
alta y dominante. En caso de tener autorización del señor jurisdiccio-
nal del lugar para edificar torre de defensa en la payesía, se emplaza-
ba, el colomer, en la azotea de dicha torre. Fray IMiguel Agustí, al
tratar de las dependencias de una casa rústica, consigna lo que ante-
cede en los siguientes términos: «Al cap del Seller fareu un cubert per
lo Pollam y aucells, y al cap de la istancia de la tina posaren lo Colo-
mer per los Coloms si donchs no teniu Ilicencia del senyor del terme
per poder edificar torre, que en tal cas estarán millor a la istancia
mes alta de la torre.» (97) Así en el establecimiento de cierta casa
de campo, en Santa Margarida de Vallors, hecho por Bernat Joan
de Gurb, señor jurisdiccional del término, en 1487, consta la exis-
tencia de casa, torre y palomar tal como lo indica el antedicho
l'rior catalán (98).
Cuanta importancia se daba á la construcción de palomares, de-
muéstrase en una tabla impresa en 1514 (y que bien podemos conside-
rarla como legado del siglo anterior) donde, al enumerar los actos
primordiales ó importantes de la vida humana, señalando en que
signos del zodíaco será bueno, malo ó indiferente ejecutarlos, hay la
correspondiente línea exponiendo la época más propicia para empezar
la construcción de palomares. Es curioso continuar como viene con-
signado en la antigua tabla catalana (99).
Aquesta taula es jiev saber elegir los díes bons per les operacions e
accions humanes segons que los signes son en tais dles bons ho mals
lio indifferents. E serueix per totes aquelles coses que en dita taula
están scrites.
Comec-
sar ccilo-
mjr.
arios
taur.
gemi.
cacer
leo
virgo
libra
scorp
malu
bagit.
capri,
aqrius
piscis
bonu
bonu
malu
indif
bonu
malu
indif
bonu
bonu
bonu
maln
La manera de obtener más beneficios de la cría de palomas, con
menos gastos, ha sido y será siempre, construyendo edificios de mam-
postería en despoblado, para facilitar en ellos la procreación de las
zuritas y torcaces. Se denominaron en Cataluña colomers salvatges y
también tudoners. Esta última palabra, derivada del tudó ó paloma
torcaz, todavía vive en algunas localidades de la Sagarra. En la región
del Maresma y ])ueblo de Santa Creu de Cabrils, existe la payesía co-
(bT) Secreta de Ai/ríriiltura, libro III, folio 150 Barcelona, Esteban Liberos, 1617.)
l9«) «Illam domum et turrim vocatam de la sala cum manso et columbario eidem
vnilo.. Citntriirtca <h- ir,00 et 1400, arch. parroquial do S. Hilari ^a-calm.
99) Lunari e roportori del temps. Impreso en Barcelona por Juan Rosembach, en 1514'
PALOMAS Y PALOMARES EX CATALUÑA EN LA EDAD MR DÍA 63
nocida por cal Tudonev. Advertiremos de paso, que^ el nombre sus-
tantivo común tudoner, tuvo dos acepciones: no sólo signiñcó el palo-
mar de zuritas ó torcaces, e í que también al hombre que se dedicaba
á la caza del tudó.
Tiidonera, que, al parecer es femenino de fndoner, sifínificó en Ca-
taluña, durante el siglo xv, una fuente especial ó plato grande, con
que se servían en la mesa las palomas torcaces, según manifestaremos
más adelante.
En Aragón, región intermedia de las dos lenguas catalana y caste-
llana, existieron los dos vocablos, tudó y zurita. Pruébalo ver al rico
caballero aragonés Juan Fernández de Heredia, siendo propietario,
en 1366, del lugar de Font deis Todons y áeVallectoijg (100) y en 1367,
del de Qorita (101) ambos en el reino de Aragón.
A la variedad de palomas que anidan en palomares en despoblado,
que en catalán vemos llamarla con regularidad titdó, un autor caste-
llano del siglo XVIII la nombra paloma de palomar, dándonos intere-
sante descripción de sus costumbres (102). En 1818 el adicionador de
Herrera, encomia la utilidad de las jJrt?omas cZé; íorre ó zuritas (103),
añadiendo que, la conveniencia de tolerar ó prohibir tales palomares
por los perjuicios que se pretende causan á la agricultura, llegó á ser
tratada en cortes (104).
Por los restos de tudoner s nada escasos en Cataluña, bien puede
(100) A. Í366 tdedimus et concessimus ad imperpetuam Johanni ferdinandi de here-
dia domiceHo merum imperinm et jurisdiccionem altara et baxam locorum suorum de
fonf de todons, et de vaUectoyg situatorum in regno Aragoni.» (Registro 926, fol. 172, ar-
chivo Corona de Aragón.)
1,101) A. 1367 € Johanni Ferdinandi de Heredia cuius ost locus de rorifa.t (Registro Cí6,
íolio 178, archivo Corona de Aragón.)
(102) «El palomo de palomar es una ave semicasera, una esclavalibre, si puede admi-
tirse esta expresión, que pudiendo andar libremente, está contenta con su esclavitud,
por las ventajas que halla en ella vuela á bandadas con las aves de bu especie: anda
errante á su arbitrio, durante el día, en el campo, donde busca el alimento que la con-
viene, y halla en el palomar un abrigo contra la intemperie, un asilo seguro y cómodo
para pasar la noche, una morada que le conviene para establecerse con la hembra
que ha escogido, y criar juntos sus hijuelos con comodidad. El palomar, pues, es un
cebo engañoso, que seduce los individtios adultos, más sensibles á sus ventajas que k
la conservación de su especie, la qual se menoscaba mucho con la pérdida de los pi-
chones, que les tomamos en recompensa de las comodidades que proporcionamos á los
padres. > {Enciclopedia metódica. — Jíistoria natural de las ares, traducida del francés al cas-
tellano jior D Joseph Mallent, yol II, pág. 199 Madrid, 1788).
(103) «Las palomas de torre ó zuritas son mucho más útiles para el labrador que las
caseras, por cuanto se alimentan por si mismas la mayor parte del año y asi todo el
cuidado que hay que tener con ellas está casi reducido á formarles un palomar en
el campo ó en poblado. > {^Agricultura ¡jeneral de Gabriel Alonso de Herrera, adicionada
por la Real Sociedad Económica Matritense. (Madrid, 1818 y 1819) tomo III, pág. 482.)
(104/ «Estas razones y otras expuestas al reino de Navarra congregado en sus pe-
núltimas cortes, le obligaron á dar libertad, por ley, á las palomas de que hablo, las
cuales se mantienen de las semillas de todas las plantas de flores cruciformes y papi-
lonáceas y de las de la numerosa familia de las gramíneas silvestres; aunque es ver-
dad que prefieren el trigo, el centeno, la cebada, la avena, el maíz y el trigo sarracé-
nico y sobre todos las vezas.» Herrera, obra citada.
64 . F. CARRERAS Y CANDI
verse, que, los hay de construcción redonda y cuadrada. Los del pri-
mer tipo los hallamos en mayor abundancia en Andorra y en las mon-
tanas que separan estos valles de la Seu de Urgell. En Cabrera del
^Maresma, entre esta población y el castillo de Burriach, por el lado de
la sierra de Sant Joan, existe uno de esta forma, conocido por lo coló-
mer d' en Liado (105), Los palomares cuadrados, los vemos abundar en
la región de la Sagarra, según reseñaremos seguidamente al entrete-
nernos algo en su descripción.
Además existe otra clase de palomares que podremos llamar mixtos,
por ser construidos solamente en parte por la mano del hombre, apro-
vechando favorables circunstancias de las rocas en las cumbres de los
montes. Seguramente son ios más escasos. No sabemos si colocar entre
ellos, á la roca deis colomers, en la montaña de Montserrat (106). Pode-
mos hoy citar como ejemplar indubitable, el que existe en Ortoneda,
(región del Pallars) en la montaña llamada Roca-santa, conocido por
lo colomer d' en Motes. Aprovechando cierto cobertizo natural que
forma una roca situada en la cima de dicho monte, ha sido cerrado su
frontis por una pared artificial. Tanto esta, como el interior de la roca,
presentan centenares de agujeros apropiados para anidar las palomas.
Cerca de Roca-santa y en el barranco Llehró, hay la fuente deis coloms,
por hallarse en otro tiempo frecuentada por las torcaces del antedicho
palomar.
Aún pudiera apurarse tal materia añadiendo á las anteriores clases,
la del palomar natural. Pero no hallamos ninguna especialidad en que
las palomas aprovechen para anidar, los sitios que les parezcan á pro-
pósito, como V. g. en Barcelona sucede con las paredes de la iglesia
parroquial de San Agustín; en el antiguo cenobio de Sant Miquel del
Fay, con las altas rocas de encima del edificio monasterio, etc , etc.
Tampoco es excepcional, que, los palomares hayan dado nombre á
ciertos lugares de Cataluña, como v. g. la cueva de las palomas en la
costa de Sant Feliu de Guixols, la sierra Colomera en el Pirineo (107), el
(105) EstA & un kilómetro de la iglesia parroquial de Sant Feliu de Cabrera, en una
pequeña eminencia que domina buena parte del término. Su antigüedad, al parecer,
no pasa del siglo xv ofreciendo señales de haberse restaurado modernamente. Su
planta es redondeada y en el año 1870 todavía anidaban en él palomas. Conservándose
integro basta 1898, fué derrumbado á consecuencia de los barrenos bechados en la
roca donde so levantaba, á, fin de aprovecharla para adoquines. Su ala occidental, que
todavía se mantiene en pie, es lisa exteriormento y por el interior presenta nidos irre-
guluroa y colocados on once hileras, siendo la altura de las paredes de siete metros
aproximadamente. El diámetro interior del palomar oscilaba entre cuatro y cinco
metros,
(106) Capbreu del Bruch Hp Jo q„e en dit lloch te lo monestir de Montserrat, fol. 21, arohi-
vo parroquial de Santa María del Bruch.
íl07) A f68. Donación hecha por OHba conde de Besalú á Pregebunda, abadesa de
Sant Joan de los pastes y territorio de Coma de Vaca y Coma de Freser. Se dan como
limites «a serra de Morena usque ad colomera. > (Documento núm. 76 de Sunyer, archivo
Corona de Aragón.)
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MtíDlA 65
sin fin de payesías conocidas por el Colomer, más Colomar, etc., y dos
castillos de Colomers. De estos, uno perteneció á la mitra de Urgell en
1099 (108), y otro situado en el obispado de Gerona fué, en el siglo xv,
del Abad de Amer (109) y últimamente de D. José de Quintana y de
Colomers, cuyo celo en tenerlo en buen estado de conservación es dig-
no de encomio.
¿Tendrá aplicación á la orografía catalana, en combinación con las
costumbres de las palomas, las palabras laus colomoses citadas en el
año 1138? (110).
No puede precisarse en que época se abandonó la explotación de
los palomares aislados en el campo, ó de palomas en libertad, que tan
extendido debió hallarse en la Edad Media, cuya explotación ha desa-
parecido hoy día por completo. La existencia de una observación sobre
el tardío regreso de las palomas, consignada en 1811, podría hacernos
presumir si llegó á alcanzar en alguna localidad de Cataluña, á los
albores del siglo xix. Así leemos en el Calendario loara el principado
de Cataluña del año 1811, que: «si las palomas vuelven tarde al palo-
mar se puede esperar que lloverá presto.» Hablase de palomas que
permanecen fuera del palomar y han de regresar á él, según sucedía
en los tudoners ó palomares en despoblado, lo cual podría probarnos,
que, á los tales se referiría la antedicha anotación Pero la prueba es
muy débil, máxime cuando también pudiera ser esta, una de tantas
observaciones que van copiando, los calendarios, unos de otros, por
el prurito de llenar páginas, toda vez que ya la hallamos consignada
en el siglo xvi (111), en términos casi idénticos en Sevilla.
PALOMARES RURALES
Hemos de suponer, que la costumbre de construir palomares más ó
menos separados de las viviendas, fué tan antigua en nuestro Princi"
pado, como la de tenerlos en el circuito ó interior de las mismas. De
ahí que, mientras un documento del año 821, menciona cierta casa con
corral, huerto y palomar, sita en la villa del castillo de Llaers ó Llers,
en el condado de Besalú, otro del siguiente año 822, alude á un palo-
mar, que, con otras piezas de tierra en despoblado, existía en Viñola
(Urgell) lugar de las inmediaciones de Usiana (sic) (112).
Se limitan á estas dos las citas de palomares existentes en Catalu-
(1C8) Marca Hispánica, doc. núm. CCCXX.
(1C9) Begistro 3156, foL 65, arch Corona de Aragón.
(IlOj En cierta venda de unas viñas se lee «ubi sunt ipsas niñeas in ipsas ¡atis coló-
inoses.* (Cartulario de Tabernoles, fol. 13).
(111) «Palomas quando vienen al palomar más tarde de lo que suelen, denota
pluuias.» {Repertorio de los Tiempos, por Hieronymo de Chaves, Sevilla, 1561 )
(112) Véanse las dos notas 24 y 25.
1902 5
66 F. CARRERAS Y CANDI
ña durante el siglo ix, tanto por la escasez de documentos de dicha
época comparados con los que se conservan de siglos posteriores,
cuanto por la especial situación del país, que se hallaba en el comien-
zo de su repoblación y no exento de la amenaza de nuevas incursiones
que no debían tardar en efectuarse
Tampoco se desarrolló la colombicultura durante el siglo x. Los
contratiempos sufridos por los Condes de Barcelona en sus empresas
contra los árabes, especialmente al ser invadidas sus tierras por las
victoriosas huestes de Al-mansur, no permitía á, su pueblo dedicarse al
fomento de esta riqueza avícola.
De ahí que sean igualmente raros los textos en que se mencionan
palomares, concretándolos á tres: uno existente en cierto alodio sito
en A"cavell (condado de Urgell) en el año 908 (113'; otro en Sarria en
el de 956 (114) y el tercero en la antedicha villa de Llaers en 957 (115).
También se vislumbra la carencia de palomares en la fórmula de
describir las propiedades rurares al redactarse las escrituras de trans-
misión de dichos bienes. Cuando los escribanos detallaban minuciosa-
mente la diversidad de construcciones ó terrenos que constituían las
haciendas objeto del contrato, mencionando la existencia de casas,
torres, corrales, molinos, huertos, pozos, prados, pastos, viñas, selvas,
higueras, carrascales, árboles de fruto y sin fruto, aguas, viaductos,
reductos, tierras cultivadas ó yermas, etc., nunca hemos visto mencio-
nados á los palomares.
De igual manera al enumerarse las producciones de que era sus-
ceptible la hacienda del Crós y su molino, de todas las cuales percibía
diezmo el capellán mayor de Castellvell ó Castellví, en documento que
atribuímos al siglo x, se consignan las lanas, quesos, corderos, cabri-
tillos, pollos, ánsares, lechones y patos, sin hacerse mención alguna de
las palomas ó pichones (116). Creemos á estas dos pruebas negativas
de alguna elocuencia.
El paso del siglo x al xi se señala en la historia, con la despoblación
del condado de Barcelona y miseria subsiguiente, motivadas por las
invasiones de Al-mansur y de su hijo Abdel-Melik. Las proporciones de
esta emigración las manifiesta con expresiva sencillez, el escribano, que
(113) Donación de los condes de Urgell Seniofredo y Adaledis á la Canónica de Ur-
geU (le nn alodio <in viUa qne nocant í^roiiaucle uel in ipsas fines,» el cual se describe
«ipsum Bupradictum alaude cum ips') solero et cum ipso cohimbtirio et cum ortis ar-
boribua eréis paleareis cum exiis uel regressiis, earnm» {notaliarum, vol. I, doc 340 Ar.
Cat. Seu de Urgell).
(lll) Véase la nota 2it.
(1151 Vraso la nota 26.
(116) «Qaod capellanus maior castri ueteri habet decimam omniam rerum in domo
de oros ot molendini supcr declmis de lana et caséis et agnis caperolis pullis asseri-
bu8 atquo porcclliset de anets qnod de domo de crosis et eornm tenedonibus exeunt
vel exiredebent et deoimis do ortis de linis ecillcct et de canabis et de porris et de
«lliii et oepis et alus fractibus et rebus quod seoundnm consuetadinem terre decimari
\ient. (lib. Ant. Eccl. Cal. vol. IV, folio 75, doc. 2J4)
do
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUiXA EN LA EDAD MEDIA 67
en el caño 1018, redactó una venta de cierta pieza de tierra en el Va-
lles, llevada á efecto por Speciosa y su hijo Bosom, al consignar que la
vendían impulsados por la necesidad que se experimentó cuando los
hombres salieron del condado de Barcelona y emigraron á otras regio-
nes (117).
Mas la repoblación reaparece inmediatamente con mayor potencia
y entusiasmo que antes Menudean los contratos entre colonos y pro
pietarios para el cultivo de los yermos, concediendo ventajas á los
que se instalaban en las villas fronterizas. Fué indecible la actividad
desplegada en el condado de Barcelona durante el siglo xi.
En este tiempo aparece generalizada en todas las regiones de Cata-
luña la vieja, la cria de las palomas. En el llano de Barcelona halla-
mos muestra en todas partes de la presencia de palomares, según dire-
mos luego. En la región del Valles, el testamento sacramental de
Seniofredo, en 1018, lega un palomar en Palou (118); en 1054, se cita
el existente en el lugar llamado Codonyers, de Sant Cugat (119); en
10~3 continúanse los palomares de Cardedea y Vilalba en la descrip-
ción de un alodio vendido en distintos sitios de ambas parroquias (120)-,
de otro en Cardedeu en 1077, habla el testamento de Armengol Sama-
ren situándolo en la Vila-Algomá (121) y citándose nuevamente los
de Vilalba en el año 1107 (122).
En cuanto á la región del Maresma, en el año 1026, es mencionado
el palomar de Trayá, en el término del propio nombre, que más tarde
fué del castillo de Mataré (123), y el de Cirera en Mataré.
En la región del Panadés, año de 1020, al donar, Ermesinda, á Sant
(117; <Ipsa necessitate quifuit in ipso anno quando homines exierant de comitate
barcbinofie et fuerunt in alias regiones » {Lib. Ant. Eccl. Cal. folio 179, nám 521).
(116) Año XXII de Robert «id snnt térras et uineas casas et curtes solos et super-
positos, ortis ortales pratis aquis ductus et reductos et ip us arbores et uitis qni infra
sunt et ipso columbario sinml cum ipso molendino.» (Cartalario de Satit Cugat, folio 344,
doc. 1005, Arcb Corona Aragón).
(119) Año XXIII de Enrique »id sunt domos cum curtes cum solos et superpositos
térras Bcilicet et uineas cum arboribus diuersi generis et columbario at puteum qui
ibidem est.» iCartulario S. Cugat, doc. 146).
(l¿0) «In parrocbia sánete marie car titulo nel in eius términos uel de sánete agnetis
in locum uocitatum ulla alba uel in diuersis loéis separatim positum. Est namque
predictum aloiium eoclesia sancti uincenti casas casalis constructis uel heremis ha-
bitantes et in habitantibus terris et uineis caltis uel heremis columbariis praiis et pas-
cuis riuis fontanes et puteis aquis a^uarum molendinis cum illorum decursu et perti-
neneiis regos et eaput regos petris petrosis tam pronum quam planum tam montanum
quam et deoliuum.> {Lib. Ant. Eccl Cat, vol. III, folio 54, doc. 1.^5).
(121) «Itemquedimisit prefatus ermengandus ad prenominato filio suo petro ipsum
suum meliorem mansum qui est in villa algoma simul cum ipso columbario sicnt perti-
net de ipsa riera subfus ipso columbario et peruadit in transuerso usque in alodium
sancti licerii quodlahorabat isarnus.» {Lib. Ant. Eccl. Cat. vol. III, folio 63, doc. 17b).
(1<:2) «In vállense in parrochia sanóte marie de Cardedol in loco uocato uilla alba
scilicet eoclesiam sancti uincenci et domos cum sacrariis et columbariis cum terris et
vineis pratis et pascuis aquis cultis uel in cultis uie ductibus et reductibus ^ {Ant. Eccl.
Cat. vol. III, folio 53, doc. 16l).
(123) Véase la nota 80.
68 F. CARRERAS Y CANDI
Cugat del Valles, su propiedad de Castellet, término del castillo de
Fontanet, incluye un palomar (124); así como en las cercanías de
riera había varios, otros en cierto alodio del castillo de Frexano, que
por esta razón se apellidaba iMs Colomers. (125).
En el condado de Ausona, los cónyuges Amat Oliva y Valencia
vendieron, en 1093, unos alodios de la parroquia de Gurb con un pa-
lomar, al Obispo de Ausona Berenguer (126).
En el condado de Besalú, año de 1093, citanse los palomares em-
plazados en ciertos alodios de Sant Pere de Navata, Sant Julia de Vila-
dordis y Santa María del Puig (127). En Llaers, donde la existencia
de palomares hemos visto atrasarse al comienzo del siglo ix, alguno de
ellos dio nombre en este período, al castillo, conocido en el año 1025,
por castell Palomi (128) j del que con posterioridad habla á menudo la
documentación.
En el condado de Manresa, término de Castellar ó de la Manresa-
na, hubo en 1075, un palomar emplazado en torre (129).
En el condado de Pallars, al donar, en 1015, Guillem conde de Pa-
llars, diferentes alodios á su cuñado el vizconde Guillem y á su her-
mana Ermengardis, sitos en la villa Lagunuas y en el valle de Siarb^
se especifican los palomares de distintas clases que allí ya había cons-
truidos (130)-, y en 1050 aparece el castillo deis Colomers (131).
En el condado de Urgell no escasean citas de palomares. En 1012
Isarn donó á Senifret su yerno, un huerto con palomar, en Mera-
nich (132) En 1020 consígnanse varios palomares en Cornellana é In-
(124) Año XXIV de Robert «kasas kasalis curtís curtalis et cum ipso columbario te-
rris vineis,» (Cartulario de S. Cugat doc 575).
(125^ Cartulario de S Cugat, doc. 521.
(126) <Domos cum columbario et cum quintanis et alios alodíos> «in comitatu Ausone
in parrocbia sancti Hipoliti sanctique Andree de Gurbo» (Sacre Antiquifatis Catalonia
M S. del P. Pascual, papeles titulados Llibre del Dr. Joseph Bocafort, Pbre., folio 177).
(127; Año XXXIII de Felipe «Sunt namque prtfata alodia cum ecclesia sánete Ma-
rie de Cellarla ejusdem Ecclesie et Mansis Mansionibus Cassis Cassalibus Coluiubariis
Curtis Curtalis Pariets structis et destractis ortis ortalís canabaris linearis, pratis
pascuis fontaneis et disruptis, Montium etdeclium cultum et eremum rularibus discu-
rrenciis Arboribusfructuossis et infrnctuossis de quacumque progenie ibi essent Ga-
rriciis et Garrigariis et omnia sibi pertinentibus de jam dicto Alodio.» (Doc. núm 9,
de llamón Berenguer III, Arch. Corona Aragón),
(128) Véase la nota 8.
(129) Año XV de Felipe: "Sunt camque terris vel vineis kasas et ortis et arboribus
fructuoais vel infructuosis turrcm cum casis ct columbario' «et est r amque iamdicta om-
nia in comitatu Minorisa in términos de Castellar sive de Manresana vel in omnisque
loéis. (Doc 465 de Bamón Berenguer I, arcb. Corona Aragón).
(laO) «Sunt enim bec omnia que uobis trado uel dono atque concedo domos cum so-
los et super pósitos eorum cum gutis et stilicidiis earum casas casalibus ortis ortalibus
térras et uineas cum vinearibus cultas uel beremas arboris fructuosis uél infructuosis
(liid rsi i/rneris columbaria ¡jui ibinunt constructa uel fuerint, aréis paleareis molinis » (Per-
gaminos sueltos del arch. Capitular de la Seu de Urgell).
(131) Arch. Capitular de la Seu de Urgell.
. (132) «Casas quas babeo in uilla meranicus subtus ips» ecclesia quod emi de filios
Guadamiri condam. Eo dono uobis orto I cum ipso columbario quod est ad ipsa canale.»
[Dotalianan, vol. I, doc. 699, arch. Capitular Seu de Urgell).
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDLA 69
befaría (133). El sacerdote Miró, en su testamento del año 1050 (134),
dejaba un alodio en Asua, en donde existía un palomar, sucediendo
otro tanto en el de Saut Genis que Seniofret legó á su hermana Orusa,
en 1042 (135), y en el que menciona el presbítero Vivas en su testa-
mento del año 1051 (13G). Iiln 1060, la Canónica de la Seu recibió, de
Geralt, unos alodios en Noves, en los que había distintos paloma-
res (137); en 1077, á la propia Canónica fueron donados por el conde
Armengol, ciertos dominios en Arcavell, entre los que había paloma-
res (138) También en 1080, recibió la propia entidad eclesiástica, unas
tierras en Nabiners, con sus coiisiguicntcs palomares (139). El monas-
terio de Sant Sadurní de Tabernoles, emplazado en las orillas del Bali-
ra, obtuvo, en el año 1079, ciertos palomares sitos en sus inmediacio-
nes (140), en cuyas montañas vecinas, camino de Andorra, aún se ven
algunos de ellos en ruinas.
Siendo tan común allí, la existencia de palomares en el siglo xi
como puede entreverse por la anterior enumeración, no hay que extra-
ñar, que, los escribanos, al redactar una escritura de donación de alo-
dios, con todo lo que en ellos se sobrentendiese que podían contener,
no dejaran de especificarlos, como se ve palmariamente en la donación
que hizo Ramón Isarn_, en 1067, á la Canónica de la Seu de Urgell (141).
(13b) «Alode que abeo in corneliana vel in inbegaria id sunt térras et uineas casas
casalibus ortis arboribns eariis palliariis columbaris cnltum uel beremum siue in monte
slue in ualle.» {Dotaliarum, vcl. I, doc. 345, arch. Cap. Seu de Urgell).
(134) «Et ipso meo alaude qnod babeo in asua omuia et in ómnibus casas casalibus
simul cum ipso orreo et ipso columbario et ipsos ortos simul cum ipsos arbores.» {Dota-
liarum, vol I, doc. 723, arcb. Cap. Seu de Urgell).
(135) «Et ipsum alaudem quem babebat in ipsos torrents siue in sancto Genesio
térras et uinoas et arboribus simul cum medietate de ipso manso que babebat in sanc-
to Genesio simul cum ipsas masiungulas quem babebat cum gilmon et ipso columbario
inssit ut remanet ad oruza sóror iile.> (Dotaliarum, vol. I, doc. 445, Arcb. Cap. Sea de
Urgell).
(136) «Cum ipso alaude que babeo in salellas id sunt casas casalibus ortis ortalibus
cum illorum arboribus térras cultas uel incultas simulque cum ij^so columbario, et cura
ipsos molendinos.» 'Dotaliarum., vol I, doc. 446, arcb. Cap. Seu de Urgell).
(137) íEt sunt ipsi alodes in comitatu urgello in apendicio sancti saturnini qui est
situs in prelibata uilla. Id sunt casas casalibus columbaríis uel paleariis ortis ortalibus.
térras cultas uel beremas pratis pascuis, eto » {Dotaliarum, vol I, doc. 205, arcb. Cap Seu
de Urgell).
(13S) El Conde Armengol hizo donación á la Canónica de Urgell «de ipsis baiulis uel
franchedis quas babuerunt antecessores mei comités uel genitores in ipta uilla de ar-
chauel de quibus comes bor.ellus fecit cartam franchitatis ad ipsos bomines de preli-
bata uilla uidelicet ad centol siue ad posterita eius uel parentela. Id sunt casas casa-
libus curtes columbariis cum illorum super positis ortis ortalibus térras uineas,» etc.
{Dotaliarum, vol 1, doc. 492).
(139) «Térras vineas casas casalibus ortis ortalibus cum arboribus cultura uel bere-
mum pratis pascuis siluis atque garricis aquis aquarum uie ductibus uel reductibus
columbariis molinis mclendinariis.» {Dotaliarum, vol I, doc. 301).
(140) «Térras uineas kasai» kasalibas cortinis orreis columbariis eréis paliaris ortis
arboribus molinis petras mobiles uel inmobiles eremum uel condirectum in montes et
in ualles.» (Cartulario de Tabernoles, fol. 13).
(141) «In comitatu urgello in apendicio de tuxen uel infra eius terminis id sunt
térras et uineas kasas casalibus ortis ortalibus arboribus aréis paleareis exeis et re»
7o í"- CARRERAS Y CANDÍ
Ea los condados de Cerdaña y de Conflent, cítanse alodios que con-
tenían palomares, en el año 1046, en la Guardia y en Calascar (142)
y en 1083 en la villa de Pí (143). En la donación hecha por Guisla á la
Canónica de Urgell de la parroquia de los santos Feliu y Ennengol de
Ayguatebia, en 1072, se citan, formando sus pertenencias, los paloma-
res allí construidos (144).
La existencia de palomares en el Condado de Rosselló con anterio-
ridad al año 1041, resulta de las decisiones del Concilio reunido para
estatuir la paz y tregua en Tulu^es En la decisión V se manifiesta la
protección á palomares y pajares, mostrando lo extendidos que se ha-
llaban por dicho Condado (145) Una escritura del 1076, alude á pa-
lomares en dichas regiones (146).
Probado, pues, por la documentación, que en todos los ámbitos del
Principado existieron palomares durante el siglo xi, será dable seña-
lar para dicho período histórico, un apogeo en el fomento de la cría de
palomas.
Este desarrollo de nuestra avicultura sufrió terrible contratiem-
po al iniciarse el siglo xii, á consecuencia del potente esfuerzo con que
fué atacado el Condado de Barcelona por las huestes almorávides. La
iirupción del confín de Cataluña y saqueo y devastación de la comar-
ca del Panados, opina BofaruU y Broca, que ocurrió en 1106 (147).
Comprueba que, en 1107, dicha frontera estaba efectivamente ocupada
por los sectarios de Mahoma, la donación que Ramón Berenguer III
hizo á Sant Cugat del Valles, de una fuente en Monistrol, á fin de que
Dios le conceda victoria sobre los sarracenos invasores de sus confi-
gressiis cultum nel heremum pratis pascáis sllaís atqae garricis molínis molinaris cura
earam capuc aqais cursum et díscnrsam fontes fontanulis coi» w&a?í8 petras sedentes
uel mouentes » {DoUiliarum, vol. I, doc. 203)
(142) Testamento de Guitart «In primis iubeo ut ipo meo alaude que babeo in cer-
daiiia uel in confluente in ipsa guardia uel in ohaUascbar siue in anues id sunt casas
et ortos ortalibns torras et uineas cultum et eremum casalibas siue columbarios et ipsoi
orreos et ipsos arbórea.» {Dotaliarum, vol. I, doc. 697).
(143) Los ejecutores testamentarios de Clemencia, mujer de Pere Udalart dan á la
iglesia y Canónica de Urgell «alod in comitatu ceritanensi intus in iam dicta uilla de
pino siue in eius aiacencüs id sunt casas casalibus, columbariis ortis ortalibus pratia
pascuis siluis at^ue garricis.» (Dotaltarutii, vol. I, doc. 679).
(144) «Ipsam parroeohiam sanctorum felicis et ermengaudi quod sita est in uilla
aque tepide et omnc alodium quod ibi babeo» «domus cum solis et superpositis orrea
et columbario et multa alia ediíicia a parte diruta et tamen bediHcata in numera et
cum multis «rborum generibus ncmora. Que omnia eunt in suburbio elenense in ualle
conduente infra finos uel términos prefate uille aque tepide.» {Dotaliarum, vol I, docu-
mento 761).
(.145) «Mansiones vero Pagensium vel cloricorum arma ferentium. etc., columbaria
et palearla nllus homo noa incendat vol deatruat »
(14"^) «Et sunt ipsi alodoí in comitatu rossilionensc siue in ualle confluente sub nr-
bio holcuBo siue in valle aspirii uel in fonoliotense siue in uilla Ínsula in eius terminis
uol aiacensiis. Id sunt casas casalibus curtes cum illorum super positis uel cum ómnibus
columbariin siue cum ómnibus sacrariis qui sunt intus sacraria sancti stephani.» {Dota-
liiiriivi, vol. I doc. 76f<).
(147) Historia de Cataluña, vol. II, p&g. 398.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 71
nes (148). El propio Soberano, al tratar do restaurar el castillo de Oler-
dula, en 1108, afirmaba que ya hacía algunos años que los almorabi-
des habían devastado el Panados (149). En la misma fecha de 11C8,
una de las hazañas de los enemigos del cristianismo, fué llegar hasta
más allá de Barcelona, sitiando durante dos días esta capital (150).
La desolación de Cataluña, que se inaugura casi con el siglo xii, no
fué de corta duración. Con hechos de armas, ora favorables á los cris-
tianos, ora adversos, pero siempre llevando la peer parte, cabe supo-
ner que duró próximamente unos doce años. Codera señala la derrota
en el Congost de IMartorell, de los caudillos Abenalach y el príncipe
Abnabdala vulgarmente llamado Abenaixa, hermano del sultán Alí,
por el mes de Junio ó Julio de 1114 y el sitio de Barcelona en el pro-
pio año, poco tiempo después del antedicho combate, llevado á cabo
por Abubéquer, hijo de Ibrahim Abenteflut gobernador de Valencia,
Duró este sitio veinte días, concluyendo con una importante victoria
jDara Ramón Berenguer III en el llano de Barcelona á fines de 1114 ó
principios de 1115 (151).
Después de período tan aciago, todas las mejoras del país, y en es-
pecial las que radicaban en la agricultura, sufrirían notorio menosca-
bo, y por consecuencia lamentable retroceso.
Los grandes esfuerzos que tuvo de realizar para conseguir su pros-
peridad perdida, aparecen por do quier, siendo de ellos latente testimo-
nio algunos datos que hemos expuesto en otro trabajo nuestro (152).
Por lo que concierne á los palomares en el siglo xii, es natural que
tamaña devastación se mostrara con las ruinas de los que se hallaban
en despoblado. De aquí que algunos no se reedificasen tan fácilmente
y que, escribanos minuciosos, hicieran constar esta circunstancia en
sus escrituras. Como ejemplo existe la donación hecha en 1174 por Ra-
món de Cuyereta y su esposa Anglesa, á la hospitalaria orden de San
Juan de Jerusalem, de una parellada en la que había un palomar de-
rruido^ en S. Valentí del Panadés (153).
No faltan documentos que constaten la existencia de palomares en
el siglo XII, si bien los encontramos en número mucho menor que en
el XI, pudiendo probar la escasez de datos, que habría escasez de palo-
mares. Se mencionan los de la villa Boir (Cerdaña) en 1124 (154), los
(I4S) «Concedat mihi victoriam super sarracenia inuadentibua fines nostros.» (Car-
tulario de S. Cngat, doc. 525).
(149) Balari y Jovany, Cataluña: origenea históricog, pág. 279.
(150) Ibidem.
(151) Decadencia y desaparición de los almorávides en España, por Francisco Co-
dera. (Zaragoza lfc99), pág. 20.
(152) Xotaa históricas de Sarria (Barcelona 1897) págs, 94 y siguientes.
(153) Pergamino 115 del Calaix 23, arch. de S. Juan de Jerusalem en Cataluña.
(154) Donación de Sant Ot obispo de Urgell, á Pono Guerau: cin ceritania in villa
boir Bub tali condicione ut bene hedificetis predictum mansum et ibi maneatis et labo-
retis alodio uel niñeas et de alodiis quod circa domos sunt et de ruptis et de alus qiie
/2 F. CARRERAS Y CANDI
de Quinciá (Valles) en 1161 (155), los de la Seu de ürgell ea 1171 (156),
Vilella en 1148 (1571 y villa Perinés, en 1169 (158), ambas localidades
del condado de UríícU; Aguilella, en 1162 (159); Tutela hacia Forés
en 1189 (160), Gélida en 1167 (161), etc.
El aprecio en que se tenían las palomas en el siglo xii se advierte
de un testamente del año 1116, en el cual el testador mencionó legar á
su esposa, su casa y las palomas que poseía (162).
En el siglo xiii, variando por completo el estado del país, toma la
agricultura nuevo incremento, desarrollándose á la par la cría de las
palomas en el campo. Ya abundan de tal modo los documentos con-
signando la existencia de palomares en todas las regiones de Catalu-
ña, que creemos inútil continuarlos. De ellos, los hay esparcidos en
otras secciones de este trabajo, añadiendo como muestra, algunos más
pertenecientes á las veguerías de Ausona (163), Lleyda (164) y Pana-
laborata sunt donetis terciam partem. De ruptis qua8 feceritis in monte donetis tas -
cham de uineis uero medietatem, de columbariís qui moclo íbi gunt donetis medietatem.
De alÜB quos uos edificaneritis terciam partem. > (Pergaminos sueltos del arch. Capitu-
lar de la Seu de UrgellX
(155) Lib. Ant. Eccl. Catlu vol. IV, fol. 9, doc. 25.
(156) Dotaliarum, doc. d, arch. Cap. Seu de Urgell.
1,157) cAlodium quod abet Sancta Marin in villa primes per laboracionem id sunt
térras et uineas casas ortis molino I, Columbario I, arbores et directum quod habemus
in ipsos boEchos.» Pergaminos sueltos del arch. Capitular de la Seu de Urgell).
(158) Una donación de tierras al monasterio de Tabernoles <ad ipsa vilela peciolaa
III de térra cum ipsos morarlos que ibidem sunt» consignase lindaban <de IH uero
2}arte in columhdvio» (Cartulario de Tabernoles, fol. 34)
(159) Léese sn el testamento de Ermessendis mujer de Berenguer: «ad berengera
filia nostra ipsa sorte de alod de colomers qui est ante uiJla de agnilela> (.28 Armari de
Testaments, saco A, doc. 8, arch. S. Juan de Jerusalem).
(It 0) En el testamento de Pere de Tutela, f eñor de los castillos de Tutela, Piñanosa
y parte del de Forés se Labia de «unam peciam alodii in termine de Tutela ad illum
columbarium de solarlo.» Doc- 536 de Alfonso I, arch. Corona Aragón).
(161) Uno de los linderos del Más del Puig, en Gélida, era descrito: «a meridie in
campo de columbario. > (Cartulario de S. Ciigat, fol. 157, doc. 510).
(Icíi') «Et dimisit coniuge sue domus et colambus cum suis tenedonibns.» (Cartulario
de 8. Cugat, fol 119, doc. 441).
(16;-) Los siguientes pertenecen á )a veguería de Ausona, según aparecen en el archi-
vo de la Curia Fumada de Vich.
A. Ii40. «(Nonas Jalii) in parrochÜB sancti vinceucii de rieria et sancti petri de sa-
uassona. Et est una ipsarum in loco nominato columbario. > (Manual 1239-1242;.
A. 1211. «!,XV kalendtts Marcii) tota illa mea Barchina de columbario quod habeo ia
parrocbia sancti petri vici.> .Manual 1239- 1242).
A. 1241. «(XIII kalendas Septembris) in riíanso de tornamira tamen dominium qnam
aliquoa alios bo-nores et Campum de arces et campum (7e Coiin/i&ano » (Testamentos
1240- 1252;.
A. 1251. «III Nonas Fcbruariij ipso columbario Bobirano> estaba en el Más Armengol
de Vespella. (Manual 1250-1256).
A. l<¡i"6. «(VI idus Decembris) unum quadrum terre nostrum quam sub dominio tuo et
berenjtario de salisfuris Labemuí in parrochia eanilem (Santa Eulalia de Riuprimer)
ante tolumbarium manei B et bernardo de tolosa » Manual Vi.
A. l-i57 «íNonas Madií) Tercia uero earum (pecie terre) in qua sedet columbarius» en
el término de Santa Eugenia de Berga. Manual V;.
(164) A. 1:í20: testamento do Bernat Zamarra «dimito dicto P. unam domum cum co-
r*ALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 73
des (165). Lo generalizada que estaba la costumbre de construir pa-
lomares rurales, durante el siglo xiii, se constata en el hábito con-
traido por los notarios de los reinos de Aragón, al describir detalla-
damente las pertenencias ó derechos feudales que radicaban en un
término ó lugar objeto de contrato. En sus escrituras, al nombrar las
clases de posesiones rurales que se enagenaban en consonancia con el
formulario de la época, no solían omitir á los palomares^ como cosa
asaz divulgada. En demostración de ello, presentamos dos párrafos de
esta índole, el primero del año 1257, con referencia al Principado de
Cataluña (166) y el segundo del año 1252, aludiendo á un lugar de
Aragón (167), estando concebidos, ambos, en idénticos términos.
Durante los siglos xiv y xv prosiguen las citas referentes á palo-
mares, casi con tanta frecuencia como en el xiii. Su decadencia parece
manifestarse en los albores de la Edad Moderna, lo que tal vez
acuse la evolución de dejar de construirlos en despoblado, para insta-
larlos en las mismas payesías, ya en sus torres ó azoteas, ya contiguos
á las masías, como los gallineros y pocilgas. Y no siendo usual des-
cribir los gallineros en los contratos notariales, por conceptuarse una
parte del conjunto de la payesía, tampoco se juzgó indispensable men-
cionar á los palomares, según se solía hacer cuando los erigían en
despoblado.
Seguramente las desventajas de los palomares emplazados en los
campos y montañas, harían propender á su disminución, en especial á
lumbario iaxta sanottim P. de 8alas> (condado de Pallare). (Armario de Sisear, doc. 348,
arch. San Jaan de Jerusalem en Cataluña).
A. 1281: Quillem de Miravet comendador de Gardeny, cedió en enñteusis á Bernat
Gombau «Quasdam domos et nnum ortum oum oliuariis efc alus arboribus cum coliini-
bario et eorrallo sitas et sitnm in villa et terminio Alcanioii» (11 Armario de Gardeny,
saco F doc. 974 arch. S. Juan de Jerusalem en Cataluña).
(165) A. 1217: Gnillem de Castellvell en memoria de su madre, hermano Arberfc de
Castellvell ó hijo Guillem de Monteada, al instituir el beneficio de S. Miguel en Cas-
tellvl de Bosanés, estableció cDono eciam altari quartam partem tocias deoime quam
babeo in illa pariliata que est subtus columbarium versas Salfores.» (.Documento 85 de
Jaime I, arch. Corona Aragón).
(166) «Quod nos Jacobus etc. per nos et nostros successores damus et concedimns
nobis nobili et dilecto nostro Britoni Ancelmi de... in feudum ad consuetudinem Bar-
chinone et uestris imperpetuum Castra et villas de sancto Laurencio et de Stagello
qni Bunt in Kossilione cum mansis et bordís ad ipsa Castra seu villas pertinentibus et
debentibus pertinere cum casis casalibus columbariis furnis molendinis ortis ortalibus
uineis terris oultls et incultis heremis et populat's lignis et arboribus diversorum ge-
nerum aquis herbis pratis pascáis venacionibus piscacionibus introitibus et exitibus
melioramentis íacti et faeiendis.» Registro 9, fol. 16, arch. Corona Aragón).
(167) Concesión del castillo de Transmer en Taracjona á Ferrán de Montagat por
Jaime I «cum fortitudine illius castri cum casis casalibus colinnbariis vineis ortis orta-
libus ao terris cultis ct incultis heremis et populatis lignis et arboribus diuersorum
generum furnia et molendinis aquis herbis pratis et pascuis piscationibus et venationi-
bus montibus termiais introitibus et exitibus.» -Documento 1431 de Jaime I, arch. Co-
rona de Aragón). Puede verse también el documento 1442 del año 1256, donde concede,
Jaime I, á Martin Pérez justicia de Aragón, el lugar y castillo de Estada.
74 F. CARRERAS Y CANDI
medida que la perfección de los cultivos produjeron mayores rendi-
mientos á los propietarios rurales.
Según aparece de distintos documentos del siglo xiii, destinábanse,
los terrenos inmediatos á palomares, á herrenales {f regiríais en cata -
lán), esto es, á yerba para segar en verde, ya que, en tal clase de
cultivo, las palomas no podían causar los perjuicios que ocasionaban
en los campos de trigo, cebada y demás granos. Hállanse citas de esta
naturaleza con referencia á los lugares de Bañeres (año 1210) (168), Vi-
lanova de la Eoca (año 1221) (169), Yvarz (año 1231) (170), Palau del
condado de Roselló (año 1155) (171), MonterguU (siglo xiii) (171 bis)
S. Martí-de Provensals (año 1076) (172), Barcelona (año 1232) (173), etc.
Bien entendido está, que, con lo antedicho, no queremos sentar nin-
guna afirmación categórica, pues también había palomares rodeados
de otras clases de cultivo, como v. g. el inmediato á una barquera sem-
brada de centeno, en Vich, en el año 1250 (174).
LOS PALOMARES DEL TERRITORIO DE BARCELONA
Aunque de puro sabido no deberíamos repetirlo, preferimos pecar
de prolijos y en dos líneas decir, que, por territorio de Barcelona, se
entendió el comprendido desde Montgat á Castelldefels y de Molins de
Rey y de la sierra de Cerola y Vallvidrera al mar, abarcando las dos
llanuras, que, hoy se conocen por ylá de Barcelona y jjIcí del Llobregat.
Si bien hay noticia de existir allí palomares con anterioridad al
siglo XI, como el de Sarria del 956 (i75), la documentación se presen-
cies) Testamento de Pere de Banyere»: «Dimito Petro filio meo illum ferragenalíum
de columbario et illas domos de zaba » Era señor de los castillos de Bañeres, Tamarit y
Montoliu, Fodox, Santa Coloma y Fiol. {28 Arinari de Testaments, saco C, doc. 339,
arch. de S. Juan de Jerusalem en Cataluña').
(169; 'Fernigenalis, siout oocupat de columbario inferius usque in niam mercaderam.>
(/.t6. Ánt. Fa-cI. C'atli., vol III, fol. 30, doc. 85).
(170) Una de Jas cláusulas del testamento de Guillem Sinfró es la siguiente: tDimit-
to ad arnallum filium meum domos nostras de yuarz cum solum et surra positura de
abisso usque ad nubes cum meo ferragenalium ct columbarium integriter.» r¿S Armari de
Testamenta, saco A, doc. 152, arch. S. Juan de Jerusalem en Cataluña).
(171) Donación de una payesia al Temple «cum faragine et cum columbario ^ui ibidem
eBt.> (Inventaire sommaire des Arcliices departamentals des Pyrennées Orientáis),
(171 bis) Véase la nota 212.
(17-<;) Véase la nota 191.
(173) Forrera muger de Pere de Tort y su hijo Ferrer, conceden á Ferrer de Saca-
nelJa, cuanto poseían en la heredad Soler barbo, á fin de ^ne lo cultive y mejore; «ítem
damns vobis dicti et vestris ipsos ferregenallos dúos pro Barchinona ipso qui est liuM^is
roluiiihario alio qui se tenent juxta área et cum ipsa corta qui ibi est". (Documento 446
de Jaime I, arch. Corona Aragón).
(174) «(X kalendas Decembris) illa mea baroharia qui est seminata de ordeo qui est
in loco nominato barchcria de columbario sub área mansi de guaello.» (Manual 1250-1266
arch. Caria Fumada de Vich).
(175) Véase la nota 29.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA E\ LA ED VD MEDIA 75
ta silenciosa á este respecto^ liasta liallarnos en el antedicho siglo.
Tuvieron su palomar, en 1032, ciertas casas del arrabal de Barce-
lona suhtus ipso regó, consignadas en el testamento de Borrell (176)-,
en 1020 los había en el puerto de Montjuich, partida llamada Circulo
(177). Cercano á este puerto hubo el lugar de Provencana, donde un
palomar ya en pie en 1062 (178) ú otra construcción igual, dio nombre
á cierta payesia en 1174 (179).
En Sarria no conocemos solamente el mentado palomar del 956, sino
además otro vendido en 1163, por Berenguer de PalauA los Canónigos
de Barcelona (180).
En el término del Llobregat y años de 1002 (181) y 1056 (182), se
habla de palomares. Entendíase por este término al espacio compren-
dido desde la desembocadura del rio de Cervelló al mar (183) Sant Boy
del Llobregat, contaba, en 1089, con el palomar de Campllonch (184) y
Dudisme, que formó parte del extenso término de Olorda, con el que
Baldofret, Pbro , juntamente con sus tierras, donó, en 1002, á San
Pedro de Roma (185). El lugar de Almafar, en el llano del Llobregat,
tenía sus palomares en 1002 (186). Hallóse situado este lugar, cuyo
nombre recordaba aún la dominación sarracena, en la parroquia de
Sant Climent, término del castillo de Erapruñá, perdiéndose por com-
pleto en el siglo xii.
Aliado N. de Barcelona, los hallamos, en Agudells, al pie de los raon-
(176) Doc. 92 de Berenguer Ramón I. (Arch. Corona de Aragón).
(177; Casta, oambió con el Cabildo de la Catedral barcelonesa, un alodio «in termi-
nio de porto in loco ubi dicunt ad ipso circulo id est térra et casas et curtes et quoqui-
na et coluiabai-ics et ortos cuna puteos et fonte et ficulneas et uites.» (Ltb. Ant. Eccl, Cat.
vol. I, folio 144, doc. 374. Arch. Catedral de Barcelonai.
(178) «Domos et curte cum solis et suprapositis januis foueas columbario et pateo
terris et uineis.» (Ibidem, vol. IV, fol. 25, doc. 77}.
(179) «Ipsas domos quas habebat in ipsa villa de proninciana et ipsas II fexes terre
quas habebat ad ipsas fígeras ad ipsum mansum de columbario,' (Cartulario de Sant Cu-
gat, fol. 250, doc. 771).
(180) «Totum illam honorem et baiuliam et feuos domos térras et uineas et oliuarias
et arbores diuersi generis cum columbario et omnia in ómnibus cum pascuis adempriai3>
etcétera. (Lib. Ant. Eccl. Cat vol. II, fol. 2, doc. B).
(181) « Una térra cum casas et curtes solos et suprapositos columbario ao solarlo orto
cum arboribus uitis cum trilea orto oum pomiarios.» (Cartulario de Sant Cngat, fol. 242,
documento 756).
(182) «Et domos que ibidem sunt cum solos et suptrpositos et ostios etjanuaset
foueas oum guttia et stllliciniis et ipso columbario et macerias et casalioiis > (Doc. 17á
de Ramón Berenguer I. Arch. Corona de Aragón).
(183) Cartulario de Sant Cngat, fol. 243. doc. 757
(184) < fit ipsas uineas qui sunt ad ipeo columbario de campo longo in parrochia saacti
bandilii.» (Cart. de S. Cngat, doc. 725).
(185) «Cum domibus ortis et arboribus cum oratorio instructo garriciis et paschais
et columbario, cultum vel hercmum » Documento. 64 de Ramón Borrell, Arch. Corona
de Aragón).
(186) «Et sicut adigilane consessit ut cartam ei fecissent de ipsas suas casas et cur-
tes et turre et columbario simul cum ipsa térra uel cum ipso orto uel ipsis pomiferis
quod abebat in almafar.» (Cartulario de Sant Gugat, fol. 2"0, doc. 834).
76 F. CARRERAS Y CANDÍ
tes de Cerola, en 1056 (187); en Provensals, en 1004 (188), 1009 (189),
1032(190), 1076 (191) y 1080(192) con el más ííeZCoZomer en 1174 (193);
en Badalona, año de 1064, en la villa Foiano (194); y en Sant Adriá de
Besos en el año 1013, al donar, el obispo de Barcelona Deus-dedit,
dicha iglesia y pertenencias de la misma, á su Canónica (195).
Réstanos tratar de los palomares existentes en las dos vecinas
parroquias de Sant Andreu de Palomar y Santa Eulalia de Vilapiscina,
mereciendo especial atención algunas particularidades que presentan
en el último de estos lugares. De los que se mencionan en Sant Andreu
en el año 1081 (196), nada podemos aducir, ni menos ligar tal cita con
otra del año 1401, en qiue se señala la existencia de un palomar de
Guinardó (197). También aparecían, en esta parroquia de Palomar,
(187) «In nomine domini Ego Vdalardo vicecomitis et -¡ixori mee Gilla viceoomi-
tissa vinditores sumus tibi bermon. Per hano scripfcnra uinditionis nostre uindimua
nos tibi peoia I de térra culta et medietatem de I ° palumbario et medietatem de I
Sacrario et est hec omniain territorio barchinone ubi diount agudels.» (L/6. Ant. Eccl.
Cat. vol. II, fol. 42, doc 1171.
(188) Ugoberto levita y Güila venden á Vivas «curte cum cidumbarios dúos et puteo
et trilea nostrum proprium juod habemus in territorio barchinonense in terminio de
prouincialos.» (Doc. 73 de Ramón Borrell, Arch. Corona do Aragón).
(169) «Domo cum solo et superposito quem tu ibidem edificasti simul cum columbario
et orto cum arboribus et puteum» «qui est in territorio Barchinonense in locum que
dicnnt Prouinciales » (Doc. 93 de Ramón Borrell, Arch. Corona Aragón).
(190) Se refiere á unas casas en Sant Martí de Provensals «cum puteo atque
columbario » (Doc. 9o de Berenguer Ramón I, Arch. Corona Aragón^
(191) Son objeto del contrato: «casas ubi habitat fulcho et casaliciis qui ibidem est
et ferregenal cum ipso campo et columbario et oliueres et ulmos.» «Et hec totum est it
prouincialis » )Lib. Ant. Eccl. Cat. vol. II. fol. 124, doc. 367)
(19¿) «Domos meas ad ipso villareno cum ortis et columbario cum terris que in cir-
cuitu sunt.» (Doc. 45 de Ramóa Berenguer II, Arch. Corona Aragón).
193) Entre los legados que hace Tayá en su testamento hay: «Conceasit nepoti suo
Guillelmo ipsas domos quas habebat in ipsa uilla de prouinciana et ipsas II fexas
torre quas habebat ad ipsas figeras ad ipsum mansum de columbario.» (Cartulario de Sant
Cugat, fol 250, doc. 771).
(194 Se describen estas posesiones en los siguientes términos: «alodíum nostrum id
sunt térras cultas et eremas cum montes et garricis planum uel implanum térras et
uineas et trillas et arbores de cunctisque generibus ubi sunt fundatas cum fontes et
aqua ad rigandum cum casas et curtes cf coíí;/ii6a;70s solos et superpositos eb foueas
hostiis et ianuis et limites cum petras magnas uei micimas.» (Líb, Ant. Eccl, Cat,
fol. 128, documento 37?).
(165) «Addidi nempe ego Deusdedit Episcopus Barchinone ad prefatos canónicos
térras et vineas cum casas et curtes et columbarios cum ecolesia sa.ncti Adriani mar-
tyris et cum hortos et columbario qui est hec omnia ultra Álveo bisocio- ( Speculum Offl-
cialatus, fol. 160, Arch. Catedral de Barcelona).
(lí'6) «Ipsum alodium totum quod balloninns ñlius condam predicti ansoualli qui
fait frater noster dimisit nxore sue nomine Guilla in nita sua id sunt domos et vineas
ac térras et columbarios et diaerti generis arbores tt puteos.» «Hoc uero totum predic-
tum alodium est in parrochia sancti Andree apostoli de palumbario » (Cartulario de
Sant Cugat, fol 306. doc. 928).
197, En Ja apoca de entrada de nn censo librada por el prior del Hospital de Santa
Creu, A Pero Palau de Sant Andreu de Pal jmar radicando en cierta pieza de tierra «quod
est in loco vocato de vilatrau territorii barchinone. Et terminatur dicta pecia terre ab
oriente in via qua ascenditur ad columbarium di' ijuinardo: a meridie in via mulneria. .»
Oíanual 1401—1401, fol. 13, doc. 51, Arch. Hospital de Santa Creu de Barcelona).
PALOMAS y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 77
algunas torres, como v. g. la del 1118 (197 bis) donde bien pudiera
haber su lugar destinado á palomas.
En cambio hubo en Vilapiscina dos célebres palomares objeto de
múltiples contratos durante dicho siglo xi. Estaban contiguos y más
bajos que la iglesia de Santa Eulalia, teniendo á su alrededor nueve
dextros de tierra á ellos adscrita. La cana dextra, mayor que la
ordinaria, permite deducir, que, el área que les pertenecía vendría á
ser de unos 144 palmos catalanes ó sean 27 metros aproximadamente.
Lindaban, al N. con antigua era, al E. con un camino público, al S.
con el torrente y al O. con pertenencias del presbítero Geribert.
En el año 1035 estos dos palomares eran beneficiados á prorrata
por siete personas distintas, dándonos la documentación los nombres
de cuatro hermanos de la prole de Sunyer llamados Ervigio, Geribert,
Riquel y Blanca y de un tal Bernat Bernat, resultando desconocidos
los dos restantes condueños. El presbítero Geribert, como propietario
de las tierras vecinas á los palomares, había de tener interés en que
no interviniesen tantas personas en ellos. Así pues, vemos aprovecha-
ba las ocasiones que se le presentaban de adquirir participaciones de
los demás condueños.
La primera de las compras de que hallamos noticia;, la efectuó
Riquei en 1035, que adquirió de Blanca la mitad de una casa que
poseían por indiviso y la setena parte de dichos dos palomares (198).
Algún tiempo después, la propia Blanca cedió en prenda á su hermano
el presbítero Geribert, dos participaciones que poseía en los palomares
de Vilapiscina, según aparece en distintos contratos que llevan las fe-
chas de 1040 (199) y 1047 (200).
(197 bis) <AlodiurQ uero suum omne quod habebat in rexago nepoti sno sesnano
dimissit simal cum feuo de turre de palomario qnam habebat per fílios bertrandi su-
niaTÍi> (Lib. Ant, Eccl. Cat. voL I, fol. 31, doc. 56).
(19S) Riquel vende á Blanca su hermana <de medietate de ipsa chasa et curte quem
abeo cum te emptrice cum solos et superpositos parietes guttas et stillicinios et ipsa
mea hereditate que abeo in ipsos ferragenales et i« i'^sos coZ/íí/í&íiív'os et in ipso orto
cum ipsos arbórea et in ipsa uia et in dextros VIIII de térra qui sunt insta ipsos colum-
barios ijjsa setena parte: et est hec omnia in territorio barchinonense íq terminio de
sancta eulalia de uila pecina. Aduenit mihi per uocem genitores mees siue per onxnes-
que noces. Affrontat hec omnia de parte circi et de aquilonis in térra de meos heredes.
De meridie in térra de meos heres et in tcrrent. De occiduo in uia.» {Lib. Ant Eccl. Cat,
vol. II, fol. 95, doc. 290).
(I£9) Blanca da en prenda á su hermano Geribert sacerdote «casales cum ipsa
madira parietes guttas et stillicinios et solos cum íoueas et cloacas et palumbarios et
térras et uineas cultum uel eremum in cunctisque locis: et est hec omnia in territorio
barchinonense in parrochia sancti andree in terminio de orta in locum quem dicunt
uila pecina.. » cAffrontat namque omnia de parte circi ia uia que pergit a romanedo.
De aquilonis ia uia qui pergit a barchinooa uel ad ij)8o pontonal. De meridie in ipsa
uentosa. De occiduo in terminio de orta • (Lib. Ant. Eccl. Cat. vol. II, fol 88, doc. 263).
(200) Blanca da en prenda á su hermano Geribert presbítero: <casalt8 et curte et
horto cum arboribus et puteo et ferragenal et palumbarios et térras et niñeas et cultas
. et eremas: et est hec omnia in territorio barchinonense in terminio de orta uel uila
pecina in parrochia sancti andree. Aduenit mihi hec omnia per noce genítorem
78 F. CARRERAS Y CANDI
Ya en el año 1036 Geribert había comprado á su hermano Ervi^io
lo que poseía en Vilapiscina, inclusa su parte en los palomares (201).
En el año 1052, se le escapó á Geribert una venta, que de su porción
en los mentados palomares, hicieron, Bernat Bernat y Ermeniardis
(202). Pero poco después, ó sea en 1054, obtuvo de los compradores^
Vidal Duran y Guisla, esta coparticipación, si bien hubo de pagarla á
buen precio Bernat Bernat la vendió por sólo medio mancuso y Vidal
Duran percibió por ella dos mancusos (203).
Tres meses más tarde el propio Vidal Duran, vuelve á vender á
Geribert, otra setena parte de los palomares de Vilapiscina, adquirida
por compra, no sabemos á quien, obteniendo igualmente la susodicha
suma de dos mancusos (204). Es de creer, que, con tales reventas, Vi-
dal verificaba pequeños negocios á costas del empeño de Geribert, en
ser único propietario de estos dos palomares.
Otras importantes adquisiciones de tierras de labor, por aquellos
alrededores, hacía, este presbítero de Sant Andreu (205), y con ellas al-
gunos palomares enclavados en las mismas, según hallamos en una
del año 1047 (206). Hizo testamento en el de 1068. legando á sus hijos
Pons y Pere. las casas en que habitaba y los palomares (207)^ quizás
los dos de Vilapiscina, que tan cuidadoso anduvo en adquirir.
De notoria importancia habían de ser estas construcciones, cuando
eran susceptibles de tales subdivisiones y contratos. Alguna de ín-
dole análoga, creemos daría nombre á la antiquísima iglesia de Sant
Andreu junto al Besos.
No fué el único lugar, el del llano de Barcelona, que se conoció por
meorum 8Íue per uUasqne noces Affrontat hec omnia de parte circi in ipso holma-
teUo. De aquilonis in littora bisaacü. De meriJie in ipso pontonal. De occiduo in mon-
te aqailar » {Lib. Ant. Eccl. ('af. vol. II, fol. 9o, doc. 294;i.
(201) Vende Ervigio á Geribart su hermano «casas cnm curtes et s' los et su-
perpositoB parietes guttas stillicinios et petras et era et ferragenals cum /psOH coIkiii-
liarios cum solos et enperpositos et hostias et ianuas et foueas et cloacas et arbores et
puteo cum aqua. Que abeo in territorio barohinonense in parrochia sancti andree in
loco que dicunt uilla pÍ8ciiia> lindando <de orientis in térra de gnadallo de merüie in
torrente qui currit per orta per tempus plnuiarum De occiduo similiter in torrente et
in strada publica. De circi similiter in strada > (Líb. Ant. Eccl. C'at , vol. II, fol. 81, docu-
mento il36.)
(202) Apéndice, documento núm. I.
(203) . . . II.
(204) . . . III.
(205) Ln documento del año 1053 le llama «geriberto sacer sancti andree. > {Lib. Ant,
Eccl. Cat. vol. II, fol. 102, doc. 310).
(206) En 1047, Geribert compró á Ramón Esteve, á su madre Guisla y á Oriol, una
propiedad en S Andreu de Pal. mar com])uesta de «casas et curtes cum solis et supra-
positis i)arietes guttis et stillicidiis hostiis et ianuis foueis et cloacis orto et puteo et
torculario et ferregenales et columbarios terris et nineis cultis uel incultici) (Lib. Ant.
Eccl. í'at volumen 11, fol. 49, doc. 1 9).
12071 «Ttern onncedo poncio filio meo et fratri suopetro ipsas meas domos ubi abitat
cuín ipso alodio quod est in oircuitu et puteo et orto qui intrinsecus est et arbores et
columba rioB et nioeis quod dioitur planellas.» ^¿¿6. ^l«í. £ccí. C'«í. vol. II, fol. 99, docu-
mento 802 .
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 79
Palomar. Hacia el Llobregat y en las inmediaciones de Cornelia, había
al parecer, en el año 1005^ otro sitio asimismo apellidado (208)^ cuyo
nombre no prosperó á través de los siglos, ya que hoy se ha perdido
por completo.
LOS TÜDONERS O PALOMARES DE TORCACES EN LA SAGARRA
Indudablemente la región del principado catalán, que se nos presen-
ta más interesante bajo el aspecto de contener palomares de torcaces-,
es la vulgarmente denominada Sagarra. Hay probabilidades de haber
debido el nombre que lleva, ala romana Cigarra, que, el Rdo. Segura,
apoyado en ciertas antiquísimas lápidas de Prats de Rey (209), sitúa
en esta. población.
La Sagarra, región de límites anchos y nada precisos, cuenta con
multitud de pequeñas poblaciones y no pocas ruinas de castillos, es-
caseando las payesías aisladas El suelo, aunque no muy feraz, resul-
ta aprovechado por la laboriosidad de sus habitantes, que extraen
cuanto puede dar de sí.
Entre la diversidad de ruinas que notará el curioso excursionista,
hemos de separar las que denotan pasada fortaleza^ ó derruidos co-
rrales, para estudiar solamente las de palomares aparejados en despo-
blado para las torcaces. Los sagarre tas todavía les conocen por ttidoners
y colomers salvatges. Puede constatarse la existencia de buen número
de ellos, no sólo por sus restos, si que también por lo que consignan
los archivos locales. Larga é ímproba sería nuestra labor si tratára-
mos de presentarla completa, limitándonos á consignar lo que bue -
níi mente nos ha sido posible.
En Segura hay los vestigios de un tudoner. En Glorieta, lugar de-
nominado solar deis colomers, aparecen los restos de otros dos, en la
pared de uno de los que, durante el primer tercio del siglo xix, todavía
anidaban torcaces. Entre las poblaciones de Montornés y Grañena,
existen ruinas de otro. En Vallfogona de Riucorb, cinco mostraban sus
restos, dos de los que han sido recientemente rellenados de tierra, á
fin de aprovechar su área para el cultivo.
En Guardialada hay las interesantes ruinas de dos de los más cu-
riosos de la Sagarra, y que describiremos luego. En Savellar la parti-
da rural denominada lo colomer, conserva la tradición de la existencia
de uno de ellos. En Sant Antolí se ven restos de dos tudoners. y en Ga-
ver los de otros dos. En Santa Coloma de Queralt, hay las ruinas del
colomer d'en Gulet, veinte minutos al N. E. de la población. La docu-
(208) «Et est ipsa prefata in comitatu barchinonense in terminio de cornelian-o uel
de palomar et de gaUegus.» (Cartulario de 8. Cngat, fol. 246, doo. 761).
(209) Eevista de CienciaB HistóricaB (Barcelona) vol. IV nám. V,
80 F. CARRERAS Y CANDÍ
mentación referente á Montergull cita á varios palomares, así como la
de Albió. En Aguiló lo colomer del más d^en Gaxet, es bastante intere-
sante, y también otro subsistente en la Guardia deis Prats.
Analicemos brevemente los caracteres que ofrecen las ruinas de los
V-S
-^
->?•=- —- ~ -^
cColomer del más d'en Gaxet» á Aguiló
palomares de la Sagarra. Todos los que hemos tenido ocasión de ver,
presentan un mismo tipo de construcción: su planta es cuadrilátera, no
empleándose más material que piedra y argamasa y emplazados fuera
de población, ya entre bosques, ya rodeados de cultivos. Son varias
sus dimensiones; los hay cuya área rectangular, muestra una superfi-
cie interior de seis metros de largo por noventa centímetros de ancho^
como el del Soler del Almorayt (210) de Vallfogona de Riucorb, y
otros cuya superficie es de doce metros de largo por dos y medio de
ancho.
nA juzgar por los restos de los mejor conserva-
dos que conocemos, su sencillez no puede ser
mayor. El más completo está en Guardialada,
afectando la forma de una torre cuadrada, cuyos
lados tendrán aproximadamente cinco metros y
su altura doce. Se entraba en él por una puerta
al nivel del suelo, ostentando ventanas en el pri-
mer piso y multitud de agujeros para anidar las
palomas. El segundo de Guardialada, si bien peor
conservado que el precedente, todavía enseña lo
que fué en otras épocas. De forma rectangular,
su superficie abarca al exterior doce metros, por
p, . , , , j , dos y medio; y como sus paredes acusan un espe-
i'lnnta dol palomar del -i i .1 f r
Soler del Aimorai/i. sor de novcuta Centímetros, resulta tener interior-
mente diez metros y medio, por noventa centíme-
tros. La altura será de seis metros aproximadamente. Toda la fachada
(210) Este nombre, legado de la ocupación sarracena, lo hemos hallado mencio-
nado en documento del año 1324, del archivo parroquial de Vallfogona.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA RN LA EDAD MEDIA 81
donde hubo la puerta de ingreso, está totalmente desaparecida; y en
sus paredes interiores, los agujeros ó nidos están colocados en siete ú
ocho hileras, encima unos de otros.
Enteramente igual á los precedentes es el aspecto de las ruinas del
colóme V del más (Ven Gaxet en Aguiló, si bien tienen la particularidad
de no haber puerta de ingreso al nivel del terreno, entrándose por una
ventana, con auxilio de escalera portátil. Su superficie rectangular de
unos nueve metros por dos y medio, tenía las paredes lisas exterior-
mente y muy toscas del interior, con abundantes agujeros, irregular-
mente distribuidos, para anidar las torcaces, cuyas aves entraban y
salían del colomer, por otra serie de agujeros que atravesaban la pa-
red del mediodía por debajo del tejado. Al pie de la eminencia donde se
emplazó, corre un torrente conocido por rasa deis colomer s, en plural,
por cuanto, mas abajo de él y en término de Santa Coloma de Queralt,
existe aún lo colomer del Golet, convertido en caseta para guardar pa-
ja. Intencionadamente se construyeron ambos palomares en las inme-
diaciones de dicho torrente, por el cual fluye el agua, á ñn de poder
allí beber las torcaces.
Remoto resulta el origen de los tudoners de la Sagarra. A mediados
del siglo XIII existían en los términos de Santa Coloma y de Monter-
guU (212) en donde proseguían explotándose en el xiv (213) y tenien-
do el señor del Castillo, que era el Prior de San Juan de Jerusalem,
palomar propio, en 1371 (214).
Por lo que respecta á Vallfogona de Riucorb, cítase en el siglo xiv
el colomer del castell. Estando el término sujeto á la jurisdicción del
Prior de S. Juan de Jerusalem, debía pertenecer tal palomar, al Comen-
dador de Vallfogona, de quien era el castillo. El mismo libro continúa
(211) A. 1260 «Omnia alia quam habemuB et habere debemusin toto termino sanóte
oolumbe et de Renric et de Colomers exceptato un borto quam habemus in fontem
de gatilepa.>
A. 1260 «Trado vobis quasdam domos quam habemus in uilla sanóte columbe que
sunt in uilla noua et unum campum apud columhariis quod af'rontat in termino de
monte superbo et cum termino de almosela.> (Arohivo parroquial de Santa Coloma de
Queralt),
Montergull y Eeurich forman hoy una sola parroquia, lindante oou la de Santa Co-
loma, siendo parte integrante de esta iiltima Almonsella ó Almoella.
(212) »E primerament te e posex la dita esgleya un fereginal lo qual afronte ab lo
tros del colomer den P. Quiribert, daual la vila e ab lo ual de la uila, en la qual cosa no
ha afer res nuyl altre senyor.> <Item te e posex vna sort de tera ab dues parades, la
qual afronte ab a. colomes de la vna part.» «ítem te e posex vn tros de tera al loch no-
tat co/o7)ie8.» «ítem la masia den A. colomes conreus xii diners » (Archivo parroquial
de Reurich Capbreu de Montergull),
(213) Lo nostre poblé. Aplech de noiicias fahenfs pera la historia de Vallfogona, 2^^''' Mossén
Ramón Corbella Pbre. página 139.
(214) Entre las propiedades que P. Cervera tenia por el Hospital de S. Juan de Je-
rusalem figuraba tltem I íort al colomer del castel ab lo colomer XV s. s.» Entre las
de P. Alcover viene continuada. «ítem I (sort) ab lo colomer ques te ab en Johan Giner
CCCXXX ss.» (Libro en folio menor, del siglo xiv Ex Arm ° 24 perteneciente á Vallfo-
gona de Riucorb, archivo S. Juan de Jerasalem en Cataluña).
1902 6
82
F. CARRERAS Y CANDI
Otro palomear sito en esta misma parroquia (215). A flnes del siglo xv
prosi'^uen subsistentes palomares en Vallfogona, mencionándose á uno
del cual por sus ruinas, todavía existentes, puede hoy día apreciarse
algo de lo que fué. (215).
Al si^lo XVI corresponde la última noticia hallada sobre tales cons-
<Tadoner> en Gaardialada
trucciones aludiendo al palomar que se levantó en el término del cas-
tillo de Albió(216).
Ignoramos la causa que puede haber motivado, en tiempos moder-
nos, el completo abandono de la industria de fomentar la procreación
(215) En nn cuaderno sin fecha del archivo parroquial de Vallfogona de Riucorb,
entre laa Valies den Johan Corbella, se hslla la partida siguiente: «ítem vn tros de teira
dauall la vila entre dos camins, nomenat lo colomer, affronte a sol yxent... a ponent
ab lo eutre forch deis camins que van a la creu a tremuntana ab lo verjer den pere
pons del portal y lo camí que va a guimera.»
1216) En un establecimiento de tierras hecho por Juan Minguella y de Flguerola
castellano de Albió, en 1588, existente en un manual del archivo parroquial de Valí
fogona de Riucorb, leemos lo siguiente: «ítem quarto alium terre trotium tinentie
jugeri siue jornal parum plus vel minus partim terre cuite et partim aree cum amig-
dalie et coli(m{/ario: confrontatur ab Oliente cum paulo Marti a meridie cum via que
Itur de Albio ad loonm de Vallfogona ab ocasu cum domino oaslano stabilienti».
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 83
de las torcaces en la Sagarra, que, por lo antes dicho, puede colegirse
estuvo arraigada y generalizada. Quizás durante las dos guerras in-
testinas de los siglos xvii y xviii fueron destruidos los palomares y
las últimas generaciones de aquellos payeses creyeron que no compen-
saban sus rendimientos, de los desvelos, que, su utilización en despo-
blado les exigía, á causa de tantos enemigas como atacan y destruyen
las crías, según Tirso de Molina ya dejó consignado en la curiosa es-
trofa últimamente exhumada (217):
Está bueno el palomar
Fenisa? Hay poca alcareña
Y culebras y estorninos
Me comen los palominos.
PALOMARES A PARCERIA Y A CENSO
No siempre, los palomares, fueron explotados por sus propietarios.
También se entregaron á colonos ó enfiteutas, ya á parcería, ya á cen-
so, según solía verificarse en Cataluña con las demás explotaciones
agrícolas.
La parcería aplicada á la cría de las palomas, es muy antigua, atra-
sándose al siglo X, las pruebas fehacientes de su existencia en Catalu-
ña (218).
Al siglo XII pertenecen los más antiguos detalles de la manera como
se practicaba dicha parcería. Por datos que tenemos referentes á los
obispados de Urgell y de Barcelona, podemos estatuir, que, general-
mente consistió en la mitad del producto de los palomares, habiendo
alguna excepción para los que eran nuevamente construidos por el co-
lono.
En el año 1124, San Ot obispo de Urgell, al donar á Pone Guerau.
cierto alodio en la villa Boir (Cerdaña) impúsole por obligación, edifi-
car una masía para su residencia, cultivar campos y viñedos, roturar
los montes, etc. De los palomares existentes en dicho alodio, debía dar
la mitad de su produelo al Obispo y de los que en adelante edificare
Guerau, solamente la tercera parte (219). Más adelante,'en 1171, Bonet
prepósito del mes de Julio de la Seu de Urgell, estableció á los cónyu-
ges Pere y Bonadona, diferentes tierras y molinos, habiendo en las pri-
meras, un palomar y varias colmenas. La mitad del producto de las
(217) Diccionario enciclopédico hispano-aviericano; voi. lá, pag. 695 (Barcelona 18f4).
(218) Véase la nota 29.
(219) Véase la nota 151.
84 F. CARRERAS Y CANDI
palomas quedaba para el Prepósito, mientras que, en las colmenas, la
miel era beneficiada solamente por el colono (220).
Pere, canónigo de Barcelona, en el año 1161, estableció las tierras
del manso Quinciá, á 011er y á Guilleuma, comprometiéndose éstos, á
plantar olivos, construir un buen palomar y tener cría de ánsares. De
los frutos producidos por el olivar, así como del producto de estas
crías, debía dar la mitad al Canónigo, quien prohibía á 011er y á Gui-
lleuma, reconociesen jamás á señor alguno sino fuese á él y á sus suce-
sores en el cargo (221).
Al parecer, en el siglo xii, fué costumbre general, no sólo para las
palomas, sino también para los ánades, dividir en partes iguales el pro-
ducto de sus crías. Confírmalo respecto á estos últimos, en 1125, el es-
tablecimiento hecho por el obispo de Barcelona San Olaguer, á Ramón
Berenguer y Ermessendis, de la masía Espodoya en Proensana (llano
de Barcelona) (222).
La reserva que se hacían, los Señores, de la mitad de la producción
de los palomares, en ciertos establecimientos de tierras, y cuya conse-
cuencia era, quedar dividida, su propiedad, entre dos personas, debía
palpitar igualmente en las enajenaciones de los propios palomares. Por
lo mismo estas serían de su mitad, tanto por parte de los dóminos, como
de los enfiteutas. Ya en el siglo x, hallamos un contrato de compra-
venta en que sólo figura la mitad de un palomar. Se refiere al año 956
y al término de Sarria, del llano de Barcelona (223). En el siglo xi y
año de 1056, al vender, Udalart y Guisla vizcondes de Barcelona, una
posesión en Agudells, se consigna asimismo entrar en ella, la mitad de
un palomar (224).
Tal costumbre no la hallamos en siglos posteriores, quizás por de-
fecto de documentación. Solo en el siglo xv, cierto contrato referente á
Vallfogona de Riucorb, habla de tenerse un palomar á parcería, ó sea
á tercio y cuarto (225).
(220) «In columbario antem babeatis medietatem et tenete ipsum rectnm et date pas-
tam beremi. ü/ansiones vero damus et facíte indejastlciam melliis in kalendas julii.»
{Dotaliorum, vol. I, iocumento fí, arcb. Capitular Seu de Urgell ;
Una nota del siglo xvi puesta encima la palabra mansiones nos muestra su equiva
lenoia diciendo Ames o buchs de Abellcs,
(221) «De illis uero oliaariis quas ibi plantaueritis et empeltabitis donetis mei et
meib medietatem et quod facietis ibi boninn columbarium et teneatis ibi gansatam unam
de ansoribuB. De quo columbario et de anseribus donetis me et meis medietatem. Atque
ibi alium soniorem non proclametis neo faciatis nisi tantum me et successores mees.»
{/.ib. Ant. Eccl. C'ath., vol. IV, fol. 9, doc. 25, arsh. Catedral de Barcelona.)
(222) «Ao tenebiti.s ibi nobis gansadam unam de anseribus unde dabitis nobis me-
dietatem et deoimam cum alia decima peccorum et uolatilium quod ibi nutriti fue-
runt.» {Lib. Ant. Eccl. Cat., vol, IV, fol 13, doc. 41.)
(2-23) Véase la nota 29.
(224) Véase la nota 187.
(225) A. 1465(16 de Septiembre). El Comendador de Vallfogona arrendó & Joan Ba-
lagaer y Joan Roig, entre otras pertenencias «lo colomer den Reg a ter9 et quart et
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 85
De igual manera aparece la costumbre de establecer palomares, sa-
tisfaciendo^ el dueño útil á los señores, un censo de palomas.
En el siglo xiii Pero de Sala del Puig, opulento propietario de Vich,
de quien hablan con frecuencia los documentos de su época, acostum-
braba recibir de los palomares, un tributo ó censo de diez pares de pi-
chones anuales. Tal tributo se lo satisfacía, en 1231, el enfiteuta del
manso Guardia del termino de Pruit (226) y en 1232^ Silvano, yerno
del propio Sala del Puig, respecto de otro palomar (227).
En el siglo xiv, con referencia á Odena, consistió, el censo, en la
entrega de un par de palomas en la fiesta de San Juan de Junio. Así
se expresa en la venta de cierto palomar hacia Munterín, en la margen
del torrente de Semuntá, hecha en 1321, por precio de cincuenta suel-
dos barceloneses, por cuyo palomar el vecino de Igualada Bernat Sa-
Parellada, percibía el antedicho censo (228),
Censos de palomas vemos igualmente existir respecto de las torca-
ces en otros lugares del presente trabajo (229).
Notable es una donación en la que el donante se reserva la propie-
dad del palomar. Tuvo efecto en Perpiñá en 1283, siendo el otorgante
Guillém de Castillón (230).
Del aprovechamiento de la palomina procedente de palomares rura-
les, tenemos ejemplo en cierto contrato hecho en Viladrau á 3 de Marzo
de 1430, Antonio Rovira de la parroquia de Espinalbes, al encomendar,
el mas de la Serra y sus anejos, á Bernardo de Terrés del vecindario
de Cerdans, estipuló poder retener medio ñorín que un vecino de Cer-
dans llamado Matero, le satisfacía por causa de la palomina de las tor-
caces que dicho x\ntonio íe tenía vendida (231).
Los palomares contribuían al sostén de his cargas de los pueblos ya
pague delme.» {Libre de Cort de Vallfogona, aroh. de San Juan de Jerusalem en Cata-
uña.)
(226) A. 1231 (Septiembre). Al enumerar, Sala del Puig, las pertenencias y dominios
que quiere sean para su madre María, en el manso de Guardia, en el de Pruit y en el
hospicio de la Sala, se añadía cipsam triliam de ripa et columharium proptcr X paria co-
lumhorum et propter ipsa negaría et totum ípsum meum hastiar quem habeo extra
ausoniam,* (Manual /, 1230-1233, arch. Curia Fumada de Vioh.)
(227) A. 1232. Convenio entre Sala del Puig y su yerno Silvano cefc medietate de nu-
cibus de nogeria de ipsis tiris et X paria columhis in columbario.* {Manual 1 1230-1232,
arch. Curia Fumada de Vich.)
(228) Documento núm. VII del Apéndice.
(229; Véanse las páginas 52 y 106.
(230) <Iletento mihi columbario quod in ea est,» (Inventaire aommaire des Archives
departamentales des Pyrennées Orientáis.)
(231) «Primo que lo dít bernat de terres li promet de donar per quiscan any VII
florins e mig: perho es uer e sert que lo primer any lo dit anthoni rouires se ¿atura?
que el pugues rebre aquel mig ilori que en matero de serdans li ha donar per raho deis
greus deis todons que lo dit anthoni li avia uenuts.» (Manual del 1420 á 1446, arch pa-
rroquial de Viladrau.) Traducimos greus t^ov palomina, quizás con poca seguridad. No
atinamos que otra cosa procedente de tudons pudiera ser objeto de tal arrendamiento
El nombre Greus se halla usado como apellido valenciano.
86 F. CARRERAS Y CANDI
que eran una fuente de riqueza agrícola^ según ejemplo que nos ofrece
en 1413, la villa de Termens (232) y que puede presentarse asimismo
en otras poblaciones rurales de Cataluña.
DERECHO FEUDAL DE CONSTRUCCIÓN DE PALOMARES
RURALES
Distintas pruebas mueven á creer en la existencia de este derecho,
si bien algo insuficientes, para que la comprobación sea completa.
Cabe esperar, que, con el transcurso del tiempo, aparezcan nuevos
datos fehacientes, desvaneciendo cualesquiera dudas que puedan ori-
ginarse de la manera como expondremos tan interesante tema.
Los escritores que se han ocupado de palomas, nada sacan er\ claro
acerca la existencia de aquel derecho feudal en Cataluña. El distin-
guido autor de Colombiñlia (2.33), al condensar los datos históricos so-
bre los palomares de mampostería en despoblado, dice que, en Francia
y en alguna otra nación, constituía un privilegio señorial de la Edad
Media, esto es, que sólo los señores podían construirlos.
Un autor catalán de fines del siglo xvi, el prior rosellonés Fray Mi-
quel Agustí, al ocuparse de los Secrets del colomer y colom domestichs
(234), teniendo en cuenta la opinión de que las zuritas, reproduciéndo-
se en palomares silvestres, perjudican á los sembrados vecinos, dice,
estar reservado el derecho de construir tales colomers, al señor juris-
diccional del termino. En esta conformidad suele verse en muchos lu-
gares de Cataluña, en los tiempos semievales, el palomar del Señor.
Ejemplos tenemos, en Sant Hilari (Jía-calm, patrimonio de la familia
Gurb, existiendo, en 1463, lo colomer íí' en Gurh (235); en Vallfogona
de Riacorb, jurisdicción del Priorato de San Juan de Jerusalem, había,
(232) Con motivo de un pleito que tuvo la Orden de San Juan de Jerusalón á, causa
del diezmo conocido por 3i/íni¿ que le satisfacía la villa de Termens, los vecinos de
fste pueblo hubieron de vender las pensiones y censales, cargando su importe sobre
todos los productos urbanos y agrícolas, no olvidando ¡I los palomares, como se ve del
siguiente apartado:
♦IX.— ítem que per rabo del acort et deliberacio dessus spressada los dita habita-
dors del dit loch de termens axi en nom de la llur vniuersitat del dit loch oom en nom
de singulars et quiscun per lo tot veneren les pensions et censáis et per loa preus deins
expressats los quals formalment imposaren et carregaren sobre los alberohs, cases,
vinyes, oliuars, alous, terrea, colomers, arenya, fferreginala, honors, poaaessions K tots
ot sengles altres bens lurs presenta et adeuenidors obligant axi metex expreasament
tots et aenglea bena et dreta lurs et de cascun deis per lo tot et de la dita vniuersitat
ot ain-íulars de aquella mobles et inmobles hauts et haaedora » {Termens. Sobre Qtiinzé,
íol. b9, arch. S Juan de Jerusalem en Cataluña.)
(2J0 Colombo/llia por Salvador Castelló y Carreraa, pág. XIII.
(¿34) Secrets de Agricultura, libro III, fol. 161 (Barcelona, Estoban Liberos, 1617).
(2B6) Manual del /4í;o líí^ue /Í6S, jornada de 3 de Marzo de 1463. (Arch. parroquial
de S. nilari Ca-calm.)
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 87
en el siglo xiv, el palomar del Señor, según dijimos anteriormente, su-
cediendo igual en MonterguU (236), etc.
En cambio otro autor rosellonés, que ha investigado profundamen-
te las costumbres de la Edad Media^ en la región que, en esta propia
Edad, fué parte integral de Cataluña^ Brutails, afirma rotundamente,
que, el derecho del palomar, no fué conocido en el condado de Rose-
lló (237).
¿Hay que creer al prior Agustí, que alcanzó en su tiempo la exis-
tencia de un sin fin de antiguos derechos feudales, ó al pacienzudo in-
vestigador del siglo xix? No deseamos resolver de plano, sin añadir las
consideraciones sugeridas por el estudio de algunos otros documentos.
Nadie duda que la caza constituía un derecho feudal (238) y que
además, la captura de los nidos de ciertas aves, especialmente las que
se utilizaban en la cetrería, fué castigada con severidad. ¿Cabría con-
siderar á las torcaces, como formando parte también de especies que
constituían la reserva Señorial?
Lo que fl, nuestro intento conviene pues examinar, es la extensión
que tuvieron las jurisdicciones señoriales en los contratos en que se
hace su cesión ó trasmisión.
En el año 1149, Eamón Berenguer IV hizo donación de Lleyda al
Conde de Urgell, leyéndose tan sólo á nuestro particular: «Donamus
iterum vobis prata et paschuas fontes et aquas boschos et lignamina et
ven atienes» (239).
En el siglo xiii los notarios adoptaron la fórmula de incluir los pa-
lomares en los contratos de ventas de una propiedad rural con todos
sus derechos, tanto en el reino de Aragón como en el principado de Ca-
taluña según hemos tenido ocasión de ver (240). Es decir que por vir-
tud de tales fórmulas, se equipararon los palomares á las fuentes, le-
fias, pastos, caza, etc.
(236) Véanse las notas números 214 y 215.
(237) * A ees volátiles (ocas y pollos) on préférait les pigeons: les colombiers étaient
assez nombreux pour que les evoques, dans leurs constitutions de paix, aient jugé á
propos de s'en occuper, de méme que des ruches. II convient d'ajouter que l'ólevage
des pigeons était entiórement libre: le droit de colombier n'ótait pas connu dans le
pays.» {Elude sur les conditions des populatione rurales du Roussillon au moyen age, por
J. A. Brutails, pág. 25 (París, 1891).
(288) Este derecho, á igual que muchos similares, fué controvertido á menudo por
los pueblos. Ejemplo de una de tantas oposiciones, hallamos en Aseó, en 1510, cuyo
término pertenecía á la Orden de San Juan de Jerusalón. Se lee en cierto proceso
donde se trata de poner en claro los derechos ó señoríos del Señor: «Quant es en lo
cassar dix ell testimoni que lo senyor the sa deuesa lo qual los es a ells prohibit lo
cassar, lenyar hi erbagar e que lo restant eils cassen de son plaer es veritat que lo
senyor pretenia que nou poden fer hin fa crides volent los ho prohibir y ells pretenen
que nou pot fer queja the ell sa deuesa per casar y que lo restant del terme poden
cassar y axi stan renyant empero may se son stats de cassar en dit terme fóra la da-
nesa del dit senyor.» {Arch. del Gran Priorato de S. Juan de Jerusalén, en Cataluña.)
(239) Documento 225 de llamón Berenguer IV (arch. Corona de Aragón.)
(240) Véanse las notas números 166 y 167.
88 F. CARRERAS Y CANDI
Al entrar en posesión, Guilleuma de Cabrera, en 1252, del castillo
y villa de Tarrasa, con su dominio y fortaleza, consígnanse los palo-
mares como una de tantas adquisiciones feudales, y por un igual que
se citan á las aguaS;, molinos, leñas, pastos, caza, etc. (241). En la
enajenación hecha, en 1328, por Pere de Claramunt, del castillo de
Claret, á Arnau de Claret, dióse detallada enumeración de los dere-
chos feudales á él anejos y que se transmitían con el territorio objeto
de la venta. Se lee también la palabra columbariis, y luego las de
deuesiisy vcnationihus j pesqueriis. Al parecer los columbariis, deben
interpretarse en el sentido de derecho á construirlos, ó cuando menos
derecho á un canon ó tributo feudal en los ya existentes y no en el de
adquirir su plena propiedad (242).
Un escrito jurídico del siglo xvii expresa genéricamente el dominio
que suelen tener los Barones en sus tierras, diciendo recaer en
aguas, montes, hierbas, pastos, caza, "terrenos, minas y árboles (243).
Aún cuando aquí nada declara, es de una amplitud que bien puede
comprender el permiso de erigir tudoners.
Dando razón al prior Agustí, cuando dice que «no se permiten los
palomares hechos á modo de torre maciza y fuerte, sino en la Casa en
algún aposento, sino es á los Señores de los términos, y en los lugares
donde hay muchas tierras de cultivación» (244), hallamos un documen-
to del año 1262, que tiene para nosotros algún valor. Es un contrato
realizado entre el Obispo de Barcelona y Arnau y Pere de Vilaragut,
(241) «Guillerme de Capraria diebus ómnibus vite vestre castrnm et villam de Te-
rracía cnm omni dominio et fortitudine et castlanis ipsius castri et ville et cum casis
et casalibus vineis ortis et ortalibus campis ac tenis cnltis et inoultis heremis et po-
palatis furnis molendinis et columbariis aréis et pascáis m^ontibns lignis siluis vetatis
et arboribus fructiferis piscacionibus et venacionibus introitibus et exitibus terminis
et suis pertinentiis vniuersis a celo in abissnm.» (Documento 1302 de Jainae I, Archivo
Corona de Aragón.)
(¿42) «Noverint nniuersi quod nos Periconus de Clarmont domicellus et domina
Beatrix eius uxor de consensu et expressa volúntate domne Geralde uxor Petri de
Clareto militis quondan auiosque mei dicti Periconi et tutricis dictorum Periconi et
Beatricis, per nos et omnes heredes et successores nostros vendimus vobis Arnaldo de
Clareto de Trempo et vestris in perpetuum et cui uolueritis castrum et uillam de Cla-
reto cum ómnibus hominibus et mulieribus ibidem habitantibus et habitaturis et cum
ómnibus suis terris et cum domengiis, furnis, molendinis, decimis scencibus et redditi-
bus, exitibus et peraentibus et cum ñrmamentis, stacamentis, questiis, toltis, forciis,
adempriuis, acapitis, bannis, caloniis et cumjouis, traginis, batucis seu carrigiis efe
oum ceteris cartis nouenis domibus columbariis deuesiis dominicaturis, carnalagiis fe-
rreginalibus cequis, aquoductibus et reductibns, viis, stratis, nemoribus, venacionibus,
inuentionibus siue trobis, pascuis erbaricis, pesqueriis, plañís, montibus, vallibus seu
cumbis el cum hostibus exercitibus seu caualoatis mondanticis corporalibus iusticiis
et redemtionibus earundem et cam mero et mixto imperio et jurisdictionem quocumque
et cum alodiis terris cultis et incultis, honoribus et possessionihus ermis et populatis.»
(Aroh. particular del Sr. Mir y Bastús de Tremp.)
(¿la) «Dominium territorii quod solent habere Barones in suis terris quo ad Aquas,
Montes, Horbas, Pascua, Venationes, Térras, Minas, Arbores.» (Pro villa de Revs etílUue
Dajulo contra locim de Caatellvell, pag. 7, Barcelona, 1669 )
(244) Edición castellana de 1722, pag. 366.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 89
de unas tierras, que, en franco alodio, poseía aquella mitra en Santa
Agnes. El Obispo faculta á Vilaragut para construir un molino con ca-
sa, torre y palomar, con lo cual debemos entender, que, sin dicha au-
torización, Vilaragut no habría podido construir ni el palomar, ni la
casa, ni el molino (245).
Durante los siglos xiii y xiv, casi no encontramos ventas ó conce-
siones jurisdiccionales, sin que se mencionen los derechos á los cam-
pos, á la caza y á las dehesas. De modo que, englobados con ellos,
pueden coexistir los de construcción de palomares rurales. Mas aún: el
derecho del Señor de permitir ó no las erecciones de torres en las paye-
sías, no suele especificarse en las escrituras y á pesar de ello su exis-
tencia es indudable. Suponiendo que hubiera libertad de ejercer el de-
recho de construir palomares rurales, este mero hecho vulneraría el
privilegio feudal de la erección de torres, toda vez que, con la excusa
de un palomar, esto es, de un alto edificio de manipostería, podrían es-
tas ser edificadas libremente en despoblado.
Los palomares venían á ser en muchos casos, verdaderas torres de-
fensivas, probándose, tanto por su extructura, como por diferentes
datos históricos, su evidentísima utilidad en la guerra. Podemos pre-
sentar un ejemplo de esta índole, ocurrido en el año 1289. Berenguer
de Entenza y sus dos hijos Guillém y Berenguer, estuvieron, durante
muchos años, en reguart ó en lucha, con los caballeros templarios, en-
sangrentando, tales rivalidades, los campos de las orillas del Ebro.
Aliados con los templarios estaban los Monteadas, y aprovechando, en
1289, cierta ausencia de los de Entenza, que acompañaron al tley en
una expedición contra los franceses, en la Cerdaña y valle de Ribas,
entraron y saquearon los términos de Mora y Ti visa.
Arnau Escuder, de Ceros, refiere de esta incursión, el incidente que
continuamos. Cerca la villa de Mora, seguramente en un altozano, se
erguía un palomar perteneciente á Jaume de Vilabertran. Algunos ve-
cinos de Mora, armados de ballestas, se parapetaron en su interior. Co-
mo quiera que, los invasores, en su obra de destrucción, no quisieran
dejar sin talar los sembrados inmediatos á dicho palomar, se arriesga-
ron á ello, recibiendo en pago certeros tiros de ballesta de los que en
él se refugiaron, hiriendo á algunos de ellos. Al observarlo Pere de
Monteada, les ordenó abandonar la faena en que se habían metido,,
pretestando, que, no les reportaría honor dañar tierras de Berenguer
de Entenza, hallándose ausente en Cerdaña. Más en realidad lo que
quiso Monteada fué no exponer su gente á los tiros de los que se metie-
ron en el palomar, verdadera fortaleza, inexpugnable para aquella
(245) .ítem quod possit diotns Petras de Vilariacnto in qtioouinque loco magis vo-
Inerit de predicto honore Sánete Agnetij construere molendinnm cum domibus turre
et columbario et lieo sint alodinm dicti Petri de Vilariaouto et suorum.. (Documento
1721 de Jaime I, Archivo Corona de Aragón.)
90 F. CAT?RERAS Y CANDI
ícente mal armada y que no llevaba consigo ingenios de guerra para
el ataque y expugnación de fortalezas (246).
También Castelló da cuenta de otro caso análogo acaecido en tiem-
pos contemporáneos, del que fueron actores tropas españolas que com-
batían en el imperio de Marruecos (247).
Teniendo por indudable la existencia del derecho feudal de los pa-
lomares rurales en Francia, hemos querido examinar algunas enfeuda-
ciones de los siglos XIII y xiv, para ver si en ellas venía ó no citado,
encontrándonos que, en las que tuvimos ocasión de leer, sucedía como
en Cataluña, esto es, que á pesar de mencionarse gran número de de-
í-echos señoriales, tampoco se especificaba aquel (248). Según la acep-
ción que quiera darse á los emprius, como se les llama en Cataluña, ó
azemiJrius en el Languedoc, ó adempramentis en lenguaje notarial,
también podemos hallar vinculado en ellos el derecho del palomar, ya
que, el erudito escritor pirenaico Pasquier, manifiesta su opinión de
haber tenido distintas acepciones: «Tantot c'est le droit d'usage dans
son acception la plus genérale, comportant tous les avantages accor-
dés per le seigneur dans la jouissance des bois, montagnes, páturages;
tantot ainsi que l'indique le mot patois azempriu, employé encoré
dans plusieurs contrées, il ne coraprend que les usages forestiers. les
depaissances. Le mot indique aussi la redevance que le seigneur pré-
lévait pour les concessions acordées en fait de páturages, d'usages
dans les montagnes.»
Por la sucinta relación que consignamos, conclii iremos ser nues-
tra creencia, que, formó parte de los derechos feudales en el principa-
do catalán en la Edad Media, el que denominamos de construcción de
palomar rural.
(246) «P. de montecatheno dixit tuno in ipsa tala quod recederent de qnedam looo
ubi erat columbarium Jacobo de vilsbertran et erat prope villam de Mora per eo
quare trabebant contra eos cnm ballistis et nnlnerauerunt aliqnis de illis qui erant in
ipsa tala dicendo etiam quod non erat eis honor aliqujs faciendi malum in dicto loco
per eo quare berengario de entenca erat in Ceritania cum domino Rege set nichilomi-
nu8 propter predicta uerba non steterunt quin talarent ibi tune.» (Colección de pro-
cesos.—Legajo 1.", 1291 á 1303. Aroh. Corona de Aragón.)
(247) Cun referencia al año 1860, enumera «el que dio lugar á, uno -de los episodios
de la guerra de África (1860) en que nuestras tropas tomaron por asalto un palomar,
cuyo recuerdo nos ha sido transmitido por la pluma y lápiz de Carlos Iriarte en sus
Cuadro» de la guerra.* {Colomhofllia. Estudio completo de las Palomas mensajeras, Barcelo-
na, 1894, página XIII )
(24S) Sirva de ejemplo una enfeudación liecha en 1267 por el Conde de Foix, consig-
nando «bominibus et mulieribus mansis et mansalibus domibus atque bordis, ortis
TineiB terris heremis et condiroctis pascuis nemoribus cum eorum venationibus, mo-
lendinis et molinaribus, aquis cum piscationibus, obliis, terre meritis, censibus, foris-
capiis et questis totÍF, adempramentis civadaribus et pratis et cum ómnibus alus
pertinenciis bio expressis et non expressis > (Bulletin périodique de la Sociité Ariégéoise
de» scienee», leltre» et art», vol. III, pág. 372.)
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUSfA ^N LA EDAD MEDIA 91
LA COMUNICACIÓN POR PALOMAS CONOCIDA EN CATALUÑA
En la Biblia se hizo aplicación del instinto de las palomas, cuando
refiere que Noé utilizó dicha ave para averiguar el estado del mundo
después del diluvio. Asiria y Babilonia se sirvieron de este medio de
comunicación aérea, conmemorándose el hecho en uno de los frisos de
la magnífica sala de sesiones de la Dirección general de Correos del
Imperio Germánico. Anacreonte, 600 años antes de J. C, alude, en una
de sus odas, á las palomas que llevaban misivas de amor á las niñas
bonitas. Plinio relata el empleo que de las palomas hizo Hirtio, cónsul
romano, cuando partió á auxiliar á su colega Décimo Bruto, cercado
en Módena, Se cree que Julio César, en sus guerras de las Galias^ por
este correo alado conocía las formidables y frecuentes sublevaciones
de los pueblos conquistados, permitiéndole ejecutar con rapidez con-
tramarchas y subsiguientes escarmientos de los patriotas. En el reina-
do de Diocleciano se tiene noticia de haberse empleado para mensajes,
palomas especiales denominadas cursores.
Pasando á la Edad Media, hallamos á distintos pueblos orientales,
hechar mano de las palomas como mensajeras, con inusitada frecuen-
cia. Uno de ellos fué el árabe, organizando Nur Eddin (1143 á 1173)
aquel servicio y estableciendo una red completa de palomares, cuyo
centro se hallaba en el Cairo y sus principales estaciones en Alejan-
dría, Damieta y Gaza, comunicando por esta última ciudad, con Jeru-
lem, Damasco, Belbeck y Trípoli. Estos palomares, dice Bon de Sousa,
haber funcionado hasta mediados del siglo xviii (249). Otro de dichos
pueblos orientales fué la China, según refiere el antedicho autor portu-
gués, á propósito de la visita hecha á dicho país por Sir John Maunde-
ville, durante los reinados de Eduardo II y Eduardo III de Inglaterra
(1307-1377).
Dados tales antecedentes, es natural, que, en nuestra época, se ha-
ya adoptado la paloma como símbolo del correo, en el emblema que
ha escogido la oficina internacional de la unión postal.
No hay datos que confirmen el uso de estas aves como mensajeras,
en los pueblos europeos de la Edad Media. Veamos si se puede estatuir
algo en lo que respecta á Cataluña, donde la influencia árabe fué tan
evidente en muchas manifestaciones del saber humano.
¿Ignoraron, los caudillos árabes de España, el importante servicio
que prestaban las palomas como portadoras de mensajes, entre sus her
manos del Norte del África? Sí, como cabe suponer, no lo desconocie-
ron, ¿fué por ellos importado á nuestra Península? ¿lo copió y utilizó á
(249) Projecto e intrncqoes para o estahelecimento de pombaés miliiafes no continente de
Portugal, por Augusto C. Bon de Sousa (Lisboa 18b&).
92 F. CARRERAS Y CAXDI
SU vez, el antiguo reino de Aragón? A esto va encaminado el examen de
los documentos de la época, que pueden darnos alguna luz para descu-
brirlo.
Na cabe dudar, que, facilita á las palomas su instintiva facultad de
reconocer su palomar, construirlo en sitio visible. Es innegable;, que,
en las antiguas ciudades, las torres de sus murallas eran lugares muy
á propósito para su emplazamiento. ¿Se erigieron, pues, palomares en
las torres de nuestros recintos amurallados? He ahí un pequeño detalle
que entendemos no debe despreciarse.
Cuando Jaime I de Aragón conquistó á Valencia, aparece existente
algún palomar en las murallas de la Capital que perdió Zaen en 1220.
Sabido es que aquel Soberano premiaba á los que le ayudaron en sus
conquistas, con concesiones territoriales. En remuneración á los mu-
chos servicios de los templarios en tales guerras, les fué otorgada una
gran torre junto á la puerta de Valencia, llamada Barbacaclar, con su
muro, barbacana y casas contiguas. En la donación real del año 1238,
se manifíesta existir cierto palomar en el lienzo de muralla- que mira-
ba al río (250).
En el mismo siglo xiii, otra importante población catalana, la villa
de Camarasa, poseía igualmente un palomar en cierta torre de su re-
cinto exterior junto á la puerta silvestre ó del campo y dando á dos
distintas calles (251).
A estas dos breves noticias se limita una investigación que apunta-
mos con la mira de que, otras personas más estudiosas é ilustradas,
puedan completarla aportando nuevas comprobaciones que permitan
establecer alguna conclusión.
Tratemos ahora el tema objeto de las presentes líneas bajo un punto
de vista más práctico y expresivo. Si la comunicación por palomas fué
conocida en Cataluña, como uno de tantos efectos de la influencia ára-
be en nuestro Principado, debieron hablar de ella los autores medio-
evales que se ocupan de estrategia militar.
Uno de los de mayor renombre, el valenciano, Eximenic, en el capí-
tulo 316 del Dotzen libre de crestiá qui es de regiment de princeps, al
describir las múltiples estratagemas empleadas en los asedios para re-
lacionarse^ los sitiados, con sus amigos de fuera la plaza^ copiando á
Julio Fronti, reñere haber casos en los que se comunican «por paloma,
como aún suele hacerse en Alejandría» (252).
(250) «lUam turrim magnam in valencia ad portam qnod dicitur Barba<?aclar et
oum mnro et Barbacana et cnm domibus qnod ad turrem quod est in muro iuxta co-
liimbarium ex parte úaminis et a columbario illo recta uia carracione usque ad viam
pablicam quod dicitur Quayta et ad hiño usqae ad mesqaitam sicut protenditur visque
ad illum parietem altum contiguum domibus ubi est magna cipreasus.» (Cartulario
del Temple de Tortosa, pergamino suelto )
(251; Véase la nota 36 de Lo cantell de Btcrriach ó de Sant Vicents ;Mataró 1900) ó tam-
bién, legajos de procesos, número 2, as. 1295 á, 1313, núm. 4. Arch. Corona Aragón.
(252) «Altres i^er coío?n, axi com se fa encara en alexandria > La obra de Eximeni?
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 93
Más adelante, Jaume de Marqmlles, al indicar las precauciones que
deberán tomar los dueños de castillos á fin de ascsjurar su defensa y
custodia, indica que los palomos se coloquen en lugar conveniente-
mente seguro del mismo, y sean tratados con prudencia los destinados
á llevar cartas (253). Es digno de observar, que las palabras de Mar-
quilles son exactamente iguales á las que con anterioridad dejó con-
signadas un opúsculo técnico sobre la defensa de las fortalezas atribui-
do al rey D. Alfonso <cel Sabio» (254), dado á conocer por el P. Fidel
Fita S, J. Por otra parte el texto latino adjudicado al Rey de Castilla,
está salpicado de palabras catalanas, tales como foch alquitrat, foch
grezech, mastich, gurades, sjyies, guayta, bade, etc. Posible es que am-
bos sean copia de otro escrito anterior, que por ahora no conocemos.
De las citas de Eximeni9 y de Marquilles, cabe deducir la posibili-
dad de haberse empleado en Cataluña, durante la Edad Media la co-
municación aérea por palomas, pues que aparece evidente no haber
sido ningún secreto para aquellas generaciones. Quizás llegue algún
día en que su utilización en algún señalado hecho de armas, pueda ser
comprobada.
A título de curiosidad continuaremos, que, apenas iniciada la edad
Moderna, ó sea antes del año 1513, Alonso de Herrera, da ya suscintos
detalles del modo de remitir una carta por paloma, relación en todo
conforme con el instinto de esta ave (255). No tuvieron tan exacta no-
ción de está cualidad en los siglos xvii y xviii, otros naturalistas, me-
reciéndose consignar, por lo erróneo de su relación^ Ferrer de Valde-
cebro en 1670, quien llega á afirmar que las palomas no conducían
misivas por instinto, sino por mera educación y que, después de llevar
una carta, regresaban con la respuesta al que la había expedido (256).
se conceptúa escrita en 1385. El ejemplar que hemos tenido á la vista fué impreso en
Valencia en 148á.
(253) <Item sint in dicto castro culimiim aperta in loco tuto ab ingeniis et loca ad
columbos similiter.> «Qualiter autem columhi qui caries deferant mittantur Et qualiter
agant illi de castro si sal eis defuerit.» {Comentaría Jacobt de Marquilles super vsaticia
Barchinone, Barcelona, 1505 folio 379, capítulo 152.)
(254) «ítem sint in dicto Castro culmerie (*) apromptu in loco tuto ab ingeniis et loca
ad columbos similiter » <Qualiter autem columbi qui cartas defferant mittantur; et
qualiter agant iUi de Castro si sol eis defuerit.» (Boletín de la Real Academia de la Ilisto-
ria, Tol. XVI, págs. 348 y 349).
(*) Códice al margen: «al ias columbaria».
(S55) «Fué la paloma fiel mensagera cuando después del diluvio Noó la echó del
arca, que tornó con un ramo verde de olivo en el pico; y en muchas partes las tienen por
mensageras, que quien quiere que en su casa sepan presto lo que pasa, lleva una paloma
de las más viejas consigo y les atan una carta so el ala, y la sueltan, y torna á casa,
como se lee en Marco Antonio Sabelico en el cerco de Antioquía, y en otras muchas his-
torias porque naturalmente atinan al lugar do son criadas.» (^sf?-íCiíi<ííra ceneralde Ga-
briel Alonso de Berrera., corregida según el testo original de la primera edición publicada en
1513 por el mismo autor y adicionada por la Real Sociedad Económica Matritense, Madrid,
1818 y 1819, vol. III, pág. 481.)
(256) «De las Palomas de Siria se refiere vna cosa que verdaderamente empeña toda
admiración, y es, que seruian de correos en tiempo de necessidad dellos, Ueuauan la»
94 F. CARRERAS Y CANDI
En 1788, José Mallent no incurrió en tales errores al traducir del
francés la breve recopilación de las facultades de la paloma mensajera
(257). El valenciano Cavanilles, en el propio siglo xviii, es el primero
que relata casos prácticos de estas mensajeras, como el de recorrer una
de ellas ocho leguas en menps de tres cuartos de hora, refiriéndonos,
que este sport, en su tiempo, estaba de moda en Valencia (258).
Kihil novuní sub solé.
DISPOSICIONES EX FAVOR DE LAS PALOMAS GENERALES AL
PRINCIPADO
Consideradas, las palomas, como propiedad particular, se pusieron
al amparo de la ley, comprendiéndolas el usage vulgarmente denomi-
nado pau y treva.
En la paz y tregua, que, en el año 1200 fué firmada por los mag-
cartsB y traian la refpnesta de adonde las embiauan, esto lo hazian enseñadas, que
por si bien se ofrece al discurso no lo auian de hazer con su irracional instinto. Le sn-
cedió á Decio Bruto, que estando en el Cerco de Mutiscon y necessitado de dar vn auif o
en muy corto tiempo remitió las eartas siruiendole de correo vnaa Palomas que las
llenaron atadas á los pies según escriue Eabisio Textor Para que se suauice mas caso
al parecer tan duro de creerse, se hallará en Prerio Valeriano, en Alexander ab Al -
xandro y en Celio Eodlgino, que vn Rey de Egipto llamado Marios auia criado vna
Corneja tan dócil y suaue para aprehender quanto le enseñauan, que la hizo correo
con quien remitía sus cartas, diziendole adonde auia de ir y que iba y boluia con la
respuesta dellas: dá, á entender Pierio auer sucedido con otra lo mismo y parece que
insinúa á. la Ciudad de los Cocodrilos, adonde la leuantaron estatua por el caso. Murió
esta Corneja y le hizieron vn honorífico sepulcro, assistido de vna coluna grande en
cuya eminencia estaña la estatua de vna Corneja: Cornix in columna sublata erat, fi-
delem operam in Tabelario muñere prestitam indicabat: huinismodi enim honos, et
sepnlchri, columna hábitus est olim Cornici a Marie Egyptiorum Rege, quod munus id
(de correo) diligenter obiuieset, qno volandum, aut vbi sistendum, summa docilítate
perdocta.» (Govierno í/cneral moral y politico liallado en las a-ces mas generosas y nobles sa-
cado de 8V8 naturales virlvdes y ¡M-opicdades le escrive el Padre Maestro Fray Andrés Ferrer
de Valdecebro,—En Uladrid, Por Melchor Aleyre año de 1070 fol. 193.)
(257) «Se semeja á el palomo turco por el color pardo de la pluma: el pico es negro.
de mediano tamaño y medio cubierto de una carnosidad formada de tubérculos hari-
nosos: tiene los ojos cercados de una mestura tuberculosa. Dícese que esta casta era la
que en otro tiempo servia para enviar las cartas. Se ignora á qué región pertenece. >
{Encyclopedia metódica.— Historia natural de las ates traducida del francés al castellano por
D. Joseph Mallent. — vol. II. En Madrid por Don Antonio de Sancha 1788.)
(258) Así lo leemos en el adicionador de Herrera (obra citada, pag. 473) ^Paloma men-
sayera ó de la raza (S'abtZíarí'a de Z/.)— Llamada asi porque servia en otro tiempo para
enviar cartas de una parte á otra. Se parecen á las ladronas; son esquivas, y huyen
cuando alguno se acerca & ellas, y tienen tanta fuerza en las alas que cuando toma-
das en la mano se les estiende alguna, al instante la recogen con violencia. En Valen-
cia por diversión las hacen servir de correos, para lo cual se trasportan al sitio donde
debe ocurrir alguna novedad y verificada se escribe en nna cinta de papel que se en-
vuelve en la pierna de la paloma, y so sujeta con seda; suéltase luego el ave, la que le-
vanta el vuelo, y dando dos ó tres vueltas al sitio donde la soltaron, emprende el c^mi-
no de BU casa con tal velocidad que, Cavanilles dice, que vio volver alguna de ocho le-
guas de ocho mil varas cada una, en menos de tres cuartos de hora.>
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 95
nates de la corte de Pere I y especialmente dirigida contra la malvada
audacia de ladrones y malhechores, se consignó, en el sexto apartado,
la prohibición de dañar á los palomares á la par que á los molinos, pa-
yesías, colmenas y pajares (259).
La prohibición del último año del siglo xii, no produjo á perpetui-
dad resultado. Y como la condición humana es siempre la misma, re-
pitiéronse los robos de palomares, según lo comprueba la disposición
que dictó Jaime I, en 1279, para proteger á los de las regiones de Ur-
gell y Lleyda. Al parecer abundaban allí los ladrones de palomas,
quienes, ora las tomaban de los nidos, ora las capturaban furtiva-
mente con lazos, redes y demás ingenios. Enterado de ello el monarca
aragonés, encargó á Guillcm de Torre, hiciese las indagaciones necesa-
rias y procediera al castigo de los delincuentes (260).
Las anteriores disposiciones hacen presumir fundadamente, cuan
vejados estuvieron, en el siglo xiii, los propietarios rurales de Cataluña,
cuyas vejaciones alcanzarían igualmente á los de Aragón, según es de
ver de cierta orden real, de 1284, encaminada á proteger las palomas
de Calatayub y sus aldeas (261).
En 1279, (262) al publicarse uno de los más interesantes códigos es-
peciales de Cataluña, el vulgarmente conocido por Costums de Tortosa,
se consignó de una manera especial la protección á las palomas, esta-
tuyéndose que nadie las capturara con trampas ó destruyera los palo-
mares, castigando al contraventor y obligándole á la restitución (263).
Al siglo XIV pertenece un importante decreto en favor de las palo-
mas y otras aves de caza. Aludimos á la constitución emanada de las
Cortes, que, en 1333, reunió en Montblanch Alfonso III el Benigno (264)
mandando que, en los diez años siguientes, desde la fiesta de Pascua
hasta ñn de Septiembre, no se pudieran cazar perdices mas que con
aves de cetrería y prohibiendo la destrucción de sus nidos. Dispúso-
(259) «Ne los masos de vilans sino que sien en aloas de canallers, ne colomers, ne mo-
lins, ne casas ó bacbs de abellas ne paUers alga destrnesca o crem o altrament focb a
noure sota meta ne cuneras trenoh.» (Constitucions de Catalunya, edición de 1658, pági-
na 555).
(260) Apéndice, doc. núm. IV.
(261) <Justicie iuratis ville et aldearnm Calataiub quod quilibet in suo districtn
faciant preconisari publice et probiberi sub pena LX solidos quod nuUus sit ausus
capero cclumbos cum laqueo uel retis uel in ciuaderio in aldeia Calataiub uel occi-
dere eosdem in aliquo palumbario cum ballista. Siquis uero contra predicta ueniret
soluat penam predictam de qnam nobis mediatas aplicetur et alia medietas domino
paiumbarii ubi ipsi columbi capti fuerint seu occisi. Datum Calataiub VI Kalendas
februarii». (Registro 43, fol. 113, arch. Corona de Aragón).
(262) Según Bienvenido Oliver, fué promulgado en Mayo ó Junio de 1279. {Historia
del derecho en Cataluña, Mallorca y Valencia. — Código de las costumbres de Tortosa. Ma-
drid, 1876 )
(263) «Colomers negu no trenc, ne abeylars atressi, ne prenguen los coloms ab rets,
ne ab laces ne ab negun altre giyn», etc. {Libre de les Costums generáis scrites de la insig-
ne ciutat de Tortosa, (edición de 1539) folio 32 )
(261) Apéndice, documento núm. IX. Repetiremos qae en la nomenclatura de nues-
tros monarcas seguimos siempre la cronología catalana.
96 F. CARRERAS Y CANDI
se igualmente, que nadie se atreviese á tomar palomas ajenas áb enees
cimbell ó plat, ó de cualquier otra manera, si no fuese con pájaro.
Para llevar á la práctica este acuerdo, encomendóse á todos los que
ejercían jurisdicción, impusieran en sus lugares ó términos, oportunas
penas á los contraventores. Bien se hecha de ver, que, la disposición
obedeció al temor de que se extinguiese la caza, por el abuso que de
ella se haría, en todas las épocas del año. Fué remedo de otra dictada
el siglo anterior con fines sinónimos. Jaime I, en 1279, prohibió en to
dos sus reynos de Cataluña, Aragón y Valencia, la matanza de corde
ros, para atender á la reproducción del ganado lanar (265). Ya en Fran-
cia, los sucesores de Clovis, prohibieron en absoluto la caza del urus
ó buey salvaje, citándose curiosas anécdotas en muestra del rigorismo
de tal prohibición. En nuestros tiempos las hemos visto repetirse en ab-
soluto en la India, donde, en 1896, el durhar de Kathiawar, vedó por
seis años la caza del león, á ñn de evitar su exterminación en aquel
país (266).
Diligente anduvo, en 1334, la ciudad de Barcelona, en hacer cum-
plir en todas sus partes la disposición de la corte de Montblanch, como
seguramente harían las demás ciudades y señores jurisdiccionales del
Principado. Más no se crea que fué sólo en la Capital, donde sus auto
ridades dieron muestra de su celo en pro de les palomares y palomas.
En poblaciones secundarias de Cataluña vemos hacer lo propio, como
V. g. en Sant Celoni, al promulgarse, en 1370, las Orclinacions per lo go-
vern de la vila de Sant Seloni, pues se prohibió cazar palomas con re
des, trampas ó ballesta en las inmediaciones del palomar (267). Dispo-
siciones semejantes formaron asimismo parte de los estatutos de poli-
cía de pequeñas poblaciones francesas (268).
Volviendo á fijar nuestra atención á lo estatuido en la corte de
Montblanch, podrá chocar, que, en dicha disposición general, se per-
mita capturar con ave las palomas ajenas, cuando, al parecer, no de-
biera tolerarse por ningún procedimiento, esta violación del derecho
(266) Registro 42, folio 181, Aroli. Corona de Aragón.
(266) El Diario de Barcelona del 29 Se-ptiemhíe de 1896, dio esta notioii, refiriendo
que el rey de las selvas, habiendo desaparecido del pala de Bajkot, de los montes de
Bard& y de otros lugares de la India, donde antes abundaba, se habla reíugiado como
último baluarte en el bosque de Gir en el Kathiawar.
(267) <Item que noych baje nuil hom estrayn ne priuat qui preñe ne gos pendre
ooloms ab fílats dins lo termen de sent saloni sots pena de LX sons.
>Item que negun no gos auciura ab balesta colom dins'Io tros de la térra on lo coló-
mer sia adificat sots pena de XX sous.
>Item que naguna persona no gos agranar coloms qui seus no sien no posar vinassa
en nagun loch per guisa que hi trasqne ab balesta o hi par, sots pena de XX sous » —
(Archivo del Gran Priorato de San Juan de Jerusalén en Cataluña.)
(268) A. 1B09. — Kn el lugar de MoUóges estatuyóse cltem quod nullus audeat venare
columbas in territorio Pominor et monasteri... veteru.., cum escalis neg... balistis
sine licentia Dominor sub pena L solid de die et oentum de noote.» {Statuts de pólice du
lieu de SIoltÉijea, pablioados en la Revue des langues romanea año 1897, p&g. 20.)
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 97
de propiecLad. Posible sería que se diera á la frase coloms de altrí, el
significado de ser, los que vagaren libremente sin dueño conocido.
Y los Concelleres de Barcelona, en 1334, al repetir, en su bando y
con los mismos términos, la disposición antedicha, dejan de consignar
un radio de inmunidad alrededor de los palomares, según hicieron en
sus bandos generales de buen gobierno del 1301 (269). Los que conoz-
can las costumbres de los siglos xiv y xv, comprenderán el móvil
que impulsaba á sus legisladores, á establecer una distinción entre
las personas que se dedicaban á la caza por medio de redes, trampas
y demás ingenios, y las que cazaban con ave de cetrería. Pero como
lo que abunda no daña, cxumareraos ciertas palabras que, la Reina
lugarteniente de Alfonso IV, Doña María de Castilla, refería á este pro-
pósito, en 1421 (270). Manifestaba, que, los nobles, caballeros y gentil-
hombres, por su naturaleza y condición debían dedicarse al virtuoso
ejercicio de las armas, por medio del cual los reinos y tierras de Ara-
gón son defendidos y puestos en paz y tranquilidad. Y juzgando nece-
sario este ejercicio, y no hallando recomendable que se entreguen á vi-
cioso descanso por ser origen de muchos males, debía procurarse que
los nobles, caballeros, gentilhombres, ciudadanos y burgueses honra-
dos, se hallen siempre inclinados al ejercicio de la caza, similar al de
la guerra ó batalla. De ahí que atendiendo á ello les otorgara, la pre-
rogativa ó permiso de cazar en todo tiempo, con ave y lebreles ó po-
dencos de muestra. Para lograr que, con la abundancia de caza, entra-
ran en deseos de dedicarse á ella, se prohibía la capción de las aves
con calderas, redes, canculls, ballestas y demás artificios mecánicos,
toda vez que, á tal clase de cazadores, burgueses ó plebeyos, cabía supo-
ner no les guiaba otro móvil que el de la ganancia ó lucro.
También en Francia, desde el reinado de Felipe el Hermoso, fué
prohibido cazar con hurón, á los que no fuesen gentil-hombres.
Las disposiciones de la corte de Montblanch sirvieron de patrón á
otras varias en el siglo xv. Vejadas, las palomas de Manresa y de sus
cercanías, por cazadores que se atrevían á capturarlas con redes y ar-
tificios, Martín I trató de poner cortapisa á ello, en 7 de Febrero de
1409, no tolerando tal infracción de las constituciones de Cataluña, é
imponiendo severas penas á los contraventores, según fué pregonado
por las plazas de Manresa y Bages (271).
La obstinación de tales cazadores pudo más que la severidad del
castigo, si es que este se aplicaba. Las reiteradas instancias de los
dueños de palomares, motivaron, que, Fernando I de Antequera, en
1415, dictara una segunda orden, encaminada al propio fin y objeto
(269) Apéndice doo. núm. XXX, Bandos, letra (s).
(270) Apéndice, doc. núm. XII.
(271) Apéudioe, doonmeuto núm. X.
1903
98 F. CARRERAS Y CANDI
que la precedente (272). Después de exponer las fundadas quejas de
los manresanos, quienes veían despoblarse sus palomares, manifestaba,
que las palomas estaban colocadas bajo la paz y tregua general de
Cataluña y conminaba con imponer quinientos florines de multa al que
las cazara dentro del territorio de la ciudad de Manresa.
A esta prohibición podemos añadir otra de carácter general, ema-
nada de Doña María en 1421^ por la cual fué nuevamente vedada en
todo el Principado, cualquier clase de caza que no fuese la de cetrería.
Su camarlengo Berenguer de Hostalrich, obtuvo encargo de perseguir
á los contraventores, ayudándole seguramente en este cometido, de-
legados en todas las veguerías de Cataluña. En remuneración de su
trabajo, percibían, Hostalricü ó sus delegados, la tercera parte de las
multas impuestas (273).
Más no debe suponerse, que la veda se cumpliera literalmente y
fuese universal la obediencia á los edictos reales. Si en ellos sólo se au-
torizaba á cazar en tiempo vedado, con ave de cetrería, los propios So •
beranos se encargaron de menoscabar el prestigio y autoridad de sus
disposiciones generales, otorgando concesiones á distintos particulares
para cazar con lazos, telas, caldera y demás medios prohibidos, ya en
1333. La mayor parte de estas licencias eran temporales, fijándose el
plazo de dos, tres ó cinco años. A veces se indicaba en que localidad
podía cazar el interesado, como v. g. en la licencia de Bartolomé Sir-
vent, del 1421, en donde se le ñja la diócesis de Gerona (274). En otras
ocasiones el permiso se concedía tan solo para cazar perdices con los
medios prohibidos, como v. g. en el antedicho de Sirvent, en el de
Jaime Tallada y en el de Guillermo Boquet (275) ambos vecinos de
Cervera y expedidos en 1436^ etc.
La reina María manifiesta, en alguna de sus licencias de caza, que
la otorgaba por intercesión de sus familiares y domésticos, según es
de ver en las de Guillermo Boquet y del barbero Salver (276) vecinos
de Cervera. A Tallada, decía la Eeina, que se la concedía por sus bue-
nos servicios. En la obtenida por el doncel Beltrán de Pinell (a) Cane-
lles, de Cervera, en 9 de Enero de 1425, constaba haberse expedido, á
fin de que tuviera ocasión de practicarse y ejercitarse en el manejo de
las armas.
Por su especialidad es digna de mencionarse la exención que tuvie-
ron en 1422, los vecinos del lugar de Bisanya, cercano á Camprodón.
Al permitirles cazar, con ballesta de acero, toda clase de caza, aún la
de perdices y liebres, en cualquier tiempo y ocasión, se manifesta-
ba ser tan extraordinario el número de jabalíes, osos, lobos, y demás
(272) Apóndioe, dooumento núm XI.
(273) Apéndice, documento núm. XII.
(274) Kegistro 8,118, fol. 7. Aroh. Corona Aragón.
(276) Begistro 3,130, fol. 24 y Registro 3,129, fol. 65. Aroh. Corona Aragón.
(276) Registro 3,130, fol. 63. Aroh. Corona Aragón.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 99
fieras, en los extensos bosques y enormes montañas que rodean aquel
valle, y tan fi^randes los daños que á sus vecinos ocasionaban, que
se hacía necesario, para exterminarlos, usar de las ballestas do
acero (277). No deberá extrañar, que, para el Pirineo catalán se dicta-
ran disposiciones extraordinarias á fin de estimular la caza de animales
dañinos, cuando, en esta misma época (año 1438), en París, fueron ne-
cesarias múltiples ordenanzas reales, al objeto de lograr la persecu-
ción de las bandadas de lobos, que osadamente entraban dentro de la
Capital francesa (278).
Al lado de estos permisos ó autorizaciones especiales, aparecen
prohibiciones dictadas á instancia y en favor de particulares quienes las
solicitaban, ya del Soberano, ya de las autoridades locales. Un ejemplo
de las primeras está en la orden expedida por el Rey de Aragón, en 29
de Marzo de 1389^ disponiendo que, las propiedades de Guillermo Qa-
Garriga anexas á la torre de Bellver, en Sant Iscle de les Fexes, «sint
perpetuo vetatum siue deffesia aut boalare». Después de vedar la en-
trada á los rebaños, se prohibía igualmente la de los cazadores, leña-
dores y pescadores, bajo las penas siguientes: cinco sueldos de multa
por cada persona infractora que entrara en la propiedad, dos sueldos
y mealla por cada animal, diez sueldos por cada cazador de palomas
con redes, lazos ó ballesta y por cada pescador que pescare en las ace-
quias de los molinos, además de la pérdida de los arreos de caza y pes-
ca. La mitad de la multa era para ^a-Garriga y la otra mitad para el
baile (279).
(277) «Nos Maria, etc. Ad humilem supplioacionem vestri fidelium nostrorum pro-
boram hominnin Aliorumque degencium in villa de bisanya vicarie Campirotundi
inqnam tanta poroorum vrsumque ac lapporum et aliamm ferarum siluestraum prop-
ter vasta nemora saltusque et montes demos dicte vallis a quibusdam temporibus
oitra confluxit quod nedum faiges Aluearia atque fruotns sed eciam bestiaria vestra
sepius depasountur in vestris personas id perionlosius est vt eas perdant et deuorent
sepissime irruentes ad quorum depopulaoionem et fugam solé balliste de acer prefi-
ciunt atque innant oum licet tense diu mancant dum ipse fere furtiuis passibus inse"
quntur non debilitantem lobore sed In solibo vigore persistunt ex quibus emisse sagite
Velooius in earundem ferarum visceribus infiguntur. Tenori presentis concedimus vo-
bi8 et í'acultatem plenariam elargimur quod de cetero possitis libere et impune ordi-
nacione prouisioneque seu alia quamuis repugnancia qua bis obütaro volumus quies»
center portare diotas ballistas de acer per dictis mattandis seu fugandis feris silues-
tribus, perdicibus leporibus ac alus ceteris venacionibus et alias prout et quando-
cumque ao quocienscumque de vestre processerit arbitrio volúntate. Mandantes de
certa sciencia et expresse gerentiuices gubernatoris in Catbalonie vicario et baiulo
Campirotundi, ceterisque alus officialibus et personis presentibus et futuris ad quos
spectet et locatenentis eorundem sub obtentu Regie gracie et mercedis acpena Mille
florenorum auri quatenus licenciam nostram imo Regiam buiusmodi vobis teneant et
obseruent et contra non faciant aut veniant aliqua rncione Auferentes eis et cuili-
bet ipsorum huius serie faoienda contrarinm premissorum omnes posse In cuius rei
testimonium presentem vobis fierijussimus sigillo Eegio munita. Datum barchinone
XXX die januari Anuo anatiuitate domini MCCCCXXII".— La Eeyna.» (Registro 3119,
lol. 168. Arch. Corona Aragón.)
(278) Journal pour tous, vol. V, núm. 247, pág. 620, París 24 Diciembre 1659.
(279) «Neo ibidem venari seu scindere arbores frnctifferas seu infruotifferas neo
piscari pisces in.Reguis molendinorum Turris eiusdem neo alia faceré a quibus veta-
100 F. CARRERAS Y CANDI
Como muestra de prohibición dictada en favor de particular por
una autoridad local, citaremos la que impuso, en 1492, el baile de Es-
pinalbes, multando con diez sueldos al que cazara torcaces en el bos-
que de Más, de Sant Sadurní de Osormort (280),
Estas prohibiciones pueden enseñar el poco respecto que, comun-
mente, se tenía á las leyes generales del Principado, La necesidad de
que hubiera personas encargadas de la persecución de los cazadores
que ya hemos visto como se llevó á cabo en 1421, con el nombramiento
de Berenguer de Hostalrich, vuelve á manifestarse en 1447, con otro
nombramiento análogo, aún que de carácter más restringido. Nos refe-
rimos á la orden expedida por la reina Doña María, en favor del doncel
Bartolomé (^a-Bastida, facultándole para perseguir y castigar, en los
términos de Caldas de Montbuy y de Plegamans, á los que con auda-
cia desenfrenada, se esforzaban en romper los edictos, mandamientos
y penas impuestas por cazar con los medios ilícitos y reprobados,
de que antes se ha hecho mérito (281). Hay que creer por consiguiente,
que, tanto en el presente caso, como en el de Hostalrich del 1421 , la
autoridad de los bailes, venía subordinada á la del delegado para la
persecución de los cazadores, debiendo cuidar de hacer públicas por
medio de pregones, las órdenes relativas á la caza, que Hostalrich y
Bastida, juzgasen necesario expedir para conocimiento del vecindario.
No cabe duda, de que la autorización obtenida por Bastida en 1447,
debió abrir la puerta á grandes favoritismos y abusos^ por el permiso
que la Reina le daba de otorgar licencia y plenos poderes para perdo •
nar de las penas, á los que en ellas incurriesen, según su arbitrio. De
la facultad de condonar multas á los contraventores de las leyes de
caza, usaron los Soberanos en diversas ocasiones. Una de ellas ocurrió
en Argilés (Roselló) en 1448. El Baile se incautó de las redes de un tal
Armengau y le multó, por cazar perdices con caldera. Armengau usan-
do de su influencia en la corte real, obtuvo de Doña María, no sólo el
perdón de la multa y devolución de las redes, según fué mandado al
Baile de Argilés, si que también que en adelante pudiese cazar perdi-
tam deffeeia seu boalare exími coüsnenit. Pro ouias eiquidem yooati seu statnti ob-
semacionem imponimiiB ac inñigimiis quibnscumque transgressionibus sea oontrafa-
cientibuB penas inferius declaratas videlicet cuillbet intranti quinqué solidos et pro
qnalibet animali ibidem inuento dúos solidos et minuto totidem et cuilibet tendenti
recia seu laqueos aut cum ballista occidenti seu occidere velenti columbos ac piscanti
pisoes in Beguis molendinorum decem solidos que pene tociens comittantur quociens
fuerit contrafactum » {Gratiarum IIT, fol. 26, Arch. Bailía Real Patrimonio en Barce-
lona.)
(280) tA XXII del mes de febre o any MCCCCLXXXXII en bertran messatge del
baile a instancia den mas de sant saturni a possat ban de X sons que negun no tir en
Bon boBch a todons sense licencia sua.» {ífanual 1490 ál498, Aroh. parroquial de Espi-
nalbes.)
(Si81) Apéndice, docamento núm. XIII.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 101
ees por los medios ilícitos y prohibidos, que bien, le pareciere. Más tal
permiso sólo se le concedía por término de un año (282).
Pruebas tenemos de que durante todo el siglo xv, se mantuvo en
vigor la constitución de la corte de Montblanch. Así se manifiesta, no
sólo por los Concelleres de Barcelona en cierta carta sobre contraven-
ción de las leyes do caza, fechada en 9 de Octubre de 1459 (283), si
que también en un interesante pregón, que^ el rey de Navarra D. Juan,
lugarteniente en Cataluña de su hermano Alfonso IV, hizo publicar
poco antes, en 3 de Junio de 1456 (284). En este último bando, el en-
tonces Infante de Aragón, anunciaba que, á instancia de la Corte ge-
neral del Principado de Cataluña y de consentimiento de aquella, fue-
ron estatuidas las constituciones siguientes: ratificar y aprobar lo que
establecía la corte de Montblanch en su capítulo que empieza ítem
quod intra decem anuos, en todo cuanto preceptúa, referente á las
perdices y palomas, fijando una veda algo mayor para la caza que
no fuese de cetrería, á saber, desde las Carnestolendas, hasta fin de
Septiembre. Además prohibióse en absoluto, para todas las épocas del
año, la caza con reclamo, multando con cien sueldos á los que infrin-
gieran la disposición. A los palomares se les señaló, una área de in-
munidad de sesenta pasos á su alrededor, dentro la cual nadie podía
tirar con ballesta á las palomas.
Estas disposiciones pasaron á formar parte de las Constituciones ge-
nerales de Cataluña y fueron ley en el Principado durante la Edad
Moderna.
En el reinado de Carlos III, y año de 1784, se promulgó una prag-
mática sanción, especialmente dirigida á evitar los perjuicios de las
palomas en los campos (285).
(282) <La Keyna. — Batle: A supplioacio de algans familiara nostres vos dehim 6
manam que tornets lo filat an Anthoni armengau que li hauets penyorat perpo oom
cassaua perdius ab Caldero. E de aquiauant per cassar les dites perdius ab Caldero, o
en altra qualseuol manera de aquest Nadal qui ve en vn Any no li fassats empaix o
questio alguna. Car per tot lo dít temps li hauem dada licencia de cassar les dites per-
dius la qual volem li sia observada sensincorriment de alguna pena axi per lo passat
com per lo sdeuenidor durant lo dit temps. Datum en Perpinya a XXI de Noembre del
Any Mil CCCC quaranta vuyt.— La Keyna. Al feel nostre lo fiatle de la vila de Argi-
leB.> (Registro 3,272, fol. 80, Arch. Corona de Aragón.)
(283) La Paloma mensajera, Barcelona, año IV, 1*594, núms. 42 y 43.
(284) Apéndice, documento núm. XV.
(285) ^Pragmática sanción en fueraa de ley Por la qual se eetablezen reglas oportunas
para evitar los daflos que causan las Palomas en los sembrados y mieses en las dos estaciones
de sementera y Agosto, y los perjuicios que de ello se siguen á los Labradores en la conformi-
dad que se expresa. A!lo^l784. En Madrid, En la Imprenta de D. Pedro Marín.
1.— «D. Carlos por la gracia de Dios Rey de Castilla de León de Aragón de las Dos Si-
cilias, etc.
«Mando á los Dueños de Palomares sean obligados á cerrarlos y poner redes en
los dos Messes de Octubre y Noviembre y en los tres de Junio, Julio y Agosto sin que los
Justicias puedan ampliar ó reducir este termino: pues en caso de convenir alguna al-
teración en qualquier Providencia se me deberá consultar.
2,— «Hallándose las Palomas en dichas dos temporadas fuera de los Palomares, se les
102 F.. CARRERAS Y CANDI
En época contemporánea, el reglamento publicado en 1834 para
la ejecución del R. D. de 1833 sobre caza y pesca, trata, en uno de sus
títulos, de la caza de palomas y protección á los palomares (286). No
queremos proseguir más adelante nuestra investigación en la actual
legislación espaiíola.
podrá tirar á, qnalqniera distancia por los Vecinos y forasteros bien sean Labradores
ó no lo seau, en los sembrados y heras ó en otros cualesquiera sitios parajes sin incu-
rrir en pena alguna; con tal de que siendo dentro de la distancia del tiro no se pueda
bazar sino & espalda vuelta á los Palomares.
3.— «Los dueños de los Palomares ademas de perder las Palomas han de pagar el da-
ño á justa tasación y medio real vellón de multa por cada una con agravación de las
penas encases de reincidencia hasta la perdida de los Palomares y demás al arbitrio
de mi consejo.
4.— «Por lo muy útil que es al común la orla aumento y conservación de las Palo mas
y el copioso fruto de palomino y pichones que producen, Ordeno que lo dispuesto en la
expresada Ley del Señor Don Henrrique quarto renovada por el Señor Don Carlos pri-
mero subsista y quede en su fuerza y vigor para los demás Messes y temporadas del año
y que en su consecuencia no se pueda tirar en ellos á, las Palomas á las inmediaciones
de los Palomares ni á la distancia de la legua que previene de sus alrededores.
5— «Vltimamente quiero y declaro que publicada esta mi Real Pragmática queden
abolidas y derogadas la^ demás leyes providencias y Keales Ordenes que se hayan co-
municado en el assumpto en quanto so opongan á esta mi disposición general é igual-
mente las ordenanzas particulares de los Pueblos que de esto traten pues imbiolable-
mente desde el día de su publicación; bien entendido que la mas leve tolerancia y omi •
sion de las Justicias en este asumpto ha de ser cargo de residencia y como á tal so
ha de juzgar.
«Y para (jue todo tenga su puntual y cumplido efecto he acordado expedir esta mi
carta y Pragmática Sanción en fuerza de Ley como si fuese hecha y promulgada en
Cortes. Por lo qual Ordeno y mando á todos los Juezes Justizias de estos mia Eeynoá
y k los estantes y habitantes en ellos de qualquiera estado preheminenoia y condición
que sean, vean lo dispuesto en ella y lo guarden cumplan y executen según como se es-
tableze y lo hagan guardar, cumplir y executar, etc.
«Dada en San Ildefonso á diez y seis de Septiembre de mil setecientos ochenta y
quatro. Yo el Hey.
«Publicada en la villa de Madrid á primero de Octubre de mil Setecientos ochenta
y quatro.»
(286/ «TÍTULO III.— Z>e la caza de palomas— 19— liSis palomas campesinas están com-
prendidas en las demás aves que pueden cazarse con sujeción á las reglas prescritas.
«20 Ko podrá tirarse á las palomas domésticas agenas sino á la distancia de mil
varas de sus palomares. Los infractores pagarán al dueño el valor de la caza y además
pagarán á la justicia 20 rs. por la primera vez, 30 por la segunda, y 40 por la tercera,
siendo la mitad de esta multa para el dueño, y la otra mitad para el fondo que se dirá
en el titulo 4.°.
«21 Los dueños de palomares tendrán obligación de tenerlos cerrados durante los
meses de octubre y noviembre, para evitar el daño que pueden ocasionar las palomas
en la sementera. Los infractores además del daño, si lo hubiere, pagarán 100 rs. de muJ
ta por la primera vez, 150 por la segunda, y 200 por la tercera.
«22 La misma obligación y bajo las mismas penas tendrán los dueños de palomaret>
durante la recolección de las mieses desde 15 de janio hasta 15 de agosto.
«23 8i por razón de los lijados anteriormente para el cerramiento de los palomares
en las dos épocas expresadas, ó en algana de ellas, podrá hacerlo la justicia del pue-
blo, siempre que el plazo respectivo no exceda de dos meses, avisándolo con anticipa-
ción para gobierno de los dueños de palomares.
«24 Durante las dos épocas expresadas de recolección y de sementera, será libre ti-
rar á las palomas domésticas á cualquier distancia fuera del pueblo, aunque sea de las
mil varas señaladas arriba, siempre que en este último caso se tire con las espaldas
▼ aeltas al palomar.» (Boletín oficial de Barcelona del 23 mayo de 1834).
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 103
ÓRDENES LOCALES SOBRE CAZA DE PALOMAS
Los perjuicios á que estuvieron sujetos los dueños de palomares en
la Edad Media, aparecen latentes de lo que hemos dicho al exponer las
Disposiciones en favor de las palomas generales al Principado. Sus
causas fueron, no sólo la abundancia de ladrones y gente de mal vivir,
sí que también las luchas á que se entregaban los señores de castillos
entre sí, luchas ó bandosidades autorizadas por las leyes civiles y que
traían aparejadas el saqueo de las propiedades rurales. Además las
venganzas particulares;, tuvieron igualmente su parte correlativa en
tales perjuicios ó vejaciones y por tanto no es raro hallar á personas
de cierta categoría social, como v. g. el notario de Vilagrassa Tomás
]\Iarrades en el siglo xiv, (287), entregarse á robos de palomas y des-
trucción de palomares, como pudiera hacer el más vulgar de los la-
drones.
De consiguiente, las autoridades locales debían secundar la gestión
general en pro de las palomas y atender además á lo que fuere modo
de ser especial del término, ciudad ó jurisdicción, cuyo gobierno tu-
vieren bajo su cargo ó potestad.
Figuran en primer lugar los Concelleres de Barcelona, siempre
atentos á todo cuanto redundaba en mejor provecho de sus adminis-
trados. Siendo, los documentos más antiguos que se conservan en el
archivo municipal de esta Ciudad, del año 1300, en el de 1301 ya se
hallan dos curiosos edictos encaminados á proteger las palomas de
cualquier demasía. Prohibíase preparar trampas para capturarlas den-
tro del territorio de Barcelona y se multaba con sesenta sueldos su
contravención (288). Después de no permitir de ningún modo la venta
de palomas adultas, sin duda para favorecer su reproducción, fué es-
tablecido «que, ningún cazador ó ballestero, se atreva á tomar ni á ti-
rar á las palomas alrededor de palomar, dentro el área de un tiro de
ballesta,» imponiéndosele del contrario, cinco sueldos de multa. Las
palabras del edicto que nuil cassador ne hallester y las siguientes de
no gos pendre ne trer, pueden aludir á los dos medios de caza entonces
en boga, la de cetrería y la de ballesta (289).
A las disposiciones del 1301, sigue en orden cronológico, otra del
1327, que es solamente reguladora del precio á que debían venderse
las palomas en el mercado barcelonés (290).
Cuando, en 1338, las cortes catalanas reunidas en Montblanch tra-
(287) A. 1354. «ítem senyor lo dit Thomas eatant a vma grassa I nit trencha e roba
II colomers den gras e daquen traxch aytants coloms oom hi hauia> (Registro 159J,
fol. 174, aroh. Corona de Aragón).
(288) Apéndice, doo. núm. XXX, bandos, letra (e).
(289) Apéndice, doc. núm. XXX bandos, letras (D y (g).
(290) Apéndice, documento núm. VIIÍ.
104 F. CARRERAS Y CANDI
taron de favorecer la reproducción y cría de las ovejas, perdices y pa-
lomas, en Barcelona fué pregonado un bando comprensivo de cuanto
aquellas preceptuaron (291). Dispúsose que dentro los diez años si-
guientes, no se mataran corderos, ni ovejas, que no tuviesen más de
cuatro años, prohibiéndose cazar perdices, de Pascua á San Miguel
Arcángel, exceptuándose con ave de cetrería. Fueron impuestos qui-
nientos sueldos de multa, ó en su lugar la pérdida de la mano dere-
cha, al que capturara palomas ab engés, cemhell, filats ó en altra mane-
ra, sino ab aucells.
A los siete años de- publicada la anterior disposición, ó sea en 1341,
los Concelleres vuelven á estatuirlo., si bien con mayor indulgencia en
el castigo, imponiendo solamente sesenta sueldos de multa.
Poco antes de expirar el plazo de diez años fijado en las cortes de
Montblanch, ó sea en 1343, se repite, en Barcelona, el edicto anterior.
En 1357, prohibieron los Concelleres, poner trampas á las palomas,
bajo pena de mutilación de una mano (292). La poco halagüeña pers-
pectiva de quedarse manco de una manera nada honrosa, no logró de-
sistieran de su propósito, los aficionados á parar trampas. De lo contra-
rio no hubiere precisado que, tan sólo cuatro años después, ó sea el
sábado 18 de Septiembre de 1361, los Concelleres se vieran en la nece-
sidad de dictar otra disposición encaminada á extinguir la caza de pa-
lomas con trampa. ¿Será mal inveterado en nuestra tierra dictar leyes
para no llevarlas á ejecución? Si tantos puños se cercenaran por esta
causa, ¿en tan poco los hubieran estimado los barceloneses, que no es-
carmentasen de su obstinada afición á las palomas?
Otro edicto de 1361, fué igualmente dirigido contra el que captura-
se palomas con trampas, imponiendo quinientos sueldos de castigo, ó
la perdida de una mano (293). Correspondían de dicha multa, dos ter-
ceras partes al Veguer y una al acusador. Atendido el reparto de esta
pena pecuniaria, parece hubiere algún interés en imponerla y que, por
tanto, se corregirían los aficionados á la caza fui'tiva de palomas. Pero
ni por esas. Nuevos bandos aparecen en Enero de 1363 y Agosto de
1367, ambos calcados en el patrón del que fué dictado en 1357, esto
es, conminando al infractor, con la referida pena de perder un puño
irremisiblemente.
(291) Apéndice, documento núm, IX.
(292) A 1357 (20 Diciembre) «Ytem ordenaren los dits Consellers e prohomens que
nuguna persona de qaalque stament o oondicio sie no gos parar a colóme dina lo terri*
torL de Barchinona. E qui contra fará perdrá lo puny sena tota mercó. > (Colección de
bandos del arch. municipal de Barcelona)
(293) A. 1361 (18 de Septiembre) «Ara lioiats per manament del Vaguer. Ordenaren
los Oonaallors els prohomens de la Ciutat que naguna persona de qualque stament o
condicie sia no gos parar á. coloms dins lo territori é termens de la Ciutat. E qui contra
fará pagará, per ban D solidea ó perdrá lo puny. Del qual ban de D solidos damunt dit
haurá les dues parts lo vaguer ó la terpa lo acusador» (Colección de bandos del archivo
municipal de Barcelona).
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 105
En el siglo xv tuvieron cuidado, los Concelleres, de mantener en
vigor la constitución de Montblanch. Así aparece de la condonación de
la multa en que incurrieron Julia Ferrer y sus hijos, en 1459, y que
le impusiera el Baile do Tarrasa, por dedicarse á cazar con filat é
caldero. Es otra de tantas muestras del poco espíritu de imparcialidad
que informaba mtichos de los actos de aquel siglo, la carta escrita por
el conceller Torrent al antedicho Baile, manifestando obedecer tal per-
dón «á la amistad y buena voluntad que dichos Padre é Hijos tienen
con algunos de nosotros» (294), queriendo que, por esta causa se pro-
ceda con ellos de distinto modo que con la mayoría de las personas.
Aquí es del caso hacer notar, que, en los siglos xiv y xv, las dispo-
siciones emanadas de los Concelleres de Barcelona, no sólo tuvieron
carácter local, esto es, que su sanción legal comprendía todo el territo-
rio de dicha Ciudad, sino que también se extendieron á las jurisdiccio-
nes de la misma y A todos aquellos pueblos de Cataluña, que, por vir-
tud de privilegio especial, habían logrado ser declarados calles de
Barcelona, como v. g. Cardedeu, Marata, Corro, Moya, Vallvidrera,
Mollet, Parets, Gallechs, Sant Pedor, Mataró, Ribas, Vilanova, Geltrú,
Vilasar, Argentona, Granollers, Cambrils, Montbrió, los Tegells, la
Plana, Igualada, Cabrera del Maresma, Premia, Dos-Rius, Cañamars,
Tona, Palamors, Vilamajor, Cruilles, etc.
Habiendo visto de que manera se legislaba en Barcelona respecto á
las palomas de palomar, debemos estudiar como en las poblaciones ru-
rales se atendía á proteger la caza de torcaces y en especial al derecho
de los particulares á la propiedad de las que se posaban ó anidaban en
sus pertenencias. Para ello examinaremos algunos documentos proce-
dentes de las Guillerías, una de las regiones más abundantes en torca-
ces, por la especial extructura de sus abruptas montañas y desfilade-
ros, extensos bosques y abundantes arroyos.
Muchos son los datos donde se manifiesta que la caza de torcaces
constituía una costumbre muy generalizada en las Guillerías (295), se-
(:i94) De esta onriosa carta, que dimos á conocer por entero en 1891 (La Paloma meti-
«ajerrt, Barcelona, año IV, núm. 42 y 43) reproducimos el siguiente párrafo: «La qual
pena axi per quant hi son cayguts ignorantment quant per la amistat e bona voluntat
que los dits pare e ñll han ab alguns de nosaltres aquella ab lo present li remetem com
volem que sobra a90 sia dat ais dessus dita altre comport que no ais altres» (Letres clo^-
aes 1458-1460 Aroh. Municipal de Barcelona).
(295) A. 1460 (23 de Septiembre) «En P. carau de parroquia de campas enterrogat e
jnrat que sap ni que ayt dir en la questio den matero e den serat diu esser que oyt dir
en P, frayson matero en aquel temps quel tira a totons (todons) e quel dit frayson la-
via remes al roure del cap de la artiga cromada, que tiras, lo cal día(deya) que era 8eu>.
El testigo P. Vilarman djjoi «esser ve vna vegada el hira ab son fñll i tirana a totons al
roure dejusts la pianola dins lartiga...» {Manual 1400-147 7, archivo parroquial de Espi-
nalbes).
A. 1508 (28 de Septiembre). En los litigios que sostenían los propietarios rurales Sola-
nells de Espinalbes y Brevenchs de Osormort, acerca los límites desús respectivas
propiedades, uno de los testimonios citados, aduce como prueba, el que Solanells vién-
106 F. CARRERAS Y CANDI
gún expusimos al reseñar la que se efectuaba con las palomeras. Por
consiguiente es natural que se tuviera cuidado en regularla y limitarla.
Tanto abundaba allí la caza, que, en vez de establecerse el censo de
un par de gallinas ó de pollos, hállase estatuido, en Viladrau, durante
el siglo XIII y en Sant Ililari (^a-calm durante el xiv (296), el de un par
de perdices anuales. Asimismo vemos concertarse la prestación de un
par de torcaces como derecho de entrada, en cierto establecimiento de
tierras en Sant Hilari. Ramón de Gurb, señor del castillo de Solterra y
de la casa de la Rovira, al establecer, á Francisco de Mansulí, en 13
de Febrero de 1373, el más Rovira, que estaba derruido y abandona-
do, manifiesta recibir, como derecho de entrada, dos pares de torcaces,
de cuya entrega se declara satisfecho y pagado, renunciando á toda
excepción (297).
Viladrau, importante población de las Guillerías situada en la falda
del Montseny, formó parte, en la Edad Media, del término jurisdiccio-
nal asignado al castillo de Taradell, siendo regida por un baile nom
brado por el Señor de este Castillo. En el año 1395, el Baile de Vila-
drau dirigió un pregón á sus administrados, prohibiendo cazar con te
las en las pertenencias de las casas Segalars y Mirambell, bajo multa
de veinte sueldos. Esta disposición, que quizás se hizo con asentimien-
to del Señor del término del castillo, venía á reconocer el derecho que
á un particular asiste, de vedar los terrenos de su propiedad. Celosos
estuvieron de sus torcaces, los dueños de la masía Segalars, quienes,
en 7 de Noviembre de 1543, obtuvieron, del baile de Viladrau, otro
pregón vedando sus bosques, esto es, prohibiendo en ellos, casar ni
tirar a todons ni ninguna lei de casa.
En 27 de Noviembre de 1407, la misma autoridad local vedó, en
Viladrau, tirar en acecho á las torcaces, así de noche como de día, no
tolerando se construyera barraca para cazarlas, bajo multa de veinte
sueldos (tirar a goclia (298) da todons da nits ne da dies ney gos fer
dolé cazar palomas torcaces en un roble situado en el terreno que él mismo reclamaba
lo había nombrado por ronra den Brei^cnche,
«ítem fon cltat nestena vilamala e jura e que segOns den e la sua consiencia que las
termas deaalan (sic): interrogat el testimoni si may hi tira dix que moltas vegadas hi
ania tirat a un roura qui es dintra la pesa de térra que dit solanels demana e vya dit
que era dea breuencbs e que vn dia en solanels prom 11 dix que mes todons agüera
morts al roura den breuencbs lo qual roura es en certa tera que dit solanels demana;
enterrogat el testimoni si hi sab res pus diu que no.» {Manual de 1501 á 1508, archivo
parroquial de Espinalbes).
(296) A. 1377 (21 de Junio) Manual 13G4 vtqve 1379, arch. parroquial de S. Hilari Qa-
calm.
(21)7) «Per intrata huiuBmodi laudacionem et stabilimentum a nobis habuisse et
reoepisse confíteor dúo jiaria todonarum super quibus Renuncio omni excepcioni dicto-
rum dúo paria todonorum non habitorum receptorum etdoli et lili legi que deceptis
Bubuenit et omni ali jari contra bec repugnante penitus renuncio.» {.Vanual del 13(',1
ataque Í370 del arch. parroquial do Sant Hilari Qa-calm).
(29^) La palabra gocha está escrita, dando & la í7 el sonido de j catalana y á la ¿^ el
de k, según pr&ctioa popular de dicha ortografía en el siglo xv.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 107
barraque). La pena pecuniaria impuesta á los infractores de las leyes
de caza en favor de las palomas, fué menor, en Viladrau, que la im-
puesta á los propios infractores, cuando á perdices se refirieron. Así
encontramos, en 1422 (25 de Octubre), imponerse la de sesenta sueldos,
además de la pérdida de las redes, ó amputación de la mano, al que se
atreviera á pendre perdius ni fer paraments.
Dióse, en 11 de Noviembre de 1431, otra disposición encaminada á
proteger de los cazadores^ la propiedad Pujolar de Viladrau, en cuyos
bebederos se conoce tenían afición á preparar trampas y redes para
las torcaces, conminando con diez sueldos de multa á los que tal hicie-
ren: (eii totas las hagudas deis todons qui sien dins las possessions del
mas pujolar, que nul hom noy gos parar).
El propio Baile de Viladrau, en 19 de Enero de 1435, pregonó que
las personas forasteras no se atreviesen k j^alomar, ni á tirar con ba-
llesta á las torcaces, bajo pena de diez libras (naguna persona estran-
yera no gos palomar ni tirar ab balesta ais tudons ni naguna persona
de la parroquia no gos donar licensia a naguna persona stranyera de
tirar ais dits todons sots la dita pena de X Iliures). Bien se manifiesta
que el edicto local.iba encaminado á favorecer á los cazadores del tér-
mino y á poner coto á las demasías de algunos forasteros, á los que no
se les permitió, ni cazar con ballestas, ni por medio de las redes ó pa-
lomeras.
Aquí será del caso mentar un hecho acaecido en la región Ausonesa
en 1450. Ciertos dueños de palomares elevaron sus quejas á la supre-
ma autoridad Soberana, clamándose de haber sido violada la constitu-
ción 2MU y treva, por algunos quienes les capturaban sus palomas cum
retibus sive filats aliisque exquisitis modis. Esto obligó á la Reina Lu-
garteniente, á dirigirse al Veguer de Vich y Ausona, en 1 de Septiem-
bre de 1450, ordenándole multara con cien sueldos, á los que tomasen
palomas ajenas (299).
Coincidió casi con esta orden, otra local del Baile de Viladrau, del
10 de Junio de 1453. Con la mira de reglamentar la caza por medio de
redes, deque se lamentaba Doña María tres años antes, dispuso, que,
todo el que deseara cazar de este modo, lo hiciese con licencia suya y
por tanto nadie se atreviese aparar ais paranys sens sa licensia.
Los textos originales de las transcritas disposiciones, mencionan
las palabras parar, paranys y fer paraments, que hacen referencia á
la caza de palomas con redes ó trampas, cuyas palabras son evidente-
jnente derivadas del verbo latino parare, preparar^ disponer. No debe
ser confundida con las anteriores, otra palabra catalana que guarda
con ellas notoria semejanza, la de parada y que sin duda trae su ori-
gen en el propio verbo latino. En la Sagarra llaman parada, al bancal
ó porción de tierra de cultivo de cereales, escalonado y encajonado en-
(299) Apéndice, documento núm XIV.
108 F. CARRERAS Y CANDI
tre dos vertientes. Aún cuando se usa en la actualidad, tiene un ori-
gen anterior al siglo xvi (300).
Disposiciones análogas á las estatuidas por la autoridad municipal
de Viladrau, existen en otras poblaciones de Cataluña. Sabemos v. g.
de Igualada, que, en el siglo xv figuró entre las facultades del mosta-
9af , la de prohibir cazar ó poner trampas en las inmediaciones de los
palomares, estableciendo esta veda en términos muy generales, é im-
poniendo diez sueldos de multa A los que no la guardaran (301).
LAS PALOMAS EN EL MERCADO Y EN LA COCINA
Dentro de la organización municipal de Barcelona en los dos últi-
mos siglos de la Edad Media, quedó atendida la venta de toda clase
de víveres, merced á los oficios de almotacén ó mostacaf j de adminis-
trador de las plazas. Figuraba entre las obligaciones del primero,
cuidar de la tasa á que se vendían los víveres y de confiscar los que
fuesen averiados. El administrador de los mercados, cargo subalter-
no, además de atender á su buen orden interior, había de inspeccio-
nar las mediciones de vinos, granos, etc. Ambos cargos, creados en el
siglo XIV, debían considerarse como delegación de parte de las atribu-
ciones de los Concelleres y del Consejo. De modo que los bandos sobre
tasa y demás disposiciones de las plazas-mercados, que, en la primera
mitad del siglo xiv, se promulgaban á nombre de los concelleres y
consejo, más adelante, son debidos á la sola iniciativa de los que ejer-
cían sus funciones delegadas.
Los mercados de Barcelona, en el siglo xiv, cambiaban de aspecto
según las horas del día: por las mañanas servían para expender los
víveres y demás pertinente á la alimentación de sus ciudadanos, des-
apareciendo antes del mediodía, toda señal de ello. Cada mercan-
cía tenía indicado lugar propio en la Ciudad. Las palomas y demás
género de caza, en el año 1832, se expendían en la plassa deis cunills
[B (o)] (302). En los siguientes años se extendería su venta á todas par-
(300) Siglo XV (sin fecha): «vnes parades ab vna sort en la ribera: a reoh la sorfc, les
parados assequa.»
A. 1688: «in dicto termino de Vallfogona in partida vocata les parades del torrent do
1» amella.»
A. 1616.: €vna vinyeta feixa y parades ab sa tingada y afrontacions la qual tinah en
lo torme de vallfogona a la partida del penjat.» (Manuales del archivo parroquial de
Vallfogona de Eiucorb.)
(301) €Que prop oolomar no sia tirat ne parat— ítem que neguna persona no gos pa-
rar, ne tirar a coloms un tret de ballesta, ne ab are de rotllo, sots ban de X bous per
quis cuna vegada» (Jochs Fiorals 1895.— Costinns del segle xvpor Jaume Serra ó Iglesias.)
(302) Lds bandos y demás disposiciones municipales citadas en esta sección los he-
mos agrupado todos en el número XXX del apéndice de documentos. Para su compro-
bación, pondremos en este texto una B seguida de la letra ó cifra que hemos asignado
& sus distintos apartados, á. fin de poder compulsarse con mayor y facilidad.
t
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 109
tes, por cuanto, en 1361, fué solamente permitido venderla en las pla-
zas Nova, del Born y del Oli, imponiéndose veinte sueldos de multa á
los que lo hicieran en otros lugares distintos de los indicados. [B (13)].
En 1377, se autorizó tan solo para tener caza, en las tiendas ó mesas
de los revendedores [B (20)], á no ser en la plaza Nova, desde la torre
del palacio episcopal, en la actualidad aún subsistente, al ángulo de
la calle deis Banys Nous, hoy llamada de la Paja, prohibiendo á los
revendedores de la plaza del Oli, que vendieran en otro lugar fuera
de su casa [B (23)]. Sin embargo, en 1383, se dispuso, que, en tiempo
de lluvia, pudiera venderse volatería y caza junto al Jiostal de
Na Lorenca, y cobijarse los* vendedores, bajo el alero do su tejado
[B (29)]. Tres años después, en 1386, al ser cambiado, en la plaza No-
va, el sitio destinado á la venta de la caza, se prohibió desprumarla
allí mismo [B (30)]. En el último decenio del siglo xiv, los payeses y
gente forastera que aportaban á Barcelona volatería y caza, no se
limitaban á situarse en las plazas antes indicadas, sino que también
llevaban dichas mercancías á la plaza del Oli, donde tenían sus
tiendas los revendedores. Como esto traía desconcierto, fraude y per-
juicio á los barceloneses, en 1393, fué prohibido el posarse en dicha
plaza del Oli [B (34)].
Al comenza-r el siglo xiv, los revendedores tenían muy regulado
su comercio, para evitar, que, con los acaparamientos de volatería, el
consumidor, experimentara demasiados perjuicios. De ahí que estu-
viese prohibido adquirirla para la reventa, antes de oírse el tañido
matutino de la campana dé la Seo. Tampoco podían, los revendedo-
res, salir á comprar la caza, fuera de la Ciudad y dentro los términos
de su territorio [B QI) (m) y (?i)], debiendo proveer de ella en las pla-
zas públicas. Atenuóse el rigorismo de estas disposiciones en 1332, per-
mitiendo á dichos revendedores, que, la caza que les fuese consignada,
procedente de Manresa, Vich, ú otros lugares donde la comprasen por
su cuenta, pudiesen llevarla de las posadas á sus establecimientos, si
bien exigiéndoles juramento de ser cierto que les fué expedida direc-
tamente de dichas ciudades [B (o)]. Más adelante, en 1349, se les per-
mitió, entrar volatería adquirida en mercados y ferias de fuera Bar-
celona [B (2)]. Una disposición del 1368 tendía al propio fin, ya que,
para coartar la labor de los revendedores, mandóse, á los introduc-
tores de caza, que la llevasen de un modo ostensible, encima de la
persona ó bestia en que se entrara en Barcelona [B (14) (15) y (16)].
En cuanto á la tasa á que debía expenderse la caza en los mercados
de la Ciudad, fué ya fijada en 1301, pudiendo considerarse de ori-
gen anterior. Los revendedores debían tenerla exhibida al público,
sin que por ningún concepto pudieran excusarse de venderla á quien
ofreciese por ella el precio establecido. Es digna de mencionarse en
este año, la prohibición de vender palomas caseras bajo multa de
veinte sueldos á excepción de los pichones (no gos comprar ne vendré
lio F. CARRERAS Y CANDI
cóloms de colomer sino novells), como también lo es, la prohibición de
vender pajaritos vivos. Empero esta última fué levantada en 1312,
fijándose el precio de una mealla por cada dos gorriones, ó dos pinzo-
nes^ ó cinco verderillos, ó sea, lo que diariamente solía darse á un
gavilán para comer. Justificado resulta dicho acuerdo en una época
en que tan indispensable se hacía comprar pajaritos para alimenta-
ción de las aves de caza [B ib) (c) {f) Qi) (1) y (?!)]. Más á pesar de todo,
este permiso duró poco tiempo, y en 1324 volvió á prohibirse la
venta de pajaritos, aún cuando fuesen vivos.
La venta de volatería y caza, trajo un pequeño antagonismo entre
las autoridades municipales de Barcelona y Manresa, en los albores
del siglo XIV. En Manresa dióse un pregón áfin de impedir se exportaran
á Barcelona conejos, perdices y cualquier género de caza. Los Conce-
lleres de esta Ciudad, manifestaron su extrañeza al baile y prohom-
bres de Manresa, exponiéndoles que jamás ellos prohibieron exportar
lo que hubiesen menester, esperando en consecuencia, ver revocado
el pregón (11 kal. Enero de 1302). Resolveríase el conflicto pronta y
satisfactoriamente para los barceloneses, pues aparte de no hallarlo
ya mencionado en lo sucesivo, un bando del año 1332, alude á la. caza
que llegaba de Manresa (303) [B (o)].
El esmero de los administradores de la ciudad de Barcelona para
evitar el acaparamiento de la caza, no daba los mejores resultados. -
En 1378 se quejan los Concelleres al Mosta(?af, de que puestos de
acuerdo acaparadores y payeses, la caza y pollería, entraba compro-
metida á polleros y á revendedores. Todos los convenios y compromi-
sos pendientes, fueron entonces anulados por el Mostapaf, conminan-
do con imponer cien sueldos de multa al ciudadano y cincuenta al
forastero, que se conviniere de nuevo. Y si reincidiese por dos ó tres
veces, se le prive de su comercio; y sí á pesar de ello reincidiere toda-
vía, se le aplique la pena de azotes. De otro lado se obligó al forastero
introductor de volatería, á dirigirse directamente á la plaza Nova,
donde debía ser vendida, sin que pudiera entrar en casa ni hospede-
ría alguna, bajo multa de cien sueldos, multa que se aplicaba igual-
mente al posadero receptor de esta pollería. Finalmente, prohibióse al
revendedor el envió de mensajeros fuera de los términos de Barcelo-
na, para la adquisición de caza, á no ser que él mismo fuese perso-
nalmente á comprarla [B (24) (25) (26) (27) y (28)]. Modificóse es-
ta última prohibición en 1387 en el sentido de que, si enviaba mensa
joros, debía vender públicamente la caza en el sitio designado, á cuan-
tos la desearan para su consumo [B (31)].
Algunos revendedores tuvieron además posada: á éstos se les con-
minó, á fines del siglo xiv, con imponerles veinte sueldos de multa,
además de la pérdida de la volatería que correría de su cuenta, si ad-
(308) Apéndioe, documento núm. V.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALU5}A EN LA EDAD MEDIA 111
mitían, en calidad de huésped, á algún forastero llevando caza para el
mercado [B (35)].
Mitigóse este rigor, en 1394 y 1397, al permitir el tránsito y paso
por la plaza del Oli, á los payeses y forasteros con caza. Como ya
sabemos, que había en dicho sitio, distintas posadas y revenderías,
se facilitaba indirectamente, la adquisición de caza para la reventa
con tal permiso [B (36)].
En 1389, se prohibió á los revendedores, la costumbre de rifar caza
en mesas y talleres [B (32)].
Por vez primera se multó, en 1349, al que vendiese caza averiada
ó despidiendo mal olor, encargándose al Mosta^af de su castigo.
A fines del siglo xiv, la volatería y caza, satisfacía, á su entrada
en Barcelona, un derecho de consumo. Los fraudes á que daba lugar
su percepción, trataron de evitarse en 1397, obligando, al introductor,
á conducirla de una manera ostensible y exigiéndole juramento acer-
ca de la veracidad de sus declaraciones [B (37) (38) y (39)].
En la propia época, no se permitía vender caza muerta los domin-
gos y otros días señalados, en las plazas del Born, y Nova, á los pa-
yeses y forasteros. Esta prohibición se levantó en 1399 [B (40)].
La abundancia de datos que nos suministran los bandos barcelo-
neses, sobre revendedores y caza, durante el siglo xiv, cesa al llegar
al XV y sólo nos es dable consignar breves noticias. En 1448 se esta-
blece igualdad completa entre payeses ó forasteros y revendedores,
tenderos ú hostaleros, debiendo entenderse^ que, la tasa fijada á toda
clase de aves, comprendía por igual á unos y otros [B (41)].
En los años 1461 y 1466, restablecióse la prohibición de comprar
volatería, caza, huevos, requesones y otros artículos de importación
de los payeses, dentro ó fuera los términos de la Ciudad, en los cami-
nos que á ella conducían [B (42)].
Los precios á que se vendió la caza en Barcelona, durante los si-
glos XIV y XV, aparecen en la tabla que seguidamente publicamos en la
página 112. En ella mantendremos el nombre catalán con que vienen
designadas las distintas especies de aves en los documentos originales.
En la transcrita tabla resumen, se verá á cuanto se estimaron las
palomas en diversos años. Sí en 1301, se vendió, el par de torcaces, á
ocho dineros, en 1324 bajó esta cifra hasta cinco dineros. Además, en
1327, las palomas llamadas pahoners, alcanzaban el precio de diez
dineros el par, mientras las bravias (coloras roquers), sólo tuvieron el
de cinco dineros (304). Dicho precio subió en 1332, fijándose en seis di-
neros la tasa máxima para la paloma torcaz.
Por ser interesante una disposición reguladora de tales ventas, que
lleva la fecha de 31 de Enero de 1506, nos permitimos decir de ella
(801) Apéndice, doonmento núm. YIII.
112
F. CARRERAS Y CANDI
Ü5
o
O
tí
<
a,
ce
Tí
'. '. co co CD
1
■1* -^ O 00 00 •^
GQ IS 01 •
(M — ( -J
oá ffl f¿ ffl
«5 ^ 00 <^
'. 'tí
s
! "tí
■ QD
Tá 'd 'd
: «> s 2
t¿ ffl
co co
■tí' 'C
00 c
00
en
co
'tí 'tí "tí
Si co o
-tí
co
00
era
-tí 'tí'
00 co
'ó
«5
-tí
«5
co
era
-tí*
co
co
'tí' -tí
uj o
1
-tí
co
'Z
eo
cr
1
'tí 15
'tí
05
CO
ni -tí"
> 1-1
00
m
T-l
'tí -tí
t- co
CO
1
I -tí
• co
c
nz
C£
Tí
rH
rtí -tí
t- ce
. 1£
>
-tí
CO
era
rtí' -tí
CO ÍO
-tí
•tí
co
•c
a a
o
eo
-tí 'tí
t- CD
. -tí
i
co
-tí
CO
m m
(N (M
'tí
-tí
lO
'tí
•tí -tí
00 t-
1-1
o
co
co
a
-0
-tí'
ai
-tí
00
; ;
•tí
lO
B
tí
<
C
c
d
c
4
a
•
a
P
0
1 a
.í
1 "5
> 6
» 4
>> "p
' 1
1 0
i p
1
; "c
D C
I 4
i X
S 1
» t
1 >
i a
^ P
; j
> a
; í
S a
■i P
5 '«
1 4
1 t
1 t
s f
i T
c
' a
>< c
1 4
) c
f
a
> s.
i
3 i
5 t
\
1
s
1 P
a
) p.
a
o ^
1 í
•tí c
> 1
a c
o -^
o '2
o
'S 1
) Pl u.
c
F
C
c
c
i.
u «
a
c
c
c
a
'C
"a
5
c
i
c
1
a
s
p>
b
a
c
"5
p
a
B
c
"c
a
TI
'> c>
2
d
1
s
_►<
'S
a
•c
a
1
ai
c
-c
'5
s
Ph
a
<L
ti
"S
>
a
3
c
o
C
ce
a
•tí
■> >
ct
Ph
e
b
3
-tí
<S
h
d
)
g
4
ce
a
&
4
C
C
a
1 "^
o
d
CU
c
oi
a
C
'p
a
C
•tí
1
•tí
ai
0
P
ñ
o
h
O
s
PALOMAS Y PALOMARES KN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 1 13
breves palabras. Afóranse los tudons palomars k ocho dineros el par y
los matxassats íI solo seis dineros el par, estableciéndose por consi-
guiente, una distinción de palomas torcaces, cuyo significado no alcan-
zamos (305), á no ser que los primeros sean los cazados en las palomeras
y también llamados apolomats en 1448 y los segundos, los que en este
mismo año se califican de matressoiiatH, esto es matrassoudts ó caza-
dos con matrds. Era, el matrás, una Hecha sin punta de hierro^ que
ordinariamente se empleaba para la caza. Si el nombre de muirás,
hoy, día se lia perdido, fué en la Edad Media generalizado, pues á
igual que en Barcelona se usaba en otras localidades de allende el
Pirineo como v. g. en el Albigés (306).
Tiene, pues, explicación plausible que la torcaz atravesada por fle-
cha alcanzase menos valor que la cogida entera y sin herida alguna,
con las redes.
De época más reciente, esto es, del año 1624, conocemos la tasa ín-
tegramente publicada en La Paloma Mensajera (307), consignando
venderse, el par de pichones caseros [colomins casolans) á cinco suel-
dos, el par de pichones bravios {colomins roquers) á dos sueldos seis
dineros y el par de torcaces á tres sueldos. Según ella, los pichones
caseros resultan más apreciados que las torcaces y más todavía que las
becadas, para las cuales se fijó el precio de tres sueldos el par.
Expuestos ya algunos antecedentes acerca de las palomas en el mer-
cado nos ocuparemos de su utilización en la mesa catalana.
Si quisiéramos atender á los orígenes del empleo de la paloma en
nuestra cocina, sin duda caeríamos en la vulgaridad de hallarle una
antigüedad tan respetable como la población de España. Los autores
que han tratado de la cocina en los tiempos antiguos, y que no se han
apartado de los hechos conocidos, refieren, que, las torcaces, en los si-
glos v y IV antes de J. C. , figuraron en las mesas de los atenienses
como plato escogido (308).
Existen tantas noticias del aprecio en que tuvieron, los romanos, á
las palomas torcaces y caseras, que su relato podría motivar extensas
descripciones.
Atendida la rusticidad que se observaba en las costumbres de la
Edad Media y la reconocida sencillez y pobreza de la cocina catalana,
era natural adquiriese cierto predominio y valor, la paloma torcaz ó
tuda, como plato de mesa, ya que de ella so hallaban bien surtidos
(305) Bruniquer, on su flú6r¿ca noa comunica esta noticia, nombrando en el capl-
' ulo 68 á los segundos con el nombre de matrastsats, cuando en el capitulo 60, al dar la
misma nueva, les apellida matxassats. IJno de los dos nombres resulta ser evidente
error de copia.
(306) Ea las C'ostiivias del poiit de Tarn d' Albi, originarias del siglo xiv, se lee «Ma-
trasses — Per eissa manieira XII matrasses, mealba, que ano per vendré a la saumada
V deniers*. (Rcvue des langues romanes, vol. XLIV año 1901, pl. 508).
(307) Año IV, núm. 45.
(308) Diario de Barcelona del año 1896, página 4769, La cocina en la antigüedad.
1903 8
114 F. CARRERAS Y CANDI
nuestros mercados. Por lo que respecta á su presencia en el de Barce-
lona, hay, entre otros datoS;, la disposición dictada en 1461 por los
Concelleres, al objeto de corregir ciertos abusos cometidos por los
revendedores de volatería [B (42)]. Enuméranse las aves de corral
y de caza que solían venderse citándose á las torcaces y no á las palo-
mas caseras ó de otras especies, las cuales, empero, se consignan en
otros bandos municipales, así de la Condal Ciudad, como de otros lu-
gares de Cataluña (309). Los todons, por consiguiente, constituirían un
plato de mesa, de uso general y preferente.
Una rarísima obra gótica que trata de la cocina catalana en el si-
glo XV (310), al exponer como debían cortarse ciertos animales que
ocupaban su lugar en la mesa de nuestros progenitores, en lo pertocan-
te á las aves, se ocupa del capón ó gallina, de las perdices y de las tor-
caces. Ni una palabra para la paloma casera. Copiado á la letra el
interesante parrafito que á las torcaces se refiere, dice:
«Tall de Tudó ó de Colomí saluat(;e.— Tudó se talla axi propria-
ment com si fos vn Capó leuant la cuixa dreta é aprés fer vn tall de
loncli per los pits, é de alli trauras launes ampies, é aximatcix per lo
semblant faras de la altra part, é apres lo trosejaras é troncarás axi
com si fos vn Capó ó gallina. E ago que haurás tallat metras lio en
dues tudoneras de aquestas que venan de la molt gentil e gran Ciutat
de Valencia é allí ab vi que sie dolc é ab such de Toronjos, é Pebre, é
Sal, tot plegat debatrás ho molt be, é quant será be debatut donar ho
has á ton senyor. E vet aci tota la manera y tot lo modo de com se talla
lo Tudó é lo colomí Saluatge.»
Como se vé, recomienda el cocinero del entonces infante de Aragón
Don Fernando, colocar la paloma torcaz en dos tudoneras de las que
proceden de la muy gentil y gran ciudad de Valencia. La revelación
que hace de la existencia de una industria de alfarería valenciana su
(309) Entre documentos sueltos del archivo de Granollers, uno del año 1468, refiere
lii siguiente tasa del derecho que satisfacia la volatería al entrar en su mercado pú-
blico:
«vn parell de gallínes ó polles qui sien de preu de III s.
e daqui amunt II diners e de III s en auall I diner.
I parell de polis I dr.
vna perdiu « I d'*
vn conill / I dr.
vn parell de todons I dr.
vn pároli do tortres I dr.
vn parell do coloms I dr.
vn parell do xixelles I dr.
vn pnrell de capons II drs.
vna dotzeua dous I dr.
vna lebra I dr.
torts o raerles por dotzona I dr.
tot todo viu o xixella I dr. per casou.»
^310) Libic de ductrina pera bcn Sernir: de Tallar y del Art de Coch Compost per lo
diUgeiU Meslre Roberl Coch del Serciiiasiino sennor don Ferrando Reí/ de Naplea foleo III.
PALOMAS Y TALOMAKES i'.N CATALUÑA EV LA EDAD MEDIX 115
pcrior i\ l;i Ciitalana, de donde procedían las vasijas especiales para
servir A la mesa, con más eleí^ancia y comodidad, el obligado plato de
pichón ó paloma torcaz, indudablemente la confirmarán otros documen-
tos del siirlo XV. Por nuestra parte hemos encontrado un dato acerca la
exportación que Valencia hacía de su obra de térra, referente al año
1470 (311). Aún hoy día se llama usualmente en Cataluña rajóla de
Valencia, al ladrillo barnizado, sin duda en atención á su origen.
El propio Mestre Robert en su obra de cocina, al explicar como se
codimentaba Un salceró per ocells salvatges, aconseja presentarlos en
la mesa en daes escadelles grans que sien con/iteres, ó verement tudo-
neres. Por manera que tales vasijas resultan equiparadas alas fuentes
grandes para confituras. Bien pudieran ser las mismas que hoy admi-
ramos en colecciones arqueológicas, que, afectando forma circular,
muchas presentan en su centro, una abolladura de dentro afuera,
ornamentadas, la mayoría de ellas, con reflejos metálicos. No escasean
los ejemplares cuyo fondo viene ocupado por la representación de una
ave, que bien pudiera ser una torcaz (312). Si en realidad pudiera
comprobarse esta hipótesis, sería recomendable darles en Cataluña y
Valencia, su genuino nombre de tudoneras, al describirlas en catálogos
y obras arqueológicas.
(31 ) A. 1470 (30 de Marzo) Juan II autoriza á los hermanos Caselles, á exportar de
Valencia á, Barcelona diversas mercancías, entre ellas «c^afrá, alcofolls, obi-a de térra,
sedes, ñl dor, sparteria exceptst gumenes e per obs de pescar, grana, cuyrams » (Regis-
tro 838i, folio lO-i arch. Corona de Aragón).
(312) Si para muestra basta un botón, isodemos presentar dos fuentes de loza con
reflejos dorados, una muy grande A manera de palangana y otra bastante más peque-
ña y menos honda, propiedad de D. Manuel Dalmau y Oliveras, que figuraron en la ex-
posición retrospectiva organizada por el Ayuntamianto de Barcelona, cun motivo do
las ferias y fiestas de la Merced del año 1902. El fondo de cada una de ellas ostenta un
grande pájaro, tal y como lo hemos visto en otros ejemplares expuestos al público en
ol museo provincial arqueológico de Barcelona instalado en Santa .Águeda, asi como
en otras fuentes de cerámica que de momento no podemos precisar.
APÉNDICE DE DOCÜmENTOS
Documento núm. 1
: A. 1052. — Bernat Bernat, vende su participación en dos palomares de Vilapiscina
á maese Vidal {Lib. Ant. Eccl. Caled., vol. II, fol. 84, doCc núm. 249, del arch. Ca-
tedral de Barcelona).
Bernardus bernarclus iiendiderit uitali magistro ipsura directum de
II columbarios.
In nomine domini Ego bernardo prolis bernardo et uxori mea
ermeniardis femina venditores sunius tibi vitalis magister emptori. Per
lianc denique scripturam uenditionis nostre sic uendimus tibi ipsas
nostras uoces et ipsura nostrum directum quod habemus in dúos co-
lumbarios. Est hec omnia in territorio barchinona in terminio de sanc-
ta eulalia de uilla piscina. Qui mihi aduenit ad me bernardo proscrip-
to pergenitori meo. Et ad me ermeniardis femina per meum decimum
et per quascumquc uoces, Et affrontant predictos columbarios de par-
te circio et de aquilonis in casas et in era antiqua et in alaude de gcri-
berto presbítero. De meridie in riera qui uadit ad bisocio. De occiduo
in strata publica. Quantum iste affrontationes includunt sic uendimus
tibi prescrii)ta omnia totum ab integre cum exitibus et regressibus suis
in propter precium medio mancuso de auro cocto monote enee sine ullo
enganno quod tu nobis dedisti et nos manibus nostris recepimus et
nichi de ipso precio apud te emptore non remansit et est manifestum.
(¿uem uero predicta omnia que nos tibi uendimus de nostrum iure in
luum tradimus dominium et potestatem ad tuum plenissimum pro
piium. (¿uod si nos uenditores aut aliquis homo sexus utriusque qui
contra ista carta ucnditione uenero aut uenerit per inriimpendum ad
nihilum el eucniat set oomponam aut componamus tibi prescripta
omnia in duplo cuní omni sua inmelioratione. Et in antea ista uenditio
linna iHírmaneat omni tempore. Actuní est lioc XII K. ianuarii Anno
XXÍI rt'giii licnrici regís S)J( bernardo prolis bernardo. 81^ Ermeniar-
dis femina. Nos qui ista impignoratione fieri iussimus et lirmauimus et
testes firmare rogauinius. S^ Suniofredo guadamiro S^ Viuani leuite
8^ reinuuidus leuite S]^ miro i)resbitero qui hec scripsit die et anno
quod supra.
PALOMAS Y PALOMARES EX CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 117
Documento núm. II
A. 1054.— Vidal revende á Geribert, Phro. la séptima parte que había compraJo,
dedos palomares de Vilapiscina {Lih. Ant. Eccl. Caled., vol. II, fol. 104, doc. nú-
mero 317, del arch. Catedral de Barcelona).
In nomine domine E<,'o vidal et uxori mee guilla femiiia venditores
sumus tibi geriberti sacer, proleque suniario, emptore. Per hanc de-
nique scripturam uenditionis noslre uendimus tibi in ipsas pañetes et
superpositis de dúos columbarios cum guttis et stilliciniis cum ipsas
aues septimam partem. Et est hec omnia in territorio barchinonense
in parrochia sancti andree in termine orta subtus sancta eulalia. Adue-
nit nobis per nostra comparatione uel per decimam et per qualicumque
uoces. Et affrontant predictas parietes et super positis cum guttis et
stilliciniis siue cum ipsas aues de predictos columbarios de parte circi
et de aquilonis in chasa et in era antiga et in alaude de te emptore.
De meridie in riera qui et currit a bisaucii. De occiduo in estrada pu-
blica. Quantum infra iste affrontaciones includunt totum uendimus
tibi proscripta omnia tota ab integrum simul cum exiis uel regressiis
earum in propter precium mancusos II de auro cocto legitime pensatos
senes enganno. Quod tu nobis dedisti et nos manibus nostris recepimüs
et nichil de ipso precio apud te emptore non remansit est manifestum.
Qiiem uero predicta omnia que tibi uendimus de nostro Jure in tuum
tradimus dominio et potestate ab omni integritate ad tuum plenissi-
mum proprium. Quod si nos uenditores aut aliquis homo sexus utrius-
que qui contra hanc ista uenditione uenerit per inrumpendum non hoc
ualeat uendicare sed componat aut nos componamus tibi hec omnia in
duplo cum omni sua immelioratione et in antea ista carta uenditione
firma permaneat omnique tempore. Facta carta uenditione XIII ka-
lendas februarii Anno XXIIII regni henrici regis. S^m uidal Sgg gilia
femina. Nos qui ista uendicione fecimus et firmauimus et testes firma-
re rogauimus S^m. S^m. S^m. Sggm. miro sacerdos qui hec scripsit
die et anno quo supra.
DOCDMENTO NÚM. III
A. 1054. — Vidal Duran revende al Pbro. Geribert, la séptima parte de los dos pa-
lomares de Vilapiscina, por aquel adquirida. {Lib. Ant. Eccl. Cated., vol. II, fol. 86,
doc. núm. 255, arch. Catedral de Barcelona).
Vitalis durando uendidit girberto presbítero VIP partem duorum
columbariorum in uilla piscina.
In nomine domini Ego uitalis prolis durando et uxori mea guilla
femina uenditores sumus tibi geribertus sacer emptori. Per hanc scrip-
lis F. CARREKAS Y CANDI
turam uenditionis nostre sic uendimus tibí septenam partem de super-
posito et de parietes de dúos columbarios. Et septenam partera de
ipsas aues que ibi erant nutritas et que deus ibidem dcderit per qua-
licunque uoces Est quippe liec omnia in territorio barcliinona in pa-
rrochia sancti andree apoátoli de palomar et in loco uocitato uilla pici-
na. Qui nobis aduenit per comparatione et per decimum et per omnes-
que voces. Et affrontat predicta omnia de parte uero circio in era. De
aquilonis in alaudem de te emptore. De meridie in torrente. De occiduo
in strata publica. Quantum istc affrontationes includunt sic uendimus
tibi predicta omnia totum ab integre cum exitibus et ingressibus suis
in propter precium mancusos dúos monote enee auri cocti barchinone
pensatos legitime a pensó quod tu emptor nobis dedisti et nos manibus
nostris recepimus et nichil de ipso precio apud te emptore non reman-
sit est manifestum. Quem uero predicta omnia que nos tibi uendimus
de nostrum iure in tuum tradimus dominium et potestatem ad tuum
plenissiraum proprium. Quod si nos uenditores aut aliquis homo sexus
utriusque qui contra ista carta uenditione uenerimus aut uenerit per
inrumpendum nil valeat sed insupcr componamus tibi proscripta
omnia in duplo cum omni sua inmelioratione. Et in antea ista carta
uenditio firma permaneat omnique tempore. Actum est hoc VIII kalen-
das Madii Anno XXIIII Regni henrici regis S^ vitalis prolis duran-
do S)^ guilla femina. Nos qui ista carta uenditione fieri iussimus firma-
mus et testes firmare rogauimus. S^ Ricolfo mironi. S^ remundus
leuite Sgg miro presbítero qui liec scripsit die et anno quod supra.
Documento núm. IV
A. 1279. — Robos de palomas en Urgell y Lleyda (Registro 41, fol. 168, archivo
Corona de Aragón).
G.° de turre etc. Noueritis nos intellexisse quod aliqui homines-in
vrgello et terminis Ilerde furantur columbos extrahenda de columba-
riis et parando retia et alio modo eos capiendo. Quare mandamus uo-
bis quatenus inquiratis diligenter super eo seu inquirí faciatis et si
quos super premissis eueneritis deliquissc eosdem puniatis prout fue-
rit faciendura Datum valencie V idus Nouembris,— Scripsit P. mar-
quesii.
Documento núm. V
A. I }02.— Reclamación de Barceloni á Manresa, por haberse prohibido en esta
Ciudad la exportación de la caza. (Bandos 1301 — 1503, fol. 62, arch. municipal de
Barcelona).
Venerabilibus et dilectis baiule et probis liominibus Ciuitatis Mi-
norisc Consiliarium et i»robihomines Ciuitatis barchinone. Salutem et
PALOMAS V PALOMARES EN CATALUÍSa EN LA EDAO MED.A 110
omnc bonum. Vestrc disc-ecionc prcsontibus ,I„x¡,„us intimandum
Nos „uel ex,sso pe,- „os csso in.positum bannum ot cssc prohiZ,. ñe
ah.,u.s s,t ausus a uostra Ciuitato s™ cüstrictu oxtral,,- -o c rñ "" lo"
. pe,-d,eos „ec alia uolatilia por aportando ad CiuUalo,,, I Ln-c , „ó dó
quo valde cognm.s ad„,h-a,a, c,„„ „„„„„,„„ c/„itas barch ion „é
ns c,n,h„s prohibuent noe prohibot q„i„ possnit oxtrahoro a ZiHto
barclunone merces et quascumque alias res i„de «elui ext al e e
SI lacta exti it leuocetis et quod permittatis a Ciuitatem et districtn
ue ro extrahere cirogrillos perdices ot alia uolatilia et ad Cta .íem
baichmone aportare, alias uoshie prohibiciones et alus contra le
uestros et ahos hominos districtus «estri ut justunx fueritr propte
rea su„ms parati tacore et eomplere quocumque cedatur ño'st™ como-
ni MCCCn«:- " '"""""'"' -^' '="'™'''^-^ J--"' Anno do^i-
Documento núm. VI
A. Mi6.-Se ordena en Barcelona, que los payeses solo puedan llevar matras-
Ordenaren los conseylers els prohomens de ]a ciutat que nnc^u
pages ne son fil ne missatjes o companyes ]urs no gosen portar de nt
Z^^Z r/'^ T' ^"" ^""^ '' ''^'^'^ ^^ ^-^^^ ^' ^^"^- - a
o o rJlu, '™''' ^' espatleres, sino coltel de mida, o bas-
to, o restelada, com vaga a lauro o balesta per cassar, ab que ^o port
día totes les armes et pagara per ban C solidos o estara C dies al cas-
tel: E en a,o no sia entes nuyl hom qui caminant e anant a Jornades
portas alcunes de les dites armes e si no axia azo. E del dit ban aÍ a
terza part lacusador et les dues partz lo vaguer.
Documento núm. Vil
A. 1 321 (Vil idus Mardi).-Venia de un palomar en Odena, tenido á censo de
un par de palomas, (Manual del arch. parroquial de Odena).
vobisVo%?j'^'''° '' T ^' ^^'' ''''' ^' "^"'^ Aqualate... vendimus
vobis R. Sagrera de eadem villa fratri meo G. et vestris et quibus vo-
a]Zt '^ P'^P:^'^^^^ ^^^^^^^'^ columbarium cum columbis eiusdem
qnod habemus m termmo Otine aput m^cnterinum? in ripis torrentis de
bai 10 Bn.« Saparellada faber de eadem villa recipit unum par columba-
120 ^' CARRERAS Y CANDI
ruin annuatim in festo sancti Johannis de mense Junii censualem, cmn
ipsum columbarium sit edificatuin in ripis eiusdem Bn. .. ])ro precio vide-
licet quincuaginta sol. m. b. de t.*» quos á vobis liabuimus... Dictum
antera coluuibarmra terminatur ab oriente in ipso torrente, á meridie in
ripa nostra; a circio in columbario A.» Lupeti, ab occiduo in térra? dicti
Bernardi Saparellada. — T...»
Documento núm. VIH
ji^ 1327. — Tasa de las palomas en Barcelona, (Arch. municipal de Barcelona).
VI nonas julii anno doraini MCCCXXVII. Ordenaren los Consey-
Uers et els prohomens de la Ciutat quel pareyll deis Coloras pahoners
sia venut X diners et no raes: et el pareyll deis coloras roquers mes
a aquella raho matexa et que tot hora los se puga pendre per aquell
preu. E qui negun colora sia venut V diners et no raes. E quin querrá
I lio vendrá part lo preu deraunt dit pagara per ban cada vegada V
sois et perdra los coloras. Del qual ban Laura les dues parts lo veguer
et la ter(;a lacusador.— E qui el dit ban pagar no pora estara pres ho
presa el castell aytants jorns cora ha sois el ban.
Documento núm. IX
A. 1333. — Capítulo de corte prohibiendo por diez años cazar palomas como no
sea coa ave de cetrería (Constitutions y altres drets de Cathaíiinya, Barcelona 1704,
pág. 252).
Alfons Terg en la Cort de Montblanch Any MCCCXXXIII. Cap.
XXXIII.
Dins deu Anys ningu gose pendre, o matar perdius, sino ab ausells,
de la festa es a saber de la Pascua de Resurrectio fins a la festa de
tíanct Michel de Setembre, ne gose destruir los nius de perdius. E que
ningu no gose pendre coloras de altri ab ensas, cirabell, o fllat, o en
altra manera, sino al) ausells, e que contra los contrafaents sien impo-
sats bans covinents, per aquells qui han acosturaat iniposar bans per
sos Loes, o Terraens.
(He ahí el bando que se promulgó en 1334, en Barcelona á conse-
cuencia del referido capítulo de corte).
Ara ojats per manament del senyor Rey que com en la Cort gene-
ral de Catalunya en lany present celebrada per lo dit senyor Rey en
la vila de Muntblanch sien fets entre los altres los ordinaments se-
güents: Co es que dins X anys primers vinens en alcuns lochs de Ca-
thalunya no sien raortes ovelles per rao de vendré, si donchs aquellos
ovelles no hauien lili anys pasats. E semblantment que dins los dits
Palomas y palomares fn Cataluña en la edad media 121
X anys anyells no deien esser morts per raho de vendré. E que nengu
no gos pendre ho ancuir perdius dins los dits X anys sino ab 0(;ells, de
la festa do pascha, tro a la festa de scnt miqíiel del mes de Setembre,
ne gos desfer o destrouir nius de perdius. E que nengu no gos pendre
Coloms daltre ab enees, gemboll, fllats o en altra manera si no ab
aui-ells. E que contra aquells qui contra ago faran sien posats bans
couinents per aquells qui han acustumat posar bans en los lochs ho
termes daquells.
Per co los Concellers et prohomens de la Ciutat de Barchinona po-
sen bans en les dites coses, 90 es:
ítem qui pendra coloms daltre ab enges ab 9embell, ho ab filats,
pagara per ban cada vegada D sois ho si pagar nols pot perdra lo
puny dret. E si ab ballesta oyiura coloms ho en altra manera pagara
per cascan colom XX sois ho estara pres XX dies al castell.
Documento núm, X
A, 1409. — Protección real á los palomares de Manresa y Bages (Registro 2214,
fol. 133, arch. Corona de Aragón).
Pro conseruatione columborum Ciuitatis Minorise et aliorum lo-
coram.
Martinus etc Ffidelibus nostris vicario et baiulo Minorise et Ba-
giorum et Berguitani ac bajulo ville sancti Petri de Auro et locatenen-
tis ipsorum et cuiuslibet eorum Salutem et graciam. Sicut nostras per
uenit ad aures nonnulli constituciones Cathalonie pacis et treuge
infringere non formidantes ac penam ipsarum constitucionum sub
quarum custodie et presidio columbarii necnon et columbi positi sunt
et etiam constituti incidere non timentes retia et laqueos ac alia artifi-
cia illicita parare non hesitant et inde columbos capiunt in numero co-
pioso vnde columbarii sistentis in partibus Bagiarum depupulatum
propterea in prejudicium valde notum nedum illorum quorum colum-
barii et columbi existunt sed etiam populatorum in partibus supradic-
tis et lesionem constitucionum predictorum Cumqua nos in hiis prout
conuenit prouidere velimus dicimus et mandamus vobis de certa scien-
cia et expresse sub pena Mille solidorum barchinonensium quatenus
quoscumque culpabilis reppereritis super bis tanquam ipsarum consti-
tucionum violatores vestri arbitrio puniíitis vt eorum pena ceteri se
trahant similia attentare vlterius voce preconis vt moris est per loca
sólita jurisdiccionum vobis commissarum precipiatis mandetis et vti-
que inhibeatis ne vllus detento sub certa pena j)er vos imponenda ultra
penam dictarum constitucionum que non timetur audeat seu presumat
in partibus Bagiarum dicta retia parare ac laqueos siue paranys ali-
122 F. CARRERAS Y CANDI
quo modo ingenio siue arte per capiendo columbos aliorum faceré vel
fieri faceré. Et si contrarium egerint penam jamdictam a bonis contra-
faciencium protinus exigatis hocque non muttetis cum sit de certa
sciencia fleri prouiderimus et veliraus. Datum Barchinone Séptima die
ffebruarii Anno a natiuitate domini INPCCCC Nono. — Sperendeus.
Documento núm. XI
A. 14 1 5. —Disposición Real en favor de los que poseen palomares en el teriiio-
rio de Manresa, (Registro de 2,575, fol. 103, arch. Corona de Aragón).
Per illis qui in territorio Minorise possident columbarios.
Ferdinandus etc ffidelibus nostris vicario Minorise et Bagiarum
necnon bajulo Minorise aut locatenentibus eorundem presentibus et fu-
turis Salutem et graciam prout exposicione pro Immili nobis facta pro
parte illorum qui columbarios possident intus territorium Ciuitatis Mi-
norise predicte percepimus nonulli sunt qui sub colore venandi per
ipsum territorium gressus suos sepissime dirigunt quique non vena -
cionis causa sed pocius columbariorum depopulacione venantur cum
Ínter spacium Sexaginta passuum prohibitum ballistariis columbos ne
capiant prope columbarios crebissime ictibus ballistarum columbos ca-
piant incessanter necnon his non contenti ipsis colunibis liquos parant
tenates columbos aggrenando eosdem et necminus viscum inde heren-
tem ac alios incidiosos laquees sic preparant quod vix in territorio me-
morato columbi aliqui remanserunt. Verumtamen licet columbarii et
columbi jamdicti existant sub condición ibus pacium et trcugarum Ca-
thalonie constituti et inde certe sint pene imposite. Quia tamen quia
plus timeri solent que specialiter imperantur quid que generaliter in-
iunguntur huius serie prouidemus quod quicunque modis predictis seu
aliquo eorundem precesserit ad Capiendum seu occidendum columbos
in territorio prelibato incidat ipso facto penam Quinquaginta solido -
rum Barchinone cuius medietas denuncianti et fisco nostro medietas
alia adquiratur vobis igitur et vestrum vtique ad supplicacionem pre-
humilem exponencium predictorum. Dicimus et mandamus sub pena
(¿uingentorum llorenorum auri de Aragoni nostro si contrarium egeri-
tur applicandoram Erario quatcnus publicari faciendo per loca sólita
Ciuitatis predicte voce preconia provisionem nostram huiusmodi ne
})er quempiam ignorancia valeat allegari ab illis seu bonis illorum qui
prima racione penam comiserint supradictam penam eandem irremis-
sibiliter exhigatis seu exhigi ilico faciatis Cum humana condicio nisi
pene dispendio a prauo proposito nequeat cohiberi. Datum Valencic
XXXI januarii Anno a natiuitate Domini Millesimo CCCCXV*'.— De
ortigis K.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN I A EDA "> MEDLA.
Documento nói. XII
A. I-I42. — Proliibición de la Reina de ca;^ar con redes, coiiuinicada á su camar-
lengo Hostalrich, (Registro 3119, fol. 103, arcli. Corona de Aragón).
Honorabili Berengarii de Hostalrico camerlegni domino Regina li-
tera inhibicionis de non venando leporcs perdices cum retihus.
María per la gracia de Deu Rcyna darago de Sicilie ele. Al amat
conseller e Camerlench nostre mossen berenguer dostalrich Salut e di-
leccio Jatsie los nobles cauellers e gentils homens de nostres Regnes
e terr¿is per lur natura e condicio sien e dejen esser dedicats al virtuos
exercici darmes per lo qual los dits Regnes e térras del dit senyor Rey
e nostres e la cosa publica daquelles sots la triumphal bandera del dit
senyor son molt beneuanturosanient deffeses e posats en dolQor de pau
e tranquillitat. Empero cessant e noscant neccesari lo dit exercici dar-
mes, no es cose de^en e comendable que los nobles cauellers e gentils
homens ciutadans e burgesos honrats stiguen en vicios repos de que
venen quaix innumerables mals perqué fonch cosa couinent e congrua
ais dessus dits en lo dit cas entendre ab aucells e cans al fet e exercici
de Ca^a con en aquell sie prefigurada plasent pugna e batalla a que
los sobredits dcuen segons lur natura stat e condicio en lo dit cas molt
esser inclinats On com nos siam certament informada que en las ve-
guerías del principat de Cathalunya dins la Jurisdiccio Real moltes e
diuersas personas per ambicio de guany mes que per squiuar o(;i pre-
ñen e maten ab calderes fllats e diuerses altres artificis mecanichs
francholins perdius e lebres perqué las ditas veguerías son quaíx del
tot deles dites perdius francolins e lebres ampobreidas e freturosas e
majorment com per alguna de nostres officials e altres persones no son
obseruades ni exequtades las ordinacions e prouisíons penáis sobre
aíjo fetas per los Reys e en los temps passats de bona memoria en tant
que los dits nobles cauellers e gentils homens e altres dessus dits en lo
dit cas nos poden exercitar en ca^a de perdius francolins e de lebres
E nos sobre npo en fauor del estat deis dits nobles Cauellers e gentils
homens e altres damunt dits qui no solament aquesta prerogatiua mas
molt major merexen vullam degudament prouehir per 90 que daquen
puixen en lo dit cas foragitar lo dit pernicios repos Ordonam ab la pre-
sent que algu o alguns de qualseuol stament o condicio sien en lo dit
principat no gosen dins las ditas veguerías pendre matar o al^iure
francolins, perdius, o lebres ab calderes, filats, canculls, ballestes o
altres artiñcis mechan ichs sino ab ocells e cans de caga ^o es lebrers
e podenchs de mostra sots pena de Cent sois e de perdre las calderes
fllats e artificis demunt dits per cascuna vagada que contrafaran, E si
los dits Cent sois pagar no poran volem e ordonam que stiguen ab grí-
llons de ferré en la preso comuna per espay do Trenta dios o las dites
124 P. CARRERAS Y CANDI
lebres francolins e perdius que preses hauran e los filats calderes e
altres artiflcis en lo dit cas a nos graciosament donam e la peccuniaria
pena sie per los prop dits encorreguda cada vegada que contrataran
Ordouaní encare que vos difc mossen Berenguer e vostre suhstituhit o
substituhits a a^o en las ditas vegarias per vos ordonadors ais quals la
present are per ladonchs donam píen poder las ditas penes leuets e
exhigats o leuar e exequir fa9ats per aquells capdaguaytes^ porters o
saigs que a uos o ais dits vostres substituhits en a^o sots priuacio de
lur offici hagen e sien tenguts complir e exequtar; de las quals penes
hage la teríja part lo denunciador e les dues parts vos o los dits vostres
substituhits per lurs treballs apres que leuades serán las quals a nos o
a ells donam faents de las ditas penes deguda satisfácelo a conexen(?a
v^'Stra e deis dits substituhits en aquells deis dits officials qui la exe-
qucio faran E las quals penes per los Gouernadors de Cathalunya e de
rossello e altres officials nostres de Cathalunya e de rosscllo no
puixen esser remesas o donar ne speras o licencias contra la present
ordinacio en alguna manera. Com nos ab aquesta mateixa los tolgam
tot poder de fer lo contrari: per 90 volents vos dit mossen berenguer
de la dita ordinacio esser conseruador e exequdor auos dchim e
manam de nostra certa sciencia e expressament que faents las prc-
sents ordinacions e prouisio per las ditas veguerías e cascuna da-
quellas ab veu de crida de part nostre publicar conseruets mantingats
e exequtets e exequtar fa(?ats las ditas crides obseruant las prop dites
ordinacions e provisio a la vngle. Car nos ab la present en e sobre las
ditas coses deppendents e emergents de aquellas vos comanam plena-
riament nostres veus. Manants ab aquesta mateixa letra ais dits Go-
uernadors, veguers e altres officials Keals demunt dits e a cascu dells
sots ira e indignado nostra e pena de Cinccents florins dor Barago deis
bens de cascu deis contrafaents hauedors e a nostres coff res aplicadors
que auos dit mossen berenguer e ais dits vostres sostituhits en e sobre
totes e senglcs coses dessus ditos donen consell fauor e ajuda tantes
vcgades com per vosaltres laquests ne serán. Dada en Barchinona
a XVII dies de octubre En lany de la natiuitat de nostre senyor
MCCCCXXI.-La l-íeyna.
Documento núm. XIII
A. 1447.-^3 Bastida obtiene el encargo de perseguir en los termines de Caldas
de Montbuy y Plegamans, á los cazadores de palomas y otras aves (Registro 3271,
fol. 138, arch. Corona de Aragón).
María etc. Al feel nostre en Barthomeu ^abastida alias stalrich
donzel, Salut e gracia. Digna cosa reputam e aneare a dret e a equi-
tat consonant que aiiuells los quals ab audacia desenf ranada se sfor-
scn los edictos ordinacions e penes imposades trancar que per nos de-
PALOMAS Y PALOMAUIÍS EN CATALUÑA EN' LA EDAD MEDÍA 125
gudamcnt sien piinits c alligits per tal que los altres atemptar tais
actes se abstinguen. Coin alguns ab temeraria ambicio moguts se per-
forscn cassar ab calderes de nits pcrdius e francolins posant en les
dites calderos luní, e de dia ab scaiant o ab reclam c lebres ab 9ende-
res, colo:ms ab filats^ incorrent en les penes daquen imposades per
90 nos volent sobre a90 degudament prouehir a les dites penes e ordi-
nacions ja sobre acó fetes e daci auant leedores fer servir a la vngla a
vos dit en Barthomeu Qabastida alias stalrich Dehim, cometem e ma-
nam, e encara ab tenor de la present licengia plenaria donam da^i
auant tais casses de les dites perdius, francolins, e lebres, E coloms,
en lo terme de la vila de Caldos do Montbuy o do Plegamans fassats
de tot en tot cessar, e fer cossar, e qualseuuUa crides que sobre a(;o
serán necessaries fer fer en aquell loch, o lochs que a vos sera vist
fahedor ab pena do Don Iliures do la qual pena hago lo acusador la
terco part e los dues parts ais cofres del Sonyor Rey sien aplicados.
E si alguns trobareu esser cayguts en tais penas e fahents tais casses
de les ditos perdius francolins o lebres (o coloms) louets a aquells les
cosses, o los dits scaiants o reclams e altres exercicis ab que cassaran
deis dits aucells e lebres e les penes daquent imposades o imposadoros
exhigiats executots e exhigir o exequtar faeats de qualsevuUa contra-
fahents sens incorriment do alguna pena segons la seria o tenor de les
presents ordinacions o crides daquen fahedores, donant a vos licencia
e píen poder de fer gracia de les dites penes a aquells qui en los dites
penes serán cayguts a vostre arbitri. Manant ab aquesta mateixa al
Veguer de Barchinona e al BatUe de la dita vila de Caldos, o ais altres
officials a quis perlanga sots pena de Sincconts florins dor que quant-
quoquant serán roquosts per vos, o en nom vostre que excqutant totes
les coses demunt dites fassen totes e qualseuuUa cridas que aQo sien
necessaries o ab imposicio do la dita pena. E en acó no metou dilacio,
o scusa si la dita pena dosijcu squiuar.
En testimoni do les quals coses vos manam fer la present ab lo se-
gell Eeyal en lo dors segellada. Dada en Barchinona a XIllI de Abril
del Any MCCCCXXXXVII.-La Eeyna.
Documento núm. XIV
A. 1450.— Protección real á los palomares de Vich y Ausona, muy vejados por
ladrones de palomas. (Registro 31 52, Ibl. i52, arch. Corona de Aragón).
Pro non nullis honiinibus Ciuitatis Vici habontes Columbos et Co-
lumbaria.
Maria etc. Fidelibus nostris vicario vici et Ausonie baiulis quoqu ;
et alus Officialibus quibuscunque ad quos spectat eorumque Locato-
nontibus Salutem et graciam. (^)uaniuis columbaria siuo los Colomers
per Constituciones Cathalonie sub presidio et securitate Constitucionum
126 r. CARKERAS Y CANDI
pacium et treugarum sunt. Attamen vt querela non nuUoruní haben-
cium Colurabai'ia in ausonia prccepimus plerique homines dicta co-
lumbaria habentes danipniflcarc memoratasque Constituciones violare
non verendo cuní retibus siue filats aliisque exquisitis modis Colura-
bos ipsoruní Colmnbariorum capere et venari presumunt in tantum
quod omnis illa Ausonie patria dictis Colurabis priuatur et expoliatur
quod nediim in rei publice ipsius vicario cuidens interesse et preiudi-
ciuiu verum eciam dictoriim inibi columbaria habenciuní dampnum
atque jacturam cederé dignoscitur. Quam obrem suplicato nobis humi-
liter eis super his salubre remedium inipartiri vobis dicimus et man-
damus scienter et expresse sub ingratitudinis nostre jactura ac pena
Quingentorum florenornni auri Kegio aplicandoruní erario quatenus
visis presentibus per loca sólita vicarie jamdicte voce preconia publi-
cari faciatis quod nullus cuiusuis sit status seu eondicionis audeat seu
presumat columbos dictomm Columbariorum cum retibus siue filats
aut alus modis exquisitis capere seu venari sub pena Centum solido-
rum cuilibet contrafacienti infallibiliter inrainete. E si qui forsan ausu
ducti temerario contra mandatum et prohibicionem huiusmodi venire
presumpserint in eo Constituciones Cathalonie violando si de his per
veridicam informacionem quam quociens per ñdelem nostrum bernar-
dum Guillermum daltariba domicellum aut Anthonium guerau in legi-
bus licenciatum Ciuitatis Vici requisiti fueritis recipere habeatis et
teneamini vobis legitime constiterit penam preappositam per vos ab
ipsis volumus exhigi et irremissibiliter haberi. Cuiusquidem pene me-
dietas due partes de quibus remissionem aut griiciam vllam faceré non
possitis Curie illius vestrum inde exequcioncm facientis. Et residua
tercia pars ipsius pene acusatori seu dcnunciatori totaliter adquiratur
et applicetur. Datum Perpiniani die prima Septembris anno a natiuita-
te domini M°CCCC° quinquagesimo. — De Ortigis Regens
Documento núm. XV
A. i456. -Confirmación del capítulo de la corte de Montbiancli en favor de las
palomas. (Registro 326S, fol. 137, arch. Corona de Aragón),
Ara hoiats queus fa hom a saber de part del Serenissimo princep e
Scnyor lo Senyor don Johan Rey de Nauarra Infant, etc., loctinent
general del Serenissimo Senyor lo Scnyor Rey. Que com per lo dit
Senyor Rey loctinent instant c suplicant la Cort general del Principat
de Cathalunya e de conscntiment e approbacio de aquella sien stadcs
íetes e otorgades les Constitucions seguents:
ítem ratiíicant loant e approvant la constitucio per lo Ilustre e de
gloriosa memoria lo Senyor Rey don Alfonso ])roavi nostre feta en la
Cort de Montblanch en lo capítol coincn(,'ant: «llcni (juod intra dccem
anuos, etc » En quant per aquella es prouchit a la ca^a de pcrdius e
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDÍA 127
de coloms e en aquella ajustaiit de couseiitiuient e approbacio de la
dita Cort statuhim e perpetualment ordenam que de Carnestoltes flns
per tot lo mes de Scptembre neiif^una persona de qualseuuUa stament
o condicio sia no gos ca(,'ar ni pendre perdius faysans ni l"l"rancolin.s
dins lo principal, de Cathalunya en nenguna m;inera de enginy o exer-
cici sino ab ozell de ]apina tant solament.
ítem que nengun temps del Any nengu de qualseuol condicio sia
no gos ca(;ar les ditos perdius ft'rancolins ni ffaysans ne aquelles pen-
dre ab reclam o scuxinament ne ab perdiu o perdigot e a^o sots pena
o ban de Cent solidos per cascuna vegada que en alguna de les da-
munt dites coses sera contrafet de la qual pena la meytat sia atquiri-
da al Senyor o al ofHcial de qui sera la jurisdiccio e en lo locli on sera
contrafet. E laltra meytat al denunciant: de la qual pena nengun ofñ-
cial ne altra persona no puixa fcr remisio en tot ne en part ne sots
disimuiacio passar ans aquella en virtut de la present Constitucio sia
tengut rigorosament executar.
ítem conftrmant la dita Constitucio ab la dita approbacio ordonam
que nengu no gos ca^ar coloms ne parar ab fllats ne agranar en algún
loch quantsevol sia luny de colomer ó en altra manera ne tirar ab ba-
llesta ais dits coloms de Sexanta passes entorn del colomer.
Documento núm. XVI
A. 1457. — Venta de un bosque en San Mateu de Joanet para construcción de pa-
lomeras, {Manual 14^1 usque i4S9i arch. parroquial de S. Hilari (^a calm).
Die 6 mensis madii anni predicti (1457).
Nouerint vniuersi. Quod Ego laurencius de serayma, heres et pro-
pietarius mansi de serayma parochie sancti matey de johanet diócesis
vicensis. Gratis etc. per me etc. vendo etc. vobis bartholomeo Rafart,
parochie sancti quiricii de arbuciis, diócesis gerundensi hiis presen-
tí etc. quendam peciam siue trocium terre boschosam de pertinenciis
mansi de cunieras, quam posideo in dicta parochia de johanet, in loco
vocato lo calaris, ut affrontatur: ab oriente, in honoribus dicti mansi
mei de cunieres mihi remanente; a meridie, cum honoribus den Rieras
et cum honoribus den aulet parochie de arbucies, in loco vocato al
losar de tramasel e a pugo oriol; ab occidente, cum honoribus den
asgleya de johanet; a circio, cum dictis honoribus mansi de cunieres
mihi remanente, sicut est terminatum a qualibet partem. Et tenetur
sub dominio Monesterio sancti petri de circata et per honorabile prio-
ri etc. quantum ad dues partes; ad terciam partem, vero, tenetur per
honorabile prepósito sancti saluatoris de ebrea etc. hanc autem vendi-
cionem fació vobis etc. cum intratas etc. sicut melius dici potest etc.
Extrahendo etc. Mitens vos etc. in corporale possessionem etc. Et quod
possitis ibi faceré palomeras ad recipiendum palumbos siue todons, et
128 F. CARRERAS Y CANDI
possitis faceré bayador iii illo loco vbi volueritis in possessionibus
meis. ítem est conuentum etc. quod non positis valare nec poneré
velas, vnus contra alius, ad dispergendum dictos palumbos. Itera re-
tento niihi dicto laurencio, quod si casus venerit c^uod dicta pecia terre
per tempore vendatur per vos seu eredibus vestris, quod heres mansi
de sereyma habeat f ática dicti trocii terre, et ipse possit retiñere per
illo precio quo alium dederit et ciuinque solidos minus etc. Precio
huius vendicionis est viginti dúos solidos monete barchinonense etc.
Vnde renunciando etc. promittens de euiccione etc. ditetur largo modo
cum juramento etc. per censu dúos denarios in adjutorium sensus etc.
in festo natalis domini.
Testes sunt: saluator Kouira, sutor, et Johannes maso, popule
sancti ylarii de calmo.
Documento núm. XVII
A, 14C0. — Venta de una pieza Je tiena en S. Hilari Ca cjim para construcción
de palomeras. (Arch. parroquial de S. Hilari (¡ia-calm).
Die XXVIIII mensis augusti anno a natiuitate domini MCCCC se-
xagésimo.
Sit ómnibus notum Quod Ego bernardus farrer alias vilaret et ka-
terina euis vxor parochie sancti ylarii de Calmo diócesis vicensis Gra-
tis etc. stabilimus etc vobis discreto Antonio graualosa presbítero
Rcctori ecclesie sancti ylario de Calmo predicto quem peciola de térra
constituía in dicta parocliia in loco vocato a pugy Rouiros sub domi-
nio honorabili bernardi de Gurbo domicello domino Castri de solterra
et domus de la rouira qui tam ibi quam alias recepit certuní cen-
sura etc. sicut affrontatur ab orientera in honoribus tibi ibi remanenti-
bus a racridie in dicto honor ab occidente in honori mansi de la cerra
de ual a circio in dicto vestro lionore. Qaam stabilimentum faciraus
vobis quod possitis ibi faceré palomeras sicut vobis placuerit et positis
ibi faceré bayador vbi volueritis in dicto honore nobis remanente. Et
eciam in alia parte concedimus vobis etc. yersus orientis in capite de
la coma de la castayede de vilaret possitis faceré asimi(li) modo palo-
meras et bayador ut supra etc. quam stabilicionem faciraus vobis etc.
ut layce et priuate persona et quibus volueritis precio intrate abui-
mus etc. vndccira solidos raonete barcliinone etc. et per censura decein
(leñarlos in adjutorium alium censura etc. in festo natalis domini cura
luiecione etc. largo modo etc. cura juraraento etc. cura introyti-
bus etc.
Testes sunt: ])ctru.s [.oliccr major dieruní pctrus maso parochie
sancti ylarii.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALU?ÍA EN LA EDAD MEDIA 129
Documento núm. XVIII
A. 1460. — Establecimiento á censo de una pieza de tierra en San Hilari (^a-calm,
para construcción de palomeras (Manual 1460 usque 1468, (29 Agosto) arch. parro-
quial de S. Hilari ^a-calm).
Sit ómnibus notum. Quod Ego petrus maso parrochie sancti ylarii
de calmo diócesis viccnsis. Gratis etc. stabilio etc. vobis discreto An-
thonio graualosa presbitero Rector ecclesie sancti ylarii de Calmo dicte
diócesis tanquam layce et priuate persone Quendam peciolo terre ad
faciendam palomeras per capiendum palumbos quam pecie terre
babeo etc. in dicta parochie prope pugy Rouiros de pertinenciis mansi
de la serra de ual sub dominio honorabili bernardi de gurbo domicello
dominus Castri de ^olterra et domus de la rouira qui tam ibi quam
alias recipit certum censum etc. sicut affrontatur ab oriente in honore
mansi de vilaret siue de pugy rouiros a meridie in dicto honore ab oc-
cidente in honore de la cerra de ual et a circio mihi remanente ut est
terminatum etc.: hanc autem stabilimentum fació vobis etc. cura in-
troytibus etc. precio vndecim solidos et vnum denarium pro intrata
et octo denarios censui in festo natalis domini etc. in adiutorium
alium censum etc. cum euiccione etc. possesionem etc. ditetur largo
modo etc.
Testes sunt: petrus policer major dierum et bernardus farrer alias
de Vilaret parochie sancti ylarii de calmo.
Documento núm. XIX
A. 1464.— Establecimiento de un bosque en S. Matea de Joanet, para construc-
ción de palomeras, á censo de palomas (Manual 1460 usque Z46S, arch. parroquial
de S. Hilari C^a-calm).
Die séptima mensis aprilis anno a natiuitate domini M"CCCC°LX
quarto anni bixisti.— Ego Raymundus comas parochie sancti matey de
johanet diócesis vicensis. Gratis etc. stabliuit quendam trocium terre
boscosum saluatori rouira sotori popule sancti ylarii ad faciendum ar-
tigara tantura etc. sub tali pacto quod si dictus saluator vult faceré
paloraeres in dicta artiga, quod artigara et trocium terre est in loco
vocato al pía soliua in parochia de johaneto, quod ipse saluator posit
faceré dictas palomeros versus ponentis et circio in medio artigara
quod dictus saluator faciet et illa artigara quam petrus riber faciet in
capite dicto plano soliua sub tali pacto quod si dictus saluator faciet
dictas palomeras quod ipse teneat ad vitara suara et quod ipse tenea-
tur soluere dicto Rayraundo comas seu heredi de las comas, deis todons
19(B ^
130 F. CARRERAS Y CANDI
quey pendra de quinza paréis vn parell et sich fuit promissum ad in
vicem et per hanc recepit dictus Raymundus viginti solidos monete
barchinonense terne etc.
Testes sunt petrus valli crosa et anthonius francesch scolariis po -
pule sancti ylarii.
Documento núm. XX
A. 1466. — Establecimiento de una pieza de tierra para la construcción de palo-
meras á censo en S. Hilari ^a-calm (^Manual de 1460 usque 1468, arch. parroquial
de S. Hilari ^a-calm).
Die III mensis junii anni proximi dicti (1466).
Ego Anthonius clapes parochie sancti ylarii de Calmo diócesis vi-
cencis. Gratis etc. per me et meos stabilio vobis marturiano graualosa
popule dicti sancti ylarii quendam trocium terre quem teneo in dicta
parochia in loco vocato al sol de la plañe dejus font cuberta ad facien-
dum palomeras tantum per capiendum palumbos siue todons, tali pacto
quod uos vel vestris positis ibi faceré illos portos quos volueritis etc.
et scindere arbores si nessesse fuerit et plantare etc. et faceré ¿tot?
ut necesse fuerit ad faciendum dictas palomeras etc. Hanc fació vobis
et vestris etc. sub pacto quod vos et vestri teneamini mihi daré fa-
ticam de omnes palumbos quod accipietis in dictas palomeras quos
venderé volueritis et soluatis in quolibet anno in festo natalis domini
de censu vnum solidum et nullum alium non faciatis nec partem nisi
dictum solidum in adjutorium census quos ego fació domino per quo
teneo.
Habuisse confíteor a uobis per intrata decem solidos monete bar-
chinonense de quibus sum peccatus Renunciando etc. mittens vos in
corporalem possessionem etc. promitens de euiccione etc. dicetur lar-
go modo etc. Testes sunt saluator rouira sutor, martinus vernedes
alies matamala et jacobus maragues parochie sancti ylarii.
Documento núm. XXI
A. 1522.— Palomeras en San Hilari, dadas en prenda. {Manual ijio d r/2/,
arch. parroquial de San Hilari Qa-ca]m).
A XXVIII del mes de agost del any demont dit (1522).
Sia cosa manifesta com jo salbi clopes ereu e propietari del mas
clopes de peroquia de sent ylari atorch a vos senyer en johan seleta
de dita perroquia qui meveu prestades sed Huras sobra aquelas palo-
meras mias que tinch y posesch en dita peroquia en lo loch anomenat
las palomeras de la serra de matamala ho de la cominal las quals pa-
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALU5Ja EN LA EDAD MEDIA 131
lomeras ¿rio abax cum adal? he en peniorament lo qual per ara sia
compres en aquest per que es veritat que de present me abeu prestades
ditas VII lluras sobra ditas palomeras sob la forma segent so es que
vos dit seleta ti^au e poseiau ditas palomeras a totas vostras volontats
qucn puc^au fer con si eren vostras de asi al dia de quarnestoltas pri-
mer vinent que per mi ni per altres nos en puga traure sense volontat
vostra e que vos pug^au palomar ho fer palomar, valar, ¿esporgar? y
tallar olines et altre bosc a totas vostras volontats etc. e del die enla
de quarnestoltas jo vos puga tornar ditas sed Horas e que vos las agau
a pendra e vos dit seleta me pugau forsar que vos (do) las ditas sed
lloras del die de carnestoltas enla totas voltas que volreu etc. e so sub
obligasio de los mos bens largo modo etc. renonsiat tot propi for etc.
jurant etc.
Testimonis son lo senyer en salbi panoleda alias pons farrer et lo
senyer en lussa farer tots habitants en la vila de sent ilarii die e ay
desús dit.
Documento núm. XXII
A. 1522.— Concesión del collado de más Gaya, (S. Hilari Ca-calm) para cons-
truir palomeras, por término de diez años. {Manual de ijio d iji^S, arch. parroquial
de S. Hilari ^a-calm),
XXII die mensis nouembris Anno a natiuitate domini MDXXIP.
Sia cosa manifesta: com jo salui clopes menor de dias de la parro-
quia de sent ilarii ereu y propietari del mas clopes de dita parroquia
per alguna vtilitat a mi y ais meus etc. ven y ab titoll de pura vendi-
do a deu anys primers vinents a vos senyer en michell julia rouira
osteller de la poblé de sent ylarii y ais que vos volreu aquell coll de
mas gaya per obs y fer palomeras ab tots vtills y profits de ditas palo-
meras a totas vostras y deis vostros voluntats durants los dits X anys
so es que pugau bayar, vellar y tayar arbres per aservir ditas palome-
ras en totas las possecions mias y del mas clopes, exceptat que no
teleu arbres de fruyt com son rouras y alsinas y mes exceptat y a mi
retengut que durant los dits deu anys cascun any me agau e siau ten-
gut de darme I parell de tudos per cens: lo qual vende fas per preu de
cotra fillats de palomar, los quals me donan ara de present los qualls
os fas auer y sents etc. le quoll venda durant los X anys fas aver y
teñir contra totas personas sots obligado de tots y sengles bens
meus etc. et sic sine aliquo alio retentu, et mitto hec supradicta in
posse vestro et fíat largo modo, jurante etc. renunciante etc. largo
modo etc.
Testes johan vínoles de vilobi y macia lussa farrer habitant en
sent ylarii etc.
132 F- CARRERAS Y CANDI
Documento núm. XXIII
A. 1532. — Concesión de palomeras en la parroquia de S. Aniol, por el Se-
ñor del Castillo de Finestres, á precario, (arch. del Marqués de Barbará en Barce-
lona).
Precariuin den Llorens.
Noverint universi: Quod ego Berengarius Doms miles Dominus Ba-
ronie castrorum de Fenestris et de Sancta Pace Gratis per me et meos
successores laudo et firmo et de novo ratifico vobis Narcisso Llorens
alias Castella parrochie SM Andeoli presentí et vestris in dicto manso
successoribus perpetuo mediante illarum Palomeriarum sitarum in
parrochia de Fenestris loco vocato lo Coll den Pou scilicet vsum et
servitutem palomandi venandi palumbos, et alias aves cum portis et
reportis bayeriis valeriis creberiis, et alus dictis palomeriis necessariis.
Et cum intratis fiat ut supra in alus usque hic. Et salvo quod dabitis
nobis et nostri- anno quolibet de censu in festo Naiivitatis domini
sex paria althilium sive de capons et quod teneamini accaptare in
quacumque nativitate Domini de S.** Pace et per huismodi laudationem
et firme confíteor me habuisse et recepisse monete Barcinone. Actum
est hoc XXI mensis Augusti anno MDXXXII. — Sigi^num Berengarii
Doms praedicti Qui hsec laudo et firmo.
Documento núm. XXIV
A. 1543. — Venta á carta de gracia de las palomeras del mas Casal de San Hilari
^a-calm, (papel suelto del Arch. parroquial de S. Hilari; este mismo documento
existe en latín en el Manual anni 1^42 vsque 1^44).
Die VII mensis marcii anni a natiuitate domini 1543.
Sia cossa manifesta a tots com nos pera cassal areu y propietari del
mas casal y daltres masos aplicats ha bel y sagimona muler etc. y juan
gomi qui per causa de matrimoni so entrat en lo mas Casal y bartho-
mcua muler mia arena de dit mas Cassal y térras y posesions vnits a
aquell etc. tot della paroquia de sanct ylari del bisbat de vich de grat
y de serta esiensia y ab desliberada pensa per algunas nasesitats a nos
concorens ab que en altra manera no podem satisfer sino per via de
aquesta venda, venem a vos senyer en juan saleta de dita paroquia y
ais vostres y a qui vos volreu etc. vna pesa de térra qui es y ariba a la
serra del col de lenanyes, so es, ginestas y fageda tanta com nosaltres
ni tenim, e que ha vnas palomeras en dita fageda les quols palomeras
vos venem ensemps ab dita térra y mes que pugau fer altres palome-
ras matinals y vespralls al col segonyt o ala hont vos parra y bayar y
PALOMAS Y PALOMARES E\ CATALU^'A EN LA EDAD MEDLA. 133
fer baycadors de qiiol seuol loch de dita nostra térra y vellar a totas
vostras planas voluntats com a coses vostres propies etc. empero dita
venda vos fem migensant carta de o^racia tota hora que volrem rerii-
bra: y te dita pessa de térra della pertida de canpla fins a la serra le-
nanyes y del bayador fins desobra al sol segonyt tant com mester sia
per fer bayador y deualla per vn sarredet a vol delsinas fins baix al
torent della fageda en la partedia del mas de lenayes demont que
hará poseix en Campla axi com esta atermenat y te dita pessa de térra
y palomeras y fageda de sis fins en deu corteras sembradura axi com
afronta dita pessa de térra a sol yxent en la serra de lenayes ab les
térras y honos den riba de mont y den riba de ual a mix jorn al beya-
dor de ditas palomeras ab les teras del mas de lenayes que ara te en
canpla axi com es atermenat: a ponent en la fageda ab les térras de
dit mas de lenayes axi com esta atermenat: a tremuntana ab les terres
a nosaltres romanent sobre al sol segonyt y part ab en riba de mont:
y tench se dita pessa de térra sot senyoría y franca salou de mossen
vilanova que ara te la senyora (^\iriera y poseix la quol aquí pren sert
sens sobra dit mas de lenayes lo quol sens nosaltres y los nostros siam
hobliguats en pagar dits sens, sens dans ni despesas vostras tant com
durara dit estrument etc.: empero en atjutori del sens que nosaltres
fem de dit mas y de dita alouetat dareu y prestareu cascun any a nos-
altres y ais nostros en la festa de nadal vn sou etc. E mes ab pacte
concordat entre nosaltres que de cotra anys primes venidos nosaltres
ni los nostros nous en puguam traura sense libertat vostre de ditas pa-
lomeras y térras ni vos nous en puguam forsar ni ais vostros y pasats
•los cotra anys nosaltres vos puguam tornar dita canditat y cobrar
ditas palomeras y vos y los vostros, pasats los cotra anys tinguau li-
bertat de fer nos quitar y tornar vos dita canditat aureu paguada ab
pacte y condicio que passats dits cotra anys li volrem quitar que ajam
a quitar y tornar dita canditat en semblant temps que pasat dit temps
no puguam quitar sense libertat vostre de aqueix any fins Carnestoltes
sian pasades y que nosaltres nous ne puguam traura per altres per
mes preu sense dar vos ne la fatigua: y que vos dit juan saleta siau
tingut y hobliguat en paguar quols seuols tersos y luismes y forasca-
pis qui en dita térra cayguen ni y sia hobliguat y nosaltres en cas de
luysio vos ho ajam a tornar y satisfer ab los milorements quey aureu
fets etc. y ab aquets pactes demont espresats fem aquesta venda a vos
dit eonprador de ditas térras y palomeras quen pugau tayar y adobar
segons a vos serra ben vist fahedor segons hus y costum dé bon palo-
mador y de dita térra sembrar y pasturar y fer ne a vostras volun-
tats etc. sens contradiccio alguna de nosaltres ni ais nostros etc. y dita
venda vos fem valer y teñir sobra tots nostros bens etc. lo preu de dita
venda son vint liures dich XX liures moneda barcelonesa etc. y terses
y altres coses en cas de luysio etc. dictatus largo modo etc. fiat apoca
de reseptes etc.
134 F. CARRERAS Y CANDI
Testes lo honorable mosseii Víctor segret viccari de saut ylari y
Joan percet dicte parochie.
Documento núm. XXV
A. 1548. — Venta á carta de gracia de las palomeras d' en Busquets, en S. Hi-
lar! ^a-calm ("arch. parroquial de S. Hilari Ca-cilm).
Nouerint vniuersi Qnod Ego mlchael busquets de mont agricultor
parochie sancti ylarii de Calmo vicensis diócesis dominus vtilis et
propietarius mansum busquets de mont et alioruni mansorum etc.
Vendo et ex causa huiusmodi vendicionis seu impignoramenti conce-
do vobis francisco pares sartori ville sancti ylarii de Calmo vicensis
diócesis et vestris et quibus volueritis instrumento tamen gracie redi-
mendi mediante ab quando cumque Totam illam peciam terre bos<io-
sam partim Quam habeo teneo et possideo in loco vocato les palome-
res den busquets Prout affrontatur ab oriente et a meridie cum vilabe-
11a mediante torrente qui discurrit de pía desteue usque ad riariam
mojorem. A ponente cum dicto vilabelle. A circio cum busquets de
ual mediante dicta riaria. Que predicta pecia terre tenentur per domi-
nan! Annam sarriere et de gurbo cui nullum censum dabitur sed in
adjutorium majoris census quod ego fació pro dicta pecia terre dabi-
tur vos et vestri durante tamen dicto instrumento mihi et meis heredi-
bus anno quolibet in festo natalis domini sex denarios et vos in ea
possitis todonare siue palomar ad vestrum libitum y per dites palome-
res tallar bosch gros e manut et non alias. Ytem ab altre pacta que a
dit comprador no li sie fet empatx en colir e rebre tots los fruyts de
arbres que sien en dite pesse durante dicto instrumento. Cum alio
pacto que en la bassede puga dit comprador fer arradres pero sie obli-
gat donarne quiscun any tres a dit venedor. Ytem que dit venedor
puga ab son bestiar gros e manut pasturar les erbes. Ytem cum alio
pacto que dit venedor puga aquest any culir los blats quey te y sem-
brar e culir lo aparel que vuy y te. Ytem que encare que dit venedor
loi volgues per altre traurel ne que sie obligat donar lin fadiga. Pre-
cio videlicet Decem librarum monete Barchinonense quas a vobis con-
fíteor habuisse et recepisse etc.
Actum est hoc in parochia sancti ylarii de calmo vicensis diócesis
die Decima Sexta mensis madii anno a natiuitate domini Millefcimo
Quingentésimo Quadringesimo Octano.
Testes huius rei sunt venerabilis franciscus vilar presbiter et Pe-
trus craxar omnes presbiteri.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 135
Documento núm. XXVI
A. 1552.— Venta de unas palomeras á carta de gracia sitas en Arbucies {Manual
de i'^4gusqiie IJS4, arch. parroquial de Viladrau).
Notum sit cunctis: Quod nos Salvius cali alias marchus et antho-
nia eius uxor heres vtilis et propietaria mansi marchus et mansorum
ei vnitorum parochie sancti quirici de arbucies diócesis gerundensis
Gratis etc. vendimus vobis et concedimus Johaniii cazadavall paro-
chie sancti martini de viladrau diócesis vicensis presentí aquelles nos-
tres palomeros que tenim en lo nostro mas marchus en lo loch anome-
nat sobre palayna, ab lo bayer^ y tot lo que per dites palomeres hajau
menester de nostra dita heretat; so es, aquelles palomeres que en
cantalozella tenia de nosaltros, instrumento tamen gracie redimendi
ad quandocunque semper. (El precio era de 6 libras barcelonesas.
4 Abril 1552).
Documento núm. XXVII
A. 1596. —Venta á carta de gracia de unas palomeras en S. Hilari ^a-calm
{Manuale anni i'yc^jvsgue i^pS^ arch. parroquial de S. Hilari ^a-calm).
Die XII maii 1596. Yn dei nomine etc. Ego Gabriell vllastra agri-
cultor heres mansi vlastra parochie sancti hilarii de calmo vicensis
diócesis. Gratis etc. vendo vobis Antonio auledes agricultori presentí
cum instrumento gracie redimendi, totes les palomeres que tinch y
poseyesch en lo loch anomenat de resten, e a tots vtils de valar y ba-
yar per dites palomeres les quals se teñen per indiuis per lo monestir
de sant pere sercada y per lo Illustre don juan sarriera etc. hanc au-
tem etc. precio terdecira Ilibras barchinonenses: et ideo etc. fiat etc.
Testes sagismundus riera et saluator moragues.
Documento núm. XXVIII
A. 1605 y 1610.— Construcción de palomeras en las Barboladas del término de
Osor, (Manual de ;/// d 1611, arch. parroquial de S. Hilari ^a-calm).
Montserrat Bosch propietario del mas Bosch de S. Pere de Osor
vende á Antoni Soler de la parroquia de Mansolí, un bosque situado
en medio de las barboladas (scitam en lo mix de las barboladas) de
pertenencia del mas Bosch, conocido por lo serrat del banyador, en 26
de Abril de 1605.
«Sub talibus pactis et conditionibus sequentibus (^0 es que uos dit
antoni soler comprador y ais vostres hereus y succesors pugau en la
136 F. CARRERAS Y CANDI
dita pessa de térra fer y posar y edificar palomeras sempre y quant a
uos dit Antoni Soler comprador y an ais vostres hereus y succesors ben
vist vos sera y conuindrá y aquellas nous piigam inpedir nosaltres ni
ais nostros par qualsseuol causas uias ni reons. Ytem es pacte qué
uos dit Antoni Soler y ais rostros pugíiu tallar ó fer tallar qualseuol
arbre de qualseuol genero y specia sia de tot lo bosch de las barbola-
das ab tal empero que sia neeessari per efecta de ditas palomeras,
ítem es pacte que uos dit Antoni Soler y ais rostros pugau posar o fer
posar lo abayador per ditas palomeras y qualseuol vela o velas per
auelar los todons hahont ben uist uos sera ítem es pacte que dit
Monserrat bosch ni ais seus en lo tems que palomeran no pugan acos-
tar ni fer acostar los tossinos ni altre bestiar en los ñlats per spay de
cent passos. ítem es pacte que dit Monserrat bosch ni ais seus succe-
sors en lo tems que y serán los todons no pugan tirar ni fer tirar ab
ninguna arma de foch ni ballesta ni donar llisencia a ningu que sia en
dany de ditas palomeras. ítem es pacte que dit Monserrat bosch ni ais
seus succesors en lo bosch gros de las barboladas 90 es de costa freda
en amunt no pugan tallar ni donar llisencia de tallar ningún arbre
per fer artigas pera sembrar ninguna manera de llauor sensa llisencia
de dit Antoni Soler o deis seus.»
Sigúese á esta venta otra del 4 de Febrero de 1610, por la que el
propio Antoni Soler compró á Jaume Eajol de Osor, propietario del
más Rajol una pieza en las mismas Barboladas, contigua á la adquiri-
da anteriormente.
«Sub talis pactis et conditionibus sequentis 90 es que nosaltres dits
venedors tingam Ilibertat de poder tallar tota fusta de castanyers
borts en dita pessa de térra a nostre vtils y profits y no altre fusta
acceptat que tingam Ilibertat de tallar roures 90 és per empriu de nos-
tra casa y no mes. ítem es pacte que en dita pessa de térra en lo tems
y serán los todons 90 es de la festa de tots sancts fins a Miya Coresma
no pugam tallar ningún genero ni especia de arbre. ítem es pacte que
Nosaltres ni ais nostros de asi al dauant no pugam tirar ni donar lli-
censia de tirar ab ninguna arma de foch ni ballesta ni ab qualseuol
altre manera de arma en dita pessa de térra ni alantorn de aquella,
ítem es pacte que vos dit comprador y ais vostros tingan Ilibertat de
fer palomeras en dita pessa de térra hahont ben vist uos será. »
Documento núm. XXIX
A. 1624. — Entrega de un bosque en prenda, en S. Hilari, con reserva del dere*
che de cazar y palomar. (Arch. parroquial de S. Hilari ^a-calm).
XXVIII mensis Septembris 1624.
Ego Johannes verges.
In dei nomine etc. Nos Bartholomeus sirade alias vallicrosa et ga^
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 137
briela eius vxor parochie sancti ylarii de Calmo vicensis diócesis Gra-
tis etc. per nos succurrendis etc. vcndimus vobis Johanni saleta dicte
parocliie et vestris etc. ad quatuor annos primo venturos etc. et post
quatuor annos ad quandocunque gracie tamen redimendi medianti
totum nemorem dit del castel hoc est roures faigs y castanyes y lo
fruyt de aquells ab tal empero pacta y condicio que nosaltres dits ve-
nedors dins los dits quatre anys nous ne pugam traure ni quitar. Apres
empero passats los quatre anys volem que vos nos pugau forjar de
quitar y aximateix tingam libertat passats dits quatre anys. Axima-
teix nos aturara quey pugam fer fuste per nostre empriu. E aximateix
vos donam libertat quey pugau fustejar per empriu de casa vostre y
per lo moli. Es dit bosch del cami real enla fíns tant bosc y aje qui sie
del castel ni de vallicrosa ni de sos masos vnits. Aximateix ab pacta
que en temps de glans nosaltres no pugam entrar ab nostre bestiar en
dit bosGh durant dits quatre anys. Aximateix que dins dits quatre
anys nosaltres ni ningu per nosaltres no pugam fer ertigues en dit
bosch qui fossen en dany de dit bosch. Aximateix nos aturara per
anosaltres y per los nostres los castanyes de casermes. Hinch volem
que tots ensemps pugam cassar y pallomar en dit bosch durant dit
empenyorament: tenetur per dominara annam desarriera y de gurb etc.
Aximateix per adjutori de major cens siau obligat pagar quiscun any
sis diners. Precium est viginti et sex libras etc. Fiat apocha de recep-
tione etc. hanc autem etc. fiat largo modo etc.
Actum est hoc in parochia sancti ylarii de calmo XXVIII mensis sep-
tembris 1624.
Testes sunt Anthonius rocafort et Johannes begine de la villa de
Cardona presbiteri.
Documento núm. XXX
A.* 1 301 á 1466. — Bandos de Barcelona sobre la volatería y caza, (archivo
municipal de Barcelona).
Año 1301. (a). — ítem dicta die sabbati (V idus Decembris anno
domini MCCCI) Thomas grumer, P. mayol, G. P. duzay, Ja. ff. de la
sala et G. de mirambello consiliarii Ciuitatis barchinone in hoc anno
cum consilio Centum juratorum et proborum hominum Ciuitatis ordi-
nauerunt banna sequentia que fuerunt dicta die preconitzata per G. de '
piraría preconem eiusdem Ciuitatis.
(b). — Itera quel raeylor pareyl de capons sia uenut. II solidos et VI di-
ners e no raes.
ítem lo raeylor pareyl de galines II solidos et II di-
ners e no mes.
ítem lo meylor pareyl de les perdius XII diners.
138 F- CARRERAS T CANDI
ítem la meylor carn de cunill V diners.
ítem lo meylor pareyl de todons VIH diners.
ítem lo meylor pareyl de xixelles V diners.
(c). — ítem que tot hom se pusca pendre les dites coses al dit ban
e que nuil reuenedor ne altre axi estrany com priuat noy gos contras-
tar encara que tot hom axi reuenedor com altre qui haia cassa per
uendre que lo haia a trer en la plassa e que la tenga aqui et la uena
palesament e no amagada e quen uena a tot hom quin quira al dit
preu. E qui contra asso fara pagara cascuna vegada per ban X solidos.
Encara que si es reuenedor o reuenedora que perda la cassa.
frfj.— Ordonaren los Conseylers els prohomens de la Ciutat que
nuil hom estrany o priuat a cauall ne a peu no gos entrar en vinyes
ne en camps sembrats ne en orta ne en blats per cassar ne per balles-
teiar. E qui contra asso fara restituit primerament lo dan quey fara
pagara per ban sso es assaber hom a Cauayl XL solidos. E hom a
peu XX solidos e siy entre de nits pagara la dobla del dit ban.
(e). — ítem que nuil hom estrany ne priuat no par ne gos parar
ab negu gi ne en alcuna manera per pendre coloms dins lo territori de
barcelona. E qui contra asso fara pagara per ban cada uegada LX so-
lidos.
(f). — ítem que negun reuenedor ne reuenedriu no gos comprar
ne uendre coloms de colomer sino nouells. E qui contra asso fara pa-
gara per ban cada uegada XX solidos.
(g).—ltem que nuil cassador ne ballester no gos pendre ne trer
a coloms en torn colomer dins espay de I tret de ballesta. E qui contra
asso fara pagara per ban V solidos,
(h).—ltem que nuil reuenedor ne reuenedriu no gos comprar per
reuendre ne a ops daltre ne reebre en comanda au9eyls menuts uius.
E qui contra asso fara pagara per ban per cascuna uegada V solidos.
E de tots aquests bans haura les IP» parts lo veguer e la ter^a la-
cusador.— E tots aquests bans duren aytant con los Conseylers e els
prohomens volran.— E si en los dits bans o en alcuns daquells haura
obs neguna addicio declarado o enterpretacio, que sía feta a coneguda
deis Conseylers,
Año 1302, (pridie nonas 3 ks).— Repitióse el bando del 1301 en su
disposición (6)-, la (c) modificada según se continúa en (¿); siguióle (j);
repitiéronse (/<) y (e) con multa de 50 sueldos para el contraventor;
concluyendo con (f) y (g).
(¿). — ítem que tot reuenedor o reuenedriu o tota altra persona es-
tranya o priuada qui haia cassa o uolataria a vendré que la tenga a
pales en la plassa acustumada e aqui que la uena a la rao damunt dita
en axi que negu no la gos teñir amagadament en alberch ne en obra -
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 139
dor ne en altre loch ne uendre sino en la dita plassa o per les carreres
portant a aquella plassa. E qui contra asso fara pagara de ban per
cascuna vegada XII solidos e si es rcuenedor o reuenedriu oltra los
dits XII solidos perdra la cassa o uolataria.
(j)^—ltem han ordonat que tota persona se pusca pendre scgons lo
dit preu I de les dites coses o despareyar e que negu reuenedor ne
altre priuat ne estrany noy gos contrastar. E quiu fara pagara de ban
per cascuna vegada V solidos.
(A:).-Ordonaren los Conseylers els prohomens de la Ciutat que tot
Reuenedor o Reuenedriu pusca comprar en la Ciutat e en tot altre loe
de nit e de jorn qual que hora vula Cassa e uolateria en axi enpero que
la cassa e uolateria deien uendre segons los bans qui posats hi son per
los Consellers e per los prohomens de la ciutat.
Año 1310.— Promulgáronse las disposiciones del bando de 1301 se-
ñaladas con las letras {d) imponiendo multa de 25 sueldos si iba el
contraventor á caballo y de 10 sueldos si iba á pie; (6) con alguna mo-
dificación; y (c) aumentando hasta 20 sueldos la multa impuesta al
contraventor.
Año rdl2.— Fueron estatuidas las letras {d) y (&) del bando de 1-301,
esta última con alguna variación. Además, con fecha de 3 idus Mayo,
se estableció la nueva disposición que continuamos en (1).
{l).—ltem que negu reuenedor ne reuenedora no gos compar ocels
de paradors. E si ho fa que aja a donar II pardals ho II pinsans per
I meala, ho al menys V gafarrons ho past dun speruer, per I meala.
E qui contra a(?o fara pagara per cada vegada V solidos. E de aquest
ban haura les II parts lo veguer et el ters lacusador.
Año 13Í4:.— Repitióse la disposición letra {d) del 1301; la letra {b)
con alguna variante; la (c) con multa de 5 sueldos por vender más cara
la caza y de 20 sueldos por tenerla escondida; y las dos nuevas dispo-
siciones (II) y (m).
{II).— Ítem que negun Reuenedor ne Reuenadriu ne lur missatge de
Cassa ne altre no gos Comprar dins Barchinona neguna Cassa ne negu-
na volataria ne ous ne formatges ne neguna altre cosa tro despertada
aia sonat.
(w).— ítem que negun reuenador ne reuenadriu ne lur missatge no
gos Comprar neguna de les Coses damunt dites de dies ne de nit de
Muntgat al Castell de fels ne des coll desarola tro a la mar. E qui
contra asso fara pagara per ban Cascuna vegada XX solidos.
Año 1316.— ^e restablece del bando de 1301 las letras (b), (c), y del
de 1314 la (m) reduciendo á 10 sueldos la pena pecuniaria.
Año \U^.— Estatuyóse otra vez del año 1301 la letra {d) con la
multa del año 1310; y la letra (m) del 1314.
Año 13íd.- Promúlgase la letra {d) del bando de 1301, imponiendo
140 F. CARRERAS Y CANDI
100 sueldos de multa al que entrare á caballo y 50 sueldos si á pie; la
(h) modificada; y la letra (II) del 1314.
Año 1320, (14 kal. SEPTrn^siBUF.). — Especifícase ¡a letra (m) del
1314 del siguiente modo.
(^)._Ordoiiareii los Conseylers els prohomens de la Ciutat que
negun reuenedor ne reuenedriu no compre ne gos comprar dins los
termens el territori de barchinona qo es de Muntgat tro a Castell de
fels et del coll de finestrelles et del coll de Cerola et daquella gauarra
et del valí vidrera et deis Mulins del Reig del lobregat tro a la mar
polis ne galines ne Capons ne perdius ne cunills ne neguna altra cassa
ne volatería ne Encara ous ne formatges ans haia a comprar les da-
munt (dites) coses en les places de barchinona on acustumades son de
vendré et no en altra loch. E qui contra fara pagara per ban cada
vegada XX solidos deis quals haura les dues parts lo veguer et la ter^a
lacusador.
Año 1321. — Repetición de las disposiciones del 1301 letra {d) impo-
niendo 20 sueldos de multa al que entrase á caballo y 10 sueldos al que
entrase á pie; la (b) modificada; la (c) completamente igual; y la {n) del
1320, con multa de 15 sueldos.
«
Año 1322, (8 idus Agosto).— i?epe¿¿ctd« del bando letra (d) de 1301.
Año 1823. — Promúlgase la letra {d) del 1301, con la multa estatuida
en 1321.
Año 1324, (nonas de Enero). — Sanciónase de los bandos de 1301,
etra ib) modificada, la, (c) igual, la nueva disposición (Ji) y la {n) del
1320 con la misma multa.
(íl).— ítem que negun Reuenedor ne reuenediz no compra ne gos
comprar dins ne de fora aucells menuts ne uius per uendre. E qui
contra asso fara pagara per ban cada vegada V solidos.
Año 1326, (Diciembre).— iíerfilcese la multa del bando letra (d) de
1301, á 10 sueldos si el contraventor iba á caballo y á5 sueldos si ápie.
Año 1327, (10 kal. Agosto). — Promulgación del bando de 1320
letra {n) y la (ñ) del 1324.
Año 1332, (7 idus Diciembre). — Repítese el bando de 1301 letraid"^
igual que en 1326; la {n) de 1S20; la nueva disposición (o) y la (?1)
de 1324.
(o). — Declaren empero Los Consellers quels Reuenedors de la ca9a
estant en lur taula de la plaQa deis Cunills puixen comprar tota caca
per rcuendre ab que la uenen aqui mateix. E en altras lochs dins la
Ciutat et lo territori no puixen comprar. Empero si de Menresa ho de
vich o daltres lochs lus aportauen caga qui en los dits lochs fos com-
prada a ops dells que deis hostals la puixen aportar a lurs cases ho
taules clls jurants que a ops dells fo en los dits lochs comprada.
Año 1333, (7 idus Diciembre).— A'epzíése del 1301 el bando letra {d)
con la modificación de 1326; la (n) de 1320; la (c) de 1301; la (o) de 1332;
y la (?1) de 1324.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 141
AÑO 1338 (18 KAL Febrero). — Promúlganse los bandos letra (n) de
1320; letra (o) de 1332; letras (6) y (c) de 1301 y letra {ñ) de 1324.
Año 134cO.— Renovación de los bandos letras (n) de 1320 y (o) de 13S2.
Año 1343. — Fué publicada la (d) de 1301 con la modificación de
1326.
Año 1345, (Diciembre). — Repítese el bando letra (d) de 1301 con la
multa de 1326 y la letra {n) de 1320.
Año 1349. — Publícase en el presente año el bando que continuamos
integro, pues servirá de punto de partida para clasificar los de la se-
gunda mitad del siglo XIV, referentes á volatería y caza. La cifra {1}
de este bando resulta igual á las letras (m) y (n) de los anteriores;
nueva la cifra (2); la cifra (3) igual á la letra {II); nueva la cifra (4)-
la cifra (5) semejante á las letras (c) é [i); nuevas las cifras (6) y (7) y
modificada la letra ib) en las cifras (9) y {10).
(1) Ara ojats: per raanament del mostacaff ordenaren los Consa-
Uers els promens de la Ciutat, que, nagu reuanador ne reuanadora no
gos comprar, ne fer comprar, dins la Ciutat ne fora la Ciutat de bar-
chinona, gallines, capons, perdius, todons ne conills, ne naguna altra
volatería ne cassa. E qui contra fara pagara per ban cada vagada X
solidos. E resnomenys perdra la volatería o cassa que haura fora la
dita Ciutat comprada.
(2) En aquest ban empero no son enteses aquells o aquelles qui
compraran volatería e cassa en los mercats e fires deis lochs de fora.
(3) ítem que nagu reuanador ne reuanadora no gos comprar ne
fer comprar Gallines, capons, perdius, todons ne conills ne naguna al-
tra volatería ne casa naguns dies entro que toch despertada de la Seu.
E qui contrafara pagara per ban cada uagada X solidos encara perdra
la volatería e cassa que haura comprada.
(4) ítem que tot reuanador o reuanadora qui haia gallines, ca-
pons, perdius todons, conills ne naguna altra volatería ne cassa na-
guns dies entro que toch despertada de la Seu. E qui contrafara paga-
ra per ban cada uagada X solidos. E encara perdra la volatería e cas-
sa que haura comprada.
(5) ítem que tot Eauanador o reuanadora que ha ja gallines, ca-
pons, perdius, todons, conills, e altra volatería o cassa que les haja a
teñir palasament del mati entro al vespre en les plasses e en los lochs
publichs de la Ciutat on es acustumat vendrá volatería e casa e que
nou tenguen amagat. E quen venen á tots aquells qui comprar ne vu-
lien. E qui contrafara pagara per ban cada uagada X solidos. E resno-
menys perdra la cassa e volatería que no hauran volguda vendré o
haurien tenguda o tendrien amagada.
(6) Declaren empero los dits Consellers e promens de la Ciutat,
que nagu reuanador o reuanadora no puxa allegar que altra ha com-
prada la cassa, E siu feya que no li valle. E axi guart se aquell o aque"
142 F. CARRERAS Y CANDI
lia qui haura comprada la volatería o cassa^ que no la jaquesca en po-
der del Reuanador.
(7) ítem que negun Reuanador ne neguna Reuanadora ne negu-
na altra persona no gos teñir ne vendrá neguna volatería ne cassa qui
puda e siu faya quel mostapaff puxa seguir dampnatge a les gents. E
res no menys pagara aquell o aquella qui la dita volatería o cassa pu-
dent tendrá o vendrá per ban cada vagada V solidos.
(8) E si per uentura aquell o aquelles qui en los dits bans cauran
no podíen pagar los dits bans que hajan a star preses al castell aytants
dies com ha solidos ais bans.
(9) ítem que negun reuenador ne reuenadora ne neguna altra
persona no gos demenar ne pendra per I perdiu mes auant de XII dí-
ners ne de vn parell de coloms roquers mes auant de VI diners. E qui
contra fara pagara per ban quescuna vegada V solidos. E si lo dit re
uenedor o reuenedora o altre qualque persona qui agües aportades
perdiu o perdius per uendra en la dita Ciutat no les volia vendrá que
aquell qui comprar les volra les sa puxa pendra, pegant lo preu de-
munt dit.
(10) ítem que negun Reuenedor ne Reuenadora ne neguna altra
persona no gos demanar ne pendra per I carn de cunill mes auant de
VIII diners ne per I cunill a b la pell mes auant de IX diners. E qui
contra fara pagara per ban cascuna vagada V solidos. E si lo dit
Reuenador ho Reuenadora ho altre qualque persona qui agües aportat
conill o conílls per vendrá en la dita Ciutat nols volia vendrá, que
aquell qui comprar los volra los sa puxa pendra pegant lo preu de
munt dit.
AÑO 1350, fJuNioj. — Repetición del precedente bando.
Año 1352, (Matoj. — Repetición del precedente bando.
Año 1352, (il de DicvRyíBYCE.).— Repetición del precedente bando.
Año 1353, (2 de Eneeo^. — Repetición del precedente bando, con mo-
dificación del número (9).
Año 1355, (11 de FiTSIZILo).— Promulgáronse del precedente bando,
las cifras (5), {6) y (7).
Año 1356, (17 de Junio). — Promulgáronse del precedente bando las
cifras (5) y (9) en la forma que se transcribe en las cifras {11) y {12).
Die veueris XVII die Juníi Anno a Natiuitate domini M°CCC°L°VP
fuit preconitzatum per Jacobum clos.
(11). — Ara hoiats per manament del mostessaff ordenaren los Con-
ce'ilers e promens de la Ciutat que nangu reuenedor ne reuenedora ne
naguna altra persona no gos comprar gallines, ni pols, ne oques, ne
anedes ne coloms ne naguna altra volatería, ne ous per reuendre entro
que despertada de la seu haia tocat ne encara gossen comprar en
alcun loch fora de la Ciutat dins los termens de la Ciutat naguna vole-
teria ne ous per reuendre. E qui contra les demunt dites coses o alcu-
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 143
na daquelles fara o vendrá pagara per ban qucscnna vegada XX so-
lidos.
(12).— ítem que negun reuencdor ne reuenedora ne naguna altra
persona no gos demenar ne pendre del parell doques mes auant de
VI solidos ne del parell de les anedes mes auant de III solidos ne del
parell de coloms roquers mes auant de VI diners ne del parell dous
mes auant de I diner. E qui contra les dites coses o alcuna daquelles
fara pagara per ban quescuna vegada X solidos. Pero que tota persona
qui vulla comprar de les dites coses que les se puxa pendre ais preus
demunt dits.— Retenentse empero los dits Consellers etc.
Año 1361, (18 de DicrnuBU^).— Estatuyese la disposición que con-
tinuamos con la cifra {Í3).
(13). — Ban de no teñir Cassa ne volatería sino en certs lochs.
Die Jouis XVIII die Decembris Anno a Natiuitate domini M^CCC^LX"
Primo.
Ara ojats per manament del Mosta^aff ordonaren los consellers e
Promens de la Ciutat que negun Poller ne pollera Reuenador Reuena-
dora de digmenge prop vinent a auant no gos vendré ne teñir per
vendré en la Ciutat alcuna volatería ne Cassa sino tant solament en la
Plassa del oli e en la plassa deis Conills e en la placa noua e en la
plassa del Born o en alcuna o alcunes de les dites places les quals pla-
9es assignen los dits consellers e Promens a teñir e a vendré la dita
uolateria e cassa. Axi empero que en altres plages ne lochs de la ciutat
no sen puxe teñir ne uendre per neguna persona de qualque estament
o condicio sie. E qui contra rara pagara per ban cascuna negada
XX solidos. E no res menys perdra la dita volatería e cassa. — Rete-
nentse empero los dits consellers e Promens etc.
Año 136S. —Repítense del bando del 1349 las cifras {1), (2), (5), {6)
y (7), á las que se siguen las cifras {14), {15) y {16).
(14). — ítem que negun Reuenedor ne Reuenedora no gos massique-
yar ne comprar dins la Ciutat de Barchinona ne fora la Ciutat per si
ne per altre persona ne fer masiqueyar a altre gallines, Capons, per-
dius, Todons, conills, ne neguna altre volatería e Caca. E qui contra
fara pagara per ban quescuna vegada X solidos. E no res menys per-
dra la Capa e volatería que haura comprada ne aportada a preu cert.
(15). — ítem que negun Reuenedor ne Reuenedora no gos anar ne
exir fora la Ciutat per Comprar per los Camins so es del Portal nou
tro al Coll de Finestrelles e del portal den Cardona tro a casa de na
massanera. E si hi sera trobat que pach per ban quescuna vegada
X solidos no res menys que halen a fer sagrament empoder del Mosta-
9aff o deis pesadors. E si los dits Reuenedors si son exits per comprar
sots lo dit ban.
(16).— ítem que tot hom e tota fembra de qualque condicio o sta-
ment sia sis vol sia pages o hom de fora la Ciutat e aportara per
vendré al Coll o en la bistia qui menara So es, Perdius, Conills, To-
144 F. CARRERAS Y CANDI
dons, ne neguna altra volatería o Ca^a la baja amostrar a pales
claraunt la bistia o en la ma alcuna partida e vendrá a tots aquel! s qui
comprar ne volran. E qui contra fara pagara per ban quescuna vegada
V solidos.
x4:Ño 1371, (12 DE Enero). — Del bando promulgado en 1349, repíten-
se las cifras {1), (2), (o), {6) y (7) y del promulgado en 1368, las {14),
{15) y {16).
Año 1372, (8 de Enero). — Repitense las disposiciones estatuidas en
el anterior año de 1371.
Año iSlS.—JRepítense las ocho disposiciones pregonadas en 1371.
Año 1373, (1 de FEBUEno).— Pregónase la cifra (5) del 1349.
Año 1373, (17 de Dicikubu'E.).— Se publican las cifras (5), {6) y (7)
del 1349.
Año 1375, (13 de Enero),— -Es repetido el bando del 1371, compues-
to de las cifras {!), (2), (5), {6) y (7) del 1349 y las {14), {1.5) y {16)
del 1368.
Año 1877, (21 de Julio). — Promúlgase el siguiente bando, el cual,
en sus cifras {17) y {18), es reproducción de las cifras {9), {10) y {!)
del 1349.
Die Martis XXI die Julii anno a natiuitate dominilNPCCC^LXXVII.
(17).— Ara hoiats per manement del Mostacaff ordenaren los Con-
sellers e prohomens de la Ciutat. Que neguna persona stranya ne pri-
uada qui uene o reuene ous no gos pendre dun pareyll dous sino
1 diner etc. sots ban de XX solidos (313).
(18). — ítem ordenaren los Consellers et prohomens de la Ciutat que
negun reuenedor ne Eeuenedora ne altre persona per reuendre no gos
comprar oques, galines, polis, perdius, cunills ne altre uoleteria o
cassa ne ous, formatges, ne neguna fruyta dins la Ciutat de Barchino-
na ne en lo territori daquella sots ban de XX solidos. E no res menys
perdra la uoleteria, cassa, o altres coses qui comprades haura.
(19). — Declaren empero los Consellers e prohomens que passat mig
dia puxen comprar los dits Reuenedors e altres persones de la dita
fruyta tant solament en les plaQes de Barchinona, publicament, e no
per cases^ sots ban de C solidos.
(20). — Ítem que negun Reuenedor o Eeuenedora no gos uendre o
reuendre ous, fruyta, voleteria, formatges, ne altres coses que ha Ja
comprades, si no en sa taula o casa on ha acustumat de teñir obrador
o a porta sua. E qui contra fara perdra los ous, fruyta, uoleterias e
formatges, o altres coses que comprades haura e uendra en altre loch
sino en sa taula, obrador o porta sua. E no res menys pagara per ban
cade negada que contra fara L solidos. E si pagar nols pot stara
L jorns al castcll a pa e a ayga.
(318) Es de atiponer que se repetiría aquí la cifra (9) y (10) de 1349 sobre los precios
á que debía Tenderse la volatería y caza.
PALOMAS Y ('ALOMARES tiN CATALUÑA EN LA EDAD MEDL\ 145
(21).- Declaren encara que les Keaenetloros de cois e de spinachs
et de raelons c de scmblants coses puxcn vendré la lion han acus-
tumat.
(22). — Declaren encara que les persones de fora o de la Ciutat quiu
han de lurs cullites o qui rcucnedor no sia puxen uendre en les places
o carreros o la hon se vullen.- Retenetse empero etc.
Año 1377, (23 de 5vsiao). — Se pregona el siguiente bando.
(23).— Die Jouis XXIII die Julii anno domini MCCCLXXVII.
Ara oiats per manement del Mostacaff ordonaren los Consellers e
prohomens de la Ciutat confermant los bans ja sobra asso fots e ordo-
nats e declarant aquells. Que tot poller qui uaia comprant uoleteria o
altres coses per los mercats de fora lo territori e termens de Barchino-
na puxe uendre o reucndre en casa sua scgons que ordonat es, la uo-
leteria et altrefe coses que comprados haura o en la pla(?a noua en aque-
lla part o loch que sera ordonat e assignat per lo Mostacaff 90 es uers
la torra del palau del bisbe o uers lort fins al canto del carrer que hom
appella deis bayns nous. Empero declaren losdits Consellers que poller
o Reuenedor o reuenedora qui stiga a la pla^a del oli no gos uendre en
altre loch sino a la sua casa, segons los bans ja sobre a(;o ordonats.
Declaren encara los dits Consellers quels dits pollers no gosen comprar
fruyta per reuendre aqui ni en altre loch ans haien a seruar los bans
ja sobra ago ordonats. — Retenense etc.
Año 1378, (13 de ^^kro).— Promúlgase el siguiente bando.
Die mercurii XIII die Januarii Anno a Natiuitate domini Millesi-
mo Trecentesimo Septuagésimo Octano, fuerunt prcconitzate infras-
cripto ordinatione per Ciuiíate barchinone et in locis assuetis per Do-
minicum massa sal, preconem' publicum barchinone.
(24). — Ara hoiats per manament del Mostacaff ordonaren los Conse-
llers e prohomens de la Ciutat que com en frau dalscuns bans ordonats
sobre la voletería e ca^a, los pollers e altres reuenedors de la dita vo-
leteria e capa en la dita Ciutat facen certs apatiaments a cert for ab
los pageses e ab les persones de deffora de la dita voleteria e ca9a qui
encara no es presa, axi que tota la ca^a e voleteria qui entra en la dita
Ciutat ve tota apatiada a cert fort liuradora ais pollers e reuenedors.
E aytal cosa, sia fort de mal eximpli e inhonesta que aytals patiaments
e couinen^es nos puxen fer nes fa^endaqui auant. E que aquellos qui
son fetos sien haudes per nuiles e de tot per reuocades e qui daytals
auinences o apatiaments fets o fahedors daqui auant vsara si es ciuta-
da que pach per ban cascuna vegada qucn vsara C solidos. E si sera
strany que pach per ban L solidos. E no resmenys qucs perda tota la
dita ca(;a e voleteria que apatiada entrara en la dita Ciutat.
(25). ^^E lo dit poller o reuenedor o altre qui sera trobat que haura
vsat II o III vegades o mes deis dits apatiaments o couinences que
daqui auant vltra los bans damunt dits sia priuat del dit ofíici. E si se-
1903 10
146 F. CARRERAS Y CANDÍ
rá atrobat despiiys que vs del dit ofíici que sia scobat per los loclis
acustumats de la Ciutat.
(2G). — ítem que tota persona de defora qui per qualque manera
metra, o portara, o metre o portar fara, ca^a ne voleteria en la dita
Ciutat, que aquella haia a descarregar e portar dreta via a la pla^a
nona de la Ciutat de barchinona. E aqui vendrela decontinent publi-
cament, e que en alcun hostal, alberch o casa no puscha entrar sots
ban de perdre la dita ca^a o voleteria e sots ban de C solidos.
(27). — ítem que algún hostaler o altre persona no gos ne puscha
acuUir en son hostal o casa voleteria o ca^a dalcu sots ban de C so-
lidos per cascuna vegada que contra fara.
(28). — ítem que alcun poller o reuenedor no gos ne puscha trame-
tre misatje ne altre persona defora per comprar caga ne voleteria per
tolre tota f rau, mas si lo dit poller o reuenedor volra anar comprar fora
los termens e territori de la dita Ciutat, tots apatiaments empero fora-
gitats, axi com damunt es dit, que ho pusque fer si empero personal-
ment hi ira e aquella puscha aportar a la dita Ciutat per reuendre
segons los bans ja sobre acó ordonats. E qui contra fara pagara per
ban cascuna vegada C solidos. E no res meyns perdra la ca9a e vo-
leteria.
Dedaren empero los dits Consellers e prohomens que no entenen a
reuocar altres bans ja sobre acó ordonats.— Deis quals bans damunt
dits haura la terca part lacusador e les dues parts lo Mosta9aff. —
Retenentse empero los Consellers e prohomens etc.
^Año 1378, (Marzo). — Repítese el bando del 1377 , cifras {17), {18),
{19), {20), {21) y {22).
Año 1378, (7 de Abril) .—Puhlicanse las cifras (o), {6) y {7) del
1349 y las {14), {15) y {16) del 1368.
AÑO Í380. — Rep ¿tense los bandos del 1377 y 1378, cifras {23), {24),
{25), {26), {27) y {28).
Año 1381, (17 de Dicie},ibre).— Revócase en público bando la cifra
{26), pregonada en 1380.
Año 1382, (4 de Eis; ero) . — Estatuyóse la cifra {28) del 7376'.
Año 1382, (19 de Marzo. — Promúlgase la cifra {1) del 1349, con
la multa de 20 sueldos, tal como lo establece la cifra {18) del 1377;
dtl propio año 1349 se sanciona la cifra (2^: y del 1377, las {20), {21)
i/(-^-^).
Año 1383, (6 de Esero). —Pregónase el bando cifra {29,.
(29).— Ai)res a VI de Jener del any MCCCLXXXIII los honra ts
Concellers de Barchinona declararen c ordenaren que tot poller o re-
uanedor de volateria en temiis de pinjas puschan vendré o reuendre
e estar o teñir lur volateria e cassa a la part del hostal de na Lurenga
sois la taulada e puschan encara estar a cubcrt ab la dita volateria
6 cassa en lo dit temps .
AÑO 1380, (9 DE E^vAio^.—Eíilatáyi;se las cifras {26) dd 1378, bajo
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 147
multa de 20 sueldos, en lugar de 100 y la \'27) bajo multa de 40 sueldos
en lugar de 100.
Año 1380, (I de ]\Iarzo). — Establécese el bando que se continúa:
(80). - Dio Jouis prima die Marcii anno a Natiuitatc domini
M°CCC°LXXX*' Sexto: predicto dominis preco retulit se sequens preco-
nitzacio per Ciuitatem barchiiione videlicet per loca assueta ut supra:
Ara ojats per manament del Mostapaff ordenaren los Consellers e
prohomens de la Ciutat que los venadors o reuenedors de cassa e de
volatería qiii aquella venien en la placa noua de la dita Ciutat se haien
a mudar en aquell loch de la dita placa lo qual per lo dit Mosta^atf
los sera assignat e aqui en lo dit loch vendrela publicamont a tot licm
qui comprar ne uolran sots los bans sobre les dites coses ordona's.
E que negun deis dits veuedors ni neguna altra persona qui de la dita
cassa o volatería vendrá o comprara no gos plomar o fer plomar la
di'.a cassa o volatería en la dita pla^a o en algún loch de aquella sots
ban de perdra la dita cassa e volatería e no res menys pagara per ban
cascuna veguada que contra fara X solidos.
Año 1387, (6 de Febrero).— itep/íe?^se del bando de 1378 las cifras
(24); la {25} variando la pena de azotes j^or la de 100 sueldos; la (27;
con multa de solos 10 sueldos y la {28); del bando de 1349 las cifras (/)
con multa de 20 sueldos; {5\ {6) y (7) con multa de 10 sueldos; del
bando de 1368 las cifras {14], {15) y {16)] del bando de 1377 las cifras
{19), {20), {21), {22) y {23)-, el bando de 1383 ó sea cifra {29) y el que con-
tinuamos con la cifra [31) modificación de la {28) de 1378.
(31).— ítem que algún reuenedor o poller per si o per altre persona
no puxa comi:)rar ne massicaiar dins los termens de la dita Ciutat ne-
guna cassa o uolataria porcells o cabrits formatgeria o ous. Empero si
lo dit poller o Reuenedor jjer si o per altre uolra fora los dits termens
anar o tremetre que ho puxe fer axi empero que la dita uolateria o
cassa o altres coses damunt dites haia a vendré publicament e palesa
a la sua porta o en les places de la dita Ciutat per si o per sos com-
panyes a totes persones qui comprar ne volran per lur propi vs e no a
persones qui les vuUen per revendré. E qui contra fara pagara per
ban cascuna vegada X sous.
AÑO 13S9.— Establécese el siguiente bando cifra {32).
(32). — Ara hojats per manament del Mosta^aff ordonaren los Conse-
llers e promens de la Ciutat que algún reaenedor o Reuenedora ni
qual seuol altre persona qui tenga cassa o volatería per vendré en les
places o altres lochs de la dita Ciutat no gos sofcrir ni en alguna ma-
nera dar loch que la dita cassa o volatería sia ríl'fada ne jugada en
lurs taules o obradors. E qui contra fara perdra la dita cassa o vola-
tería qui trobada sera en son poder, de la qual haura la ter^a part lo
acusador. — Retenen se empero etc.
AÑO 1390, (20 DE Kj>í ero).— KejHt ese el anterior bando fifra {32).
Año 1393, {22 m: Diciembre). -Fioblicase del 1378 las cifras {24)
148 F. CARRERAS Y CANDI
con ¡yena de. ñO sueldos, j^rivación del oficio en caso de reincidencia y
multa de 100 sueldos si aún usase de dicha profesión; {26) y (27) en la
forma modificada según continuamos con cifras (33) y (34); del año
1349 las cifras (5), {6) y (7j esta con multa de 10 sueldos; las {14) y {16)
del 1368; la {32) del 1380; y la {20) del 1377 con multa de 20 sueldos.
(33)._Item (|ue negun deis dits poUers o Reuenedors, sis vol que
sia hostaler o no, no gos acullir, de die o de nit, alcun pages o altra
qualseuol persona de defora, qui port en la dita Ciutat, caga, volatería,
cus, formatges, porcells, o cabrits, e ago per esquinar fraus e dans
(juis poden venir ais singulars de la dita Ciutat, sots ban de perdre
totes les dites coses, les quals per 90 sien perdudes al dit poUer o Re-
uenador qui lo dit pages o altra persona de defora haura acuUits, e no
al dit pages o altra persona de defora: e que lo dit poller o Reuenador
los haia a pagar e satisfer encontinent, aytant, com volran, al dit pa-
ges o altra persona de defora. E no res menys, que pach per ban
XX solidos.
(34).- ítem mes ordenaren los dits Consellers e prohomens que
algún pages o altra qualseuol persona de defora la dita Ciutat qui
a port per vendré de les dites coses en aquella no puxe vendré o fer
vendré en alguna manera en la plaga del Oli la qual es estada assig-
nada tant solament a vendré ais dits pollers o Reuenadors, e ago per
tal quel dit pages o altra persona de defora nos puxe mesclar ab ells
com per raho de llur mesclament sen seguescha gran desordonacio,
frau, e dan ais singulars de la dita Ciutat ans los dits pegesos e altres
l-ersones de defora ho hagen a vendré o fer vendré e descarregar e fer
l>ortar dreta via a la plaga nova o a la plaga del born e aqui vendréis
publicanient. E que en algún hostall Albercli o casa no pusque ne dcge
entrar sots ban de perdre totes les dites coses c de pagar XX solidos.
Entes empero que entrant en la dita Ciutat e anant a les dites places
o plaga puxen uendre de les dites coses a tot hom quen vulla comprar.
Declarat encara que puxen vendré e teñir de les dites coses en la plaga
del blat en la forma e manera acustumades.
AÑO 139* ó 140*, (documento sin ieclm).- Siendo mostacaf de la
Ciudad Antoni Sala, promulgóse el siguiente bando después de esta-
tuirse que las perdices se vendiesen a 1 sueldo y los conejos á 10 dineros.
(35). — ítem ordenaren los dits Consellers e prohomens que daqui-
auant algún Reuenedor o poller qui tingue hostal no gos ne li sie licit
ue permes de acullir de die o de nit alguna persona strangera o altra
qui aport alguna cassa o volataria de defora en la Ciutat de Barcelona,
sots ban de XX solidos e de perdre la dita cassa o volatería, la qual
cassa o volatería haie a pagar lo dit hostaler a aciuell daqui seria en-
continent al for que aquella jornada valria, a coneguda del Mos-
tagaf.
ASos lo'Jl y 1307. - Fur proniiil¡/<i(ln la siguiente disposición.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDL\ 149
(36).— Die martis Tercia mcnsis Julü anno a natiuitate Domini
M°CCC" Nonagésimo Séptimo per Petrum oliuerii.
Ara hoiats per manament del Mosta9af. Que com en lany
MCCCLXXXXIIII. Los honorables Consollcrs lo dit any do aquella .-ib
prohomens fahessen vna ordinacio qo es que algún pages o altra qual-
seuol persona defora la dita Ciutat qui aportas o mates dins la dita
Ciutat (.¡alunes, perdius, capons, Todons, conills o altra volnteria o
ca^a, o ous, o formatjes, no gosas, per alguna raho o causa, entrar no
passarne atornar de dia, dins la pla^a del OH, ne en los hostals o al-
berchs o cases qui aqui son, portant en si mateix o sobre bestia, ne
fer portar, algunes de les ditas coses, sots cert ban. E ara los honora-
bles Consellers e prohomens de la dita Ciutat, per certes e justes
rahons en fauor deis pagesos defora e altres persones, hagen reuocat
tota la dita ordinacio e ban. Per (jo lo dit Mostapaf ab veu de la presen t
crida notifiquen a totes les dites persones la dita Reuocacio portal que
sapien que no son tenguts de teñir e seruar aquella.
Año 1397, (17 Noviemere).- Estatúyense los siguientes bandos.
Die Sabbati XVII Nouembris Anno a natiuitate domini Millesimo
CCC«XC° Séptimo.
(37). — Ara ojats per manament del veguer: Ordonaren los Conse-
llers e prohomens de la Ciutat: Que tot hom qui metra, metre fara,
dins la dita Ciutat, Ca9a o volatería, pach e haja a pagar, be e leyal-
ment, la imposicio qui posada hi es, ais compradors o cullidors de
aquella, sots ban do perdre la dita Ca(;a o volatería; de la qual sera
guanyada la moytat a la dita Ciutat, e laltra meytat ais compradors
de la dita imposicio.
(38). -ítem que tot hom qui metra o metre fara, de la dita Ca^a
o volatería, per mar o por torra, aquella haja a metre publicament o
no amagada, e per los lochs o camins publichs e acustumats, e a 90 per
no defraudar la dita imposicio, sots lo dit ban.
(39) Ytem que tot hom qui metra o metre fara de la dita (^aca o
volatería per mar o per torra, segons dit es, haja a fer sagrament en
poder deis dits compradors o cullidors, tota vegada que per ells ne sie
request, de dir veritat de 90 que interrogat sera sobre les dites coses,
sots lo dit ban.
Retenentse empero los dits Consellers e prohomens etc.
AÑO 1399 (7 DE Enero) —Autorizase para vender los domingos.
(40) Encai-a mes ordonaren los dits Consellers e prohomens: Que
tot pages o altra qualseuol persona defora la dita Ciutat, puxe vendré
tota capa morta, los dies deis diumenges, e altres, en les places del
born e nona de la dita Ciutat, no contrastant qualseuol ordinacio en
contrari sobre aQo feta.
Año '[4A8?— Este bando, sin fecha, viene transcrito en el volumen de
1390 á 1458, á continuación del datado á 1 de Febrero de 1448.
(41) Ytem ordonaren los dits Conssellers et promens corregint he
150 f. CARRERAS Y CANDI
esmenant vna altre ordinacio et pubbliquada per los lochs acustumats
de la dita ciiitat per raho deis f ors de la cassa e volotaria qui sera ve •
nuda en la dita ciutat per los pollers he ostallers, c a aquela anadint
que daquiavant los dits pullers, tanders e hostallers agen et sien tan-
guts de vendré los colóme roqners qui no eren conpresos en la dita
ordinacio ne aforats segons era aff orada altre cassa e volotaria al for
de les xixelles, qo es a raho de VIH diners lo parell e no mes avant.
E axi mateix per cessar alguns abusos quis seguexen en la venda de
la Cíissa e volotaria que daci avant en totes vendes quis faran de cassa
e volotaria sien entesos e compresos tots he qualseuol pagesos et fores-
ters, segons hi son entesos pollers tanders et hostallers, en tal forma,
que per alguna via directa ho indirecta, aquells^ qui vendrán o reuen-
dran de la dita casa ho volotaria, no puxen ne guosen mes aver ho ro-
bre deis fors que les ditas casse ho volotaria son estades afforades, sots
ban a caschu per cascuna vegada que sera contra fet de XX solidos
et de perdre la volotaria o cassa qui en altre forma sera veñuda.
Años 1461 y 1466. — En ambos aTios promulgóse esta disposición:
(42) Ara hoiats tot hom generalment per manament del honorable
en Guillera farrer, Mosta(;aff de la Ciutat de Barchinona, per vtilitat e
bon stament de la cosa publica de la dita Ciutat, e per extirpar alguns
abusos ques fan es farien per auant, si noy era prouehit, en gran e
euident dan del publich de la dita Ciutat, euadint e effagint a altres
ordinacions sobre a^o fetes en lo passat. e en aquellos no proiudicant
ans romanent en lur for^a o valor: Ordonaron, los honorables Conse-
llers o promens do la dita Ciutat, que daquiauant algún pollor o polle-
ra, Reuenador o Rouenadora, o altre qualseuol persona, qui volra
comprar gallines, capons, perdius, polis, todons, xixelles, conills, o
altre volatería e cassa, cabrits, formatges, ous, o altres qualseuulla
vitualles per reuondre, no gos, no li sia licit ne permes, comprar de
algunos do les ditos coses dins los termens de la dita Ciutat ne fora
aquells, de pagesos o pageses o altres persona o persones qui fossen en
camins o portassen ja per vendré en la present Ciutat les ditos volate-
ries cassa o altres vitualles sots ban a quescu o per quoscuna vegada
que sera contrafet do XX sois e de perdre lo que comprat haurien de
les dessus ditos coses. - Del qual ban haura lo Mosta^aff les dúos
parts e la ter^a part lo acusador. — Rotenontse empero los dits Con-
sellers e promens poder etc. -Ffou publicada la dita ordinario a
XXXI de Juliol del any MCCCCLXL— Ffou reiterada n VII de Maig
any MCCCCLXVI stant Mosta^aff lo honorable Mossen Romou lull.
PALOMAS Y PALOMARES KN CATALUÑA E\ LA RUAD MEOIA 151
GüOSflRiO DE VOCES POCO COmÜHES
Abreviaturas =Adj. adjetivo; Adv. adverbio; d. documento del apén-
dice; n. nota; p. ¡fagina; S. sustantivo; V. véase; Verb. verbo.
Abayador. — V. bayador.— d. XXVIII.
Abaroiiat. — Adj. abarrotado.- n. 91.
Abeylar.— S. Sinónimo de «abellar», colmena.— n. 263.
Acaptls.— S. fórmula latina de «acaptcs», adquisiciones, — n. 242.
Adempraiuentis. — V. emprius.— p. 90, n. 248.
Adeniprivis.— V, emprius. — N. 242.
Agranar. — Verb. echar granos en el suelo para capturar pájaros.—
n. 267, d. XV.
Aforar.— Verb. tasar.— d. XXX (41).
Alberch.- S. vivienda — n. 232; d. XXX (i) (26) (34) (36).
Alelare. — V. auciure. — d. XII.
Alcofoll. — S. antimonio. — n 311.
Alodio.— V. alou.-n. 242 y 245.
Alón.— S. propiedad inmueble.— n. 232.
Alouetat.— V. alou.— d. XXIV.
Alvearia. — S. árboles del Pirineo ¿cuales?— n. 277.
Ancnir. — V. auciure. —d. IX.
Anedes.— S. ánades. — d. XXX (11),
Anets. — V. anedes.— n. 116.
Apatiamcut.— S. compromiso. — d. XXX (24) (25) (28).
Apatía r.— Verb comprometer ó dar palabra.— d. XXX (24).
Apendício. — S. en catalán oapendís» ó «pendís», pendiente ó rampa.
Se aplica en la orografía.— n. 24, 28, 137, 141.
Apaloiuat. — Adj. aplicado á la torcaz ó á otra ave, cazada con las
«palomeras o . — p. 112, 113.
Arch de rotllo.— S, el arco sencillo de echar flechas.— n. 301.
Aree. — S. sinónimo de «era» tierra inculta, yerma, campo raso: «par-
tim terre cuite et partim aree».— n. 216.
Aréis.- V. aree.— n. 141, 241.
Areny.— S. cauce.— n 232.
Ariie». — S. colmenas.— n. 220.
Arradres. — S. aradas «que en la bassede puga dit comprador fer
arradres pero sie obligat donarne quiscun any tres a dit venedor».
-d. XXV.
Artifici. — S. ingenio mecánico.— d. XII.
Artiga. — S. monte cultivado por vez primera después de cortado el
bosque.— p. 52, n. 294, d. XIX, XXVIII.
152 F. CARRERAS Y CANDI
Ancinre.— Verb. matar.— n. 267,
Avelar.— V. velar. -d. XXVIII.
Aveiitatge. — S sobresueldo ó propina. —n. 95.
Avíncncn.— S. convenio. — d. XXX (24).
Aaempiins.— V. empriu.— p. 90.
Bagnda. — S bebedero, —p. 107.
Kan — S. multa y bando.— n. 280, d. XXX.
S.lannis.— V. ban.— n. 242.
Ballestejar.— Verb. cazar con ballesta.— d. XXX (d.).
Barbolacla.—S. palabra orográfica de desconocido significado. — p.
53, d. XXVIII.
Baroiis — S. aplicado á la náutica ¿barrotes? «timons abaronats de
nou barons cascun». — n. 91.
Barciiaria, barquera ó barqaina. — S tierra de sembradura
«barcharia qui est seminata de ordio». — n. 163, 174.
Bassedc — S. aplicado á la orografía; al parecer, hondonada,— d.
XXV.
Batncis.- S. en catalán c<batudes«: derecho feudal de prestar algunos
jornales en la época de la trilla.— n. 242.
Bayadoi'. — S. aparejo importante en la caza por medio de palome-
ras, seguramente el árbol en cuya parte superior se escondía uno
de los cazadores «retento nobis quendam eulinam qui est in caput
dicto troció terre quam retino per fer bayador» (314). -p. 52,
53, 55; d. XVI, XVII, XXIV.
Bayar.— Verb la acción de utilizar el «bayador-* en la caza de tor-
caces «bayar, velar y tallar arbreso.— p. 52; d. XXII, XXIV,
XXV ri.
Bayor.— S. ¿el «bayador»?— p. 54.
Bayeriis. — S, véase bayador. — d. XXIII.
Bigota.— S empleado en náutica — n. 91,
Boríli«.— S. en catalán «bordas»: corrales apartados de las viviendas.
— n, 166, 248.
Bnchs — S. colmenas — n 220, 259.
Caldera.— S, para reverberar la luz y cazar de noche distintas aves.
— d. XII, XIII.
Caldero.— V. caldera.— p. 105.
Calonlis. — S. derecho feudal poco precisado y conocido. — n. 242,
Canabaris. — S. en catalán «canyamars»: lugares donde se siembra
cáñamo.— n. 127.
Cancnll. — S. aparejo para cazar aves.— p 97, d. Xíl.
Caperolis. — S. en catalán «cabrits*, cabritos. — n. IIG.
(314) 14")7 (I de Dic¡6mbre\ Venta hecha por Bernat Ferrer (á) Vilaret á PerePran-
cesch de un boBqno llamado <albareda del gorch» en S. Hilari, perteneciente al más
Vilaret (^/((«Haí 145t ntque 1159, aroh parroquial de S. Hilari (,'a-calm).
PALOMAS Y PALOMARES KN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 153
Carnalagils. — S. en catalán «carnalatges», derecho feudal consis-
tente en el diezmo pagado por la venta de las carnes.— n. 242.
Cartls. — S. derecho feudal desconocido. — n. 242.
Caíialíciis — S. en catalán «casáis»; edificios. — n. 182.
Castaycda.— S mejor «castanyeda>^; castañar — d. XVII.
Castellare — S. en catalán «castellnr,) fortaleza que no es c<castrum9
por carecer de jurisdicción territorial. — n. 48.
Cavalcatis. — S. en catalán « cavalcades » expediciones guerreras de
corta duración, esto es, por un día y en un solo término ó lugar. —
n. 242.
Cayrels.- S. flechas con punta de hierro, —d. VI.
Cembell.— S, aparejo para cazar aves preparado con liga, en la cima
de los árboles.— p. 104, d. XI.
Cenderes. — S. redes especiales para la c^za de liebres y conejos. —
d XIII .
Cepis.— S. en catalán «cebeso, cebollas.— n. 116.
í'imbell.— V. cembell.— p. 96.
CívadariboB.- V. civaderio. — n. 248.
C'ivaderio.- S. ¿lugar sembrado de cebada? — n. 261.
Cofre. -S. erario. — d, XIII.
Coloinó».— Adj. ¿?— p. 65, n. 110.
Coinellar. — S. derivado de «coma» y con igual significado orográfi-
co, de eminencia redondeada.— n. 57.
Contrafer.— Verb. contravenir. — d. XV.
Cortinis. — V. curtinis. — n. 140.
C.ívlnenca.— S. convenio.— d. XXX (24) (25).
Creberiis. — S. en catalán creuheres: aparejo hecho con palitos eü cruz,
para caza de aves. — p. 55, d. XXIII.
Cullidor. - S recaudador. - d. XXX (37) (39).
Cnrtalis. — S. diminutivo de «curtes», corrales.— n. 124.
Cnrtinas. — Véase «curtalis». — n. 28.
Cnyranií» — S. cueros. — n. 311.
Defesia.— V. devesa.— n. 279.
Despareyar. — Verb. desaparejar.— d. XXX (j).
I>e8pertada. — S. el toque matutino de la campana. — d. XXX (11)
(3) (4) (11).
Devesa. —S. y también «defesa», dehesa. — p. 88-, n. 238, 242.
Disrnptls. — V. ruptis. — n. 127.
Doiiiengiis -S. en catalán «domenges», dominios. — n. 242.
Doniinicataris.- V. domengiis? — n. 242.
Eariis —V. aree -n. 133.
Efagir.— Verb. eludir — D. XXX (42).
JBinpria. — S uso ó aprovechamiento.— p. 90; d. XXVIII, XXIX.
Kncés. — S. manera de cazar de noche y con luz.— p. 96, 104; d. IX.
I^nee. — Adj. era así calificada una antigua moneda. — d. I, III.
154 t. CARRERAS Y CANDI
JEntreforch.— S. encrucijada. -n. 215.
JEra. — V. aree— n 28.
Ki'ba. — S. empleado en náutica, jarcia?— n. 91, 92.
JErbagar. — Verb. ó mejor «erbeyar», pacer. — n. 238.
Rrbaricí». — S. en catalán «erbatges» pastos. — n. 242.
Eréis. — V. aree. — n. 140.
Ertignes.— V. artigajh-d. XXIX.
E«icn<leIIes. -S. fuentes de cerámica.— p. 115.
Espallleres.— S. hombreras de hierro para guerrear.— d. XI.
Estraiiy.— Adj. forastero.— d. XXX (d) (e) (17) (24).
Eiilina. — S. encina.— p. 152.
Exercitibas. — S. derecho feudal de ejército, ó sea de seguir al Señor
bajo su bandera.— n. 242.
Fageda. — S. bosque de hayas. — d. XXIV.
Faragiue— V. ferregenal. — n. 171.
Ferregenal.— S. herrenal.— n. 191, 200, 201, 206.
Ferregenalis».— V. ferregenal.— n. 168, 169, 170, 173, 198.
Feí-reginal. -V. ferregenal.— n. 212, 232, 242.
Fictorio.- rf. piedra hita?— n. 48.
Figera». — S. paredes de tierra.— n. 179, 193.
FU de ballestea. — S. cuerda de cuero con que se armaban las ba-
llestas.—p. 47.
Fil de cosir sarries. -S. cuerda de esparto resistente.— p. 47.
Fil de gnarnir garbells.— S. cuerda de esparto de la consistencia
necesaria para armar haces. — p. 47.
Filat.— S. red de caza.— p. 96, lOi, 105, 107-, n. 267; d. XI, XII,
XIV, XXVIII.
Filat de palomar. — S. red para cazar torcaces. — p. 47; d. XXII.
Fines.— S. fronteras, lindes.— n. 113, 148.
Firniainentis. — S. la firma puesta por el vasallo demandado por su
señor de estar á las resultas de lo que fallare el juez.— n. 242.
For.— S. tasa.— d. XXX (41).
Forlscapiis.- S. derecho feudal, consistente en la concesión que
hace el señor al vasallo en virtud de la facultad de alienar el feu-
do.-n. 248; d.XXIV.
FojcciU. — S. derecho feudal que quizás tenga que v-er con la cons-
trucción ó guarnición de las fortalezas —n. 242.
Forgcs. — S. una clase de aves acuáticas. — p. 112.
Formatgeria.— S. reunión ó conjunto de quesos.— d. XXX (31).
Frauchcdís. — S. alodio libre de señorío. — n. 138.
Fraiicolí. — S. perdiz cuya casta se ha extinguido en Cataluña, en la
Edad Moderna. - d. XII, XIII, XV.
Fregliials.— V. ferregenal. — p. 74.
Fretnrós.- Adj. escaso. — d. XII.
Fustejar.— Verb. cortar leña gruesa en el bosque.— d. XXIX.
PALOMAS Y PALOMARES E\ CATALUÑA EX LA EDAD MEDIA 1^5
<i<ansadani y g^ansatani.— S. conjunto de Añades.— n. 221, 222.
«aprici». — S. en catah'm «garrigas», carrascales.— n. 30;, 31, 127, 139,
143, 11(4.
<n»rri«;arii«i. —V. garricís. — n. 127.
iiíavarra. — S. cordillera. — d. XXX (n).
<¿¡.- V. giny.— d. XXX (e).
^liiniiütadaM. — S. retamares.— n. 60.
Iiíiiiy. — >S. ingenio.— n. 201..
Cjiradn.— S. en catalán «grano: cnnibre llana, con su ladera escarpada
y prolongada. — n. 79.
Cirens. — S. palomina?— n. 231.
Cwaaello. — S, en catalán «guadell»: pequeño vado.— n, 174.
<jrai8a.— Adv. modo ó manera. — n. 267.
ínuinenes. —Cuerdas gruesas empleadas en las naves. — n. 311.
triittas.— V. guttis.-n. 198, 201.
tJattis. — S. tejado por donde discurren las aguas pluviales.— n. 130,
182, 206; d II.
Holinatello. — S. en catalán «olmatell» ó -i-aumatell»; bosque de ol-
mos.— n. 200.
IiiipIanniKt.— 8. en catalán sería «impla»: lugar no llano, ó montuoso.
— n. 194.
Inveiic¡oiiis.~S. en catalán «trobcs»; derecho feudal consistente en
la participación del señor en los hallazgos que se hacían en el tér-
mino de su jurisdicción. — n. 242.
Jo vis. — S. en catalán ojovao: derecho feudal consistente en la pres-
tación de un jornal de laboreo con un par de bueyes.— n. 242
JLadonchs. — Adv. entonces. — d. XII.
I^anró. — S. la labor de los campos. — d. VI.
Liinearis. — S. en catalán «llinars», cainpos sembrados de lino. — n. 127.
liunari.- S. lunario ó calendario — n. 99.
l^lorigaes. — S. corazas. — p. 61.
Madira.— S. construcción rural? «casales cum ipsa madira, parietes^>
etc.— n. 199.
Mancniso. — S moneda de oro.— d. I, II, III.
JUansalis. — S. habitación rural. — n. 248
Maiiisiones. — S. en catalán «arnés ó buchs»; colmenas.— n. 145, 220,
ülansfnngalas — S. casitas ó cabanas. — n, 135.
Jflasiqueyar.— Verb. comprometer.— d. XXX (^14) (31).
Matras. — S. flecha de madera sin hierro alguno, más lijera que las
otras y que se utilizaba para la caza. — p. 375; n. 243, 306; d. VI.
Matrassouat.— Adj. derivado de ^anatrás» y que se aplicaba al ani
mal muerto con dicha flecha de caza.— p. 113.
MatresBoaat. — V. matrassouat. — p. 112, 113.
ülatxaisisal. — V. matrassouat. — p. 113.
llesclauíent.— S. confabulación ó consorcio. -d. XXX (34).
156 F. CARRERAS Y CANDI
HondanticiH. — S. derecho feudal poco conocido; parece era el de in-
tervención del señor en las mediciones de los trigos en el mercado,
-n 242.
]?Iostacaf.— S. almotacén. — p. 108.
IVatnra — S. nacimiento, origen. — d. XII.
Noscaiv — Verb conocer. — d XIÍ.
J^oveiiie».— S. dei-echo feudal, que, á semejanza del avuyté» consistió
en la novena parto de los granos. — n. 242.
Obliis. — S. derecho feudal consistente en la oblación de pan hecha al
Señor en ciertas solemnidades, — n. 248.
Ociare.— V. auciure — E>. IX.
Olines.— V. eulina.— D. XXI.
Orrea.— V. orreo — n. 144.
<»rrett.— S, en catalán «orri»; conjunto diverso.- n. 24, 28, 134, 140.
Pahoner.— Adj derivado de «pahó» pavo-, aplicado á palomas que
son en algo semejantes al pavo. — p. 111, 112; d, VIII.
Palasaiuent.— Adv. mejor dicho «palesament»: descubiertamente,
-d. XXX(5).
Palés (á).— Adv. al descubierto, ó á la vista— d. XXX (i) (16) (31).
Fallomar.— V. palomar verb.— d. XXIX.
Palinerola. — V. palomerola — p 60.
Paliiierots — ¿palomerolas? — p. 60,
Pnloiii. — S. ¿palomo?— p, 50,
Paloiiiador.- S. el que caza palomas con redes.— p. 51, d XXIV.
Pa'omadiirais. - S costuras de las velas de los buques.— p. 61.
l»aIomar.— S. en catalán más comunmente dicho «colomer»: cons-
trucción destinada á palomas,— p, 48, 49, 50.
Palomar.— Verb la acción de cazar torcaces con redes. — p. 46,
47, 107; d. XXI, XXV.
Palomar (lil de),— Adj bramante. — p. 47, 48; n. 19.
Palomario.— V. palomar S.— p. 49.
Palomars.— Adj. fe aplica á torcaces cazcidas en las palomeras.— p.
113.
Palomas,— S. pieza perteneciente á los buques,— p 60; n, 91.
Palomer. — V. palomar S, — p. 50,
Palomer.- S. el que cuidaba de las velas de los buques. — p. 61;
n. 95.
Palomera.— V. palomeras.— p. 59, 60.
Palomeras —S. cañada en las montañas preparada para cazar tor-
caces con redes que se colocaban artificiosamente en su colindo ó
cumbre. — p. 51; d. XVI á XXVIII.
Palomerüs matiuals.— S. cuando la caza de palomas se preparaba
en las madrugadas. — p. 53; d. XXIV,
Palomeras vesprals,- S. cuando eran aparejadas para cazar tor-
caces á la caída de la tarde.— p, 53; d. XXIV.
PALOMAS Y PALOMARES EN CATALUÑA EN LA EDAD MEDIA 157
l'aloiuerafii — S. en náutica, las velas de un buque — p. 60; u. 91, 92.
l'ulonierola. — S. son las palomeras de menor complicación en su
arreglo y tramoya.— p. 51, 60
l'alomí.— S. pichón. — p 46, 68; n 8.
l*aloinir.— V. palomar.— p 50
Palniubario.— V. palomar. ~p. 49.
l»ar.— V. parar.— n. 267.
Parada.— S. tierra de cultivo. — p. 107; n, 212, 300.
Parador.— S. el hombre que para redes ó trampas para cazar pája-
ros.-d. XXX (1).
Parament. — S. preparación para capturar algún animal con trampa.
— p. 107.
Paraiiy. — S. lazo ó trampa. — n. 369; d. X.
Parar. -Verb. poner trampas. -p. 107; n. 292, 293, 301; d. XXX (e).
Parellada.— S. extensión de terreno que puede labrar un par de
bueyes en un día.— p. 71.
Pariliata.— V. parellada.— n. 165.
Partedia.— S. lindero.— d. XXIV.
Pascáis. — S. el derecho feudal de apacentar el rebaño del señor en
los bosques del vasallo. — n. 242, 243, 248.
Perpnut, — S. perpunte.— p. 61.
Pesqneriis. — S. el derecho que tenía el señor de pescar en aguas
del vasallo.— n. 242.
Pisoationifií. — V. pesqueriis. — n. 248.
Planela.— S. ó mejor «planella», llanura pequeña.— n. 207,295
Piasent. — Adj. agradable.— d. XII.
PoIIain.— S. volatería. — p. 62.
Poller.— S. elque vende volatería. -d. XXX (23) (24) (25) (28) (29)
(31) (33) (35) (41).
Pols.-S, pollos.-d. XXX (11)
Poiitonal.— S. puente grosero.— n. 199, 200.
Portos. — S. portillos abiertos en los bosques para encauzar en ellos
las bandadas de torcaces. — d. XX, XXIII.
Prefigarat. — Adj. simulado. — d. XII.
Privat.-S. particular. -d. XXX (d) (e) (17).
Pagua. — S. lucha.— d. XII.
Poig-roviros. — S. monte abundante en «roviras» ó sea en bosques de
robles.— p. 52.
4{nadra]ii terre.- S. espacio de tierra más ó menos rectangular. — n.
163.
í^naiitqneqnaiit.- Adv. siempre y cuando. - d. XIII.
<|ne8liis. — S. los tributoa ó prestaciones señoriales.— n. 242, 248.
<{aintaiia. — S. campo de sembradura. — n. 126.
Recia.— V. rets.— n. 279.
Kedeiutioiiis.— S. derecho feudal de no poderse separar el vasallo
158 • F. CARRERAS Y CANDI
del señor, sin redimirse, de donde provenía la palabra «renienía»,
redención.— n. 242,
Keductlg. — S. parapetos.— n. 242.
Kegiiart. — S. acecho.— p. 89.
ReporíJs.— V. portos — d. XXIII.
Restelladn.-S. aguijón.— d. VI.
Kesíz.— V. rets.— n. 92.
Retis.— V. rets.— p. 107; n. 261.
Reí».— S. redes para caza. — n. 263.
Roportori. — S. indicación. — n. 99.
R<tqner.— Adj. que va por las rocas. - p. 111, 112, 113.
RiilaribnH «liscnrrencii.s —¿Cursos de las aguas? -n. 127.
Rnptis.— S. en catalán o rompudes » : primera tierra rotarada y desti-
nada al cultivo, después de ser bosque muchos años. — n. 154.
¡Sacraria. — S. en catalán «sagrera»: terreno sagrado, de trenta pasos
alrededor de la iglesia. — n. 146
IScHiaiit. — V. scutxinament. — d. XIII.
Scobar.— Verb. azotar.- d. XXX (25). •
Ncntxiuanient. — S. llamar á las perdices con reclamo. — d. XV.
Segna. — S. ave acuativa.- d. 374.
ííobiraiio. — Adj. en catalán «sobirá»; alto. — n. 163.
Solar— V. soler.— p. 79.
Molíirio.— V. soler. -n. 24, 30.
Sol «le la plana.— S. tierra llana bañada por el sol. — p. 52.
Soler.- S. lugar expuesto á los rayos solares. — p. 80.
Solero.— V. soler. — n. 113.
Sol-ixont. — S. oriente. — n. 215.
Sort. — S. tierra de regadío.- n. 214, 300.
Sostituliit.— S. sustituto. — d. XII.
Stinivar.— Verb evitar.- d XII, XIII
Staeanientis. — S. juramento que solía hacer el vasallo demandado
por su señor, al principio de un pleito', de no apelar de su fallo.—
11. 242.
Stilliclíliis.— S. canales ó desagües de los edificios. — n. 130, 2C6.
?*tllll<'inii-.— V. stillicidiis.— n. 182, 198, 201; d. II.
Stratig.- S. en catalán «estradeso: caminos, - n. 242
Taiider,— S. ó mejor «tender»: tendero. — d. XXX (41).
Terso.N.— Adj. la tercera parte de los frutos, -d. XXIV.
Tíi-íh. —8. en catalán etircs'): tierra llana que se cultiva con el arado.
-n. 227.
Todoiiar. — V. tudonar.— p. 53; d. XXV.
Toltis.— iS. el tributo indebidamente exigido, ó cobrado contra dere-
clio. — n. 212, 248.
Traginis — S. en catalán «traginos»: derecho feudal de disponer para
los acarreos, de los animales decarga que poseía el vasallo.— n. 24J'
PALOMAS Y PALOAIAKES EN CATALUÑA EN LA ED AD MEDIA 159
Trasque. — Vcrb. indicativo del verbo «tniscaí-» tmiisitc. -ii. 2G7.
Trciv— V. tirar. -p. 103; d. XXX (í;).
Trobi». — S. en catalán «trobes'): hallazgos; derecho de participación
del señor en los que hiciere el vasallo. - n. '242.
Troí»a.-S. en la náutica á una pieza de las antenas de un buque. -
n 91.
Tndouar. — Verb. andar á caza de torcaces. — p 47.
Tndoner. — S. palomar para torcaces.— p. 62, 63, 79.
'I'ud<iiicr. — S. el cazador de torcaces. — p. G.'J.
Tndoiiera.— S. fuente apropiada para servir en la mesa las torcaces,
-p. 63, 114, 115.
Uiiglc (observar á la). — Adv. al pié de la letra.— d. XII, XIII.
Uxó.— ¿?— n. 28.
Valar.— V. velar — d. XVI, XXI.
V"Ieri¡s. — S. velas para ahuyentar las aves. — d. XXIII.
Velar.— Verb. colocar velas en las montañas, para ahuyentar las
aves.-p. 52; d. XXI, XXIV, XXVll.
Verger. — S. huerto. — n. 215.
Veus.— S. veces. — d. XII.
Via iiinliierio. — S. camino délos molinos conti<ruosá la acequia con-
dal, en las cercanías de Barcelona. — n. 197.
Vilans.— S. villanos. — n. 259.
Vires. — S. flechas con puntas de hierro, -d. VI.
Viscniíi.— S. en catalán «vesch»: liga para capturar pájaros.- d. XII.
Xixella.-S. zurita.-p. 112; n. 309; d. XXX (b) (41) (42).
rP?^' t®* *# ;®^' !# :®í' ;^^^^^ !®;''' ;SÍ- ;©!!■■ ^é;-' W.- '.:'.-■ '■ '.■ '. '. ;©;■■ ;®!i: ;®!-^ K^ '®ü-' "®í- %• ;®í- ;Sg
m LLIBRE DE GEOMiNCIi POPULAR
DEL 5EGLE XIII
"•■~-í4e)Ca¿í-^"
En lo mes de Maig de 1901, estavem escorcollant, ab lo celos ar-
xiuer de la Catedral de Barcelona Mossen Mas y Domenech, nns
caxons plens d' alberans y comptes, del segles xiv y xv, dins 1' ar-
xiuet de mitja escala, de dita Catedral, quan nos sorprengué la apari-
ció d' un empolsat manuscrit, incomplert y malmés, evidentment del
segle XIII. Deu sab lo temps que geya allí abandonat y la sua aparició
fou agradosament acullida. Al fullejarlo vegerem, que, les poesíes de
son contingut^ tenien un escayent ben popular y un airós llenguatge.
Examinat mes detingudament, nostre estima puja encara al veure
confirmada la primera impresió que 'ns feu, puix se tractava d' un
antich Ilibre cabalístich popular del segle xiii deis que avans ne solien
dir mes pomposament de geomancia, paregut á les obretes, que, fins
en nostres temps, les gents baxes solen utilisar per fer la planeta, ó
endcvinar lo que succehirá á hu mateix, ó á sos amichs y parents ab
una senzilla combinació.
Lo paper del manuscrit, era groxut, pastos y sense filigrana. Lo
composaven vuyt fulls escrits a dugues columnes. Comensava per un
resúm ó index de materies, hont, no podent fer referencia á foli algún,
puix que lo Ilibre no era foliat, s' indicava un obgecte qu' aprés apa-
rexía dibuxat en lo marge del full, á dugues tintes, negra y vermella
y escrit en la capsalera del capítol. Aquestos noms eren tots trets de
qualitats personáis ó de noms de besties. No tenien lo carácter caba-
lístich ó simbólich que presentaven estos enunciats en Ilibres consem-
blants del segle xv, segons apar en lo donat á conexcr per Juli Ca-
mus, procehint de Namur, hont b' hi indica ven per páranles hebrai-
ques corrompudes (1).
(1) Un manuscrit namurois du XV' siécle es nomenat 1' estudi que publica, en 1' any
1895, lo distingit catedrátioh de 1' universitat de Turín, Juli Camus, en la Revtie des
vm n
162 F. CARRERAS Y CANDI
Lo m. s. de Namur no limitava la sua part misteriosa, á estes ex-
presións descone^udes; sino que, en diferents llochs, les páranles
venien escrites en cryptografía fácil de transcriure. De tot lo qual, res
hi apareix en lo nostre senzill m. s. barceloní. Los capítols comencen
ab majúscules ornamentades y pintades de vermell, á mes del negre
de la tinta ordinaria. Los versets teñen al marge una numeració en xi-
fres romanes y en tinta vermella. En son text se fá referencia á guari-
do de malalts, retorn d' absents, guanyar pleyts, batalles ó empreses
mercantivols, Ilibertat de presoners, haver pobresa ó riquesa, etc.
Aytal contingut resulta semblant, al de cert Ilibret d' época molt
propera á la del de la Catedral de Barcelona^ puix se creu fet pels
volts de 1' any 1300. Tant sois lo judicara per sos enunciats, que es lo
únich que 'n publica Paul Meyer (1), al donarne lleuger compte. Era
escrit en llengua proveuQal y havia pertingut á Estienne Charmoy
apotecari de Lluis XI y capitá de Mailly-le-Chateau, (arr. d' Auxerre)
Diu lo prólech d' eix Ilibre, avuy conservat en la Biblioteca nacional
de París (nom. 14771 del fonds frangais):
I Si viura aquest efantz ó no el I gras d' Aries t'er dig
][ Si l'er bo que fassa benda d'aquela causa. . . el II gra d' Aries t'er dig
III Si aquesta vía sera bona el III gra d' Aries l'er dig
IIII Si aquest antz (¿efantz?) er granatz el I gra. de Taur t'er dig.
V Si aquest hom aura efantz el II gra de Taur t'er dig.
VI Si aquest malautes guarra el III gra de Taur t'er dig.
VII Si aura aquela molher que quer el I gra de Gemiai t' er dig.
Igual semblanga presenta lo manuscrit de Namur del segle xv, se-
gons ho comproven les seguents ratlles, escrites en prosa sen^illa^ ab
les que comenga y fineix:
GOZAL I
Li enfes vivera et si sera de boins m[...]es plains.
La chose perdue ou erablee sera recouvree.
Tes amis t'aime de tres boin caer.
La hayne et la discorde sera en bonne paix convertie.
Ton soinge se convertirá en bien.
languei romanes (IV serie, volum VIII, pl. 27). Se compon aquesta obra de mós de 400
pronÓ8tioh8, repartits en 38 agrupaoións, de les que, quisouna está precehida d' una de
les páranles seguents, que semblen, en sa major part, alteracións de noms hebr&iohs:
Gosal, Zona, Chore, Duzon, dorsal, Cother, Aruagon, Mery, Guyra, Thoas, Salaph, Arhry,
Azera, Effre, Sadoch, Gaap, Jhecye, Caleph, Janon, Zalen, Esdre, Oyia, Heth, Canon, Raboth,
Arioth, Saphet, Caph, Barachis, Balach, Nason, Syna, Gobal, Abron, Enon, Oreb.
(1) En son trevall Traites en vera proven^aux sur V astrologie et la geomaueie pnblicat
en Komania recueil trimestriel consacré á l'étude des latigiies et des lüteratures romanes (any
1897, pl. 223), Meyer fa relaoió de diferents tractats d' algoriame, astrologia, calendaris,
gíomancia, quiromancia, adivinado per figures de formes esfériques, etc., pertooant
ais segles xiv y xv.
VN LLIBRE DE GEOMANCIA POPULAR DEL SEGLE XIII 163
Chils que tu pense vit et briefen orras nouvelle.
Tu gaigneras le plait contre ta partió.
L¡ fuitif revenra bien briel.
Les nouvelles sont vraies et se convertiront en bien.
La terre que tu tiens tu le tenras longement.
Ne íais nulle mutación de lieu en aultre.
Le povre nenrichera pas pour son labeur.
ZONA 11
Tu gaingneras a grant paine et ensuit ? tu perdras.
Li enfes será sains et haitiez mais sa vie sera brieve.
La chose perdue ou emblée sera retrouvee.
Tes amis te luit et si ne taime mic.
La discorde sera plus grande quelle na este, puis sera paix.
Ton soinge sera proufitable a toy et a tes amis.
Chils dont tu penses est malade.
Ta partie perderá le plait.
Li fuitis revenra au lieu.
Les nouvelles se chambgeront
De la terre que tu tas acatee joyras en bien.
Ne fais nulle mutación de lieu en aultre.
EUON XXXV
Tes amis taime de bonne amour.
La paix se fera.
En ton soinge a plus de mal que de bien.
Chils vit, mais il est malades.
Par apointement sera li piáis finís.
Li fuitif revendrá.
Les nouvelles sont vraies.
La terre achatee sera proufitable.
11 fait bon aler de lieu en aultre.
Le povre arra legerement de sa povreté.
Chils dont tu pense est en joie et en santé.
Li prisonniers sera delivrez.
OREB XXXVI
La chose perdue ou emblee ne sera pas restituee.
En ton ami ne dois avoir fiance car il est faintif.
La paix se fera.
Ton soinge at boine signifiance.
Chils dont tu pense vit en Jangheur.
En ton plait aras dompmage.
Li fuitif ne revenra paz.
Les nouvelles ne sont pas vraies.
Eq la terre aras dampmage.
La mutación de lieu en aultre n'est pas perilleuse.
164 F. CARRERAS Y CANDI
Le pauvre legierement enrichira.
Chils est malades aulcunnement.
Explicit.
Lo Ilibre barceloní consta de vint capítols (deis quals tant sois se 'n
conserven los catorce primers) y los capítols, están á son lloch compo-
sats de vint versets. No 's parla en ell, de com se devía fer lo tiratge de
la sort, donantho per sapigut. Naturalment que sería per qualsevol deis
mijáns vulgars de que se solien valer en los temps semievals, y que ve-
nen exposats en altres tractats do geomancia. Segonsrelació que fá Paul
Meyer, deis qu' examina, podía efectuarse obrint qualsevol Ilibre á la
ventura despres de fer oració y segons fós la primera lletra ab que
comensava, consultar á. la planeta; com també acudir á la sort ais sig-
nes del zodíach, etc.
Per lo que pertoca al segle xv , nos diu lo traetat qu' estudia Juli
Camus, que s' ha de consultar previament la cosa que 's vol saber en
la batalla de preguntes (1). En aquesta Qomplicsiáa batalla, s' advertía,
que no 's devía preguntar res de que no s' en tingues necessitat, ni co-
ses ja ben sapigudes per endevant^ ó impossibles de realisarse.
(l) Quiconcques voelt avoir la cotjnissunce de ceste science doit tout premierement aviser
en la bataille des. questions quel coze. il voelt scavoir el puis apres le fourmer a laventure en
nng peu de parchemin ou de papier 4 ligues de poins en tele maniere que cascune ligne du mans
corUiegne 12 poinspour la cause des 12 signes dont la 2"^" ligne soit pilus loinge de tontea les
aultres
(l.^^ratUa) (2ij punts)
(2.»ratlla) (29 punts)
(3.»ratUa) (24 punts)
(4." ratlla) (¿7 pnnts)
Et quant tout ce aras fait tu commenceras au debout de la hasse liQne a compter les poins
en montant amont. Et le 12 semper.... ou ensigneras dung peu d' inchre ou daltre chose, si come
il appert droit qui en figure
(l.^ratUa) (28 punts)
(á.'ratUa) (30 punts)
(3.* ratlla) ' (27 punts)
(4.* ratUa) ^ (28 punts)
Et j^uis apres le compte de vos poins consideres quans poins vous soñt demourez, quiñón
possunt ascenderé jusques a 12 Et sil y at 1 ou 2 ou 3 ou 4 et ainsi jusque a 12, en comptant
12. 12 mesticr est. Vous compterez depuis le theume de vostre question en descendant aval et
en recommenchant amon a la premiere question se me stier est. Et ou le nombre de vos peina
seront voua trouverez ung nom grecque duquel le 4" ligne ou la 12 ou la premiere et ainsi des
aultres nombre selonc le nombre des poins qui demeures vous sont ou de chose qui soitimpos-
sible, et ainsi responderá a vo question. Et devez scavoir que on ne doit pas faire question, se
on n'en a parfaite necesaité, ne de chose que on scache bien, ou de chose qui soit impossible.
Et ainsi, par la grace de Dieu, avons mis de latín en f rancháis le liure de phyzonomie, le li-
vre de chiromanchie, le livre de V exposition des soinges, et le livre ax>pellé Gromancie, liquelz
en soit loivez et bents in sécula secnlorum. Amen.
Chi fine le livre appellé pettte Gromanchie.
ÜN LLÍBRE DE GEOMANCIA POPULAR DEL SEGLE XIII 165
En quan á La nostre obreta catalana del segle xiii, no tant sois se
podría seguir algún deis indicats procehiments, sí que també altre de
diferent, que 'ns ve mostrat per la xifra 20, que constitueix lo nombre
de capítols y lo de les rcsposies en quiscun d' aquestos. Si 's tractava
donchs, de fer lo tiratge de la sort per mija deis daus, á que tant aft-
cionat estigué lo poblé mitjaeval, la combinació no pot esser mes
manifesta: ab cinch daus, havent quiscun d' ells quatre cares numera-
dos de 1,2, 3, 4, y dugues cares en blanch, lo joch resulta. També
podía ferse lo tiratge ab tanta ó major sencillés ab los naips.
Entre les altres mañeros de consultar la planeta, de que parla en
Meyer, rctraurém un tractadet en prosa provenQal, escrit en la prime-
ra mitat del segle xv. Sois crehem necessari ferne conexer lo seu co-
menpament (1). Tot ell presenta un carácter mes científich:
Aisy es la manera de lar la sentensia Je la sort. Premyerament, regarda la figura
premyera que trobaras II LXIII ves aquellas que te playra. Aysi es la significansa
de las VII planetas: Saturnus sobre las malauties es alongament de malauties e pau-
retat e prezon e caytivier, e servis sobre los viels e totas cauzas en esperansa, en
eysin cotn si demande per I malaute, e sie jove, sapias que mays dampnaja al vielh
que no fa al jove....
Molt igual ab lo nostre per sa forma y per sa estructura, es un
curios poema de geomancia, que conté gran part d' astronomía. Era
escrit ab pretensiosos maneres, y ab conexió d' idees, dcgut á la eru-
dició de Mestre G. Ab rahó entusiasma á Meyer aquesta obra de la
qual ne son los seguents fragments de mostra:
Per la gran art d' astronomía
56 Ab 1' autra de geomancia
Dic yeu (so) que es ver, e volh
Nulh no m'o tenha a orgolh.
A home dic be per que ve
60 A mi e so que a la ma te
D' ome pres dic se ichera
92 De la preizo o si e morra.
De femna dic gran meravilha,
Se es prenhs de filh o de filha.
Ver Ihi dic si deu aorar,
96 O deu morir o deu Ihieurar
Una autrá cauzalh dic que es grans
Se a«sa vida aura efans
103 Tot aysso say per aquestas artz,
E plus, per que es mos cors galhartz.
Caries V de Franca, tenia una biblioteca especialment composta d'
(1) M. a. de la Bibliotéque Nationale, lat. 7,349, ff. 106-114.
166 F- CARRERAS Y CANDI
obres de nigromancia, astrología, geomancia y adivinació en gene -
ral, hont al costat deis tractats llatins de pretencions cientí fiques,
devien haverhi Ilibrets práctichs en llengua vulgar, per usatge de les
bruxes del baix poblé. Llástima que d' ella no 'n conegám lo catálech,
axis com conexéni lo de la interesant biblioteca del rey d' Aragó Mar-
tí I, que, per lo contrari, se 'ns presenta pobre en Ilibres de nigro-
mancia y astrología (1) Per tant, no 'ns pot donar cap endreca respec-
te á obres de geomancia catalana, llavors mes ó menys en usatge. Tot
lo mes popular, d' interés per 1' estudi de les costums, es lo que major-
ment s' ha perdut.
Tornant á examinar lo manuscrit barceloní, s' ha de reconexer
la sua importancia per 1' estudi de la llengua, tota vegada que s' atras-
sa á mitjans del segle xiii. Llavors, la Iliteratura catalana estava
subjecte completament á la influencia pro venial. Donchs aquesta in-
fluencia se presenta d' una manera man if esta y evident, tant en les
paraules, quan en la acentuado ó pronunciado d' algunes d' elles. Una
mostra de les mes clares d' aquesta pronunciado forastera, podém
donar em lo capítol ROSINYOL, vers IX, hont, per consonar ab la pá-
ranla vas, hi posa 1' autor la expresió llatina Deo gratias, que dita en
cátala gragias, no hi consonaría, pro si, carregant 1' accent sobre la
darrera a, com fan les llengues provengal y francesa. A mes serán
paraules proveníais, gens catalanes, les de eu, devient, irunda, gose-
yar, vets, mout, aviendras , gaupt, afayre, lor, jauciment y moltes d'
altees.
Empero s' advertirá que no hi ha unitat complerta en 1' idioma, ja
siga per culpa d' alguna de les transcripcións del Ilibre, ja per inad-
(1) Loa segaenta apartats corresponen ais Ilibres de dites arts anotats en lo catá-
lech reyal:
«XXVIII.— ítem un altre libre appellat de la proprietat de les planetes scrit en
paper ab posts de paper engrutades e cnbertes de cuyro vermell ab tancadors de co-
reixes prim lo qnal com.en9a en yertnello aquet es lo covienQament [E en lo negre Deus
saber mon flll E faneix sinch nnys e Vil mesos.
XXIX.— ítem un altre libre appellat Quadripartit de Tholomeo de iuhis en lati scrit
en pergamins ab cuberta de paper engrutades e cubert de cuyro vermell ab III correi-
xes lo qual comenta en vermello Incipit líber E en lo negre Rerum iesure E faneix Qui
sciipsit sit benedictas.
XXX.— ítem un altre libre appellat libre de les ymages del cel destres e lineetres en
lati scrit en pergamins ab post de fnst e cuberta de cuyro vermell ab dos tancados de
parxa de seda de diuerses colora lo qual comenía en vermello líber artificí e en lo ne •
gre Cof/ilanti michí humanum animam E faneix Ex tunch,
LV.— Un altre libre appellat Significacions e proprietats domorum en lati scrit en per-
gamins ab x)osts de paper engrutades cubertes de cuyro vermell ab tancador de cordo
de seda negre lo qual comenta en vermello significacions E en lo negre totum spjatiiim E
faneix Ko sia en grau tenebros.
LXI. — ítem un altre libre appellat dejuhis temporals sdeuenidors en'RorasíiK^ scrit en
paper ab postea de paper engrutades e cuberta de pergami ab tancadors de bagua lo
qual comenta a prenosticar los temporals sde.uenidort E faneix Qui son botislo míLlor.
LXXXIII.— Itemun altre libre petit appellat de strologia BCtit en pergamins ab posts
do fast cubertes de cuyro vermell ab un tancador de cuyro vermell lo qual comenta
Signorum alia E faneix ad opprobium.
UN LLIBRE DE GEOMANCIA POPULAR DEL SEGLE XIII
167
vertencia del autor qui 's dexa portar del llenguatge vulgar. Una
prova pot consignarse en la psn'&ula pats , usada generalment, pro en
una ocasió substituida per la catalana usual depaic.
Lo mal estat del manuscrit dittculta la sua publicado, obligantnos
á substituir per punts les lletres desaparegudes, que no poden suplirse
per les demés de la páranla. En quan a la ortografía, altament defec-
tuosa, la havém conservada ab escrupulositat, no permetentnos intro-
duirhi modiflcacións, sino les naturals de separar páranles que s' hagen
escrit juntes en 1' original, ó ajuntarles si son separades, ja que lo co-
pista, tampoch posa en axó cura alguna Del contrari, esdevindría lo
text ininteligible. Cora exemples, aduhirem, lo verset XVI del capítol
CORP hont s' hi escriu deplanoment en una sola paraula, essent axis
que 'n son quatre; y en lo verset XI del capítol AYEL hi ve escrita
Cre es persert que cum pitras haventlo consignat nosaltres Crees per
sert que cumplirás .
La obreta no porta, ni títol, ni nom d' autor, ni altre circunstancia
per la que se 'n deduesca la data en que sigue escrita, já que, com di-
guereni avants, lo paper no presenta cap filigrana qu' indirectament
pogués establir lo temps de sa fabricado, circunstancia d' altra part,
gens escepcional en los papers fabricats en la primera meytat del se-
gle XIII.
I Darmes vay al caueler
II Daraors vay al ruciyol
III De riquea vay al corp
IIII De tia vay al urinal
V De portad infant. . . . vay a la nudrisa
VI De ciar ms vay al ca.
VII Delongament vay a la irunda.
VIII De mercadería vay al mercader
IX De perdua vay al layro
X De pats (pau). vay al ayel
XI De betale (batalla) vay al lao
XII De meridatge vay al cugul
XIII Despuncelatge vay a la tortra
XIIII De viatge vay al pelagrí
XV De preso vay al felco
XVI De playt vay a lesgleya
XVII De enamic vay a la volp
XVIII De longa vida vay a la gila
XIX De tristea vay al muías
XX Desperance vay al bretón
168
F. CARRERAS Y CANdI
C:.A.XJ-A.X-.E3 E=L
I De perea auer parlat
Si no liurol maluestat
II Dayso hon tu as esperanse
Not qua] ny mays auer fianse
III Sapies que en ta tristea amor
Si as fermament en deu concor
IIII Si hom te diu que pauch uivras
Sapies que dolent ne seras
V Aquel qui pits te uol de mort
Mora sopta nou fera a tort
VI Lo playt hon cuides far ton prou
Not cuits que uaya hou
VII Fay per aquest oracio
E escuapera de preso
Yin En lo uiatge que deus fayre
Meyortra ton afayre
IX Tant auets fayte amiga bela
Sapiats que non es púncela
X Ara pren marit que eu ho uul be
E el cugul cantara per te
XI Lexa esta betale estar
Q.ue per dret o deus gasayar
XII Si be tas pats encare auras
Tant Je trebal tro sies las
XIII Perdut asi perdras auant
Mas puys recobreras II. tants
XIIII Ric te feras aquest mercat
Q.ue as fayt si nó es menys cabat
XV Be US dic que aquest qui sen uay
Nol ueuran sos amics may
XVI Garda lo blat hon feras ceny gran
Car el uelra pus auant
XVII Dona con nos aurets hout
Bel inlant sera mal uengut
XVIII Aquest melaute (raalalt) no mora
Dequest mal se honmetgria
XIX Tu ceras mout ricom dauer
Sol qutí en tu no fale seber
XX Lamor don tu as trebal
Not uelra negun tems i al
I=l<3^II*J^^OX-.
I Om tame mes que tu no ames
E as tort si damors te clames
II Tu seras pus de mes preat
Q.ue tal qui nes pus alt niuntat
III Esperance not qual hauer
Deyso ¿que? tu o say per uer
IIII De tristea es plentencos
E leument non exira defos
V Tu auras penes et aíanys
E puys no uiuras iens mouts anys
VI Tu auras alguns de enamics
Que ia nols tembras II. pies
VII Si en tos playts as bons auocats
Ja no seras mals jutgats
VIH Vos serets retenguts et pres
En loe hon molt no romendrets
IX Si ben te pren la hon uas
Ben pots cantar deo grasias
X Be la hocasio me dets
De tal rao mal no merets
XI Molt ce feran tos meridatges
Breus et honrats si tu o satges
XII Si cor not lal sapies sen fale
auras deste betale
XIII Ab tos enamics feras pats
Si en ton cor ho vols o i parlats
XIIII A aquel que tu troberas
Si ques so que perdut as
XV Ja nul tems de ton prou no íeras
Detot so que aqueberas
XVI Vostre misatge uendra tost
Q.ue no romendra quant que cost
XVII Enguany pora tot hom trobar
Per seruidor bel mengar
XVIII La dona aura son infant
Saui enseyat lo fan
XIX Est mora per tort dequest mal
Q.ue negune re no lin ual
XX Tu seras pobra y caytius
Si no est saui mentre est uius
OÑ LLlBRÉ DE GÉOMANCIA POI>ULAR DEL SÉGLE XlII
169
€201=11»
I Per aquest nous trebels ren
Q.ue eu uos dic que auras
II Tu auras que eu o say be
Tal que ama may altra que te
III Vos serets darmcs bel frayre
Axi con anch fou vostra dona mayre.
IIII Tesperance tesdeuendra
Mas nou sera vuy ne dema
V Lexa ton dol obri te porte
Pus nous que hom joya raporta
VI No ages por que muyres
Mouts melos ne moran ans que tu muy-
VII Quant que sia pendras uenianse . [res
De tos enemics senes duptanse
VIII Prinso que auer pots senes playt
E no testeng en mal fayt
IX Senlaonart? deüurats lo
Est presoner y randra so
X Est cen uay durament et plorant
Mas el sentornera enxentant
XI Ton puncclatge ma dolsa aymia
Tant as fayt que non romendras mia
XII I. maridatge as a fayre
E noy goseyeras gayre
XIII Ensaluy mes deconort
E les gens teñen les pus forts
XIIII Pats no auras a ton uiuent
Trebelar te post deuient
XV Dayso que as perdut mas no tot
Cobreras mas sol non sens mout
XVI Si aquest libra de pía no ment
Tu gosayeras molt argent
XVII Longament se romendray
Si la tere pus li play
XVIII Ga not qual ajustar
Est puys t sera car
XIX I portera tot per sert
A present et a descubert
XX Est malaute es leument garit
Segons que aquest libra dits
:^CDx%x...
I
II
III
IIII
V
VI
VII
VIII
IX
X
Est melante ques que hom se diga
Mora deste malautia
Si aquest a pauc no cen mor
Car el aura encara
Si tu en lamor as te fiansa
Eu no crey que de res ten ries
Tal sauenture mays que te
Que seras pus prous gran re
Mena gran joya que per auer
Tu auras en breu gran pler
Tu no seras mays a tots dies
Eytant gran con eser solies
So diu est libra que no ment
Q.ue no viuras mays longament
Dequest pendra son enatnic
Venjance per uer uos o dic
Ben sapiats que dequest playt
Te vendrá caytiu y mala layt
Dequest presoner no pensets
Q.ue eu say que ja mes nol ueurets
XI Est fera mout be son uiatge
E no li caira metre misatge
XII Dolsa aymia de uos mi play
ets fayts altro company
XIII Lo meridatge auras si tu o uols
E esteras mils que no sois
XIIII Si la cort not fal entre e lor
De la betale auras honor
XV La pau sera es fa
E ia nul hom no len tornera
XVI Tot perdras quant as guasayat
E ia nou auras recobrat
XVII duant que sies compay
Que not pot felir gran guay
XVIII Soluendra saui y ioyos
De luy no sies consiuros
XIX Aquest tems fa abondats
E de tots bens alargats
XX Sertes ela aura I. infant
No gens tropt petits ne trop grana
170
F. CARRERAS Y CANDI
P»aXJI3I=IIíS-A.
I Ela sera prenys so dic seuer
Dun fil qui mal parra dauer
II Est malaute gara sens fale
E ga non do a meige male
III Aquest uos dics qui ben sa gayte
Que aquest aura encara sofrayre
1 1 II Series auiendras be acabat
De tes amors sens nul gaupt
V Darmes serets prous et ualens
Si tu as tots tos entendimens
VI Bentagra opres que tu sabeses
Master hon uiura pogeses
VII Tu no auras dol longament
Menar poras joya breument
VÍII Tu uiuras que con seras uel
Q.ue dos na cabrien en I. capel
IX Tos enamics auer
Mas nols uelra I. diner
X Si uols tu est playt menteoir
Molt te pora gran be uenir
XI Est en la preso molt moles aura
Mas a la fi nesquepera
XII Aquest ueu tost que eu o say
E aura son afayre mal fayt
XIII Tant auets fayte amiga care
Que ben uos par en la care
XIIII Segurament aquest meridatge
Te fera mudar ton uiatge
XV Sagurament tu pendras fale
Ans que fenesca la betale
XVI Est uers dics que uer aga amor
No aura jamays entra lor
XVII Ben sapies que no copreras
Negun tems tant con perdut as
XVIII El fera en mercaderia
Guay (guany) mas no totauia
XIX Aquest uers dits que cant que cost
Vostre misatge uendra tost
XX Tan gran carestía cera
Que tuyt no auran preu de pa
GJ^
I Logra tant be adrasas
Que non sera tot ajustats
II ¡na, {i\¿ aura la dona
Qui molt sera bela e bona
III Tot es perdut senes
Quant hom mala met
IIII Tu no ceras nul temps bestats
Dauer ne de ui ne de blats
V Elat (ella't) fera semblant damar
Mentre que tu li pusques ren donar
VI Tu ceras darmes axi bo
Con fou oliuer ali friso
VII Tesperance ta mes en uie
Que auras enug quant que sie
VIII Esta si pots alagrament
Car tristea ce ua cegent
IX Mas uiuras de C. anys pesats
Que axi tes sapies fedats
X Tai menace qui tes lun^
Quit fera del puny
XI Segix ton playt et ton prou
Que no cen ueadra si be no (¿nou?)
XII Si aquest libra de pía no ment
que escuapera dement
XIII El anira uolenteros
Cert el tornera benciuros
XIIII Púncela est si que be o say
Sol que el te tenga car atra say
XV Molt feras en est maridatge
De ton prou sens altro domatge
XVI Le betale vensra
Per sert si enluy no roma
XVII Pats seras crey et sapiats tost
Entra luy pus amics
XVIII Tu troberas so que perdut as
E sapies que noy faliras
XIX En est merca cuy que perdras
E ga res noy geseyeras
XX Dayest sapiats que el uendra
Tost et ia mays noych moura
UN LLIBRE DE GEOMANCIA POPULAR DEL SEGLE XIII
171
I-E\ZJJ^TZ>jA<
I Ques que uages parlant
Noy et nul tems ne tant ne quant
II Mal aga carcems et sos compayns
Car ja per mi no sera plans
III Ben lauos auras I. infant
Q.UÍ sera tots tems malanant
IIII Daquest malaute dics et ere
Q.ue guaras si hom na pensa be
V Tu ceras rics honis et bestats
De tots altros bens abondats
VI Ayso dones enemorats
Auras enquer e feras grats
VII Tota gens dics et íama
Nul hom destes armes nos clame
VIII Entendéis que sol no seuance
So don tu ¿ñas? esperance
IX No tesperdes que tot (¿tost?) perdras
La tristea que en ton cor as
X Tu es dequels de tos perens
Q.UÍ deus uiure raays longamens
XI Q.ue C. uets fores mort si maces (sic)
Pocen coips de punys e de maces
XII Sapies que en ton playt perdras
Car sauiament non o fas
XIII Est presoner nos deliurera
Ans tots tems crey quey romendra
XIIII Ayest libra dats en ax¡
Car est vendrá caregat dor fi
XV Tu fas que ibl que tadeuines
Car hom ta tenguda en sobines
XVI Maridatge auras per uer
Ab gran pecat sens auer
XVII ¿Ven^ut? seras si a ret combáis
Per quet consel que faces pats
XVIII Eu dic a quis quia greug
Q.ue no sera p eu
XIX Si trobes so que as perdut
Pendras a perre nou omuts (sic)
XX Est fera el mercat son prou
Tal que noues comtas per II.
Ti/!£EH\CÍA.TZ>-E1F%,
I Mcut sera pauc guasay aquest
Car de nul hom non hau prets
II Vostra amic vendrá en breus dies
E deyso ga duptane non sies
III Ya no ueurets gra pendra
A cels qui an vostre blat a uendre
IIII Dona uos aurets si a deu plats
Infant qui es molí preyat
V Aquest malaute mora
Car hom nul sa eos no li fa
VI Aso sapies per uer to dic
Mas a tots jorns no seras ric
VII Sert no auras plors de tamor
Si ymets puya fas felor
VIII Ja darmes a nuy hom no pendra
Tant be con aquest sera
IX Dayso hon tu as ton esper
Auras alguna uets plaser
X Tristor ta cegexes don auras
Gran don car nul tems no geras
XI Si de uida as esperance
Sapies que no ten cal fer fermance
XII Ab sel quit uol mal te
De que no feras negun tems ton be
XIII Est playt sera a mon uigayre
Gran ton prou sens de mal fayre
XIIII Est presoner est deliurats
Ans que sia gran tems pesats
XV Tant lauras de mals cens bens
Q,ue si cen torna be lin stra pres
XVI Encare no a pres colp de crima
Casta dona sots sa camisa
XVII Est meridatge ben sature
Car fayt sera hone uentura
XVIII Si aquest no Ion sobre pecat
De la betale no es sobral
XIX La pats se fera quant que si trie
Q.ue per casa lancey amic
XX Aquesta causa trobade
A gens gayre no terdade
172
F. CARRERAS Y CANDI
x-A-Tmo
I Jan tots jorns tant no uiuras
Q.ue tu atrops so que perdut as
II Gran guay Cera est mercader
En totes coses menys dauer
ni Dayest que ara fa gardar
No es hic nul tems segons de uent par
IIIl Eu gay uos dic que a desmesure
Aura la pobre gran freture
V Infant auras en quer aytal
Que no sebra ne be ne mal
VI Est malate no mora ara
De quest mal car tots jons melora
VII Aquest fore rics et manens
S¡ donchs no mor en sos jouens
VIII Si lamor perqué tut fies
Segons joyos ne seras enbreu dedies.
IX Ja no seras bens ne preats
Nul tems darmes ¿socepiats?
X Esperance not qual auer
Que no nauras esper nul tems ne res
XI Tu deuries joya menar
Car tristea ueg quet uol lexar
XII Confeceti car de ta uida
As pesade maior partida
XIII Si hom te menace no tanges
Car tal menasa qui tost fug
XIIII Gran joy say tu no auras
En so que dequest playt porteras
XV Est no axira de preso
Ans romendra abendo
XVI Dayest uiatge que aquest fa
Sagurament be lin pendra
XVII Púncela no es senes dit
Ans uos es obs que prenats marit
XVIII Maridatge en breu auras
Tal no crey que sen penede
XIX Si be tost apersabut
Desta betal est uensut
XX Ja pats ? no feran acort
Tro lu o laltre sia mort
JSJ'^IBIT^
I El cera molt mas cis uol
En lamistats que ere sol
II Ayso sapiats a ueritat
Que en breu sera trobat
III Est mercader tot o perdra
Car sauiament (¿res?) no fa
IIII De uostres amics uos alegrats
Car en breu lo ueurets socepiats
V Barons no agats espauent
Que enguay aurets gran bestament
VI I. fil aurets a descubert
Qui molt sera saui e sert
VII Aquest malaute a la morte
Tot hom qui lame sen conort
VIII En aquest sería bon mes
Que ricom fas si ecer poges
IX Ja no ceras en tes amors
Que ga no ten crexeran honos
X Luny o pres de tes armes ben seras en-
E bendiran de ton parlar [sar
XI Crees per sert que cumplirás
Lesperance que tan gran as
XII Ara auant seras trist
Mas que ant de ta uida no fuyst
XIII Tal cuyda uiure raes que uos.
Que uos uiurets mes que II.
XIIII Aquel per qui menasats es
Sapiats que fera a pies
XV Pus en lo plet conex gasany
Afayre a tu netrebal not play
XVI Quant que sia deus m 1
El sera saufcens altro mal
XVII Saus et alegra tornera
Mes gran guasany fet no aura
XVIII Del puncelatge uos amiga
Ben lauets gardat quils quils diga
XÍX El meridatge que teras
Sapies que de ton prou ne feras
XX Ayest sera socepiats
De la betale pus honrat
UN LLIBRE DE GEOMANCIA POPULAR DEL SEGLE XIII
173
x^.¿^o
I Desta betale fas felor
Si la prens car tes desonor
II Est no aura pats xi tost
An crey que demdues parts cost
III Si as perdut conorteten
Q.ue janiays no cobreras ren
IIII Si el pace uoltra lámar
A y i poras gasayar
V Vostre amics a tant be sens mal
Q.ue deste tere no li qual
VI Enguay aura layustador
Gran riquea et gran honor
VII Domna de P fila sots prenys
Don uos et el payre uelrets mays
VIH Aquest no pot murir per re
Dequest mal hom na pensa be
IX Est matra part son poder tant
Q.ue riconi sera sens infant
X Taymia ual mes que no sol
Car amat mays que cabra col
XI Tu seras darmes tant engere
Q.ue hom ne parlara fort en tere
XII Ja noy ages pus desperance
Q.ue con eser rey de france
XUI Ans de I. mes sera tetristance
Tornade en gran alegrance
Xlill Confeset que mig de ta uida
As pesade et la mort
XV Ans que sia Iones tems pesats
Serán tos enamics dolens et despegáis
XVI Cant hom taura ton plet jugat
Ga no ten tendrás per pegat
XVII Dest .... conortets enseras
Q.ue ja nol ueurets negun tems
XVIII Si ga i ua son prou fera
Car ricom creats quen uendra
XIX En uos a hom amiga bela
Cauel (cavall) cade sens fre et sens sela
XX Si are prenets amiga bela
No crou que sia gran prou ne gran be.
GXJ-C3-1LJI-
II
III
IIII
V
VI
VII
VIH
IX
Dayest meridatge auras
Amics si lur placer lus fas
Est no sera ja ny mas uensut
Q.ue deus dret lin es escut
Si sos amics ne pregen deus
Encare... as viure pats en breu
Si ben serques tu troberas
En breu tot so que perdut as
Ayest mercader pererou
Dedoria (sic) far son prou
Vos ueurets vostre amic en breu
Amiga no uos sapie greu
Gran lergea sera sens ü
De pa et de carn et de ui
Ela nes prenys de I.^ fila
Oma nols dolra la clauia
Tuit o pores a deu grayr
Si ga uets aquest garir
Aquest fore rics et bestats
Mas tolraho maluestats
XI Gran dol deus far que sert say
Tamat non est de cor lay
XII Ab armes conqueras gran re
Ab sel que o despenes be
XIII Tesperance no es de bade
Q.ue be nauras so qui tea agrade
XIIII La tristor que a al cors
No nexira engan defos
XV No moras per nula uentura
Ans uiuras puys que hom... natu'a
XVI Deis enamics sera betuts
Ab maces et ab colteis nuts
XVII Sapies que del trebal que auras fayt
Jutgarta hom en gran playt
XVIII Est pres preu molt sera liurats
Mas argent non sera donats
XIX Est uiatge si ga lo fa
Graats que de son prou ne fera
XX Segons que entendut ay
Ab nul hom afer non ay
174
F. CARRERAS Y CANDI
TOI^n-I^-A.
I Despuncelade sots uos amiga
Non vulats que mes non siga
II Si prens marit noy aras be
Ñor... ne aur ne re
III Per sert creats cay est sera
Sobrer darmes si fi no a
IIII Barons en ua uos trebelats
Dayest don... es trebelats
V qui es perduda
Creats que jamays non es venduda
VI Est merquader guasayera
Molt aura si per lun no roma
VII Fay mises dir per uostre amic
Car el es mort per uer uos o dic
VIII Enguay sera cal tems de blat
Q.ue mane auberc sera raubat
IX Ela nes de I. infant prenys
On test soñera hom los senys
X Est malaute non a regart
De murir absol que bes gart
XI Ric sera socepiats per uer
De pocecions et dauer
XII Cesla del mon que ames plus
Tendrás en camisa deius
XIII Eu te dic que tu est I. hom
De petit fayt et de gran nom
XIIII A altre... sen
Si de
XV Tristea ta pres uerament
Mas en breu auras iausiment
XVI Ve confecet sense altra cort
Car en breu de tems deus eser mort
XVII Tos enamics que tu as ara
Te ceran bons amics encare
XVIII Ga negun tems no sera fay
So que uulries dequest play
XIX Leu no sera pres ia may
Ans crey que altro say
XX Est uiatge sera bo
Q.ue feras I. gran de ton prou
*EllL,.A,CkTE\X
I Eu te dic que dequest uiatge
Q.ue feras gran de ton dempnatge
II Púncela est que deus be ni do
A quis qui sapia mal o bo
III En bon punt sameridera
Car son afar melorera
IIII Lo mils auras desta betale
Mas soferas gran trebale
V Aquest II. feran eytal pats
Q.ue ia... pendran abre...
VI Perdut as perdras auant
Mas puys recobreras II. tans
VII Est mercader sera raubats
Ans que sien II. anys pesats
VIH Aycel que uos tant desigats
Vendrá alegra et pegats
IX Molt gra sera et molta palé
E an aso no ag neguna fale
X Esta dona aura I. fil
Mas sofera 1. pauch de peril
DÓLMENES EN PllANA Y VILÁSÁR
No es necesario ya rebatir la hipótesis equivocada, que se ha con-
signado por largo espacio de tiempo en las historias, de que eran, los
dólmenes, altares destinados á sacrificios en las antiguas religiones de
los aborígenes. A infinitas opiniones hijas de la fantasía, han dado lu-
gar los monumentos de piedra procedentes de remotas épocas. A
este propósito recordaremos, que, los círculos de piedras se ha pre-
tendido conmemoraran un notable acontecimiento político, ó mejor el
lugar donde se realizó una gran batalla.
Recorriendo el antiguo condado de Pallars, nos encomiaron, dis-
tintas personas ilustradas de Tremp, no dejásemos de visitar en cierto
recodo, á orillas del río Noguera PalJaresa, un raro ejemplar de
épocas primitivas. Tmtábase, según pública voz, de unas grandes pie-
dras ahuecadas, que habían servido de altares para sacrificios huma-
nos. Como demostráramos incredulidad ante semejantes aseveraciones,
se nos condujo al lugar, hallando grandes recipientes á todas luces
destinados á contener caldos en las colectas agrícolas, cuyo origen era
de la Edad Media y de los cuales se conservaba en todo su primitivo
uso, un ejemplar en cierta antigua casa de campo, que había sido cas-
tillo, emplazada no muy lejos de allí. Y por cierto que se debió á un
individuo de la Comisión de monumentos de Tarragona, y catedrático
de su Instituto, no hace muchos años, el haber dado cuenta del hallaz-
go de los pretendidos altares para sacrificios, llenando las cabezas de
sus conciudadanos de ideas erróneas y de falsas ilusiones sobre monu-
mentos protohistóricos.
La imaginación ha pretendido ver dólmenes, en ciertas piedras ca-
prichosamente colocadas por la naturaleza, en la incesante labor de
sus agentes. En una de nuestras muchas excursiones por las Guille-
rías, pasamos del valle de Sau á la vertiginosa cortadura de Tavertet,
llevando en el bolsillo la guía del célebre excursionista catalán Osona.
Dicha guía señalaba la existencia, de un dolmen no lejos de la casa
de campo conocida con el nombre del Avench, por estar situada precisa-
176 F. CARRERAS Y CANDI
mente en las inmediaciones de la enorme cortadura que forma la re-
gión conocida hoy por CoU-ca-cahra y en la Edad Media por vizconda-
do de Cabrera. Mucho trabajo nos costó hallar el dolmen, situado en
la cima de un monte vecino y cuando dimos con él, merced á las indi-
caciones de un pastorcillo, nuestra desilusión fué completa. Tratábase
de cierta piedra en equilibrio, sostenida de un extremo por un pilón
de terreno pizarroso y apoyada, en su otro extremo, en un plano incli-
nado de roca. La acción erosiva de las aguas la había dejado aislada,
en tal situación. En verdad aiin no hemos comprendido la ilusión de
Osona ante aquel capricho de la naturaleza, al cual faltan todas las
condiciones que suelen concurrir en los dólmenes, pues sólo tiene de
ellas, estar situado en lugar alto y ventilado.
La fantasía de la imaginación ante estas piedras, legado de lejanas
edades, es muy antigua. Un autor que ha investigado en nuestra Pe-
nínsula sobre esta materia (1) dice^ que del siglo v al xi muchos Con-
cilios constatan, como, desde Toledo á Aix-la-Chapelle, el pueblo ve-
neraba algunas piedras y que este culto hubo de ser enérgicamente
combatido por la Iglesia.
El danés Olaus Magnus^ en 1555 las designa como tumbas de los
antiguos escandinavos: y en el propio siglo Canden las examinó en la
Gran Bretaña. Entre los trabajos más notables del siglo xix merecen
colocarse los de Fergusson, en su interesante obra Rude Stone monu-
ments y mapa de los dólmenes de Europa y África que ha dado ocasión
á tantas deducciones y controversias, llegándose á suponer pudiesen
ser obra de los vándalos.
Empero Magnus no innovó una opinión sobre los dólmenes, los cua-
les fueron calificados de arcas ó sepulturas, en los primeros siglos de
la Edad Media en nuestra Península, desde los confines de Galicia á las
costas catalanas del Mediterráneo. A igual que en España, conocióse
en Italia esta petra arca, de cuyo substantivo común se formó el ape -
llido que ha hecho inmortal el insigne vate Petrarca.
En lo que concierne á Cataluña la pedra-arca de Collsabadell, ca-
bana-arqueta de Espolia, (2) y otros que pueden hallarse, conservan
aún la generalización del nombre arca que hallamos en los documentos
de los siglos X y XI. En el llano de Barcelona, el campo del Arca tan
frecuentemente citado en los cartularios de Sant Cugat y de la Catedral,
denotaba un antiguo monumento de esta índole que existiría hacia
Provcnsals en el que hoy, por corrupción de nombre, se llama aún
Camp del Arpa. En Cervelló, en el último año del siglo ix había asimismo
en un collado, cierta ardía antiqua (3) hechándose de ver por un docu-
(1) E. Cartailhao Les ages préhiatóriques de l'lEspagne et du Portugal (París 1886).
(2) Contribución al estudio de loa monumentos megaliticos ibéricos, por S. Sampore y
Miquel (Gerona 1881). publicado en la Revista de Ciencias Históricas.
(3) Año 900. Confirma, el Conde Wifré, la donación que hizo á San Cagat su ante
DÓLMENES EN PIÑANA Y VILASAR
m
mentó del año 1060, que también las hubo que merecieron calificativo
de nuevas, casi á las puertas de Barcelona (1). Entre el Ampurdán y
La Selva, hay un monte llamado Fiiig cV arques.
Más aquí nos hallamos ante una contradicción, cual es la de queBa-
lari, fundado en la ley III, título III, libro X del Fuero Juzgo, cree que,
«á los montones de tierra para fijar los lindes de las propiedades, se les
daba antiguamente el nombre de arcas» (2). Además Cartailhac dice
ser las palabras garita y arca sinónimas de casa ó abrigo (3).
Nuestra opinión no es esta según vamos exponiendo.
Que la voz arca era sinónima de sepulcro, lo dice el testamento de
Ramón Ramón del año 1086 al consignar un legado para el sepalcro de
Dolmen de ir'inana en ol Pallars
Santa Eulalia con estas palabras: «Concedo sánete Marie riuipulletis
ciphum I arg. et ad archam sánete Eulálie concedo ciphum I arg » (4).
La claridad de esta cita no deja lugar á la menor duda, pues en el siglo
XI construyó Barcelona, nuevo sepulcro á Santa Eulalia.
A Artes del Roselló vive la palabra caxa (caja) asimismo aplicada á
un dolmen, (b).
Por consiguiente creemos que nuestro pueblo en los siglos medios,
cesor Wifré I el Piloso, de un territorio hiermo en Cervelló, donde había la iglesia do
Santa Crnz (Vallirana). Era uno de sus lindes «A parte vero oecideutis a colla ubi
archa atitiqua constructa est» (Cartulario de S. Cugat, lol.216, doc. 618).
(1) Año 1061 Rxis'ía nn el Valles, junto á Rexach, «alodio quod uocant mata et
alio nomine Archanova» (Cartulnrio de S. Cugat, fol. 71, doc. 279).
(2) Cataluña. Orígenes histórico»: pág. 6¿3.
;3) Les ages ¡n-ehistoriques de I' Eupagne et du Portugal (París 18S1) pág. 181.
(4) Cartulario de S. Cugat, ful. b04, doc. 925.
(5) Giiide historique et pittoresque dans le departement des Fyrennées Orientáis.
1903
12
178 F. CARRERAS Y CANDI
tendría perfecto concepto de estos primitivos sepulcros á los que llamó
arcas. Su actual nombre científico de dolmen se debe al francés Le-
grand d' Anny, quién á fines del siglo xviii, tomó del bajo bretón las
palabras dol-min y ar-men ir. que significan, mesa de piedra y la pie-
dralarga. Por entonces surgió la falsa hipótesis, de base nada cientí-
fica, de ser altares destinados á la religión de los druidas ó tribunas
judiciales, que tanto ha costado, en nuestros tiempos, desarraigar,
desde que, á las investigaciones del danés Thomson en 1836, se han
unido concienzudas excavaciones practicadas por d.oquier con más cui-
dado y por consiguiente con mayor éxito, que en España.
Estos monumentos megalíticos no escasearon en Cataluña, como lo
comprueban los muchos que se conocen en distintas localidades. Es
seguro que aparecerán otros varios, que yacen aún ignorados, pues
por nuestra parte hemos encontrado dos en perfecto estado de conser-
vación, en regiones muy opuestas y que podemos decir que son ca?i
desconocidos: uno en Piñana, más ó menos descrito y otro en Vilasar,
del que nada hemos leído.
En el que fué condado de Pallars, en los términos del antiguo cas-
tillo de Piñana, de cuyas ruinas apenas quedan vestigios, hay un dol-
men muy bien conservado y poco menos que desconocido, del que se
ocupa Mir y Casases (1) en los siguientes términos. «En la loma de ese
cerro {Comillini) se observa un dolmen formado de tres bloques de
conglomerados, dos verticales paralelos dejando el espacio de 1 metro
por l'óO de alto y sostienen otro horizontal con inclinación que mide
2 metros ancho, 2'80 de largo y 0'52 grueso; no se notan indicios de
surcos ni agujeros. Allí se encontraron huesos humanos y una moneda
ibérica. La gente del país llama á este megalito la casa eiicantada y
cuenta que aquellas piedras las trajo de Cadolla una muger».
La tradición de la mujer, que, hilando, transportó á grande distan-
cia, una enorme piedra en la cabeza, es común en Cataluña y aún en
otras regiones de España. Hallóla Cartailhac en Andalucía entre Bae-
na y Bujalance, á propósito del menhir llamado la piedra de las Vír-
genes.
El hallazgo de una moneda celtíbera en el interior del dolmen de
Piñana, puede considerarse como testimonio elocuente de no pertene-
cer á edades protohistóricas.
Siempre es de importancia hallar monedas ibéricas en los dólmenes,
mucho más si se tiene en cuenta que Fergusson atribuye su construc-
ción á los éuskaros. La moneda del de Piñana y la inscripción éuskaro
hallada en las paredes del dolmen de Vilalba ^a-serra que dio á cono-
cer el Conde de Bell-lloch, reproducida por Sanpere y Miquel (2),
(1) Excursiones por la reqtón baja de los ant/giios condados de rallar» y de Eril por don
Antonio Mir y Casase» (Publicado en el folletín del periódico El Pallaresa de Tremp).
(2, Contribución al estudio de los monumentos megalíticos ibéricos (Gerona 1881) y la
Eiitoria de Barcelona (Barcelona 1890) sin concluir.
DÓLMENES EN PIÑANA Y VILASAR
179
pueden, cuando menos, demostrar su existencia anterior ó coetánea á
dichos pueblos.
El resultado poco favorable que dio la excavación del dolmen de
Piñana, puede deberse á las malas condiciones en que se realizaría el
examen de su contenido.
En nuestros tiempos, los exploradores de monumentos megalíticos,
han cuidado de dar buenas instrucciones para hacer científicamente,
tales trabajos de excavación. Así recomiendan pasar por el tamiz, todas
las tierras procedentes del interior de los dólmenes y examinar una á
una cuantas piedrecitas resten en él depositadas. De este modo no se
exponen á tirar inadvertidamente, las rudimentarias cuentas y con-
chas que formaron los collares, brazaletes y objetos de adorno, que,
del contrario, cabe asegurar pasarán desapercibidos.
^ ^
\ V •:
J-:.¿^fe:^^
Croquis del dolmen de Vilasar, en el Maresma.
No son de menor interés otras reglas dadas á los excursionistas,
sobre la manera como deben ser fotografiados, útil y científicamente,
tales monumentos, mereciendo señalar á Marcelo Baudoin por sus ar-
tículos. La photographie scientifique des MégaUthes, La pliotographie
stéreoscopique des MégaUthes (1) y La pliotographie cardinale equidis-
tante des mtgalithes. Aconseja Baudoin, sacar los clichés desde los
cuatro puntos cardinales, para comprobar su orientación más ó menos
perfecta y que las fotografías se tomen desde una distancia fija é igual,
á fin de que exista uniformidad. Recomienda también, adoptar la pre-
caución de colocar, previamente, un metro en posición perpendicular
(I) Bulletin de la Socété cV Anthropoloffie de Parí».- París 1901.
180
F. CARRERAS Y CANDI
y contiguo al dolmen ó menhir, á fin de que, al ser reproducido en la
fotografía, deje establecida la proporción exacta del monumento.
Forma la divisoria de nuestras regiones del Valles y del Maresma,
una cordillera, que desde el río Besos al Tordera, no dejan portillo
alguno. Mas como la división natural no siempre es extrictamente adop-
tada para fijar los límites de las circunscripciones parroquiales ó mu-
Sección por A B.
B
Planta y sección del dolmen de Vllasar. Escala de 1 por 50.
nicipales, se da el caso de que unas y otras, en ciertos sitios, la tras-
pasen.
Esto ocurre precisamente, en la antiquísima parroquia de San
Genis de Vilasar. A pesar de que fué erigida en uno de los altos valles
del Maresma, forman parte de ella, cierta agrupación de casas situa-
das al lado opuesto de las montanas, en aguas vertientes al Valles
DÓLAFF-NES EN PIXANA Y VILASAR 18l
edificadas en elevado recodo, cuyo nombre usual es la Font-freda. Un
antiquísimo camino público pone en comunicación á estos feligreses
con su iglesia parroquial .
Pues bien: junto (x este camino en la cima de los montes, donde
forman regular rellano, aprovechado para el cultivo por los colonos de
ca'lSeiiyor, está el dolmen de Vilasar. Conocenlo en el país por Z«
roca (V en Toni, y es tan completo, (según puede verse en su croquis)
está situado en lugar tan visible y llama de tal modo la atención á los
labriegos de aqu'^llos sitios, que parece imposible se haya tardado tan-
to tiempo en darlo á conocer (1).
Por la planta y sección del dolmen de Vilasar (croquis adjuntos)
podrá tenerse exacto conocimiento, así de su estructura como de sus
dimensiones. La forma de ataúd y su medida longitudinal se avienen
perfectamente con lo que se ha dicho de estar destinados, estos monu-
mentos, á panteones de una familia ó de un individuo.
Las piedras que le faltan para resultar completamente entero, es-
tán á unos pocos pasos tiradas por el suelo, á uno y otro lado del ca-
mino inmediato. De manera que, si alguien tuviera interés en resta-
blecerlo en su primitivo estado, según se hizo en 1855 con la pedra
gentil de Vallgorguina (2), le costaría muy poco trabajo verifícarlo.
No hay, alrededor de este dolmen, otras piedras colocadas en for-
ma circular, como se vé en algunos monumentos de esta índole.
En cambio en una de las cumbres vecinas, llama poderosamente la
atención, la gran cantidad de piedra arrancada, que ha tomado color
negruzco por los largos años de estar á la intemperie y cíiya aplicación
ó uso en remotos tiempos, no nos fué fácil colegir.
Óteos dos dólmenes en Fonteta
Teníamos publicado ya el presente trabajo, cuando ha venido á
nuestro conocimiento la existencia de otros dos dólmenes hasta ahora
desconocidos, situados en el pueblo de Fonteta, del partido judicial de
La Bisbal, en el bajo Empurdá Ambos se levantan á lo alto de la
montaña de Fitor y del más importante, conocemos una fotografía que
no deja lugar á duda alguna. Solo se conservan tres de los apoyos de
la colosal piedra que cerraba el monumento, debiéndose á esta cir-
cunstancia, que, en el pais se le conozca usunlmente por los tres pius.
En la actualidad hace veces de cabana para guarecerse los pastores
en su interior; de ahí que hayan separado las piedras de uno de los
lados para facilitar el ingreso, y amontonado grandes piedras en las
(1) Menciónase en la compendiada Historia fie Catalwu/a per Korhert Font // Sai/ué-
(2) Breve reseña de los descubrimientos arqueológicos llevados á cabo por el Cen-
tro artístico de Olot (Olot 187S) pág. 8 á 11.
182 F. CARRERAS Y CANDI
junturas de las otras caras, á fin de quedar más resguardado su inte-
rior.
El conocimiento de estos dólmenes, de los que pensamos ocuparnos
más minuciosamente en otra ocasión, lo debemos á D. Juan Bautista
Camós, de Palamórs, quien al enterarse por La Renaxensa, de que en
nuestra cátedra de Historia de Catalunya, de los Estudis Univcrsita-
ris Catalans, daríamos cuenta de los dólmenes existentes en nuestro
Principado, apresuróse á remitirnos la fotografía del más importante
de los dos de Fitor, para que asimismo lo pudiéramos incluir en la
enumeración anunciada. Kepetimos al Sr. Camós, las gracias desde
este lugar por su interés y celo, muy digno de ser imitado.
MM^MM^ ^; -{^MM ^M f^: '^: ^; 'i^i m fS m, 'm^ -i^. m_ m -f^M
l®l' W- l®l '.®l< Wi'- 'M' '.®l^ '^l' 'M' '^l '®l '¿i '.®'.- ^ K- ^ W' '.®';- 'M-- ^' '&'. '®í'
^miizm-
LES AYQUES Y BANYS
DE BARCELONA
' ''-oS^sf^'^'
Pkimitius pous
Ha estat de rahó natural en los temps antichs_, que les poblacións
se construisen á la vora deis rius, á fí de teñir á má la necesitat mes
imperiosa del home, la aygua.
No succehí lo mateix per lo que respecta ala antigua Barcelona,
avants de que la civilisació romana hi aportas sos aveuQOS. Situada en
promontori á manera de península y tenint, entre cst y lo gran macis
del IMontjuích, una magnífica badía, deleitosa á la vista y de proñt
per la colonia pescadora que habitaría aquella platxa, es evident,
que, si no hi rajavenfonts en dit promontori, hi haurien pous de bones
aygues.
Sampere y Miquel, extremant aquesta indubitable teoría, creu que
la púnica Barkino, siga la ciutat del^^otí de l(i badia, que axó preten
voler dir les páranles Bar-kino. Y treyent partit de la existencia d' al-
guns pous, en los segles xiii y xiv, en lo mitjaeval mont Taber, vá mes
enllá, en un cami en que no aconsellariem á ningú de seguirlo. Vegis
com s' expressa en sa comencada Historia de Barcelona, interessant
trevall que sentím hage dexat per acabar:
«¿En donde está el pozo? Pozos no faltaban para hacer la aguada
en esa isla ó península, que recibió de uno de ellos el nombre de Bar-
cino. Y si es permitido á la fantasía buscar ese pozo, diremos que éste
no puede ser otro que el pozo que durante siglos fué visitado por
nuestra población marinera, que gustaba de sus aguas con satisfac-
ción y contento— como si lo hiciera por tradición, — y que hoy está
convertido en pozo vulgar de la primera casa de la derecha de la ca-
lle de Ludovico Pío. Este es para nosotros el Pozo de San Gem. Pero
sea este ó sea otro, el Pou dais de junto la puerta de San Miguel que
resultaba estar en el Puerto y ya conocido en el siglo xiii; ó el Pou
den Estany por ejemplo, situado en la calle de este nombre que suena
184 F. CARRERAS Y CANDI
desde el siglo xiv (hi nuestrcí Eim y que iiudó ser antiquísimo, caso que,
lo que no hemos podido averiguar el Fuig de Les falsías que ocupaba
el centro de la Hlaza de Palacio, fuera tierra firme y no un depósito
de arenas, lo dicho basta á probar que los marinos cartagineses no te
nían necesidad de meterse tierra adentro para hacer la aguada».
Encara en Sampere nos podía haver parlat del pou de Geribert
situat en lo burg ó afores de Barcelona, en V any 9'.^7 (l)com també
del existent en lo niateix puig de les Falsies, (actual plassa de la Llotja)
desaparegut en 1' any 1470 (2), que, cum á inmediat á la platja. podía
imaginarsel frequentat deis vaxells que acudien á nostre ciutat indí-
gena.
L' AQUEDUCTE EOMÁ DEL CAEREE DELS AeCHS
Mes dexám á la Barkino ante-romana, de la que no se 'n conexen
ni inscripcións, ni monuments y passém á temps mes historiables.
Al difundir, Eoma, sa acció civilisadora en les parts del mon hont
domina, hi introduhí les sues costums bones y dolentes. i' igurava entre
les primeres, teñir A les ciutats ben provehides d' aygues de mina Per
lograrho degudament, may se deturaren davant de les que llavors
semblaven diflcultats invencibles. Aytals dificultats no eren meuys
grans á Barcelona, de lo que ho sigueren á Tarragona, á Segovia y á
altres importants ciutats de la Híspanla, hont encara hi admirám la
magnificencia d' aquelles admirables conduccións d' aygues, destinades
al servey urbá.
Les autoritats de nostre Colonia Favencia, se fixaren en los abun-
dants manantials del Besos, com essent los mes apropiats per aprovi-
sionament de la Ciutat que administraven, ja que sa calitat era exce-
lent y son nivell mes que '1 necessari per poderse aconduhir á la part
mes sobirana del antich mont Taber hont s' alcava la urbe romana.
Per arrivar al cim de la montanya sense perdre altura, fou indispen-
sable construir una gran arcada aguantant la condúcelo de les aygues
y per la que estes hi discorreguessen abundantment.
Aquest aqueducte, destruit en los derrers temps de la Edat Anti-
gua, arrivá trossejat, ais segles x y xi, únichs y fefahents testimonis
de la sua existencia Son en gran nombre les escriptures de dita épo-
ca, que parlen de ipsos archos (3) sovint calificat de antichos (4) ó pris-
(1) A. 997: «hortns vero erat in Barffo Barchinone ad puteum de geriberto» (Ant.
Eccl Cath. vol. I fol. 167, doc. 412 arx. Catedral de Baioelona)
(2) Rúbrica de Bruniquer, vol II, cap. 42, íol. 71.
(.S) Entro molts altres documents que poden consaltarse, oonsignarém nn del 996
(do".. 10 de Ramón Borrell) y altre del 1(29 (doc. 73 de Berea/ner Ramón I) del »rxia te
la Corona d' Aragó y diferent» esoriptares deis volums Antiquitatis JScclesie Cathedralia
del arxin de la Catedral de Barcelona.
(4) A. 997 'kasalem nostrum proprinm qtiod habemus in burgo oiaitatis barohinona
ab (ptoa archos antiguos' (doo. 14 de Ramón Borrell, arx. Corona Aragó).
LES AYGUES Y BAXYS DE BARCELONA 185
eos '1\ Ó bé iiidicant son mal estat, nomeiiantlos archos tartos (2) ó b6,
tractant d' expresar inillor lo concepto, op^ve antico factos 3), En la
Edat Mitjana, tingueren pié conexement de quiri fou la llur destinado
en temps deis romans, demostrantho fins á la evidencia, algún escrivá,
com lo del any 1017, qui deya h tal propósit, que per dits archs vells,
hi havía acostumat discorre la aygua {in prenotatis archis priscis unde
oJim aqua consueiiit decurrtre) (4).
Dos deis nonienats documents del aiiy 1017 donen A entendióla
calitat de la obra del aqucducte, lu hii al dir que 's venía dos peiis deis
anticlis archs y V altre aludint á dúos domicilios, ó siga á dos estatges
ó doble arcada (notes 2 y 4 )
Lo poblé ha servat á través de tots los segles, lo tradicional recort
del aqueducte roníá, donant los nonas d' Archs y d' Archs de Jonqueres,
á dos carrers de la antigua Barcelona^ situats en lo lloch en altre
temps ocupat per les vellos arcados Un y altre carrer en la sua orien-
tació son prova manifesta de que 1' aqueducte se dirigía vers lo Noit,
ó siga vers Monteada.
Per dessota les voltes del aqueducte roma prop de la Ciutat, hi
passava un torrent deis mes importants del seu vol, qual nom sigue
Merdanciá (5). Lo recorden en temps moderns, los carrers dits del
torrent de Jonqueres y son continuador cap al mar. la riera de Sant
Joan. En 1' any 1446, encara hi ha via, en aquesta riera lo pont de
Santa Marta (6j.
A. 1017. Bonhom levita y jatge ven á> Borrell fiU de Mir «id sunfc casas tres id est so-
larium uunm C'im suo subtalo ©t casa una pelania líumi suas roueas et dodea et ali»
joguina camuña figena cum foueas cutn solos eí superpo itos cam puteo cuna leoto
torculario cam horto et alio pateo cum pedos de ipso sarmentarío cum arboribus v»-
riis generis cnm vitis et dúos pedes de ipsos archos antiguos* (doc 3 de Berenguer Ram>n I,
arx Corona d' A.r»gó;.
(1) A 1017 Oonació d' Ermesindi^ á son fill Senisfré d' unes cases «intns in ciuitate
barchinona ias'^/a ipsos archos princos* iA¡'t. Ecel. Cath vol. I, fol. 122 doc. ñOtí.
(2) A 1017. fioih.jm levita y jutge, Ven á B irrell fill do Mir .fTragena em meum
propriam» «in burgo ciuitatis archinone ubi di oiint cid ipsos Archos Tonos que aftontat
ipso ferragenaie cam dúos dumi dlios unum superior et aüum inferior- (doc de Be-
renguer Rami'm I, arx orona d' Aragó;. En estos dos domicilios hi entreveyem dos
estatges del aqa-ducte roma
(3) A 1017. Lo dooumeut de la nota anterior consigna axl mateix «Quantum Istas
afrontaciones includunt sic vindo tibi jam dicta omnia cum ipsos archos opjere antico
fa'tos'.
Document sense data. «Et in alio loco prope barchinona ad ipsos arcos o.nticos fexa I
quam emí Baimundus lobet et affruntat a parte orientis in alodio bernardus gance*
fredas A meridie in trila Ratmuudus bernardus. ab occiiao in arenno. A circi in térra
comitale» {Ant. Etcl. Cath. vol IV, loi. ñtj doc 162J.
\,i) Ant Eccl Cath vol I, fol 12¿ doc 51 9.
(5) A. 10^9; certes cases ab corra' y pon, ad ipsos Archos afrontaven «a parte orientis
in torrente quem diuunt Merdanciano> (Document, nom. 73 de Berenguer Ramón I,
arx. Corona Aragó).
(6) Liibre Vermell, vol. III, fol 174, arx. Municipal de Bar:elona>
186 f. carreras y candi
Les teemes romanes de Minicio Natal
Una bona y recomenable costum presa pels romans deis orien-
táis, fou la costúm de banyarse. No hi cabía una ciutat important d'
aquell antich poblé, sense que tingues llurs corresponents banys pú-
blichs. La existencia deis banys romans de Barcelona, vé perpetuisada
en certa interessant inscripció lapidaria, prou coneguda deis historia-
dors, anys ha exposada á la pública contemplació y estudi, en la can-
tonada del carrer d' Hercules ab lo d' Arlet, enfront la iglesia deis
Sants Just y Pastor.
Per sort aquesta important inscripció romana, la publiquen y estu-
dien Geroni Pujadas, Antoni Agustín (1) y altres, que la vegeren en
son bon temps, puix al present, está mol malmesa y quasi be illegible,
desde uns cent anys enpá. A tal propósit, consigna Villanueva, al co-
mencar lo segle xix, que ell la hauría copiada, á no trovarse derrotada
y en estat de durar poch, planyentse de que «los zapateros agujasen
en esta piedra sus trinchetes y los muchachos hiciesen con ella su ge-
nio y lo que acostumbran» (2).
Un barceloní de merit, Lucio Cecilio Optato, mostrá son amor á
nostre Ciutat, establint, al morir, interessants jochs públichs, celebra-
dors al 10 de Juny. Durant dits jochs, de vía donarse posada franca ais
forasters y aytambé oli per untarse, á totslosqui 's volguessen banyar
en los banys públichs de Barcelona. Aquesta dexa respira encara
tota la sencillcQa de les patriarcals costums deis pobles primitius, in-
comprensibles en nostres temps.
L' historiador Fidel Fita S. J. afirma, sigueren construí des en 1' any
107, les magnifiques termes de Barcelona, ab sos pórtichs y aqueduc-
tes, fetes edificar per dos filis d' esta Ciutat, generáis del imperi roma,
coparticipants de la amistat y munificencia del emperador Traja. Es-
tos barcelonins ilustres eren, Lucio Minicio Natal y son fill Lucio Mi-
nicio Natal Cuadronio Vero, tribuno del poblé (3).
A igual que á^Barcelona, existiren termes en les mes importants
ciutats de nostre regió. Sens retreure les prou conegudes de Caldes de
Montbuy y Caldes de Malabella, per la especialitat terapéutica de
llurs aygues minoráis, podem mentar banys romans. á lluro (avuy
Mataré) de que parla una inscripció lapidaria coneguda per Finestres
(4) y comentada per 1' autor d' un trevall crítich sobre les fantasíes
ctimológiques de n' Antoni Puigblanch (5), sens precisar hont estigueren.
(1) Diálogo IX de las medallas y antigüedades.
(2) Viaje literario, vol. XVIII, plana 126.
(3) íteiista Histórica, any Til, nom. 25, pl. 132, Barcelona Maig de 1876.
(4) Finestres: Syllogc Inscriptionum Romanor iim, pl. 213.
(6) Se publica com & folletl en nn setmanari de Mataró nn trevall oonpantse de la
Teoría del doctor D. Antonio Puighlanch sobre lluro, liar ciño y antiguos catalanes, havent-
LES AYGUES Y BAXYS DE BARCELONA 187
En la monumental Tarragona, s' han pogut apreciar les ruñes d'
uns banys en la part plebeya de la Ciutat y d'*altres en la montanya de
damunt lo presidí (1), sense que cap d' clls tingui la riquesa de que,
per son mosáich, fá gala la piscina barcelonesa de Minicio Natal.
A Calafell se descubriren les sumptuoses termes de Stahulum No-
vum, en 1883.
Dugues páranles sobre quí era Minicio Natal fundador deis banys
barcelonins y també deis iluronesos de que avants havem parlat va-
gament y deis quals Pellicer y Pagés, ne dona algunes noves Aquest
autor al volguerlos situar, fixá sa atenció en la área que á Mataró vá de
la plassa de Sant Salvador á la de la Constitució per creure que allí hi
hagueren les termes romanes iluroneses, fundades, com dihém, per Mi-
nicio Natal y de les que 's te sois un migrat conexement, per la lápida
fragmentada que já diguerem feu conexer Finestres (2).
Lo P. Fita diu d' ell, que en 1' any 107 fou cónsul subrogat, en 108
gobernador del África proconsular quina capital era Cartago; en
temps de Traja (98-117) y d' Adriá (117-138) fou legat imperial, pro-
pretor de la Pannonia inferior, provincia militar que donava entrada á
la Dacia y tenía per frontera oriental lo Danubi. A Eoma se li confia
important oflci de policía urbana, com era la vigilancia y direcció de
les corrents d' aygua, d' hont ne devallava la seguretat, higiene y
comer? de la gran Ciutat. Tambó fou general de dugues legions (3j.
Si trovém á Minicio Natal fundant termes per nostre térra, en lo co-
men^ament del segle II, be 'n podeni concloure que la costum de ban-
yarse hi sería exótica y que ell contribuiría á propagarla.
La indubitable existencia de les termes romanes de Barcelona, ha
donat motiu á que d' elles se 'n ocupassen diferents historiadors. Mes
axis com del aqueducte ne resta débil recort en lo nom de dos carrers,
no ha succehit lo mateix ab los banys romans, enganj^antse los quí,
com Pujades (4), creuhen orientarse seguint les indicacións deis noms
de nostres víes publiques, y colocantlos prop de Santa María, en lo
lloch de molt antich^ conegut per banys vells.
ros pervingut alguns fragmenta, sense la portada. En la plana 97 (í'altaven les pla-
nes 93 á, 96) parla d' estos banys.
(1) Tarragona vionumental ó sea Descripción histórica y artística de todas sus antigüe-
dades y monumentos celtas y romanos, por Juan Francisco Albíñana y de Borras y Andrés
de Bofarull y Broca. (Tarragona, 18i9), pl. láO.
(2) Sospita Pellicer que lo ductus que 's llegeix en lo fragment d' esta lápida de Mi-
niólo Na^al, se referirá ais aqueducius de que 's fá menció en un esorit de principis del
segle xviii compost per Baltasar Pi que parlava del <gran aqueducte d' aygues que te
la sua boca á la meytat de la balxada de lea E8penyes>. «En otros términos pudieron
muy bitn los dos Nadales, aún morando en Barcelona, ceder un solar que poseyesen
en lluro y convertirlo en público balneario > En 1' espay que creu Pellicer, hi haguó
les termes d' lluro hi aparegueren á mes del írajment de 14pida, la terminado del
avans dit aqueducte subterrani y altres importants despulles romanes {Estudios histó-
rico arqueológicos sobre lluro (Mataró 18's7) planes 23S y 272).
(3) Anuari de la Associació d' Excrirsions Catalana, vol. I. pl. 446 (Barcelona 1892).
(4) Crónica universal del principado de Cataluña, vol. III, pl. 72.
188 F. CARRERAS Y CANDI
Mes los qui s' han ocupat de les termes romanes son pochs, compa-
rats ab los molts que haia escrit á propósit del mosáich de Sant Miquel,
divagant sobre son obgecte y aplicado. Pujados, seguint la opinió de
Dionís Geroni de Jorba, creu que foren del temple que á Esculapi edi-
fica en Barcelona lo general roñica Spuri Pompón i (3 Spuri Pompeyá, al
pretendre arbitrar per aquest mijá, la protecció del Deu mitológich,
de qui solicitava li tornes la salut perduda al esser ferit en la guerra
de Pertori. L' argument de que 's valen per tal afirmacio es, la anti-
quísima costúm barcelonina, de tenir llocli, junt á Sant Miquel. lo
mercal especial d' herves, hont anyalment hi anaven á provehir los
herbolaris En axó hi entreveyen la tradició del temple alsát al Deu
de la medicina.
Altres autors, mantenen lo criteri de que hagués sigut temple de
Júpiter, ab molt poch fonament, y lo P Florez diu, que si 's tractos de
temple d' algún deu gentílich, á judicar per los atribuís, havía d'
esser de Neptuni, deu de les aygues.
Per últim, no hi falta qui, en una monografía sobre la antigua
obra mosaica, pretengui esser labor cristiana del segle xii y tal vegada
deguda al propi arcángel Sant Miquel. Es un trevall de crítica enfar-
fegada y erudició difusa, que escrigué, en 1765, lo Rnt. Francesch
Martí de Prat (1).
No son de la matexa opinió los autors deis Recuerdos y bellezas de
España, los qui, tractant del celeberrim mosáich dinuen haver perta-
nyut á les termes romanes (2), contrariant quantes opinions s' havien
sustentat precedentment.
Verament honra á la justesa de criteri deis Srs. Parcerisa y Piferrer
haver estatlos únichs acertáis, en tantes y tant opostes hipótesis sobre
lo mosáich de Sant Miquel á qual prcsent desaparició devém dedicar
alguns apartats.
Malmés per los cristians al obrir sepultures en lo paviment de la
Iglesia, fou, en ses respectables despulles, obgecte de venerado per los
barcelonins, en temps moderns, ó de major ilustració. En 1765. feya
constar Martí de Prat, la molta gent que «viniendo de otros Países, al
instante lo quieren ver por la justa fama de antiguo, singular y miste-
rioso que se ha merecido »
Es vergonyós per lo progrés del segle xx, que tant preñada anti-
guetat, trepitxada per les hosts d' Alarich y d' Alman^or, scns que la
privasen de poder sentir lo cruximent de les ferrosos armadures de
Jaume I y del emperador Caries V, vegent jorns de gloria que no po-
drém ovirar en nostre existencia, examinada y estudiada moderna-
(1) fíisKP.rtación sobre la antigua obra mosaica que se admii a en él stiHo de la iglesia pa-
rriiqidal del arcángel Se n Miguel, sita dentro la ciudad de Barcelona, etc., etcrita por don
Francisco Marti de Prat Sacerdote y Doctor en Sagrada Tlieologia
(2) Parcerisa y Piferrer, Recuerdos ?/ bellesaa de España, vol II, p!. 50.
LES AYGUES Y BANYS DE BARCELONA 189
inent per liistoriadors y arqueóleclis, respectada per invasións y
revolucións es veri^onyós. repetíin, que s' hagi tos com per art d' en-
cantament en los preseuts temps.
Son bon astre comcn^^á á enfosquirse en 1868, ab 1' acón y subse-
«íuent derrocament del temple de Sant Miquel, que la hostatjava. En
1877, la terminació de les obres de casa la Ciutat la 'tanca en pregons
soterranis, hont podía encara examinarse ab la ajuda de Ihím artiñ-
cial Allí hi permanesquc quinze anys y en lo de 1892, qui les pre-
sents ratlles escriu, tingué oportunitat d' arbitrar se transportas al
ediflci del Parch, per 1' Ajuntament destinat á niuseu arqueológich
municipal La translació se feu en 1893, despenenthi Barcelona tres mil
pessetes á fí d' assegurar la sua integritat.
Pro no manca quí cregués que semblantsmonuments já de res ser-
vieny donant per malgastat tot esfore y trevall. estimes mes la pro-
pagació de la música en la Capital Catalana, que la divulgado de les
belles arts y arqueología.. Y axis, sots los auspicis de dos regidors
quí, en 1896. cuydaven de la costosa escola municipal de música, quals
noms no volém retreure, fou pavimentat ab fusta, lo sol hont s' havía
colocat lo famós mosáich roma de les termes de Minicio Natal, ab molt
greu de quans aymám la arqueología. Allí está soterrat esperant temps
millors ó tal vegada disposantse á. sorprende á generacións futures ab
una trovalla impensada, que podrá servir á algún investigador en de-
mostrado, de com lo mar, en la época romana, no arrivaría á la ciu-
tadela feta per lo primer deis Borbóus.
Aquesta digresió nos ha ayunyat de lo que avants aflrmávem, co es,
que lo paviment format de pedretes Manques y blaves, ab tritóns, ca-
valls maríns, delfíns y alguns obgectes de mar, pertenesqué al edifici
destinat á termes per los romans y no á cap temple. Lu prova la tin-
guerem plena, quan se procehí á la translació del mosáich, del primitiu
lloch hont fou alcat per lo constructor roma, al en que 's trova avuy
día. Dessota del mosáich hi aparegué un segon paviment senzill, format
de pedretes blanques y trets abdós paviments, s' hi trovaren fragmen-
tades, les gruxudes canonades de plóm, que, en altre temps servirán
per conduccións y sortides d' aygues y de les que n' encomenarem s' en
tregües una trassa, á 1' arquitecte municipal.
Encara que no siga prova plena pofe aximateix teñirse en compte
la circunstancia d' haverse trovat, la lápida predita del carrer d' Ar-
let, en lo vehinatge de la antigua Iglesia de Sant ^Liquel, per confir-
mar la existencia de les termes de Minicio Natal en 1' indret de Bar-
celona ocupat per lo mosáich.
Lo RECH COMTAL Ó DE MlR
Lo decaiment general que sufrí la civilizado romana implantada
á Barcelona, durant la Uarga dominado visigotha, porta aytambé mu-
190 F. CARRERAS Y CANDI
tació de costums, que, en general esperimentaren retrocés. Sens dubtc
llavors, r aqueducte y les termes, se derrocaren, obrintse per 1' us del
»públich los Innecesaris pous de la ciutat ante-romana, ó altres de nous
hont mes hi convinguessin.
Lo caudal d' aygues que de Monteada se llen§ava á la Ciutat per
vies de la canalisació que mena al aqueducte, devía discorrer proper
á les muralles de la urbe, al buscar son natural desayguament en
lo mar. Los Comtes de Barcelona tractaren d' aprontarlo útilment,
no já restablint 1' aqueducte en sa primitiva utilitat, puix tal cosa lla-
vors no s' estilava, haventse acostumat sobradament, los barceloninsí
ais pous y á les cisternes, sino convertintlo en utilitaria cequia ó redi,
que regás los camps y mogués les pesades moles deis molins.
D' aquí lo rech que, desde llavors, porta lo nom de Cornial y en lo
segle XI aytambé conegut per rech de Barcelona (1) Sa sortida al
mar en lo segle ix, s' efectuava per los volts de la capelleta de Santa
María de les Arenes, y junt á les muralles de Llevant, de la predita
Ciutat.
D' aqüestes muralles de Llevant, ne conexém tres noms locáis:
la torra Ventosa, cap á la porta del castell Vell Vescontal (en la ac-
tualitat placa del Ángel] seguidament los murs coneguts per Zos ^Za-.
dins al comensar lo segle xi (2) y la porta ó castell de les muralles dita
del jRego-Mir (3).
¿Podem crcure, que^ á mes del rech ó cequia Comtal^ hi desaygués
en esta part de Barcelona, altre rech nomenat d' en Mir? ¿O bé s' ha
de suposar senzillament, que, lo Comte quí feu dit rech Cornial, signé
lo comte Mir?
Contribuirá á formar exacte criteri 1' estudi general de la época.
Per desgracia, no conexém altres construccións semblants á Catalunya,
si no es certa cequia, de que, un document del any 964, ab referencia al
terme de Cervelló en lo baix Llobregat, nos parla ab lo nom de regó
de miro comité (4).
Los temps no poden estar mes d' acort uns ab altres: lo rech del
Comte Mir, á Cervelló, en 964; lo rego-Mir de Barcelona, citat en tar.ts
(1) A. 1050: <ad ipso regó de Barcliiiiona prope ipsos malinos de littorís maris> (Do
cnment nom. 111 de Kamón Bereogner I, arx. Corona Aragó).
(2) Vegis lo Boletín de la Real Academia de la Eistoria any 1903, artlcle de F. Fita.
A. 1096 «domos qnas babeo infra maros ciaitatis barohinone ad ipsos aladins» (Anf-
Eccl. Cath. vol II, fol. ll^i, doo 434).
A. 1101 «domos qaas babebat infra maros ciaitatis barcbinone ad ipsos aladins»
{A7it. Eccl. Cath vol IV, fol. 28, doo Íj7),
(3i Son nombrosos los docaments que 'n parlen y no crebem del cas oontiruarlos
Devém fer constar, que, preoedentment al any 95i, no bavóm trovat consignat en lloch
lo Begomir de Barcelona.
(4) A. 961: «in terminio de oastram cerailione et afrontat ipsa omnia que ibidem
donamas de oriente in regó de miro comité» (Cartoral de S. Cngat doc. 700) Es sapigut
que lo combe Mir regná deis anjs 954 al 9ó8 y per oonsegaent lo recb de Cervelló, datat
en 964, s' bauria acabat molt pocb avants.
LES AYGUES Y BAWS DE RARCHLONA 191
docuraents de la segona mitat del segle x ab referencia al lloch hont
desayguava al mar junt á les muralles, lo rech Comtal, son prova in-
duptable que nos presenta á la figura del comte Mlr, baix lo nou y
atractívol aspecto de protector de la agricultura, á la que dota d' ini-
portants cequies, la raillor de les obres publiques de llavors.
Nos estimém molt mes adoptar aquest criteri rahonable, que no
creure que la porta y castell del Rego-Mir de Barcelona, degueren son
nom, á un palau del fantástich rey Gamir, al quí, historiadors incons-
cients, posen al temps deis alarbs, com podrien colocarlo al deis ro-
mans ó deis goths, puix no hi ha prova hont apoyar sa fabulosa exis-
tencia.
Que lo Regomir de Barcelona, era un rego-mif y no un rex-gamir,
ho comprovará la existencia d' un pont en dit regó en lo burg de Bar-
celona, ó siga extra les sues muralles. Una escriptura del any 1016 ho
diu ab les seguents páranles: «domos quas habebat in burgo barchino-
ne in appenditio ponte de regumiro» (1). Un document del any 1014,
mostra al peu del Regomir, la casa d' un pescador, camps de fregenal
ó ferratge y un camí que voltant les muralles de la Ciutat (2) ha vía
de donar lloch mes avant, al carrer de Basea.
Lo gran be que feu eix rech del cómte Mir á la ciutat de Barcelona,
no teníni perqué ponderarlo. Los molins á que donava forca, eren del
patrimoni particular de la casa comtal, per manera que, quan Ramón
Berenguer IV hagué fretura de diners per la conquesta de Tortosa, hu
deis mijáns que emplea, fou hipotecar, en 1' any 1184. los molins del
rech comtal ais burgeses de Barcelona, los quals mitjauQant tan bona
penyora 1' hi dexaren la suüía que havía menester, sense recansa (3).
(1) Ant. Eccl. Cath. vol I, fol. 132, doo. 339.
(2J A. 1011: «meo casalicio ab aliqaid de oarte cntn 011a fastamina et sno solo et
suas parietes snaque ejus portinentia quod habeo in Burgo foris maro ciuitatis Bar-
ohiuonense a parte Rugumir prope ipsos Domos de Bonus homo presbiter vel de Gal-
tredopíscaíor». Oonffontava dita casa: «de parte circi in ips» Andrina que est in ter-
mine de Gultredo: de aqullonis in ipsa via: de Meridie in ferragenale de Segiato: de
occiduo in istrada publica qui inde gredit per calce de ipsa mura». (Docament 113 de
Ramón Borrell, arx. Corona Aragó),
(3) A 1184. Per lo molt interessant que resulta esser V emp«nyorament deis molins
comtals y altre patrimoni de Ramón Berenguer IV, ais burgeses de Barcelona, conti-
nuara tot senser dit document:
«Si6 notam cuncti» quod ego Baimundus comea barchinonensis princeps aragonen-
sis et marchio inpignero uobis bargensibus barchinone: magnis et paiais qui in isto
prestito eritis, meos molendinos totos nouos et ueteres preter ipsos de doto mellia et
omnes meos usaticos et omnes meas leudas maris et terrae tam de xpianis quam de
sarracecis atqueiudeis et totas ipsas chintas et totas meas exitas quas habeo uel ha-
bere debeo in barcbinona. exceptis meia iustioiis et excepta ipsa moneta ao prediotis
molinis de doto ut teneatis possidearis et expletetis iamdicta omnia libere et quiete et
sine aliüuius crntrarietatis obstáculo vos et quoscumqae uolueritis per nos quousque
totum uestrum debítum habeatisinde plene et integriter recuperatum sine uestro en-
gan. Insuper conueo io uobis in bona fide mea ut omnia suprascripta faciam uobis fir-
miter teneri haberi possideri et explotare et quod ego aut aliqua persona per me non
faciam uel faciat uobis inde ullam iniuriam uel uiolenciam aliquo modo doñee totum
192 F. CARRERAS Y CANDI
Molt se questioná, en 1136, entre lo Comte de Barcelona y lo senescal
Guillém Ramón de Monteada, per causa de la cequia Comtal, prome-
tent aquest al Soblrá. no empatxarli sempre y quan volgués, portar
la aygua del Besos, ais molins de Barcelona: mes que axó no im-
pedís d' altre part, la condúcelo de la aygua ais molins de Monteada
propietat del Senescal (1).
No 's separa, per co, lo rech Comtal, de la Corona, puix en 1274,
Jaume I concedí á cens, al rector ó beneficiat del altar de Sant Joan
construit en Santa María del Pí, certa quantitat d' aygua de la cequia
Comtal (2).
Llarga controversia tingué Jaume I ab lo bisbe de Barcelona Ar-
nau, primer sobre lo regar una parellada que lo bisbe tenía junt á
Colom de Salata y 1' aqueducte que atravessant dita parellada, regava
r arenal que hi havía entre ella y lo mar y després á causa del molí
del bisbe, conegut per molí de Guillém de Lacera. Finaren estes ques-
tións, per sentencia arbitral, pronunciada á les nones de -Marc de 1272,
preceptuant entre a I tres coses, que tot 1' arenal existent entre dita ca-
rretera y lo mar se regás ab les tres quartes parts de la aygua y per-
tanyés al Rey (quod dominus JRex et successores sui j)ossint dictam
aquam ducfíve uersus arénale quod rst uersus lacunam sub ipsa via
publica qua (tur uersus bisocium) (3).
Lo propi Monarca, en 1279, otorga ais prohóms de Barcelona, au-
vn-strum d«bifcuin habnatis indf sine nlla diminncione recuperatum quod michi acó-
modat'8 in exercitu et, in obsidione tortos^e. Precipio etiam nobis atque preci.iendo
absoluo: ut nichii de ptedicto pignore ab aliqa» persona i rparari uiolari uel anferri
sintatis. Facta ista carta III nonas decembris Anno XII Rogni ledoaici iuniori«
S'^Raimundi Comes. Sig-^num Guilelmi raimundi dapifori. 8ie>r'nnm Petri bertrandi
>'-pnum A.rnalli de lercio -)^num bemardi dt> belog S4-<nnni Raimnndi arnaili de nila
do muís S«pnam Geralli de rapi*no, sí^J^cinin Gailelmi de mont oada S-^nnm arbert.
S^fgnum Gailelmo barchinonensis episcopi >Ji. Sig>í<nam Sig>^niiin poncii
scriptoris qui hoc scripsit per mandatam comiti'. Jaro ego Guilelmus de mont cada
quod sicut superius scriptum est ita teneat comesl'rarchinonensis et niohil inde disram-
pat uei frangat per se ue' aliquam personam hominis uel fetnine Et si aliuuo euentu
faeritindo ali-iuid uiolatum uel fractura ego iamdiotus guilelmus ueniam in barohi-
nonam ad deoem dies'ex quo iam dicti burgenses aut unu ex lilis me iade comonuerínt
uel comoQuerit. per se aut per nuncium uel per literas et.. e non Iransgrediar ci'llem
dein'urca tus ne^ue coUtm de lisa OHl-ita ñeque ul^r v unutn miliarium exr.ra bar-
chinonam di.neo quidquid iufractam uel trans^re.-sum esset resti^-ueretur et redirin-
getur ad integrum per deum et heo sancta IIIl. euangelia ad Inudi ■■ ium denem iiiro-
rum quos predicti burgenses elegerint qui in hoc prestito sint. Istilioc iurinerunt Gol
lelmus de mont cada Petrus bertrandi de bellog. Arnallus de lercio. R. arnaili de uilla
de muís. Gerallus de rupiano. Vrbertus de castel uel.'In hoc prestito acomodauit ber-
trtindus marchuz mille et D. solidos. Johannes martinus Mille solidos. Eimericns mi-
He solidos. Guilelmus pon j mille solidos. A. adarro cum genere suo DC solidos. Pere
ama'rig et gener eius D. solidos Fiíii arnaili petri de archa D solidos Ermengod de
metire^H milie ce. J- hanues tota o. -o • boli'tus-
.\rxiu de li ' a'ejrul df Bi,rc lona
(1) Colección de documevtoa inéditos del archivo generulde la Ci roña de Ara '<5?!, vol IV
plana 43
(2) Registre IH, foli 192, arx. Corona d' Aragú,
(3) Registre 26, foli 131. (Arx. Cor. Aragó.)
LES AYGWES Y BANYS DE BARCELONA 193
torizació de pasar la aygua que volien coiiduhir á la Ciutat, per la ce-
quia, ajudant á les despeses lo Sobirá y tots aquells que s' utilisaven
de la dita aygua, axis en los molins, coni en les hortcs y torres de re-
gadiu (1).
En les derreries del segle xii ó principis del xiii la orde hospitala-
ria de Sant Joan de Jerusaleni possehia molins y drets de regar en la
cequia Comtal segons apar d' un conveni entre lo rey Pere I y Frá
Eximen de Lavata gran mestre á Espanya, qual document trovantse en
deplorable conservació, no 'ns ha sigut possible extractar per com-
plert. En recompensa de la cessió de certs drets ó propictats que feren
los frares al Rey, aquest los hi entrega un molí en lo casal nomenat
des Soler, designat (¿lo molí?) de Nadal, lo qual entrega lliurement,
sense que 1' Hospital hagués de contribuir á reparacions y obres del
aqueducte y venint obligat, lo batlle reyal, á teñir aparellada la aygua
al molí, sense cap despesa per part de la Orde. També s' cstablí, que,
lo batlle reyal ó son representant, no impedís á ningú anar al molí del
Hospital de Sant Joan, percibint, aquest, per la moltura, los drets
acostumats en los demés molins del casal des Soler. S' establí aytambé,
que aquesta Orde no tingues en lo molí, animáis de bast per portar lo
blat ó la fariña, sino tant sois per empriu de la matexa. Concedí, lo
Rey, al Hospital, lo dret de regar les terres del más del Clot, á ses pro-
pies despeses y mitjangant algunes restriccions (2).
En r any 1266, la aygua del rech Comtal sufrí notable perjudici,
puix no arrivava ais molins vells de la ciutat, Ho motivava les con-
cesions fetes per lo Sobirá, de construir alguns molins co es, lo primer
ultra collem de Finistrülis quod est den Peris, altre á S. Andreu de Pa-
lomar, altres, de Benvenist, d' en Carbonell, d' en Bonet, del Bisbe y
de Guillem de Lacera, quins particulars, fent regolfar les aygues tirant-
les á altres cequies, les distreyen de Barcelona y portaven á regadíus.
Lo rey Jaume I determinat á posar remey radical á aquest dany, sen-
tencia la desaparició deis molins nous, si be volgué que d' altre part s'
indemnisasen degudament ais propietaris, deis perjudicis que hagues-
sin pogut teñir (3).
Mes avant Jaume II, en 132o, anula lo privilegi alegat per alguns
particulars de poder anar á portar grans ais molins reyals, ab animáis
propis Uurs.
(1) A. 1279: «placet nobis quod vninersitas proborutn hominum barohinone cnm
sui8 Bumptibas addu-iant aquam ad Ciuitatem barohinone per predictam Cequiam et
quod nos oontribuamus in expeasis quod fient in adducendo diotam aquam juxta utili-
tatem quam nos habemus de predicta aqua. Ita videlicefc quod omnea illi qui utuntnr
dicta aqua siue in molendinis siue in rigando vel aüis contribuant in predictis expen-
Bisjuxta utilitatem quam Labent de preiiota aqua et satisfao'ant uoluntati nostre
super contenoione quod esi internos et eos ratione predicteaque.» (Registre 42, fol 126)
Arx. Corona Aragó).
(2) Arxiu del Gran Priorat de Catalunya de la orde de Sant Joan de Jerusalem.
(3) Diversorum secundas folis 241, 245 y 246, arx. municipal de Barcelona.
13
1903
194 F. CARRERAS Y CANDI
En les males condicions en que discorrien aqüestes aygues, no es
possible teñir conexement deis dampnatges que ocasionaren á la sanitat
de Barcelona. Consta, empero, que, enl'anylSTS, inficiona les cases
del portal Nou per hont passava (1); axis com que, en 26 de Setembre
de 1499, hagué de prohibirse lo tirar ventres, budells y altres despulles
ó carnases, en lo Rech Comtal. Tres segles no foren suficients á posar
remey á semblants danys; puix lo Consell de la Ciutat, en 1' any 16B1 ,
tractava encara d' evitar se llensassen gats y cans morts, en les aygues
déla cequia (2).
Tenim altres curiosos noves del rech Comtal deis segles xiv al xviii,
obrants en r arxiu municipal de Barcelona, referents á obres en la
cequia, adquisicións de molins per la Ciutat, construcció de rescloses
al Besos, aprofitament de la aygua de la cequia per regar les priraeres
plantacións d' arbres de la Kambla, etc., etc. Lo ferne relació deta-
llada, ocuparía una extensió major de la que volém donar al present
article y com per altra part, aquell á quí convingan altres detalls,
facilment los trovará, crehém suflcient transcriure les anotacións, que
dexá consignades en la sua Rúbrica, 1' escrivá racional de la Ciutat
n' Esteve Gilabert Bruniquer.
«En r any 1336 foren edificats los molins nous perqué los vells no
bastaban de dar compliment y los Administradors del Hospital den
Pere Des vil ar pretengueren nos podían fer per lo dany quen rebría
son molí e per 90 a 15 de Janer 1338 lo Procurador fiscal del Rey y
los hereters de dits molins nous donaren una petició en Consell de cent
demanant que lo hospital cessas dita demanda.
«A 23 de Desembre 1377 lo Consell comete á Consellers derrocassen
los molins den Malla, perqué la aygua causava mala salut y també
derrocassen lo moli de Bertrán Qamuntada.
«A 15 de Noembre 1378 lo Consell delibera comprar los molins
de Andreu de Malla y de Guillem (J!amuntada per evitar la infecció
y corrupció del Rech cubert que per dins Ciutat venía fins al Pont
den Canderá, que causava que aquellas partidas del Portal nou
eran desabitadas y donan forma com se ha de pagar sens dany de la
Ciutat.
«A 30 de Agost 1379, com la Ciutat bagues comprat los dits molins
per derrocarlos, tractan en consell de ques fassan ais Molins de Sant
Pere que son del Hospital den Pere Desvilar dos molas mes- y de crexer
lo Casal.
«A 26 de Juliol 1386 albará del mestre racional en orde á la compra
de la Ciutat deis molins reals, Diversorum 4^8 fol. 310.
«A 13 de Maig 1393 lo Consell de cent delibera pagar a la Abadesa
(1) Rubricada Bruniquer, vol. III, cap &1, fol. 196,
(2) fíúbrica de Bruniquer, vol. III, cap. 70, fol. 127.
LES AYGUES Y P.'.NYS DE BARCELONA 195
de ?ant Pere 4000 sous per las duas rodas del molí den Malla que
foren transportadas al moli de 8ant Pere.
«A de Juliol 1395 fou feta la resclosa á Besos per pendre la
aygua del rech reyal y las horas la Ciutat era Senyora deis Molins
reyals.
«En lany 1396 la Ciutat feu adovar y reparar la Riera de Horta
que es sobre lo rech reyal que es de la Ciutat vers la partida ó loe
devant la torre de Ramón Botella.
«A 12 de Setembre 1397 deliberació sobre la venda fahedora al
Hospital de raitg corta de forment quis rebía sobre certs Molins, alou
de la Ciutat.
«A 13 de Mars 1404: Provisións de Consellers com á Señors deis Mo-
lins Reals á favor de la Abadessa y Convent de Santa Clara, sobre
certs censos que cessaban de pagarli, ordenant que li fossen pagats.
Diversorum 3^8 foli 101
«A 24 Febrer 1405 se delibera la despesa de la aygua de RipoUet
per metrela al Rech Condal, costa 300 fiorins y ab altra deliberació feta
á 28 de dit, se veu que la despesa fou 400 fiorins.
«A 5 de Juny 1412 foren pagades per fer una resclosa á Besos per
defensa del Riu y pendre la aygua del Rech Condal 82 Iliures 10
sous.
«A 9 de Desenibre 1417 apoca del Cía vari de la Ciutat a Antoni
(^kbastida alias Hostalrich de 13 Iliures 10 sous per sens del moli nou
que es en lo Casal nou nomenat de Soler y del Moli terpal en dit Casal,
ques teñen en alou de la Ciutat succehint al Senyor Rey.
«A 15 de Mars 1418 Jaume Gilabert loha y aprova la servitut de
son camp que los Consellers se havian presa de dit camp á obs del
Rech Condal.
«Los Molins reyals foren venuts á la Ciutat per lo Rey en Pere
raitjan9ant carta de gracia y foreu remuts y restituyts al Batlle Gene-
ral á 12 de Noembre 1428. Vide lo Dietari.
«A 10 de Febrer 1440 Consell sobre la compra deis Molins Reals
per preu de 20.000 fiorins.
«A 15 de Febrer 1449 requesta de Consellers ab lletra del Rey al
Batlle General perqué no arrende los molins reals per las vexacions
feyan al Poblé.
«A 25 de Febrer 1450 lo Batlle General demanava que la Ciu-
tat procures que tots los molins vinguessen á una unitat y lo Con-
sell resolgué no convenía perqué lo Poblé ne sería mal servit,
empero á 27 de Noembre fou deliberat que tots los molins del Rey
y de hereters y del Hospital den Pere Desvilar fossen mesos en un re-
giment,
«A 16 d^, Agost 1452, los Consellers Senyors de Sabadell scriuen al
Batlle de Sabadell fassa crida prihibint lo regar, á fi que la aygua
puga venir á Barcelona ais Molins per la gran necessitat ni havía tam-
196 F. CARRERAS Y CANDI
be scriuen al Paborde Major de Sant Cugat de Vallers, que fassa que
la Riera de Ripollet puga entrar en lo Rech Condal.
«A 30 de Agost 1457, resclosa de Besos, se tracta de feria de arga-
massa y van á Moneada per regonexer lo loe hont se devía fer y á 16
de Noembre se diu que lo Batlle General hi daría 2000 florins y los
hereters 1000 y que la Ciutat hi donas 30.000 florins.
«A 17 de Setembre 1460, fou deliberat fer la Bassa foral Portal del
Carnelatge vuy apellat ab aqueix nom, perqué les hores noy havía
portas.
«A 26 de Juny 1473, perqué los Consellers despenien excessiva-
ment en las añadas que feyan cada any una jornada per visitar lo
Pont de Senboy y altra jornada la vía de Moneada per visitar lo Rech
y altros aparatos de les aygues, deliberaren no poguessen despendre
sino fins en 10 ñorins valents 5 Iliures 10 sous.
«A 24 de Abril 1475, perqué la Ciutat no rebla res de les Rendes
de la Batllía General perqué no bastaven á pagar los Censáis vells y
axi la Ciutat no podía esser satisfeta de sos censáis y Mossen Jaume
Fivaller havía obtengut, que donant ell 300 Iliures al Rey li feye sta-
bliments de certs molins y asso nos podía fer sens consentiment de
la Ciutat per 90 ho proposaren 3n Trentenari y digueren que pujas al
de Cent.
«A 11 de Mars 1491 deliberan que lo Rech Condal que roblie lo
JMoll vage per lo loe hont costumava passar y á 13 de Maig deliberaren
quel fassan girar la via del valí fora la muralla.
«A 10 de Noembre 1518 capitulació entre Concellers y Batlle Ge-
neral sobre posar enunitat y en companyía los molins de Sant Pere y
Reals.
«A 4 de Abril 1525 se tracta de fer companyia de tots los molins per
temps de sinch anys.
«A 26 de Juny 1529 per estretura de ajguas la Ciutat embiava á
molre á Molinderey, Sabadell y altres parts y per 90 lo Batlle General
maná tapar les fibles del Rech Condal. Vide lo Dietari.
«A 15 de Desembre 1530, Consell ab ques declara que la Ciutat
licitament havía pogut fer la scurada del Rech Condal com á creadora
sobre los Molins Reals y perqué era interés del be públich y que la des-
pesa se li devía fer bona y que lo Cía vari ho cobra y reba deis preus
deis Arrendaments y fou lo gasto 3168 Iliures 8 sous 10.
«A 7 de Octubre 1535 se tracta y procura com á cosa que conve
posar en comunitat los molins dispensant pro hac vice la ordinació queu
prohibeix.
«A 9 de Abril 1578 se tracta de mudar lo Rech Condal y ferio exir
al Portal del Carnalatge perqué quant hi ha maror, no dexa entrar la
aygua del Rech á la mar y fa gran dany perqué se scampa peí Pía
den LulI y la Ribera y en lany 1606 se feu dita obra del Rech yl feren
que isques per lo carrer de Santa Clara, empero no rehisque perqué
LES AYGUES Y BANYS DE BARCELONA 197
la aygua trobá aquell pas massa alt y axí va per lo mateix álveo que
abans.
«A 23 de Abril 1583, regalía contra los qui impedien la aygua de
Besos no arribas á Barcelona.
«A 13 de Juny 1584, deliberació de reparar la resclosa.
«A 14 de Juny 1584, Consell de Cent perqué los Canonges de la
Seu havien desfeta la resclosa del Rech Condal perqué la aygua anés
al seu moli de Santa Coloma de Gramanet.
«En lany 1586 embiaren embaxada al Rey demanantli inter alia
venes á la Ciutat los Molins y cops.
«A 25 de Juny 1591 deliberació de traure lo rech de Ripollet qui
passa á Moneada á debit deis raolins reals.
«A 6 de Setembre 1646, en Concell de Cent se tracta de adobarla
resclosa del Riu de Besos, pera evitar lo dany á la Torre del Cap del
Riu.
«A 24 de Noembre 1676 foren deliberadas pagar 40 Iliures per lo
preu fet de fer un rech en lo Arenal desdel Baluart de Llevant á la
mar á efecto que per dit rech discorregues la aygua del Rech Condal
que vá per dintre lo valí y lo mateix die foren deliberadas pagar 33
Iliures per la entrada de un establiment fet per la Batllía General á la
present Ciutat de poder teñir lo empriu de rentar y netejar las tripas
deis Bestiars de la Ciutat en lo dit rech, á cens de 2sous annuals, lo vn
per lo cens y lo altre per la Amortisació y á 31 de Juliol 1682, en Con-
cell se tracta lo mateix.
«A 20 de Agost 1677 fon deliberat ferse vna Caseta al trastallador
que es devant Sant Agusti, per lo qual emboca la aygua del rech á la
Clavaguera mestre del Carrer den Gensana, fentse porta en aquella á
íi que se puga tancar en clau.
«A 21 de Abril 1682 en Concell de cent se tracta de fer nou lo Pont
del Rech Condal y á 4 de Juny foren deliberades pagar 86 Iliures 13
sous 3 per la primera paga, etc.
«A 2 de Juliol 1703 en Concell de Cent se tracta de fer vna fibla en
lo Rech Condal pera conduhir la aygua pera regar los arbres de la
Rambla y á 12 y 14 en Concell se tracta lo mateix y á 13 y 22 de Agost
en Concell se tracta lo mateix y á 5 y 7 de Setembre en Concell se
tracta lo mateix y lo dit die 7 en lo Manual se troba la acta de preu
fet de dita obra y á 12, 14 y 27 en Consell se tracta lo mateix y á 10
de Noembre en Consell se tracta lo mateix y á 24 en lo Manual se
troba altre acte de preu fet y á 28 en Concell se tracta lo mateix y A 27
de Desembre en Concell se tracta lo mateix y á 12 de Janer 1 704 en
Concell se tracta lo mateix y á 30 en lo Manual se troba lo acte de
venda de la Caseta deis Anamorats y lo mateix dia en Concell se tracta
lo mateix y á 22 de Setembre en Consell se tracta lo mateix y á 4. 9 y 23
de Octubre en Concell se tracta lo mateix y á 16, 21 y 30 de Noem-
bre en Concell se tracta lo mateix y á 10 de Desembre en Concell se
198 F, CARRERAS Y CAXDl
tracta lo mateix y en aquest día en lo Manual se troba vn acte de
Preu fet de fabricar una Caseta prop la muralla de la torre de Sant
Sever y fer vn rech clos desde dita Caseta flns al cantó de la Vniver-
sitat per conduhir dita aygua y á 23 de febrer 1705 en Concell se tracta
lo mateix y á 17 de Juliol en Consell se tracta lo mateix y á 25 de
Janer 1706 en Concell se tracta lo mateix y á 16 de Juny 1707 en lo Ma-
nual se troba altre acte de Preu fet y á 13 de Setembre en Concell se
tracta lo mateix y á 26 de Noembre en Concell se tracta lo mateix y
á 29 de Noembre 1709 en Concell se tracta lo mateix.
«A 13 de Febrer 1712 en Concell de Cent se tracta de la venda feta
per lo Rey á la present Ciutat deis Molins y altres cosas y á 20 en Con-
cell se tracta lo mateix y á 2 1 de Juliol en Concell se tracta lo mateix y
á 15 y 22 de Octubre en Concell se tracta lo mateix y á 11 de febrer 1713
en Concell se tracta lo mateix y á 10 de Maig en Concell se tracta lo
mateix.
«A 7 de Febrer 1712 se troba lo acte de possessió deis molins reals
donada per lo Procurador fiscal Patrimonial de la Batllía General á la
Ciutat.»
La cequia Comtal, tenía adscrit un empleat qui cuydava d' haver en
bon condret la sua boca ó sortida á mar. L' oñci feu enveja á hu deis
oficiáis de la Ciutat, al escrivá de les obres, qui profitantse de la mort
del qui lo servía, en 1494, se '1 feu adjudicar ab son acostumat sa-
lari (1). Ab semblants combinacións no hi solía guanyar lo servey mu-
(1) Concell ordinari del 28 de Febrer 1494.— «ítem hi fonch proposat com en pnix
de roda qui tenía carrsch per la Ciutat de teñir en condret lo rech de mar era passat
daqaesta vida e per co couenia en lloch de aquell esserhi elegit altre. E per que era
vist per ells dita Consellers que dit oífici era mes condedcsnt esser exercit per lo
Scriva de les obres de la Cíatat per diuerses respectes que no per altres; e tenia oa-
rrech de coses no pertanyens a son olñci en les quals donaue bon recapte sens satís-
facció alguna que no Un era feta. Per 90 proposauen en dit concell que si a aquell
era plasent lo prouehis del dit exercici ab lo salari acustumat esserli donat de V lliu-
res quesonn any.»
Lo Concell axis ho aprová, donant lloch á que segurament en Paig de Koda pre-
sentas lo seguent escrit ais Concellers.
«Magnifichs Sors. e de molta magnificencia. —A noticia den pere eecriua de les obres
de la present Ciutat es vengut que en lo consell ordinari dererament celebrat en la
consellaria pr.p pessade cens ell esser oyt seria stat jriuat del oífici de teñir en
condret la bocha de mar del Kech condal lo qual offici es de pocha valor pero en mix
al offici seu hi tots los pessa's de son ofñci han tengut e regit aquell Se^ons en los
compteb de les obrarles de X, XX, XXX anys hi de tant que no es memoria en contra-
ri se pot veure hi com de dret sia que nengu no deu esser priuat de sa possessió cens
coneguda de dret e cens que no sia hoyt esta en mirar deis qui en tal han votat sino
que creu que canssats per esser ora tant tarde per acabar dit consell hi no esser de-
tenguts ho han portat axi hi ab pensament que los del dit consell hi los altres del
present consell medarament miraran en esta cosa ocorra hi suplica ais dita consellers
e consi'U que sia plasent reuocar cassar hi anuUar la deliberado feta en dit consell
de trenta sis hi aquella hauer per nuUa com se sia feta sens hoyrla part o tens nin-
guna informacio rebuda de la iiecligencia o culpa que es stade impcsade al dit scriva
de la qual culpa es molt cert dit pere mani es fora. Per vo suplique lo dit scrina sia ma-
nat pendre informacio silos casatinents del pía den luU dts de que lo moli armuseo
LES AYGUES Y BAXYS DE BARCELOXA 199
nicipal, cora tinguerem ocasió de fer veure ab motiu d' altre fet per 1'
istil, derrerament referit en nostre raonografía Lo Montjuicli de Bar-
celona.
La cequia Comtal sufrí les consequencics del ailunyaraenl y falta
d' aygues, en los temps en que lo caudal superflcial del Besos, s' escur-
sá fins al punt present, que, sois lii corren per damunt aygues, en
anys abundants de pluxes. De manera que ha sigut necessari moder-
nament practicar diferents trevalls de mina per alimentar, ab les so-
terranías del riu, la antiquísima cequia barcelonina, que tant de prop
seguí á la famosa d' Ecija construida en 949 per Al-IIakem II, la pri-
mera cequia d' Espanya, puix ab ella s' inaugura la implantado d'
aquest nou avene agricol.
Pí y Arimón en 1854 y Moner en 1903 (1), nos han donat compte d'
aqüestes obres, copiant les inscripcións conmemoratives, posades en la
mina en 1778, quant se construí essent intendent lo Baró de la Linde,
y en 1822 y 1838, en que s' allargá, á causa de noves necessitats. Des-
de llavors, una Junta mixta en la que hi teñen participado les dife-
rents entitats interessades, cuida de la administrado de dites aygues
y cequia.
Lo creximent de la moderna Barcelona, ha convertit en edificis la
major pan deis conreus que s' extenien del peu de ses derrocados mu-
ralles, al terme de Palomar. Y en estos derrers temps, al desaparexer
molíns y regadius sustentáis per la vella cequia Comtal, per lo regó
Mir del segle x y al perdre aquesta, sa primitiva utilitat, s' imposa do-
nar altre aprofitament á ses aygues.
La futura utilitat que prestará la cequia Comtal, no pot esser mes
que netejar y sanejar les cloaques de Barcelona, aquest padrastro de
es stat enderroohat per loe obrss passats lo dit Reoli ha rehinflaí; ni ha vnplertes les
cases de aygua. Com sia veritat que ans de enderocar lo dit moli sentiam aquex dan a
cansa del dit moli e no á. causa de la necligencia imposaie al dit soriua com ai a cau-
sa sua aquest any hagueren vist hisentit anug los dits casatinents a causa delesmol-
tes aygues son estades. E lo dit Rech es vengut gros hi com los obres tinguen facultat
de mirar sobre los menistres de la obrería hi si necligencia posen en los dits officis hi
posen adespeses llura altres persones quitan dit exercici hi seria dar causa de pri-
uar ais dits obres de dita jurediccio. E com lo salari de dit offici se pach del ordinari
E com lo dit offici eusemps ab lo del scriua sia estat donat anen ffranci vidal
soriua de les obres per lo consell de trenta sis celebrat a XXVIII de fabrer any Mil
CCCCLXXXXIIII ab los matexos drets hi pertinencies sia stat reuestits deis dits
officis lo dit pere marti notari vuy de dites obres en lany de la consellaria de mossen
dionis miquell e obraría de mossen Juanot des torrentper no efser mes prolixni dete-
nir ais magnlflohs consellers e consell se dexa de dir lo que mes se poria Sois suplica
que sia prouehit per lo dit consell com de dult es suplioat hi sera seruar la pruticha e
oostum de llurs antipessats que nunqua ais of-fioials hi menistres de dita casa han des-
poliats de llurs officis cens coneguda do dret hi ab tal oonfianía lo dit scriua recorra
ais dits magniñchs consellers e consell que purgaran llurs consiencies hi apres de tants
serueys ha fets a la dita Ciutat lo premi de aquells hi satisfácelo no sera spoliarlo de
Uur offici. Et licet, etc.» {Cartas Comunas Origináis U40, arx. municipal de Barcelona.)
(1) Vegis lo Diaño de Barcelona del Maig de 1903, plana 5937, Apuntes históricos sobre la
acequia condal.
200 F. CARRERAS Y CANDI
nostre progresiva Ciutat, que, quan se 1' hagi pogut treure de sobre, 1'
acostará d' alguns kilometres á lo restant de la Europa civilisada, com
ha dit molt bé lo Sr. Selles en cert trevall dcrrerament publicat sobre
aquest tema (1).
Banys públichs de la Edat Mitjana
Lo burg ó re val junt á Santa María d' extra muros civitatis Bar-
chinonejuxta litore maris, com 1' anomenava un document del any lül8
(2) comeníjá á poblarse en lo segle xi, envoltant á la capella y á uns
banys emplazáis en son vehinatge, per los que, tant se podía utilisar la
aygua del recli Comtal que hi passava prop com extréurela de pou ab
sinia y catufols.
Aquests banys, á les derreríes de la Edat Mitjana reberen lo nom
de vells, per antonomasia d' altres banys coneguts per nous y de qual
construcció y origen ne conexem alguna cosa.
Migrades despulles deis banys vells de Santa María, se conservaren
fins á les derreríes del segle xvi, segons explica Pujades (3). Lo ca-
rrer hont estigueren situats, encara subsisteix, ab la reduida ampiada
que tingué en los temps en que s' hi anava á pendre banys, co es, nou
cents anys enrera.
De consemblant manera se parla encara á Barcelona del carrer deis
banys nous, per mes que en tal carrer sois s' hi banyin los que tingan
banyera á casa seva y derrerament resultes sarcástich aplicar al edi-
fici lo calificatiu de nou. En nostra Ciutat los llochs que 's diuhen
nous, tais com la pla9a Nova, lo portal Nou. lo carrer Nou de Sant
Francesch, etc , solen comptar llargues centuries d^ existencia. Y cer-
tament^ que, si tots estos llochs oious son prou vells, á tots ells los
guanyava en antiguitat, 1' ediíici destinat ais banys nous en lo cali
juich.
No tant sois eren les aygues patrimoni déla Corona, en nostre Prin-
cipat, sí que també ho foren los banys, existents en les principáis ciu-
tats de Catalunya, indubtableraent com á llegat de les costums y civi-
lisació sarrahina. Quan Lleyda fou conquistada ais sarrahins, hi havía
uns banys públichs, los quals crehem subsistien en les d-erreríes del
{l^ Saneamiento y mejora de Barcelona su aplicación al desvio y aprovechamiento de la
acequia condal, per Salvador Sellos y Baró: publicat en la Revista de la Cámara Mutua
de la Propiedad, any I, pl. 58 (Barcelona 1903).
(.2) Document. nom 4 de Ramón Berenguer I ( \rx. Corona Aragó).
(rJ) «Y hará co' a de treinta años que en aquella caUe, á mano izquierda, cami-
nando á. la dicha iglesia de Santa María, á la mitad de la calle, se hallaban aún los
vestigios do aquellos baños». {Crónica universal del principado de Cataluña, vol. III,
pl. 72.)
LES AYGUES Y BANYS DE BARCELONA
201
segle XV (1). Axis raateix á Balaguer, en 1' any 1150, existía, la casa
deis banys, en una de ses places (2). A propósit de la Ciutat de Ge-
rona y de sos banys mitjaevals tenim á la vista una interessant mo-
nografía que publica Girbal en 1888 (3). Allí demostra com los banys
existíen en 1194, si be manifesta que no creya s' atrassessin á molta
major antiguitat. Mes avant sigueren destruits per los francesos al
finar lo segle xiii y donats per lo Rey, en 1294, á Ramón de To^lA, á
condició de reedificarlos (4). Ais dos anys s' havía acabat esta recons-
trucció esmersanthi mil noucents sous barceloneses. En 1342 lo Rey
enagená lo scnyoriu ó percepció de cens en dits banys en favor de son
físich Arnau (íe Adiaría ó siga Arnau Qa Riera. En 1' any 1618, los
banys de Gerona sigueren adquirits per les monges caputxines, les
quals los convertiren en convent.
Los banys de Gerona motivaren una controversia en lo segle xviil
e tre lo canonge Francisco Dorca qui afirmava foren banys y lo
P. Martí, canonge premostratensede Bellpuig de les Avellanes, qui sos-
tenía que era un babtisteri. Lo P. Villanueva dona detallada descrip-
ció d' est interesant ediflci, tal y com havía pervingut ais primers anys
del segle xix (5).
Ay també á Tortosa, en lo segle xiii, en lo concambi fet entre los
Templers y lo Rey d' Aragó, en 1294, foren cedits al Sobirá los
banys de la Ciutat (6).
Que los banys eren de la Corona ho vegém en lo regnat de Jaume I,
qui concedí en 1' any 1270, autorisació á un particular per construir
uns banys dintre la sua propietat (7). Aytambé lo mateix Sobirá en
1268, feu donació deis banys de garago(?a, á un tal Ramón Elies (8). Y
(1) AlsenyalarlocTirs d' una processó á Lleydí , en r any láS4, se din «e la professó
que tir per los banys al carrer den Amiguet que es lo carrer hon sta Jorda». (Villa-
nueva, Viaje literario á las iglesias de Espaila, vol. XVII, pl. 263.)
,2) A. 1156.— En la donació que feu GuiUém de Ponts ais templers de Gardeny de lo
que havia rebut de son pare á Balaguer, s' hi Hegeix «in ciuitate balaguerii scilicet
plateam que est in eadem ciuitate cum ómnibus sibi pertinentibus que tenet á domo
balneorum usque ad ortum Berengarii Geraldi-. (Cartoral deis Templers de Gardeny,
fol. 34, doc 65. Arx. de S. Joan de Jerusalem á. Barcelona).
(3) Estudio hiHtórico artístico acerca délos llamados haños-drabes de Gerona por D En.
riqtie Claudio Girbal. (Gerona 1888).
(4) Gratiarum II, foli 93, arx. de la Batllia del Eeyal Patrimoni á Barcelona.
(5) Viaje literario, vol. xiv, pl 184.
(6) A. 1-94: .Ítem conuenunt quod dictus dominus Rex in cambium balneorum
alfandie Dertuse det et concedat absolute im perpetuum diotis fratribusillam partem
ettotum jus et dominium et jurisdiccionem quam et quod habet et habere debet quo-
mddo ia Castro et homnibus de Ollera . Lo Kasoell d' OUers se trovava situat en la
ooncade Barbera. Se torna á parlar deis banys al senjaUr algunes propietats deis
templers á Tortora, ab estes páranles. «ítem duas domos afrontantes cum caldaria
balueorum et in viis publicis ítem tres patis sive solara domorum luxta ceniam bal-
neorama. (Colección de procesos-Legajo l.o anys 1291 á 1303 folis 17 y 18; y Legajo 4.^ .
Arx. Corona Aragó).
(7) Registre 14, foli 107, Arx Corona Aragó.
(8) Registre 16, foli 183, Arx. Corona Aragó.
202 F. CARRERAS Y CAXDl
en 1273, trovantse á Murcia, otorga los banys d' Algecires á Mestre
Joan, son cirurgiá (1).
Sentada ja la hipótesis de la preexistencia á Barcelona deis banys de
Santa María, passém á tractar deis que judicám posteriors y que per
co reberen lo calificatiu de nous, deis quals n' ha pervingut la manera
y forma com se fundaren.
Segons está ja indicat, eren, los banys, una regalía de la Corona.
Ramón Berenguer IV, en 1' any 1160, determina explotarla en com-
panyía del alfaquí Abrahám quí sembla f ou axis mateix conegut per
Bonastruch. Xo redubtá lo nostre Comte, de fer societat ab un israelita,
per manera que, al concedirli lo solicitat permís, de construir nous
banys á Barcelona, en lo vehinatge del cali juich ó bcirri hebráich, se
reserva dos terceres parts de les ganancies deis banys, constituintse
veritable societat mercantil entre ells dos. Lo contráete de societati
no pot esser mes interesante per les costums del segle xii, mostrant
com nostres Sobirans no desdenyaven entrar en empreses industriáis
que poguessen aumentar son patrimoni, encara que s' haguessen d'
associar ab una persona pertanyent á la proscrita y denigrada raca
israelita.
Ramón Berenguer IV possehía en les afores de les muralles de Bar-
celona^ junt al castell Nou Vescomtal, un hort que havía adquirit d' un
tal Pere Ricart. La situado del hort semblara molt á propósit per es-
tablir uns banys en lo burg ó ensanxe del segle xii y 1' alfaquí Abra-
hám emprengué la sua construcció y explotació d' acort ab lo Sobirá
y ab les condicions seguents. La tercera part de les ganancies sería
del alfaquí y les altres dos terceres parts del Comte. La construcció
deis banys y adquisició de banyeres, vasos, galledes y demés aparells
á obs deis matexos, sive de ipsa cenia, se pagaríen entre ells dos á
prorrata y en igual proporció que les ganancies. Finalment se compro-
mete Ramón Berenguer, á no concedir permís á ningú mes per edificar
altres banys á Barcelona, evitant axis competencies y assegurant
donchs los beneficis deis banys de junt al barri juich, al alfaquí con-
cesionari (2).
Després de mort Y alfaquí Abrahám, la sua filia Druda, Aztay
(1) Ile?Í3ire 19, foli 96, Arx. Corona Aragó.
(2) 8i be no es inedit, per haverlo publicat Villanueva en son Viaje literario alas
iglesias de España (vol. XVIII, fol. £94), per esser molt interessant y únich en la su»,
especialitat industrial, continuóm lo contiacte del 1160, éntrelo Comte y 1' alfaquí
Abrahám.
«In Dei nomine. Ego Kaimundus Comes Barohinonensis, Princeps Aragonénsis et
Marobio, dono, laudo atque concedo tibi Alfachino nomine Abram, ut construas et
edifices et plantes balnea in ipso meo orto qui mihi accidit de Petro Ricardi. Et prop-
ter labores et missiones, quas in ipsa plantatione et constructione balneorum feoeris,
dono tibi et tuis tertiam partem in iam dlcbis balneis et in ómnibus que aliquo modo
inde exieriat ad omnem voluntatem tuam exinde perficiendam per sécula cuneta.
Cumautem iam dicta balnea faerint edíñcata, et ad balneandum plenissime prepa-
rata quicquid exinJe ibi fuerit opus de cubis, de vassis, de galletis, de mandilia, de
LES AYGUlíS V BA.N'YS DE BAKChLOXA 203
Leviatorga y Salomón Leviatorga, filis llurs, vengueren á Guillém
Durfort sos drets alodials en los banys del castell Nou, per tres mil
sous barcelonesos. En la venta hi comprenien totes les plantacions,
trevalls, despeses, editlcis y paraments pertanyents ais banys, que, per
compra, obtinguc previanient, son antecessor, del comte Ramón Be-
renguer IV.
Al ensemps que portava á efecte aquesta adquisició, Guillém Dur-
fort, personatge de notoria importancia á les derreries del segle xii,
arbitrio del Rey d' Aragó, no sois la confirmaeió de la compra, sino
propter multa servitia qiice Domino Patri nostro ilLustriasimo Rcgi fce,-
licis memorice contuUsti et milii cotidie confers, que li fossen donades
les dugues parts de dits banys y construccions, que, com sabém per-
tanyien á Ramón Berenguer IV y per tant lieretá son net lo rey En
Pere (1).
D' hont era procehidora la aygua d' aquets banys, no ho diu cap
deis tres documents. En lo del 1160 hi pot aludir la expressió sive de
ipsa cenia. Si en realitat fós per sinia la manera com s' extreya del
pou la aygua, com apar indubtable, s' aludiría ais catufols, en les
expressions cubis, vassis ó galletis, del propi document. La matexa si-
tuado deis banys á nivell molt mes baix que '1 plá terrer, si no prova
gran cosa, pot confirmar, que la aygua no arrivaría á molta alsada y
per tant que be podía esser extreta de pou, ab lo travallós aparell deis
catufols d' una sinia.
A la breu y vulgar descripció de dits banys donada per Pujades, se-
gons los havía vist al comencar lo segle xvii (2), ne seguí altre de Bo-
sarte, en 1786 (3), qué 'ns esplica com los marbres d' eix edifici, ana-
caldariis, de parietibus balneoram, vel de toto edificio sive de ipsa cenia totum mitta-
tur efe defcur Ínter Comitem et Alfaguicnam 8cilicet, nt Gomes mittat duas partes efe
Alfaguimus niam. Et sic fiat omne opns inter eos. Insuper ego iam dictas Eaymnn-
du3 Comes Barchinonentis dono tibiprefato Alfaquimo ut nuUus alia faciat balnea in
Barchinona. Facta Í3ta carta quinto idus junii anao vicésimo tertio regni Ludovici
Jucioris. — S'i^Raymundi Comes.— Sig>^ntim Joannis Martini.— Sig-p'num BernaidiMar-
outii.— Sig>f num Guiliermi Eaimundi Dapiferi — Sig'J^anm Raimundi de Podio alto.—
Sig-t<Qum Arberti de Castrovetulo.— Sig^fíaum Poncii acribe qui liec scripsit super po-
sitia litteria in linea quarta die et annoquo snpra.
(1) Los dos documents del 1199, los pablicá á continuació del precedent, 1' autor
del i^iaje literario. A mes n' havóm vist transllats antichs en lo Gratiarum II, foli 194,
del arxia de la BatUía del Rey al Patrimoni á Barcelona, d' hont crehém ho copia Vi-
llanuevA.
[2 Es remarcable en la descripñó de Pujades (Coz-omca líMÍyersaí del principado de
Calaluiii, vol III, pl. 72; que precisa lo lloch hont se trovaren situats: «estaban en la
calla que hoy se Uaoaa deis banys nous, cerca de la Iglesia de nuestra Señora del Pino,
que va desde el pie de la bajada de Santa Eulalia á la Boqueria. Y allí, casi á la es-
quina, están aún las estancias de ks baños, las pilas y otras cosas que dan señal de
esto Eátaban mucho debajo do tierra, todos cubiertos de bobada gorda con diversas
colunas como UQ claustro; el cual en lo alto remataba en figura de simborio, por el
cual entraba la claridad. >
(3) De la descripció de Bosarte, se valguó Pi y Arimón en 1854, al dir: «En la casa
que forma la esquina de la callo de los Baños Nuevos y de la Bocaila existían unos
204 F. CARRERAS Y CANDI
ren á parar á la iglesia de Bethlem; y derrerament, en 1848, altre mes
detallada y técnica deguda al arquitecte barceloní Antoni Rovira y
Trias, quí, avants de desaparexer dits banys, en 1' any 1834, ne tra-
gué un dibuix y les anotacións que condensa en los dos següents apar-
táis (1):
«Esta pieza era un cuadrilátero de 42 palmos de lado y en su cen-
tro habla un pórtico, también cuadrado, de 18 palmos de lado de cen-
tro á centro de coluna. Este pórtico constaba de 12 colunas, esto es de
cuatro á cada lado La bóveda que circula el pórtico era de cañón se-
guido y los cuadriláteros de los cuatro ángulos estaban cubiertos con
bóveda váida; la del centro era un cono truncado con unas aristas que
formaban como una estrella, de modo que la base superior de dicho
cono estaba abierta por donde entraba la luz de esta sala y los cuatro
ángulos venían á formar unas pechinas. Estas bóvedas estaban cons-
truidas con una mezcla de argamasa y cantos rodados del tamaño de
una avellana y eran tan sumamente sólidas, que cuando las derribaron
por orden de su propietario, en el año de 1834, al objeto de construir
un nuevo edificio de alquiler, fué preciso ejecutarlo á golpes de mazo
que daban varios hombres con todas sus fuerzas.
«Las doce colunas eran de mármol blanco, y se conservaban algu-
nos vestí jios que parecían ser del pavimiento. La ventana con reja que
representa la lámina, daba á la calle, la cual es doce palmos más alta
que el nivel de dicho vestíbulo, á causa, sin duda, de la superposición
de las capas de tierra que desde aquellos tiempos se irían deponiendo,
según se infiere de la rampa modernamente formada que sirve de ba-
jada.»
i?aí508 -4?-a5es ó más bien de la escuela arábiga, construidos acaso en tiempo de los
Condes de Barcelona. Otros los hacen Romanos. Bosarte. que dá una buena descrip-
ción de ellos, tales como se hallaban cuando los visitó (1786;, dice que ocupaban la ca-
balleriza y parte del corral de la referida casa. Los restos más notables consistían en
un sadadero en figara de templo, cuya cúpula estaba cortada hacia dentro en trián-
gulos y sostenida por doce columnas de marmol blanco, cuyos capiteles no tenían la-
bor alguna. La cúpula terminaba en un agujero en forma de estrella, por el cual
entraba la luz A la izquierdi yendo al corral, veíase contra la pared un canalón segui-
do hecho de argamasa de cal y chinarro por donde el agaajiba al baño. Algunas co-
lumnas que sostenían unos aróos antes de entrar en el sudadero parecían restauradas.
Conocíase que el resto del edificio era un claustro y uno de sus cuatro lados lo que
entonces servia de caballeriza. Las bóvedas, par ¡des y la cúpula delsudidero estaban
enlucidas de estuco: el pavimento era todo de mármoles, de los que se extrajeron mu-
chos p ee llevaron á la iglesia de Belén. Las puertas, aunque tapiadas, daban á enten-
der que el ingreso principal del edificio estaba en el lugar que actualmente ocupa la
calle de la Bocaria* (Barcelona antigua y moderna, vol. II, pl. 370).
(1) «El museo de familias ó revista universal», vol. I, any 1848 pl. 95.
LES AYGUES Y BANYS DE BARCELONA 205
CONDUCCIONS DE FOXTS MITJAEVALS
A les derreries del seo:le xiii s' inicia una corrent de portar aygues
de fonts á les ciutats. A Barcelona, los frares Predicadors, en 1' any
1263, tractaren de conduirhi una mola d' aygua potable, permetentlos-
hi, lo rey Jaume I, passar per los paratges hont millor los hi apare-
gués (1). Aximateix á Figueres, en 1' any 1280, hi foren transportades
altres bones aygues de mina (2).
La ciutat de Barcelona en 1' any 1303, tractá de veure quines obres
hauria de fer per conduír unes aygues que sortíen de la montanya de
Montjuích (3).
En la monografía Lo Montjuích de Barcelona (4) publicaren! un ban
mostrant com en 1314, en lo portal de la Boqueria, mes proper á la
montanya, hi rejaven fonts d' aygua de Montjuích. No seria abundós
dit manantial, puix los Concellers privaren que sigues presa aygua
per fer tinta ne altre empriu, sino sol per son beure.
Essent, eix caudal d' aygua, insuficient á les necessitats de les indus-
tries deis barcelonins, es natural se preocupessin tot seguit de la ob-
tenció de manantials mes abundants, designantse com A, mes aproposit,
per esser aconduits á la Ciutat, los de la montanya deCollcerola, nom
ab que era designat lo Tibidabo actual.
Diuhen los autors, que la mina de Collcerola, fou descuberta ca-
sualment per un Fivaller, cassant á la montanya. Qual fet s' ha preten-
gut conmemorar en la font de la plassa de Sant Just, inaugurada en
1367 ab les aygues de dita procedencia, (5) al esculpirhi un falcó en lo
frontispici.
Aprovada la condúcelo de dites fonts, les obres se realisaren en los
anys de 1351 á 1355. Deis comptes del any 1351 , ne deduím, que llavors
se trevallava en la construcció de la mina (6) y en 1' any 1355, já ra-
java dita aygua en les fonts del Cali juích y de la plassa de Sant Jau-
me (7). En r any 1356, diu Pí y Arimón que 's feu la de la plassa de
Santa Ana, respecte á la que, en 1399, s' hi prohibí rentarhi en 1' abeu-
rador. Altres fonts s' inauguraren despj-és, com se dedueix de que en
1399^ fos privat ais boters, posar cercols á remullar en la font de la
(1) Registre 42, foli 15, arx. Corona Aragó.
(2) Registre áS, foli 170, arx. Corona Aragó.
(3) Delliberacions del Coticell 1301 1303, foli 91, arx, Mun. Barcelona.
(4) Iiremorias de la R. Academia de Buenas Letras de Barcelona, vol, VIII, pl. 217,
nota (86).
(5) Pi y Arimón Barcelona antigua y moderna, vol. II, pl. 410.
(6) Delliberacions del Concell 1350-1351.
(7) Delliberacions del Concell 1354-1359, folis 100 y 114. Vegis la Rúbrica de Bruniquer,
vol. III, cap. 65, foli 80.
20o F. CARRERAS Y CANDI
Mar (1): que en 1434, compres la Ciutat, la casa d' en Bernat Sola, en
lo carrer de la Avellana, per construirbi la font: que en 1681, al edifl-
car la iglesia de Bethlcm, se cambias de Uoch la que existía enfront de
la Porta-ferri9a, com diu en Pí y Arimón: que en 1402, al ferse 1' edifi-
ci de la Llotja, s' hi posas una font, etc.
Aquesta mina, en una de quines boques hi veliem encara 1' escut
de la Ciutat , en lo novell passeig de pujar al funicular del Tibidabo,
ana va á Sant Gervasi, hont hi havía lo registre d' inspecció. Los pous
d' accés á la mina^ nos han dit que eren unes llargues piles, que al
present s' acaben de colgar de térra, situades al fons del torrent vehí al
predit passeig. Si es axis, no comprenem perqué 1' Ajuntament de Bar-
celona dexa que desapareguin totalnient dits pous d' ingrés, que, una
vegada siguin ja completament colgats, esdevindrá dificultós trovarlos
quan s' hagen de menester.
Ignorám si la aygua de Collceróla, raja ó no en les fonts publiques
de la Ciutat, ó sí aquells robatoris de les aygues de dites fonts, á que
's tractá de posar remey en 1' any 1651 (2), seguexen en major escala,
en nostres dies, en que la mina de Monccada, ab son major caudal, y
los derrers trevalls d' elevado d' aygues del Besos, han fet perdre la
importancia primordial de la de Collceróla.
De la mina de Monteada^ per devallar sa construcció del comemja-
ment del segle xix y no oferir interés, res dihéin atrassant á nostres
Uegidors ais qui convinga saber quelcom, á lo que ha consignat Pí y
Arimón en sa escelent Barcelona antigua y moderna.
Cequia dita de La Infaxta
Era molt antich lo progecte de canalifar les aygues del Llobregat
y portarles al plá de Barcelona, puix en 1' any 1401, se tractava de pén-
dreles del dit riu avants del terme de Cornelia.
De tots los actes y acorts endrecats á aquesta fí existents en 1'
arxíu municipal de Barcelona, n' Esteve Bruniquer, també ne te
donada resumida relació, com se pot veure per les partides que s' se-
guexen:
«A 22 de Noembre 1401 se tracta en Concell de fer venir la aygua
de Llobregat pera regar lo territori de Barchinona la qual prenentla
á la resclosa poria pujar á Cornelia y á la casa que solía esser den
Bellvis y lo Concell ho comete á Concellers presents y esdevenidors
ho fassan.
{D Ooleoció de bans de Barcelona, vol. I, foli 45
'■¿) Bans 1647 flneix X651, foli 191, arx. Manicipal Barcelona.
LES AYGUES Y B.-.NYS DE HAUCELOXA 207
«A 28 de Agost 1548 vii Conceller y lo Batlle General anaren á
Llobre^^at per veure sis poria portar la aygua á Barcelona. Vicie lo
Uietari.
«A 4 de Noembre 1551 se tracta en Concell defer venir la aygua de
Llobregat y metrela en lo rech monar.
«A 27 y 29 de Agost 1568, se tracta de fer venir una sequía del Riu
de Lobregat á Barcelona.
«A 28 de Juliol 1627, en Dietari es un Memorial pera Sa Mag.* acer-
ca la concessió y jurisdicció de la aygua de Llobregat y seguidament
es una carta per al Sr. Duc de Cardona y dos memorials estam-
páis acerca dit fet y á 11 de Setembre copia de una carta de Sa
Mag.* al Sr. Virrey sobre lo mateix fet y á 14 de Agost del mateix
any en registre de cartas comunas fol. 34 es carta ab la qual no-
tician á Sa Mag.* de voler fer venir á esta Ciutat una siqua del Riu
de Llobregat partint de Martorell demanantli franquesa de drets y
lo mateix die en dit llibre fol. 34 es la que se resigne al Sr. Marques
de los Veles Senyor de Martorell pera que concedís facultat de pen-
drer dita aygua.
«A 8 de Juny 1633, en Concell de cent se tracta de la sequia de
Llobregat ahont es lo nivell fet per dita sequia y á 2 de Juliol escriuen
á Sa Mag * en orde a dita sequia com apar en lo registre de Cartas
comunes fol. 31.
«Dilluns á 12 de Juny 1633 en Dietari se troba vna Embaxada feta
al Sr. Virrey per la sequia del Ríu de Llobregat,
«A 23 de Janer 1643, los Concellers deliberaren pagar certa quanti-
tat ab motiu de la fábrica de fer venir la siquia de Llobregat en la
present Ciutat» (1).
Deis estudis fets per Barcelona en la Edat Moderna, n' es bona mos-
tra un imprés sense data, ni peu d' estampa, que tenim á la vista, titu-
lat Memorial \ del qve dev ad- \ vertirse y notar, | en ivstificacio de la
concessió | de aygua que la Ciutat demana á sa Magestat, \ ab lo me-
morial que se U ha \ presentat.
Lo proposit d' utilisar de la major manera possible, les aygues del
Llobregat, prengué major volada al comentar lo segle xix, com se He-
geix en Barcelona antigua y moderna, al referir lo progecte del 1805,
de construir una cequia, que, arrancant del terme de Manresa, vin-
gués á desayguar en la platxa barcelonina, atravessant bona part del
Valles.
La invasió francesa desbarata aquest nou plan, que, renovat en 1815
no s' executá fins al 1817, si bé limitantlo al plá del Llobregat y Barce-
lona y fent sortir lo rech de Molins de Rey.
S' acabaren les obres en 1' any 1819, en ocasió de trovarse acciden-
(1) Rúbrica de Bruniquer, vol. III, cap. 81, fol. 196.
208 F. CARRERAS Y CANDI
talmente á Barcelona, la infanta Lluisa Carlota de Borbón, á la que, lo
general Castanyos, mes tart nombrat Ducli de Bailen, llavors Capitá
General de Catalunya, li representa lo desitj de posar al Canal lo nom
de dita Infanta. Lo Secretari d' aquesta, al donar la sua conformitat á
tal proposit, digué que li sería molt agradable, que en les vores de la
cequia hí plantasen castanyers, á fi de que, corrent les aygues á la sua
sombra, servisen d' emblema á la protecció, que lo general Castanyos,
presta á una obra tan gran y útil (1). Mes lo bo del Secretari no atina
á que en la térra catalana, aquells arbres eren castanyers y que sois
los castellans axerits veurien lo joch ó relació, entre lo riom deis arbres
y lo del Capitá General sots quin comandament la nova cequia s' havía
acabat.
La obra, que dirijí 1' arquitecte Tomás Soler, avans d' arrivar á
Barcelona, fertilisa los conreus de Molins de Rey, Santa Creu d' Olor-
da, Sant Feliu de Llobregai, Sant Joan Des-Pí, Cornelia y Hospitalet
ó Proven (jana.
(1) Barcelona, antigua y moderna, vol. II, pl, 413.
>ísj ^; jjí: ^' ^' JÉJ ' vsí " " " ' ' "
eNteNces y TEMPLEKS
EN LES
MONTANYES DE PRADES
(1279 á 1300)
Estudi d' un procés reyal. — Possessions del Temple, al Ebre. — Los Entences á
Aragó y á Catalunya. — Disentiments d' Entences y Templers en les comandes d'
Aseó y Miravet (1279 á 1281). - Les montanyes de Prades juntadas al vegueriu de
Vilafranca. — Corregudes deis Entences en terres deis Templers (1284 á 1289). — Des-
trucció de Vinebre — Lo Rey evita la tala de Seros. — Enironisació deis Montcades en
les riberes del Ebre. - Botí pres á Ribarroja y á Berrúc. — Pere de Monteada aliat deis
Entences. — Vexacións á la Mata y á Aseó. — Penyoraments deis Entences ais Tem-
plers per pretendre la percepeió de monedatge.
Les costums catalanes, consignades en los documents de cancillería,
son molt sovint fletes. Empero en lloch se mostren ab la rudesa y sim-
plicitat, que en les incoacións processals. Ha resultat, per nosaltres,
agradosa feyna, inquirir en los processaments de la Edat Mitjana, ru-
blerts de particularitats dignes d' estima.
Lo procés deis disentiments y bandositats d' Entences y Montcades,
fou examinat per (^urita, qui no dexá res en vaga de lo molt que con-
tenía en son temps, 1' arxiu reyal de Barcelona (1). Empero sois anota
lo mes remarcable d' estes Iluytes y malifetes. Un extracte general del
procés, es lo que aném á empendre, afeginthi algunos noves per casua-
litat pervingudes deis bandolejants.
La familia Entenca, de molts anys enemistada ab la orde del Tem-
ple, motiva fets, qual esfera d' acció sigue, Miravet, Aseó, Beni(?anel,
Pedrer, Rasquera, Genestar, Lo Pinell, Batea, Booth, García, Vinebre,
(1) Fcrma tres pleebs diferents, clasificats per Legajo /.", 2° y 3.° de la Colección
de procesos 1291 á 1S03 del arxiu de la Corona d' Aragó.
1904 14
210 F. CARRERAS Y CANDI
Vilano^a, Gorrapta, Camposins, La Fatarella y altres, lloclis no tots
d' importancia consemblant, sino que alguns sois eren petits poblats.
En lo procés consta, que en tots los que s' ha nombrat, hi dampniflcaren
los Entences, en major ó menor escala
En quan ais Templers, una sola vegada, en 1' any 1289, entraren les
batllíes de Mora y de Tivisa, propietat d' en Berenguer d' Entenga, en
companyia deis Montcades, en circunstancies empero agravants, com á
son temps dirém.
Omitini algunos cavalcadesinsignificants deis Entences, com v. g. les
deis llochs de Booth y Pedrer, per quan se comenten molt vagament
en les actuacións judicials, essent corregudes vulgars, de breu durada
y de les que res se 'n pot precisar ni tant sois i' any en que ocorregue-
ren. Prou nos ha dolgut no poder consignar la del Pedrer (batllía de
Miravet) que ocasiona vessament de sanch, morinthi un cristiá, tres
sarrahins y dugues sarrahines y hont se mostrá la extensió d' aytals
corregudes, ja que los Entences, sortits de Mora, per anar á Pedrer, fe-
ren nit á la Cenia.
No es del cas esplicar aquí, 1' origen deis Templers, com s' introdu-
hiren á Catalunya, ni quanta preponderancia lograren després de la
conquesta de Tortosa, mercés ais convenís fets ab nostres sobirans, los
qui los hi donaren escrupulosanient la part proporcional oferta en les
noves terres toltes á la dominació sarrahina. Lo molt que junt á les
riberes del Ebre hi arrivaren á posseyr, s' estenía fins á Lleyda en pe-
tites etapes. Be 's pot dir que les torres y torces de Tortosa, Miravet,
Aseó, Orta, Ribarroja y Gardeny, casi be s' esguardaven les unes ab
les altres.
Les possessions deis Templers, s' estengueren per tot Catalunya, de
manera que ells podien atravessar lo Principat de jornada en jornada,
dormint sempre en cases de la Orde.
Quan les vexacións de que eren victimes, los habitants deis llochs
rurals, per les iluytes internes ó bandositats, entre senyors catalans,
eren inacabables, se busca un remey que contingués la violencia del
mal social, facilitant al débil la protecció del mes fort Indubtablement
ningú tant poderos com lo Sobirá per amparar al desvalgut vassall y
d' aquí la profussió de reyals salvaguardies que s' expedien en sa Cort,
per protegir ais qui estaven en perill d' esser dampnificats.
Mes já fós que les frequents Iluytes entre senyors y sobirans dexas
sen desamparats ais particulars, já fós que 's desconfíes deis oficiáis
reyals que devien dispensarlos la protecció en lo moment del perill, já
fós per causes desconegudes, se veu arbitrar la protecció d' altres euti-
tats, separadament de la corona, mes que tenien valiment y for^a.
Ocupa lo primer lloch en lo scgle xiii, la orde del Temple.
Sovintegen los documents en que, no ja mers vassalls, sino senyors
de castells, solicitaven la protecció deis Templers, lo qual permetia á
aquells poder ostentar al cim de Uurs habitacións y pertenencies, lo
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANYES DE PRADES 211
penó blau ab la creu blanca, distintiu de la Orde. A cambi de la pro-
tecció moral dispensada ab la senyera y de la material que, en cas de
necessitat, aximatcix devien prcstarloshi, percibien un petit tribut ó
cens anyal en especie, variable segons era la categoría de la familia á
quí 's devía protegir.
Ara 's compendrá si balx aquest altre punt de vista, los hi era de
gran utilitat los castells y forces, que, esgrahonats per Catalunya, po-
sehía la Orde.
En la segona mitat del seglc xiii havia decaygut la consideració
que merex6 la Orde, podent assenyalar lo regnat de Jaurae I lo Con-
queridor, comal en que s' opera aquesta evolució en son prestigi. Eu:-
peró, encara eren consideráis per lo poblé, al teráps en que s' esdeve-
nen los fets que relatarém en lo present estudi, segons ho indica la sor-
presa que ocasiona al Sobirá presenciar la sortida del estandart de
la Orde, perllen9arlo á bandolejar contra los Entences.
Trovem en consonancia ab 1' esp(n-it de justicia y pau do que devien
anar rodejats los Templers. la persistencia, que mes avant mostren, en
subgectar al conexement de la cort reyal, la resolució de tots los seus
debats ab los Entences. Llavors no respongueren ab mes actes de for-
sa, á les corregudes que sos enemichs sovint feren en llurs terres, es-
perantne justicia de la má del Rey.
Donada esta breu idea del carácter deis Templers, devem presen-
tar ais Entences, á nostres llegidors, tota vegada que son los princi-
páis actors d' aquesta relació.
Fou de les families de major renom á Aragó. En 1' any 1169, acom-
panyava á Anfós I en la RibagorQa, Berenguer d' Enten^a, obtenint del
Monarca 11 concedís lo lloch de Terol, al repoblarse en 1171 y esdevenir
frontera de sarrahins. També 's trova present al acte de donar, Anfós I,
en 1181, Tortosa, Aseó y Ribarroja, á la orde del Temple (1). Cavaller
palatí de gran prestigi, intervingué, Berenguer d' Enten^a, com h mit-
jancer, en les discordies de Pere I y sa Mare, en 1200.
Aquest es lo méá antich prohom del llinatge deis Entences. Segui-
dament juguen important paper en la historia del segle xiii^ havent
emparentat ab lo gran rey Jaume I.
En lo segle xii los Entences comentaren á usar del nom de pila
de Berenguer que devía quedar com tradicional en la familia. En la
perpetuitat d' uns mateixs noms en les families catalanes, s' hi podría
veure una continuació deis deus lares romans. Los sobirans de Barce-
lona, fins á la unió ab Aragó, usaren lo nom Berenguer, que sens dulite
fou deis noms mes usats á Catalunya y Provenga; la casa comtal d'
Urgell, lo d' Ermengol; una branca de la casa comtal de Pallars, lo
d' Artal; la casa vescomtal de Cardona, lo de Ramón; la vescomtal de
(l) Cartoral deis templers de Gardeny, fól. 97, doc. 225 (arx. gran priorat á Cátala
nya de S. Joan de Jerusalem).
212 F- CARRERAS Y CANDI
Cabrera^ lo de Bernat; la casa comtal d' Empuries, lo d' Uch; la casa
senyorial de Mur, usa lo nom d' Ecart; la deis Corbera, del de Riam-
baii; la de Cruilles, del de Gilabert; la d' Eróles, del de Roger, etc.
Es innegable la confusió orig'inada per esta perpetuitat d' un ma
teix nom, ocasionant equivocacións ais historiadors, que 's fán difícils
de corretgir, confonentse al fill ab lo pare, quan no hi ha prora í'e-
fahent del any en que s' efectúa una succesió.
Situantnos al regnat de Jaume I y al temps que aquest Rey con-
querí á, Valencia, hi trovám á son costat á Bernat Guillem d' Enteníja
de qui, diu Don Jaume en sa Crónica «era nostre onde de part de nos-
tre mare» (1). En efecte, Bernat Guillém d' Enten9a fou fiU del senyor
de Montpeller Guillém VIII y de sa segona niuUer, Agnés ab (luí 's
casa sense consentiment de la Iglesia, després d' haver repudiat íi
Eudoxia, avia materna del rey Jaume I. Era, per tant, germanastre
de ]\Iaría de Montpeller mare del Conqueridor.
No trovém quina relació hi hagués entre aquest Enten^a y lo pre-
cedentment referit del segle xii.
Bernat Guillém pren part en les primores operacións de la conques-
ta de Valencia, com molt afecto A Jaume I: assisteix al siti y presa de
Burriana en 1234, hont es ferit de sageta en una cama y lo mateix Rey
li feu la primera cura. En 1' any 1235, al establir Jaume I lo puig Ce-
bollar, al enfront de Valencia, per ferio frontera de sa conquesta
y aven^, confia la custodia de lloch tan perillos al propi Entenca
son parent. En esta ocasió parla la Crónicaj d' un Berenguer d' En-
tonga quí, ab Bernat Guillém, se trovava al puig Cebollar ó de Santa
María .
En les operacións hagudes al entorn del dit puig, morí Bernat Gui-
llém d' Enten9a, de quina mort, lo Rey, se' n niostrá pesaros (2). Fó so-
(1) Libre deis feyts esdeuenguts en la vida del molt alt aeiu/or Reij en Jaume lo Conqueridor,
apartats 206 y 232.
(2) La Crónica de D. Jaume parla de Bernat GaiUóm d' Entenca en los apartats
170, 171, 172, 173, 174, 206, 207, 213, 2l4, 216, 217, 219, 22C, 221, 223, 225, 231, 232, 234, 235 y 236
Lo Líber fororum couhigna com presente, en corts d' Aragó, ais següents Entunces.
A. 1236 — cB. dentien^a et G. fratre eius» en la cort general de Monteó.
A. 1247.— «G d' Entenca: ea la cort d' Osea».
A, 12*13. — «B guillermi de antiencja >
A. 1300 — tGombaldus de entien(;'.9,:> en la cort de ^Arago^a.
A. 1325 — <E. de enoien<;'.a > «Poncium hugonis de entienda.»
(Líber fororum, Impressum in incU/la Ciuitate Cesaraiigustaiia arte et industria largisque
expensís círcunspecti viví Georyií Coci teuthoníci auno chriatiane galutís milleu'mo (juiugeii-
teaimo décimo aejitimo, fol. 2, 29, 38, 44, y 61.)
Los següents Entences assistireu á les coronaoións deis reys d' Aragó á ^'aragova-
A. 1276.- Guillém d' Entenas.
A. 1286,— «Don Bernardo Guillen de Entenza.»
A. 1291.— «/ío« Bernardo Guillen de Entenza, Gombal de Entenüa. Berenguer de En •
tenza.»
Coronaciones de los sercnissivioa reyes de Aragón. Escritas por Gerónimo de Blancas chro
ttiata del reijno. (garago^a 1641) vi- 18, 21 y 21.
A. )300.— Bernat Guillém d' Entenoa era senyor d' Alcoleia
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANTES DE PRADES 213
tcrrat en lo propi puig de Santa María tro quel pogiiessen leuar á So-
govp on ell hauía promesa sa sepultura.
Altre varinnt de la Crónica, en lloch de ?ogorp din Scarp, raes evi-
dentment fou Scarp errada de copista (1).
Lo Rey enviá á buscar al fiU de Bernat Guillém nomenat (¡uillóni,
quí tindría lo temps*de deu á once anys, en lo de 1236, ariuantlo cava-
11er e donant li tota la térra que son pare tenia per nos. De la gent ([ue
conienava lo difunt y custodiava lo puig, ne t'eu cap á Berenguer d'
Entenga, quí era d' aquella matexa companyía y conquerida que fou
Valencia, resta en custodia del non reyalme. Empero mes avant, te-
meros d' esser punit per lo Rey á, causa d' lia verlo desobeyt, se passá
ais serrahíns de Xátiva, correguent y damnificant lo canip cristiá (2).
D' un rich horae aragonés raolt tamos, també nomenat Bernat Gui-
llém d' Entenpa, com 1' oncle del rey Jaume I, nos parla la Crónica en
ocasió en que los senyors d' Aragó oposaren dificultáis al Rey per tra-
raetre socors á Castella, especialment per la imposició del bovatge. Fou
hu deis capitosts de la oposició aragonesa en 1^64, morint á Luxen
(Valencia) en lo desgraciat corabat en que lo Mestre del Temple cay-
gué presoner deis serrahíns, en 1276 (3).
Fineix lo precedent y la historia nos mostra altre famós Bernat
Guillém d' Entonga, quí 's trova present á la solempnial coronació d'
Anfós II, á Qaragoga (15 abril 1286).
Mes cal teñir compte en lo segle xiii, en no confondre les dos fa-
milies d' Entenga que á un mateix temps regexen la baronía aragone-
sa y la catalana Já Montar cuida advertir esta distinció, indicant com
territori hont radicava la segoua, les vores del Ebre (4) ü' aquesta
regió sería Berenguer d' Entonga, quí, á les dcrreríes del segle xiii,
se corona de gloria en les guerres de Sicilia y Calabria,, dirigint la
defesa d' Otranto, sitiada per la host francesa en 1286.
(1) Fa judisarho veare á, Berenguer d' Enten<;'.a en 1279, interessat a1i Sogorb, ab
qain concell tenía grans controversias. (Registre 41, foli 52, arx. Cor. Aragó).
Precisament Sogorb era deis llf chs de Valencia que 's deví^n j ndicar per fur d' Ara-
gó, en lo segle xni, com ho mostra lo Rey, en 1¿83 (nones d' octubre) al fer jurar al nou
justicia de Valencia, que jutjará per los íurg d' Aragó, los llochs de Mnrvedre, Sogorb,
Liria, Morella, Onda, Castelló, Xátiva, Algeoira, Callera, Corbera, Sumacarcel, Pego,
Gandía, Luxen, Altaayda, Cocentaina, Untinien, Booairen, Denia, Castalia, Sexona,
Penaguila, Alooy, Alpuent, Castelhabidy Ademas. (Registre 43, foli 40, arx. Cor. Aragó)-
(2) Crónica, nom. 295 y 316,
(3) Crónica, nom 380, 381, 391. 395, 39S, 400, 403, 515, 552 y 569
(4) «Era este linaje de los Entongas muy antiguo y prin^'ipal en Aragón y eran
ricos hombres de natura y de gran solar: tuvieron señorío -íe honor en Zaragoza, Ca-
latayud y Teruel y fueron muy estimados de los reyes. Fué esta casa de las oaás licaa
de la corona y hubo en este linaje muchos varones principalísimos, que tuvieron muy
gran parte en la conquista de los reinos do Valencia, Cerdeña y Sicilia y otros. Sus
armas eran un escudo de oro, con la cabeza negra En Cataluña y en las orillas del
Ebro hay otra baronía que llaman de Enten9a, que fué de los duques de Cardona,
pero es diferente de la baronía de Enten<?a del reino de Aragó i, que consiste en los
pueblos que diremos después, en el capítulo siguiente. > {Historia dolos condes de Urgel;
vol. II pl. 46.)
214 F. CARRERAS Y CANDI
A mes de les possessións de la ribera del Ebre, tindría, Berengiier
d' Entenca, lo castell de Mont-tornés, en lo Valles, segóns diu Des-Clot
ab referencia al any 1285. Est castell, al poch temps lo vengué á Gui-
lleuma de Monteada viuda del infant Pere d' Aragó, reeobrantlo en
1293, mitjanpant la entrega de trenta mil sous.
En 1286, Berenguer d' Entenca assistí á la conquesta de Menorca.
Fon d' aquesta catalana baronía deis Entences, lo renomat héroe
de la expedido al Orient, Berenguer d^ Entenca, segons expresa lo cro-
nista guerrer Ramón Montaner (1)
Desde V any 1279, se troven en desavinen^a los Entences y los
Templers. En lo terme d' Aseó era acostumat percibir una lezda ó
tribuí, que pagaven los transeunts i)er dit terme y que anaven á Mora
sens dubte per obligarlos indirectament, á atravessar lo riu d' Ebre á
Aseó, percibint llavors Aseó, lo que 's solía pagar per passar la barca.
Berenguer d' Entenca, pretextant que aquest tribut li perjudicava les
rendes de la sua barca de Mora, prohibía ais lezders la percepció d'
aquest impost, obligant al Comanador d' Aseó, á teñir d^ acudir en
quexa al Rey (2).
EntenQa reb de Pere II una orde, en la que li prohibeix oposar im-
pediments á la lezda, del coutrari encomenará al Sobrejuntero de ^a-
rago(?a, que defensi al comanador y vassalls d^ Aseó, de les sues ve-
xacións (20 d' agost de 1279).
En aquell mateix any 1279, lo Rey tenía embargats los castells de
Mora y de Tivisa. Comunica lo Rey, á Camino de Peramola veguer de
Tarragona y del Camp, haver guiat A Berenguer d" Entenca y á sos
homes y bens, com també fós permés, á la sua muller y dones quí ab
ella anassen, residir en lo lloch hont vulgan (3).
Dos anys mes tart, en 1281, torném á trovar ais Entences en disen-
timents ab los Templers de Miravet, Guillém d' Entenpa y Na Galbors
muller d' en Berenguer d" Enten9a los havíen acuyndat y los tenien en
aguayt (acuyndastis et tenetis in reguardo). Desde lo siti d^ Albarrazín
hont se trovava, hi proveheix lo Rey, conminant ais Entences ab pu-
nicións si per cAs cometien algún damnatge ais Templers (4). (13 de
juliol de 1281).
Aqüestes cóntroversies y violencies, motivaren la intervenció del
Rey y de la sua justicia, en 1283, en que, tant los Entences, com los
Templers, volen posar les qüestións devallants de robarles y bandolis-
(fi Qaan Berenguer d' Enten9a se vegé llinre de la presó en que estava A Genova
busca socors per sos companys que batallaven al Orient. «E axí lo rich hom sens
secors que no poc hauer del Papa no de la casa de Franoa tornassen en Cathalnnya e
empenyora e vene gran res da les sues ternes e nolieja una ñau den P. Saoliuela de
Barcelona» {Chronik des edlen En Ramotí Muntaner, (8tuttgart 1844) capítol CCXXIX).
(2; Registre 42, foli 129 (arx. Cor. Aragó)
(3) Kegistre 42, foli 189 (arx. Cor. Aragó).
(4) Registre 43, foli 4 (arx. Cor Aragó).
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTAXVES DE PRADES 215
mes comessos en les montanyes de Prades, á conexemcnt y sentencia
del Sohirá. D' aquí un mananient reyal al veguer de Vilafranca Gui-
lléin de Castellolí, per comentar la incoaeió de la causa, restituint y
deslliurant ais homes, besties y obyectos apresats per les parts contro-
vertints. (10 d' octu))re de 1283) (1).
Certament sorpendrá, que, fets esdevinguts en les riberos del Ebre,
vagen á conexement del veguer del Panados, y no del de Tarragona y
son Camp, coni sembla natural per sa posició topográfica. Mes ja en
1279, manava lo Monarca, al llochtinent del veguer deTarra.wna, no s'
entrometes á exercir jurisdicció en dites montanyes (2). Ay també van
endre9ades al mateix fi, altres dugues disposicións del 1281, (l.er de
janer) la primera del Rey, á Camino de Peramola prohibintli in-
tervenir en les causes deis vehins de Mora, Tivisa, Marzá y Prat-
dip, pertanyents á Berenguer d' Enten9a; y la scg-ona, manant al
veguer de Vilafranca exercir jurisdicció en los llochs predits, axis
com en lo de Falcet, considerantlos endosos en sa Veguería (3)
Lo mestre del Temple Fr. Berenguer de Sant Just, firma de dret
d' estar á resultes de lo que 's fallas en justicia, no sois davant lo Ve-
guer, si que també davant lo Monarca (4).
Mes á despit de tant bones disposicións, los Entonces entraren dife-
rents vegades, má armada dampnificant lo termo de Miravet, que ora
de la ordo del Temple, en T auy 1284, capturant gent y pronont bes-
tiar (5).
Aximateix á les derrerios del Setembre de 1284, entraren en só do
guerra los llochs de Vinebre y Camposins de la batUía d' Aseó, come-
tent molts dampnatges, deis que ja n' explica alguna cosa lo procés que
estudiem. Eegía la comanda d' Ascó^ Fr. Francosch (^a Tallada y la de
Gandesa Fr. Guillém de Puignaucler.
Alguns cavallers, qui por llurs armaduros do guerra dificultaven
osser conoguts, pro que los distingien cortes sonyals pintados en llurs
armes (6), seguits do molts peons de les batllies do Mora y de Falset,
entraren en la d' Aseó, comanats por lo jovo Guillém d' Enteuca. Figu-
(1) Al dia següent, escriví», lo Eey, á llamón de Toylá, anulant un decret donat
per lo jurisperit de Vilafranca Bernat Seguil de Jafer, en la causa vertent entre En
tences y Templers «super terminis csstri de Evisa et de Dertusa et quibusdam aliis,»
la qual causa vol que ell tprmini degudament. (Registre 43, foli 12, arx. Cor. Arago).
(2; Registre 42, folis 146 y 203 (arx. Cor Aragó).
(3) Registre 49, foli 12 (arx. Cor. Aragó).
(4) Registre 43, foli 33 (arx. Corona Aragó).
(6) Lo Rey provehi en favor de>8 Templers y conmina ab castigar á Berenguer y
á, Gaillem d' Enten^a y á Guillém d' Enteni;a fill, si no restltuien lo que haviea prés.
(Registre 41 foli 239, arx. Corona Aragó)
(6) «Interrogato qui milites erant cum dicto G.° de enteníja et dixit quod P. carbo-
nÍB et dúo milites cognominati de vernet quos cognouit in signis que porbabant et en
Riudefoix quondam et Q verguentis et piares alii de quibus non cognouit signa eorum
et cum ipsos et alios supradictoa non potuirset cognoscere facie ad faciem nisl in sig-
nis quod portabant.* (Declaracions del procos que estadiém )
216 F. CARRERAS Y CANDI
raven entre los cavallers, en Riudefoix, en Carbons, los Vernct y Gui-
II ém Verguentís.
Dirigírense al llocli de Vinebre, de la batllía d' Aseó, y 1' entraren.
Una vegada dius, aquella gent s' entrega al saqueij;': bestiars, robes,
obgectes d' algún valor, tot era arrebassat de llurs cases, recuUint
cousiderabJe botí. Quaranta sarrahins de Vinebre restaren catius de
Guillém d' Enten9a.
No fou entrat, Vinebre, sense resistencia, Ja que consta haver per-
dut la vida alguns deis seus populadors, 90 es, dos cristiaus, deu
sarrahins y quatre ó cinch sarrahines.
La sortida deis Entences de Vinebre, fou indicada per la grossa fu-
mera, que, de lluny estánt, mostrava 1' incendi y total destrucció del
lloch.
Mala jornada fou aquella per los vassalls del Temple, justipreuant-
se-los danys rebuts, á xexanta mil sous Jaquesos
Mentres Vinebre era saquejat, en totes les alturcs de la batllía d' As-
eó se mete lo só de viafós. La gent s' aplegá lo mes prompte que pogué:
pro quan fou ajuntada, lo dany no tenía remey.
Habitava, llavors, lo lloch de García, un cavaller, de nom A d' Ar-
tesa, qui tenia ajustades treves ab los Entences. Per esta causa, á des-
pit de tocarse lo só en García, los vassalls de 'n Artesa no volgueren
pendre part en 1' ajust de gents per combatrels.
Mes per inadvertencia, ó per altre motiu, entre les preses fetes per
en Guillém d' Entenpa á Vinebre, hi flguraveu, un sarrahí y una sa-
rrahina, homes propis y afocats de n' Artesa. Arrivantli á conexement
la nova de llur captura, n' Artesa, trámete totseguit al militar Guillém
de Tolo vers Guillém d' EntenQa, per que li exposás la injusticia d'
aytals aprcsonaments. N' Entenca escolta la (juexay sense mes rahons
dexá en lliljertat á dits sarrahins, cumplint axis ab les lleys de la ca-
valleria, que vcdaven dampnificar á persones ó bens deis ab qui s' es-
ta va en treva.
Los presoners de Vinebre forcn transportáis A, Mora, hont restaren
encarcerats, fins y tant que aprontaren les quantitats de diner que se
'Is hi exigí per llur redempció. Los qui no lograven redimirse ab di-
ncrs, eren venuts com á esclaus. De les tres malaventurades sarrahi-
nes capturades en dita tala, sois una pogué satisfer los tres cents sous
dcmanats per dexarles Iliures. Les altres dugues restaren cautives.
Tristísima era la condició deis serrahins de Tortosa, ais qui tantes se-
guretats donaren, Ramón Berenguer IV y Anfós I, per evitar desam-
parassen los territoris ({ue cultivaven al ocorre la cayguda del regne
mahometá del Ebre.
Esplica en Domingo de Nabas, qui fou Im deis presoners de Vine-
bre, que al fer entrega, al batlle de Mora, deis tres cents sous jaquesos
exigits per obtenir sa Ilibertat, ho verifica en presencia de na Gaubes,
muUer d' en Berenguer d' EnteuQa y mare d' en Guillém. D' ella parla
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANTES DE PRADES 217
en (,Jurita, traduint son nom per Galbor. Xo apareix may axis uomcna-
da en lo procés, liont sois se la designa por Gaubes ó per Galbes.
Oom já dignerein, Vinebrc rest;l incendiat y dcstruit. Precisava,
donchs, que lo Comanador d' Asco no descuides la sua repoblacio. Ja
hi pensava Fr. Francosch Ca -Tallada, y en tant hi pensava, que busca
un altre Uoch de condiciíuis ukís favorables per la defesa, Aíi d' edifi-
carhi de planta, un nou poblé, per tant com del destruit sois ne resta-
ren ruñes inaprofitables. Abandonat del tot 1' antich emplassament de
Vinebre, los seus populadors foren trasportáis á altre cantó de la batllía
d' Aseó, que, desde llavors se noniená Vüanova. Aquesta niutació y
despeses subseg'iients moti vades per la destrueció de Vinebre, estima-
ren, los Templers, representarloshi un perjudici de cinquanta mil sous
jaquesos.
Es de suposar, que, Vilanova, reunía millors condicións topografi-
ques y defensivos que Vinebre. Mes no la Iliurá d' ulteriors vexacións de
part deis Entences en les corregudes posteriorment fetes per la batllía
d' Aseó. Ne conexém una pertanyent al any 1291^ perdentlii molt bes-
tiar la gent de Vilanova. Bé es veritat, que, lo bestiar, no consta si 1
prengueren de les cases ó del que transitava per los camps y pasturat-
ges, falt de temps per reeullirse á la vila.
En lo comengament del Febrer de 1285, Berenguer d' Entenca, d'
acort ab los pahers do Lleyda y ab los lleydatans Arnau Ramón, Pere
Pere, Ramón Pere, Ramonet Pere y Guillém Moliner, aparellaven la for-
mació d' una host per dirigirse contra Pere de Monteada, entrant lo terme
de Seros. Lo Rey tractá d' evitarho^ escrivint á tots los quí tractaven d'
entrar en campanya, tota vegada ijue en Pero de tonteada volia es-
tar á dret segons havia firmat compromís. A mes la sua intervenció la
justifica lo Monarca, per la particularitat d' esser executor testamen-
tari deis difunts Pere de Monteada y Guillém Ramón de Monteada (1).
La circunstancia de no parlarse mes d' estes malifetes, fá creure que 's
podría evitar la entrada y tala de Seros, en 1285.
En r any 1288, novament los Entences corregueren torres deis
Templers, 90 es, diferents llochs de Ribarroja, qual batllía era de la
Orde. Devera observar ara, la circunstaneia de veurehi complicats, los
Monteados, ab los Entences, essent axis que, al any seguent, aparexen
contraris d' aquests y aliats deis Templers.
La aparició d' aquesta familia catalana en les Iluytes que 's seguexen
en les montanyes de Prades, nos obliga átractar d' ella, d' igual manera
que havém presentat avants ais Entonces y Templers.
Del eastell de Monteada, que guardava una de les entrados del plá
\
(1) «Stetiam per eo quare sum'is exequtores Testamantorum nobilium Petri de
montecatheno et Guilleltni Raimundi quondam deí'unotoram et nolemns istis tempori-
bus nostros vassallos guerram habere ad inuicem set ipsos unanimiter ad nostrum
seruicium preparatos.» (Registre 43, í'oU 116, arx. Corona Aragó.)
218 F. CARRERAS Y CANDI
de Barcelona, ne prengué nom la ilustre familia que tant bon paper
jugá en la historia de Catalunya en la segona mitat de la Edat Mitja-
na. L' entronisament d' una de ses branques en les riberes del Ebre,
s' atrassa al teinps de la conquesta de Tortosa per Ramón Berenguer IV.
Molt de passada nos referirém á esta familia, de la que 'n teñen cir
cunstanciat conexeraent los habituáis llegidors del present Botlletí (1).
La importancia del socors prestat, al Comte de Barcelona, per Gui-
llém Ramón Dapifer, al conquerir Tortosa si no 'n tinguessem altre
conexement, s' evidenciaría sois esguardant la cessió d' una partida
de la Ciutat. D' aquí que estiguessen estretament relacionats ab los
Templers, principáis senyors de Tortosa. Com á representant de la sua
jurisdicció, hi tenia, en Monteada, un veguer, pertanyentli la capitanía
y guarda de la Quda cobrant deis tortosins la exi menta (leudes, quis-
ties y tributs sobre produccións agrícols), jutjant á sos vassalls, é in-
tervenint en la administració del barri sarrahi (2). Com lo Comte de
Barcelona, tenía á Tortosa sos batlles y sayons, no dexarende presen-
tarse questions de competencia entre uns y altres
Essent prou conegut lo testament de Guillem Ramón Dapifer y sa
successió, nos limitaren! á recordar, que, separada la branca del Ebre,
de la que tingué les possessicns en la Catalunya vella, já no 's torna
ren á Juntar mes dites terres en un mateix possesor.
Los contractes que van estipulantse postericrment á la conquesta
de Tortosa, modifiquen la situació deis Montcades, sense que per 90 los
hi fassi disminuir lo seu poderiu. Ramón de Monteada, en 1182, ena-
gená son castell d' Orta j possessions á Valdesa, les que adquiriren
los Templers (3).
Ramón ñll del precedent, junt ab Fr. Folch de Cervelló mestre
d' Amposta, concedí en 1222, á Ulldecona, sa important carta de pobla-
do v4). Succehí á Ramón de Monteada en 1229, en los dominis de Tor-
tosa, son fiU Guillém, quí firma en 1241, la famosa concordia arbitral
coneguda per «Sentencia de Flix», final de les questions jurisdiccionals
deis Montcades y Templers á Tortosa (5).
Eren cosíns germans del precedent Guillém de Monteada, los tres
germans Pere, Guillem y Ramón, los qui, en 1250, junt ab sa mare
(1) Vegis lo notable trevall La casa de Monteada en el vizcondxdo de-Bearn, por J. Mi-
ret y Sans (nombres 2, 3, 4, 5 y 6 del present Boletín.)
(2) En r any 1174, lo rey Anfós I y Ramón de Monteada conjunotament, garantí*
ren á la aljama de Tortosa, la sua segaretat. axis diotre la Ciutat, com en los lloobs y
castells de son terme, mitjan(?ant lo tribut de 400 ma^oiodines !• any.
(3) «Sic'it terminatnr a rrocba de agilent nsqie in termino de emposta et ab ho-
nore hospitale usque in flamen ¡> Firmen la donació lo rey Anfós I, 1' arquebisbe Be-
renguer y molts cavallers. (Cartoral de'e Templers de Tortosa, foli P9 .
(4) Apuntes liistúi icos sobre la villa de l'lldecona y él hermitorio de Xutstra Seilora de la
Piedad, per Ramón O' Callaghan (Tortosa, lb9l) pl. 8
(5) Historia del derecho en Cataluíla. Valencia y Mallorca— Código de las costumbres de
Tortosa, per Benvingnt Oüver,
ENTENCES Y TEMPLERS E\ LES MONTANYES DE PRADES 219
Constanza, vengueren la tercera part del castell y terme de Malpartit,
á Guillém Moliner de Lleyda, per sis centes ma(;'modines (1).
Alguns desacorts en que estigueren Templers y Montcades, á cau-
sa (le la jurisdicclü de Tortosa, segons apar de la obra d' en Oliver,
no sigueren de gran trascendencia, marxant d' acort en afers tant im-
portants com la forraació del códich de les costuras de Tortosa y la
organisació de son Munieipi durant lo segle xiir, 90 es, avants de que
Jaunie II 1' adquirís totalment en 1294.
Pot devallar de tant estretes relacións, veure ingresar ais Montca-
des en la orde del Temple: Peí e de IMontcada fou, en 1275, preceptor
á Catalunya y Aragó; y hu deis defenedors de i\Iiravet en 1308, era
altre Pere de Monteada, írare jove llavors (2).
En 1' any 1289, en que los Montcades intervenen en les Uuytes d'
Entences y Templers, tenien estableí ts sos domicilis en les riberes del
Ebre, los tres Montcades, Eamon, Pere y Guillém.
Ramón de Monteada residía en lo castell de Sos c Soses, que d' an-
tich pertanyía á sa familia (3).
Pere de Monteada habi'tava al castell d' Aytona, principal residen-
cia, deis caps d' aquesta branca deis Montcades, durant los segles xiir,
XIV y XV. Obtingueren á Aytona simultaneament ab lo castell de Sos
en 1212. Feya poch que lo castell d' Aytona, propietat del córate Er-
mengol VIII d' Urgell, havía passat al Rey. Dit córate en 1209, lo cedí
á sa rauller Elvira: al casar Elvira, per segona vegada ab Guillem de
Cervera, Aytona passá á e=t personatge (4) y los Montcades no '1 po-
ssehireu fins alguns anys mes tart de la donació que feu lo rey Pere á
Guillem Ramón.
Guillém de ]\Iontcada tenía á Aseó sa residencia habitual.
Poch podem relatar de les tales efectuades á Ribarroja, en los volts
de Sant Joan de Juny del any 1288. Sois ne consignarém tres episodis,
si be cap relació de continuitat guarden uns ab altres.
(1) Perg. nom. 1552, Armar! It, arx. iel Gran Priorat de S. Joan de Jerusalem á Ca-
talunya.
(2) B Alart. Suppressión de V orde du Temple en Roussíllon, pl. 13 y 32
(3,) Al casar Gaiüetn Ramón de Monteada ab Constani;a d' Aragó filia del rey Pe-
re, en 1212, obtingnó les viles de Seros, Aytona y Sos. Com Aytona, en 1222, se trovas en
poder dHls hereus d' Ermesendis ie Castellazol, d' Arnau de Bellvis y de Pon? de Soler
y d' altre part Hamon Alamanv ab ses gents, s' havia apoderat de Sos, lo Rey promet
cobrar los dits llochs per compra ó cambi, y, entregarlos ais Montcades. Eq 1' entre»
mitx los hi foren donats Caoaarasa Cubells, Moutgay y Vilagrasa. Sortiren tiadors d'
aquest compromía, Nunyo Sanxe<? cosí del Rey, Guillém de Montead» senyor de Bearn
tambó cosí del Rey y Guillém de Claramunt (Qarita, Anales de Aragón).
Ea 1297, lo castell ae Sos estava en mans de Pere Arnau de Cervera, qni lo tania en
penyora de s s cents morabatins que s' havien d' entregar á Eximen Cornel, en virtut
deis oontractes haguts al casar Simón de Monteada ab García Martínez, germana de
Pedro Martínez de Luna (Colección de procesos.— Legajo 1°, años 1201 á 1303, lletra B,
arziu Corona Aragó).
(4j J. Miret y Sans, Investigación histórica sobre el vizcondado de Castellhó, (Barcelo-
na 1900) pl. 174 k 176.
220 F. CARRERAS Y CANDI
Bereng'ueró d' Enteu^a, fill segon de Eerenguer y germá de Gui-
Uéüi, sigue lo capitost de la gent d' armes que darapnificá dita batllía.
Berengueró y los seus, se posaren en aguayt al Ebre, en la ribera
oposta A les cases de Ribarroja y juiít á la barca del pás del riu. La
operació se feu amagadameiit. per manera que ningú se 'n entera y
axis la sorpresa bagué tot lo bon resultat que d' ella se 'n esperava.
Alguns vehins de Ribarroja, desconexedors de tal perill, confiadament
passaren lo riu ab la barca del pás y desembarcaren á la altre ribera.
Quan ja eren en térra, hi sobrevingué n' Enteriza y sa gent, menant-
sels presoners, ab los bestiars que portaven. Sois dexaren en Ilibertat
á una dona y á dugues criatures.
Aquesta jornada valgué á n' Entenpa dos mil cent sous jaquesos re-
buts deis de Ribarroja en concepte de redempció deis presoners.
Lo segon episodi que 'ns proposém referir, es, la entrada deis Enten-
ees á altre lloch de la batllía de Ribarroja, nomenat Berru?. Lo mateix
Berengueró, seguit d' uns set ó vuyt cavallers y xexanta peons, se pre-
senta á dita vila y demanant esmorpar, li donaren algunes viandes los
homes del lloch (1). Satisfeta aquesta necessitat, los hi prengué lo bes-
tiar grós y menut trovat á BerruQ, empoitantsen presoners A alguns
habitants cap á Mequinenpa. Per obtenir la Ilibertat, hagueren de pa-
gar cent sous jaquesos cada hu.
Es una particularitat remarcable del precedent fet, que Berengueró
tancas á Mequinen^a ais presoners de Berru^, per quan, si be esta vila
era tinguda per los Entences, lo castell de Mequinen^a pertanyia á
N' Elisendis, muller d' en Guillém Ramón de Monteada. Y encara que
d' axó en sí, cap consequencia ne pugam devallar, cal tenirho en comp-
te, puix fá costat á lo que afegirém, en mostra de la intervenció deis
Montcades en les corregudes de la batllía de Ribarroja, en 1' any 1288.
Retornant, Berengueró, d' una d' aqüestes expedicions, acompan-
yat de sos cavallers y demés gent armada, entra y atravessá per lo ter-
mo de Seros, qual terme acabava d' esser obgecte de discordia entre
Pere de Monteada y Berenguer d' Enten^a.
En lo lloch de Seros, ana á trovar á Berengueró, lo cavaller Ramón
de Claramunt, arbitrant la restitució de tres cents caps de bestiar de
sa propietat apresats á Ribarroja. La justicia de la quexa motiva la
sua inmediata restitució manifcstantse com lo bestiar se trovava sots
custodia d' en Pere de Monteada.
Ests dos derrers fets, donen motiu per creure en la intervenció deis
Montcades, los qui, quan menys se 'ns presenten com á hotiners ó guar-
dadors, de lo que en les expedicions se capturava. Pr^cisament se par-
la de teñir lo bestiar pres á Ribarroja, en Pere de Monteada, A quí mes
avant trovem combatent ais Entences.
(1) «Et dixit qnod uolebat ibl f ntrt morcjar efc Lomines dicti loci dederunt ei ad co-
medendum.» (Deolaraciona del procés que estudiém.)
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTAN VES DE PRADES 221
Al costat de les expcdicións, de major ó menor importancia, adrcíja-
des contra la gent del Temple, hi figuren en lo procos, alguns actes sois
y atrevits, executats en estos anys 1288 y 1289^ i)er gent de Falcet y
de Mora, que, no 's din, si obrarien ó no, per pro{)i inipuls, ji'i que es-
tavcn excitades les enemistáis entre uns y altres haljitants deis termes
hont se bandolejava
En lo lloch de la Mata, enelós dintre la batllía de Cantavella, per-
tanyent á la orde del Temple, tres homes de Falcet y un de Mora,
tractaren de dampnificar. La son los fou favorable apresonant á, tres
habitants del lloch de la Cuba, batllía de Cantavella, nomenats Domin-
go. Aguiló, Bernat Gualt y Guillem y Andrcu Vilaplana (pare y fill),
los quals retornaven de les fires de Morclla.
D' allí hont los havicn capturat, tenien de menarlos á Mora, em-
presa atrevida per lo llarch del tragecte y atravessar molt terme del
Temple. Curios resulta 1' itinerari que emprengueren per camins fora
de concurs: la primera nit^ dormiren en una cova del terme de Morclla;
la segona, en lo carrascal (axis diu lo document) ó garriga, uomenat
Dabel; la tercera, al Rayguer, prop de Tortosa; y al quart dia arriva-
ren á Mora. Sort fou no topar ab gent del Temple, puix llavors la con-
dició d' uns y altres hauria cambiat.
Lo precedent fet ocorregiié al temps en que lo rey Anfós II celebra
Corts generáis á Monteó, lo qual esdevindría_, en 1' any 1289.
Per obtenir llur Ilibertat, hagueren de pagar segons costum, fortes
sumes de diner, obtenintles ab g'ran trevall, ais tres mesos d' estar de-
tinguts á Falcet. Diferents sigueren les quanritats que se 'Is exigí,
puix mentres que á en Vilaplana, per ell y son ñll, li foren demanats
mil sous jaquesos, á n' Aguiló sois n' hi exigiren cent noranta y á en
Gualt cent cinquauta.
En r any 1288, Berenguer d' Entonga penyorá la batllía d' Aseó y
la tingué en reguart per questions hagudes ab los Templers^ qual ori-
gen desconexém, puix no les senyala lo procés.
Lo Comanador d' Aseó, acudí al Rey en quexa del procehir de n'
Entenga, manifestantli trovarse aparellat á estar á dret del que procc-
hís en les enquestes faedores per la Cort Reyal.
Davant d' actitut tant correcta, Anfós II, escrigúé á Bernat de Mont-
paó batlle de les montanyes de Prades, manantli fes retornar á n' En-
tenca, tot lo per ell penyorat ais Templers y les nances donades per
la gent d' Aseó, guiant y assegurant al Comanador y á tots sos vassalls
y bens (Lleyda 24 Maig 1288). Si acás en Berenguer d' Entencja, refu-
sava obehir la ordre reyal, ordenava á en Montpaó, que, congregues
tots los exercits de la batllía y ab los homes que lo Temple tenía en la
ribera del Ebre, piocehís contra d' ell y de sos bens, viril y potentment,
com á violador de pau y treva, segons resultas faedor per los Usatges
de Catalunya y les cartes de pau y treva.
¿Cumplimenta, Enten9a, lo manament del Monarca? ¿Procchí, Oer-
222 F. CARRERAS Y CANDI
nat de Montpaó, á congregar la host que devía dirigirse contra Enten-
9a, si refusava acatarlo? ¿La ordre d' Anfós II, conminatoria y esplici-
ta, pertany també al nombre de les moltes que dictaven los Reys d'
Aragó, per sortirse de compromís y sense propósit de véureles execu-
tarse? Faltant documents aclaratoris, no ■'ns es possible aventurar cap
suposició.
No tardaren gayie temps, los Entences, á molestar de nou ais Tem-
plers, en lo segueut any de 1289.
Guillém d' Entenga obtingué de Jaume II, la percepció de deu mil
sous en lo monedatge de Mirabet, Orta y Aseó, tots tres llochs, coman-
des del Temple. En aquell any de 1289, los pobles de Catalunya devien
satisfer lo dret de monedatge, ab motiu de la expedido de Castella.
Arbitra, EntenQa, deis Templers, li fossen satisfets los deu mil sous; mes
lo Mestre, hi contrasta, que la Orde no venía obligada á dita imposició.
D' axó nasqueren disentiments, manifestant Guillém, teñir facultat de
penyorarlos en cas d' oposició á pagar la suma exbigida.
Armada la controversia, no tarda á pasarse á la violencia. Motius
hi ha per maliciar, si tot sería nou parany que aparellaren los Enten-
ces, per mortificar á sos vehins. Los homes del Temple foren penyo-
rats per vies violentes.
^Itre vegada en lo castell y vila de Mora hi retrunyí lo passatge
de cavalgadures y gent armada, que, sots la senyera deis Entences,
feu la vía del lloch de la Fatarella, escullit per camp de les operacións
contra la Orde. Hagueren brega uns y altres, resultantne morts, tres
homes de La Fatarella, molts ferits y d' altres apresonats, capturanthi
no poch bestiar, en concepte de penyora.
Lo propi any 1289, tal vegada en la niatexa ocasió, quinze vasalls
deis Entences, en sa majoria sarrahins, dampnificaren lo lloch de Go -
rrapta, de tal manera, que 's diu sigue totalment destruit. Un sarrahí
de Tivisa, de nom JMahomet Qaydel, dona mort al BatUe de Gorrapta.
Les vexacións del any 1289, motivaren de moment, una nova quexa
del Mestre del Temple á Anfós II. Lo Rey, quí 's trova va á Monteó, es-
crigué á Guillém d' Entenija, (26 de Juliol) mostrantse sorprés de dit
penyorament y comunicantli coni may se proposá exigir monedatge, ais
qui no hi venien obligats á satisferlo. Per conseguent que de cap ma-
nera volía se perjudiques ais comanadors y homes del Temple, prete-
nentse d' ells lo que no era degut.
Ais tres dies d' expedida la disposició reyal, á instancies del Mes-
tre de la Ordo, ana á Tivisa Fr. Bernat Ferrer, á presentar k Guillém
d' Enten^a, la carta d' Anfós II (29 Juliol 1289).
La contestado que de Guillém obtingué, no fou pas d' acatament á
lo que se li manava. Obgectá, que, al reclamar dit monedatge al Mes-
tre del Temple, lo conminava já ab penyorarlo, si no obligava ais ho-
mes de Miravet, Orta y Aseó, á entregarli los deu mil sous, segons
autorisació del propi Sobirá, en la carta que, ab tal obgecte, li expedí^ y
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANVES DE PRADES 223
que, davant la negativa del Mestre, los havía penyorat. Mes, que si di-
ta quantitat li era satisfeta, retornaría les penyores
Ne resulta d' axó, un evidcnt abús per part deis Entences, essentne
victimes los Templers, seuse que á aquests los amparas lo Rey com
era degut. Puix si be 's vcu dictarse disposicións protectores, no apar
se cumplissen y tiranthi térra per damunt, les coses restaven com
avants.
II
Campanya d' Anfós II contra lo rey Jaume de Mallorca (Agost de 1289) — Be-
renguer d' Emenda s' aparel'a á acompanyar al Rey. — Treves posades per Anfós II
ais Templers, Montcades y Entences.— Missatgería del escrivá Sala. — Partida de la
host de Berenguer d' Enten^a á la Gerdanya.— Presa deis castells de Liga y de
Ribes.- Retorn del Rey.— Corts generáis de Montgó.
Sobradament conegudes son les Iluytes, que, los reys d' Aragó y de
Mallorca, tingueren en les derreríes del scgle xiii y renovades á mit -
jans del xiv, fins arrivar á la extinció del segón reyalme y á sa in-
corporació ala corona aragonesa per Pere III en 1344. Un de tants epi-
sodis d' aqüestes guerres, deis fins ara no apareg'uts á la Uum pública,
ve involucrat en los acontexements que 's desenrotllen en aquest
procés que estudiém.
Durant 1' istiu de 1' any 1289^ Anfcs II d' Aragó s' aparellá á com-
batre al Rey de Mallorca y á sos ausiliars los francesos. La campanya
de vía endre<?arse á les regións de Cerdanya y Ripollés, liont la host
enemiga amenagava la térra catalana
Entre los cavallers qual ajuda arbitra y compromete lo Monarca,
hi flgurava Berenguer d' Enten^a y son flU primogenit Guillém, lo
primer deis quí hi devía menar host propia.
Mentres en lo castcll de Mora era aparellada part de la gent que
devía seguir al Rey sots los penons d* albergada d' en Berenguer d
EntenQa, en lo lloch d' Aseó y en altres indrets de les montanyes de
Prades, Templers y Montcades hi aplegaven elements de guerra per
combatre les pertenencies del primer, aprofitant aquest allunyament
deis principáis cavallers de n' Enten^a Axis d' una sola vegada 's
venjaríen, los Templers, de tants agravia com teníen rebuts del senyor
de Mora.
Berenguer d' Enten^a hagué conexement d' aytals maquinacións,
al temps en que 1' exércit d' Anfós II s' anava á posar en caraí desde
Lleyda. Sens perdre temps hi trámete á Pere de Sant-Martí batlle
de Mora, y procurador de Tivisa, qui tenía comanda d' esplicarli la
apurada situació en que 's trovava, 90 es, comanaven á esserli corre-
gudes y saquejades les sues terres.
Trova encara al Sobirá en la ciutat de Lleyda. Rebut en audiencia,
224 F. CARRERAS Y CANDI
digueli en Sant-Martí, que son Senyor no podría acudir á la guerra
de Cerdanya, per teñir necessitat de defensarse deis Templers y deis
Montcades. Respongueli Anfós II, que no creya ocorregués cap inva-
sió á Mora^ majorment quan ell volía evitar lo contratemps, escrivint
á Fr. Berenguer de Sant-Just, mestre del Temple y ais Montcades.
Lo missatger Sant Martí, durant sa estada á Lleyda, vegé retornar
al encarregat de portar lo missatge á Fr. Sant-Just, sense haver pogut
cumplir sa comissió, puix lo Mestre del Temple havía refusat rebre la
carta, al que sembla, per no anar caracterisada ab lo sagell del Sobirá.
Sutilesa endrepada A entretenir y per tant á guanyar temps per portar
á efecte sos damnats propósits. D' aquesta manera, si Anfós 11 sortía
de Lleyda y feya la vía de Puig'cerdá, no era ja fácil que "s repetís son
escrit y al menys, los actes que aparellaven, no anirien agravats ab la
circunstancia de desobeyr á la potGstíit.
Mes com Anfós II desitjava avans que tot, desfer los destorbs que
tiressin á perdre lo bon éxit de la campanya, son interés era evitar á
ultranza, 1' apartament de la host de n' Enten^a del exércit reyal.
Axis es que, lo Monarca, repetí la lletra precedent, trámetcnla al
]\lestre del Temple degudament sagellada. No explica lo procos, ni com
la rebé, ni quina resposta hi dona. En cambi detalla tot quan pertoca
al cumpliment de la matexa missió envers los Montcades, encomena-
da per n' Anfós II, al escrivá reyal Guillém Sala, acompanyantlo
Pere de Barcelona, escrivá del uotari públich de Lleyda Guillém
Fuster, qui devía axecar acta de les respostes que 's donaríen á la
orde del Rey.
De la carta, escrita ab identitat de páranles, se 'n portaren, los mis-
satgors, sis origináis, adrcQats ais cavallers Ramón de Monteada, Pere
de Monteada, Guillém de Monteada, Berengueró d' Enteníja, Berenguer
d' Enten^a y Guillém d' Enten^a. A tots, Anfós II, los hi deya lo ma-
teix: després de saludarlos exposa va, que, necessitant deis nobles y
militars catalans, per defensar son regne de la invasió de gents es-
trangeres que 1' amenassaven desde les vertents de Panissars, los hi
manava posar treves á la guerra que llavors teníen los Montcades y
los Entonces, quals treves devíen durar fins á Tots Sants. Havent de
donar créenla á tot quan en Guillém Sala los hi diría de viva veu, de
part seva. Ho flrmava á Lleyda á 5 d' agost de 1289 y sagellava ab lo
sagell reyal. (1).
(1) «AlfonsQS deí gratia Rex Aragouis Maiorice et Valencie ac Comes Barcliinone
vironobili et dilecto R" de montecatheno Salutem et dileccionem (-um uos et alios
nobilf s et milites Catalonie habeamus iiecesse ad deffendenlam fcerram nobtraca
contra gentes extraneas quod sunt in partibus de Par issftrs quod intendunt ad inaa-
•ioDem eiusdem Mandamus treuguas juxta formam vsatioorum barchinone iiit«r uos
et nobiles P de montecatheno et (r. d« montecatbeno et valitofes uestros ex vna parte
et nobiles Berengario de enten<^a et G et Bng. eius filios ex altera usque ad í'estum
omnium sauctorum. Quare uobis dicimas et mandamus quateMis dictas treuguas
approbetis et obseruetia Credentes ex parte nostr» fideli scriptori nostro Q" sala su-
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANYES DE PRADES 225
Lo dissapte 6 d' agost, arrivaren, Sala y Fuster h Sos y en lo cc-
mentiri existent junt al castell, Sala parla ab Ramón de Monteada, á
quí llegí la carta del Rey, entregantli seguidamcnt la que 11 anava
endrepada.
Ramón de Monteada respongué, que no o])osan'a cap dificultat en
servar les treves imposades per lo Sobirá, si en Pere de Monteada,
qui era cap d' aquella baudositat, les volía servar.
No satisfentli á Sala aquesta resposta, lo requerí perqué, á despit
de la circunstancia que aduhía, guardas los treves segóns raanava
Anfós II, tota vegada que á axó hi venía obligat per los Usatges de
Catalunya.
Sense perdre temps, ja cumplimentada sa missió á Sos, partí la co-
mitiva deis missatgers reyals, en lo mateix dissapte, dirigintse vers la
vila d' Aytona. A la plassa de la vila hi trovaren á Pere de Monteada,
á quí r escrivá Pere de Barcelona llegí y entrega la carta del Rey,
Respongué Pere de Monteada, no trovarse aparellat á guardar
treves si no eren posades per lo Rey flns á la festa de Nadal y sí pre-
viament no les aprovava en Berenguer d' Enten(ja y sos valedors, es-
pecialment Domingo Aragonés y Berenguer de Valencia y los homes
que aquests teníen á son eomandament. També volía que s' entongues
compres en elles, lo fet de Seros y tot lo que ell posseia, de qual apro -
bació li 'n constas per carta de Berenguer d' Enten9a y finalment, que
les treves fins á Nadal, les aceptas Guillém de Monteada, en la guerra
que tenía ab n" Entonga.
Es evident esser lo propósit de Pere de Monteada, buscar subter-
fugis per no obeyr la disposició del Rey. Mes Guillém Sala no era home
de dexarse enganyar per sutileses: fldel cumplidor de les ordes d' An-
fós II, lo requerí de part del Rey, que, á despit d' aytals observacións,
acates les treves reyals, majorment fentles servar lo Sobirá fins á
Tots Sants, á Berenguer d' Entonga y á sos valedors,
Altre vegada repetí Pere, la precedent resposta y tant ell com
Sala, se 'n fereu donar testimoni notarial per 1' escrivá Barcelona,
qual testimoni firmaren, lo militar Roraeu de Gurb, lo prebere Ra-
món de Palau y lo texidor Nicolau d' Almenar, tots tres vehins d'
Aytona.
A r endemá, diuraenge 7 d' agost. Sala y Barcelona se presentaren
á la vila d' Aseó, en busca de Guillém de Monteada. Lo trovaren en
certa plassa al costat de les cases de la Abadía^ y allí 1' escrivá Barce-
lona, li llegí y entrega la carta reyal.
Guillém, de moment, no hi volgué res contestar, dient que aquell
mateix día, després de dormir la mitjdiada (post dormicionem) , crida-
per hüs quod uobis circa predicta duxerit refferenda, Nos etiam easdem ^reuffnas snb
eadem forma mandamus approbari et obseraari per nobiles supradictoB. Datum Ilerde
nonas angustí anno domini M° CC''LXXXIX°.>
1904 15
226 F. CARRERAS Y CANDI
ría á concell á sos cavallers y deliberarien si 's devien observar ó no
les tais treves.
Hagué d' esperarse, donclis, lo missatger Sala. Mentres recorregué
la vila d' Ascó^ observa la activitat ab que 's porta ven á terme apare
llaments militars. Vegé com Guillém de Monteada y altres ^cavallers,
manejaven gamberes, cuxeres, perpunts, ballestes y demés armes (1).
Era pública veu, que tais preparatoris se feyen per dampnificar á
Berenguer d' Enten^a.
Dormida la mitjdiada, Guillém de Monteada bagué parlamcnt ab
sos cavallers, en presencia de Sala aplegantse en una de les cases que
á Aseó poseía en Pere Xen^
Monteada, dirigintse á Guillém Sala, li pregunta si li serien entre -
gats diners ó pcnyores suficients, per respondre deis perjudicis y danys
que havía rebut de n' Entenija, duraut altj-es treves precedentment es-
tablertes per lo Rey. Respongueli Sala, que res d' axó s' anava á fer,
sino que lo Sobirá, ja conexería en son degut temps y lloch, d' aquesta
reclamació, resolent lo que 'n sigues Just y equitatiu.
ManifestA en Monteada, com promptament parlaría ab Ramón y
Pere de Monteada y ab altres amichs, sobre si devien ó no observarse
les presents treves, trametentli la resposta á Anfós II, per un missat-
ger seu.
De tant manifesta y descarada manera se discutía y desobehia la
autoritat del Rey, per la noblesa catalana del segle xiii.
Sala, requerí á Guillém de Monteada en nom del Rey, á que apro-
vas y fes observar, sens cap empatx, les treves estatuydes, en confor-
mitat ais preceptes deis Usatges de Barcelona. Y hu y altre se feren
donar testimoni de lo ocorregut en dita entrevista, presents al acte los
militars Romeu de Frexa y Pon? de Pax, autorisantlo ab ses sig-
natures.
Cumplimentada la part de la sua missió en lo que pertocava ais
tres Montcades, Sala devía passar á fer lo propi ab los tres Entences.
Sempre acompanyat del escrivá Barcelona, un dimarts 9 d' agost,
arriv.-l á la vila d' Alcoleia, ribera del Cinca, hont estava Berengueró
d" Enteu^a, lo flll segón del senyor de Mora y Tivisa, trovantlo en les
cases de Gil de Bielza. Forenli notificades les treves reyals en la ma-
texa forma que ais Montcades y respongué aprobarles y observarles,
segóns ho preceptuava lo Solñrá. Li Iliuraren testimoni del acte, flr-
mantlo com á presents, Gil de Bielza y dos escuders de Berengueró
nomenats Arnau de Bielza y Pere de Camarasa.
Per finalisar esta missió, arrivá, Sala, á Mora, hont ja no iii trova,
ni á Berenguer ni á Guillém d' Enten(?a, per haver sortit á ajuntarse
ab r exércit d' Anfós II. De IMora so n torna á Alcoleia y al día se-
gücnt arrivava á Lleyda. Descansa allí uns quants dies y feu la vía de
(1) Manejaiian Camberiaa et Cuxeriaa et Perpunts et balliítas et alia arma.
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANYES DK PRADES 227
Cerdanya, hont sabía que s' hi trovaven los dos Entences, pare y fiU.
Axis fou, topantlos en lo siti de Ribes. Y quan anava á notiíicaishi en
deguda forma, que lo Monarca 'Is lii havía establert treves ab los
Monteados^ li fou dit, que tal diligencia resultava inútil puix lo lloch
de Mora acabava d' esser talat y saquejat per les hosts deis Montcades
y deis Templers.
A fi de seguir ab ordre y claretat la present narració exaniiném
ara que feu Berenguer d' Entenga, després ([ue s' aparellá á entrar
en campanya ab lo Rey.
Com ja tením dit, á Mora lii reuní alguna gent y en la primera de-
cena d' agost, sorcí cap á Apiera, hont hi devía aplegar ab sa host,
alguns altres cavallers. Deturá en esta vila, á fí de posarse d' acort
y rebre ordres del Sobirá, qui ja estava en camí de la frontera.
En sa companyía n' Enten^a portava un contingent de poch mes
de vuytanta cavallers Es sapigut que, ab cada cavailer armat, hi
anaven los corresponents peons ó servents, que li donaren auxili en
lo combat y remataven al enemich que queya ferit del cavall. També
s' entrometíen en les Iluytes y ab permís deis seus senyors ó cavallers,
anaven á fer corregudes ells tots sois. Aximateix les tales deis llochs
enemichs, estaven especialment encomenades á los dits servents ó
peóns.
Durant la breu estada que feu Berenguer d' Enten^a á Apiera, rebé
una carta de sa muller Na Gaubes, quí havía quedat en lo castell de
Mora ab alguns fidels servidors, entre los quals s' hi comptava Pere de
Sant Martí, donantli compte com proseguíen Templers y Montcades,
en la concentració d' elements de guerra.
Contrariat per aquesta nova, Berenguer, encomená á son majordom
Bernat Vidal, que posas en mans del Rey una carta acompanyatoria de
la tramesa per Xa Gaubes. Vidal trova en la ciutat de Cervera al rey
Anfós II y les hi entrega. En sa carta, Berenguer s' excusava de se-
guir 1' exércit reyal, per acudir á la defesa de sa familia y bens, ata-
cats per sos enemichs.
De cap manera convenía al Monarca se li separas la host de 'n
Enten^a y axis li feu dir que, per motiu algú no retrocedís en son camí,
ja que no creya succehis lo que li anunciava Gaubes, per quant havía
trames á hu de sos escrivans al Mestre del Temple y ais Montcades, á
fl d' imposalshi treves en son nom. Feu encara mes: ordoná al Prcpósit
de Solsona que axis ho escrivís al propi Berenguer, mentres sortía un
porter reyal en busca deis Montcades y deis Templers, por reiteralshi
la orde de no dampnificar ais Entences ni áson territori
Retorna, Vidal, á Apiera, portant á son Senyor la lletra del Prepo-
sit, prometentli en nom del Sobirá, que, per cada diner de dany que
li ocasionasen, faría lo Rey, n' hi pagassen vint. La carta portava lo
sagell secret d' Anfós II.
Entenpa no podía res oposar y per greu que li sapiguésy per ansiós
228 F. CARRERAS Y CANDI
que estigués de lo que podría esdevenir á sa muller y á sos llochs,
sortí d' Apiera lo divendres 12 d' agost, fent nit á Manresa, en quin
día Anfós II havía exit de Berga per arrivar á Puigcerda.
Lo dissapte 13 d' agost, Entenga ana de Manresa á Berga, de ma-
nera que sa host portava dos jornades de retrás á la del Rey. A Berga
1^ esperava Pere Marques, fentli entrega, en nom d' Anfós 11^ de cent
áureos en paga de son salari_, ab quin diner, allí mateix s' aprovisiona-
ren de vitualles per la campanya.
Lo diuraenge 14 d' agost, feren nit á Bagá y al següent día festivi-
tat de la JMare de Deu, arri varen al carapament que '1 Rey d' Aragó
tenía posat junt á la vila de Puigcerda, quina població pertanyía al
Rey de Mallorca.
Aquella campanya no tenía per objectiu ampararse de la capital
Cerdana, ja que lo campament sigue alsat de davaut sos murs, plan-
tant les tendes a! coll de la Perxa, lo dimars 16 d' agost de 1289 (I).
La nit del dimars, lo servey de ronda y vigilancia del campament,
corregué á compte de Berenguer d' Enten^a.
Lo dissapte 20 d' agost, del coll de la Perxa passaren á ocupar
cert petit castell y lloch perta^nyent al Comte de Foix y del qual cap
testimoni ne recordava lo nom y sois un manifestá nomenarse Liga.
Axó prova la poca importancia que tindría y per consegüent no es d'
extranyar hage escapat, aquesta possessió del Senyor Pirinencli, á la
perspicacia de son historiayre Baudon de Mony, al reproduyr, en una
curiosa planta topográfica, tot lo que tenía á Catalunya (2)
Anfós II, sois permanasqué á Liga una Jornada, presentantse lo
diumenge 21 d' agost, davant lo castell de Ribes, ocupat per sos ene-
michs. La ocupació d" aquest castell se veu era lo fi primordial de la
campanya empresa en la frontera.
En les derreríes del segle XIII, era Ribes, una de les plasses de
mes valía deis Pirineus, per sa posició fronterÍ9a y allunyada de po-
blacións importants.
Una nova per demés curiosa y contemporánia del temps que 'ns
ocupa, ja que pertany al any 1292, nos fa á saber en que consistien
les fortaleses de Ribes. Es, certa informado feta per dos delegats tra-
mesos, per lo Rey, á la frontera catalana, á fl d' inspeccionar y ente-
rarse del estat de nostres castells.
Hi havía á Ribes, en 1292, ó siga tres anys mes tart .deis fets que
aquí s' están desenrotllant, lo castell, la bastida major, una torra prop
la bastida y les coves.
Com es posible que molts de nostres Uegidors no sapiguen lo signi-
(1) Advertim que no hi ha uniformitat en les declaraoións deis testimonis res-
pecte á aquest día. Pon^ de Riudefoix consigna esaer lo 16 d' «gost mentres que G. de
Cegunyoles din era lo 17. Com lo primer sembla estar de tot mes euterat, 'as atenóm
á lo que ell diu.
(2) Relationslde Foix avec la Catalogue ?olum. I.
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANYES DE PRADES 229
ficat de la páranla bastida nos permeténi dóname alguna noció. A des-
pit d' existir la mateixa páranla en la llengna castellana, S(m significat
era en abdues raolt diferent. Mentres que, segons Covarrubies los cas-
tellans enteníen per bastida, solsament les torres grolleres de fusta, ab
les que 's combatíen castells y cintats raurades, A Catalunya també
equivalía á fortalesa provisional ó Ceta k mitges, profitant les condi-
cións naturals del lloch. Tant se solía construir per la defensicj d' una
vila, com per la sua expugnació (1).
Com exemple iguahnent contemporani existeix la informació del
1 292, dlent que Bernat de Cabrera, Bernat la Clusa y Huguet de Perdigó,
havíen bastida la roca Grellera del terine de Terrados y essent presa
per Dalmau de Rocabertí volgué legalisar sa situado demanantne es-
tabliment al Sobirá, per sa calitat de senyor y propietari de les roques
y altures estrategiques. Llavors la 6así ida déla Roca- Grallera bagué
castlá y en 1' any 1292, comptava ab den homes d' establida ó guar-
nició (2).
Les bastides han donat nom á algunes poblacicns formados al redós
deis cims ó llochs hont s' alearen aytals fortaleses provisionals. En lo
Pallars hi han La Bastida de Sort, La Bastida de Bellera, La Basti-
déta.^rop de Corroncuy y la bastida de Tolo (a. 1396)-, altre Bastida
está en lo Roselló, entre Arles y Prades, etc.
Per defensar les fortaleses de Ribes se neccssitaven, en 1' any 1292
segons establiren los delegats militars del Rey, setanta hun homes
(1) A. 1233.— Al sitiar ViUena Jaame I, diu la sua Crónica «E pnys lo comanador
Dalcani? ab los frares e ab almugavers faeren una bastida a Billena.»
En Ja propia conquesta de Valencia, al tractar de sitiar Xativa Jaume I, se llegeix
«E quaQ haguem menjat enviam per don Rodrigo Licjana e dixem li: Don Rodrigo
hoíam missa mayti, que nos hauem aesmat I. pug que creem que sera bo a bastida»
«e Deu5 dor ans ^na alquería al peu del png en que haaia molt bona for^a e laygna
dun riu que li passaua al peu aixi con nos hauiem mester e aqui faem nostra bastida
(Libres deis feyts.... d' En Jacme lo Conqueridor, nom. 315, 3¿1.)
A. 1281.— La Bastida del Infern situada prop los castells d'Hostoles y de Cabrera
(Registre 50, foli 149, arx. Corona Aragó.)
A. 1283.— En una revolta d' Aynsa mana lo Rey á Ramón de Molina «quod faciat
destruí bastidas quod per homines bandorutn de Aynsa facte sunt ibidem ita quod non
sint u« 1 remaneant decetero stabilite et faeíatís tornari carrerí as ín statu ín quo erant
primi faciendo inde barrerías remoueri» ^Regis^^re 43, fol. 43, aix CoronaAragó )
A. 1301 —Al sitiar Aman d' Espanya lo oastell de Lort (Pallars) lo sitiador construí
una bastida pio^ del csLStelL- -{Relations de Foíx avec la Catalogue, Baudon de Mony,
voL I, pl 818.)
A. 1314.- Dalmau de Totzó sítíá, Copliure hont hi «feu aqui una bastida e estecb so-
bre ells» (Cróniea del rey en Pere lo Cerimoniós.)
(2) cDiluns qui fo sendema de sen Matheu fo en Gauseran de mírales ab en Gau-
seran de canelas per manament del seyor Rey ab en Dalmau de roca berti a lesgleya
de terades et demanans et requests ñus que li desem establlment a la roca grelera
quen bernat de cabrera et en Bernat za clusa et nuget de perdigo auien bastida et en
Dalmau auia las presa deis nos no pogem tornar al bastida a esmat et auengem nos
ab en Dalmau de roca berti que com lo senyor Rey iages uist quey estagesen X seruens
enoontínent fem uenír deuant nos En malgnres castela de la bastida et jura que
tendía aquí X seruens continuament En lestablida et que non ixírien sino per seruey
del oastel» {Colección de procesos. Legajo l ° ailos 1291 á 1303, n." 3. Arx. Cor. Aragó.)
230 P. CARRERAS Y CANDI
distribuits de la manera següent: vint y cinch al castell; trenta á la
bastida major, vuyt á la torra de prop la bastida y vuyt á les
coves (1).
Arrivat, Anfos II, davant del castell de Ribes, hi posa siti en forma,
puix no s presentava fácil empresa la sua ocupació inmediata.
Estant en les operacións del siti, pervingué al campamentun vehí de
Mora, de nom Berenguer de Roda^ en demanda del cavaller Beren-
guer d' Entenca. Lo missatger era portador de males noves. Per ell
rebé, lo capdill cátala, una carta de Na Gaubes comunicantli, com los
Templers y los Montcades, formant gros contingent de peons y cava-
llers, havíen entrat y talat lo lloch de Mora.
Llavors Entenca se determina á dexar la host reyal y corre á cas-
tigar ais invasors de la sua térra. Convoca á sos cavallers, manif estant-
íos sa resolució. Ab intent de despedirse d' Anfós II, entra en sa tenda,
pié d' ira, ab la carta de Na Gaubes á les mans.
Enterat de son contingut, lo Monarca, se mostrá altament ofés
de lo que havíen fet Templers y Montcades, en tant, que digué á Be-
renguer conceptuar dita tala é injuria, com feta á ell mateix y per
consegüent, li faría restituir vint per hu. Mes de cap de les maneres
consentí en que se separes de les operacións militars d' aquella
campanya.
Curios es consignar lo que refereix un donat del monestir d' Escarp,
Pere Manch, quí seguía la host d' Entenca, afirraant, que, la corre-
(I) Kn 1' any 1292, dnrant la guerra ab los reys de Mallorca y de Franca, Jaume II
trámete delegáis per reconexer los castells y forces del Empurdá. listos declararen
que hi devlen ha ver per la saa estalilida los servents ó guardiáns que s continúen:
Sant Llortns, 30 homes.
Qner-roig, 70 homes y 2 mastios.
Quer-manaon, 12 homes.
Llers, 15 homes.
Montroig, 18 homes
Bassa-goda, 10 hornea.
S. Llorens 9a Muga (castell), 8 homes; (torra sohre la vila), 4 homes; (vila), 35 homes
Terrados (bastida de roca grelera;, 10 homes.
Roca-bruna, 8ú homes,
Vila-llonga (torra), 5 homes
Roca de Pelencha, 10 homes.
Camprodón lesgleya), 23 homes
Cftvaleta castell), 12 homes.
Possa deis Camps, 20 homes.
lUbes (castell), 25 homes; (bastida major), 30 homes; (torra prOp la bastida), 8 homes;
(á les coves), 8 homes.
Cabrenys (castell), 38 homes.
Corsavl (torsa), 25 homes.
Montdoys (roca), 19 homes.
Montalba, 16 homes
Falcó, 12 homes.
Ariet, 6 homes.
Sala deis Orts.
(Colección de procesos. Legajo 1° años 1291 á 1803 nom. 3, arx. Corona d' Aragó),
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MOXTA.WES DE PRADES 231
guda deis Templers en terres de Mora, feu exclamar al Soblrá, que,
puix lo Temple auava contra cristians, tot lo mon anirín á mal y (jue
ell no regnaría, si tal exeés no castigava (1).
Per molt que li dolgués á B^renguer, no pogué acudir en socors do
Mora Resta eu la expugnació de Ribes, empresa una mica llarga, puix
dura de quinze dies á tres setmanes. Já rendit, lo castell á Anfós II,
en la primera decena de í^'etembre, conceptuant terminada aquella
carapanya, IlicenciA scguidameut son exercit.
Arbert de Mediona ab molts d' altres cavallers, partí del carapa-
ment reyal lo dia de la entrega del Castell, ó á mes tardar 1' endemá,
en direcció á Barcelona. Lo Rey sois hi atura dos dies, retornant á la
Capital ab lo fort de son exercit.
Avants d' arrivar á Monteada, Guillém d' Entenga, ab onze cava-
llers, se separa de la host y feu la vía del castell de Mora. Son pare
no 's mogué del seguici d' Anf'ós II. entrant ab ell á Barcelona, á recu-
Uir los llors que lo poblé tributa ais capdills victoriosos.
Tot seguit lo Monarca trámete de nou al escrivá Guillém Sala,
al Mestre del Temple, ab una carta, que 's suposá sería citació
reyal.
A poch de trovarse instalat, lo Rey, en son paiau de Barcelona,, li
vingué un missatge de que Jaume de Mallorca y lo Comte de Foix,
anaven á combatre lo castell de Ribes. Ánimos é infatigable Anfós II,
sense mes esperar, se posa novament en canií de Ribes ab la host que
tenía encare aplegada en part. Mes al passar per Vich, bagué conexe-
ment de que 's tractava d' una falsa alarma, retornant á Barcelona,
sense que may, en estes contramarxes, dexás sa companyía Berenguer
d' EntenQa.
Tampoch se mogué, aquest, del costat del Sobirá, en los dies que s'
estigué á Barcelona. Aprés 1' acompanyá á les Corts generáis de Mont-
só. no retornant ab sa familia fins que les Corts sigueren finides. Les
presents Corts foren continuació de les que 's devien teñir en juny de
1288, prorogades dues vegades (la derrera á S. Miguel de setembre de
1288) y que no s' arriváren á reunir. Convocades novament, al setem-
bre de 1' any 1289, ab 1' obgecte de tractar deis auxilis necessaris á les
guerres que lo Rey d' Aragó mantenía ab Franca y Castella, Uavors
tingueren efecte, dites corts segous ne depenja del present procés,
corroborant lo que já diuhen les histories (2),
(1) «Et tune respondit ei dominas Eex quod ex quo Templnm uadit contra xptia-
nos ooncedebat qnod totas mandas iria a msl et iixit quod nanqaam regnaret nial
hoc oastigaret».
(2) Colección de Cortes de los antiguos reinos de España, publicada en 1855 per la Eeal
Academia de la Historia
232 F. CARRERAS Y CANDI
III
Templers y Montc^Jes ajusten llurs horts (jgost de 1289). -dobles y frares que
hi estigueren. — Cavalcades y tales del terme de Mora — Inutils esfor(;os per entrar
en la vila, en lo castell y en lo colomer d' en Vilabertran.— Combat del puig del Es-
pertel. — Dampnatges á Tivii;a.— Arriva á Mora Guilléni d' Enteni;a. — Anfós II mana
formar procés de tot, en 1289. — Mort d' Anfós II Jurant les actuacions (1291),
Explicat tot lo referent á la ca-mpanya de Ribes y al paper que hi
representa Bereng'uer d' EntenQa, tením de retrocedir alguns dies y
trasladarnos á les montanyes de Prades hont rependrém la relació deis
presents fets, desde que 1' escrivá reyal Guillém Sala, cumplí la co-
manda d' Anfós 11, d' imposar treves reyals ais Montcades y ais En-
tences.
Los preparatoris guerrers prosseguiíen com si tal cosa, dirigits per
los Montcades y los Templers. Una vegada aparellats á la empresa,
caygueren les dugues hosts expediciouaries sobre lo terme de Mora.
La primera correguda se feu lo dijous 11 d' agost. Fr. Berenguer
de Sant-Just mestre del Temple, ab quaranta cavallers y tres mil peons
armats, entra en lo terme de Mora. Lo distintiu de la orde, la sua sen-
yera vulgarment coneguda ab lo nom de lo balea, se vegé onejar en só
de guerra. Tenía, aquesta, dos colors, blandí en una cara y blíiu en la
contraria, campejant en la primera la roja creu que 'Is disting'ía (1).
Com se veu donchs, los Templers no dubten en pendre la iniciativa,
tal vegada obeint ais plans aíjuells diesconeertats,en ses entrevistes ab
los Montcades. Se sap positivament tingueren conferencies lo coma-
nador de Miravet, ofici llavors exercit per Fr. Pere de Tous, ab Fr. G.
de Puignaucler (qui resulta anomenat per testimonis del procés, coma-
nador d' Aseó y que segons cert inventan manuscrit (2) seria comana-
(1) Diuhen diferents testimonis ab referencia al 6(i/crt: «vexiUum vocatum l)a)<?a
quod erat ex vna parte álbum et ex altera blau» <quod quidam signum bal^anum est
ex vna parte nigrum et ex altera álbum nec recordatur tamen si erat ibi orux rúbea.»
«vnum vexillum Templi tamen cam signo crucis mb^e et cum campo albo.»
(2) En un Ilibre dol arxia del Gran Priorat de Catalunya de la orde de Sant Joan
de Jerusalem qual litol mes modern es Inventarts ó degapropis de las casas del Temple de
Arago y Valencia, s' hi llegeix la seguent llista de Gomanadors, precisament pertanyent
al any 1289. Despraciadament bi falta lo comenoament.
Fr... . lui Comanador de Gardeny,
Fr. A. deTimor Castellá, de Montsó.
Fr. P. de Vilalba Comanador d' Osea.
Fr. P. de Gardiola Comanador de Pina
Fr. G. de Puignaucler Comanador de QaragOQa.
Fr. Joan d' Abella Comanador de Boquiyonic.
Fr. Joan de Siest Comanador d' Aviessa.
Fr. Arnau de Torroella Comanador d' Ambel.
Fr. Bernat de Barbará. Comanador de Calatayut.
Fr. Poní? de Pontons Comanador d' Alfambra.
ENTENCES Y TEMPLERS EX LES MONTAXYES DE PRADES 233
dor de QaragoQa) y alguns altres de la Orde, en les viles d' Aseó y
RibaiTOja, ab los Montcades.
No 's pot duptar, per los fets que després se desenrotlláren, que fou
convingut y estlpulat reunir una nonihrosa host á fí de caure potent-
ment daniunt deis territoris pcrtanyents á n' Enten^a, com plajea de-
vastadora. Si la empresa no Ms sortí del tot be, puix diutre les viles y
castells de Mora y de Tivi9a, no hi pogueren entrar, seo;ons mes avant
dirém, fou degut á la previsió de Berení^uer d' Entonga. Com los pre-
paratoris de la ir.vasió se feren molt anticipadament y arrivaren á
conexement de u' Entenca, era natural, que, al partir á la guerra de
Cerdanya, dexás avituallada y municionada la sua térra.
Lo divendres 1-2 d' agost de 1289, 90 es ais cinch dies de la entre-
vista entre Guillém Sala y Guillém de Monteada, en la qual aquest
manifestá respondria per escrit al Sobirá en lo pertocant á les treves,
aparegué Monteada, per lo camí que d' Aseó vá al castell de Mora,
armat de totes armes y en só de guerra, seguit per 25 cavallers y 500
peons Aquella host acudía á aplegarse ab la del Temple. No feu me?
que passar de llarch per Mora ocasionanthi poch dany.
Avans d' entrar á Beni^anel, llocli designat per aplegarse les dife-
rents hosts y hont já s' hi trovava lo Mestre del Temple, alguns cavallers
d^ esta milicia, sortiren á rebre á Guillém de Monteada.
Ab aquests preparatoris á la vista, no cal dir sí los de Mora ^s po-
sarien alerta, tancant llurs bestiars y obgectes de valor en llochs se-
g'urs, aparellant los utils de combat y posant guaytes per tot arreu, que
los avisassen al moment d^ acostarse lo perill.
Lo dissapte 13 d' agost, ó siga lo dia que Berenguer d^ Enten9a fe-
ya la jornada de Manresa á Berga, aparegué Pere de Monteada á Mora
per la vía d' Aseó, al enfront de la sua host composta de vint y einch
ó trenta cavallers y uns sis cents peons arraats^ ab la bandera dita deis
pans de Monteada extesa. Exírenlo á rebre Guillém de Monteada y los
Templers, en nombre de quaranta á cinquanta cavallers armats.
Les tres hosts juntes formaren un contingent fort d' uns vuytanta
cavallers y quatre mil peons, en lo qual s' hi veyen enejar molta va-
rietat de banderes.
No solsament eren, los cavallers, qui solien portar senyeres esteses
sots les que hi aplegaven llurs hosts^ sino (jue les poblacións feyen con-
Fr. Jaume d' Uluga Comanador de Vilel.
h'r. Eximen de Llanda Comanador de Cantavella.
Fr. A. de Oasteylig Comanador de Castellot.
Fr. G. de Miravet Comanador d' Orta,
Fr Bg. de Vallvert Comanador de Ribarroja.
Fr P. deTcus Comanador de Miravet.
Fr. Bernat de Rocamora Comanador de Tortosa.
Fr Bernat de Pineda Comanador de Xivert.
Fr. M. de Lison Comanador de Burriana.
Fr. Joan Peri? Comanador de Valencia.
234 F. CARRERAS Y CANDI
semblant, acullint á llurs habitants en cas de guerra, sots distintius
propis de cada una ó millor dit, menant banderes ab la ensenya de la
localitat, les quals, en lo Uenguatge de llavors^ folien esser conegudes
■per penons d' albergada, l^íom que precisava la cosa d' una manera
justa y sonora equivalent á penons que albergaven ó recullien k son
entorn, ais d' una matexa procedencia.
A mes deis bal9áns y de les senyeres deis Montcades, hi onejaven
nombrosos penons d' albergada de poblacións que lo Temple posseliía
en les montanyes de Prades y ribera del Ebre. Les declaracións del j^ro-
cés mostren hi concorregué gentdc Gandesa, Corbera, Aseó, Orta, Mira-
vet, Cantavella, Batea, Vilalba, Ribarroja y Qalfatera ó Qa Alfatare-
lla, ó La Fatarella, com se diu vuy en dia. Tots aquests pobles havien
rebut agravis deis Entences, per manera que, tenint en compte 1" es-
perit de la época, apronta ven ab agrat aquella ocasió que se 'Is presen-
tava de pendres la justicia per sa propia má.
També figuraren en la host invasora, uns quinze frares del Tem-
ple, la major part d' ells joves, los quals eren facilment reconeguts per
les blanques vestimentes de la Orde. No hi fou vist lo Mestre del Tem-
ple. Los noms deis frares que prengueren part en aquests acontexe-
ments son^ Fr. Eximen de Lienda comanador de Cantavella, Fr. Ra-
món de Bell-lloch á qui un testimoni suposa esser comanador de Va-
lencia y altre comanador de Tortosa, pro que no resulta axis del In-
ventan de 1289, Fr. Pere de Redorta, Fr. Guerau de Cleriana, Fra
Puignaucler comanador d' Aseó, Fr. Pere de Tous comanador de Mi-
ravet, Fr. Albanell, Fr. Castellet, Fr. J. de Vilalba, Fr. A. de Torroe-
11a, Fr. Dalniau de Timor, Fr. Roderich de Liíjana, Fr. Simón de
Blanes, Fr. R. Berenguer, Fr. R. Olivar, Fr, A. de Caraporells, Fra
Galceran des Guals, Fr. Berenguer de Cardona, Fr, ... de Banyuls,
Fr. , . de Miralles, y Fr. ... Sendaniel, comanador de Xivert qual ti-
tol está en desacort ab lo comanador que consta esser de Xivert
en lo predit inventari.
Esplica, lo militar Arnau de Gurb, testimoni deis fets que aquí ^s
ressenyen, puix seguía á Pere de Monteada, que lo Comanador d' Aseó
anava armat d' una ballesta, la qual, en la gran tala y siti de Mora,
dexava á tots los qui ab ella volien tirar dintre la vila (1).
Lo dissapte 13 d' agost de 1289, tingué lloch la gran invasió de
Mora efectuada pertant potent exercit. Se posa siti á la vila y se tala
tota la horta del castell.
Lo diumenge 14 d' agost, se prosseguí expugnant la vila y talant
lo terme.
Lo dilluns, diada de la Mare de Deu d' agost, si bé seguí la ex-
(1) « Fnit in dicta t«la dictns Comendator de Azchon armatus et cum ballista quam
portabat quHmqnidem baUistam tradebat illis qui volebant trahere cum ea juxfca ba-
rreriam viUe de Mora.»
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANYES DE PRADES 235
pug-nació de la vila, uo 's feu tala alguna en lo terme, tal vegada en
celebrado de la festivitat de la Verge.
Durant vuyt dies proseguiren talant Mora, essent dampnificades
una y altre vora del Ebre, arrivant los invasors fins á la Cenia.
Totes les tentatives fetes per apoderarse de la vila de Mora, resul-
taren inutils. La defesa ana ben dirigida y sos vehins no resultaren
may sorpresos. Tampoch pogueren res ab lo castell.
L' exercit invasor se solía recullir en lo lloch de Beni^anel. Allí los
hi eren procurades provisións tant ais habitants de les poblacións del
Temple, quan ais qui seguien la host deis Montcades. Fr. Albanell era
r encarregat de fer aytals repartinients: ell los hi donava pá, vi, carn,
diners per comprar queviures, cándeles y tot lo demés necessari á la
vida. JMoltes de les provisións, especialmentlo forratge per los animáis,
era trames de Miravet.
Durant la primera tala de Mora, 90 es, ais quatre dies de comensa-
da, corregué la veu en la host invasora^ de que Berenguer d' Enten9a
s' havía deturat en Panadés, ab proposit de retornar á son territori. La
alarma fou deguda á certa carta d' un militar afecte á en Guilléra de
Monteada, nomenat Pere de Moya, lo qual trovantse en Panadés, ho
avisava á est capdill. Ais tres ó quatre dies, rebía Monteada una sego-
na Uetra del propi Moya, avisantlo de la partida d' en Berenguer ab
sa host vers la Cerdanya. Feren corre la veu, entre la gent del Temple
y deis Montcades, de que, no disposant, Be enguer, de forses bastants
per combatrels, havia mudat de proposit y determinat passar á la host
d' Anfós n.
S"* afirma que aquesta nova feu exclamar al Comanador d^ Aseó, di-
rigintse á la sua g'ent, ara podets talar a vostra guisa. Los cavallers
já no temeren esser contradits ni atacats, per la poca gent que, tanca-
da en los murs de la vila de Mora ó dintre les muralles del castell, no
havia manera de pendre la ofensiva. Axis donchs, s' alleugeraren de
les armadures, posantse sois escut, capell de ferré y espatlleres, dexant
molts d^ ells los asberchs y uo armant los cavalls (1).
Val la pena de consignar cert incident que esplica un tal A. Escu-
der, de Seros, quí era de la part deis Entences, per pertanyer, Seros,
á Gaubes. Hi havia prop de la vila de Mora, en despoblat, un colomer
qui era d' en Jaume de Vilabertran, Construits, la major part deis co-
loniers d' aquell temps, de bon material, sense porta, y ab les demés
condicións ab que 's solien edificar les torres de defesa, ó guaytes, en
cas de necessitat, podien molt be utilisarse com fortaleses. Axis es que
lo d' en Vilabertran serví per encastellarshi alguns ballesters de Mora.
Lo colomer se vegé atacat y sos defenedors, que no tindrien mala pun-
tería, feriren, ab trets de ballesta, á alguns deis qui los combatien. Axó
(1) «Qaando intrabant talam non portabant a9berch8 plores ex ipsis neo armabant
eqaOí:.>
236 F. CABRERAS Y CANDI
vist per Pere de Monteada, obliga ais atacants á abandonar sa empre-
sa, dient que dexessin en pau ais del colomer, puix no podien reportar-
ne honor de fer mal en dit lloch
Acabada la primera tala de Mora, passaren á damnificar lo terme
de Tivi^a, pertanyent igualment ais Entences Uns vuyt ó deu dies du-
raren les tales d' aquest lloch, y per tant s' escaygueren en la derrera
decena del mes d' agost.
En Sant-Martí batlle de Mora, al haverne conexement, corregué en
ajuda deis tivisenchs ab alguna gent d' armes.
Com Ilavors, los invasors, tenien massa lluny la població de Benita
nel, sereculliren á Genestar.
Se cita un episodi de les tales de Tivi^a, del que 'n fou actor lo
Bort d' Urgell Comanava, lo Bort, una partida de dos cents peons, ab
latine, per sorpresa, pogué apoderarse de molt bestiar menut, supo
santse arrivaría á mil caps. Al enmenarsels al campament, fou perse-
guit per la gent de Tivipa que, sabedora del fet, tractá de recobrar la
presa,, dirigint la acció lo batlle de Mora en Sant-Martí.
Lo Bort y sa gent hagueren de fugir per escapar á sos perseguidors.
Com se vegessen apurats, se refugiaren al cim d' un puig de dit terme,
nomenat puig del Espertel, hont s' hi feren forts. En sa fúgida, abando-
naren ais tivicenehs nou bous y vint ó trenta caps de bestiar menut.
No desistiren de son proposit de recobrar tot lo bestiar, los de Ti-
vica, sino que, conceptuantse de major potencia, puix eren cinch cents
peons ab cinch cavallers, envoltaren lo puig y lo combateren.
N' Urgell creyentse perdut, tractá de treure partit de sa mala situa-
do: y suspenent les hostilitats, comensá á pactar ab los sitiadors. Lla-
vors^ ab un vehí de Tivi(?a de nom Borras de Pegueroles, se feren les
negociacións. Concerta ven aquesta ab condicións de que lo dexassen
anar Iliure y ell retornaría lo bestiar robat.
Estant en ests parlaments, vegé venir á la carrera una colla de
cavallers, que, quan nota portaven al aire lo haiga, comprengué venien
en sa ajuda. Efectivament, eren vint cavallers del Temple y deu de
Miravet, Beni(;anel y Genestar, que caygueren damunt la gent de Ti-
vi^a per desbaratarla,
Llavors lo batlle Sant-Martí, vehent fracasada la empresa, se retra-
gué á TiviQa, mes perseguit per los cavallers, hi fou mort un home
nomenat Bereuguer Vidal y los cavalls deis militars tivií?enchs Arbert
de Vernet, Dalmau de Vilafranca y d' en Fonollar del Llobregat^ é hi
feriren lo d' en Ayguaviva.
IIu deis cavallers d' en Monteada, qui prengué part en la tala de
Tivi^a y que, si no la dirigí no se 'n falta gayre, sigue Romeu de
Gurb. Tenía, en Gurb, gran amistat ab Bernat de Fonollar^ quí possehía
propietats á Tivi^a y ordoná ais que talaven lo terme, se guardassen
de tallar arbres del dit Fonollar, com axis se 'n guardaren. Mes en
cambi, en lo lloch de Banyols del propi terme, hont no s' hi deuría tro-
ENFENCES Y TEMPLERS ES LKS MONTAN YES DE PRADES 237
var Roraeu de Gurb, lo más que hi possehía en Fonollar sigue cremat,
com igualmcnt los d' en Oliver, d' en Berenguer d' Euteiiíja, d' en
R Miquel y de la sarrahina Mascuna.
Tres cents peons y deu cavallers, portant penons d' albergada d' al-
guns llochs del Temple, atacaren la vila de Baiiyols. A despit d' ha-
ver calat foch á un deis seus portáis, no la pogueren ocupar y en la
brega hi moriren dos homes Tot lo terme de Banyols sigue talat, com
igualment la valí de (^eyada á Tivica.
Després de la tala de Mora y de Tiviga, 90 es en la primera quin -
zena de setembre, Guillém de Monteada, sabedor del acabament de
la campanya de Ribes trámete quinze cavallers per guardar la sua
frontera, en previsió á les corregudes que, en ven janea, hi pogués co-
metre Guillém d' Entonga.
Acabats los sis dies que dura la tala del terme de Tivica, los que hi
prengueren part retornaren á Beniganel. Desde allí prosseguiren co-
metent lo mal que encara los hi restava á fer, entrant diferents vega-
des á Mora, altres á Tivica, y un jorn passant al altre costat del Ebre
per talar á la Cenia En dcterminats (lies no feyen cap sortida Axó
portava inquietut en les terres deis Entences, hont los serveys de vigi-
lancia no 's podien descuidar un moment.
Pere y Guillém de Monteada, estigueren en la tala los quinze pri-
mers dies y després partiren, tramentent altre gent sua á la host de
Beni(?anel.
Arrivant al setembre y entrant al temps de les beremes, en qual tem-
porada tenien feyna la major part de la gent d' aquells pobles, se lli-
cenciá la host, vuyt dies avans de Sant Miquel.
A Beniyanel hi restaren en peu de guerra, vint cavallers deis Mont-
cades y quatre del Temple, los quals entra ven á correr lo terme de
Mora quan millor los hi parexía. Lo 8 de novembre se disolgué aques-
ta petita guarnició.
Tornéni les mirades vers Guillém d' Enten9a, á qui dexárem ab
una dotzena de militars, passant per lo Valles, hont abandona la host
reyal per partir á Mora ab la nnijor pressa que pogué.
A Tivipa oygueren só de vía fós y essentlos dit que era corregut lo
lloch nomenat Alfaij del terme de Mora, sens perdua de temps hi
corregueren en sa ajuda. Efectuaven estos dampnatges, tres cents
peons y trenta cavallers. Se presentaren, mentrestant, davantMora cin-
quanta homes de cavall deis Templers y mil peons armats, los qui fe-
ren sa via sense dampniflcar gens lo lloch.
Tot seguit pogué convencers, Guillém d' Enten9a, del gran mal exe-
cutat durant aquelles jornades TiviQa y Mora tenien llurs conreus d'
aytal manera arrasats, que no hi quedava arbre ó planta en peu
Molt inferiors en nombre, la gent deis Ententes, no podien com
batre en camp obert, haventse de tancar, de moment, dintre deis murs.
Guillém d' Enten^a se recullí en lo ca.stell de Mora, desde hont presen-
238 F. CARRERAS Y CANDI
ciá encara, com sos enemichs prosseguien ccrrent lo torme y clamp-
nificant en só de burla, lo pocli que hi quedava.
Mes la ira se contenía malameut en lo cor del fill gran de Berenguer.
Al enfront de la gent que allí tenía, s arrisca encara á enipendre una
cavalcada y tala en terres del Temple, com á revenja ais danys
rebuts.
Montcades y Templers, reberen noves ordes del Rey, qui tractá
d* acabar deflnitivament semblants maliíetes. Tot era un herm quan
sigueren escoltades y acatades. Per manera que, alguns dies després,
al entrar á Mora Berenguer d' Enten^a, de retorn de les Corts de
Mont9ó, no s' hí vegeren mes los enemichs.
Anfós II d' Aragó, se sentí ofés al veure que de tant poch serviren
sos manaments y diligencies per evitar les depredacióus comeses durant
la campanya contra los francesos y rossellonesos Les lleys catala-
nes punien al cavaller qui guerrejás ó entras terrea d' altre cavaller
qui estigués ab lo Rey, ó seguís la sua Cort, per virtut del usatge
Auctoritate et rogatu Segons est, tot liom qui vá á la potestat, ó ab ella
está, deu ha ver pau y treva per ells y per sos homes, flns esser retor-
nat á casa sua. Tant rigorosa era la sancció penal imposada al con-
traventor, que devía satisfer 1' undécuplo del dauy y esmenar y resti-
tuir á la potestat, lo deshonor que implicava la contra venció de la lley.
Si les costums de la térra tant terminants eren y d' aytal manera
afavorien ais qui les circunstancies portaven al costat del Sobirá,
aquest tenía mijáns de dexar sentir la severitat de la punició, quan
cregués que 's merexía ferho axis.
En lo cas present, davant los rellevants serveys prestats al Rey
en la campanya del agost, era d' esperar no 's mostraría negligent en
exigir responsabilitats, per mes que los delinquents siguessen de la
calitat deis Templers y deis Montcades, ab los quals mantenía bones
relacions Anfós II.
D' aquí^ qué lo Rey conferencias ab lo Mestre del Temple, durant
les corts de Monteó, hont també hi tenía á Berenguer d' Enten(?a, pro-
vant d' arreglar y finir les controversies segons justicia A les recia -
macions de n' Enteníja, responía lo Mestre á Anfós II, inculpantlo de
precedents dampnatges en terres y possessions de la Ordo.
Lo Monarca, cedint á les instancies de Berenguer d Enten^a, en
data de 28 de novembre de 1289, maná, al jutge Ramón de Toylá y
al conceller Bernat de Montpaó, obrissen informació en sa Cort Lo
derrer sigue autorisat pera delegar esta comissió á Oalcerán do Come-
lats, cora axis ho feu. Per consegüent, Comelats y Toylá comencnren
les diligencies judicials rebent declara cions ais testimonis.
Los Templers no 's quedaren enderrerits, sino que reclamaren del
Rey altre informació endregada á provar los molts dampnatges come-
sos per los Entences en terres de la Orde.
En aquest entrcmitx morí Anfós II lo 18 de juny de 1291, sense
ENTEXCES Y TEMPLERS EN LES MOXTANYES DE PRADES 239
haverhi hagut temps de cloiire lo procés Sosponguéronse inquisicions
y trevalls judicials y ab esta suspensió resta igualiiient aturada la jus-
ticia, y á punt d' esclatar novament la antigua enemistat deis Enten-
ces y Tcmplers.
IV
Dampnatges comesos per los Hntences á Miravet en 1291. Ordes de Jaume II
per pacificarlos. - Depredac'ons á La Fatarella en 1292. — Vistes á Logronyo deis reys
d' Aragó, Castella y Navarra. —Capitol General del Temple á Montpeller, aprovant
lo cambi de Tortosa desiijat per Jaume II. — Altres excesos deis Entences á Aseó y
á Miravet en 1295— Desastres combat del to^al de Corbera. — Camposines es incen-
diar.— Inutils manaments del Rey per posar en pau ais Entences. -Se dirigeix á sos
valedors. — Lo procés en la Cort Reyal. — Dupte de que Mora 's regís per lo dret
cátala. —Sentencies condemnatories per tots en 1 300 y 1 301 .
Entences y Montcades tindrien manera d arrivar á concordia y pau
final, puix no 's torna á trovar rastre, en lo procés, de que 's dampni-
ñquessin duraut tot lo restant del segle xiii Mes no succehí altre tant
ab los Entences y la orde del Temple.
Ab la mort d- Antos II no seguí avant la informació y procés de que
havien comanda en Comelats y Toylá Prompte los Entences feren
parlar d' ells dampnificant novament ais Templers. En cambi no 's
trova que ni una vegada, la cavalleresca milicia, tornes á atacarlos en
ses pertenencies, sino que busca sempre més^ ampar y protecció en la
autoritat del Sobirá.
Deis fets comesos per los Entences, desde I*" any 1290 al 1300, ne
consten alguns episodis en io procés, la major part d' ells vagament
referits. üevem consignar com á incontestables noves, les ocorregudes
á Miravet en 1' any 1291, á La Fatarella en 1292, á Aseó y á Miravet
en 1293 y á Algorfa en 1294.
La primera d' estes raalifetes, la dirigiren los dos germans Guillém
y Berengueró d' Entenca, acompanyantlos diferents almog'avers {et
piltres ahniigauers) en la Parqua de Resurrecció de 1291 y dura per
espay de tres dies Es remarcable que s fassi constar la presencia d'
almogavers en aquella correguda, puix no solienservirsen losbandole-
jants Es sapigut que, ab dit nom, se conexien ais homens de guerra, de
vida aventurera^ que, sense viure del trevall, se posaven á sou de quí
los havía menester. Eren, los almogavers en nostre térra, lo que los
condottieri á Italia ó los tondeurs ó écorcheurs fraucesos del 1360. Gent
suferta y guerrera dedicáis purament á la Iluyta y á la brega, re-
sultaven enemichs terribles y no ha d' estranyar que consti en lo procés,
lo notable dany que ocasionaven.
A Miravet, expugnaren la torra y la horta, cremant algunes cases,
essent deis vehíns mes perjudicats del terme, Mahomet Almucaten
240 F. CARRERAS Y CANDI
Lo lloch nomenat Algezira, que era terme de Miravet, fon entrat y
saquejat.
A BeniQauell, partida de la propia batllía de Miravet, calaren foch
á la torra del Almiicaten de Miravet.
També, Camposins, sufrí molt perla correguda deis Entences, pre-.
nentloshi á llurs habitants, 1,220 caps de bestiar ab dos pastors Estos
derrers obtingueren la Ilibertat, mitjan^ant cinquanta sous jaquesos.
Deis altres presoners que se 'n dugueren, n' exigiren diferents res-
cats. Hu d' ells, nomenat Pelegrí Capcir, morí penjat per traydor
ais Entences.
Era mestre del Temple Fr. Berenguer de Sant Just, qui 's trovava
seguint la Cort del Rey. Al teñir conexement d' estes noves corregu-
des, no bagué empatx en mostrar al JMonarca son esperit de pan y
concordia, firmantli fadiga y compromís d' estar á les resultes del
procés que 's formava.
De conseguent, Jaume II, escrigué á Berenguer d' Enten^a y á sos
filis, prohibintlos dampnificar á la orde del Temple sots pena d' apar-
tarlos de pau y treva. Al mateix fí comunica al Ixatlle de les montanyes
de Prades, Bernat de Montpaó_, desde (^aragoQa^ (18 de setembre
de 1291) ordonantli, que, si los Entences no acataven les sues disposi-
cións, los tractés ab rigor com á trencadors de pau y treva.
De pasada devém relatar un fet especial de Berenguer d' Entení^a.
Se tracta d' una batalla jurada que tingué á Barcelona ab n' Ar-
nau d' Artesa, sense que 'n sapiguém la causa (1).
L' esforQ del Rey per pacificar les montanyes de Prades, tant per-
turbados per la actitut agresiva deis Entences ^ coutra de la gent del
Temple, podem dir que era com picar en ferré fret. A aqüestes dispo-
sicions, responien ells ab nous dampnatges, com foren los del seguent
any de 1292, essentne víctima los habitants de La Fatarella.
Deu cavallers deis Entences, acompanyats de cert nombre de peons
armats, del lloch de Mora, sigueren los autors d' aquesta correguda.
No hi ana Berenguer d' Enten9a ni cap deis seus filis. En cambi, hi
prengueren part los cavallers Pere de Sant-Martí, en Riudefoix, en
Carbons y lo cavaller salvatge (2). Molt nos ha fet pensar 1' ape-
latiu d' aquest militar. ¿Quin es 1' equivalent donat á cavaller salvat-
ge? ¿Tindrá relació ab lo significat que, en la Edat Mitjana, tingué
\o Comes hirsutus, pilosus ó süvester, en tudesch raugraf, wüdgraf ó
rheingraf? Axis podría esser, si be no dexa de cridar la atenció, que,
en lo Ihirch espay de temps com hi vá del segle ix al xiii, 1' us de
dita páranla, hagnés dexat rastre tant insignificant en nostrePrincipat.
(1) «XIII Kal. Decembris anuo Domial MCOXCI fait factum prelium Barchinone de
Berengario de Enfcen<ja et Arnaldo de Artesia» Chrouicon Barcinonante del segle xiv
publicat en la Marca Hispánica. >
(2) «Et en Eiuflefolx et P. oarbonis et miles saluatge oum alus equitibus qui erant
Ínter omnes us^ue ad X et oum peditibus cuna armis de loco de Mora.»
ENTE^XES Y TEMPLERS EN LES MONTANYES DE PRADES 241
Molt sufriren, d' aquella correguda, los populadors de La Fatarella
y volentlos contrastar ab les armes, ne quedaren en la brega catorce
de ferits. Lo botí aplegat per los valedors deis Entences, consistí, en
cent animáis grossos y mil vuyt cents de petits, estimantse en conjunt,
en tres mil sous Jaquesos.
Era comanador d' Aseó, al temps en que ocorregueren estos fets,
Fr. Guillém de Puignaucler.
Al arrivar ala batllía d' Asco la nova de la correguda deis Enten-
ces, se mete só de r/a /"os. Congregárense los homes del terme, retor-
uant deis camps hont se trovaven, per esser temps de segar. Tots ells
aplegats, perseguiren ais malfactors, que prou cuidaren recullirse á
Mora, per tant no se *ls pogués atrapar. Al arrivar á aquesta vila^ sortí
á rebrelos ó á ampararlos, en Guillém d' Enten9a ab cinch cavallers.
Aytal malestar, tant seguides menaQes contra la gent del Temple,
la continuitat de cavalcades de menor quantía que no cal consignar,
prolongaren la inquietut durant lo restant del any y partida del se-
guent de 1293.
Jaume II, desde Qarago^a, recordá ais Entences, la fadiga davant
d' ell prestada per lo Mestre del Temple, conminantlos ab punicions si
tractaven de dampniflcar les terres ó bens de dita Orde militant (18 de
juliol 1293).
Inútil resulta la tentativa novament practicada per Jaume II, puix
r esperit general de desobediencia y menyspreu á la autoritat rey al,
que tant caracterisá ais richs homes del segle xiii, estava inflltrat en la
sanch de la familia Enten^a. Axis, á la orde predita, se seguiren grans
preparatoris portats á eíecte per Berengueró d' Entenca, durant la se-
gona quinzena de juliol y lo subseguent mes d' agost de 1293, per
atacar les possessions del Temple ab lo major esfor(? possible, arbi-
trant la ajuda d' altres cavallers, segons aprés se veurá.
De Qarago^a, passá Jaume II al siti del castell d' Arcayne acom-
panyat del mestre del Temple Fr. Berenguer de Cardona. Aquest
tractá, durant lo siti, d' arreglar algunes diferencies y controversies
que tenía ab n' Artal d' Alagó.
Al retornar d' Arcayne^ estant en lo lloch d' Albalat^ Fr. Cardona
déxá la Cort Reyal, puix la Orde tenía convocat capítol general á
Montpeller y no hi podía faltar. Precisament liu deis negocis de que 's
tractava en dit capítol, era lo cambí de la jurisdicció que lo Temple
possehía á Tortosa y que tractava d* adquirir nostre Sobirá,. De mane-
ra que, al partir á FranQa, Fr. Berenguer, en companyía d' altres
frares de Catalunya, Jaume II, acepta y rebé sots la sua comanda y
protecció, les propietats de dita Orde.
Lo 29 de juliol de 1293, Jaume II arrivava á Logronyo hont tingué
vistes ab lo Rey de Castella y ab lo rey Caries de Navarra. Les con-
ferencies duraren alguns dies, tota vegada que lo Monarca aragonés,
deturá en la ciutat castellana fins al 24 d' agost.
1061 ;6
242 F. CARRERAS Y CAXDI
Finí lo capítol general que *ls Templers tingueren á Montpeller,
avans de que lo Rey d' Aragó se ''n anas de Logronyo. Aceptada la
proposta del cambi de la ciutat de Tortosa, se confiaren les sues nego-
ciacions al gran Mestre, lo borgouyó Fr. Jaume de Molay, quí tant
desastrada mort rebé alguns anys després en la sua térra, al extingirse
la Orde. *
Com sa calitat de francés vedas al Gran Mestre, d' entrar á Cata-
lunya, sense exposarse á vexacions, per la guerra mantinguda entre
los reys d' Aragó y de Franca, Fr. Berenguer de Cardona bagué co-
missió d' arbitrar salconduj'^t ó guiatge per Jaume de Molay, del rey
Jaume II.
Mes Fr. Cardona enmalaltí á Montpeller y conferí esta gestió ;i]
comanador d' Aseó Fr. A. de Torreella. Posat en camí, 1' acom-
panyaren Fr. Gaubert Durban y lo rector de Sant Quirse d' Arbucies
Mossen Pon^ de Llagostera.
Era costúm entre los templers, posar en les cases de la Orde: al
arrivar á Lleyda, dormiren, los frares predits, en lo castell de Gardeny.
Allí s' enteraren deis preparatoris deis Entences y profitant de sa pro
ximítat á les montanyes de Prades, avans de seguir cap á QaragoQa,
escrigué, Fr. Torreella, á Fr. Simón de Blanes son llochtinent á Aseó,
dientli, que tractaría ab lo Rey del afer de sos disentiments ab los
Entences (1).
Fr. Torreella trova al Sobirá en sa jornada de Logronyo á Tirasona
(24 d' agost de 1293), Li referí la comissió que duya de Fr. Molay,
parlant tots dos á soles en un prat de junt á certa ribera. Aquell mateix
día s' expedí y signa lo salconduyt ó guiatge reyal en favor del Gran
Mestre del Temple.
No deturá gayre mes de cinch dies, Jaume II, á Tirasona, ó siga
del 24 al 30 d' agost de 1293. En aquesta derrera data, arrivá á Cara-
goQa. Prosseguint son viatge vers Barcelona, lo 12 de setembre entra-
va á Lleyda y posantse en camí seguidament, arrivá á la Capital Cata-
lana lo 19 de setembre de 1293 (2).
Finida sa comissió, partí Fr. Torreella. Mentres se deturava á (,'a-
rag09a oygué dir, que la host de Berenguer d' EntenQa anava á damp-
niñcar ses terres.
Guarit de sa malaltía á Montpeller, lo mestre de Catalunya Fr. Be-
(1) <Per donar conseyl al trebay quel Temple ania ab Berenguer de entenza »
(2) «ítem ad probandum tempus ¡n quo dominus Eex erat in Tirasona et subse-
qnenter in Cesaraugusta et deinde in Ilerda fait snmptum ex registro domini Regís
quod seqnitar.
»DominusEex fait en Logronyo quarto kalendas augnsti anno domini M°CC°XC°ill°
et luit ibi usque ad IX kalendas Septembris eiusdem anni quo fait in Tirasona.
• ítem fait in Tirasona usque ad torció kalendas Septembris eiasdem anni quo
fait Cesaraugusta.
»Item fnit in Cesaraugusta et in itinere ueaiendo apud Ilerdam ad pridie Idus Sep^
tembrís eiusdem anni quo fuit ibi in Ilerda et in continenti recessit de Ilerda etuenit
Barobinonam ad diotas ubi fuit XIII" kalendas Octobris eiusdem anni.>
ENtENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANYES DE PRADES 243
rcn.s'uer de Cardona, acompanyat del comanador de CaraíiOíja Fr. H.
Oliver, se dirigí al Rey ab iustruccióiis reiercuts al concaml>i de
Tortosa. Deturaven en la casa del Temple del lloch d'Ayguaviva,
prop de Gerona, qiian hagué esment de ijue los Entencos entravcn cu
cavalcada terres de la Orde. Mes avant, una lletra de son Uochtineut
Fr. Bernat de Montoliu, 1' enterava de que Bereng'ueró havía mort
gent d' Aseó y de Miravet, al efectuar la cavalcada predita, talant lo
lloch de Beni^-anell.
Prosseguí lo camí fins á Lleyda, hont hl trova encara á Jaume II,
puix no havía efectuat lo derrer tragecte de son viatgo vcrs Bar-
celona. Allí li entrega algunes robes, que, com particular obsequi
de la Ordo, havien sigut comprades á Montpcller, comunicantli al en-
semps, los derrers dampnatges que 'Is hi havícn sigut ocasionats per
los Entences.
També havía portat, Fr. Cardona, altres robes ó prcsents, per
alguns deis principáis oficiáis ó concellers del Rey, á fi de guanyar llur
voluntat al gestionar les millors compensacións que preteníen á cambi
de Tortosa.
' Dexém novament ais Templers, per referir en que consistiren les
tales deis Entences de que 's quexá llavors lo Mestre de la Orde al
Rey d' Aragó.
Com ja teuím dit, Berengueró d' Enten^a prepara aquest colp de
má, durant lo juliol y agost de 1293. Pochs dies després de la festivitat
de la Mare de Deu d' agost, Enten^a, obtingué la cooperacio de molts
richs homes aragonesos, saventse que se li ajuntaren, Ferrán Abones
senyorde Les Pedroses, Pero Lope de Vallmanya seuyor dePresinyena,
Pere Eximen habitant á Sant Pere de Calanda, García Pere de Li^ual
habitant á Segura, Joan Eximen habitant á Sant Pere de Calanda, Pe-
re Lope de Biel habitant á Fons, Pero Janoes habitant á Ontinyent, A.
de Lagarre habitant *á Lagarre en la Ribagorga, Joan Garcés de los A\-
beros habitant á Murcia, Garcías de Vera habitant á Pomer, Garcías
Pere d' Alagón, Eximen Pere d' Alagón, Garcías Pere de Licuena y
García Pero d' Arguedas. Los catalans serien mes pochs. ja que sois
se diu havershi conegut les seuyals d' en Vidal de Rovira, d' en Vernet
y d' en Poyl de Mora, pintades en llurs respectius escuts. En quan
á senyeres, sembla hi portaren esteses solsament les deis Entences.
Pochs dies després de la festivitat de la Mare de Deu d' agost, ó
siga lo divendres que 's seguí á la diada del apóstol Sant Bertomeu,
Guillém y Berengueró d' Enten^a, comanant una potent host y al crit
de guerra Entenga, Entenca, invadiren la batllía d' Aseó. No sabem
en quina forma la invasió se porta á terme, mes per los apresaments de
bestiar fets á Aseó y Miravet, s' ha de suposar la efectuaría escampant
sa host per diferents indrets. Lo que capturaren á Vilalba y Batea
solsament, se conceptuava valer vint mil sous jaquesos.
Se mete só de vía fós en los llochs invadits, aplegantse llurs habi-
244 F. CARRERAS Y CANDI
tants per la defesa. Los homes de Corbera^ Vilalba y altres pobla^
cións vehines, en nombre respectable, aparellats per pendre la ofen-
siva, creyentse prou forts, esperaren ais qui portaven lo bestiar
capturat, que pujaría á tres mil caps de petit y no gayre de grós,
encastellantse en cert toQal del terme de Corbera .
Forta brega s' arma al entorn del toQal, combatent uns y altres,
esfor^adament. Empero fou desastrosa la jornada per la gent del
Temple, los qui se vegeren obligáis á retraures del camp, dexanthi
molta gent estesa. En cambi los Entonces foren tan afavorits de la for-
tuna, que no hi perderen cap home.
Los morts en lo combat foren 73 homes, deis quals, 43 pertanyien
á la batllía d' Aseó y 30 al lloch de Corbera de la batllía de Miravet.
Deis 43 d' Aseó, 38 eren vehins de Vilalba. En quan ais ferits, no 's
nombren en lo procés haventni d' un y altre camp. A mes caygueren
dos homes presoners deis Entences, la host deis quals, no sofrí mes
perdua que la de dos cavalls morts.
Es digne de notar la costúm de que cada lloch soterrá á llurs res-
pectius vehins morts en lo combat, sens teñir en compte que havien
passat d' aquesta vida en terme de Corbera.
A 1' endemá dissapte, proseguint la cavalcada y tala, saqucjaren.
los Entences, lo lloch de Camposins, matanthi al vehí Domingo Tala-
vera y ferint sis homes d' Aseó y dos de Camposins. En la retreta,
cremaren la vila de Camposins. La jornada valgué ais Entences famós
botí de blat, estimantse en setse mil sous jaquesos lo dany total oca-
sionat ais Templers.
A Gandesa, també hi expugnaren certa torra del Temple, hont s' hi
recullian dos ó tres homes, los quals haguereu d' entregarse, axis com
tres ó quatre bous que havien tancats dintre la torra, crchent estar en
lloch segur.
També cometeren molt de dany á BeniQauel. .
Del más Ferrán d' Aseó, s' en portaren 110 caps de bestiar menuty
una vaca.
Bcrenguer d' EntenQa, que no assistí á aqüestes corregudes, qual
durada fou de tres dies, sortí á rebre ais expedicionaris, en lo camí
tora de Mora.
Al quart dia d' efectuarse les predites tales, arrivá á Vilalba Fr. To-
rreella comanador d' Aseó, acompanyat del Héctor d' Ar bucles,
venint de sa entrevista ab lo Rey. Trovaren la vila en lo major
desconhorf. Dones endolades y ploroses, moltes d' ellos ab les cares lla-
gados y sagnantes (1), los hi mostraren lo cementiri, hont, evidents
senyals de térra rcraoguda, indicaveñ les sepultures deis trenta tres
vehins morts en lo combat del Toyal de Corbera. D' allí estant, vegeren
(1) <Et erant indaol de dol et qnare etiam plnres mnlieres babebant faol^s lapatas
0t sanguinolentas.»
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANYES DE PRADES . 245
la fumera que encara s' enlayrava de les cases de Camposins. Espec-
tacle de desolació que entristí al Comanador.
De Vilalba. Fr. Torreella ana á Camposins á consolar un tant ais
seus malaventurats vehins. Se repetí 1' espectacle de la g-ent que plorava
y que entre .nemechs deya á son Senyor, que mal lur era vengut quen
Berenguer de entérica et sos fils auien morts de LXX entla LXXX ho-
mens del Temple
Presoncrs y botí, foren portats per los Entonces á Mora, devent
redimirse, per obtenir la Ilibertat, Alguns, que no teníen diners, per-
manesqueren hu y dos anys en captivitat. També consigna lo procés,
que foren aconduhits altres presoners ais llochs de les Canes y de la
Pedresa, ja en regne d' Aragó.
Tampoch tractaren de pendren venjanQa los Templcrs, sino que
acudiren en quexa á Jaume II. Lo Monarca, desde (^Jaragoca, trámete
un missatger ab lletres de créenla per Berenguer y Berengueró d' En-
ten^a, qui los hi manifestá verbalment les quexes y voluntat del Rey.
S' encarregá de comunicar les ordes reyals un miíitar del vegucriu
de Cervera, de nom Pcre de Torra, qui tost passá á pregar á Beren-
guer d' EntenQa, en nom del Sobirá, volgués retornar á la Orde lo que
acabaven de péndreli sos vassalls. Enten^a s' excusa de ferho. En
Torra li maná, de part de Jaume II, ho restituís, prohibintli dampnifl-
car ais Templers puix procehiría contra d' ell segóns los Usatges. N'
Enten^a hi respongué, que, tes de part del Rey lo que millor li sembles:
que ja havía tingut manament del Sobirá de no dampnificar á la Orde,
mes, com n' havía rebat molts perjudicis, ell s* en vcnjava en dita
forma.
No 's mostrá tant altiu y ferm en sa resposta, Berengueró. A la con-
minació que Mossen Pere de Torra li adrcQá, en los termes que s' ha
dit, respongué, que tot quan executava contra les terres y bens del
Temple, era per compte de son pare.
Torra tingué estes entrevistes en la vila de Mora, hont encara hi es-
ta va congregada .molta gent de cavall, que havía format part de
la host invasora.
Lo Mestre de Catalunya y lo Comanador d' Aseó, gestionaren del
Sobirá se procehís contra deis Entonces. Hi accedí novament Jaume II
y en conseqüencia, desde Barcelona, escrigué ais encarrogats del pro-
cés contra los Templers per les vexacións del 1289, qo es, á en Bornat
de Montpaó y á en Ramón de Toylá, encomenantlosbi indagassen
deis danys que acabava de rebrc la Orde de part deis Entonces (15 oc-
tubre 1293).
En lo día 30 d' octubre de 1293, Montpaó comunica novament á
Berenguer d' Entonga, la ja coneguda disposició rey al de 12 de ju-
liol de 1293, essentli entregada per Ramón Fornor, escuder del co-
manador de la casa de Joncosa.
Los Entonces proseguiren, en aquesta tardor, talant y dampnifican
246 F. CARRERAS Y CANDI
es terres del Temple, com si tal cosa. Per mes que Jaume II los ame-
nassava, una y altre vegada, may podía obtenir s' acabessin estes
malifetes.
Prenent una vía indirecta, lo Sobirá, se dirigí ais qui prestaven
ajuda ais Entences, manantíos cessar en semblants mals. Sots tal esperit
redacta diferents lletres á Barcelona, lo 13 de novembre de 1293. Una
d' elles adrcQada ais homes de les montanyes de Prades, los hi eo-
municava la rebeldía deis Entences, 90 es, que, á despit de la fadiga
prestada per l'o Mestre del Temple en la Cort Reyal, d' estar á dret de
¡o que aquesta resolgués, Berenguer d' EuteuQa dampniflcá al Tem-
ple. Qual procehir contrariava los estatuts y ordinacións de la Cort
de Barcelona, al disposar que ningú, ab acuyndament ó sense acuyn-
dament, degués fer guerra, ni dampnificar á altre, majorment ais
Templers que estaven colocats sots la especial protecció sua (1). Aca-
bava, exigintlos no prestessin, á EntenQa, cap auxili en aqüestes co-
rregudes, ni li compressin lobestiar y demés obgectes presos á lagent
de Temple.
Altre de les lletres signades en aytal data, era adre9ada á n' Ale-
many de Cervelló. concebuda consemblantment á la predita. Li fa no-
tar, que, com á Rey, ve obligat á defensar ais monestirs, religións y
ordos, majorment quan se mostren aparellats á sotsmetre llurs dife -
rcncies á la decisió de la Cort Reyal. Prosegueix remarcant quin poch
cas feu, de ses comunicacións y citacións en Berenguer d* Enten^a y
com á conseqüencia li maná no dampnifiqui per cap vía á la gent ó
vasalls del Temple
Al cavaller aragonés n' Artalet de Luna, també li escrigué Jaume II,
per haver sabut que presta socors á Berenguer d' Enten^a, juntament
ab altres nobles d' Aragó. Y per les rahons exposades á n' en Cervelló,
li prohibeix ajudarlo en avaut contra los Templers.
Los Entences no posaren termini á estos dampnatges, ó en al-
tres termes, se burlaren per centésima vegada del Sobirá, segóns ho
declara altre disposieió reyal, adrepada á Simón de Llor, veguer de
Lleyda (23 de janer 1294). Déyeli Jaume II, que, havent ocupat, Gui-
llém d' Enten^a, ab la sua gent de Seros, lo lloch d' Algorfa perta-
nyent al Temple, obligui á restituirlo á dita Orde y que, en cas con-
trari, vol que Guillém d* Enten^a, siga gitat de pau y treva y axis se
pregoniper tota la veguería, procehintse contra d' ell y deis seus.
La obra deis Entences contra del Temple, prosseguí durant P any
1294, puix del 27 de setembre n' es una derrera orde del Rey á
Berenguer d' Enten^a, dicntli desde Tortosa, no dampniftcás ais
(1^ «Quod CBt contra statufcum et ordlnatione nostre curie celebris Barchinone in
qua fait ordinatam quod uuUus cum acuyndamento vel sine acuyndamento in Cata-
lonia debeat gaerram faceré seu alicui dampnum inferre máxime quare fratres
Templi et homines sint sub securitate pacis et treugue ac Bub speoiali proteccione
nostra.»
ENTENCES Y TEMPLERS EN LES MONTANYES DE PRADES 247
Templers, per quan novaraent havía, flrraat, lo Mestre de Catalunya,
fadiga d' estar á dret de lo que resultas de la causa menada en la
Cort Reyal.
Aquesta y altres fadigues prcstades en termes consemblants, de-
mostren que no s' havía dexat de ma lo procés conien^at per Anfós II,
per mes que de les sues diligencies no ^ns en consti res mes, fins á
arrivar al derrer any del segle xiii. Llavors ja era difunt Berenguer
d' Entcnca, qui morí á nostre vijarés, entre los anys 1294 y 1300.
Posteriorment á la suamort, consta en lo procés, que, tant Guillém
d' Entenpa, com lo Mestre del Templo, mstaven al Sobirá, la termina-
ció de la causa, advocant, quiscuna de les parts, perqué 's portessin
á terme les informacións testimoniáis deis dampnatges rebuts en les
cavalcades.
Lo juliol del 1300 menava la causa, Ramón de Sales jutge déla
Cort Reyal. Era general lo desitj de veure acabat lo litigi y Sales
imprimí á totes les diligencies^ una activitat may vista. Ja era hora,
després de deu anys que feya s'havieu dictat les primeres instruccións
del procesament.
També, Jamne II, apremiava al jutge ab noves disposicións que
transpiraveu son interés de veure termenades definitivament les ran ■
cunies y portar la pau á bona part de les montanyes de Prades. Una
d' estes ordres datada á Lleyda al 13 de juny de 1300 y per cert cu-
riosa, es r encarrech fet á Sales, d' averiguar, per informado testifical,
si Mora se regia per los Usatges de Barcelona ó per los Furs d' Ara-
gó que es prou sapigut que eren en esencia lo dret roma. Mostra dita
orde, la existencia d* oposades opinions, á Lleyda y á la Cort Reyal,
degudes indubtablement á la situació fronterisa de la població de
Mora y qui sap si á precedents d' altres pobles del Ebre hont s' hagués
arrelat lo dret d' Aragó, á imitació de tants pobles del reyalme de
Valencia.
No volém entretenirnos en la transcripció de les enquestes ó averi-
guacións practicades per en Sales, ni en detallar los procehiments del
procés, molt perfectes, pro que no constituexen cap novitat, essent casi
iguals ais deis segles xiv y xv. No hi figuren empero, les capciositats
deis juristes, essent lo jutge, lo qui presenta les proves y prepara les
conclusións, perqué lo tribunal falles en consequencia (1).
(1) Com á, llengera indlcació del procehiment segtiit per Salee, afegiróm, qne, des-
prés de trasladados per 1' orde ab que foren actuades, les deolaracións deis testimonis,
deis danys fets per los Entences, les desfá, en peces petites, distribuintles en rubriqttea ó
oapitols com dihém ara, segons lo qae li interessava provar. A mes, coloca separada-
ment les rubriques afectants ais danys ocasionáis á Aseó, deis fets á Kibarroja y Mi-
ravet. Per mostra copiaróm los settitols asignata á les rubriques.
«Prima Rabrica — Quod nobilis Bng. de entencja quondam et nobilis Q-. de enten9a
et Bng. *"" de entenQa cum militibus et peditibus íamilie eorum cum armis et cum
hominibus de Mora et de Falceto et de Tbeui<?a armatis et etiam cum aliis militibus
et peditibus debeiint et intulerint plura damna fratribus Templi et hominibus eorum
248 F. CARRERAS Y CANDI
Mes sí flxaréiu un taiit nostre ateució en la enquesta portada á
terme per saber si Mora 's regía per les lleys catalanes, ó per les ara-
goneses. Ella mostra lo carácter jurídich del poblé cátala en lo segle
XIII y la importancia que, fins en poblacións allunyades deis grans cen-
tres, se donava ais jurisconsults, qual opinió desitjaven couexer los tri-
buuals populars.
ün deis testimonis de major entitat invocáis per la aclarado d'
aquest punt, sigue n' Eximen Guerra, quí portava mes de cinquanta
anys de residencia en lo terme de Mora, hont bi havia exercit dugues
vegades 1' oflci de jurat. Declara Guerra, que, en tant se reglen ells per
los üsatges de Barcelona y costums de Catalunya, que, quan dubtaven
sobre algún cap ó procehiment, trametien algún missatger á Tarra-
gona, Tortosa y fins ¿Barcelona, si de tanta entitat era lo dubte, per
consultar y couexer la opinió deis savis en dret, resolent y fallant
d' acort ab aquesta opinió, segons lo dret cátala.
Los jurats de Mora, conexien en les causes civils y crimináis y tenien
potestat de rebre inquisicións, dictant les sentencies, ab concell deis
prohoms. Guerra hoygué dir á alguns de sos predecessors, que, en la
cort de Mora se guarda ven escrites les Constitucións de Catalunya, per
aplicarles quan convingués en los judicis.
Aqüestes declaracións son confirmades per molts altres testimonis.
Hu d' ells retreu lo bovatge, que diu també 's pagava á Mora, mes
que allí may liavíen satisfet lo dret ó imposició conegut per lo (p.iint
bajulie A9choDls talando oomburendo homines ualnerando et íaterfíciendo et plura
delicta comitendo contra eosdem.
Secunda Rubri.-a.— Quoi predicta dampna fnerint illata per dictas Bng. de enten-
a et alios mi'ites et pedites supradictos magistro Templi uel fratribus Templi sea Co -
mendatori dicte Bajalie azchonis uenientibus ad dictum Begem uel stantibns cum
eodem sen ab eo recedentíbas.
Tercia Rubrica.— Qnod berengarias d9 enten^a quondam tempere quo dicte tale et
alia dampnafacta fuerant fratribus Templi et hominibus eoram dicte Bajalie Azcho-
nis esset in Ctitalonia ac etiam iu loco de Mora vei de Tiieuiza et sciret siue scire de-
beret quod dicta dampna per illios et familiam suam et homines saos et alios sapra-
dictos infererentur diíítis fratribus Templi tt hominibus eorum et quod cum eius con-
sensu uel mandato facta fuissent.
Qaarta Rubrica. — Quod loca predicta essent fratrum Templi tempore quo dicta
dampna fuerunt illata et antea et post et de Bajilia Azchonis.
Quimta Rubrica.— Quod post predicta dampna illata fratribus Templi et locis et
hominibus eorum per dictum Berengarium de enten^a et filios suos sea eorum fami-
liam sea homines eorum uel alios supradictos redireat seu tornarent in Castris et vi»
Uis et locis Berengarii de entenza quondam.
VI Rubrica.— Quod Berengarius de enten<?a quoudam sciret uel scire debuerit
quod magister Templi seu fratre Templi siue Comen iator Bajulie Azchonis irent ad
dominum Regem uel essent cum eo uel reoederent ab eo tempori quo dicta dampna
fuerunt illata fratribus Templi seu locis siue hominibus eorum.
VII Rubrica.— Qaod loca fratrum Templi de Bajulia de Aíjchone regentur se-
cnndum vsaticos Barchinone et consnetudines Ylorde et quod ibi seruentur dicti vsa-
tici et consuetudines in causis ciuilibas et criminalibus et s«ruarentur tempori quo
dicta dampna fuerunt illata et antea et post et quod consueuerint ibi fleri inquisi-
ciones.])
ÉNTÉÑCES Y TEMPLERS EN LES MONTANTES DÉ PRADES
249
ant peculiar deis furs d' Aragó. Una vegada Bercnguer d' EntenQa,
lo dcrrerament difunt , los hi exigí lo quint iudeg-udameiit, sensc
que 's registras cap mes precedent de consemblant injusticia, en mes
de vuytanta anys á enQá.
Alguns vehins, en ses declaracións, relataven fets particulara com-
probatoris d' haverse aplicat la legislació catalana. Era hu de tants,
certa sentencia pronunciada contra Guilleuma filia de Bernat d' Equi-
dania y la sarrahina Miriam, per haver assessinat un fiU y una filia
que Guilleuma hagué de cert sarrahí. En curapliment de qual senten-
cia, abdues dones sigueren cremades en la vila Mora, durant lo juliol
de r any 1300.
Resolt lo dubte de quina legislado devía aplicar, Jaumc li pro
mulo-á la sentencia en conformitat al dret cátala, firmantla á Valencia
lo 20 d' octubre de 1300. En ella los Templers y habitants deis llochs
de Uur pertenencia, sigueren condempnats á pagar á n' Emenda, per
les vexacions del any 1289, 1' undécuplo per hu deis danys rebuts
segons preceptuaven los Usatges de Barcelona. La quantitat á que
la predita multa pujava, se fixá á 149.314 sous jaquesos yá 38.540
sous barceloneses.
Devém recordar que llavors no foren solsament los Templers, los
qui dampnificaren ais Entences, sino que també hi tingué intervencio
en llurs malifetes, en GuiUém de Monteada. Per tant, se li assigná com
á punició part de la indemnisació, estimántseli en 15,000 sous jaque-
sos, lo que degué pagar, los quals ja tenía entregats en la predita data
de 20 d' octubre.
No diu lo procés, quan ho paga Guillém de Monteada, mes se veu
sería ab anterioritat á la promulgado de la sentencia. Com Monteada
no tingues los 15.000 sous jaquesos. entrega en equivalencia, les ren-
des del seu castell de Penalba per deu anys, rendes evaluades en 1.500
sous jaquesos r any.
Altre deis caps que cómprenla lo procés tramitat per lo jutge baies,
era lo pertinent ais dampnatges injustament comesos per los Entences
en terres del Temple. Respecte cá aquests, Jaume II no ^n dicta sen-
tencia fins al 7 deis idus d' abril de V any 1301. Reconeguts y justi-
preuats los perjudicis en la condempna, s' obliga á entregar, en esmena
d' ells, la suma de 200.000 sous jaquesos que fou percebuda per los
Templers,.
Aquí para lo procés que havém tingut á la vista. S' ha de suposai ,
que, sí després d' estes sentencies, dictades al cap de mes d' onze
anys no 's té conexemeut de malifetes comeses per una y altre Part. ^i
hauría pau y concordia en aquells pobles de les montanyes de Prades
y ribera del Ebre, que tant y tant patiren per les continuades Iluytes
deis Entences y Templers, y hont los succesors d' uns y altres, n ha-
vien de perdre tota jurisdicció y senyoriu al primer tere; del segle xiv.
Allí los Templers, M foren substituyts per los Hospitalaris de Sant
250 F. CARRERAS Y CANDI
Joan de Jerusalem y los Entecces á causa de la donació que feu Gui-
Uém d' EntenQa al rey Jaume 11, ho sigueren semblantment per la re-
yal corona, com aquest mateix Sobirá ho refereix en la escriptura d'
crecció del comtat de Prades en favor de son fill Ramón Bereng-uer, en
1324. Los castells y viles que cedí lo Rey y que restaren com prin-
cipal fonament del nou comtat cátala, sigueren Mora, Ti visa, Falcet y
Altafalla.
Visites pe Hostres reys
A AONTSEKRAT
"*~-^ie)(s¿í-'^'
•Pojaren & Montserrat Caries Mague, Gnifrél y
* Janme 1?
La poesía ha eujoyat lo Montserrat d'/''''^»"™'' "Xism "
forma de rondalles, trameses & la viviflcadora sombra del Catohc.sme.
V estimbameut de pe.yals al morir lo Redentor la ;í-^™> "^^^ ^°-
valla de la Imatge, sa inmoTilitat sobrenatural, Joan &m E quüdis
son Planes de sentiment interposades en lo gran Ihbre de la historia de
a montanya, y que, si per intrusió hihan prés "¡^^^ ^^-^^'^^^^'^^
enoaxen tan bé, que dol no yénreles ajustades á !a puutat hi=.toiica,
"'^rb^eL^L^lTdepassariesperalt per no eontrariar „os-
tre eoncieneia d' historiador. ¿Quantes vegades, al seguir lo oami que
portaT a veritat, havém de malmetre, en eamps florits, hermoses pon-
ceíles que. de no voleries trepitxar, nos tarían torcer per enganyosa
vfa'Be deya 1' erudit é innovador P. Feijoó (11, que la veritat es tan
lérmosayTa mentida tan Uotja, que aquell qui disfruta de penetrant
V sta intdeetual, que descubreix ab tota clare.at ,a bellesa de a un
y la lletgesa de la altre, per mes que s' hi estorsi, no podra lograr gi-
rarse d- espatlles A la primera per pendre la segona. Y axo es lo que
^™Pr:t:"rs?ori:dors de Montserrat, que lo gran empei-ador deis
franchs, Caries Magne, lo primer sobirA eristiá de nostra térra en k
Edat M tiana venel ais alarbs ft Montserrat. Mes diuen encara, pmx hi
!rril^ a ass'enyalar lo lloch, dia, mes y any de la tal victoria, a la
rr.al vacias opinione, comune,. (Madrid llU) vol. IV, carta XVIII, § 2, pl. -lo.
252 F. CARRERAS Y CANDI
que pretenen seguirse la fundació d^ un temple, lo de Santa Cecilia (1).
Ees mes allunyat de la veritat, que axó, y tot quan fá referencia á vin-
gudes del emperador Caries á nostra Marca Hispánica, hou no s^ ha
comprovat que hi poses may los peus.
Greu sab no consignar en la present relació de les visites de nos-
tres sobirans á Montserrat, la del comte pilos Guifré I, visita tant lluny
d' esser comprovada, que no la justifica cap document ni escrit. Riquil-
dis no fou filia del Comte de Barcelona, ni es precis já conceptuarla
com un personatje histórich: nomenemla en avant, segons ho ha fet já
Marius André (2), la fada del Montserrat.
Quatre cents auys de domini comtal, havem donchs de dexar enlay-
re, fixantnos en lo segle en que lo Principat era regit. per los monar-
ques de la confederado catalano-aragonesa.
En los capitols del famós Llibre deis feyts esclevenguts en la vida
del molt alt senyor Rey en Jacme lo Conqueridor, no s' hi consigna
ascensió alguna del Monarca al Montserrat. Si 's te en compte la fa-
ma, que, en lo segle xiii, comen cava á teñir lo portentos Santuari y la
1 larga vida d' aquell insigne Rey d'Aragó, es de creure que hi degué
anar.
Mes no es histórica, sino pura fantasía, la tant hermosa relació de
Mossen Verdaguer, glosant la presencia de la figura del. Monarca, en
lo cím raes alt de la gegantina montanya, consignada en la delicada
composició Don Jaume en Sant Geroni, hont diu:
«Per veure bé Catalunya
Jaume primer d' Aragó
puja al cím de Sant Geroni,
á r hora en que hi surt lo sol:
¡quin pedestal per 1' estatua!
¡pe'l gegant quin mirador!
— A rescatar les catives,
(1) Vegis com la darrera de les histories de Montserrat, explica la presencia de Caries
Jlague en la montanya: «Por aquí por lo mismo empezó Cario Magno sus operaciones para
dejar libre del todo el MontseiTat, después de haber humillado en los llanos la media luna,
ya que aquí se había retirado y atrincherado el grueso y lo más floi'ido de los restos de los
ejércitos vencidos. Con su táctica militar llama á los enemigos fuei-a de sus mui-allas y en el
sitio en que hoy está la iglesia, se trabó el combate, siendo tanto el valor con que los cristia-
nos pelearon, que no solo vencieron á aquellos, sino que desalojaron á los del castillo lílarro,
quedanio libre toda la montaña y país adyacente. Era el día 22 de Noviembre de 797; y al dar
Cario Magno, ífracias á Dios por tan insigne victoria, hizo voto de levantar en el mismo si-
tio de la batalla, un templo á Santa Cecilia á cuyo culto la iglesia tiene dedicado aquel día,
y sobre el mismo campo hizo donación del territorio y futuro templo á Eodulfo, uno de los
valientes capitanes que más se distinguió, en premio de sus hazañas. > {Historia de Montse-
rrat por el abad D. Miguel Muntadas continuada por un monge del mismo monasterio. (Barce-
lona 1891) plana 69.
(2) Marius André.— STontserrat román féeriqtie (París 189(;) pl. 18S.
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 253
María, guiaiime vos,
á mon pit donan coratge,
á mon braQ forQa y brahó,
y si al pujar á la serra
vuy me dcyan rey hermós,
quan tornaré á visitarvos
me dirán Conqueridor!»— (1)
¡Llástima que tantes relacioDS historiques de Montserrat, sigan un
desastre historich!
liO rey en Pere «LiO €rrani> á lloutserrat
Continuador de les glorioses gestes de Jaume I fou son fill y suc-
cesor Pere lo Gran, ó de Sicilia, ó deis francesos, que ab aytals apela-
tius es conegut. Lo cronista Clot ó Des Clot, descrigué sa añada á Mont-
serrat á invocarhi la protecció divinal, en lo major deis perills en que
se trova durant son agitadíssim regnat.
Excomunicat per lo Sant Pare á causa de la conquesta de Sicilia,
posats sos reg-nes en 1' interdicte de la Iglesia, que conmina ais seus
subdits á negarli tota obediencia, després de restarli lo prestigi moral,
la creuada pontificia y lo poderiu francés devien encarregarse de tól-
reli lo poder material.
Mils de guerrers aplegats sots los dos estandarts junts, lo de la
Santa Creu, enlairat per lo Llegat Pontificia y lo de les tres flors de
Iliri, sostingut per lo propi rey de Franca Felip I' Atrevit, passaren
la frontera catalana per eníronisar com á Monarca, en los reyalmes de
Aragó, al infant francés Caries de Valois.
Alguns prelats y religiosos de nostra térra, obehint la veu de la
Iglesia, secundaren ais creuats en son primer avenQ dintre Cata-
lunya.
Los murs de Gerona foren la primera oposició forta ab que topa
aquell gran exércit conqueridor. En mala hora prengué acort de detu-
rarse á sitiarlos lo rey Felip.
Desde Barcelona, intenta, Pere lo Gran, son derrer esforg, reunint
alguna gent de guerra sots lo reyal penó de les barres rojes.
Tristísima situació havien portat á Catalunya, les Iluytes de la po
htica italiana. ¡La creu de Roma contra la creu de Sant Jordi!
¿Quina protecció sobirana podía salvarnos del estranger? Pere lo
Gran, en sa conspicua mirada, vegé que sois la trovaría en la de la
Reyna deis cels, corrent á invocarla en son predilecto Santuari de
Montserrat.
(1) Patria, poesies de Mosten Jacinto Verdaguer (Barcelona, 1888), plana 184-
254 F. CARRERAS Y CANDI
Torcent de camí, seguit de pochs guerrers, puja ansiós la montanya,
per restar de vetlla tota la nit devant la Moreneta...
Quanta acunmlació de sentiments, progectes, ofertes, intencións,
pregarles, resolucions y esperances, brollaren confusament, los uns
derrera los altres, durant aquella solempnial vetlla, flns á venir á sen-
tar la calma del esperit, que, si es sempre necessaria, csdevé indispen-
sable en les situacions extremes.
Si la Verge Santísima escolta ó no al rey en Pere, nos ho dirán los
fets subsogüents Mes, avants, dexém que V historiador Des Clot nos
donffui compte d' esta añada á Montserrat, ab son precís llenguatge y
puritat de dicció. (1)
«El rey quant hac trames per aquesta rahó sos missatgers per Ca-
talunya e per tot lo Comdat de Barcelona, trames N'Anfós flU seu
major, en Aragó ab lletres e ab pregarles de aquella raho mateixa a
tots los Aragoneses. E ell apres partís de la ciutat de Barcelona e
vench s' en a un monastir de monges negres qui es en Catalunya, e es
lloch de gran devocio hon Deus ha fet a tot hom moltes miraeles e ver-
tuts; e el lloch aquell es apellat Santa Maria de Montserrat. E es lloch
molt salvatge e agrest e entre grans montanyes e feres assetiat. E aqui
lo rey estech e vella tota huna nit devant l'altar de madona santa Ma-
ria; e prégala de bon cor e de bona volentat molt homilment que li
acabas merce ab lo seu fill Jesu Crist, que ell li fes ajuda e valen^a,
en tal manera que sos enemichs portassen la penitencia de les sobres
que fetes li havien: 90 es assaber, car li eren entrats en sa torra no
degudament...
íE quant lo rey hac vetllat tota huna nit, lo bon matí, oyda la
missa, oferí ses presentalles a madona Santa Maria. E puix partis de
aquell lloch ab tota sa companya, e vench se damunt per lo camí de
les montanyes, entro que fonch vengut á Estalrich».
La costum de passar la nit en vetlla, fou molt general á Montserrat,
perpetuantse flns á temps moderns. Subsistía encara en lo scgle xvi,
com apar de la Historia y milagros de Nuestra Señora de Montserrat
(Barcelona Claudius Bornatius 1556) hont se parla deis cants deis pe-
legrins que tota la nit acostumen entonar estant en vetlla en 1' interior
de la capella (2).
Un miracle esdevingué á Gerona, hont tant fort exercit, com era lo
d' aquells creuats, devia quedar desfet per lo poder divinal. La crudel
peste y les terribles mosques de Sant Narcís, acabaren ab la major part
(1) Crónica del rey en Pere e deis seus antecessors jycissata, per Bernat Desclot.—Caii. CLIX.
(2) «Que si queremos conion(,-ar á contar desde las doze horas de la media uoche, hallare-
mos que luego aquella hora los padres monges comienzan á entender en las alabanzas divi-
nas, dizicndo sus maytines con muy íyrau devoción y con muy gran quietud y recogimiento;
l)or(iue hazcu cessar todos los cantos de los peregrinos que suelen cantar velando en la
iffltsia.»
VISITES DE NOSTRES KEVS Á MONTSERRAT 255
deis inyasoTS, flgm-ant entre los victimes de la calamitosa malaltia, lo
DroDi rev Felip, qui Ion restituyt mort & l<'ran(;a.
La or.'ullosá vila de París, vegé devallar, desBoridos deis al ,vol»
,Mrí"euI:"esesti,„adesflors del Uiri, coin ha dit sinibólicament 1 m-
inortal Dante, relerintso á aquesta expedido contra Catalunya.
Pere III «lo CerlinonléB. A Ulontserr»!
No hav6m de dir qui era Pere III lo Cerimoniós. oonegut aximateix
.b 10 nom dd Punylt: p/ hi ha prou ab nomenarlo perqué al llegulo,
íot seruTli vinga al pensament quclcom de sa Uarga v da e insidioses
les es ¿i^ue d^ parangonarse ab Faltre Pere de Castel la, son contnn-
Itnt! apodat ío cLde!, fou, com ell, fratricida y com ell, presenta una
historia rublerta de tiaicións y crims. -n ^- ^
De ; primera añada de Pere III & Montserrat, diu Serra y Postín
ouo en 1343, avants de sa campanya de Mallorca, passd 4 valdré de
nodérte 4nxl i de Nostra Dona de Montserrat. Per portar son patrocini
intparaWement ab ell, prengué y 's pos*, un deis anells que portava
■ ''la'hivte ^nquerit lo reyalme de Mallorca 4 son cunyat Jauíne. y
anarellavria host que devia tólreli lo Eossell6 y Cerdanya, quan.
avantdepassar.^tscomtats.volgué aytambé implorar la protec-
ció de la Mare de Den, á Montserrat. ..„ i» Trónica (lUe
En la relació d' aquesta añada, que 's '=<'";>S'>'Í;; '^, °'°"7;„ ' m
«„v,osen esser de sa propia ma, compta. com feu uit á CoUbato, hont n
eXia famos castelí lo'inajor y mes rich de la montanya, pertanyent
^ U T^oderosa familia barcelonina deis Durfort.
A 1 eñdemí. al mati (29 abril 1344) enviant directament los eayalls
, MlistrotTpar com si no 's volgués substreure 4 la piadosa eosttm
Uavor y per cents d'anys subsistent. d'empendre 4 peu la P'ijada de
SantÚIrl Tía revolta de la eapella de Sant Miquel. ahont lo viandant
se sobtava dé trovarse al enf ront del monastir, era practica general de-
turarshi v resarhi devotament la salve.
'"'la ciica reyai Higa, los ^^^:^:::rzzr^::i-
me de Mallorca, ab la pujada y bien estacia
^^^^.:^':^ts"¿yes a.i de cavaU com depeu — es -.n
n^rtida de aquellos ja a Gerona añades som de pioposit, que ans
Tue dre' -rLssem la entrada de Kossello, --sem a ter reveren-
cia a nostra dona de Montserrat. E aqui dimecres mati a vmt y vuyt
de abrU Parüm de la dita ciutat ab (ort poca companyia. e anamnos
" 'aCtorell e sopar a Celibato. E «f donaren econseUqu
trametessem letres nostres de precaries a tots los archabisbes, bisbes o
a"es ordens, dins nostra senyoria situats, com per tal com per
raho de execucio de justicia, nos convengues a enantar a oecupacio
256 F. CARRERAS Y CANDI
real contra lo dit Jaume de IMallorques e les terres e bens seus los quals
encara senyorejava de fet, faessen special oracio a Deu per Nos e per
les nostres companyies. Nos acceptam lo dit consell, manam que ell fos
menat a execucio e apo fet, reposam aqui la nit. Dijous mati a XXIX de
abril partini daqui cavalcant, anana entro al peu de la costa de Montse-
rrat, e aqui descavalcam, e manam que les besties anassen per lo cami
pía a Monistrol, e que aqui esperassen; e nos ab nostres companyies
muntam la dita costa a peu, e aquella pujada fossem a una esglessia
appellada sant Michael. En vista del monastir de Montserrat isque a
Nos a carrera lo abbat de Montserrat e rebens reverentment e convi-
dans aquell dia; e ensemps anam a fer reverencia a nostra dona sancta
Maria; e feta aquella entram a diñar, e apres menjar ab lo abbat en-
semps anam presentar a la dita verg'e una galera ab totes ses exarcies
dargent en reverencia de la victoria quens dona lo dia que prenguem
térra a Mallcrques, la qual hi haviem feta portar ans de dos dies que Nos
y fossem. E presentada la dita galera faemnos venir los hermitans de
Montserrat (los quals deis seus hermitatg-es havia fet al monastir deva-
llar lo dit abbat) ais quals diguem e pregam que per ells fos constituyda
special oracio, la qual diguessen a certes hores de dia e de nit per Nos
e per les dites nostres companyies, perla raho que dessus havem dit. E
apres partim de aqui e avallam les schales de Montserrat e anam sopar
e jaure a Monistrol, hon dit abbat aximateix nos havia convidats» (1).
Baxá á Monistrol per les escales, camí dret y que devía ferse á peu,
lo que 'ns esplicaría tal vegada, que lo Rey y sa comitiva, avants de
pujar á Sant Miquel, enviessin lo bestiar á Monistrol.
Poch dura la estada de Pere lo Cerimoniós á Montserrat, puix arri-
vat al matí, al vespre ja era á dormir á Monistrol, per partirne al dia
següent á Tarrassa, fent la vía de Gerona, hont Fesperava la host que
devía invadir y guanyar per ell, lo restant del reyalme de son mal-
aventurat eunyat. •
Aquest acte del Rey, disposat á sacrificar á sos mes propinques pa-
rents, á sa ambició, nos recorda al lladre andalús engenent un ciri á
Maria Santíesima, quan havia d' empendre algún fet atrevit de sa cri-
minal carrera.
Y per la for^a del contrast, aquell mateix any, al perdre tot lo que
li quedava en Rosselló y Cerdanya, lo ven^ut rey Jaume de Ma-
llorca (15 juliol 1344) passá á invocar á la Verge de Montserrat en quin
Santuari se trovava lo dia de la festa de Nostra Dona Santa Maria (di-
mecres 8 setembre 1344), Diu Bofarull á dit propósit, que induptable-
ment solicitaría de la Verge, lo contrari de lo que quatre meses avants
li demaná son eunyat.
Y lo piados romeu, al veurel devallar despagat y trist, del miracu-
(1) Crónica del rey d^Aragó encere IV lo Cerimoniós ó del pimyalet. Aquest Key fou
quart en la. cronología aragonesa y tercer en la catalana.
VISITES DE NOSTRES REVS Á MONTSERRAT 257
los Santuari, havent perdut injustaraent sos dominis, murmuraría en-
tre dents estes dues paraules, chlsiques en la catalana térra:
— No convenia.
Joan I «Aymador de la gentllesa» & Montserrat
Lo rey Pere III, que no desmentí en sa vida lo dictat de Cerimo-
niós ab que '1 coneix la historia, decora ab lo titol de Duch de Gerona,
á son íill primogénit Y infant Joan, quí sigue casat ab Mattha d' Arma-
nyacli en 1372, enviudant en 1378. Del temps en que dura aytal ma-
trimoni, n' havém de consignar una intcressant mostra de la devoció
professada á la Verge de Montserrat, devoció, que, en corformitat ab
les creencias del segle xiv, s' hi vincula un procehiment cabalístich
y supersticiüs. No altre nom mereix la preocupado de la corda,
que, havia de teñir, sis vegades la llargada, y set la gruxaria, de la
imatge de Montserrat, y posarse dessota 1' altar hont se resaven les
misses, per arbitrar sa divinal protecció.
Deya, esta carta escrita per lo proto-notari de la Duquesa de Ge-
rona, á Fra Arnau de Qa Plana, predicador de Montserrat:
a La Duquesa -Fra Arnau: Pregam vos que encontinent prengats
per VII vegades ab una corda lo grux de la ymaga de madona santa
Maria de Montserrat et per altres VI vegades la longuea et apres po-
sats la corda dessus laltar et fets nos dir VII misses a honor de la dita
verge maria. E com les misses sien dites trametets nos la corda. E
aQOUs pregam no haia falla car molt uos ho grahirem. Dada en Gerona
lo primer dia de marQ lany MCCCLXXVII— Berengarius Prothonota-
rius>> (1)
Poch temps després, en 1380 (2 de febrer), casa va lo Duch de Ge-
rona ab Violant de Bar. Dintre lo mateix any, tenint en compte lo
vulgar de la térra, «no es bon casat qui no porta la dona á Montse-
rrat» Joan ab sa muller Violant, residexen quatre dies al Monestir,
90 es, del 7 al 10 de setembre de 1380.
Llarchs anys passá, lo Duch de Gerona, enemistat ab son pare,
allunyat de la cort y víctima de les intrigues deis Fortiás, fent vida
retreta. A les derreries del any 1386, residint á Gerona, havía fort en-
malaltit, quau heretá la corona, á la primaria del 1387. Já s' havia po-
sat en camí, á despit de la malaliía, desitjós d' estar present á Barce-
lona, ais derrers moments de Pere lo Cerimoniós.
Lo restabliment, del egregi malalt, viugué ab 1' istiu del any 1387.
No cal dubtar, que invoca á la Verge de Montserrat, puix posa en bo-
nes condicións, 1' estatge deis sobirans en lo Monestir, mananthi cons-
truir dugues bones xemeneyes que no fessin fura, en lo mes d' agost,
una en lo palau / altre en sa cambra.
(1) Registre 1812, foli 38 (v.) arxiu Corona d' Aragó.
190á
17
258 F. CARRERAS Y CANDI
La crudel peste ó glánola que llavors comenQá á aparexer per Bar-
celona, lo feren partir vers Tortosa. sens deturar á Montserrat, á les
derreries d' octubre. La promesa fou empero cumplimentada per sa
muller Violant de Bar, qui passá á Molins de Rey la nit del 17 d' octu-
bre de 1387 y á Collbató la del 18, pujant al dia següent, dissapte, á
peu descalQ, la pesada costa que enmena al Santuari.
De les diferents lletres que figuren en lo registre reyal, escrites
desde Montserrat per la rey na Violant, ne trameterém tres adregades
á son marit, donantli compte d' haver entregat les joyes á la Verge
en conformitat á lo que ell li encomená, com també d' estar en vetlla
davant la devota Imatje, en la nit del 19 al 20 d'' octubre, etc. (1).
«La Reyua — Sabents que de nostre bon estament haurets axi com
deuets plaer vos notiñcam com vuy vers hora de completa som arri-
bada a coll bato on entenem a jaure et dema per lo mati nosen ente-
nem a pujar deu volent a peu dezcaus a madona sancta María. E ma-
ravellants nos com del estament del senyor Rey et daltres coses
despuys que partim daqui nons hauets certificada Pregam vos affec-
tuosament e volem que daquell quiscun jorn haiam vostra plenaria
certiflcació. E car semblantment estam ab ancia del estament del
Delfl de Gerona et de les infantes filis nostres molt cars uos pregam que
continúan en que esta lestament del dit senyor nos continuéis lesta-
ment deis dits Delñ et infantes e encara de la ciutat com esta de les
ypidemies que ara nouellament y son comen^ades. E comanats nos en
gracia del senyor Rey. Dada en Coll bato sots lo segell de nostre anell
diuendres a hora de prima son a XVIII dies doctubre del any
MCCCLXXXVII.
sFuit directa Camarlengis et G. " coltellerii físico domini Regis.»
« Molt alt molt excellent et molt poderos princep et senyor marit et
senyor meu molt car. Sus ara he reebuda de la vostra senyoria vna le-
tra yo senyor estant en la vetla de Madona sancta Maria de Montse-
rrat tocant alscuns afers ais quals senyor per raho de la dita vetla nous
pusch respondre Mas supplic vos senyor molt alt sia vostra merce so-
breseure en los dits afers tro yo sia aqui car yo senyor partiré daci
deu volent dilluns per lo mati et no cessare mon carai tro sia a la vos-
tra gran senyoria la qual nostre senyor deus vulla conseruar per molts
anys et prosperar segons senyor que vos et yo desijam — Dada en lo
Monastir de Montserrat sots lo segell de mon anell dissabte a hora del
Seny del ladre a XIX dies doctubre del any MCCCLXXXVII.
o Senyor
«Vostra humil companyona, la Reyna.»
(1) Registre 20.53, foli 31 (arxiu Corona d' Arajíó).
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 259
«Molt alt molt excellent et molt poderos princep et senyor marit et
senyor raen molt car De la vostra gran senyoria he reebuda vna letra
molt graciosa de la qual senyor he reebut plaer et recreacio molt gran
maiorment com per aquella he sabut vostre bon estament a mi singu-
larment molt car Prat a^o mosenyor notifica la vostra molt gran
senyoria com anit hora de completa arribe a coll bato et vuy mati
parteut daqui som arribada a madona sancta j\[aria de Montserrat on
senyor me son trobada sana et en fort bona disposicio de ma persona
gracies a nostre senyor et a la qual denota ab humil reuerencia he
presentades senyor les joyes que la vostra senyoria sab en la presen-
tacio de les quals he feta leuar carta publica segons senyor que la
vostra gran senyoria me mana. Yo molt alt senyor enten a partir daci
Diluns et anarmen den volent per Monistrol jaure a Terraja et des-
puixs continúan lo cami a la vostra gran senyoria la qual nostre senyor
deus conserue per molts anys ab creximent de salut et ab exalQament
de la sua Reyal corona E sia guarda vostra senyor la sancta diuini-
tat queus faQa prosperar longament segons que vos senyor et yo desi-
jam. Dada en lo Monastir de Montserrat sots lo segell de mon anell
dissapte a hora de les lums enceses a XIX dies doctubre del any
MCCCLXXXVIL
«Senyor: vostra humil companyona— La Eeyna.
«Domino Regí»
Ais dos dies sortia, la Reyna, del Santuari, dormint, lo dilluns 21
d' octubre, á Monistrol y lo 22 á Tarrada.
De les succesives estados de Joan I y Violant, á Montserrat, ben
poca cosa ne pervé. Lo 2 d' agost de 1393, acabava d' arrivar al
Monestir, la piadosa Reyna, havent fet á peu la penosa pujada (1).
Evidencia la devoció de tota sa vida á Montserrat, Joan I, al veu-
re, que, es 1' unich rey d' Aragó, qui desitjá fes, son cors, la postuma
ascensió al cenobi benedictí. Axis ho tramet Serra y Postíus, co-
piantho de Sayol en les Grandezas de Poblet, hont se diu, que, eix
Sobirá, «había ofrecido enterrarse en el Monasterio de Nuestra Señora
de Montserrate^ si la Virgen le guardava de no se qué peligro, por lo
qual estuvo depositado en la Cathedral de Barcelona. El Rey D. Mar-
tín su hermano y sucesor en la Corona, pidió al Papa, que absolviese
al rey difunto de la promesa que avia hecho de enterrarse en Montse-
rrate, porque pertenecía á Poblet, alegando los de este Monasterio sus
razones, á lo que condescendió su Santidad; pero hallando dificultades
la referida Cathedral para entregar el Real Cadáver, fué proferida
(1) 1393 (I) d' agost)— Desde Tortosa respon, Joan I, á la cai-ta de Violaut, datada á Mont-
serrat lo 2 d' agost, y al eusenips q.ue li demana los dies que pensa residir á Montserrat, es-
crivia: «E car uos sots ben trobada en lo camí e en lo pujar de la costa en que pero nos teuim
per dit que haurets passat assats treball e affauy pus a peu la auets pujada» {Revis'.a histó-
rica de Barcelona, any III, nom. 5i5, pl. 148).
260 F. CARRERAS Y CANDI
sentencia declarando, que pertenecía á Poblet, el qual se le llevó de
Barcelona, año mil quinientos y uno.»
Impenetrables disposicións del Altissim. Elles no han permés, que,
r estimat Santuari de Catalunya, pogués hostatjar les cendres de cap
de sos sobirans.
Ferran I «d' Anteqaera» á Montserrat
Al morir Joan I, en 1396, llarchs anys se passaren sense que la porta
del amurallat recinte de Montserrat s'obrís per donar passatge á algún
deis sobirans catalans. Lo succesor del Rey galant, lo bondatós Martí,
seguint la devoció heretada de sos passats, dona mostres d' haver
invocat á la Verge de Montserrat en 1' acte de major importancia de
la sua vida. Nos referim á la renomada expedido á Sicilia, quan sois
era Duch de Montblanch. Entre les diferents presentalles conserva-
des en lo Santuari montserrati, lii cridava la atenció, al comencar lo
segle XIX, lo gran retaule piutat al oli, clavat en los gótichs claustres,
hont se conmemora va dita expedido guerrera, estanthi fldelment repre-
sentáis, Martí I, son flll Martí rey de Sicilia, Felip Dalmau vescomte de
Rocabertí, 1' almirall Bernat de Cabrera, Ramón de Perellós vescom-
te de Roda, Pere de Queralt, Bernat de Pinós^ Lluis Cornel, Berenguer
de Vilaragut, Ramón de Monteada, Ramón de Bages, Ferrer d' Abe-
11a, Guerau de Cervelló y Pere de Fonollet vescomte d' Ylla (1 ). Impor-
tantísima pintura histórica, digna de figurar en primer lloch entre
los majors recorts arqueológichs del segle xiv, si la incendiayre teya
del exercit invasor no la bagues feta desaparexer per sempre, en les
guerres napoleóniques.
Mes lo rey Martí I, al ocupar lo reyal soli de sos passats, per sa
malaltissa naturalesa y crasa complexió, estigué condempnat al repós,
no sempre voluntari. Per tant, no cal estranyar dexém de veure '1 tra-
muntant la fadigosa costa de Collbató, quan, tant poch se mogué de
les capitals, obligat per sa salut á una vida altament sedentaria.
Lo monestir de Montserrat havia pujat á la categoría d' abadía, per
decret de BenetXIII (1410), quan lo succesor del rey Martí y cap de
la nova dinastía castellana, hi puja á invocar á la Verge, á les derreries
de juliol de 1' any 1413. Lo rey Ferran anava á Balaguer á ñ de dirigir
en persona les operacións contra lo Comte d' Urgell, quí s' havía, ton-
tament engaviat dintre la encastellada y forta poblado.
La estada del nou Rey en lo monestir, sigue breu, expedint segui-
damcnt orde d' entrcgarli cent florins d' or, mentres dirigía la güera en
lo camp sitiador de Balaguer, á 24 de setembre de 1413 (2).
(1) Zurita /Ixaies de Aragón, llibre 10, cap 50
(2) «Feniiiiandus ctc fideli consiliario et tliesaurario nostro .Tohauuide plauo leguin doc-
tori salutem ct tíracianí: vobis diciuuis et mandauíus quateuiis de peccuuie curie nosti'c que
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 261
Ab esta añada de Ferran d' Aiitequcra á Montserrat, se repeteix lo
fet, d' invocar á la Verge, nostres reys, avans d' entrar en campanya.
Axis ho vegerem, ab Pere II, ab Pere III, ab Martí Duch de Mont-
blancli y ara, per quarta vegada, ab Ferran I, se<;-ons ho consigna
Qur.ta ab la sua característica concissió d' istil (1).
Lo cronista montserrati, Argaiz, diu, que Ferran I, s' inscrigué com
á confrare en la confraría de Montserrat de la que s' en declara espe-
cial protector (10 juny 1415). De tant insig-ne contraria, Cristofol de
Virués, en lo poema escrit sobre Montserrat, no canta:
«La cual ha de tener por sus cofrades
todos los potentados que en la tierra
seguirán las dulcísimas verdades
del que en el suelo el cielo abre y cierra.»
Anfós lY «lo JlIagDáiiim» y sa muUer y llochtinent
María de Castella, á üloutserrat
Es un regnat especialíssim lo d' Autos IV. Lo Sobirá, alluuyat quasi
sempre de son reyalme, pretenía dirigirlo desde Italia, hont era con-
sultat prou sovint per sa muller y llochtinent María de Castella, á quí
dexá la regencia de la corona d' Arag-ó.
Procehiut de Lleyda y Balaguer, María de Castella, en 1419, diri-
gintse á Barcelona, deturá á Montserrat, y allí cstava lo 16 de janer.
Tres jorns després, prosseguía son interromput itinerari vers la Capi-
tal, per lo camí usüalment seguit, 90 es, lo de Molins de Rey (19 de
janer de 1419) (2).
Com si Anfós IV estigués destinat ó disposat, á marxar sempre per
víes diferents de sa muller, axis com ésta, al comen9ar 1' any 1419,
ana á Montserrat, lo Rey no hi fou llavors, sino á les derreríes del pro-
pi any. Axis apar en la confirmació que hi feu deis privilegis concedits
ais pelegríns de Montserrat, datat en aquest propi lloch, lo 4 de desem-
bre de 1419 (3).
Y tot seguit, ais primers mesos del any 1420, vehem continuar son
afecte, en les concessions que otorga al Monestir, desde Tortosa (3 de
abril) y desde Vinaroz (12 d' abril). Ab elles, y especialment ab la
penes vos sunt vel ei-uut, detis et soluatis Ahbati ac mouastei-io sánete marie de Mouserrato
Centum florenos auri de Aragonis quos ipsius virginis coutemplacione graciose ducimus
coucedendos Et in solucione recuperetis presentera vna cum apocha de soluto Datum in
obsidione balagarii sub uostro sigillo niüiuri XXIIII dia mensis Septembiñs Anno a nati-
nitate Domiui M° CCCC° XIII°— Rex Ferdiuandus - Dominus Rex mandauit mihi Paulo
Nicholai» (Registre 2422, foli 31, arx Corona d' Aragó)
(1) Anales de Aragón vol. III, Uibre XII. pl. 89.
(2) Registre 3109, foli 9 (arx. Corona d' Aragó).
(3) Hiitoria de Nuestra Señora de Monserrate, per Serra y Postius, plana 264
262 F. CARRERAS Y CANDI
darrera, tractá d' arbitrar la assistencia y protecció de María San-
tíssima per les sues ercpreses de Cerdenya y Sicilia (1).
En ia setmana de la Mare deDeu de setembre del any 1421, la pia-
dosa reyna María torna á Montserrat, pervenintnos de sa visita, de-
talls interessants al conexement de les costúms. D' una part, se veu
ais pobres acudint al Monestir á implorar la caritat de la Reyna, quí
los soeorregué tant de sa propia má, quan per víes del seu ahnoyner
Mossen Pere Eres. D' altre part, trovem que lo Monestir aplegava les
almoynes deis fidels, en una caxa, en hi iglesia, essent, per tant, do-
nada la reyal almoyna, sense ostentació. Y per últim, que eren venuts
en lo recinte de Montserrat, fils de pater nostres de boix, axis com me-
dalles {senyáls d' estany e plom) ab la imatge de le Verge, les quals
coses solíen portarse en demostrado de venguda de romiatge. De tot ne
tracta 1' adjunt document reyal (2):
«María, etc. Al feel consellcr e Tresorer nostre micer Johan de
masguillem Saint e gracia. Vist hauem un albara de Scriua de racio
de casa nostra ab son sagell sagellat del tenor seguent:— Al honrat en
berthomen gras Tresorer de la senyora Reyna de part den Raphael de
vlzinelles scriua de racio de casa de la dita senyora fas vos asaber que
an pere eres capella e almoyner de la senyora Reyna son degndes les
quantitats deius scrites les quals de manament de la dita senyora dis-
tribuí en lo monastir de Montserrat aon la dita Senyora partint de
Barchinona era añada en la setmana de sancta María de Setembre del
any deius scrit segons que distinctament se segueix: Primerament li
son deguts los quals foren dats per amor de Deu a diuerses pobres axi
per mans de la dita senyora a la qual lo dit pere eres de manament
seu li hauia donats com per mans del dit pere Cent trenta hun sous.
ítem li son deguts los quals per vigor del dit manament foren mesos
per ell present Maiordom e mi en la caxa de la almoyna de la sglesia
del dit Monastir Cent Sexanta cinch sois. E mes li son deguts per vint
e huyt fils de pater nostres de boix que compra qui a raho de dotze di-
ners lo fil fan ab sis sois huyt diners que li costaren Quarante senyals
destany e plom ab la emprenta de Sancta María en cascu de aquells a
raho de dos diners la pe9a los quals pater nostres e senyals la dita
senyora decontinent dona e compartí entre les sues companyes per co
que aquells aportassen en demostracio de venguda de Romiatge Trenta
quatre sois huyt diners, e axi raunten en suma totes les dites quanti-
tats al dit pere eres degudes per les dites rahons segons que de tot per
menut appar per vna cédula de paper scrita per sa raa que he enfilada
en lo fil primer comu de mon offici ab la qual largament son stat cer-
co «Iflcircum ad Monasterium et deuotam intacte virginis Marie Montis serrati ingen-
tnm et singularem deA'ocionem habentes ac in remissionem pecamimim nostri ct predccesso-
rum nostnnn> (Eegisti-P 25!i3, foli ñi, arx. Corona Aragó).
(2) Kcsfistre 3110. foli 61 far.\. Corona Aragó).
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 263
tificat Trescents Trenta sois huyt diners barchinoneses. Scrit en Bar-
chinona a XX dies del mes de Seteintre auno an atiuitate domini Mi-
llesirao CCCCXVF — Jatsia se^-ons tenor del dit albara la quantitat
en aquell contenguda se mostra esser degiida an pere eres almoyner
nostre. Empero a nos es cert e sta en veritat que lo feel Comprador de
casa nostre en Guillem de linya ha pagada e bestreta de sos propris
diners o peccunia la dita quantitat en lo dit albora contenguda Per 90
per remoure tot dubte a vos dehim e raanam de certa sciencia que de
les peccunies de nostra cort que vers vos son o serán donets o paguets
al dit comprador nostre los dits Trescens Trenta sois huyt diners bar-
chinoneses en lo dit albara contenguts, E en la paga de aquells co-
bráis dell lalbara dessus insert ensemps ab la present. Dada on bar-
chinona sots nostre sagell seeret a X dies dabril En lany de la natiuitat
de nostre senyor Mil CCCCXXII -La Reyna.»
Retornant al rey Anfós, t|uí, per ses empreses, aficions y educaeió,
esdevingué mes italiá que espanyol, en 1' any 1440, dexá sentada la
senyal d' exes inclinacions forasteres ultramarines, en Montserrat. Vo-
lent reformar lo monestir, lo Rey de Napols y d' Aragó, hi introdueix
la regia del de Montecasino, que havía gran renom llavors. De Mon-
tecasino passaren á Montserrat, 1' abat Fra Antoni Avinyó y sis mon-
jes mes italians.
No estigué acertat. lo Rey d' Aragó, en aytal reforma, anant lo
monestir en notable decadencia en la segona mitat del segle xv. Mes
no 's veu que los frares italians hi supeditessin ais catalans y quan
la ocasió ho exigi, lo convent se presenta esencialment cátala, en 1462,
desenrotllant , 1' abat Ferrer, la política de la térra.
Joan II á Montserrat
Plana de tristor per la historia de Catalunya es la que omplena ab
son regnat, Joan 11. En la sua primera mitat, ni eix antipatich Sobirá,
ni sa astuta y terrible muUer, la castellana Joana Enríquez, aparexen
visitant lo Santuario que, com havém dit avants, tremola ab fermesa, en
1462, r estandart de la térra figurant en la primera fila del mohiment
insurreccional que inicia Barcelona
Lo malaventurat Princep de Viana, ab qui 's personifica V esperit de
la Ilibertat menyspreuada per lo cesarisme del Monarca, acut en mo-
ments d' angustia á invocar á la Verge de Montserrat.
En agost de 1460, assentats en apariencia, los preliminars de re-
conciliació entre pare y fill, mentres lo primer anava á presidir les
corts de Fraga, lo segón se dirigía á Montserrat coin diu en Bofarull
«con la idea tal vez de preparar mejor su espíritu, á que tanto ayuda
en aquella región el venerado santuario en su interior, y la naturaleza
por fuera.» «Al saber en Montserrat, el Príncipe, el mal resultado de
las cortes de Aragón para sus esperanzas, regresó entristecido á Bar-
264 F. CARRERAS Y CANDI
celona, y allí volvió á hacerse la ilusión de que en las cortes catalanas
se vería satisfecho» (1).
Caries de Viana aborrit del Pare, passá d' aquesta vida víctima
d'unes metzines abocades de niolt alt.
Y al veure á la reyna Joana, princesa de molta astucia y gran arti-
fici, com la nomena Qurita, que, tot venint á exercir la llochtinencia de
Catalunya ab son flU Ferran, puja al Santuari de Montserrat, (al passar
de Lleyda á Barcelona en novembre de 1461) pensará quí conegui la
sua vida, que aytal visita era dictada, mes que per lo cor, per lo cap.
No cal retreure, com A mostres d' afecte de Joan II al monestir de
Montserrat, certes concessions honoríflques, moltes vegades fetes á
causa de gestions delspropis interessats, y que á nostre vijarés poca
cosa proven (2).
Serra y Postius dona compte de les añades d' aquest Monarca á
Montserrat, la primera en 1435, quan encara no era rey, y la segona
en 1475, després d' acabada la famosa guerra de Catalunya, en quin
any, diu trovarse al Santuari en los díes 18 y 19 d' octubre. Evident
errada del escriptor barceloní, puix deis arxius ne resulta que son lo 8 y
9 d' octubre los díes de sa permanencia en lo Monestir (3).
Estava en los setanta set anys, edat molt avengada, perqué pogués
repetir semblant devoció. No creyém que hi tornes mes.
En 1479, morí extremadament xacrós lo rey Joan II, que, si fou
perdonat por los catalans, íon nom, no podrá ocupar digne lloch ni en
son cor, ni en ses histories.
Ferrán II «lo Catélich», á, JUontserrat
Já, en 1461, trovárem, al flll de Joan II y de Joana Enriquez,
anant en companyía de sa Mare, á Montserrat.
(1) Historia critica civil y eclesiástica de Cataluña, vol. VI, pl. 29.
(2) Aluclim á lo que cita Serra y Postius del titol de bibliotecari major coiiferit al Abat
de Montserrat en 1-158, com del privilegi d' exercir jurisdicció en les causes de sos vassalls de
Barcelona, eu 1159 (Historia de N. S. de Montserrat, pl. 271).
(3) Lo Dietari del Concell barceloní, en jornada de 5 d' octubre de 1175, consigna la sor-
tida del rey Joan de Barcelona per anar á Lleyda liont liavia couvocat la cort per lo 2 de
novemlirc.
Lo Registro 3166, del arxiu de la Corona d'Arago, compte documents lirmats por lo Rey
á Barcelona, en les dates de 5, 7, 11, 14, 16 y 17 d' octubre de 1475.
Lo Registre 3392 (folis 61 y 62), constata la firma de dos documcuts á Montserrat lo 8 y 9
d' octubre de 1475. Lo primer va eudre^at ais almoynera de Montserrat, ais qui permet 1' us de
tota lley d' armes, flus de les prohibides, los exhimeix de la obligació de servir los oficis pu-
blichs en les imiversitats,y los enfranqueix,axis com Uurs equipatges óbesties,dels drets de
pontatxes y barcatxes. També declara que no poguessin esser molestatsper lacomissió de de-
licies ó reclamació de deutes, dexant d' estar subgéctes á la jurisdicció ordinaria, á exccpció
deis crims de lesa magestat «prodicione heresi et sodomita ac fractione itiuerum et viarum.»
Lo segon decret del 9 d' octubre es una confirmado de la exempció de cena que concedí ais
vasalls de Montserrat lo rey Anfós desde Tortosa, lo 3 d' abril de 1120.
Aquests dos privilegis declara haverlos vist Serra y Postius, en 1' arxiu de Montserrat
{cax. 3, leg. 2, fot. 3) y n' equivoca les dates, suposantlos del 18 y 19 d' octubre.
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 265
ComeiKjá son reg^nat, en 1479, y coni se passesin lo primer y lo se-
gon any, sense visitar lo Santuari de Montserrat, coraenQaren á ges-
tionar, los monjos, la desitjada visita, iitilisant de la influencia, que,
en la persona del Rey Católieh, hi exercía Frá Boyl.
Del seteiubre de 1481 es la correspondencia deis monjos y Fe-
rran II, instantse la ascensió d' aquest al monestir. Responia, lo Rey,
mostrantse volenterós de pujar á aquell Uoch de veneració.
«Lo Rey— Religiosos amats nostres. Ab Fr. Boill hauem rel)ut vos-
tra lletra, ab creencia ab la persona la qual vista ates lo que aquell
per vostre part nos ha volgut explicar: vos responem es nostra volun-
tat ser vers aqueixa Casa segons la devocio hi tenim e com ofert e raes
llargament ho havem dit al dit Fr. Boill, he com ho entenem metre
per obra, plahent a Nostre Senyor, antes de nostra partida de assi.
Nos remetem a la relació al qual sobre aijo deveu fe e créenla com a
nostra propria persona. Dada en Barchinona a XXIV de setembre de
MCCCCLXXXI» (1).
Empero partí de Barcelona y no consta que deturés á Montserrat.
Seguí ses comunicacions ab lo monestir, mostrant sempre son afecte,
Ferran II, al P. Boyl, en los anys de 1481 y 1482. En lo de 1486, lo
Rey Católieh, concedí privilegi al Monestir, enfranquint d^host, caval-
cada y algunes coutribucions,, ais llochs de sa pertenencia (2).
A aquesta petita senyal d' estima á Montserrat, per part del Rey
d' Aragó, podém agregarhi la mes explícita de ferhi terraplenar un tros
de montanya á ses despeses, per construir la nova iglesia.
Pervingué 1' any 1492, justament calificat de notable per Schwartz
á causa d' efectuarshi en ell, fets de tanta entltat en la península Ibé-
rica, com la presa de Granada, la expulsió deis jueus y lo descubri-
ment del nou mon (3).
En 1492 fineix una época, per iuiciarsen altre prou oposta, que ca-
racterisa, en ses formes plástica y Iliteraria, lo nou istil del renaxe-
ment. Si 1' historiador italiá Guicciardini, no dubta en comentar lo
segle XVI, en 1' any 1492, ¿qué no hauríem de fer los historiadors es-
panyols y americans?
La decadencia interior de Catalunya, empero já es manifesta en lo
segle XV, al que podríem titular^ segle de la entrada deis castellans.
8' inicia aquesta entrada y subsegüent inmiscuició en nostres afers, en
1412, ab Facompanyament del Regent de Castella, quan vingué á regnar
á Aragó. S^ hauría detingut en temps d' Anfós IV, per virtut de sa po-
(1) Serra y Postius Hist. de N, S. de Monts. pl. 278.
(2) Sou de dita coucessió les seguents páranles:
«Quai'e cum cenobium diree virginis Mai-ie deMontesserrato quodin totoorbe quottidia-
nis fere síjiiis et miraculis claret celeberrimumquc hahetur magis helemosínjs sustentetur
qiiain redditibus quippe qui et si teuuissimi suut eos tameu et ouiuia alia quacuuque suiít et
ipsas Ítem helemosiuas iu peregrinos ac pauperes christi alendos distribuit atque dispensat»
Salamanca 24 de deseir.bre 148H. (Registre 3o50 foli 3, arx. Corona d' Aragó.)
(3) ii92 historia de un año célebre por Federico Schivartz (Barcelona 1892).
266 F. CARRERAS Y CANDI
lítica italiana, sino hagués neutralisat la influencia ultramarina, altres
avenaos de la castellana, deguts á la reyna llochtinent Maria, primpcesa
de la casa reyal de Castella Regná Joan II y sa muller la filia del
gran almirall de Castella Enriquez^ sintetisá. la continuado de la polí-
tica é influencia forasteres. Y per últim, fineix lo segle xv ab T adve-
niment del rey Ferrán II, lo Católich, qual cort, composta de mes cas-
tellans que catalans, devía influir en aumentar 1' estiaugerisme á
Catalunya.
A Montserrat li toca sufrir les consequencies de semblant estat de
coses, aparellantli gravísimes perturbacións, com may les hagués pre-
senciades en los segles de la major corruptela monacal. Certament que
lo convent s' ha vía inficionat de relaxado é hi precisava una reforma
radical,, que ^1 posas en bon estament. Axis s^ havía agitat la idea d' in-
troduirhi frares geronims en lloch deis monjos negres, nom vulgar do-
nat ais benedictins en la Edat Mitjana
Hu deis arguments aduhits al dexar establerta la reforma á Mont-
serrat, fou V abus deis abats de residir llargues temporades fora del
monestir. Es cert que 1' Abat de Montserrat figura en lloch primordial
entre los personatjes polítichs de Catalunya; mes axó no era cas ayslat,
ni peculiar del Abat de Montserrat, ni tant sois característich de Cata-
lunya. A Portugal, á Castella y á Franca, per tot, los bisbes y los
abats, jugaven en política lo primer paper.
Quan la calamitosa guerra civil catalana de Joan 11^ Fr. Pere An-
toni Ferrer, abat de Montserrat, era ferm partidari de la causa de Bar-
celona y per tant contrari del monarca aragonés, dirigint lo mohiment
polítich en la Ciutat. Ferrán lo Católich, debuta, en 1' exercici de les
armes, durant esta guerra, qual recort servaría tota sa vida no obli-
dantse la intervenció del abat Ferrer. Apuntem lo fet, puix á vegades
petits acontexements, n' originen altres de major trascendencia. Quí
sab si, quan tractá de solucionar lo decayment monástich de Mont-
serrat, fou un acte, tant polítich com eclesiástich, subjectarlo al castella
de Valladolid?
Desde llavors, passaren á Castella, les quantioses rentes y dona-
tius, que, la pietat catalana, acumulava ais peus de sa devota y esti-
mada Verge.
Causa penosa impresió la falta de crítica y fins de patriotismo, que
s' observa en molts autors catalans de Montserrat, al donar compte
d' aquesta reforma. Hu d' ells Serra y Postius, no sois la anomena santa
y gloriosa, sino que la justifica, no já per la relaxado monástica tant
general en lo segle xv, sino per capritxosa voluntat deis Reys Cató-
lichs, dient que los sembla oportú «que no fuesse abadía, ni claustral,
sino que se incorporasse con las demás congregaciones que en Cata-
luña y Galicia se habían juntado» com si hagués dexat d' existir la
congregado benedictina tarraconense, que may s' ajuntá ab la simi-
lar castellana-
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 267
Aquell cany célebre del seg'le xv, lo remarcable 1492, fou lo en que 's
porta á tenue la unió de la perla deis santuaris benedictins de Cata-
lunya al de Valladolid, unió de funestíssims efectes segons tindrém
motiu d' exposar. A despit de la butUa pontificia, tarda un tant á efec-
tuarse Fou en octubre de 1492, quan Ferrán II emprcngué sa ascensió
al monestir, anunciada en 1481 y dilatada fins al temps en que s' aca-
bava de preceptuar lo predit cambi de personal
Enaltits de la gloria, que^ en ses persones irradiava la conquesta de
Granada, se diri.üíen á Barcelona, los Reys Católichs, desviantse del
camí recte, per pujar á aiienollarse ais peus de la Verge de Montserrat.
Los acompanyaven, 1' infant primogénit Joan y sos altres filis. Esde-
vingué aquesta visita á mitjans d' octubre y no cal dubtar que, durant
la matexa, se tractás tot lo referent al non estament d" aquell santuari.
Falten los documents y sobren les presumpcións. Procuraréni fu-
gir de les que assalten nostre pensa, per no apartarnos de la recta
conciencia d' historiador.
Din la historia del abat Muntades, que fins al 2 de juny de 1493
no prengué possesió de Montserrat lo general de la congregado de Va-
lladolid, que r abat Peralta renuncia expontáneament «para no crear
obstáculos á la grande obra de los Reyes Católicos y de Alejandro VI:
mereciendo por este importante servicio y desinterés ser promovido á
la silla episcopal de Vich» (I).
Simultáneament ab la presa de possesió del Monestir per los frares
castellans, corre parelles altre fet consignat per los historiadors mont-
serratins, 90 es, que Fr. Bernat Boyl y dotze monjes catalans de la
orde benedictina, en 1493, passaren á evangelisar ais infels de les in-
dies Occidentals, que acabava de descubrir Cristófol Colom, confe-
rintse al primer la dignitat de Patriarca de les Indios (2).
gForen originaris de Montserrat, los dotze companys benedictins
del P. Boyl? Fet importantíssim d^ averiguar, per quan indicaría
r apartament total del element cátala del Monestir^ al entrar sots
lo nou domini de la congregado de Valladolid.
A mes, de que fora gloria del monestir, reivindicar per sos frares,
V honor de Henearse,, á la mes fexuga y perillosa de les tasques evan-
géliques, al dexar lo lloch de repós y quietut, en mans d' una coniuni-
tat forastera.
Y lo católich Rey d' Aragó, que s' allunyá de Montserrat quan en-
cara los filis de la térra, hi servien lo camaril de la Verge, no hi devía
posar mes los peus, com si no s' atrevís á gosarse en la contemplado de
sa obra, que, si esdevingué meritoria per lo restabiiment de bones prac-
tiques de pietat, resulta impolítica y contraproduhent á la pau in-
(1) Historia de Montserrat por él abad D. Miguel Muntadas continuada por un monje
del mismo monasterio (Barcelona 189-1) plana 133
(2) Epitome histórico del portentoso santuario y real monasterio de Nuestra Señora de
Monterrate, peí- Pere Berra y Postius (Barcelona 174:7) plana 215,
268 F. CARRERAS Y CANDI
terna. Desayrat, Ferrán II, al exercir la governació de Castella quan
enviuda d' Isabel, apartat del reyalme de sa muUer y desitjós de faci-
litar, ab un nou maridatge, la separado d' Aragó de Castella ¿li en-
trañen remordiments, en los derrers anys de sa vida, per haver entre-
gat ais castellans, que tan lo disgustaren, lo mes preuat deis santuaris
de Catalunya? (1)
Múltiples visitas de Carlos I á moutserrat (2)
El gran rey Carlos I emperador de Alemania, merece colocarse
entre los principales bienhechores del monasterio y devotos de su San-
tísima Virg-en. Fué innata su inclinación á nuestro santuario, pues no
hallamos que pudiera recibirla de las enseñanzas de sus sabios ins-
tructores, el Obispo de BesanQon y Adriano de Utrecht.
Es, Carlos I, el rey que hizo mayor número de visitas á Montserrat.
Con creces le indemnizó de su afición, la excelsa Señora, al con-
templar acumulados, tantos gloriosos sucesos en su felicísimo reinado.
El obispo de Pamplona Fr. Prudencio de Sandoval refiere oque to-
das ias veces que se le ofrecía ir por allí, lo hacía con gran g-usto por
llevar consigo la bendición de la santa imagen de la madre de Dios.
Y solía decir á sus privados: (3)
« — Las paredes de este santuario están ahumadas y siento de ellas
tanta devoción y una cierta deidad que no sé significar.
»Y mostrábalo bien S. M., pues gustaba comer con los monjes en
refitorio y mandaba sentar al prelado al cabo de la mesa mayor con-
sigo. Y en ausencia del abad comió con el emperador fray García Pas-
cual Prior, en Pascua de resurrección, comiendo el emperador carne
y los monjes pescado (porque en refitorio nunca se come en esta santa
casa), le dijo el Prior dadas las gracias:
«— Aende señor, que nos habéis corrompido el refitorio.
«Era aragonés este padre y llevó con mucha gracia el emperador
lo que le dijo, porque conoció en él la virtud que este monje tenía. »
Seguidamente, consigna el Obispo autor de la historia de Carlos I,
algunos favores otorgados por el Monarca al Monasterio y entre ellos,
que «cuando las iglesias de esta corona daban socorro á S, M. para sus
(1) Podríem entretenirnos en referir donatius y privilegis de Ferrán II á Montserrat,
postcriors al 1 Ht2, que alguns n' hi ha de consignats en la obra d' en Seri-a y Postius. Mes
res nos diulien, á cxcepció de la significativa franquesa y Uibcrtat d' atravessar los passos de
Castella, que otorga, en 1510. Conseíjüencia clara del castellauisme introduhit á Montserrat.
(2) Tenint en comptc lo carácter y dinieusions del preseut ostudi histórich, liavien cstat
escullits dos apartats, per llegirse en la solenipnial sessió académica dedicada á S. M lo Ecy
d' Espanya, en sa estada A Barcelona en 1904: lo primer deis escullits, era lo de Pcrc «lo Gran»
y lo segon fou lo present de Caries I, aquest en Uengua castellana, en atenció á que S M. no
coneix la catalana.
(3) «Historia del Emperador Cai-los V rey de España, i)or Fr. Prudencio de Sandoval,
obispo de Pamplona». (Madrid 1817), tomo ix, p. 326.
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 269
guerras y lo daba esta casa, se lo mandaba volver, y una vez que se
tu¿ á defender á Salses y esta casa le envió treinta hombres de armas,
no quiso que el monasterio los pagase mas de que para aparejarse se
les dio doscientos ducados, año 1524.
íTodo el tiempo que S. M. vivió, pidió se le dijese una misa coti-
diana en el altar de nuestra señora por su intención y se hizo y mandó
dar limosna, año 1523.
» Nueve veces se halla por los libros que S. 'M. visitó esta santa
casa y debieron de ser más, pues venía desde Barcelona estando allí á
fiestas que se celebraban en este monasterio; muchas limosnas dio y
cada vez que venía la mandaba dar: no quería que se supiese lo que
mandaba dar, parece cantidad de veinte mil ducados por los libros:
en una partida se hallan mil ducados, que mandó librar en Zaragoza,
año de 1524.»
Durante el reinado de Carlos I fué regido, el monasterio de ]\Iont-
serrat, por abades forasteros de Catalunya: Fr. Pedro de Burgos, caste-
llano viejo; Fr, Miguel Pedroche, andaluz; Fr, Miguel Ferrer, valencia-
no; Fr. Alonso Toro, vallisoletano; Fr. Diego de Luna, castellano
viejo y Fr. Diego de Tocco, napolitano, en cuyo período abadial falleció
el Emperador.
De las nueve veces que estuvo en IMontserrat Carlos I, según el
obispo Sandoval, sólo cinco han sido aducidas por los historiadores de
Montserrat. La primera fué en 1520. Acababan de terminar las cortes
catalanas de 1519, en las que ciñió la tradicional guirnalda de Conde
de Earcelora, y después de permanecer once meses y ocho días en
nuestra Capital, ascendió por vez primera á las peñas de Montserrat,
á estas conchas gigantinas, que, avaras guardan en su seno la Perla
de Cataluña.
Es curioso consignar, que, eo aquella ocasión y en Barcelona,
nuestros reyes cambiaron el dictado de Alteza, que hasta entonces se
les dio, por el de Majestad.
El 23 de enero de 1520, partía de Barcelona hacia Montserrat, Car-
los I, en la peor de las temporadas del año, cuando la cuotidiana ne-
blina aumenta en aquellos riscos, la melancolía invernal, predispo-
niendo el ánimo á contemplaciones cenobíticas.
Castilla, que le había visto partir el año antes, con la corona real,
le veía de retorno llevando en sus sienes la corona imperial.
En cambio en 1533, visitó, Carlos I, á Montserrat, de regreso de
Barcelona^ en la mejor de las épocas del año, en la vigilia de la festivi-
dad de Corpus (11 de junio), asistiendo el día siguiente á la procesión
del Santísimo Sacramento. De Montserrat pasó á Monzón para presidir
cortes generales á los tres reinos de la corona de Aragón.
Dos veces estuvo en Montserrat durante el año 1535 Carlos I: la
primera viene consignada así en los dietarios:
«Jueves^ 1.° de abril. — Recibióse en este día la noticia de que el
270 F. CARRERAS Y CANDI
emperador y rey nuestro señor, viniendo de Montserrat, había ido á
dormir en Molins de Rey» (1),
De la segunda, en 28 de mayo se lee en Serra y Postius que «passó
ala posta á Monserrate donde oyó raissa, confessó, comulgó é im-
ploró el Patrocinio de Maria Santissima y el mismo día bolvió á Bar-
celona» (p. 299).
Disponía entonces la expedición á Túnez y para tener feliz éxito
en su campaña, arbitraba la divina protección de María. Una ilustrada
poetisa castellana glosó esta visita del Emperador y subsiguiente
victoria africana, según expresa la estrofa siguiente (2):
«Que nunca el César arribó á Barcino
sin que con viva devoción corriera
á contemplar el busto peregrino
de la que amparo de su pueblo era:
y hora que del indómito Haradino
corre ufano á humillar la audacia fiera,
¿cómo no fervoroso pediría
la protección sagrada de María?»
En 1536, procedente de Genova, el Emperador estuvo de paso en
Barcelona, y al partir á Castilla subió al monasterio de Montserrat,
durante el diciembre, «á dar gracias á su protectora de averie li-
brado de los peligros del mar» como escribe el antedicho historiador
Serra y Postius.
Regresó de Italia á Barcelona en 1538 (20 de julio) y saliendo á
los pocos días para Castilla, tampoco olvidó, Carlos I, su afectuosa vi-
sita al Santuario catalán.
El 21 de noviembre de 1542, el Emperador asistió á la toma de há-
bito en Montserrat, de su protegido el napolitano Benito de Tocco, de
sangre ilustre, pues por parte de madre era nieto del último Empera-
dor de Constantinopla y sucesor de Jorge Castrioto rey de Albania.
Dos noticias importantes referentes á las permanencias del Empe-
rador en Montserrat vemos CDnsignadas en una relación de Bernabé
Espeso (3), las que citaremos sin comentar, por no haberlas compro-
bado. Son ellas, que «allí recibió á la embajada que en nombre de los
electores de la Alemania le ofrecía la Corona de Carlo-.Magno; en él
el propio Monarca recibía la noticia del descubrimiento de Nueva Es •
paña por Hernán Cortés.»
Compañeros inseparables del gran Monarca fueron un Santo Cruci-
(1) Loa dietarios de la Generalidad de Cataluña, por José Coroleu. (Barcelona, 1889), pág. 264.
(2) Maria en Montserrat. Poe'i a por Doña Antonia Diaz de Lamarque entre los drcades
de fíoma Eufrosina Elísea. Publicado por la Academia bibliográtíca Mariana de Lleyda en el
Certamen poético celebrado, etc., en IHiil. (Lleyda, 18G4), pág. 52.
(3) Diario de Barcelona del 1 de octubre de 1860, pág. 9092.
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 271
fijo y la bendita vela de Montserrat que no olvidaba llevar consigo en
sus frecuentes viajes, para tenerlos á mano si llegaba su hora postrera.
Cuando, en Yuste^ sintió sobrevenirle la muerte, dijo á los que le
rodeaban:
— Ya es tiempo, dad acá aquella vela y aquel Crucifijo.
Y añade Martínez de la Puente en su historia de Carlos I, que «te-
niendo en la una mano la vela de la Santísima Virgen de Monserrate y
en la otra el Santo Cruciñxo, tuvo un poco fixo los ojos en él y luego
dio una voz tan grande, que se pudo oir en los otros aposentos, di-
ziendo:— Ay Jesús!»
Fueron estas pus postreras palabras (21 de septiembre de 1558).
La edificante y tranquila muerte del primer Rey de España, es otro
síntoma de cómo la bondadosa Nostin Dona catalana, se acordó de su
costante servidor en el momento supremo.
El Crucifijo y la vela de Montserrat que Carlos I tuvo en sus manos
al expirar, fueron conservados por su hijo Felipe el Grande, como la
más estimada herencia paterna. Ellos debieron, asimismo acompañarle
en su tránsito á la presencia de Dios, como diremos luego.
liCS visites de Felip I <lo diraii!) (II en Castella)
ú. Montserrat (1)
La tradicional devoció deis reys d' Aragó á Montserrat, lluny de
disminuir, aumenta, durant los regnats deis dos primers sobirans de la
casa d' Austria. Lo flll primogenit del Emperador, quan sois era Prin-
cep, per dugues vegades diferents havia pujat al famós Santuari. Fou
la primera, ab sa Mare, á la edat de sis anys, en 1533, segons relata
Serra y Postius, sense donarne cap comentar! ni incident.
En r any 1548, venía de Valladolid lo princep Felip y anava á Bar-
celona, á embarcarse per Italia: en aytal viatje, deturá á Montserrat,
hont hi entrava lo 10 d' octubre dcsprés de diñar, essent rebut proces-
sonalment, per 1' Abat y monjes, á la porta del Santuari. Lo día
vinent hi combregá, visita les ermites y dormiría també en lo mones-
tir, posantse en camí lo 12 ó tal vegada lo 13 d' octubre, en qual jor-
nada consta en los Dietaris, que arrivá al enfosquir á Barcelona, per la
posta y ab gran precipitació.
Llavors ja havíen ocorregut en lo monestir, fets de trascendencia,
que motivaren la intervenció del Princep. Com d' ells no 'n tracten los
historiadors de Montserrat, nos crehem obligats á donarne alguns an-
tecedents^ per major inteligencia del llegidor encara que 'ns apartem
Tina mica del obgecte primordial d' esta relació.
(1) Deu teñirse en compte que la cronología catalana, en los rej^s de uom Felip, es dife-
rent de la castellana, puix que aquí no regná lo brabantí Felip «1' Hei-mós>, quí d* altre part
fou sois rey consort y no deuría comptarse per los castellana. També es diferent la cro-
nología, en los de nom Ferrán y Anfós.
272 F. CARRERAS Y CANDI
Referiut los fets del Rey Catolich, tenim dlt que, fmres castellans
entraren á Montserrat^ com á consecuencia de la sua unió ab Sant Be-
net de Valladolid, decretada en 1492, realisada en 1493 y lleugera-
ment calificada de santa y gloriosa per alg'uns autors.
Al poch temps, comen(;a á desenrotllarse en lo inonestir,un dualisme
entre frares catalans y castellans, á despit del que, lluny deminvar la
importancia del Santuari de María, ana crexent, colocantse en la pri-
mera fila deis d' Espanya y estenentse sa devoció á regions ultra-
marines (1). Exemple manifest de com les passions humanes son la
boyra baxa que sol arrossegarse per los repeus del Montserrat, men-
tres intactes, en regions mes serenes, los enesprats cimals, s'enlayren
inmaculats vers lo cel,
L' antagonismo de races, perturba la tranquilitat del claustre, pu-
jante r alé de la discordia, fins á les soletats de les ermites. Pesada
sería la relacio deis disentiments entre catalans y castellans, bastant
que diguem fou sa existencia anterior á 1525 Vint anys després, ó
siga en 1545^ lo princep Felip intervé en aquelles questions internes.
La disposició que dona desde Valladolid, era en favor deis monjos ca-
talans. Aparexentli «cosa grave, aver de sacar y hecliar los hijos na-
turales de la tierra de sus propias naturalezas y Casa» «encargamos y
mandamos, que, para quitar todo escándalo, hagays bolver todos los
monges y Religiosos que de aquellos Reynos estavan en la dicha casa
y sacar de allí los extrangeros (2) » Axis ho encarregava al General
de la orde benedictina, protegint ais expulsats monjos catalans (3).
(1) «Nell Archivio della Chiesa di Napoli rilevasi da documenti, che nel periodo di
anni dodici dal 1580 al 1592 furono erette in suo onore treuta cappelle in cirea per rordiuario
entro le Cliiese parrocchiali: le furouo consacrati altari, e su di questi fu inualzata uua Im-
magiue della Vcrgiue, perché f osse esposta alia veuerazione del popoli » «Le cittá ed i paesi
del uostro regno, che addimostrarouo un culto speciale alia ^Madonna de Mouserrato, furono
Pozzuoli in provincia di Napoli: S. Ágata dei Goti, Formicola e Palma in Terra di Lavoro;
Avellino, Montefusco, ilirabella, Moutefredane, Gesualdo, Vallata, Castelbaronia, Garifa é
Trevico in provincia del Principato ulteriore; Eboli e Tramonti nel Principato citericre; Sa-
porana in Basilicata; S. Giovauningaldo in Molise; Celenzia e Valfortore in Capitanata; Lee-
ce e Celenza in Apruzzo citeriore ed altri. In taluni di questi luoghi gli ahitanti serbano
tuttoi'a ferveute la devozione alia Vergine di 'Monscvra.to*. (Cenni storici della taumaturga
effigie di Santa Alaria di Monserrato, etc , per Raimundo Gíovine Sac. Nap (Napoli 1875)
plana 36).
(2) La musa latina en Montserrat. Antología de poetas latinos de los siglos xvi y xvii que
da á luz por vez primera con un estudio bibliográfico Don Jaime Collell, canónigo de la cate-
dral de Vich (Barcelona 1893), plana XLIX.
(3) Sense precisar 1' any en que esdevingué, en Joseph Coroleu, en los Dietarios de la
Generalidad de Cataluña (plana 332) dona compte d' apartament de frares catalans y de la Co-
rona d' Aragó, del monestir de Montserrat: «En tiempo del emperador Carlos V, un abad,
que ó. pesar de no ser catalán había sido contra fuero nombrado, tuvo la maña de ir alejajido
del monasterio á los hijos del Principado y aun á los naturales de las demás i-egiones de la
Corona de Aragón, sustituyéndoles por monjes castellanos. Esta innovación fué muy perju-
dicial al santuario porque disminuyeron mucho las visitas y pei-egrinaciones, y con ellas los
legados y limosnas. Y aun no fué esto todo, sino que las rentas del monasterio se empleaban
en sostener otros edificios de la orden fuera de Cataluña, y súpose con indignación que los
monjes repelían del confesionario con malos modos á los pobres rústicos que les hablaban
catalán por no conocer otra lengua, cual si allí no estuviesen en su casa. Acudió la generali-
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 273
Al temps en que prosseguía perturbada la pau del gran monestir
henedictí de Catalunya, á les derreríes del jauer de 1564, Felip I de-
termina passar la testa de la Candelera en son devot Montserrat, en
ocasió de dirigirse á Barcelona. Lo Rey assistí á la processó, axis
com lo Princep de Parma, y i^rincipals personatyes de sa cort, y altres
de Barcelona, d' hont hi comparegué molta gent notable, no repa-
rant en lo poch agrados que sol esser pujar á Montserrat al mitx del
hivern, com es en lo raes de febrer.
Per presenciar la solemnísima processó d' aquell any, s' hi aple-
garen allí tots los vehins de les poblacions del entorn, en tant, que no 's
podía transitar. Al arrivar, lo Rey, al enfront d' una escala que con-
duhía á les liabitíicions de la hostatgería, s^ apiloná, á dalt y á sota,
tant poblé per veure la processó, que, pocb resistent la barana, per
contenir la empenta de la gent, se 'n ana dalt á baix cayguent ab
ella molts deis qui s' hi apoyaven. L' avalot fou í^ran: tothom s' assustá
deis crits que feren al venir los uns daniunt deis altres.
— a Bendita sea la Madre de Dios» exclama senyantse lo rey Felip.
Y hont hi tenía d' haver grans desgracies, tothotn ne sortí sense
novitat, prosseguint avant la processó, ab major alegría, donchs lo
Sobirá tingué oportunitat de presenciar un favor de la Verge, en son
benvolgut Santuari.
Argaiz, que es 1' autor á qui devém lo conexement d' aquest episodi,
refereix, com, lo mateix día, cert hom qui venía en un cavall sart, arri-
vat á la plassa de la font del Miracle, los demés cavalls de la escolta
reyal se li abrahonaren en gran manera, feut que, escapántseli lo ca-
vall, se Heneas ab lo cavaller dintre lo barranch de Santa María (al
present tapat y convertit en estació del camí de ferré) sense que re-
bessin lo menor dany (I).
Lo dijous 3 de febrer de 1564, seguí, lo Monarca y sa comitiva, les
santes ermites, segons se solía fer, coaversant ab los ermitans.
Consta, en 1' arxíu municipal de Barcelona, lo que 's continua, de
la present añada del Rey d' Espanya á Montserrat,
«E venint lo dit Señor de la vila de Mon^o dret camí ñns á Igualada
prengue lo camí per nostra Sora. de montserrat. E per co a III del mes
de febrer dit any sabent los dits honorables Consellers que dit Señor
era en dit monastir de nra. Sora. de Montserrat inseguint la loable e
antiga costuraa desta Ciutat Elegiren dos notables e insignes personas
per embaixadors 90 es m" Jonot Qalba militar y mosscn Joan luis
dad al Emperador expouiéudolc estos al)uso.<, y el iiríucipe primogénito— más tarde Feli-
pe II— á la sazón lugarcenieute de su padre en estos reinos, puso coto á estos escándalos, en-
viando al general de la orden de San Benito una severa reprimenda en la cual le decía entre
otras cosas: «y por las contradicciones que suele aver en Cortes, las cuales tenemos por
cierto que no se podrían escusar y es de temer que nos darían á nosotros trabajo y á vosotros
algún deslustre y escándalos llegando la cosa tan adelante...»
(1) La Perla de Catalunya, historia de i^u^slra Señora de MongerrMe (Madrid 1677)
plana 197.
1904 ^*
274 F- CARRERAS Y CANDI
lull ciuteda per fer gracias per part de la ciutat a sa Mag* del treball
per sa Mag* pres en venir a visitar esta Ciutat y per a concertar o sa-
ber lo dia seria seruit venir a valldonzella hont es aeostumat posar
los Reys ans de entrar en la.present Ciutat, los quals embaixadors, per
saber que sa Mag* partía lo dia present de montserrat anaren a la
posta apportant sen lo corren de dita Ciutat ab ells» (1).
Segurament lo 4 de febrer dexá lo monestir lo Rey, puix arrivá á
Barcelona lo día 5. En aquesta permanencia, nouiená bisbe de Vich,
al abat Fr. Benet de Tocco, á qui conservava 1' afecte que já li havía
profesat son pare 1' Emperador.
En lo temps subsegüent, aumentaren los dissenciments entre cata-
lans y castellans. En 1' any 1570, lo convent passá un gran perill, A
causa de les conspiracions deis hugonauts y protestants. En lo mes de
raarQ se descubrí, que, s' aparellava la crema de les Dressanes é Igle-
sies de Barcelona, axis com la del santuari de Montserrat, tenint de
donar la senyal d' aquesta devastado, una partida d' hugonauts, que
devía venir de Franca, disfrasats de pelegrins
Arrivant, al any 1582, foren tantes y de tal magnitut, les discordies
deis frares, que, les autoritats de Barcelona, per solucionarles tramete-
ren continuats memorials y missatgeries al rey Felip. No podem dir, si
la intervenció seglar f eu crexer la discordia, ó si era impotent per reimi-
diarla y res podía obtenir. Una mida de bon govern se prengué, empero,
trametent un bon visitador á Montserrat; mes la mort li priva de portar
á terme la sua difícil tasca y la desavenencia cresqué de día en dia.
Y perqué 's noti que, es un esperit general d' época, mes que local de
JMontserrat, 1' antagonisme de catalans y castellans en algunes de nos-
tres comunitats religioses, observarém, com de consemblant manera y
per la matexa causa, se trovaven perturbades y agitades: la important
comunitat de la Mercé de Barcelona, los frares del convent de Poblet,
los servites d' Empuries y tal vegada alguns altres que ignorem. D'axó
n' esdevenien relacións en general poch amigables, entre catalans
y castellans, que, infiltrantse y trascendint á altres clases socials,
contribuía á sembrar la mala llevor, qual fruyt inevitable, se reculli
cinquanta cinch anys mes tart, ab la enconada revolta dita deis
segador s.
Comptant, los frares catalans, ab la protecció y ampar de les auto-
ritats de Barcelona, aqüestes gestionaven la sua causa ab lo Virrey y
Rey. Naturalment que los castellans prou vigilaven á Montserrat, teme-
rosos de que esclatés á Barcelona la efervescencia y moliiment contrari
que cada día era mes manifest, dientse en la documentació, que molts
teníen en llurs habitacións, pedrenyals carregats. Eramotiu de quexa,
«lo mal tráete que de algún tenips ensa se fá ais peregrins y altres
que visiten á nostra Sra. escorcollantlos si aporten pa y altres coses
(1) Ceremonial de Cota» Antigua» Memorables, 1564 á 1643, foli 2.
VISITES DE NOSTRES REYS Á MONTSERRAT 275
perqué es cert que per raho de clit maltracte se disminueix la devoció
V molts dexan de fer las caritats que acostumen».
Derrerament s' ha publicat, en una de les interessants coleccions
históriques catalanes, la molt valiosa exposició, adre9ada per los frayes
de Montserrat, no castellans, hont s' indicava la manera de remediar
estes grans perturbacions d' aquella santa casa (4 de novembre de
1584) (1). , ^ . ,
A instancies del rey Felip, lo Sant Pare ordoná, á les derreries de
1584 que lo bisbe de Vicli, Fra Benet de Tocco, abat que fou de Mont-
serrat, passés allí com á visitador apostólich, á remediar la perturbacio
interna. Mestrestant. acabava, lo 6 de novembre de 1584. lo temps de
son govern, 1' abat Fra Andreu d' Intriago, quedant la abadía per
provehir y regint la comunitat lo Bisbe com á president.
Semblava que la intervenció de Fra Tocco posaría pau en aquell
santlloch-.quan morí inesperadament lo 31 de janer de 1585 Los
disentiments de catalans y castellans foren majors si 's vol, fins al ex-
trem de que. frares y ermitans catalans, adoptaren la resolució extrema
d' abandonar Montserrat y anarsen tots á Barcelona, recuUintse en lo
convent de Sant Pau del Camp, que era de la matexa orde, si be per-
tanyía á la congregado benedictina tarraconense.
No havém de ponderar si mouría burgit en la capital catalana, la
sortida deis frares de la térra. Tementse mals majors, les autoritats
barcelonines trameteren, al Monestir, á Micer Guardiola, mentres cía-
maven remey á Felip I, qui 's trovava á garago(?a per rahó del casa-
ment de sa ñlla Catarina ab lo Duch de Savoya.
Lo día 16 de mar? de 1585, estava á punt de finar y la nit embolca-
llava ab son fosch mantell les altes singleres montserratines. Entre onze
y dotze hores, una partida de gent armada arrivá á la porta de la ma-
jordomía, apostantse calladament juut á ses parets. Soná fort lo pi-
caport y demanant ab cautela, lo porter, quí era que h tant avan-
zada hora perturbava la quietut de la montanya, li fou respost que, un
traginer solicita va acuUiment.
Se corregué lo forrellat, se separaren les barres y franquejada la
hospitalaria porta, entra lo traginer y derrera tota la partida, que,
sense entrabanch, s' ensenyorí del Monestir. Seguint celda per celda,
no movent soroll, feren alsar ais frares castellans buscanthi entre ells
al prior Fra Forner. Empresa inútil puix no aparegué en lloch o no 1
sapigueren trobar.
Menats á Santa Cecilia, los vint y dos monjos y donats castellans.
hi trovaren aparellades mules per trasportarlos enllá de la serra, ame-
na^antlos granment si s' atrevíen á tornar després á Montserrat. Nmgu
los maltractá, entregántloshi algún diner per lo viatge.
Lo delegat barceloní Micer Guardiola, no s' entera de la requisa
(1) Manual de novell» ardits vulgo dietari dd antieh eoncell barceloni, volúm V. plana 520.
276 F. CARRERAS Y CANDI
de castellans feta dintre lo monestir, fins á 1' endemá en quefou llevat.
Tan quietament se porta á terme.
La Generalitat de Catalunya y la ciutat de Barcelona, sabedo-
res del succeliit, esquivaren responsabilitats, majorment aparellantse,
Felip I, á passar á Catalunya. Afanyarense en trametre lletres y em-
baxades á Qarago^a excusantse de no haverhi ínter vingut per res.
L' endemá conversaren llargament del fet de la nit, Frá Guillem
y Micer Guardiola. Lo segon ab bones ralions, dona á entendre á aquell,
deposás sa actituty puix lo Prior restava encara en lo Monestir, li fes
acatament, arbitrant son perdó y la